Aguadas Ecofronteras 2019

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Ecofronteras, 2019, vol. 23, núm. 66, pp.

9-12, ISSN 2007-4549 (revista impresa), E-ISSN 2448-8577 (revista digital). Licencia CC (no comercial, no obras derivadas); notificar reproducciones a [email protected]

Aguadassantuarios
de Calakmul
de vida silvestre
Decir que el agua es fuente de vida es un lugar común, pero cierto. En la Reserva de la Biósfera Calakmul las
aguadas son un elemento fundamental del paisaje, y especies como el jaguar, el pecarí de labios blancos o
el tapir centroamericano recorren grandes distancias en su búsqueda, pues están dispersas y no son abun-
dantes. Estas pequeñas lagunas superficiales son imprescindibles para la sobrevivencia de la fauna silvestre.

SAMUEL HENDERSON
ARMANDO GASSE

Zopilote rey (Sarcoramphus papa).

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Única fuente de agua

L
DAVE JOHNSON, WIKIMEDIA COMMONS
a Reserva de la Biósfera Calakmul1 es
Rafael Reyna-Hurtado

un lugar excepcional en México y en el


mundo, es parte del mismo ecosistema
del Petén guatemalteco, y junto con la Re-
serva de la Biósfera Maya del vecino país y
un par de reservas privadas —Gallon Jug y Re-
serva Privada Río Bravo— en Belice, con-
forman el bosque tropical más grande de
Mesoamérica y el segundo más grande del
continente americano, ¡solo después del
Amazonas!
Cuando una persona visita el lugar y
observa el territorio desde la punta de la Mono saraguato (Alouatta pigra).

pirámide más alta de la ciudad maya de


MANUEL WEBER

Calakmul, en el corazón de la reserva, es-


tará contemplando una selva o bosque tro-
pical que ha permanecido prácticamente
inalterado desde que los mayas abandona-
ron el área hace 1,100 años.
Es probable que vea volar a un espec-
tacular zopilote rey (Sarcoramphus papa),
que escuche aullar a monos saraguatos
(Alouatta pigra) o que distinga en las copas
de los árboles a una tropa de monos araña
(Ateles geoffroyi), moviéndose de manera
coordinada y con una agilidad que ningún
otro primate americano tiene. Asimismo
Pavo ocelado (Agriocharis ocellata).
podría encontrar, en el piso de la selva, a
un guajolote o pavo ocelado (Agriocharis
RAFAEL REYNA (cámara-trampa)

ocellata), animal de gran belleza que solo


vive en la península de Yucatán, y a hocofai-
sanes negros (Crax rubra), magníficas aves
que abundan ahí. Con un poco de suerte,
se topará con una tropa de pecarís labios
blancos (Tayassu pecari) cruzando la ca-
rretera de acceso —uno de los animales
más raros de México— e incluso con algún
jaguar (Panthera onca), el solitario y mítico
felino más grande del Neotrópico.
¿Qué hace de Calakmul un lugar excep-
cional para la fauna silvestre, que no tiene
comparación en México? Para comprender-
Jaguar (Panthera onca).
lo es necesario conocer la historia de la re-
gión, sus características y dinámica interior. mil personas; sin embargo, alrededor del
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Los decretos en torno a reservas de la biósfera in- Hay que partir de que fue una ciudad muy año 900 y quizá como consecuencia de va-
cluyen esta palabra sin tilde (biosfera); no obstante, importante en el clásico maya. Según esti- rios años de sequía, la gente abandonó la
dado que en Ecofronteras la acentuamos normalmen-
maciones del especialista William J. Folan, ciudad y se trasladó a la costa, de tal modo
te por convenir en términos de divulgación, también lo
hacemos en el nombre oficial para unificar el término. alguna vez habitaron cerca de ella unas 50 que la selva reclamó espacios y se apoderó

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del sitio. A inicios de 1900, grupos de chi-
cleros localizaron la ciudad, por su trabajo

RAFAEL REYNA
en la extracción de chicle del árbol de za-
pote. En 1929 guiaron a Cyrus Longworth
Lundell, un botánico estadunidense, a las
ruinas mayas, quien a su regreso a Euro-
pa escribió un tratado sobre la zona; des-
cribió los dos montículos que son ahora las
dos pirámides más altas que se vislumbran
Emiliano es un ejemplar de tapir centroamericano (Tapirus bairdii). Fue capturado
aun desde el aire y le dan el nombre a la
en una aguada de la Reserva de la Biósfera Calakmul en 2011 y se le colocó un collar
ciudad (Calakmul significa dos montículos de radiotelemetría que permitió seguirlo hasta 2015. Sus movimientos siempre estu-
adyacentes). vieron ligados a las aguadas y mostró que estas son un elemento fundamental para
A pesar de las incursiones de chicleros, sobrevivir, sobre todo en la época de secas. Cuando la batería de su collar se agotó,
cazadores furtivos y ladrones de piezas ar- pudimos seguirlo a través de cámaras automáticas instaladas en las aguadas, y así
conocimos más detalles de su vida, incluso a su “novia”, una tapir hembra que per-
queológicas, la región nunca fue deforesta-
maneció junto a él por algunos días en 2015.
da en gran escala, se conservó la mayoría
de su vegetación original y fue protegida al
declararse reserva de la biósfera en 1989. do investigaciones sobre especies anima- ción en los últimos 100 años. Cada grupo
Desde entonces, se han realizado esfuer- les de Calakmul desde hace unos 20 años requiere de 100 a 120 km2 para encontrar
zos por conservar el bosque en su estado y hemos documentado la cotidianidad de la los recursos que necesita.
original y mantener al mínimo la interven- vida al interior del bosque, así como even- También hemos estudiado al tapir cen-
ción humana. Incluso en la ciudad maya, tos extraordinarios que ocurren de vez en troamericano (Tapirus bairdii), el animal
los arqueólogos mantienen algunos árbo- cuando. Tal es el caso de nuestro estudio más grande del Neotrópico y asiduo visi-
les originales en los edificios. sobre el pecarí labios blancos, una espe- tante de las aguadas. Es una especie muy
Una característica distintiva es que al cie nativa de América que vive en grupos sigilosa y difícil de investigar, por eso es-
interior de la reserva no existen ríos ni la- grandes, de 30 a 50 individuos, y se mue- tamos felices de haber vivido la experien-
gos grandes. La mayor cantidad del agua ve continuamente buscando aguadas, so- cia de seguir a uno de ellos durante cuatro
de lluvia se percola al subsuelo debido al bre todo en la época de secas. En el área años: un bello ejemplar al que llamamos
suelo calcáreo que predomina en la re- viven entre 50 y 60 grupos, lo que significa “Emiliano”, quien se movió en un área más
gión y solo en pocos lugares se almacena que constituyen la población más grande grande de lo que se había reportado para
en la superficie. El líquido ahí normalmen- en México y quizás en toda Centroaméri- la misma especie en Costa Rica; gracias a
te se tiñe de café por una especie de árbo- ca, donde la especie ha sido eliminada en él establecimos que los individuos requie-
les que crecen en sus márgenes, el pucté un 87% de su rango histórico de distribu- ren de 4 a 24 km2 para sobrevivir.
(Bucida buceras), que ayudan a que las la-

RAFAEL REYNA (cámara-trampa)


gunas superficiales no se evaporen tan fá-
cilmente. Tales sitios son conocidos como
aguadas y son la única fuente de agua para
varios grupos humanos, al grado que cerca
de 100 comunidades del municipio de Ca-
lakmul dependen de ellas para sus activi-
dades cotidianas.

Pieza clave en la conservación


Las aguadas son indispensables para la
sobrevivencia de la fauna silvestre, aun
cuando están dispersas, no son abundan-
tes —hay una cada 9.3 km2— y cada año
varias permanecen secas. En El Colegio de
la Frontera Sur (ECOSUR) hemos realiza- Pecarí labios blancos (Tayassu pecari).

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puma (Puma concolor), ocelote (Leopardus También es preciso que, de común acuer-
RINA PELLIZZARI

pardalis), hocofaisan, pavo ocelado—, y do con los habitantes, se protejan ciertas


cuatro de ellas tenían crías. Igualmente ob- aguadas presentes en comunidades cerca-
servamos que en un mismo día, las tres nas a la reserva. Esto implica impulsar pro-
especies más grandes del Neotrópico estu- yectos productivos en los que se respete la
vieron presentes en cuestión de horas; en integridad de la selva, y a la vez la gente pue-
la mañana llegó un tapir, un grupo de peca- da obtener los recursos necesarios para una
rís a medio día y, finalmente, al caer la tar- vida digna. Para lograrlo debemos involucrar-
de, arribó un jaguar atraído ya fuera por el nos autoridades de todos los niveles, acade-
olor a presas o por la sed. mia, organizaciones no gubernamentales y
la sociedad en general.

Hocofaisán negro (Crax rubra). Las amenazas a la fauna silvestre Conservar las aguadas como santuarios
Aunque Calakmul es una zona con una im- de fauna, en el marco de la conservación glo-
Desde 2008, en colaboración con Pro- presionante biodiversidad, no todo es op- bal de la zona, permitirá que a futuro las co-
natura Península de Yucatán y con la Re- timista. La cacería de subsistencia es una munidades humanas sigan disfrutando de
serva de la Biósfera Calakmul, iniciamos un actividad importante en los ejidos aleda- aire y agua limpia, miel, frutos de zapote y
monitoreo de algunas aguadas y los seres ños y tiene impacto en las poblaciones de muchos otros productos que la selva brinda,
que las visitan. Diez años después podemos fauna silvestre; la extracción forestal ilegal y hará que las personas que visiten Calak-
asegurar que son la pieza más importante del es cada vez más frecuente, y las activida- mul se sientan igual de sorprendidas, como
paisaje en Calakmul para la conservación de des ecoturísticas tienden a intensificarse sin nosotros, al encontrar un ecosistema intac-
la fauna silvestre. Estas pequeñas lagunas, so- suficiente regulación. Además, el cambio to, con una impresionante vegetación y ani-
meras y con un patrón impredecible de agua, climático está afectando gravemente el te- males emblemáticos. ¡Qué fortuna observar
son los sitios más buscados por varias cria- rritorio y la lluvia es cada vez más escasa; algún ave majestuosa o un grupo de peca-
turas; por ejemplo, hocofaisanes, tapires y se ha reducido un 20% desde 1947, cuando rís labios blancos atravesando los árboles,
pecarís labios blancos necesitan estar cer- se inició el monitoreo de clima en la región. mientras a lo lejos los saraguatos resuelven
ca de una de ellas durante la época de secas Si Calakmul pierde la extensión de bosque disputas territoriales. Sin duda, mantener las
para beber, refrescarse y quitarse parásitos. bien conservado que tiene en la actualidad, fuentes de agua es indispensable para que
En una ocasión documentamos que un o si las aguadas se secan o son perturbadas esta reserva de la biósfera prevalezca como
grupo de pecarís caminó 17 kilómetros para por actividades humanas, se corre el riesgo un tesoro de la humanidad.
llegar a una aguada, y en otro momento de que las especies en peligro de extinción,
descubrimos que una pequeña reserva de disminuyan, se fragmenten e incluso desa-
agua, de 4 x 10 metros, recibió en 10 días parezcan. Es necesario que algunas agua-
Rafael Reyna-Hurtado es investigador del Departamento de
al menos a siete especies en peligro de ex- das y el bosque a su alrededor se declaren Conservación de la Biodiversidad en ECOSUR Campeche
tinción —tapir, pecarí labios blancos, jaguar, como santuarios de vida silvestre. ([email protected]).

El origen del chicle


El acto de masticar goma de mascar o productos con efecto similar, como la parafina, es antiquísimo. En México se usaba una
sustancia proveniente de la savia del árbol del zapote o chicozapote (Manikara zapota) desde antes de la llegada de los espa-
ñoles, y se le reconocían propiedades digestivas. Este árbol es típico de la península de Yucatán y su carnoso fruto es impor-
tante en la dieta de diversas especies, como tapires, murciélagos, monos, pecarís, venados y muchas aves.
La palabra chicle proviene del náhuatl tzictli. El general Antonio López de Santa Anna acostumbraba mascarlo y al parecer qui-
so venderlo en Estados Unidos cuando fue exiliado de México. En Nueva York conoció al inventor Thomas Adams, y podemos
imaginar el resto… En algún momento, Adams experimentó con aquella goma de mascar, le dio sabor y la populari-
zó; en 1871 patentó una máquina que la fabricaba a gran escala y surgió la famosa marca Chiclets.
Durante mucho tiempo hubo esfuerzos importantes para conservar los árboles de zapote en la península de Yucatán,
por tradición y por su uso en la elaboración de chicles, aunque cuando estos comenzaron a elaborarse con derivados
del petróleo, se prefirió talar los árboles de zapote por su madera y más tarde, para carbón.

Fuentes: Santa Anna y el negocio del chicle, https://www.imer.mx/tropicalisima/12637-2/. Ecofronteras 39, El bosque y sus interacciones vitales. Conversación
con Sophie Calmé, http://revistas.ecosur.mx/ecofronteras/index.php/eco/article/view/1114/1084

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