La Colonia de Santo Domingo Entre Los Siglos XVII

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La colonia de Santo Domingo entre los siglos XVII-

XVIII.

Nombre: Esmeralda Apellidos: Adames Ramírez

Sección: HIS 0110 – 09 Matricula: 100632497

Devastaciones de Osorio

En la historia dominicana se conoce como devastaciones de Osorio al hecho ocurrido


entre los años de 1605-1606, dicho acontecimiento repercutió de manera profunda en
la historia de la isla de Santo Domingo. Este suceso tuvo grandes consecuencias, entre
ellas se encuentra el surgimiento de nuevas ciudades, muerte de decenas de
habitantes de la banda norte, enormes pérdidas económicas, pero sin dudas la mayor
de todas las consecuencias fue el inicio del origen de la Rep. de Haití.

España por ser el primer país invasor manejaba el monopolio del comercio en la Isla de
Santo Domingo, lo malo de esto es que dicho comercio se vio afectado por el
contrabando.

Se conoce como contrabando la práctica de compra y venta de artículos de manera


clandestina o ilícita. En la isla de Santo Domingo, España era la que manejaba todo lo
relacionado al comercio, sin embargo surgieron otras naciones interesadas en formar
parte de este negocio. El problema aquí era que la madre patria pretendía manejar el
comercio en todo el Caribe, pero eso, no era lo que tenían en mente otras naciones
Europeas como lo fueron Inglaterra, Holanda, Francia y Portugal.

Situación economía

Para la segunda mitad del siglo XVIII, la colonia francesa de la parte occidental de la isla
de santo domingo se había convertido en la más importante fuente de riqueza para la
burguesía y la monarquía de Francia. Las plantaciones de café sumaban 3,117, y las de
algodón que eran 793 que ocupaban 323,110 tareas. El maíz, la batata, el ñame y el
mijo, se cultivaban en haciendas que reunían entre todas más de un millón de tareas, y
las matas de los plátanos sumaban más de ocho millones.

Situación social

En primer lugar, sobre la cima de la pirámide social se encontraban los grandes


propietarios blancos, las altas autoridades coloniales y los grandes comerciantes, en su
mayor parte nacidos en Francia. Mas abajos estaban los pequeños blancos, grupo al
que pertenecían los artesanos, pequeños comerciantes, artistas, empleados en baja
categoría e incluyendo la mediana y baja burocracia civil y militar, en fin gente
humilde. Luego encontramos a los mulatos, grupo humano surgido al calor del
amancebamiento de los colonos franceses blancos con sus esclavas negras.

El situado

El Situado fue una herramienta financiera que permitió mantener activos y


operacionales los elementos defensivos y administrativos del imperio español en todo
el mundo. Sin él no se habría podido pagar el mantenimiento de las fortalezas, los
sueldos de los funcionarios reales y de los militares destacados en lejanos puntos, y su
manutención. El ingreso se supone que era anual pero muchas veces el envío del
Situado fue irregular y dependió de la situación financiera de quién lo emitía y de las
circunstancias del momento. Se realizaba normalmente en efectivo, con monedas de
plata, lo que suponía para la zona donde llegaba una inyección de liquidez muy
importante para su economía y su comercio, pero a veces se enviaban mercancías que
pudiesen resultar útiles en el destino.

Ataques extranjeros

Ataques de Extranjeros. El aumento de los gastos militares se debió mucho al


establecimiento de enemigos de España la ida de La Tortuga después de 1630. Los
primeros fueron refugiados de una de las pequeñas Antillas que había sido atacada por
una gran escuadra española que se dirigía al Brasil.
Estos se dieron cuenta que la isla de La Tortuga se encontraba en mejorar posición
geográfica para realizar ataques a los buques españoles y que de ella, además, podían
trasladarse - a las regiones despobladas de la-isla de Santo Domingo para cazar -las
reses salvajes y aprovechar los cueros y el sebo. De ambas actividades surgieron con el
tiempo los filibusteros busques españoles, y los segundos eran - cazadores de reses en
las zonas despobladas de la Isla.
Presencia de aventureros en las zonas devastadas
Filibusteros
En las tripulaciones piratas, el capitán era elegido y la tripulación podía votar su
sustitución. El capitán debía ser un líder y un luchador: en un ataque, todos esperaban
que luchara junto a sus hombres y que no diera órdenes a distancia. Las ganancias se
dividían por igual, y si los oficiales recibían una parte más elevada de los botines, era
porque eran más arriesgados o tenían habilidades especiales. Las tripulaciones a
menudo navegaban sin paga, con capturas que se acumulaban durante los meses
previos a la distribución. Durante algún tiempo habían desarrollado un sistema que
garantizaba la compensación en dinero, oro o esclavos por las heridas recibidas
durante una batalla. A veces sucedía que los piratas liberaban a los esclavos cuando
capturaban un barco de esclavos porque, como forajidos, no podían ir a un puerto
para revenderlos
Bucaneros
Los primeros bucaneros fueron a menudo evadidos de las colonias. Originalmente
coureurs des bois en la isla de La Española, cazaban bueyes salvajes. La carne se
preparaba de forma nativa, es decir, secada y ahumada sobre una especie de parrilla
de madera: la barbacoa. De ahí los términos bucanero y bucanera. Esta carne
conservada permitió el comercio con barcos de pasaje o en colonias aisladas. Después
de ser expulsados de La Española por los españoles, los bucaneros encontraron refugio
en la Isla de la Tortuga, en aquel momento posesión francesa, ubicada al noroeste de
La Española, desde 1663. Operaban con el apoyo parcial de las colonias no españolas y
su actividad permaneció legal o parcialmente legal hasta los años 1700.

El mestizaje

Se abordan los orígenes del mestizaje y de la matización en Santo Domingo el


descubrimiento de América supuso una amalgama de razas y culturas sin precedentes
en la humanidad, que se manifiesta principalmente en las diversas gamas del mestizaje
iberoamericano. El proceso inicial de penetración española en América, cuyo primer
escenario fue la isla Española o de Santo Domingo, no sólo provocó un fenómeno de
fusión cultural en el orden material, sino que se corporizó en la aparición de un nuevo
tipo humano, mestizo, que vino a encarnar y a definir la nueva realidad producida por
el encuentro de dos mundos, constituyéndose en el signo más evidente de la identidad
americana. Se hace referencia a los nombres de los primeros mestizos americanos. Se
reseña la rápida desaparición de la población aborigen tras la conquista impulsó la
significativa introducción de la mano de obra de los esclavos negros, la permanente
convivencia produjo un entrecruzamiento entre españoles, indios y negros surgiendo
una gama de mestizaje de una variedad multirracial para denominar los cruces o
«castas» de individuos, como: castizo, criollo, morisco, albino, lobo, moreno, torna-
atrás, cambujo, albarazado, pardo, coyote, cuarterón o ahí-te-estás, son sólo algunos
de los nombres usados en la época.

Consolidación de la colonia francesa

En 1652 saquearon San Juan de los Remedios en Cuba, y las autoridades españolas
de Santo Domingo enviaron una expedición infructuosa contra sus bases. En 1660,
Francia continuaba en La Tortuga, pasada la expedición de castigo. A partir de allí los
franceses empezaron a colonizar la zona occidental de la isla de Santo Domingo. En
1697 el tratado de Ryswick formaliza la cesión de esa parte a Francia. La parte francesa
tomó el nombre de Saint-Domingue. La primera capital fue Cap-Français ("cabeza
francesa" o "cabo francés", actual Cap-Haïtien), puerto situado en el norte de la isla.
El 6 de junio de 1665, la Tortuga fue entregada a Bertrand d’Ogeron bajo el dominio
francés. D’Ogeron había llevado vida de bucanero, tras lo cual, de 1662 a 1664, había
contribuido al desarrollo de las Grandes Antillas asegurando el transporte de centenas
de enrolados desde Nantes a Léogane y Petit-Goâve. Sin embargo, los filibusteros
gozaban ahora de una suerte de régimen anárquico que les dejaba libres de toda
imposición y les permitía traficar a su gusto.
La llegada de la población canaria.
El gobernador Francisco Rubio y Peñaranda promovió a partir de los años 1750 la
migración canaria en Santo Domingo. En 1751, llegaron 200 familias que fueron
enviadas a Puerto Plata y Monte Cristi. En 1756, otro grupo de 60 familias fueron
destinadas a Samaná. En 1761, unas 26 familias fueron colocadas a Azua mientras que
en 1763 se esperaba unas 292 familias para ser repartidas en distintos lugares. El
nuevo incumbente Manuel de Azlor y Urries solicitó al Rey la paralización de la
inmigración canaria en 1764 y autorizó la reubicación de 61familias a Higüey.
(Hernández González, 2003, pp. 64-66). Las 781 familias arribadas legalmente a Santo
Domingo entre 1683 y 1764 arrojaron la cifra de 3,955 individuos. Debido a la alta tasa
de natalidad y fecundidad de los canarios, la población total alcanzó en 1769 los
70,629 individuos, entre los cuales 8,900 esclavos. (Moya Pons, 1986, p. 48). La élite
canaria estaba involucrada en la ganadería, la producción agrícola, el contrabando y se
interesó por el prestigio que daba los uniformes y las insignias militares. Logró
monopolizar el comercio de mercancías y de alimentos y ocupar funciones de oficiales
superiores dentro de la milicia española.

Paz y tratados entre las dos colonias ( Nimega y Ryswick).

El Tratado de Nimega se firmó el 20 de agosto de 1678 en Nimega (actuales Países


Bajos) entre las Provincias Unidas de los Países Bajos y el Reino de Francia y puso fin a
la Guerra franco-neerlandesa. La invasión de Países Bajos por Luis XIV había provocado
la formación de una gran coalición encabezada por Guillermo III de Orange (estatúder
de las Provincias Unidas desde 1672) y apoyada por España, el Imperio, Brandeburgo,
el Palatinado y Lorena en 1673, que se mostró incapaz de mantener el empuje de las
armas francesas hasta que Inglaterra se vio obligada, por la opinión pública inglesa, a
abandonar a Francia en sus planes de expansión. Así, Inglaterra firmaba una paz por
separado con las Provincias Unidas. El Tratado de Westminster (1674).

Tratado de Ryswick

es el tratado de paz que da fin a la Guerra de los Nueve Años, que vio enfrentadas
a Francia contra España, Inglaterra, las Provincias Unidas de los Países Bajos y el Sacro
Imperio Romano. Este tratado, firmado en la localidad de Rijswijk en la provincia
de Holanda Meridional, fue firmado en dos partes. La primera, el 20 de septiembre de
1697 entre Francia, España, Inglaterra y las Provincias Unidas de los Países Bajos, y la
segunda el 30 de octubre de 1697 entre Francia y el Sacro Imperio Romano Germánico.
Las negociaciones de paz comenzaron en mayo de 1697. Los representantes franceses
tenían su jefatura en La Haya y los aliados en Delft. La conferencia tuvo lugar en medio
de ambas ciudades, en el Huis Ter Nieuwburg de Rijswijk. Durante las primeras
semanas no se alcanzó ningún resultado, por lo que en junio los dos protagonistas en
la lucha, Guillermo III de Inglaterra y Luis XIV de Francia, designaron un representante
para reunirse en privado. Los dos elegidos fueron Juan Guillermo Bentinck, conde de
Portland, y el mariscal Boufflers, quienes pronto elaboraron los términos de un
acuerdo, el cual, sin embargo, no aceptaron ni el emperador Leopoldo I ni Carlos II de
España. Más tarde, España cedió y el 20 de septiembre el tratado de paz fue firmado
entre Francia y las tres potencias, Inglaterra, España y las Provincias Unidas. Guillermo
III entonces persuadió a Leopoldo I a hacer las paces, y se firmó un segundo tratado
entre Francia y el Sacro Imperio Romano Germánico el 30 de octubre siguiente.

Santo Domingo: siglo XVIII. Factores de recuperación.

En el siglo XVII La parte este de la isla de Santo Domingo , llamada Santo Domingo
Español estuvo rezagada en sus aspectos económicos, sociales y políticos, teniendo
como características: un monopolio comercial impuesto por la Casa de Contratación de
Sevilla, una economía de subsistencia basada en la agricultura y la ganadería, esta
última represento la principal unidad económica de la colonia, diferentes relaciones de
producción y el uso extensivo de la tierra. Los esclavos de Haití sentaron un
precedente de abolición definitiva de la esclavitud que representaría el inicio del fin
del sistema esclavista global.

Expansión de la colonia francesa de Saint Domingue..

En 1640, el enviado francés Le Vasseur tomó el control de la isla Tortuga. Al mando de


numerosos soldados, expulsó a los representantes del gobierno de Inglaterra, lo cual
fue un beneficio para los piratas, que encontraban facilidades para avituallarse de
víveres y pólvora. En lugar de cargar con su botín durante varios meses de viaje, los
aventureros podían dejarlo allí, y desde la isla no había más que una jornada hasta las
desembocaduras de los ríos y los puertos de lo que hoy es Haití.
En 1652 saquearon San Juan de los Remedios en Cuba, y las autoridades españolas
de Santo Domingo enviaron una expedición infructuosa contra sus bases. En 1660,
Francia continuaba en La Tortuga, pasada la expedición de castigo. A partir de allí los
franceses empezaron a colonizar la zona occidental de la isla de Santo Domingo. En
1697 el tratado de Ryswick formaliza la cesión de esa parte a Francia. La parte francesa
tomó el nombre de Saint-Domingue. La primera capital fue Cap-Français ("cabeza
francesa" o "cabo francés", actual Cap-Haïtien), puerto situado en el norte de la isla.
El hato ganadero
El hato ganadero típico del siglo XVIII era una unidad social basada en la combinación
del trabajo de los propietarios libres con el de los trabajadores esclavos, que era el
fundamental, pero que tomaba rasgos feudales y patriarcales. Esto quiere decir que los
esclavos no eran sometidos a un trato cruel, que tenían tiempo libre para dedicarse a
labores para su provecho personal del pago de una renta al amo, que tenían en gran
medida con las familias los y que tenían posibilidad de libertad después de haber
acumula tras largos años de trabajo, hechos, el trabajo de libres y esclavos hatos no se
diferenciaba demasiado por supuesto los beneficios iban n su gran mayoría a manos.
Tratado de Aranjuez
El tratado de Aranjuez de 1777, firmado entre España y Francia, estableció las
fronteras entre los territorios español y francés en la isla de Santo Domingo, en el mar
Caribe.

Con anterioridad, según los acuerdos establecidos en el tratado de Rijswijk de 1697,


España había cedido a Francia la parte occidental de la isla (la actual Haití)
conservando la parte oriental (actual República Dominicana).

En 1773 el capitán general de la parte española de la isla, José Solano, y el gobernador


de la parte francesa, marqués de Valiere, firmaron un acuerdo provisional en el que se
definían los límites entre los territorios de ambos países en la isla. En 1776 José Solano
y el conde de Ennery ratificarían este acuerdo con la ayuda de una comisión de
topógrafos que señalarían físicamente los límites establecidos.

El tratado fue firmado el 3 de junio de 1777 en la localidad madrileña de Aranjuez por


el conde de Floridablanca, en nombre de Carlos III de España, y el marqués de Ossun,
en representación de Luis XVI de Francia.En él se relacionaron minuciosamente los
límites entre los territorios de ambos países, basados en los acuerdos de 1773 y 1776,
y apoyados por un mapa topográfico levantado a tal efecto.

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