3 Practica 5 Condicionamiento Operante
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CONDUCTUAL
Estimados alumnos, siendo conscientes que han llevado el curso de APRENDIZAJE y tener aún los
conceptos incorporados del APRENDIZAJE POR SUS CONSECUENCIAS, solo les daré un alcance
básico para su uso en el análisis funcional de las conductas disfuncionales-
Señala que una gran parte de la conducta humana no es voluntaria ni provocada por
estímulos de reacciones reflejas.
Más bien muchas conductas son emitidas espontáneamente y controladas principalmente
por sus consecuencias o contingencias.
A las conductas susceptibles de ser controladas mediante la alteración de las consecuencias
que las siguen se les llama operantes porque son respuestas que operan (tienen alguna
influencia) en el medio ambiente y generan consecuencias.
Las operantes son fortalecidas o debilitadas en función de los eventos que las prosiguen.
Ejemplos de conductas operantes son el hablar, leer etc.
A continuación, recordaremos las definiciones de los principios básicos del Modelo por sus
consecuencias
Reforzamiento:
Es el aumento en la frecuencia de una conducta, cuando ciertas consecuencias la siguen
inmediatamente. La consecuencia que sucede a la conducta tiene que ser contingente a ésta. Un
evento contingente que aumenta la frecuencia de la conducta se considera como reforzador.
Reforzamiento positivo:
Es el aumento en la frecuencia de una conducta que es seguida por un evento favorable
(reforzador positivo).
Los reforzadores positivos que incluyen cualquier evento, que, al presentarse, aumenta la
frecuencia de la conducta a la que sigue, pueden tener dos categorías: primarios o incondicionados
y secundarios o condicionados.
Los reforzadores secundarios que incluyen eventos como elogios, calificaciones, dinero etc. han
adquirido su valor mediante el aprendizaje.
Reforzamiento negativo:
Castigo:
Es la presentación de un evento aversivo, o la eliminación de un evento positivo subsiguiente a una
respuesta, que disminuye la frecuencia de esa conducta.
Castigo Positivo:
Presentación de un evento aversivo (físico y/o verbal) inmediatamente después de una conducta
adecuada o inadecuada.
Castigo Negativo:
Eliminación de un evento reforzante luego de la ocurrencia de una conducta adecuada o
inadecuada
Extinción:
Es el cese del reforzamiento de una respuesta. El no reforzamiento de una conducta resulta en la
reducción o eliminación eventual de la conducta. La diferencia con el castigo es que no se presenta
ni se quita un evento.
Estímulo discriminativo:
Es un evento que aumenta la probabilidad de que una conducta sea reforzada. Con el tiempo se
convierte él mismo en reforzador. El apareamiento frecuente de un E.D. con el reforzador le da al
E.D. propiedades reforzantes propias.
PRACTICA 1
Caso Manuel
El paciente manifiesta sentir aceleración del ritmo cardíaco y respiratorio, así como rubor facial,
sudoración corporal (cara), espalda y pecho, sensación de opresión en el pecho, tensión muscular y
temblor en las manos y piernas cada vez que es observado o tiene que hablar con personas que no
conoce, con personas de autoridad o de mayor status social, refiere: "Siento temor de hacer o
decir algo mal delante de esas personas y pienso que puedo ser criticado por ellas en cómo hablo
o en cómo me visto, o en mi manera de comportarme. Me pongo entonces muy tenso, el corazón y
la respiración se me aceleran, el cuerpo se me calienta y me suda tanto la cara que hasta se me
empañan los lentes. Si en el momento en que me observan estoy ocupado en alguna actividad,
comienzo a hacerlo más aprisa y muy torpemente porque se me caen las cosas de las manos o no
puedo recogerlas bien porque las manos me tiemblan; si esa o esas personas me siguen mirando
me pongo más rojo aún porque pienso que se están dando cuenta de lo torpe que soy. A veces no
me dicen nada, pero otras veces se ríen o me dicen "no te pongas tomate" yo no les contesto
nada, sólo bajo la mirada y sigo estando abochornado y tenso hasta que la persona se retire".
Expresa el paciente que su dificultad es mayor cuando se trata de personas del sexo opuesto, en
especial cuando se trata de mujeres de 17 a 24 años que él percibe como atractivas (“delgadas,
rasgos finos y más bajas que yo"); si estoy en la calle y veo a alguna chica que me está observando
busco evitar el encuentro y cruzo la calle sin mirarla como para que no se dé cuenta de que me
estoy cruzando por ella. Si estoy en algunos casos atendiendo en la tienda, y una de las empleadas
que trabaja en la misma empresa me observa o me habla, pienso en que no voy a saber que
decirle, entonces contesto a sus preguntas con monosílabos y bajo la cabeza para evitar
encontrarme con su mirada, siento que mi cara se calienta y todo el cuerpo tenso. Si me busca
conversación o me hace una broma (lo cual me ocurre frecuentemente ya que algunas chicas que
laboran en la tienda se acercan y me "cochinean" diciendo "me gustas" "hola papito") me pongo
muy rojo, bajo la cabeza, mientras siento como mi cara, pecho y espalda se empapan de sudor, no
les contesto nada y pienso "¿A qué hora las llaman?; ellas se ríen hasta que se cansan, recién
entonces se van y yo empiezo a sentirme tranquilo. Creo que estas chicas ya se han percatado de
que me pongo colorado y por eso me fastidian a cada momento".
PRACTICA 2
En el siguiente texto Identifique los elementos del condicionamiento operante: Estímulos
discriminativos (Externos e internos), conducta (niveles), consecuencias (Reforzamiento positivo,
negativo) y las dimensiones. Identifique si es una conducta en exceso, en debilitamiento o en
déficit.
Caso Juan:
Juan llega a la consulta y ante la pregunta del terapeuta ¿En qué podría ayudarlo? Señala:
Vengo consumiendo P.B.C. en los últimos años. Estoy consumiendo de tres a cuatro veces por
semana aunque en ocasiones se ha dado dos días seguidos. Consumo aproximadamente treinta
“tabacazos” por vez los que contienen un “kete” por cigarrillo. Mayormente he consumido a partir
de las 3.30 p.m. o 4 p.m. quedándome hasta las 8.00 p.m. Sólo en tres ocasiones he consumido
has las 4 a.m. En los últimos meses he consumido en mi dormitorio ya que me daba miedo
consumir en la calle por la policía.
ansiedad, incluso ya no tenía ganas de comer, y comía muy rápido experimentando una sensación
de que “se me revolvía todo”. Y no veía las horas en que llegaran los amigos de mi padre, que
frecuentaban la casa diariamente para jugar cartas, para poder irme a consumir. Y cuando los
amigos llegaban pedía un dinero extra a mi padre diciéndole que iría a comer un helado, dar una
vuelta, comprar cigarrillos, etc. mi padre accedía la mayor parte de las veces dándome unos S/.
5.00 más.
Una vez que tenía el dinero me dirigía al paradero para tomar un micro que me llevara a las
inmediaciones del Cine Balta en Barranco donde compraba pasta básica de cocaína. Y mientras
estaba en camino al lugar iba pensando “ojalá no me pesquen”. Una vez comprada la sustancia me
regresaba a casa. En el viaje de regreso sentía deseos de ir al baño asociado a una gran ansiedad
por fumar el primer “cigarrillo”. Cuando llegaba a casa, saludaba a los invitados, me servía un vaso
de fresco y me dirigía inmediatamente a mi habitación para armar el primer “tabacazo”. En esos
momentos mi ansiedad era de 7/10. Una vez que fumaba el primer “tabacazo” frente a la ventana,
dejaba de sentir ansiedad, pero comenzaba a sentir temor y miedo de ser descubierto
consumiendo. Por esto, cerraba la puerta mientras consumía y la abría una vez terminaba y me
ponía a realizar otras cosas como ordenar mis camisas, cajones, closet, etc. esto lo realizaba
pensando en que me ayudaría a mantenerme ocupado y así espaciar el consumo entre los
“tabacazos” los cuales fumaba cada 5 – 10 minutos. Después del primer consumo desaparecía la
ansiedad y surgía el “temor”, la “paranoia”, lo que me llevaba a vigilar constantemente la puerta
por temor a que alguien entrará. En ocasiones me echaba en el suelo para vigilar por la rendija
debajo de la puerta. Me daba mucho miedo dirigirme a la cocina por un vaso de fresco porque si
me veían podrían darse cuenta de que “estaba drogado”. A partir del segundo “tabacazo” los
armaba con mucho temor, sin reacciones de mi cuerpo, salvo en los últimos “tabacazos” que tenía
sudoración en la frente además de mucho miedo. Y por este miedo que sentía que muy pocas
veces salía a comprar más pasta para seguir consumiendo, porque “mi temor era más fuerte que el
deseo”.
Cuando consumía por las noches lo hacía en las escaleras o la cochera del edificio. En esas
ocasiones mi angustia era mucho menor o inexistente ya que mi padre dormía y no había riesgo de
ser descubierto.
Hubo dos ocasiones en que mi padre ya no me daba dinero, y empeñe mi walkman y mi reloj, con
el fin de obtener dinero para comprar la pasta. En estas oportunidades sentía mucho miedo a que
mi padre me pregunte por mis cosas, y tenía pensamientos contradictorios frente al hecho de
empeñar o no mis cosas.
Una vez terminado mi consumo, me daba una ducha, me ponía a ver televisión, fumaba cigarrillos,
cerraba la puerta de mi cuarto para “despistar” o “engañar” a mi padre. Al mismo tiempo sentía
mucha tristeza, y pensaba cosas como: “si sigo así voy a perder a mi papá, a DINA, a mi hermano”.
También tenía sentimientos de culpa y me arrepentía de haber consumido y me decía a mí mismo
“ya no voy a fumar mas, no voy a seguir con esto. No voy a volver a sacar dinero ni pedirlo”. Y
realmente pensaba en ese momento que podría dejar de consumir.
ANÁLISIS FUNCIONAL
Elementos a considerar:
Cognitivo
Fisiológico
Motor
Afectivo
Internos Internas
Dimensiones
Frecuencia
Intensidad
Duración
1.- El paciente manifiesta sentir aceleración del ritmo cardíaco y respiratorio, así como rubor facial,
sudoración corporal (cara), espalda y pecho, sensación de opresión en el pecho, tensión muscular y
temblor en las manos y piernas cada vez que es observado o tiene que hablar con personas que no
conoce, con personas de autoridad o de mayor status social, refiere: "Siento temor de hacer o decir
algo mal delante de esas personas y pienso que puedo ser criticado por ellas en cómo hablo, o en
cómo me visto, o en mi manera de comportarme. Me pongo entonces muy tenso, el corazón y la
respiración se me aceleran, el cuerpo se me calienta y me suda tanto la cara que hasta se me
empañan los lentes.
Ansiedad social
Elementos a considerar: