Cohn Donald en Español

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i

Prefacio

En esta nueva edición hay dos tipos de cambios: he realizado mejoras en el texto
de la primera edición y he añadido algunos temas nuevos.
Además de hacer algunas correcciones y reelaborar algunos argumentos de
la primera edición, He añadido una introducción antes del Cap. 1, en el que he
dicho un un poco sobre cómo surgió la integral de Lebesgue e indico algo sobre
cómo los temas tratados se relacionan entre sı́. Espero que esto le facilite al lector
ver la estructura de lo que está estudiando. También he mejorado un poco el
diseño de las páginas, y ahora los ejemplos son más fáciles de encontrar.
Hay varios temas nuevos. Estas adiciones principales son la integral de Henstock-
Kurzweil, la paradoja de Banach-Tarski y una introducción a la teorı́a de la pro-
babilidad de la teorı́a de la medida. Estos son, por supuesto, complementarios
a las lı́neas principales del libro, pero deberı́an darle al lector una mejor idea de
la relación entre la teorı́a de la medida y otras partes de las matemáticas. Como
adiciones menores, hay introducciones a la integral de Daniell y a la teorı́a de
los levantamientos.
El nivel matemático del libro y los antecedentes esperados del lector no han
cambiado desde la primera edición. Hay varias personas y organizaciones a las
que me gustarı́a agradecer. La Facultad de Artes y Ciencias de la Universidad
de Suffolk, junto con su Departamento de Matemáticas e Informática, hicieron
posible una licencia sabática para trabajar en esta nueva edición.

El prefacio de la primera edición


Este libro pretende ser un tratamiento sencillo de las partes de la teorı́a de la
medida necesarias para el análisis y la probabilidad. Los primeros cinco o seis
capı́tulos forman una introducción a la medida y la integración, mientras que
los últimos tres capı́tulos deben proporcionar al lector algunas herramientas que
son necesarias para el estudio y la investigación en cualquiera de una serie de
direcciones. (Por ejemplo, alguien que haya estudiado los capı́tulos 7 y 9 deberı́a
poder pasar a temas interesantes en el análisis armónico, sin tener que detenerse
para aprender una nueva teorı́a de la integración y reconciliarla con la que ya
conoce.) Espero que los últimos tres capı́tulos también resulten ser una referencia
útil.
ii

Los capı́tulos 1 al 5 tratan sobre la medida abstracta y la teorı́a de la integra-


ción y presuponen solo la familiaridad con la topologı́a de los espacios euclidianos
que un estudiante debe adquirir en un curso de cálculo avanzado. La medida de
Lebesgue en R (y en Rd ) se construye en el Cap. 1 y se utiliza como ejemplo
básico a partir de entonces.
El capı́tulo 6, sobre la diferenciación, comienza con un tratamiento de los
cambios de variables en Rd y luego da los resultados básicos sobre la diferen-
ciación de funciones en R (y medidas en Rd ) casi en todas partes. La primera
sección de este capı́tulo hace uso de la derivada (como una transformación lineal)
de una función de Rd a Rd ; Se recuerdan las definiciones y los hechos necesarios,
con las referencias apropiadas. El resto del capı́tulo tiene los mismos requisitos
previos que los capı́tulos anteriores.
El capı́tulo 7 contiene un tratamiento bastante completo de la integración en
espacios de Hausdorff localmente compactos. Espero que el principiante pueda
aprender los hechos básicos de las secciones. 7.2 y 7.3 sin demasiados problemas.
Estas secciones, junto con la secc. 7.4 y la primera parte de la secc. 7.6, cubre
casi todo lo que el analista tı́pico necesita saber acerca de las medidas regulares.
Los datos técnicos necesarios para tratar con espacios de Hausdorff localmente
compactos muy grandes se incluyen en las secciones. 7.5 y 7.6.
En el cap. 8 he tratado de recopilar aquellas partes de la teorı́a de conjuntos
analı́ticos que son de uso cotidiano en análisis y probabilidad. Espero que sirva
como introducción y como referencia útil.
El capı́tulo 9 está dedicado a la integración en grupos compactos localmente.
Además de una construcción y discusión de la medida Haar, he incluido una
breve introducción a la convolución en L1 (G) y al espacio de medidas de Borel
regulares complejas o con signo finito en G. Los detalles se proporcionan para
grupos compactos localmente arbitrarios, pero de tal manera que un lector que
esté interesado solo en los segundos grupos contables deberı́an tener facilidad
para hacer las omisiones apropiadas.
Los capı́tulos 7 a 9 presuponen algunos antecedentes en topologı́a general. Se
revisan los hechos necesarios, por lo que lo único que se requiere es cierta facilidad
con los argumentos que involucran espacios topológicos y espacios métricos. El
lector que puede trabajar a través de seccs. 7.1 y 8.1 no deberı́an tener problemas.
Además del cuerpo principal del texto, hay cinco apéndices. Los primeros
cuatro explican la notación utilizada y contienen algunos hechos elementales de
la teorı́a de conjuntos, cálculo y topologı́a; deben recordarle al lector algunas
cosas que puede haber olvidado y, por lo tanto, deben hacer que el libro sea
bastante autónomo. El quinto apéndice contiene una introducción a la integral
iii

de Bochner.
Cada sección termina con algunos ejercicios. En su mayor parte, están desti-
nados a que el lector practique con los conceptos presentados en el texto. Algunos
contienen ejemplos, resultados adicionales o pruebas alternativas y deberı́an pro-
porcionar un poco de perspectiva. Solo algunos de los ejercicios se utilizan más
adelante en el mismo texto ; estos pocos reciben sugerencias, según sea necesario,
que deberı́an hacer que su solución sea una rutina.
Creo que ningún resultado de este libro es nuevo. Por lo tanto, la falta de una
cita bibliográfica nunca debe tomarse como una afirmación de originalidad. Las
notas al final de los capı́tulos ocasionalmente dicen dónde apareció por primera
vez un teorema o demostración; la mayorı́a de las veces, sin embargo, señalan al
lector a presentaciones alternativas o fuentes de información adicional.
El sistema utilizado para las referencias cruzadas dentro del libro debe ser
casi autoexplicativo. Por ejemplo, la Proposición 1.3.5 y el Ejercicio 1.3.7 se
encuentran en la secc. 1.3 del cap. 1, mientras que C.1 y el Teorema C.8 se
encuentran en el apéndice C.
Hay varias personas con las que estoy en deuda y a las que me gustarı́a agra-
decer. Primero están aquellos de quienes aprendı́ la teorı́a de la integración, ya
sea a través de cursos, libros, artı́culos o conversaciones; No intentaré nombrar-
los, pero les agradezco a todos. Me gustarı́a agradecer a R.M. Dudley y W.J.
Buckingham, que leyó el manuscrito original, y J.P. Hajj, que me ayudó con la
corrección de pruebas. Estos tres leyeron el libro con mucho cuidado y pensa-
miento y brindaron muchas sugerencias útiles. (Debo, por supuesto, aceptar la
responsabilidad de ignorar algunas de sus sugerencias y de cualquier error que
quede.) Finalmente, agradezco a mi esposa, Linda, por mecanografiar y brin-
dar asesoramiento editorial sobre el manuscrito, por ayudar con la corrección de
pruebas y especialmente por su aliento y paciencia durante los años que llevó
escribir este libro.

Boston, MA, USA


Donald L. Cohn
iv
Capı́tulo 1

Medidas

Suponga que X es un conjunto y f : X → R es una función que queremos


integrar. Como señalamos en la introducción, debemos tratar con los tamaños de
los subconjuntos de X para definir la integral de f . En este capı́tulo presentamos
medidas, la herramienta básica para lidiar con tales tamaños. Las dos primeras
secciones del capı́tulo son abstractas (pero elementales). La sección 1.1 analiza
las σ-álgebras, las colecciones de conjuntos cuyos tamaños medimos, mientras
que la sección 1.2 introduce medidas en sı́ mismas. El corazón del capı́tulo se
encuentra en las siguientes dos secciones, en las que analizamos algunas técnicas
generales para construir medidas (sección 1.3) y las propiedades básicas de la
medida de Lebesgue (sección 1.4). El capı́tulo termina con las secciones 1.5 y
1.6, que introducen algunas técnicas fundamentales adicionales para manejar
medidas y σ-álgebras.

1.1. Álgebras y Sigma-Álgebras


Sea X un conjunto arbitrario. Una colección A de subconjuntos de X es un
álgebra en X si
(a) X ∈ A .
(b) para cada conjunto A que pertenece a A , el conjunto Ac pertenece a A .
(c) para cadaSsuceción finita A1 , . . . , An de conjuntos que pertenecen a A , el
conjunto ni=1 Ai pertenece a A , y
(d) para cadaTsuceción finita A1 , . . . , An de conjuntos que pertenecen a A , el
conjunto ni=1 Ai pertenece a A .
Por supuesto, en las condiciones (b), (c) y (d), hemos requerido que A sea
cerrado bajo la complementación, bajo la formación de uniones finitas, y ba-

1
2 CAPÍTULO 1. MEDIDAS

jo la formación de intersecciones finitas. Es fácil comprobar que el cierre bajo


la complementación y el cierre bajo la formación de uniones finitas juntas im-
plican
Tn el cierre
Sn bajo la formación de intersecciones finitas (usar el hecho de que
c c
i=1 Ai = ( i=1 Ai ) ). Por lo tanto, podrı́amos haber definido un álgebra usando
solo las condiciones (a), (b) y (c). Un argumento similar muestra que podrı́amos
haber usado solo las condiciones (a), (b) y (d).
De nuevo, sea X un conjunto arbitrario. Una colección A de subconjuntos
de X es una σ-álgebra1 en X si
(a) X ∈ A .
(b) para cada conjunto A que pertenece a A , el conjunto Ac pertenece a A .

S∞ suceción infinita {Ai } de conjuntos que pertenecen a A , el con-


(c) para cada
junto i=1 Ai pertenece a A , y

T∞ suceción infinita {Ai } de conjuntos que pertenecen a A , el con-


(d) para cada
junto i=1 Ai pertenece a A .
Ası́, una σ-álgebra en X es una familia de subconjuntos de X que contiene a X
y está cerrada bajo la complementación, bajo la formación de uniones contables
y bajo la formación de intersecciones contables. Nótese que, como en el caso de
las álgebras, podrı́amos haber usado solo las condiciones (a), (b) y (c), o solo las
condiciones (a), (b) y (d), en nuestra definición.
Cada σ-álgebra en X es un álgebra en X ya que, por ejemplo, la unión de
la suceción finita A1 , A2 , . . . , An es lo mismo que la union de la suceción infinita
A1 , A2 , . . . , An , An , An , . . . .
Si X es un conjunto y A es una familia de subconjuntos de X cerrado bajo
la complementación, entonces X pertenece a A si y solo si ∅ pertenece a A .
Por lo tanto, en las definiciones de álgebras y σ-álgebras dadas anteriormente,
podemos reemplazar la condición (a) con el requisito de que ∅ sea miembro
de A . Además, si A es una familia de subconjuntos de X que no está vacı́a,
cerrada bajo la complementación y cerrada bajo la formación de uniones finitas
o contables, entonces A debe contener a X: si el conjunto A pertenece a A ,
entonces X, ya que es la unión de A y Ac , también debe pertenecer a A . Por lo
tanto, en nuestras definiciones de álgebras y σ-álgebras, podemos reemplazar la
condición (a) con el requisito de que A sea no vacı́o.
Si A es una σ-álgebra en el conjunto X, a veces es conveniente llamar a un
subconjunto de X A -medible si pertenece a A .
1
Los términos campo y σ-campo se utilizan a veces en lugar de álgebra y σ-álgebra.
1.1. ÁLGEBRAS Y SIGMA-ÁLGEBRAS 3

1.1.1. Ejemplos (Algunas familias de conjuntos que son álgebras o


σ-álgebras, y algunas que no lo son).

(a) Sea X un conjunto, y sea A la colección de todos los subconjuntos de X.


Entonces A es una σ-álgebra en X.

(b) Sea X un conjunto, y sea A = {∅, X}. Entonces A es una σ-álgebra en


X.

(c) Sea X un conjunto infinito, y sea A la colección de todos los subconjun-


tos finitos de X. Entonces A no contiene a X y no es cerrado bajo la
complementación; por lo tanto no es una álgebra (o una σ-álgebra) en X.

(d) Sea X un conjunto infinito, y sea A la colección de todos los subconjuntos


A de X tales que A o Ac es finito. Entonces A es un álgebra en X (verifique
esto) pero no es cerrado bajo la formación uniones contables; por lo tanto,
no es un σ-álgebra.

(e) Sea X un conjunto incontable, y sea A la colección de todos los subcon-


juntos contables (es decir, finitos o infinitos contables) de X. Entonces A
no contiene a X y no está cerrado bajo complementación; por tanto, no es
un álgebra.

(f) Sea X un conjunto y sea A la colección de todos los subconjuntos A de X


tales que A o Ac sean contables. Entonces A es un σ-álgebra.

(g) A la colección de todos los subconjuntos de R que son uniones de un número


finito de intervalos de la forma (a, b], (a, +∞), o (−∞, b]. Es fácil comprobar
que cada conjunto que pertenece a A es la unión de una colección disjunta
finita de intervalos de los tipos enumerados anteriormente, y luego verificar
que A es un álgebra en R (el conjunto vacı́o pertenece a A , ya que es la
unión de la colección vacı́a, y por lo tanto finita, de intervalos). El álgebra A
no es un σ-álgebra; por ejemplo, los subintervalos abiertos acotados de R son
uniones de sucesiones de conjuntos en A pero ellos mismos no pertenecen
a A.

A continuación, consideramos formas de construir σ-álgebras.

Proposición 1.1.1. Sea X un conjunto. Entonces la intersección de una colec-


ción no vacı́a arbitraria de σ-álgebras en X es un σ-álgebra en X.
4 CAPÍTULO 1. MEDIDAS

Demostración. Sea C una colección no vacı́a de σ-álgebras en X, y sea A la


intersección de las σ-álgebras que pertenecen a C . Basta comprobar que A con-
tiene X, está cerrado bajo la complementación y está cerrado bajo la formación
de uniones contables. El conjunto X pertenece a A , ya que pertenece a cada
σ-álgebra que pertenece a C . Ahora suponga que A ∈ A . Cada σ-álgebra que
pertenece a C contiene a A y, por tanto, contiene a Ac ; por tanto, Ac pertenece
a la intersección A de estas σ-álgebras. Finalmente, suponga que {Ai } es una
S conjuntos que pertenecen a A y, por tanto, a cada σ-álgebra en C .
sucesión de
Entonces i Ai pertenece a cada σ-álgebra en C y, por lo tanto, a A .
El lector debe notar que la unión de una familia de σ-álgebras puede fallar
en ser una σ-álgebra (ver Ejercicio 5).
La Proposición 1.1.1 implica el resultado siguiente, que es una herramienta
básica para la construcción de σ-álgebras.
Corolario 1.1.1. Sea X un conjunto, y sea F una familia de subconjuntos de
X. Entonces existe una σ-álgebra más pequeña en X que incluye a F .
Por supuesto, decir que A es la σ-álgebra más pequeña en X que incluye
a F es lo mismo decir que A es una σ-álgebra en X que incluye a F y que
cada σ-álgebra en X que incluye a F también incluye a A . Si A1 y A2 son
σ-álgebras más pequeñas que incluyen a F , entonces A1 ⊆ A2 y A2 ⊆ A1 , y
entonces A1 = A2 ; por tanto, la σ-álgebra más pequeña en X que incluye a
F es única. La σ-álgebra más pequeña se llama σ-álgebra generada por F y a
menudo se denota por σ(F ).
Demostración. Sea C la colección de todas las σ-álgebras en X que incluyen a
F . Entonces C es no vacı́o, ya que contiene la σ-álgebra que consiste de todos
los subconjuntos de X. La intersección de las σ-álgebras que pertenecen a C es,
según la Proposición 1.1.1, una σ-álgebra; que incluye a F y está incluida en
cada σ-álgebra en C , es decir, está incluida en cada σ-álgebra en X que incluye
a F.
Ahora usamos el corolario anterior para definir una familia importante de
σ-álgebras. El σ-álgebra de Borel en Rd es el σ-álgebra en Rd generada por la
colección de los subconjuntos abiertos de Rd ; se denota por B(Rd ). Los sub-
conjuntos de Borel de Rd son los que pertenecen a B(Rd ). En el caso d = 1,
generalmente se escribe B(R) en lugar de B(R1 ).
Proposición 1.1.2. La σ-álgebra B(R) de los subconjuntos de Borel de R es
generada por cada una de las siguientes colecciones de conjuntos:
1.1. ÁLGEBRAS Y SIGMA-ÁLGEBRAS 5

(a) la colección de todos los subconjuntos cerrados de R;


(b) la colección de todos los subintervalos de R de la forma (−∞, b];
(c) la colección de todos los subintervalos de R de la forma (a, b].
Demostración. Sean B1 , B2 y B3 las σ-álgebras generadas por las colecciones
de los conjuntos en las partes (a), (b), y (c) de la proposición. Demostraremos
que B(R) ⊇ B1 ⊇ B2 ⊇ B3 y entonces que B3 ⊇ B(R); esto establecerá
la proposición. Dado que B(R)) incluye la familia de subconjuntos abiertos de
R y está cerrado bajo la complementación, incluye la familia de subconjuntos
cerrados de R; por tanto, incluye la σ-álgebra generada por los subconjuntos
cerrados de R, a saber, B1 . Los conjuntos de la forma (−∞, b] son cerrados y
pertenecen a B1 ; consecuentemente B1 ⊇ B2 . Ya que (a, b] = (−∞, b]∩(−∞, a]c ,
cada conjunto de la forma (a, b] pertenece a B2 ; en consecuencia B2 ⊇ B3 .
Finalmente, observe que cada subintervalo abierto de R es la unión de una
sucesión de conjuntos de la forma (a, b] y que cada subconjunto abierto de R es
la unión de una sucesión de intervalos abiertos (vea la Proposición C.4). Por lo
tanto cada subconjunto abierto de R pertenece a B3 , por lo que B3 ⊇ B(R).
A medida que avanzamos, el lector debe tener en cuenta las siguientes pro-
piedades de la σ-álgebra B(R):
(a) Contiene virtualmente2 todos los subconjuntos de R que son de interés para
el análisis.
(b) Es lo suficientemente pequeño como para tratarlo de una manera bastante
constructiva.
Son en gran parte estas propiedades las que explican la importancia de B(R).
Proposición 1.1.3. La σ-álgebra B(Rd ) de subconjuntos de Borel de Rd está
generada por la siguiente colección de conjuntos:
(a) la colección de todos los subconjuntos cerrados de Rd ;
(b) la colección de todos los semiespacios cerrados en Rd que tienen la forma
{(x1 , . . . , xd ) : xi ≤ b} para algún ı́ndice i y algún b en R;
(c) la colección de todos los rectángulos en Rd que tienen la forma

{(x1 , . . . , xd ) : ai < xi ≤ bi para i = 1, . . . , d}.


2
Ver Cap. 8 para algunos conjuntos interesantes y útiles que no son conjuntos de Borel.
6 CAPÍTULO 1. MEDIDAS

Demostración. Esta proposición se puede probar esencialmente con el argumento


que se usó para la Proposición 1.1.2, por lo que se omite la mayor parte de la
prueba. Para ver que la σ-álgebra generada por los rectángulos de la parte (c)
está incluida en σ-álgebra generada por los semiespacios de la parte (b), observe
que cada franja que tiene la forma
{(x1 , . . . , xd ) : a < xi ≤ b}
para algún i es la diferencia de dos de los semiespacios en la parte (b) y que cada
uno de los rectángulos en la parte (c) es la intersección de d franjas tales.
Veamos con más detalle algunos de los conjuntos en B(Rd ). Sea G la familia
de todos los subconjuntos abiertos de Rd ), y sea F la familia de todos los
subconjuntos cerrados de Rd . (Por supuesto, G y F dependen de la dimensión
d, y habrı́a sido más preciso escribir G (Rd ) y F (Rd ).) Sea Gδ la colección de
todas las intersecciones de sucesiones de conjuntos en G , y sea Fσ la colección
de todas las uniones de sucesiones de conjuntos en F . Los conjuntos en Gδ a
menudo se denominan Gδ ’s, y los conjuntos en Fσ a menudo se denominan Fσ ’s.
Las letras G y F probablemente representan la palabra alemana Gebiet y la
palabra francesa fermé, y las letras σ y δ para las palabras alemanas Summe y
Durchschnitt.
Proposición 1.1.4. Cada subconjunto cerrado de Rd es un Gδ , y cada subcon-
junto abierto de Rd es un Fσ .
Demostración. Suponga que F es un subconjunto cerrado de Rd . Necesitamos
construir una sucesión {Un } de subconjuntos abiertos de Rd tal que F = n Un .
T

Para esto definamos Un por


Un = {x ∈ Rd : kx − yk < 1/n para algún y ∈ F }.
(Tenga en cuenta que Un es vacı́o si F es vacı́o). Está claro que cada Un es abierto
y que F ⊆ ∩n Un . La inclusión inversa se deriva del hecho de que F es cerrado
(tenga en cuenta que cada punto en ∩n Un es el lı́mite de una sucesión de puntos
en F ). Por tanto, cada subconjunto cerrado de Rd es un Gδ .
Si U es abierto, entonces cada U c es cerrado y por tanto es un Gδ . Luego existe
una sucesión {Un } de conjuntos abiertos tal que U c = ∩n Un . Los conjuntos Unc
son, entonces, cerrados y U = ∪n Unc ; por lo tanto U es un Fσ .
Para una familia arbitraria S de conjuntos, sea Sσ la colección de todas las
uniones de sucesiones de conjuntos en S , y sea Sδ la colección de todas las
intersecciones de sucesiones de conjuntos en S . Podemos iterar las operaciones
1.1. ÁLGEBRAS Y SIGMA-ÁLGEBRAS 7

representadas por σ y δ, obteniendo de la clase G las clases Gδ , Gδσ , Gδσδ , . . . , y


de la clase F las clases Fσ , Fσδ , Fσδσ , . . . (Nótese que G = Gσ y F = Fδ , note
además que Gδδ = Gδ , que Fδδ = Fδ , etc.) Ahora se deduce (ver Proposición
1.1.4) que todas las inclusiones en la Fig. 1.1 a continuación son válidas.
Resulta que no hay dos de estas clases de conjuntos iguales y que hay con-
juntos de Borel que no pertenecen a ninguno de ellos (véanse los ejercicios 7 y 9
en la sección 8.2).
Una sucesión {Ai } de conjuntos se llama creciente si Ai ⊆ Ai+1 se cumple
para cada i y decreciente si Ai ⊇ Ai+1 se cumple para cada i.

Proposición 1.1.5. Sea X un conjunto y sea A un álgebra en X. Entonces A


es una σ-álgebra si
(a) A es cerrado bajo la formación de uniones de suceciones crecientes de con-
juntos, o
(b) A es cerrado bajo la formación de intersecciones de suceciones decrecientes
de conjuntos.
Demostración. Primero suponga que la condición (a) se cumple. Como A es un
álgebra, podemos comprobar que es una σ-álgebra verificando que es cerrado
bajo la formación de uniones contables. Supóngase que {Ai } es una sucesión
de conjuntos que pertenecen a A . Para cada n sea Bn = ∪ni=1 Ai . La sucesión
{Bn } es creciente, y, como A es un álgebra, cada Bn pertenece a A ; por tanto
el supuesto (a) implica que ∪n Bn pertenece a A . Sin embargo, ∪i Ai es igual a
∪n Bn y, por lo tanto, pertenece a A . Ası́, A es cerrado bajo la formación de
uniones contables y también es una σ-álgebra.
Ahora suponga que la condición (b) se cumple. Basta con comprobar que
se cumple la condición (a). Si {Ai } es una sucesión creciente de conjuntos que
pertenecen a A , en consecuencia {Aci } es una sucesión decreciente de conjuntos
que pertenecen a A , por lo que la condición (b) implica que ∩i Aci pertenece a
A . Dado que ∪i Ai = (∩Aci )c , se deduce que ∪i Ai pertenece a A . Por tanto, la
condición (a) se sigue de la condición (b) y la demostración está completa.
8 CAPÍTULO 1. MEDIDAS

Ejercicios
1. Encuentre la σ-álgebra en R que es generada por la colección de todos los
subconjuntos unipuntuales de R.
2. Demuestre que B(R) es generado por la colección de intervalos (−∞, b]
para los cuales el punto final b es un número racional.
3. Demuestre que B(R) es generado por la colección de todos los subconjuntos
compactos de R.
4. Demuestre que si A es un álgebra de conjuntos, y si ∪n An pertenece a A
siempre que {An } es una sucesión de conjuntos disjuntos en A , entonces
A es una σ-álgebra.
5. Muestre con un ejemplo que la unión de una colección de σ-álgebras en un
conjunto X puede no ser una σ-álgebra en X. (Sugerencia: hay ejemplos en
los que X es un conjunto finito pequeño.)
6. Encuentre una colección infinita de subconjuntos de R que contenga a R,
este cerrada bajo la formación de uniones contables y esté cerrada bajo la
formación de intersecciones contables, pero que no sea una σ-álgebra.
7. Sea S una colección de subconjuntos del conjunto X. Demuestre que para
cada A en σ(S ), hay una subfamilia contable C0 de S tal que A ∈ σ(C0 ).
(Sugerencia: Sea A la unión de las σ-algebras σ(C ), donde (C) varı́a sobre
las subfamilias contables de S , y demuestre que A es una σ-álgebra que
satisface S ⊆ A ⊆ σ(S ) y por lo tanto es igual a σ(S ).)
8. Encuentre todas las σ-álgebras en N.
9. (a) Demuestre que Q es un Fσ , pero no un Gδ , en R. (Sugerencia: utilice el
teorema de la categorı́a de Baire, Teorema D.37).
(b) Encuentre un subconjunto de R que no sea ni Fσ ni Gδ .

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