Sistema Religioso
Sistema Religioso
Sistema Religioso
Estos sistemas religiosos no constituyen propiamente una familia por la razón de que no
comparten una tradición jurídica común. La única característica en común radica en la
naturaleza religiosa o filosófica de su derecho.
Es evidente que la religión como el derecho se encuentran en todos los pueblos y épocas,
y que en su surgimiento son prácticamente indistinguibles entre sí, de tal forma que la
historia no menciona sociedad alguna que carezca de reglas de conducta social
estrechamente ligadas a una verdad revelada y a un consenso tradicional, aunque
cambiante en lo moral. Mientras más complejas sea la estructura social, más
institucionalizadas serán las formas que adopte el imperio del derecho y la experiencia de
lo religioso y en consecuencia, más delimitadas las fronteras que individualizan su
identidad y su esfera de acción.
En la actualidad, perviven sistemas jurídicos para los cuales derecho y religión son
prácticamente sinónimos. Casi todos cuentan con un ámbito de aplicación restringido a
determinadas materias, en particular el derecho familiar, y supeditado a un sistema
nacional jerárquicamente superior.
Clasificar las diferentes religiones no es sencillo, entre otras cosas porque no existe un
solo criterio para dividirlas en grupos.
Religiones no teístas
Este tipo de religión está conformado por corrientes de pensamiento y tradiciones que no
se articulan alrededor de la creencia en seres divinos con una inteligencia y voluntad
propias.
Por ejemplo, ciertas ramas del budismo y el taoísmo suelen considerarse religiones no
teístas. Sin embargo, también existe la posibilidad de entenderlas como filosofías, a pesar
de que una definición amplia del concepto de religión las puede incluir, ya que se basan en
dogmas y en ciertas tradiciones y rituales.
Formas de panteísmo
El panteísmo se basa en la idea de que lo divino y la naturaleza son lo mismo, una sola
unidad que no se puede dividir. Eso significa que lo divino no existe más allá de lo natural
y viceversa y que, además, no existe un sujeto metafísico que ordene todo lo que ocurre
en la naturaleza, ya que esta es autosuficiente.
En cierto modo, el panteísmo puede ser visto como una filosofía romántica a través de la
cual se ve el ateísmo.
Religiones teístas
Las religiones teístas pueden ser divididas en dos categorías: monoteístas y politeístas.
1. Religiones monoteístas
En este tipo de religión se establece claramente que solo existe un dios, el cual es la
entidad con mayor virtud y poder. En caso de existir otras entidades sobrenaturales, estas
están por debajo de esa divinidad en cuanto a su poder, o bien han sido creadas por esta.
2. Religiones dualistas
En las religiones dualistas existen dos entidades sobrenaturales del mismo rango que
encarnan principios esenciales opuestos y que luchan entre sí. Esta lucha, a su vez, explica
todos los procesos que pueden comprobarse en la naturaleza y en el comportamiento de
las personas.
3. Religiones politeístas
En esta clasificación se pueden incluir cientos de categorías y subtipos, pero incluiré solo
los tipos más amplios y conocidos.
1. Religiones semíticas
2. Religiones dhármicas
3. Religiones africanas
4. Religiones amerindias
1. Religiones transculturales
Este grupo de religiones contiene las más extendidas, como el cristianismo o el islam, que
no se ciñen a una nación o a una cultura determinada.
2. Religiones indígenas
3. Neo-paganismo
Son cultos que han nacido recientemente a partir de una recuperación de los rituales y las
creencias básicas de viejas religiones desplazadas por las dominantes. Por ello, tratan de
investigar acerca de rituales y doctrinas del pasado para generar sus símbolos y prácticas
habituales. La Wicca, por ejemplo, es un ejemplo de este grupo.
Mantienen escrituras
Las principales religiones cuentan con escrituras que cuentan su mitología, su sistema de
creencias y su código ético.
Tal es la importancia de este libro en la historia de la humanidad, que se trata del primer
libro en ser impreso, ha sido traducido a 2,454 idiomas y es la pieza literaria más vendida
en el mundo.
La Biblia también habla sobre los mandamientos que debe cumplir el cristiano de fe,
similar a como ocurre en el Corán, las escrituras sagradas del islamismo que son la base no
sólo para el desempeño religioso, sino también para la cultura islámica.
Otras religiones que cuentan con textos son el hinduismo (Shruti y Smiriti), el judaísmo
(Torah) y el budismo (relatos sobre la vida de Buda Gautama).
Otra característica común entre religiones es la adoración a una o más deidades. Esto
separa las religiones en dos variantes: monoteístas (adoran a un Dios) y politeístas (adoran
a un grupo de divinidades).
En la antigüedad, los sistemas religiosos explicaban los fenómenos naturales –entre otras
cosas– por medio de divinidades.
Las antiguas civilizaciones griega y maya, por ejemplo, eran politeístas y tenían dioses del
trueno, de la lluvia, del sol y de la luna. Otras religiones, como el compilado de creencias
hinduistas, cuentan con una gran cantidad de deidades (se cree que millones).
Las religiones monoteístas tienen por su parte a una sola divinidad y un profeta encargado
de predicarlo en la Tierra, como Dios en el cristianismo, que se considera creador del
hombre y el universo.
La religión cristiana afirma que Dios puso entre los hombres a su hijo y profeta Jesucristo
para predicar su palabra. Paralelamente se encuentran Alá en el islam y su profeta
Mahoma.
En la religión judía se encuentran las sinagogas, cuya característica posición indica que hay
practicantes judíos a los alrededores inmediatos.
Para la religión cristiana, estos templos van desde pequeñas iglesias a grandes catedrales y
culturalmente es símbolo de refugio.
Por otro lado, para los seguidores de la fe islámica, estos sitios de adoración son llamados
mezquitas y sirven además para llevar a cabo eventos sociales.
Una de las bases de la religiosidad –en algunos casos– es la creencia en una vida después
de la muerte. La religión cristiana habla de un sitio al que se va tras la muerte conocido
como paraíso (y su contraparte como infierno).
El lugar asignado dependerá del cumplimiento de los estatutos religiosos y cumplir con las
normas morales del cristianismo. Las religiones orientales como el hinduismo y el
budismo, por otro lado, manejan el concepto de reencarnación.
El hombre puede volver en formas distintas, las cuales se darán según su comportamiento
en una vida pasada.
Símbolos
Las diferentes religiones del mundo cuentan con símbolos o emblemas que las identifican.
En el pasado, cuando el hombre declaraba guerras para expandir su religión, estos
símbolos eran un estandarte.
La religión cristiana, con más de 2 billones de creyentes, cuenta con una cruz vertical en
alusión a la crucifixión de Jesucristo.
Sí
mbolos de las principales religiones
El islam es identificado por una luna creciente y una estrella, símbolo que también se
asocia con el imperio Otomano y aparece en las banderas de países que solían pertenecer
a esta región.
Por su parte, el hinduismo se identifica con el mantra “Om” escrito en el silabario indio
devánagari (ॐ), considerado el sonido primordial y base de cantos divinos.
Guía moral
Entre las religiones –como en la filosofía– podemos ver una marcada diferencia de
estatutos.
Guía espiritual
Para encaminar la moral que dicen las escrituras o los profetas, estas creencias son
dirigidas por un guía espiritual. En el cristianismo esta persona tiene un rol de pastor o
sacerdote, el judaísmo cuenta con rabinos y el hinduismo con gurús.
A su vez, pueden existir jerarquías que se establecen dentro de una institución. Por
ejemplo, la religión católica tiene como gobernante principal al Papa. Le seguirían los
cardenales, arzobispos, obispos, sacerdotes y diáconos.
Arte e iconografía
Existe una relación entre el arte y la religión que data desde la prehistoria, como el
ejemplo de las pinturas encontradas en la cueva Chauvet, parte de un rito funeral.
A su vez, existen otras festividades de gran relevancia. Hablamos del ramadán para los
musulmanes, la Navidad para los cristianos o Makha Bucha para los budistas.
Un vínculo común que tienen la mayoría de las religiones es el irrelevante papel que
tienen las mujeres en ellas. Por lo general, ellas no pueden participar en la vida clerical,
tienen limitado ciertas actividades y, por supuesto, no existen grandes profetas.