Trama
Trama
Trama
Gerry Lane, antiguo trabajador de las Naciones Unidas, está en el coche con su familia, en
Filadelfia, cuando de repente se desata el caos en la ciudad. Gerry ve cómo las personas
saltan unas sobre otras, y ocurre algo que lo deja atónito: las personas se están mordiendo
unas a otras y desarrollan una gran violencia. Al presenciar esto, ve el momento exacto en
el que una persona muerde a otro hombre y Gerry cuenta el tiempo que ocurre desde la
mordida hasta el cambio, sufriendo la persona violentas convulsiones. A partir de esto, se
vuelve primitiva y violenta, por lo que Gerry deduce que están siendo infectados con
alguna enfermedad extraña. Entonces recibe una llamada de Thierry Umutuni, su antiguo
amigo y actual secretario general adjunto de la ONU. Éste le pide que vuelva a colaborar
con la organización, y a cambio les ofrece evacuarlos en helicóptero.
Gerry, su mujer Karen y sus dos hijas Constance y Rachel huyen hacia un supermercado
local para encontrar suministros y un remedio para el asma de Rachel, siendo ayudados por
uno de los trabajadores. El caos es tal que ni la policía detiene a las personas que saquean
todo lo que encuentran. Salen de ahí para adentrarse en un edificio, y son ayudados por un
niño llamado Tomás, que está con su familia en su apartamento. Todos son oriundos de
Brasil pero Tomás les traduce el inglés. Gerry le dice a su familia que deben salir de ahí o
nunca serán rescatados. El padre de Tomás, inquieto, abre la puerta y los deja salir. Luego
vuelve a abrir para ver si hay más sobrevivientes, pero es atacado por un infectado. Tomás
logra salir y los alcanza, y en el proceso Gerry los combate con un rifle pero un infectado le
escupe sangre en la boca y Gerry se aleja de su familia por un momento parándose en el
borde de la azotea del edificio pensando que va a ser infectado, pero esto no ocurre. Un
helicóptero llega y todos son llevados a un buque, situado a 300 km al este de la costa de
Nueva York, donde un equipo de científicos, médicos, profesores y militares está
analizando el alcance de la epidemia en todo el mundo.
Gerry viaja a una base militar de Corea del Sur con Fassbach y un equipo de marines como
escolta, en donde son atacados y Fassbach muere tras caerse y dispararse en la cabeza con
su arma por error. Allí logran observar la fuente de la infección y logran salir por poco,
muriendo muchos en el proceso, excepto Gerry y el piloto del C130 Hércules en el que
viajan. Gunter Haffner, un exagente de la CIA encarcelado por traición ya que facilitó una
venta de armamento ilegal a Corea del Norte, le dice a Gerry que debe ir a Jerusalén, donde
el Mossad israelí junto al gobierno de ese país estableció una zona de seguridad justo antes
del brote de la epidemia, lo que implica que Israel podría haber tenido conocimiento previo
de la pandemia.
En Jerusalén, Gerry conoce a Jurgen Warmbrunn, agente del Mossad, quien le explica que
meses antes esa agencia interceptó las comunicaciones de un general del ejército de la
India, quien afirmó que las tropas de ese país luchaban contra los rakshasas (zombis). Con
este conocimiento y el uso de una política conocida como la «Regla del décimo hombre», el
país se pone en cuarentena dentro de un enorme muro de contención. Toda la gente, en un
momento de júbilo colectivo, comienzan a cantar cánticos propios del medio oriente, pero
al utilizar altavoces, hacen demasiado ruido y esto atrae a los infectados. Gerry les advierte,
frenético, que dejen de hacer ruido, pero varios infectados logran saltar el muro trepándose
unos a otros y se desata el pánico entre la gente, que empieza a huir en todas direcciones.
Jurgen ordena a varios de sus soldados a que escolten a Gerry hasta el aeropuerto. Durante
el caos, Gerry se da cuenta de que varios civiles son completamente ignorados por los
zombis, como un anciano y un joven que al parecer tiene cáncer (cosa que antes ya había
pasado, con un soldado rengo en la base de Corea del Sur y con un vagabundo en
Filadelfia, aunque este último no fue visto por Gerry). Durante un combate con los zombis,
Segen, una soldado israelí que escoltaba a Gerry, es mordida en la mano y Gerry se la
amputa con su cuchillo para impedir que sea infectada. Tras una frenética carrera por la
ciudad, llegan al aeropuerto y logran ponerse a salvo subiendo a un avión de una aerolínea
de Bielorrusa.
Durante el vuelo Gerry contacta a Thierry y le explica que tiene una hipótesis sobre el
comportamiento del virus y le pide ayuda para encontrar el centro de investigación de
armas bacteriológicas más cercano, que resulta estar en Cardiff (Gales). Mientras, en el
avión se ha colado un zombi, que ataca a una sobrecargo. El avión entero comienza a
infectarse y Gerry le dice a los demás pasajeros que armen un muro de contención con lo
que puedan encontrar, pero a un pasajero se le cae una valija, alertando a los zombis de su
presencia. Al ver que los infectados se aproximan, Gerry lanza una granada fragmentaria y
hace explotar el fuselaje del avión, que provoca una descompresión y los pilotos hacen un
violento aterrizaje de emergencia, destruyéndose la aeronave entera y muriendo en el
proceso.
Segen y Gerry sobreviven a duras penas y logran llegar bastante maltrechos al centro de
investigación de Cardiff. Al cabo de tres días, Gerry despierta atado a una camilla, pero está
curado de una herida que tenía producida por una pieza del avión que se le había incrustado
en el cuerpo. Allí le dice a los hombres que le interrogan que llamen por su teléfono
satelital y que hablen con Thierry, quien les revela la identidad de Gerry. Una vez que se
tranquilizan y lo liberan, Gerry revela su hipótesis: que el infectado no muerde a las
personas que están gravemente heridas, con enfermedades graves o enfermos terminales, ya
que serían inadecuados como anfitriones, lo que se traduce en que los infectados sólo
muerden a personas sanas. Gerry les pide que le den un patógeno mortal pero curable, a lo
que le responden que eso fue lo primero que intentaron con los infectados pero sin éxito, ya
que lo que un patógeno necesita para reproducirse es un huésped vivo. Pero Gerry les dice
que no es para los infectados sino para ellos, y que no es una cura, sino un camuflaje. La
bióloga que habla con él, sin embargo, le responde que la única forma de probar su teoría es
que alguien se inyecte el patógeno, y enfrentarse a los infectados cara a cara. Pero el mayor
problema no es ese: el mayor problema es que los patógenos están almacenados en el ala B
del edificio, en donde un científico trabajaba con unas muestras que le habían enviado y
tras una cortadura en su mano se infectó con el virus y consecuentemente atacó a las
personas que estaban ahí. Tras ver con las cámaras de vigilancia, descubren que las 80
personas que trabajaban en esa área están convertidas en zombis y que el puente de acceso
al ala B fue bloqueado por los sobrevivientes para mantenerse a salvo lejos de los zombis.
Gerry, Segen y tres de los trabajadores, incluyendo al jefe de operaciones del Centro, se
protegen las extremidades con tela y plásticos y se arman con lo que encuentran, despejan
sin hacer ruido la entrada y entran al edificio. Tratan de llegar al lugar evitando ser vistos
por los infectados, pero accidentalmente hacen ruido y se crea un eco enorme en el edificio.
Al escuchar el ruido, los zombis enloquecen y corren tras ellos. Durante la huida, Gerry y el
grupo se separan. Segen mata a los zombis que puede disparándoles. Todos llegan al puente
y les abren la puerta, logrando entrar justo a tiempo para detener a los infectados. Gerry
llega al cuarto donde almacenan las muestras pero se encuentra de frente con un infectado
que lo ataca frenético, pero Gerry lo mata de un certero golpe en la cabeza con un hacha.
Gerry ve que la puerta está protegida con una cerradura electrónica, pero la bióloga lo llama
y le da la clave para entrar. Una vez dentro, está indeciso de cuál muestra tomar, así que
toma varias y las coloca en una caja junto con algunas jeringas, pero cuando se dispone a
abrir la puerta para salir un infectado le bloquea el paso. Gerry, al verse atrapado, decide
probar su teoría. Escribe en un papel un mensaje y lo muestra a la cámara, dejando ver lo
que anotó: "Díganle a mi familia que la amo", esto en caso de que algo salga mal. Acto
seguido, se inyecta el contenido de uno de los frascos de muestras, mira la hora y espera.
Luego de varios minutos, Gerry abre la puerta y el infectado se le para enfrente mirándole a
los ojos, pero la criatura lo ignora completamente, dando a entender que la teoría de Gerry
es efectiva. Gerry sale del cuarto atrapando al infectado dentro, bebe un refresco de una
máquina y suelta todas las latas de golpe para hacer ruido y llamar la atención de los
zombis, que corren enloquecidos hacia el ruido mientras esquivan a Gerry. Le abren la
puerta para recibirlo y una vez a salvo, le colocan la vacuna para el patógeno que se
inyectó, salvándole la vida.
Al final, Gerry vuela a Freeport (Nueva Escocia) en donde se reúne felizmente con su
familia, mientras que se crea una vacuna derivada de patógenos mortales para distribuirla,
la cual sirve para evitar que la gente sana sea detectada por los infectados. La vacuna tiene
éxito en gran parte del mundo y en diferentes países del mundo, la gente empieza a
combatir con éxito a los infectados de distintas formas, incluso utilizando una bomba
nuclear. Se ve que una inmensa parte de la población mundial fue diezmada por el virus ya
que casi todos fueron contagiados y que la lucha por sobrevivir apenas comienza.
Elenco
Brad Pitt como Gerry Lane, antiguo investigador de la ONU retirado y un experto
investigando en lugares de guerra
Mireille Enos como Karen Lane, esposa de Gerry y madre de sus dos hijas.
Fana Mokoena como Thierry Umutuni, el mejor amigo de Gerry y actual
subsecretario de la ONU.
Daniella Kertesz como Segen, una soldado israelí.
Elyes Gabel como el joven doctor Andrew Fassbach, virólogo de la Universidad de
Harvard.
James Badge Dale como Speke, un militar estadounidense.
David Morse como Gunter Haffner, un exagente de la CIA que ―debido al crimen
de traición contra su nación― vive en una cárcel abandonada.
David Andrews como el capitán Mullenaro.
Sterling Jerins como Constance Lane, la hija menor de Gerry y Karen.
Abigail Hargrove como Rachel Lane, la hija mayor de Gerry y Karen.
Ernesto Cantu como el padre de Tomás.6
Vicky Araico como la madre de Tomás.7
Matthew Fox como un soldado SEAL enviado por Thierry Umutoni para rescatar a
la familia Lane en la ciudad de Newark.
Ludi Boeken como Jurgen Warmbrunn, agente israelí del Mossad.
Lucy Aharish como una joven palestina.
Grégory Fitoussi como el piloto del avión militar C130.
Nikola Ðuričko como el piloto del avión de Belarus Airlines.
Se nombra a un tal Denis Ischenko como el otro tripulante del avión de pasajeros,
sin embargo, y seguramente debido a que el grupo del rock alternativo Muse
participó en la banda sonora de la cinta, el que parece ser el verdadero tripulante es
el baterista del grupo musical, Dominic Howard.
Peter Capaldi como un doctor de la OMS.
Pierfrancesco Favino como el jefe del centro secreto de armas químicas de la OMS;
perdió a su esposa y a su hijo en Roma.
Moritz Bleibtreu como un investigador en el centro de guerra bacteriológica en
Gales.
Ruth Negga como una investigadora en el centro de guerra bacteriológica en Gales.
Michiel Huisman como Ellis.
Fabrizio Zachare Guido como Tomás.
Producción
En 2006, las productoras Paramount Pictures y Plan B Entertainment se hicieron con los
derechos de la novela Guerra mundial Z, superando la oferta de la productora de Leonardo
DiCaprio Appian Way. Un año después, Michael Straczynsky recibió el encargo de escribir
el guion y definió la película como un thriller similar a Todos los hombres del presidente
(1976), Niños del hombre (2006) y la saga de Jason Bourne.
Estreno
Originalmente, la película se iba a estrenar el 3 de agosto de 2008, pero debido a varios
problemas durante el rodaje su estreno se postergó hasta el 20 de junio de 2009,
especialmente por las constantes revisiones del guion y las diferencias creativas entre el
director y los productores, quienes definían la parte final del guion como incongruente y
carente de sentido, lo que obligó al director a volver a rodar la película desde el tercer acto
e incluso cambiando el verdadero final que incluía una épica batalla en la ciudad de Moscú,
que se definía como la primera gran ofensiva contra los muertos vivientes, y relegando el
papel de Matthew Fox a apenas dos líneas, cuando originalmente iba a tener un papel que
se definía como una especie de villano.
En esa misma escena de la película, un agente de la CIA que fue arrestado por vender
armas a Corea del Norte, le menciona a Gerry que las armas solo eran medidas parciales
para una solución de emergencia y que desde hace tiempo el gobierno norcoreano (antes del
brote en Corea del Sur) había