ENTREVISTA
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Q: ¿En una situación hipotética en donde quedes embarazada por accidente, qué soluciónes te
plantearías?
R: Yo abortaría, básicamente porque creo que cuando se quiere tener un bebé debe ser de
forma planeada, pues si se trata de un embarazo inesperado no tendría la misma importancia.
Hay muchos bebés en el mundo que no son queridos por sus padres y terminan siendo
maltratados por ellos. En la mayoría de los casos son familias de mamá soltera o papá soltero,
lo cual ocasiona muchos inconvenientes, o bien hay problemas en la relación de los padres que
ocasionan esos maltratos. Incluso existen teorías que afirman que el feto percibe la situación
hostil desde el vientre y esto genera problemas psicológicos en su posterior desarrollo como
persona. Si no quieres hijos, deberías tener la opción de no tenerlos. No me aparto de que es
necesario tomar las medidas necesarias para no quedar en embarazo, pero si se trata de un
accidente creo que abortar es un derecho que debería uno poder ejercer sin ser juzgado.
Q: ¿Cuál es la relevancia de tu religión, preceptos morales o tu credo sobre tal decisión? ¿Qué
otros factores inciden en ella?
R: Mi religión no acepta el aborto porque lo entiende como matar a otra persona, yo soy judía. Sin
embargo, considero que no debería haber ningún tipo de factor externo que me haga contener mi
decisión, sea este mi religión o la opinión de mis padres, pues es una decisión que yo como mujer
tengo sobre mi cuerpo, y ninguna exterioridad debería influir en esta. Las mujeres que tienen hijos
en contra de su voluntad se ven limitadas por la incidencia tan grande de un embarazo en su vida,
tanto en materia laboral o académica como en materia física y corporal, siendo esta una carga
enorme al tratarse de otro ser humano. Debido a esta incidencia, factores como la religión no
deberían ser influyentes en una decisión tan propia de alguien como lo es llevar un embarazo o
no.
Q: ¿En ese orden de ideas qué importancia cobra la vida que se está desarrollando?
R: No considero bajo ninguna circunstancia que la vida que se está desarrollando tenga más
importante que la que ya está. Mi vida es más importante que la del futuro bebé que esté en mi
vientre, no creo que la vida de un nasciturus deba ser más importante que la mía. Muchas
personas defienden el hecho de tener el hijo y darlo en adopción como argumento de protección a
esa vida, pero las condiciones en estos sitios son precarias y no garantizan mínimos de calidad de
vida, así que también hay que ser conscientes de la protección de esa vida desde ese aspecto.
Por otra parte creo que debería haber límites de tiempo para abortar, no se justificaría abortar a
los nueve meses teniendo en cuenta el sufrimiento del feto, pero de todas maneras se trata de
una decisión en donde debe prevalecer la vida y la protección de la madre, no de nadie más.
Q: Entonces respecto a las tres causales en donde se contempla el aborto legal, para ti, ¿estas
deberían ser definitivamente ampliadas?
R: Totalmente, incluso defiendo que el aborto debería ser completamente legal bajo cualquier
circunstancia o cualquier razón. Para mí, las tres causales están bien determinadas, pero debería
prevalecer el factor de que independientemente de esas tres causas se trata de mi cuerpo y mi
decisión. El simple sentimiento de incapacidad para asumir el rol de madre y darle una calidad de
vida digna a su hijo debería ser causal primante para que la interrupción se lleve a cabo, en virtud
también de ahorrarle un sufrimiento al hipotético bebé.
Q:Está comprobado que son mayores los traumas de las mujeres que abortan que los de las que
no lo hacen finalmente, ¿No crees que esto crea un precedente para la discusión?
R: Claro, pero yo creo que obviamente eso constituye un riesgo voluntario. Por más traumas que
haya después del aborto estos van a ser mucho menores que cargar con cualquier
responsabilidad no deseada con un hijo que no es querido y no lo será.
Q: Para terminar, ¿ha habido casos cercanos de familiares o amigos tuyos que se hayan visto en
tal dilema?
R: No, no, la verdad no, simplemente porque como en mi religión no es aceptado, la gente
realmente tiene mucho cuidado con no quedar en embarazo, incluso la religión establece que uno
debería permanecer virgen hasta el matrimonio, a lo cual mucha gente intenta cumplir, entonces
obviamente yo no conozco ningún caso cercano a mí donde alguien haya tenido ese dilema.