Heriberto Jara Unam

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Biog raf ías para niño s

e r ib e r t o Jar a
H o nst
i tuyente de 1
917
•C •

Silv rí n
ia González M a

S ecretaría de e ducación P ública


i n S t i tuto n acional de e StudioS H iStóricoS de laS r evolucioneS de M éxico
Biogr afías
para niños

e r ib erto Jara
H O NST
ITUYENTE DE 19
17
•C •

S i lv r ín
ia González Ma
Biog rafí as para niño s

C omité pa r a l a C onmemor ación

e r t o Jara
C entena r io de l a C onstitución Política

b
del
de los E sta dos U nidos M ex ica nos

E nr ique P eña Nieto


He r i
Presidente de los Estados Unidos Mexicanos I TUYENTE DE 1
O NST 917
José G onzá lez Mor fín R aúl C erva ntes A ndr a de •C •
Presidente de la Cámara de Diputados Presidente de la Cámara de Senadores
del Congreso de la Unión del Congreso de la Unión

Jua n N. Silva M eza


Presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación
y del Consejo de la Judicatura Federal

R epr esen ta n tes


Poder Ej ecu t i vo Feder a l

M iguel Á ngel O sor io C hong E milio C huay ffet C hemor


Secretario de Gobernación Secretario de Educación Pública

P o d e r L e gi s l a t i v o F e d e r a l
A r noldo O choa G onzá lez E nr ique Burgos G a rcí a
Diputado Federal Senador de la República

S i lv ín
Mar
Pode r Ju dic i a l de l a Feder ación

José R a món C ossío D í a z M a nuel E r nesto S a lom a Ver a


ia González
Ministro de la Suprema Corte Magistrado Consejero
de Justicia de la Nación de la Judicatura Federal

Patr ici a G a lea na


Secretaria Técnica

Consejo a se sor

Sonia Alcántara Magos Rolando Cordera Campos Arnaldo Córdova


Héctor Fix-Zamudio Sergio García Ramírez Javier Garciadiego Instituto Nacional de Estudios Históricos
Andrés Garrido del Toral Olga Hernández Espíndola Sergio López Ayllón de las Revoluciones de México
Aurora Loyo Brambila Ricardo Pozas Horcasitas Pedro Salazar Ugarte
Gloria Villegas Moreno México, 2014
Biog rafí as para niño s

C omité pa r a l a C onmemor ación

e r t o Jara
C entena r io de l a C onstitución Política

b
del
de los E sta dos U nidos M ex ica nos

E nr ique P eña Nieto


He r i
Presidente de los Estados Unidos Mexicanos I TUYENTE DE 1
O NST 917
José G onzá lez Mor fín R aúl C erva ntes A ndr a de •C •
Presidente de la Cámara de Diputados Presidente de la Cámara de Senadores
del Congreso de la Unión del Congreso de la Unión

Jua n N. Silva M eza


Presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación
y del Consejo de la Judicatura Federal

R epr esen ta n tes


Poder Ej ecu t i vo Feder a l

M iguel Á ngel O sor io C hong E milio C huay ffet C hemor


Secretario de Gobernación Secretario de Educación Pública

P o d e r L e gi s l a t i v o F e d e r a l
A r noldo O choa G onzá lez E nr ique Burgos G a rcí a
Diputado Federal Senador de la República

S i lv ín
Mar
Pode r Ju dic i a l de l a Feder ación

José R a món C ossío D í a z M a nuel E r nesto S a lom a Ver a


ia González
Ministro de la Suprema Corte Magistrado Consejero
de Justicia de la Nación de la Judicatura Federal

Patr ici a G a lea na


Secretaria Técnica

Consejo a se sor

Sonia Alcántara Magos Rolando Cordera Campos Arnaldo Córdova


Héctor Fix-Zamudio Sergio García Ramírez Javier Garciadiego Instituto Nacional de Estudios Históricos
Andrés Garrido del Toral Olga Hernández Espíndola Sergio López Ayllón de las Revoluciones de México
Aurora Loyo Brambila Ricardo Pozas Horcasitas Pedro Salazar Ugarte
Gloria Villegas Moreno México, 2014
Secretaría de Educación Pública

Secretario de Educación Pública


P r es e n ta c i ó n
Emilio Chuayffet Chemor

Subsecretario de Educación Superior Patricia Galeana


Fernando Serrano Migallón

Instituto Nacional de Estudios


Históricos de las Revoluciones de México

Directora General

C
Patricia Galeana

Consejo Técnico Consultivo


Fernando Castañeda Sabido, Luis Jáuregui, on palabras e imágenes, una biografía
Álvaro Matute, Érika Pani, Ricardo Pozas Horcasitas,
Salvador Rueda Smithers, Adalberto Santana Hernández,
refleja la vida condensada de una persona y
Enrique Semo, Mercedes de Vega Armijo del mundo que la rodeaba. Ofrece descripciones
y Gloria Villegas Moreno.
y datos importantes del protagonista que nos in-
teresa conocer: su lugar de origen, su familia, su
1ª edición: inehrm, 1987 educación, su formación profesional, sus logros,
2ª edición, abril 2014
1ª reimpresión, mayo 2014 los retos que superó, sus inquietudes, sus ideales
ISBN: 978-607-9276-57-7, Biblioteca Constitucional (obra completa) y la manera en la que ayudó a mejorar una situa-
ISBN: 978-607-9276-70-6, Heriberto Jara (de la serie “Biografías para niños”)
Derechos reservados ción, e incluso a transformar un país entero.
© Instituto Nacional de Estudios Históricos
de las Revoluciones de México (inehrm) Una biografía gira alrededor de una persona
Francisco I. Madero núm. 1, San Ángel,
Del. Álvaro Obregón, México, 01000, D. F.
que vivió en el pasado y cuyas acciones y pensa-
w w w. i n e h r m . g o b . m x mientos llegan a nuestro presente bajo la forma
Impreso y hecho en México

• 5 •
Este libro forma parte del acervo de la Biblioteca Jurídica Virtual del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM
www.juridicas.unam.mx https://biblio.juridicas.unam.mx/bjv Libro completo en: https://goo.gl/97fTmQ

Secretaría de Educación Pública

Secretario de Educación Pública


P r es e n ta c i ó n
Emilio Chuayffet Chemor

Subsecretario de Educación Superior Patricia Galeana


Fernando Serrano Migallón

Instituto Nacional de Estudios


Históricos de las Revoluciones de México

Directora General

C
Patricia Galeana

Consejo Técnico Consultivo


Fernando Castañeda Sabido, Luis Jáuregui, on palabras e imágenes, una biografía
Álvaro Matute, Érika Pani, Ricardo Pozas Horcasitas,
Salvador Rueda Smithers, Adalberto Santana Hernández,
refleja la vida condensada de una persona y
Enrique Semo, Mercedes de Vega Armijo del mundo que la rodeaba. Ofrece descripciones
y Gloria Villegas Moreno.
y datos importantes del protagonista que nos in-
teresa conocer: su lugar de origen, su familia, su
1ª edición: inehrm, 1987 educación, su formación profesional, sus logros,
2ª edición, abril 2014
1ª reimpresión, mayo 2014 los retos que superó, sus inquietudes, sus ideales
ISBN: 978-607-9276-57-7, Biblioteca Constitucional (obra completa) y la manera en la que ayudó a mejorar una situa-
ISBN: 978-607-9276-70-6, Heriberto Jara (de la serie “Biografías para niños”)
Derechos reservados ción, e incluso a transformar un país entero.
© Instituto Nacional de Estudios Históricos
de las Revoluciones de México (inehrm) Una biografía gira alrededor de una persona
Francisco I. Madero núm. 1, San Ángel,
Del. Álvaro Obregón, México, 01000, D. F.
que vivió en el pasado y cuyas acciones y pensa-
w w w. i n e h r m . g o b . m x mientos llegan a nuestro presente bajo la forma
Impreso y hecho en México

• 5 •

DR © 2014.
Secretaría de Cultura - Instituto Nacional de Estudios Históricos de las Revoluciones de México
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6 • Presentación Patricia Galeana • 7

de un nombre propio, de una fecha para recor- Constitución. Estas normas las debemos respe-
dar, de un logro o de una conquista social de la tar todos, para vivir en paz, en democracia.
cual nos vemos beneficiados. La serie “Biogra- México y su sistema público educativo depo-
fías para niños” del Instituto Nacional de Estu- sitan sus esperanzas en nuestros niños y nues-
dios Históricos de las Revoluciones de México tras niñas, porque representan el futuro de un
(inehrm) nos muestra a hombres y mujeres, ni- país próspero, de libertades y realizaciones co-
ños y adultos, que dejaron huella en la historia lectivas. Este futuro se construye en el presente
por la importancia de sus actos. Su conocimien- mediante el conocimiento y la asimilación de
to nos enriquece, nos permite acercarnos a los nuestro pasado.
personajes que han construido nuestro país. En esta serie, el público infantil tendrá a
La Secretaría de Educación Pública, a través su alcance las biografías de algunos diputados
del inehrm, desea que los niños y jóvenes co- constituyentes de 1917: Heriberto Jara, Félix F.
nozcan la vida de los personajes que vivieron Palavicini, Luis Manuel Rojas, Pastor Rouaix y
durante la Revolución Mexicana, entre 1910 y Héctor Victoria. Conócelas y atesora nuestro
1917, por una razón esencial: con su talento, pasado.
su compromiso político y su vocación social
ayudaron en la redacción y promulgación de
Heriberto Jara
nuestra Constitución Política, vigente desde el 5
de febrero de 1917 hasta la fecha. En Orizaba, Veracruz, Heriberto Jara (1879-
El ser humano requiere vivir en sociedad. 1968) se desempeñaba como delegado de
Para tener una convivencia armónica, esta- propaganda del periódico Regeneración, cuya
blece una serie de normas que se reúnen en la

Biografías para niños Biografías para niños

DR © 2014.
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6 • Presentación Patricia Galeana • 7

de un nombre propio, de una fecha para recor- Constitución. Estas normas las debemos respe-
dar, de un logro o de una conquista social de la tar todos, para vivir en paz, en democracia.
cual nos vemos beneficiados. La serie “Biogra- México y su sistema público educativo depo-
fías para niños” del Instituto Nacional de Estu- sitan sus esperanzas en nuestros niños y nues-
dios Históricos de las Revoluciones de México tras niñas, porque representan el futuro de un
(inehrm) nos muestra a hombres y mujeres, ni- país próspero, de libertades y realizaciones co-
ños y adultos, que dejaron huella en la historia lectivas. Este futuro se construye en el presente
por la importancia de sus actos. Su conocimien- mediante el conocimiento y la asimilación de
to nos enriquece, nos permite acercarnos a los nuestro pasado.
personajes que han construido nuestro país. En esta serie, el público infantil tendrá a
La Secretaría de Educación Pública, a través su alcance las biografías de algunos diputados
del inehrm, desea que los niños y jóvenes co- constituyentes de 1917: Heriberto Jara, Félix F.
nozcan la vida de los personajes que vivieron Palavicini, Luis Manuel Rojas, Pastor Rouaix y
durante la Revolución Mexicana, entre 1910 y Héctor Victoria. Conócelas y atesora nuestro
1917, por una razón esencial: con su talento, pasado.
su compromiso político y su vocación social
ayudaron en la redacción y promulgación de
Heriberto Jara
nuestra Constitución Política, vigente desde el 5
de febrero de 1917 hasta la fecha. En Orizaba, Veracruz, Heriberto Jara (1879-
El ser humano requiere vivir en sociedad. 1968) se desempeñaba como delegado de
Para tener una convivencia armónica, esta- propaganda del periódico Regeneración, cuya
blece una serie de normas que se reúnen en la

Biografías para niños Biografías para niños

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8 • Presentación

lectura inspiró a los obreros de la fábrica textil Biogr afías


para niños
de Río Blanco a luchar por sus derechos socia-
les y laborales. Se unió al maderismo y formó
parte de la XXVI Legislatura. Se exilió durante
el gobierno de Victoriano Huerta y de vuelta en
México se unió al constitucionalismo. Participó
como diputado al Congreso Constituyente de
Querétaro, fue gobernador de Veracruz y man-
tuvo ideales revolucionarios toda su vida.

Orizaba, Veracruz.

Orizaba, la ciud ad
de las cascad as
Orizaba es una población de Veracruz, uno de los
estados más ricos de la República Mexicana. La

• 9 •
Biografías para niños

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8 • Presentación

lectura inspiró a los obreros de la fábrica textil Biogr afías


para niños
de Río Blanco a luchar por sus derechos socia-
les y laborales. Se unió al maderismo y formó
parte de la XXVI Legislatura. Se exilió durante
el gobierno de Victoriano Huerta y de vuelta en
México se unió al constitucionalismo. Participó
como diputado al Congreso Constituyente de
Querétaro, fue gobernador de Veracruz y man-
tuvo ideales revolucionarios toda su vida.

Orizaba, Veracruz.

Orizaba, la ciud ad
de las cascad as
Orizaba es una población de Veracruz, uno de los
estados más ricos de la República Mexicana. La

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10 • Heriberto Jara Silvia González Marín • 11

naturaleza fue pródiga al dotarlo de numerosos A los lados de las faldas del volcán se enfilaban
y caudalosos ríos que vuelven las tierras propi- los dos caminos que conducían a la Altiplani-
cias para la agricultura; sus pastos proporcionan cie: uno por la ciudad de Jalapa y el otro por la
alimento al ganado: hay vacas, borregos, cabras, de Orizaba. En nuestro recorrido, escogeremos
caballos y burros; en la costa el clima es tropical este hermoso y próspero lugar en que el 10 de
y en algunos lugares, tierra adentro, es templado. julio de 1879 nació Heriberto Jara Corona.
Cuenta con el puerto marítimo más importan- Pasada la pintoresca barranca de Metlac, el
te de México, que es la vía comercial de entrada camino penetra en el espacioso y fértil valle de
y salida de mercancías extranjeras y mexicanas. Orizaba, regado por las cristalinas aguas de los
Tiene ricos yacimientos petroleros y una impor- ríos Blanco y San Lorenzo. El humo y las torres
tante industria textil; abundan los ranchos y en de las chimeneas marcan la presencia de las fa-
tiempos anteriores existieron haciendas agrícolas bricas textiles de Río Blanco y Nogales.
y ganaderas. Sus habitantes son pacíficos y dedi-
cados al trabajo, pero son aguerridos cuando se
trata de defender sus derechos.
A finales del siglo pasado, los viajeros que
llegaban al Puerto para dirigirse a la ciudad de
México, tenían que seguir la ruta trazada des-
de la época colonial. Adentrándose en tierra, la
mirada se topa con el gran volcán Citlaltépetl
—llamado también Pico de Orizaba— con su
cumbre cubierta de nieve y sus altas fumarolas. Fábrica de textiles Río Blanco.

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naturaleza fue pródiga al dotarlo de numerosos A los lados de las faldas del volcán se enfilaban
y caudalosos ríos que vuelven las tierras propi- los dos caminos que conducían a la Altiplani-
cias para la agricultura; sus pastos proporcionan cie: uno por la ciudad de Jalapa y el otro por la
alimento al ganado: hay vacas, borregos, cabras, de Orizaba. En nuestro recorrido, escogeremos
caballos y burros; en la costa el clima es tropical este hermoso y próspero lugar en que el 10 de
y en algunos lugares, tierra adentro, es templado. julio de 1879 nació Heriberto Jara Corona.
Cuenta con el puerto marítimo más importan- Pasada la pintoresca barranca de Metlac, el
te de México, que es la vía comercial de entrada camino penetra en el espacioso y fértil valle de
y salida de mercancías extranjeras y mexicanas. Orizaba, regado por las cristalinas aguas de los
Tiene ricos yacimientos petroleros y una impor- ríos Blanco y San Lorenzo. El humo y las torres
tante industria textil; abundan los ranchos y en de las chimeneas marcan la presencia de las fa-
tiempos anteriores existieron haciendas agrícolas bricas textiles de Río Blanco y Nogales.
y ganaderas. Sus habitantes son pacíficos y dedi-
cados al trabajo, pero son aguerridos cuando se
trata de defender sus derechos.
A finales del siglo pasado, los viajeros que
llegaban al Puerto para dirigirse a la ciudad de
México, tenían que seguir la ruta trazada des-
de la época colonial. Adentrándose en tierra, la
mirada se topa con el gran volcán Citlaltépetl
—llamado también Pico de Orizaba— con su
cumbre cubierta de nieve y sus altas fumarolas. Fábrica de textiles Río Blanco.

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12 • Heriberto Jara Silvia González Marín • 13

Más allá, surgiendo de entre la espesura verde, Emilio Jara Andrade, como su madre Carmen
un enjambre de techos rojos, cúpulas y campana- Corona Corona, eran originarios de Tecama-
rios blancos y rosados, anuncian el poblado. En chalco, Puebla, pero atraídos por las condicio-
las alturas de las montañas que rodean al valle se nes de prosperidad de la región —que brinda-
vislumbran los puentes de hierro que dan paso al ban buenas perspectivas de desarrollo al oficio
Ferrocarril Mexicano, construído allá por el año de contador y valuador de terrenos en que se
de 1873. Orizaba cuenta con molinos para caña ocupaba su padre—, se habían trasladado a vi-
y trigo, tiene ricos cafetales, una variedad de ár- vir a Orizaba.
boles frutales y abundantes y frescos manantiales El pequeño Heriberto pasó los primeros
que brotan por muchos lugares del valle. años de su vida al cuidado de su madre. Su pa-
Una activa vida de trabajo distingue a sus ha- dre Emilio tenía un carácter cálido y enérgico;
bitantes: junto al campesino que labra la tierra constantemente le decía:
está el obrero que labora en las enormes fábricas —Heriberto, tienes que ser un hombre de pro-
textiles. La actividad económica se vio benefi- vecho, trabajador y responsable, —a lo que el chi-
ciada con la presencia del ferrocarril. La bondad quillo le contestaba con un sí de cabeza, sin en-
del valle lo hace un lugar agradable y próspero tender el significado completo de esas palabras,
para sus pobladores. pero que andando el tiempo recordaría siempre.
Heriberto creció como hijo único en un am-
La infancia de Heriberto biente familiar donde el trabajo y la educación
fueron los forjadores de su personalidad. A pe-
Cuando nació Heriberto, su familia tenía poco sar de no tener hermanos con quienes compar-
tiempo de vivir en Orizaba. Tanto su padre tir los juegos, no era un niño mimado, tenía

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12 • Heriberto Jara Silvia González Marín • 13

Más allá, surgiendo de entre la espesura verde, Emilio Jara Andrade, como su madre Carmen
un enjambre de techos rojos, cúpulas y campana- Corona Corona, eran originarios de Tecama-
rios blancos y rosados, anuncian el poblado. En chalco, Puebla, pero atraídos por las condicio-
las alturas de las montañas que rodean al valle se nes de prosperidad de la región —que brinda-
vislumbran los puentes de hierro que dan paso al ban buenas perspectivas de desarrollo al oficio
Ferrocarril Mexicano, construído allá por el año de contador y valuador de terrenos en que se
de 1873. Orizaba cuenta con molinos para caña ocupaba su padre—, se habían trasladado a vi-
y trigo, tiene ricos cafetales, una variedad de ár- vir a Orizaba.
boles frutales y abundantes y frescos manantiales El pequeño Heriberto pasó los primeros
que brotan por muchos lugares del valle. años de su vida al cuidado de su madre. Su pa-
Una activa vida de trabajo distingue a sus ha- dre Emilio tenía un carácter cálido y enérgico;
bitantes: junto al campesino que labra la tierra constantemente le decía:
está el obrero que labora en las enormes fábricas —Heriberto, tienes que ser un hombre de pro-
textiles. La actividad económica se vio benefi- vecho, trabajador y responsable, —a lo que el chi-
ciada con la presencia del ferrocarril. La bondad quillo le contestaba con un sí de cabeza, sin en-
del valle lo hace un lugar agradable y próspero tender el significado completo de esas palabras,
para sus pobladores. pero que andando el tiempo recordaría siempre.
Heriberto creció como hijo único en un am-
La infancia de Heriberto biente familiar donde el trabajo y la educación
fueron los forjadores de su personalidad. A pe-
Cuando nació Heriberto, su familia tenía poco sar de no tener hermanos con quienes compar-
tiempo de vivir en Orizaba. Tanto su padre tir los juegos, no era un niño mimado, tenía

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14 • Heriberto Jara Silvia González Marín • 15

carácter firme, era travieso y juguetón como sus con los niños y les daba amables consejos. Si un
amiguitos del barrio, pero tenía responsabilida- niño tenía aspecto enfermizo, iba a conocer su
des que cumplir en su casa. casa y si su familia era muy pobre, les ayudaba
Cuando el pequeño Heriberto, de grandes comprando de su bolsa las medicinas.
ojos oscuros color canela, espesas cejas y abun-
dante cabello rizado cumplió siete años de edad,
su padre le dijo:
—Vas a ir a estudiar a una linda escuela que
está en Orizaba donde te enseñarán a leer y a
escribir y conocerás a otros niños como tú.
Heriberto vivía en el poblado de Nogales que
se encontraba a 7 kilómetros de Orizaba y dia-
riamente los recorría a pie entre saltos y brincos.
Nog ales, Veracruz.
La escuela fue un descubrimiento agradable
para el niño Jara. El director del plantel y a la
vez maestro era un pedagogo alemán llamado
En el campo
Enrique Laubsher quien le hacía muy entrete-
nidas las horas que pasaba en la escuela, pues con su tío Francisco
le enseñaba el conocimiento directo de las co-
sas: salían al campo a observar las plantas, los Heriberto solía pasar las vacaciones escolares en
animales, la siembra y el cultivo, y realizaban un rancho en las afueras de Tecamachalco, ad-
experimentos. En la hora del recreo, platicaba ministrado por su tío Francisco, hermano de su

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carácter firme, era travieso y juguetón como sus con los niños y les daba amables consejos. Si un
amiguitos del barrio, pero tenía responsabilida- niño tenía aspecto enfermizo, iba a conocer su
des que cumplir en su casa. casa y si su familia era muy pobre, les ayudaba
Cuando el pequeño Heriberto, de grandes comprando de su bolsa las medicinas.
ojos oscuros color canela, espesas cejas y abun-
dante cabello rizado cumplió siete años de edad,
su padre le dijo:
—Vas a ir a estudiar a una linda escuela que
está en Orizaba donde te enseñarán a leer y a
escribir y conocerás a otros niños como tú.
Heriberto vivía en el poblado de Nogales que
se encontraba a 7 kilómetros de Orizaba y dia-
riamente los recorría a pie entre saltos y brincos.
Nog ales, Veracruz.
La escuela fue un descubrimiento agradable
para el niño Jara. El director del plantel y a la
vez maestro era un pedagogo alemán llamado
En el campo
Enrique Laubsher quien le hacía muy entrete-
nidas las horas que pasaba en la escuela, pues con su tío Francisco
le enseñaba el conocimiento directo de las co-
sas: salían al campo a observar las plantas, los Heriberto solía pasar las vacaciones escolares en
animales, la siembra y el cultivo, y realizaban un rancho en las afueras de Tecamachalco, ad-
experimentos. En la hora del recreo, platicaba ministrado por su tío Francisco, hermano de su

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16 • Heriberto Jara Silvia González Marín • 17

padre. El niño se sentía feliz en aquella hacienda hacendados y no las podían recuperar, pero que
en donde abundaba el trabajo. Muy tempranito muy pronto esa situación iba a cambiar, cuando
iba al establo a ayudar a ordeñar las vacas, car- el pueblo le exigiera al presidente Díaz más jus-
gaba cajas pesadas repletas de camotes recogi- ticia y libertad.
dos de las cosechas para llevarlas a los mercados
vecinos; también había que preparar los aperos El joven Heriberto en el Inst i tuto
de viaje, revisar que las ruedas de las carretas es-
tuvieran reparadas y listas para aguantar el peso. Científ ico y Li terario
Su tío se sentía muy contento con Heriberto
quien ya mostraba una clara inteligencia. En 1869 se creó el estado de Hidalgo y ese mismo
Heriberto miraba a su tío y un buen día le año se abrió el Instituto Científico y Literario de
preguntó: —¿porqué los campesinos que traba- Pachuca. Institutos como éste se empezaron a
jan las tierras de la hacienda son tan pobres, tie-
nen sus ropas sucias y rasgadas, sus hijos no van
a la escuela, comen mal y andan sin zapatos?
El tío sorprendido ante tal pregunta le expli-
có que eso era así porque unos cuantos hombres
eran los dueños de casi todas las tierras, eran
gente que no comprendía que a los campesinos
se les debía pagar mejor salario para que pudie-
ran alimentar, vestir y educar a sus hijos. Ade- Instituto Cientí fico y Literario de Pachuca, actualmente sede
más, porque sus tierras se las habían quitado los de la Universidad A utónoma del Estado Hidalgo.

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16 • Heriberto Jara Silvia González Marín • 17

padre. El niño se sentía feliz en aquella hacienda hacendados y no las podían recuperar, pero que
en donde abundaba el trabajo. Muy tempranito muy pronto esa situación iba a cambiar, cuando
iba al establo a ayudar a ordeñar las vacas, car- el pueblo le exigiera al presidente Díaz más jus-
gaba cajas pesadas repletas de camotes recogi- ticia y libertad.
dos de las cosechas para llevarlas a los mercados
vecinos; también había que preparar los aperos El joven Heriberto en el Inst i tuto
de viaje, revisar que las ruedas de las carretas es-
tuvieran reparadas y listas para aguantar el peso. Científ ico y Li terario
Su tío se sentía muy contento con Heriberto
quien ya mostraba una clara inteligencia. En 1869 se creó el estado de Hidalgo y ese mismo
Heriberto miraba a su tío y un buen día le año se abrió el Instituto Científico y Literario de
preguntó: —¿porqué los campesinos que traba- Pachuca. Institutos como éste se empezaron a
jan las tierras de la hacienda son tan pobres, tie-
nen sus ropas sucias y rasgadas, sus hijos no van
a la escuela, comen mal y andan sin zapatos?
El tío sorprendido ante tal pregunta le expli-
có que eso era así porque unos cuantos hombres
eran los dueños de casi todas las tierras, eran
gente que no comprendía que a los campesinos
se les debía pagar mejor salario para que pudie-
ran alimentar, vestir y educar a sus hijos. Ade- Instituto Cientí fico y Literario de Pachuca, actualmente sede
más, porque sus tierras se las habían quitado los de la Universidad A utónoma del Estado Hidalgo.

Biografías para niños Biografías para niños

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18 • Heriberto Jara Silvia González Marín • 19

fundar poco después de alcanzada la indepen- ra y con tantos y diversos profesores, le permitió
dencia y respondieron al espíritu liberal que entender mejor las causas de la miseria, el atraso
tomaba cuerpo en aquella época. La educación y la ignorancia en que estaba sumido el pueblo.
que en ellos se impartía brindaba a los jóvenes A pesar de la rigidez del reglamento interior
los conocimientos necesarios para ejercer algu- del Instituto, los estudiantes realizaban reunio-
na profesión útil. nes en las que recitaban poemas, leían y discu-
En 1892, siendo Heriberto un adolescente tían a los clásicos de la Revolución Francesa y
con grandes deseos de abrirse paso en la vida, estudiaban las obras de los hombres de la Re-
se inscribe en el Instituto Científico y Literario forma como don Ponciano Arriaga, a quien
a cursar la carrera de tenedor de libros —que Heriberto admiraba mucho.
ahora se llama contador. También los estudiantes realizaban mani-
Su familia se había trasladado a vivir a Pachuca festaciones callejeras en protesta por la falta de
porque el auge de la minería y la rectificación de libertad y por la permanencia en el poder del
linderos entre los estados de Hidalgo y Veracruz dictador Porfirio Díaz, quien por aquellos días
le permitieron a su padre, Emilio, encontrar se reelegía por cuarta vez. En una ocasión en
mejores oportunidades para que Heriberto y otros estudiantes protestaban
ejercer su oficio de valuador por la detención de algunos compañeros, la po-
de terrenos. licía disolvió por la fuerza la reunión estudiantil.
En el Instituto es- Heriberto fue recluido y detenido por algunos
tudió latín, filosofía y días en la prisión del estado.
economía política. El No sería esa la primera ni la última vez que He-
contacto con la cultu- riberto iría a la cárcel por defender la libertad

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fundar poco después de alcanzada la indepen- ra y con tantos y diversos profesores, le permitió
dencia y respondieron al espíritu liberal que entender mejor las causas de la miseria, el atraso
tomaba cuerpo en aquella época. La educación y la ignorancia en que estaba sumido el pueblo.
que en ellos se impartía brindaba a los jóvenes A pesar de la rigidez del reglamento interior
los conocimientos necesarios para ejercer algu- del Instituto, los estudiantes realizaban reunio-
na profesión útil. nes en las que recitaban poemas, leían y discu-
En 1892, siendo Heriberto un adolescente tían a los clásicos de la Revolución Francesa y
con grandes deseos de abrirse paso en la vida, estudiaban las obras de los hombres de la Re-
se inscribe en el Instituto Científico y Literario forma como don Ponciano Arriaga, a quien
a cursar la carrera de tenedor de libros —que Heriberto admiraba mucho.
ahora se llama contador. También los estudiantes realizaban mani-
Su familia se había trasladado a vivir a Pachuca festaciones callejeras en protesta por la falta de
porque el auge de la minería y la rectificación de libertad y por la permanencia en el poder del
linderos entre los estados de Hidalgo y Veracruz dictador Porfirio Díaz, quien por aquellos días
le permitieron a su padre, Emilio, encontrar se reelegía por cuarta vez. En una ocasión en
mejores oportunidades para que Heriberto y otros estudiantes protestaban
ejercer su oficio de valuador por la detención de algunos compañeros, la po-
de terrenos. licía disolvió por la fuerza la reunión estudiantil.
En el Instituto es- Heriberto fue recluido y detenido por algunos
tudió latín, filosofía y días en la prisión del estado.
economía política. El No sería esa la primera ni la última vez que He-
contacto con la cultu- riberto iría a la cárcel por defender la libertad

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20 • Heriberto Jara Silvia González Marín • 21

y la justicia. Ese tipo de actividad lo acercó a joven inquieto como él y que más tarde sería su
compañeros que también llegarían a ser distin- compadre y compañero de armas.
guidos revolucionarios, como Efrén Rebolledo En esas fábricas textiles, Heriberto vio el con-
y Alfonso Cravioto. Como continuó la dictadu- traste entre la riqueza económica de las empresas
ra, también lo hicieron las protestas; en 1901, el y de sus dueños con la pobreza y las lamenta-
periódico Regeneración publicó un texto de Cra- bles condiciones de vida de los obreros que rea-
vioto y Mariano Lechuga porque seguían los lizaban jornadas de 14 a 16 horas encerrados en
atropellos contra la población: enormes galerones. El salario era miserable y la
labor la realizaban al igual hombres, mujeres y
—¡Venimos a lanzar nuestra protesta contra el en-
carcelamiento de unos estudiantes dignos, en nom- niños. El estruendo de las máquinas, la pelusa
bre de la civilización ultrajada, en nombre de la jus- que iban despidiendo los telares, lo insalubre del
ticia, en nombre de la libertad pisoteada, en nombre lugar y el olor nauseabundo que despedían los
de la Patria!
tintes formaban parte de las pésimas condicio-
nes de trabajo. Además
El desper tar polít ico no existía el dere-
cho de huelga
Al terminar sus estudios en el Instituto, Heriberto ni los trabaja-
regresó a Orizaba y entró a trabajar como tenedor dores podían
de libros en la tienda de raya de la fábrica de Santa formar sin-
Rosita. Más tarde también llevó la contabilidad dicatos para
de la fábrica de Río Blanco. Fue en ese lugar don- defender sus
de conoció a Camerino Z. Mendoza, entonces un derechos. Salida de los obreros de la fábrica de San ta Rosa.

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y la justicia. Ese tipo de actividad lo acercó a joven inquieto como él y que más tarde sería su
compañeros que también llegarían a ser distin- compadre y compañero de armas.
guidos revolucionarios, como Efrén Rebolledo En esas fábricas textiles, Heriberto vio el con-
y Alfonso Cravioto. Como continuó la dictadu- traste entre la riqueza económica de las empresas
ra, también lo hicieron las protestas; en 1901, el y de sus dueños con la pobreza y las lamenta-
periódico Regeneración publicó un texto de Cra- bles condiciones de vida de los obreros que rea-
vioto y Mariano Lechuga porque seguían los lizaban jornadas de 14 a 16 horas encerrados en
atropellos contra la población: enormes galerones. El salario era miserable y la
labor la realizaban al igual hombres, mujeres y
—¡Venimos a lanzar nuestra protesta contra el en-
carcelamiento de unos estudiantes dignos, en nom- niños. El estruendo de las máquinas, la pelusa
bre de la civilización ultrajada, en nombre de la jus- que iban despidiendo los telares, lo insalubre del
ticia, en nombre de la libertad pisoteada, en nombre lugar y el olor nauseabundo que despedían los
de la Patria!
tintes formaban parte de las pésimas condicio-
nes de trabajo. Además
El desper tar polít ico no existía el dere-
cho de huelga
Al terminar sus estudios en el Instituto, Heriberto ni los trabaja-
regresó a Orizaba y entró a trabajar como tenedor dores podían
de libros en la tienda de raya de la fábrica de Santa formar sin-
Rosita. Más tarde también llevó la contabilidad dicatos para
de la fábrica de Río Blanco. Fue en ese lugar don- defender sus
de conoció a Camerino Z. Mendoza, entonces un derechos. Salida de los obreros de la fábrica de San ta Rosa.

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22 • Heriberto Jara Silvia González Marín • 23

En la soledad de su cuarto, Heriberto me- Congreso Liberal de 1901 realizado en la ciu-


ditaba acerca de aquellas condiciones sociales: dad de San Luis Potosí.
“Las mayores crueldades y vejaciones son para Ante el gran interés que mostraban los obreros
la gente humilde. El pobre no tiene derecho ni de Orizaba por conocer lo que decía el periódi-
siquiera a quejarse, siempre necesitado vivien- co, Heriberto fundó varios clubes en las fábricas
do con miseria y hambre, mientras el rico viste textiles donde trabajaba. Jara era un hombre so-
bien, come bien, vive bien”. Sin embargo, pen- ñador y preocupado por mejorar las condiciones
saba que esa situación no podía durar mucho de vida de los obreros, por lo que se unió con los
tiempo. hermanos Flores Magón, Juan Sarabia, Santiago
Por el año de 1900 llegó a las fábricas de la de la Hoz y otros en la organización del Partido
región de Orizaba un periódico llamado Rege- Liberal Mexicano.
neración, que estaba en La directiva del Partido lo designó Delegado
contra de la política de de Propaganda en Orizaba, por lo que tenía el
Porfirio Díaz. Este pe- encargo de difundir entre los trabajadores las ra-
riódico lo dirigía Ri- zones y los propósitos de la lucha de los liberales.
cardo Flores Magón, Sin perder tiempo, reúne a sus compañeros
un hombre que tenía de club y juntos acuerdan que el periódico se
ideales nobles en favor reparta por todas las calles, casas, talleres y fá-
de los obreros y de los bricas de Orizaba. Así, al amparo de la espesa
campesinos y que jun- neblina que cubría el poblado, por las noches
to con otros luchadores distribuían el periódico deslizándolo por deba-
sociales participó en el jo de las puertas. También lo pegaban en las pa-

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En la soledad de su cuarto, Heriberto me- Congreso Liberal de 1901 realizado en la ciu-


ditaba acerca de aquellas condiciones sociales: dad de San Luis Potosí.
“Las mayores crueldades y vejaciones son para Ante el gran interés que mostraban los obreros
la gente humilde. El pobre no tiene derecho ni de Orizaba por conocer lo que decía el periódi-
siquiera a quejarse, siempre necesitado vivien- co, Heriberto fundó varios clubes en las fábricas
do con miseria y hambre, mientras el rico viste textiles donde trabajaba. Jara era un hombre so-
bien, come bien, vive bien”. Sin embargo, pen- ñador y preocupado por mejorar las condiciones
saba que esa situación no podía durar mucho de vida de los obreros, por lo que se unió con los
tiempo. hermanos Flores Magón, Juan Sarabia, Santiago
Por el año de 1900 llegó a las fábricas de la de la Hoz y otros en la organización del Partido
región de Orizaba un periódico llamado Rege- Liberal Mexicano.
neración, que estaba en La directiva del Partido lo designó Delegado
contra de la política de de Propaganda en Orizaba, por lo que tenía el
Porfirio Díaz. Este pe- encargo de difundir entre los trabajadores las ra-
riódico lo dirigía Ri- zones y los propósitos de la lucha de los liberales.
cardo Flores Magón, Sin perder tiempo, reúne a sus compañeros
un hombre que tenía de club y juntos acuerdan que el periódico se
ideales nobles en favor reparta por todas las calles, casas, talleres y fá-
de los obreros y de los bricas de Orizaba. Así, al amparo de la espesa
campesinos y que jun- neblina que cubría el poblado, por las noches
to con otros luchadores distribuían el periódico deslizándolo por deba-
sociales participó en el jo de las puertas. También lo pegaban en las pa-

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24 • Heriberto Jara Silvia González Marín • 25

redes de las esquinas y de las fábricas. Contaba a los trabajadores que se organizaran. Además,
Heriberto que para no ser vistos por la policía con el pretexto de que el precio del algodón ha-
hacían todos sus movimientos en el más absolu- bía bajado en el mercado, redujeron el salario de
to silencio y mientras uno de ellos entretenía al los obreros y aumentaron la jornada de trabajo.
sereno, otro lo llevaba escondido bajo una capa Estos se molestaron por las medidas y respon-
negra y el tercero más, cargaba la brocha y el dieron parando las actividades en las fábricas, lo
engrudo, de manera que rápidamente lo fijaban que de hecho era una huelga.
en las paredes.

La gran huelga de Río Blanco


En el año de 1906 los obreros de las fábricas
textiles de la región de Orizaba, en donde tra-
bajaba Heriberto Jara, decidieron fundar una
organización que llamaron “El Gran Círculo de
Obreros Libres”. Para difundir las actividades
del Círculo se creó el periódico Revolución So-
cial. El contenido de los artículos del periódico
eran muy revolucionarios y los dueños de las
fábricas se alarmaron y respondieron expidien-
do un reglamento muy severo que les prohibía
Obreros f ren te a fábrica de Río Blanco.

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redes de las esquinas y de las fábricas. Contaba a los trabajadores que se organizaran. Además,
Heriberto que para no ser vistos por la policía con el pretexto de que el precio del algodón ha-
hacían todos sus movimientos en el más absolu- bía bajado en el mercado, redujeron el salario de
to silencio y mientras uno de ellos entretenía al los obreros y aumentaron la jornada de trabajo.
sereno, otro lo llevaba escondido bajo una capa Estos se molestaron por las medidas y respon-
negra y el tercero más, cargaba la brocha y el dieron parando las actividades en las fábricas, lo
engrudo, de manera que rápidamente lo fijaban que de hecho era una huelga.
en las paredes.

La gran huelga de Río Blanco


En el año de 1906 los obreros de las fábricas
textiles de la región de Orizaba, en donde tra-
bajaba Heriberto Jara, decidieron fundar una
organización que llamaron “El Gran Círculo de
Obreros Libres”. Para difundir las actividades
del Círculo se creó el periódico Revolución So-
cial. El contenido de los artículos del periódico
eran muy revolucionarios y los dueños de las
fábricas se alarmaron y respondieron expidien-
do un reglamento muy severo que les prohibía
Obreros f ren te a fábrica de Río Blanco.

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26 • Heriberto Jara Silvia González Marín • 27

Ante tal situación, los empresarios textiles Al amanecer del lunes 7 de enero de 1907, los
de las regiones de Orizaba, Puebla y Tlaxcala se silbatos de las fábricas de Río Blanco y Nogales
unieron, y en represalia cerraron todas 1as fá- citaban al trabajo, pero los obreros, que habían
bricas, de manera que de pronto cerca de 22 mil tomado la decisión de no asistir, se agruparon a la
obreros se encontraron sin trabajo y sin salario. entrada de la fábrica. Alguien de entre la multitud
Ante la gravedad del asunto, El Gran Círcu- lanzó una piedra contra el cristal de una ventana
lo de Obreros Libres solicitó la intervención que saltó en pedazos. Un empleado de la tienda
del presidente Díaz. Después de escuchar a las disparó contra la multitud matando a un trabaja-
partes en conflicto, el presidente emitió un do- dor e hiriendo a otros, lo que indignó a los traba-
cumento que leyó ante los representantes de jadores e hizo que incendiaran la tienda.
obreros y empresarios. El viejo dictador, in- Al enterarse de los hechos, el presidente
sensible y ciego ante las justas demandas de los Díaz, alarmado por la rebeldía proletaria, man-
trabajadores, les ordenó que regresaran a sus dó reprimir con lujo de violencia a los obreros.
labores y dio todo su apoyo a los dueños de las Ordenó a los soldados que abrieran fuego en
fábricas. contra de los manifestantes y muchos cayeron
Los obreros, indignados por esta resolución, muertos o heridos.
decidieron realizar una asamblea para discutir Heriberto logró escapar refugiándose en la es-
si volvían o no al trabajo. Cuando se iniciaba la pesa vegetación de los montes que rodean la zona.
reunión, uno de los asistentes, vestido de overol Pero después de permanecer escondido varios días
y con un pañuelo rojo anudado al cuello, ex- en las montañas, fue descubierto, tomado prisio-
clamó: “¡Que no se acepten las condiciones del nero y encerrado en la cárcel de Orizaba junto a
dictador, primero mártires que esclavos!”. cientos de obreros.

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Ante tal situación, los empresarios textiles Al amanecer del lunes 7 de enero de 1907, los
de las regiones de Orizaba, Puebla y Tlaxcala se silbatos de las fábricas de Río Blanco y Nogales
unieron, y en represalia cerraron todas 1as fá- citaban al trabajo, pero los obreros, que habían
bricas, de manera que de pronto cerca de 22 mil tomado la decisión de no asistir, se agruparon a la
obreros se encontraron sin trabajo y sin salario. entrada de la fábrica. Alguien de entre la multitud
Ante la gravedad del asunto, El Gran Círcu- lanzó una piedra contra el cristal de una ventana
lo de Obreros Libres solicitó la intervención que saltó en pedazos. Un empleado de la tienda
del presidente Díaz. Después de escuchar a las disparó contra la multitud matando a un trabaja-
partes en conflicto, el presidente emitió un do- dor e hiriendo a otros, lo que indignó a los traba-
cumento que leyó ante los representantes de jadores e hizo que incendiaran la tienda.
obreros y empresarios. El viejo dictador, in- Al enterarse de los hechos, el presidente
sensible y ciego ante las justas demandas de los Díaz, alarmado por la rebeldía proletaria, man-
trabajadores, les ordenó que regresaran a sus dó reprimir con lujo de violencia a los obreros.
labores y dio todo su apoyo a los dueños de las Ordenó a los soldados que abrieran fuego en
fábricas. contra de los manifestantes y muchos cayeron
Los obreros, indignados por esta resolución, muertos o heridos.
decidieron realizar una asamblea para discutir Heriberto logró escapar refugiándose en la es-
si volvían o no al trabajo. Cuando se iniciaba la pesa vegetación de los montes que rodean la zona.
reunión, uno de los asistentes, vestido de overol Pero después de permanecer escondido varios días
y con un pañuelo rojo anudado al cuello, ex- en las montañas, fue descubierto, tomado prisio-
clamó: “¡Que no se acepten las condiciones del nero y encerrado en la cárcel de Orizaba junto a
dictador, primero mártires que esclavos!”. cientos de obreros.

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28 • Heriberto Jara Silvia González Marín • 29

compañía de algunos simpatizantes llegó a la


Se inicia la Revolución ciudad de Orizaba el 20 de mayo de 1910. He-
riberto Jara, junto con algunos de sus viejos
A mediados de febrero de 1908, el presidente
compañeros de lucha y de otros nuevos que
Porfirio Díaz concedió una entrevista al perio-
se incorporaron después, había organizado el
dista norteamericano James Creelman y declaró
Club Antirreeleccionista Ignacio de la Llave
que no tenía intenciones de postularse para un
(en memoria de un héroe de la Reforma) y
nuevo periodo presidencial y que el pueblo mexi-
preparó la recepción a Madero en la zona fabril
cano ya estaba preparado para la democracia.
de Orizaba. Ahí, Heriberto habló para expo-
Estas palabras despertaron la actividad polí-
ner los motivos de la lucha:
tica del país y como consecuencia se formaron
varias organizaciones que postularon candida-
tos para la contienda electoral que iba a realizar-
se en el año de 1910.
Francisco I. Madero, originario de Parras,
Coahuila, era un hombre cargado de grandes
anhelos de libertad y de justicia que organizó el
Partido Antirreeleccionista, el cual en una mag-
na convención lo postuló como su candidato a
la presidencia.
El partido organizó una gira electoral por Bandera de club an tirreeleccionista.
varios estados de la República. Madero, en

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compañía de algunos simpatizantes llegó a la


Se inicia la Revolución ciudad de Orizaba el 20 de mayo de 1910. He-
riberto Jara, junto con algunos de sus viejos
A mediados de febrero de 1908, el presidente
compañeros de lucha y de otros nuevos que
Porfirio Díaz concedió una entrevista al perio-
se incorporaron después, había organizado el
dista norteamericano James Creelman y declaró
Club Antirreeleccionista Ignacio de la Llave
que no tenía intenciones de postularse para un
(en memoria de un héroe de la Reforma) y
nuevo periodo presidencial y que el pueblo mexi-
preparó la recepción a Madero en la zona fabril
cano ya estaba preparado para la democracia.
de Orizaba. Ahí, Heriberto habló para expo-
Estas palabras despertaron la actividad polí-
ner los motivos de la lucha:
tica del país y como consecuencia se formaron
varias organizaciones que postularon candida-
tos para la contienda electoral que iba a realizar-
se en el año de 1910.
Francisco I. Madero, originario de Parras,
Coahuila, era un hombre cargado de grandes
anhelos de libertad y de justicia que organizó el
Partido Antirreeleccionista, el cual en una mag-
na convención lo postuló como su candidato a
la presidencia.
El partido organizó una gira electoral por Bandera de club an tirreeleccionista.
varios estados de la República. Madero, en

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30 • Heriberto Jara Silvia González Marín • 31

—Compañeros, hay que hacer cumplir la Consti- da tabacalera de Valle Nacional en el estado de
tución, que nuestro voto se nos respete. Hay que Oaxaca. En ese lugar se escribieron algunas de
sostener el principio democrático de no reelección
las páginas más negras de la época porfirista,
de los funcionarios públicos para impedir que éstos
se perpetúen en el poder. pues allí eran enviados, en calidad de presos po-
líticos, las personas que se oponían a la dictadu-
En los primeros días de julio se efectuaron ra y eran sometidas a penosos trabajos forzados
las elecciones. Contradiciendo sus palabras, en medio de tratos inhumanos y condiciones
Porfirio Díaz se postuló para reelegirse una vez insalubres.
más y como era de esperarse resultó triunfador Heriberto fue trasladado allá junto con otros
aunque para ello tuvo que acudir a la represión presos políticos, reos del orden común, campe-
y al fraude. sinos de origen indígena que tenían que aban-
Los partidarios de donar sus tierras para no volverlas a recuperar
Madero fueron per- jamás, y desempleados acusados de vagancia.
seguidos por la policía Semanas después de haber llegado a Valle
de la dictadura, Madero Nacional y debido a las condiciones en que vi-
fue hecho prisionero y vía y al duro trabajo que realizaba, Heriberto
trasladado a San Luis enfermó de fiebre amarilla. Todos los que con-
Potosí. traían esa terrible enfermedad eran llevados a
Heriberto Jara fue apre- un lugar llamado “la casa de la muerte” don-
hendido por el jefe polílico de esperaban su fin. En una carreta, junto con
de Orizaba Miguel V. Gómez otros enfermos, era conducido a ese lugar cuan-
y deportado a una hacien- do, en un alto en el camino, Heriberto se desli-

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30 • Heriberto Jara Silvia González Marín • 31

—Compañeros, hay que hacer cumplir la Consti- da tabacalera de Valle Nacional en el estado de
tución, que nuestro voto se nos respete. Hay que Oaxaca. En ese lugar se escribieron algunas de
sostener el principio democrático de no reelección
las páginas más negras de la época porfirista,
de los funcionarios públicos para impedir que éstos
se perpetúen en el poder. pues allí eran enviados, en calidad de presos po-
líticos, las personas que se oponían a la dictadu-
En los primeros días de julio se efectuaron ra y eran sometidas a penosos trabajos forzados
las elecciones. Contradiciendo sus palabras, en medio de tratos inhumanos y condiciones
Porfirio Díaz se postuló para reelegirse una vez insalubres.
más y como era de esperarse resultó triunfador Heriberto fue trasladado allá junto con otros
aunque para ello tuvo que acudir a la represión presos políticos, reos del orden común, campe-
y al fraude. sinos de origen indígena que tenían que aban-
Los partidarios de donar sus tierras para no volverlas a recuperar
Madero fueron per- jamás, y desempleados acusados de vagancia.
seguidos por la policía Semanas después de haber llegado a Valle
de la dictadura, Madero Nacional y debido a las condiciones en que vi-
fue hecho prisionero y vía y al duro trabajo que realizaba, Heriberto
trasladado a San Luis enfermó de fiebre amarilla. Todos los que con-
Potosí. traían esa terrible enfermedad eran llevados a
Heriberto Jara fue apre- un lugar llamado “la casa de la muerte” don-
hendido por el jefe polílico de esperaban su fin. En una carreta, junto con
de Orizaba Miguel V. Gómez otros enfermos, era conducido a ese lugar cuan-
y deportado a una hacien- do, en un alto en el camino, Heriberto se desli-

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32 • Heriberto Jara Silvia González Marín • 33

zó lentamente a un lado, y sin que la escolta lo y organizó su gobierno con el propósito de en-
viera, logró resbalarse hacia unos matorrales en contrar soluciones a los graves problemas del país.
donde permaneció oculto hasta que la carreta Heriberto Jara se dispuso a participar en este
emprendió de nuevo la marcha. patriótico empeño y con el apoyo de los obre-
Ahí pasó varias horas hasta que la fiebre lo ros de las fábricas textiles de Orizaba fue electo
debilitó y perdió el conocimiento. Unos cam- diputado al Congreso de la Unión en la XXVI
pesinos que pasaban por el lugar lo recogie- Legislatura.
ron y lo cuidaron hasta que sanó. Agradecido, En la Cámara de diputados, Heriberto tuvo
Heriberto les prometió que cuando triunfara una destacada participación al enfrentarse a di-
la Revolución y se derrotara al dictador, pon- putados experimentados que habían desarrolla-
dría todo su empeño para mejorar las con-
diciones de vida de todos los campesinos de
México.

En def ensa de l os obreros


El 20 de noviembre de 1910 se inició la insu-
rrección armada contra la dictadura encabezada
por Francisco I. Madero y después de meses de
guerra civil Porfirio Díaz fue derrotado.
En unas nuevas votaciones, Madero fue electo
Venustiano Carranza y diputados de Veracruz.
Presidente de México por la mayoría del pueblo,

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32 • Heriberto Jara Silvia González Marín • 33

zó lentamente a un lado, y sin que la escolta lo y organizó su gobierno con el propósito de en-
viera, logró resbalarse hacia unos matorrales en contrar soluciones a los graves problemas del país.
donde permaneció oculto hasta que la carreta Heriberto Jara se dispuso a participar en este
emprendió de nuevo la marcha. patriótico empeño y con el apoyo de los obre-
Ahí pasó varias horas hasta que la fiebre lo ros de las fábricas textiles de Orizaba fue electo
debilitó y perdió el conocimiento. Unos cam- diputado al Congreso de la Unión en la XXVI
pesinos que pasaban por el lugar lo recogie- Legislatura.
ron y lo cuidaron hasta que sanó. Agradecido, En la Cámara de diputados, Heriberto tuvo
Heriberto les prometió que cuando triunfara una destacada participación al enfrentarse a di-
la Revolución y se derrotara al dictador, pon- putados experimentados que habían desarrolla-
dría todo su empeño para mejorar las con-
diciones de vida de todos los campesinos de
México.

En def ensa de l os obreros


El 20 de noviembre de 1910 se inició la insu-
rrección armada contra la dictadura encabezada
por Francisco I. Madero y después de meses de
guerra civil Porfirio Díaz fue derrotado.
En unas nuevas votaciones, Madero fue electo
Venustiano Carranza y diputados de Veracruz.
Presidente de México por la mayoría del pueblo,

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34 • Heriberto Jara Silvia González Marín • 35

do sus dotes parlamentarios durante el régimen entonces embajador norteamericano en Méxi-


de la dictadura. Sin embargo, con la seguridad y co Henry Lane Wilson. Diez trágicos días vivió
la firme convicción en los ideales de la Revolu- la ciudad de México, cuando en la madrugada
ción, dio una histórica batalla en defensa de los del 9 de febrero un grupo de militares se levan-
derechos de los obreros textiles. tó en armas en contra del gobierno de Madero.
Después de días y horas de debate y contan- Después de nutridos combates entre las fuerzas
do con el apoyo de otros diputados maderistas sublevadas que se atrincheraron en la Ciudadela
lograron derrotar a una fuerte coalición que ha- y las tropas leales al presidente Madero, la trai-
bían integrado los diputados representantes del ción ensombreció al Palacio Nacional, pues un
viejo régimen de Díaz. De esa manera, la Cá- grupo de soldados, siguiendo instrucciones del
mara aprobó una ley por medio de la cual todos general Victoriano Huerta, comandante militar
los trabajadores de la industria textil del país de la plaza, tomaron prisioneros al presidente
tenían derecho a un salario mínimo y a traba- Madero y al vicepresidente Pino Suárez, quie-
jar jornadas máximas de 10 horas, en contraste nes días después, el 22 de ese mes, fueron asesi-
con las jornadas de 14 y hasta 16 horas vigentes nados por sus captores.
hasta entonces. Después del golpe de Estado, Victoriano
Huerta asumió la presidencia de México, lo que
En las f ilas const i tucionalistas no fue aceptado por algunos gobernadores. En
el estado de Coahuila, el gobernador Venus-
La buena fe del presidente Madero y su con- tiano Carranza con el apoyo de la legislatura
vicción democrática fueron traicionadas por local, desconoció al gobierno de Victoriano
los militares y los políticos porfiristas aliados al Huerta y organizó el Ejército Constituciona-

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do sus dotes parlamentarios durante el régimen entonces embajador norteamericano en Méxi-


de la dictadura. Sin embargo, con la seguridad y co Henry Lane Wilson. Diez trágicos días vivió
la firme convicción en los ideales de la Revolu- la ciudad de México, cuando en la madrugada
ción, dio una histórica batalla en defensa de los del 9 de febrero un grupo de militares se levan-
derechos de los obreros textiles. tó en armas en contra del gobierno de Madero.
Después de días y horas de debate y contan- Después de nutridos combates entre las fuerzas
do con el apoyo de otros diputados maderistas sublevadas que se atrincheraron en la Ciudadela
lograron derrotar a una fuerte coalición que ha- y las tropas leales al presidente Madero, la trai-
bían integrado los diputados representantes del ción ensombreció al Palacio Nacional, pues un
viejo régimen de Díaz. De esa manera, la Cá- grupo de soldados, siguiendo instrucciones del
mara aprobó una ley por medio de la cual todos general Victoriano Huerta, comandante militar
los trabajadores de la industria textil del país de la plaza, tomaron prisioneros al presidente
tenían derecho a un salario mínimo y a traba- Madero y al vicepresidente Pino Suárez, quie-
jar jornadas máximas de 10 horas, en contraste nes días después, el 22 de ese mes, fueron asesi-
con las jornadas de 14 y hasta 16 horas vigentes nados por sus captores.
hasta entonces. Después del golpe de Estado, Victoriano
Huerta asumió la presidencia de México, lo que
En las f ilas const i tucionalistas no fue aceptado por algunos gobernadores. En
el estado de Coahuila, el gobernador Venus-
La buena fe del presidente Madero y su con- tiano Carranza con el apoyo de la legislatura
vicción democrática fueron traicionadas por local, desconoció al gobierno de Victoriano
los militares y los políticos porfiristas aliados al Huerta y organizó el Ejército Constituciona-

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36 • Heriberto Jara Silvia González Marín • 37

lista, llamado así por su propósito de defender teriza de Matamoros en el estado de Tamauli-
la Constitución. pas, en donde se puso a las órdenes del general
La rebelión se propagó por todo el país y sur- Lucio Blanco.
gieron formidables ejércitos populares al man- Su entusiasmo revolucionario fue comparti-
do de los generales Francisco Villa en el norte, do con otros compañeros de armas con quienes
Álvaro Obregón en el noroeste, Pablo González participó en el primer reparto agrario que reali-
en el noreste y Emiliano Zapata en el sur. zó la Revolución: el de las tierras de la hacienda
Heriberto Jara, al igual que otros de sus Los Borregos, propiedad de un pariente de Por-
compañeros diputados, había permanecido en firio Díaz. Heriberto, Lucio Blanco, Franciso J.
la ciudad de México para resistir al dictador. Múgica y los demás oficiales se comprometie-
Participó en la organización de la primera ma- ron ante los campesinos ahí presentes a defen-
nifestación del l° de mayo en la que los trabaja- der con las armas, y si fuera necesario con su
dores repudiaron al usurpador. vida, este histórico acontecimiento.
Conforme crecía el descontento del pueblo Heriberto, que ya para entonces tenía el gra-
en contra de su gobierno, Victoriano Huerta do de coronel de caballería, fue comisionado
arreciaba la represión. Varios diputados y el se- para levantar la Revolución en su estado natal.
nador Belisario Domínguez fueron asesinados.
Heriberto Jara tuvo que salir huyendo. Dis- La invasión de Veracruz
frazado, burló a la policía y escondido en un va-
gón del ferrocarril pudo escapar hacia el puerto Corría el año de 1914. El Ejército Constitucio-
de Veracruz donde se embarcó hacia la ciudad de nalista había logrado grandes triunfos sobre el
La Habana, y de ahí se trasladó a la ciudad fron- Ejército Federal. Para los primeros días de abril,

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lista, llamado así por su propósito de defender teriza de Matamoros en el estado de Tamauli-
la Constitución. pas, en donde se puso a las órdenes del general
La rebelión se propagó por todo el país y sur- Lucio Blanco.
gieron formidables ejércitos populares al man- Su entusiasmo revolucionario fue comparti-
do de los generales Francisco Villa en el norte, do con otros compañeros de armas con quienes
Álvaro Obregón en el noroeste, Pablo González participó en el primer reparto agrario que reali-
en el noreste y Emiliano Zapata en el sur. zó la Revolución: el de las tierras de la hacienda
Heriberto Jara, al igual que otros de sus Los Borregos, propiedad de un pariente de Por-
compañeros diputados, había permanecido en firio Díaz. Heriberto, Lucio Blanco, Franciso J.
la ciudad de México para resistir al dictador. Múgica y los demás oficiales se comprometie-
Participó en la organización de la primera ma- ron ante los campesinos ahí presentes a defen-
nifestación del l° de mayo en la que los trabaja- der con las armas, y si fuera necesario con su
dores repudiaron al usurpador. vida, este histórico acontecimiento.
Conforme crecía el descontento del pueblo Heriberto, que ya para entonces tenía el gra-
en contra de su gobierno, Victoriano Huerta do de coronel de caballería, fue comisionado
arreciaba la represión. Varios diputados y el se- para levantar la Revolución en su estado natal.
nador Belisario Domínguez fueron asesinados.
Heriberto Jara tuvo que salir huyendo. Dis- La invasión de Veracruz
frazado, burló a la policía y escondido en un va-
gón del ferrocarril pudo escapar hacia el puerto Corría el año de 1914. El Ejército Constitucio-
de Veracruz donde se embarcó hacia la ciudad de nalista había logrado grandes triunfos sobre el
La Habana, y de ahí se trasladó a la ciudad fron- Ejército Federal. Para los primeros días de abril,

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38 • Heriberto Jara Silvia González Marín • 39

la situación militar y política se definía en favor dictadura huertista. Así, el 21 de abril de ese
de la Revolución que cada día acentuaba su ca- año, por orden del presidente de los Estados
rácter nacionalista y social. Unidos, Woodrow Wilson, desembarcaron en
Ante este panorama, Estados Unidos buscaba el puerto los soldados de la poderosa flota nor-
la manera de intervenir militarmente para frenar la teamericana.
Revolución y garantizar sus intereses. La defensa de la ciudad quedó a cargo de los
El pretexto que dio como resultado la in- alumnos de la escuela naval y de la población
vasión del puerto de Veracruz fue la noticia civil, pues el Ejército Federal se había retirado
de que un barco alemán se encontraba rumbo tierra adentro. Después de dos días de heroi-
a Veracruz con un embarque de armas para la ca resistencia popular, la tropa norteamericana
se adueñó completamente de la ciudad y de la
aduana marítima. Sin embargo el pueblo vera-
cruzano continuó oponiéndose al invasor.
Siete meses permanecieron los invasores en
territorio nacional, hasta que el 22 de noviem-
bre de ese mismo año, el primer Jefe Venustiano
Carranza recibió una notificación del presidente
de Estados Unidos en el que le informaba que
el día 23 de ese mes, las tropas norteamericanas
evacuarían el puerto de Veracruz. Para vigilar la
Huelg a en Río Blanco. desocupación, Venustiano Carranza comisionó
al ya entonces general Heriberto Jara. Con el

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la situación militar y política se definía en favor dictadura huertista. Así, el 21 de abril de ese
de la Revolución que cada día acentuaba su ca- año, por orden del presidente de los Estados
rácter nacionalista y social. Unidos, Woodrow Wilson, desembarcaron en
Ante este panorama, Estados Unidos buscaba el puerto los soldados de la poderosa flota nor-
la manera de intervenir militarmente para frenar la teamericana.
Revolución y garantizar sus intereses. La defensa de la ciudad quedó a cargo de los
El pretexto que dio como resultado la in- alumnos de la escuela naval y de la población
vasión del puerto de Veracruz fue la noticia civil, pues el Ejército Federal se había retirado
de que un barco alemán se encontraba rumbo tierra adentro. Después de dos días de heroi-
a Veracruz con un embarque de armas para la ca resistencia popular, la tropa norteamericana
se adueñó completamente de la ciudad y de la
aduana marítima. Sin embargo el pueblo vera-
cruzano continuó oponiéndose al invasor.
Siete meses permanecieron los invasores en
territorio nacional, hasta que el 22 de noviem-
bre de ese mismo año, el primer Jefe Venustiano
Carranza recibió una notificación del presidente
de Estados Unidos en el que le informaba que
el día 23 de ese mes, las tropas norteamericanas
evacuarían el puerto de Veracruz. Para vigilar la
Huelg a en Río Blanco. desocupación, Venustiano Carranza comisionó
al ya entonces general Heriberto Jara. Con el

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40 • Heriberto Jara Silvia González Marín • 41

objeto de darle instrucciones precisas, lo mandó entre la multitud se le acercó una mujer con una
llamar y le dijo: niña en los brazos que le entregó un ramo de
flores. La mujer, emocionada, le pidió que los
—General, acabo de recibir un comunicado del
presidente de los Estados Unidos en el que me avi- clarines tocaran la Marcha Dragona. El ge­neral
sa que el día 23 de noviembre a las doce en punto dio la orden y al sonar las notas de las trompe-
el ejército norteamericano abandonará el territorio tas, la multitud estalló en gritos de alegría, pues
nacional: sin embargo, esto mismo lo ha dicho en
con la desocupación se iban siete largos meses
tres ocasiones y no ha cumplido. De manera mi ge-
neral, que si los invasores no abandonan Veracruz
de amargura y humillación.
a las doce horas de ese día, ordenará abrir fuego
contra ellos. Ponga su reloj con el mío, le deseo
buena suerte.
En el Congreso Const i tuyente
El general Jara preparó a su gente para que El 15 de julio de 1914, Victoriano Huerta re-
estuviera lista por si fuera necesario entrar en nunciaba como presidente y salía desterrado
combate, pero a las once horas del día señala- hacia Europa. Un mes más tarde, en medio del
do, los soldados norteamericanos empezaron la entusiasmo popular, entraba triunfante a la ciu-
evacuación y a las doce horas en punto no que- dad de México el Ejército Constitucionalista
daba ni un solo estadounidense. encabezado por el general Alvaro Obregón.
El general Heriberto Jara, al frente de su co- La Revolución había derrotado al usurpador
lumna, fue el primero en entrar a la ciudad de y se preparaba para ayudar al pueblo a resol­
Veracruz, fue recibido por el pueblo en medio ver sus angustiantes problemas económicos y
de grandes muestras de alegría y de cariño. De sociales. Sin embargo, dentro de las filas del

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objeto de darle instrucciones precisas, lo mandó entre la multitud se le acercó una mujer con una
llamar y le dijo: niña en los brazos que le entregó un ramo de
flores. La mujer, emocionada, le pidió que los
—General, acabo de recibir un comunicado del
presidente de los Estados Unidos en el que me avi- clarines tocaran la Marcha Dragona. El ge­neral
sa que el día 23 de noviembre a las doce en punto dio la orden y al sonar las notas de las trompe-
el ejército norteamericano abandonará el territorio tas, la multitud estalló en gritos de alegría, pues
nacional: sin embargo, esto mismo lo ha dicho en
con la desocupación se iban siete largos meses
tres ocasiones y no ha cumplido. De manera mi ge-
neral, que si los invasores no abandonan Veracruz
de amargura y humillación.
a las doce horas de ese día, ordenará abrir fuego
contra ellos. Ponga su reloj con el mío, le deseo
buena suerte.
En el Congreso Const i tuyente
El general Jara preparó a su gente para que El 15 de julio de 1914, Victoriano Huerta re-
estuviera lista por si fuera necesario entrar en nunciaba como presidente y salía desterrado
combate, pero a las once horas del día señala- hacia Europa. Un mes más tarde, en medio del
do, los soldados norteamericanos empezaron la entusiasmo popular, entraba triunfante a la ciu-
evacuación y a las doce horas en punto no que- dad de México el Ejército Constitucionalista
daba ni un solo estadounidense. encabezado por el general Alvaro Obregón.
El general Heriberto Jara, al frente de su co- La Revolución había derrotado al usurpador
lumna, fue el primero en entrar a la ciudad de y se preparaba para ayudar al pueblo a resol­
Veracruz, fue recibido por el pueblo en medio ver sus angustiantes problemas económicos y
de grandes muestras de alegría y de cariño. De sociales. Sin embargo, dentro de las filas del

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42 • Heriberto Jara Silvia González Marín • 43

constitucionalismo surgieron discrepancias por do la dictadura porfirista al haberles negado a los


la jefatura de la Revolución que provocaron la trabajadores la oportunidad de estudiar y sumir-
división de los revolucionarios, y así, México se los así en la ignorancia. Heriberto, emocionado
vio envuelto en la guerra de nueva cuenta. por las sinceras palabras del obrero, afirmó:
Después de algunos meses de enfrenta-
Como diputado que acabo de ser elec­to, me com-
mientos armados en los que murieron muchos prometo ante ustedes a llevar al Congreso ideas que
cam­pesinos y obreros de los distintos bandos, favorezcan las condiciones de vida y de trabajo de
la victoria final fue para el constitucionalis- la clase trabajadora; y en cuanto a la edu­cación, que
es uno de los puntos más im­portantes de la Revo-
mo cuyo primer jefe era Venustiano Carranza,
lución, lucharé por terminar con el analfabetismo e
quien convocó al pueblo a elaborar una nueva impul­sar la enseñanza que es la base del progreso y
cons­titución, que garantizara los intereses de la del engrandecimiento de los pueblos.
nación y fuera el camino para que las grandes
mayorías hicieran realidad sus aspiraciones de
justicia y libertad por las que había luchado.
El 22 de octubre de 1916 se efectuaron las
elecciones de diputados al Congreso Constitu­
yente de Querétaro. El general Heriberto Jara,
una vez más, resultó electo diputado de la región
textil de Orizaba. En el mitin que se efectuó al
día siguiente, para conmemorar su victoria, un
obrero de la fábrica de Santa Rosa tomó la pala-
bra y habló sobre los males que había ocasiona- Teat ro Iturbide, Querétaro.

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constitucionalismo surgieron discrepancias por do la dictadura porfirista al haberles negado a los


la jefatura de la Revolución que provocaron la trabajadores la oportunidad de estudiar y sumir-
división de los revolucionarios, y así, México se los así en la ignorancia. Heriberto, emocionado
vio envuelto en la guerra de nueva cuenta. por las sinceras palabras del obrero, afirmó:
Después de algunos meses de enfrenta-
Como diputado que acabo de ser elec­to, me com-
mientos armados en los que murieron muchos prometo ante ustedes a llevar al Congreso ideas que
cam­pesinos y obreros de los distintos bandos, favorezcan las condiciones de vida y de trabajo de
la victoria final fue para el constitucionalis- la clase trabajadora; y en cuanto a la edu­cación, que
es uno de los puntos más im­portantes de la Revo-
mo cuyo primer jefe era Venustiano Carranza,
lución, lucharé por terminar con el analfabetismo e
quien convocó al pueblo a elaborar una nueva impul­sar la enseñanza que es la base del progreso y
cons­titución, que garantizara los intereses de la del engrandecimiento de los pueblos.
nación y fuera el camino para que las grandes
mayorías hicieran realidad sus aspiraciones de
justicia y libertad por las que había luchado.
El 22 de octubre de 1916 se efectuaron las
elecciones de diputados al Congreso Constitu­
yente de Querétaro. El general Heriberto Jara,
una vez más, resultó electo diputado de la región
textil de Orizaba. En el mitin que se efectuó al
día siguiente, para conmemorar su victoria, un
obrero de la fábrica de Santa Rosa tomó la pala-
bra y habló sobre los males que había ocasiona- Teat ro Iturbide, Querétaro.

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44 • Heriberto Jara Silvia González Marín • 45

El general Jara tuvo una actuación destaca- que el Estado tiene el derecho a regir el rumbo
da en el Congreso Constituyente de Queréta- de la educación pública. De esa manera se refor-
ro. Ahí defendió con fervor revolucionario sus mó el artículo 3° sobre la educación y Heriber-
ideas. Propuso que los derechos de los trabaja­ to Jara cumplía el compromiso contraído con
dores fueran garantizados por la Constitución, los obreros de Orizaba.
lo que se logró al ser aprobado el artículo 123
en el que se establecen el derecho de huelga, la Gobernador de Veracruz
libertad de sindicalización, la jornada máxima
de 8 horas y el salario mínimo. En 1924, Heriberto
En la tribuna, levantó con energía su voz y Jara fue electo gober-
les recordó a aquellos diputados que no habían nador de Veracruz.
entendido todavía el compromiso que la Re- Mientras duró en su
volución tenía con la gente humilde, la necesi- cargo atendió las ne-
dad de que en la Constitución se escribiera en cesidades del pueblo.
detalle la forma como se iba a resolver el pro- Durante su gobierno,
blema agrario y se establecieran los derechos la educación alcan-
de la nación sobre la tierra, las aguas, las cos- zó un gran impulso:
tas, los mares, el subsuelo y en general sobre construyó escuelas para
los recursos naturales. Todo esto formó parte la niñez campesina y Heriber to Jara.

del artículo 27. para los hijos de los


También abogó porque la educación fuera obreros, por lo que aumentó el presupuesto edu-
laica, gratuita y obligatoria, y sostuvo la tesis de cativo.

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El general Jara tuvo una actuación destaca- que el Estado tiene el derecho a regir el rumbo
da en el Congreso Constituyente de Queréta- de la educación pública. De esa manera se refor-
ro. Ahí defendió con fervor revolucionario sus mó el artículo 3° sobre la educación y Heriber-
ideas. Propuso que los derechos de los trabaja­ to Jara cumplía el compromiso contraído con
dores fueran garantizados por la Constitución, los obreros de Orizaba.
lo que se logró al ser aprobado el artículo 123
en el que se establecen el derecho de huelga, la Gobernador de Veracruz
libertad de sindicalización, la jornada máxima
de 8 horas y el salario mínimo. En 1924, Heriberto
En la tribuna, levantó con energía su voz y Jara fue electo gober-
les recordó a aquellos diputados que no habían nador de Veracruz.
entendido todavía el compromiso que la Re- Mientras duró en su
volución tenía con la gente humilde, la necesi- cargo atendió las ne-
dad de que en la Constitución se escribiera en cesidades del pueblo.
detalle la forma como se iba a resolver el pro- Durante su gobierno,
blema agrario y se establecieran los derechos la educación alcan-
de la nación sobre la tierra, las aguas, las cos- zó un gran impulso:
tas, los mares, el subsuelo y en general sobre construyó escuelas para
los recursos naturales. Todo esto formó parte la niñez campesina y Heriber to Jara.

del artículo 27. para los hijos de los


También abogó porque la educación fuera obreros, por lo que aumentó el presupuesto edu-
laica, gratuita y obligatoria, y sostuvo la tesis de cativo.

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46 • Heriberto Jara Silvia González Marín • 47

En los primeros años de su gestión se re-


partieron muchas tierras en beneficio de los
En la lucha por la paz
campesinos. Alentó la organización obrera en
Fue un activo lucha­dor en favor de los dere-
sindicatos. Transformó Jalapa, de una ciudad
chos de los pueblos, lo que se hizo evidente
de apariencia pueblerina, en una verdadera
cuando la República española fue atacada por
capital: pavimentó las calles, introdujo el dre-
un grupo de militares encabe­zados por Fran-
naje, aumentó el flujo eléctrico con la adqui-
cisco Franco y sus aliados. Jara, que en ese
sición de una nueva planta de luz y constru-
entonces era Jefe de Operaciones Militares en
yó un magnífico estadio deportivo. Además,
hizo que las compañías petroleras respetaran la
Constitución y las obligó a pagar los impuestos
que debían al gobierno, si no cumplían Jara les
embargaba los pozos petroleros. Esta decisión
le trajo problemas con el presidente Plutarco
Elías Calles por lo que el gobernador Heriber-
to Jara tuvo que separarse de su puesto antes
de terminar su periodo constitucional.
En los tres años que estuvo al frente de su es-
tado, en todos sus actos dio prueba de honradez
y de esfuerzo constante.

Heriber to Jara.

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En los primeros años de su gestión se re-


partieron muchas tierras en beneficio de los
En la lucha por la paz
campesinos. Alentó la organización obrera en
Fue un activo lucha­dor en favor de los dere-
sindicatos. Transformó Jalapa, de una ciudad
chos de los pueblos, lo que se hizo evidente
de apariencia pueblerina, en una verdadera
cuando la República española fue atacada por
capital: pavimentó las calles, introdujo el dre-
un grupo de militares encabe­zados por Fran-
naje, aumentó el flujo eléctrico con la adqui-
cisco Franco y sus aliados. Jara, que en ese
sición de una nueva planta de luz y constru-
entonces era Jefe de Operaciones Militares en
yó un magnífico estadio deportivo. Además,
hizo que las compañías petroleras respetaran la
Constitución y las obligó a pagar los impuestos
que debían al gobierno, si no cumplían Jara les
embargaba los pozos petroleros. Esta decisión
le trajo problemas con el presidente Plutarco
Elías Calles por lo que el gobernador Heriber-
to Jara tuvo que separarse de su puesto antes
de terminar su periodo constitucional.
En los tres años que estuvo al frente de su es-
tado, en todos sus actos dio prueba de honradez
y de esfuerzo constante.

Heriber to Jara.

Biografías para niños Biografías para niños

DR © 2014.
Secretaría de Cultura - Instituto Nacional de Estudios Históricos de las Revoluciones de México
Este libro forma parte del acervo de la Biblioteca Jurídica Virtual del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM
www.juridicas.unam.mx https://biblio.juridicas.unam.mx/bjv Libro completo en: https://goo.gl/97fTmQ

48 • Heriberto Jara Silvia González Marín • 49

Veracruz, por órdenes del presi­dente Lázaro Por sus ideas pacifistas fue electo Presidente
Cárdenas envió a la España republicana armas, del Movimiento Mundial de la Paz. Su voz se
municiones y medicinas. Los obreros veracru- dejó oír en contra de los gastos militares y en
zanos trabajaban día y noche para tener listos favor de los pueblos en lucha por su indepen­
los embarques. Refiriéndose al sufrimiento en dencia. El gobierno de la Unión Soviética le con-
que vivía el pueblo español, Jara opinaba que: cedió el Premio “Lenin de la Paz”. Fue un gran
la vida de un revolucionario no vale la pena amigo del pueblo chino y cuando las po­tencias
de ser vivida, si cerrase los ojos al drama de la occidentales condenaban la Revolución dirigida
humanidad. Y el caso de nuestros amigos es- por Mao Tse Tung, Heriberto viajó hasta ese le-
pañoles es parte de ese drama. jano país y con su presencia apoyó su determina-
Desempeñó diversos puestos públicos; fue ción de construir una sociedad más justa.
senador, presidente del Partido de la Revolu-
ción Mexicana y Secretario de Marina durante La muerte de Heriberto Jara
la Segunda Guerra Mundial.
Años más tarde, Heriberto Jara estuvo en la El 17 de abril de 1968, rodeado de sus fami-
primera fila en defensa de la Revolución cubana. liares y amigos más queri­dos, dejó de existir
Siempre leal a los principios de la política exterior Heriberto Jara, uno de los revolucionarios más
mexicana de respeto a la libre autode­terminación honrados, íntegros y apa­sionados defensores de
de los pueblos y de no intervención. la justicia social. Toda una vida de lucha dedi-
Después de haber servido con lealtad y pa- cada a la defensa de los derechos del pueblo, al
triotismo a México, dedicó los últimos años de rescate de la soberanía nacional y en favor de la
su vida a la lucha por la paz mundial. paz y el desarme mundial.

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48 • Heriberto Jara Silvia González Marín • 49

Veracruz, por órdenes del presi­dente Lázaro Por sus ideas pacifistas fue electo Presidente
Cárdenas envió a la España republicana armas, del Movimiento Mundial de la Paz. Su voz se
municiones y medicinas. Los obreros veracru- dejó oír en contra de los gastos militares y en
zanos trabajaban día y noche para tener listos favor de los pueblos en lucha por su indepen­
los embarques. Refiriéndose al sufrimiento en dencia. El gobierno de la Unión Soviética le con-
que vivía el pueblo español, Jara opinaba que: cedió el Premio “Lenin de la Paz”. Fue un gran
la vida de un revolucionario no vale la pena amigo del pueblo chino y cuando las po­tencias
de ser vivida, si cerrase los ojos al drama de la occidentales condenaban la Revolución dirigida
humanidad. Y el caso de nuestros amigos es- por Mao Tse Tung, Heriberto viajó hasta ese le-
pañoles es parte de ese drama. jano país y con su presencia apoyó su determina-
Desempeñó diversos puestos públicos; fue ción de construir una sociedad más justa.
senador, presidente del Partido de la Revolu-
ción Mexicana y Secretario de Marina durante La muerte de Heriberto Jara
la Segunda Guerra Mundial.
Años más tarde, Heriberto Jara estuvo en la El 17 de abril de 1968, rodeado de sus fami-
primera fila en defensa de la Revolución cubana. liares y amigos más queri­dos, dejó de existir
Siempre leal a los principios de la política exterior Heriberto Jara, uno de los revolucionarios más
mexicana de respeto a la libre autode­terminación honrados, íntegros y apa­sionados defensores de
de los pueblos y de no intervención. la justicia social. Toda una vida de lucha dedi-
Después de haber servido con lealtad y pa- cada a la defensa de los derechos del pueblo, al
triotismo a México, dedicó los últimos años de rescate de la soberanía nacional y en favor de la
su vida a la lucha por la paz mundial. paz y el desarme mundial.

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50 • Heriberto Jara

Como era su deseo, su cuerpo fue incinerado


y sus cenizas arrojadas al mar frente al puerto
Heriberto Jara
de Veracruz, ya que como él decía: Se terminó de imprimir en abril de 2014,
en los talleres del Departamento de Reproducciones
“del mar venimos y al mar debemos Gráficas de la sep, Dr. Mariano Azuela núm. 197,
Col. Santa María La Ribera, Del. Cuauhtémoc,
volver”. C. P. 06400, México, D. F.

Su tiraje consta de 4 000 ejemplares


El libro que tienes en tus manos se editó
por primera vez en el inehrm en 1987
bajo la serie “Biografías para niños”, coordinada
por Begoña C. Hernández y Lazo y con la asesoría
de Aurora Cano Andaluz

Patricia G aleana
Coordinadora general de la actual edición

Lourdes Martínez Ocampo


Dirección editorial
Rafael Hernández Ángeles
Encargado de la Colección
Gráfica y de Sonido de la Fototeca inehrm
Antonio Noel Gutiérrez González
Cuidado de la edición
Liliana Camargo Álvarez, Antonio Gutiérrez y Oscar Zapata
Asistencia editorial e iconografía
Berenice Oliva
Ilustración
Juan José R. Trejo
Diseño y diagramación
Adrián García
Producción

Biografías para niños

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50 • Heriberto Jara

Como era su deseo, su cuerpo fue incinerado


y sus cenizas arrojadas al mar frente al puerto
Heriberto Jara
de Veracruz, ya que como él decía: Se terminó de imprimir en abril de 2014,
en los talleres del Departamento de Reproducciones
“del mar venimos y al mar debemos Gráficas de la sep, Dr. Mariano Azuela núm. 197,
Col. Santa María La Ribera, Del. Cuauhtémoc,
volver”. C. P. 06400, México, D. F.

Su tiraje consta de 4 000 ejemplares


El libro que tienes en tus manos se editó
por primera vez en el inehrm en 1987
bajo la serie “Biografías para niños”, coordinada
por Begoña C. Hernández y Lazo y con la asesoría
de Aurora Cano Andaluz

Patricia G aleana
Coordinadora general de la actual edición

Lourdes Martínez Ocampo


Dirección editorial
Rafael Hernández Ángeles
Encargado de la Colección
Gráfica y de Sonido de la Fototeca inehrm
Antonio Noel Gutiérrez González
Cuidado de la edición
Liliana Camargo Álvarez, Antonio Gutiérrez y Oscar Zapata
Asistencia editorial e iconografía
Berenice Oliva
Ilustración
Juan José R. Trejo
Diseño y diagramación
Adrián García
Producción

Biografías para niños


H eriberto Jara corona nació el 10 de julio de 1879 en
Orizaba, Veracruz. Desde pequeño, dado que su tío
era administrador de un rancho, se sensibilizó con el trabajo
campesino y las injusticias de las que era objeto. Estudió en el
Instituto Científico y Literario del Estado de Hidalgo y durante
sus años de estudiante participó en manifestaciones en protesta
por la permanencia de Díaz en el poder. En varias ocasiones
fue detenido y encarcelado. Al terminar sus estudios, llevó la
contabilidad de la fábrica de Río Blanco, lugar donde reconoció
las difíciles condiciones de los trabajadores.
Participó en la organización del Partido Liberal Mexicano
y fungió como Delegado de Propaganda en Orizaba. Durante
los disturbios del 7 de enero de 1907 en Río Blanco, fue
aprehendido y encarcelado. En la gira de Madero por Veracruz,
en mayo de 1910, formó parte de la organización del Club
Antirreeleccionista Ignacio de la Llave. Durante el gobierno
maderista, Jara participó en la XXVI Legislatura. Con la muerte
de Madero y la persecución por parte del gobierno usurpador
huertista, Jara huyó a La Habana. Más tarde regresaría al país y
se uniría al Ejército Constitucionalista responsable de la retirada
de las fuerzas norteamericanas del Puerto de Veracruz en 1914.
Tras el triunfo carrancista, Jara resultaría electo diputado por
Orizaba en el Congreso Constituyente. Como diputado defendió
los derechos de los trabajadores, el reparto agrario y los bienes
de la nación. Abogó por que la educación fuera laica, gratuita
y obligatoria. En 1924 fue electo Gobernador de Veracruz, en
1940 se convirtió en el primer Secretario de Marina. Dedicó los
últimos años de su vida a la lucha por la paz mundial y murió
el 17 de abril de 1968. Su cuerpo fue incinerado y las cenizas
arrojadas al mar frente al puerto de Veracruz.

Heriberto Jara

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