Analisis No Lineal de Muros de Mamposteria Confina
Analisis No Lineal de Muros de Mamposteria Confina
Analisis No Lineal de Muros de Mamposteria Confina
net/publication/237403957
Article
CITATIONS READS
2 836
2 authors:
Some of the authors of this publication are also working on these related projects:
Desarrollo de métodos analíticos y experimentales para la evaluación del comportamiento sísmico de estructuras View project
All content following this page was uploaded by Agustín Orduña on 21 May 2014.
RESUMEN
1. INTRODUCCION
1
M. en I. Por la UNAM. Actualmente estudiante de doctorado en la Universidade do Minho, Departamento de
Engenharia Civil, Azurém, P - 4800-058, Guimarães, Portugal.
2
Dr. Investigador.
3. MODELO NUMERICO
donde σ1 y σ2 son los esfuerzos principales, las κi son variables internas de estado o
deformaciones plásticas equivalentes; f t (κR ) y f c (κVM ) son las resistencias en tensión y en
compresión uniaxiales respectivamente; las εiP son las deformaciones plásticas principales; y
el punto sobre una variable indica derivación con respecto al tiempo. En la fig 1.a se presenta
gráficamente esta función. En compresión el comportamiento es lineal hasta un tercio de la
resistencia, a partir de este punto la relación σ-ε sigue una ley parabólica, con su máximo en f c
y con energía de fractura Gfc dada (TNO, 1996). En la fig 1.b se muestra la ley de
endurecimiento. En tensión el comportamiento es lineal hasta f t, y a partir de aquí el
ablandamiento se modela por medio de una ley exponencial con energía de fractura Gft dada.
Físicamente Gf es la energía necesaria para generar una superficie unitaria de grieta, es común
aceptar que esta cantidad es una característica intrínseca de cada material. Numéricamente es
el área bajo la curva esfuerzo contra ancho de grieta. El área bajo la curva esfuerzo-
deformación es la energía relativa de fractura gf. La relación entre la energía de fractura Gf y
la energía relativa de fractura gf es:
Gf = g f h
(2)
donde h es el ancho de banda del material, en el caso de elementos finitos, se ha demostrado
que este parámetro depende de la geometría del elemento. Para cuadriláteros es común
aceptar que h se calcula como la raíz cuadrada del área del elemento.
La mampostería tiene un comportamiento mecánico ortótropo, que se acentúa en la
etapa de comportamiento no lineal, sin embargo, en el presente trabajo se consideró siempre
comportamiento isótropo por varias razones. La primera es que actualmente se cuenta con
muy poca información experimental acerca del comportamiento ortótropo de la mampostería,
y hasta donde llega el conocimiento de los autores, no hay estudio alguno al respecto hecho
con mamposterías mexicanas, por lo que sería muy aventurado intentar asignar propiedades
ortótropas a un modelo. Además, un comportamiento isótropo debe ser suficiente para captar
la respuesta general de la estructura porque las direcciones en las que ocurre la plastificación
y el agrietamiento son muy similares en todo el muro y en toda la historia de carga.
Para el modelo de comportamiento de la mampostería se utilizó el criterio de Von
Mises para falla en compresión, y un criterio lineal para tensión, como se indica en la fig 2.a.
El modelo de ablandamiento en compresión es parabólico, como en el modelo del concreto, y
el de tensión está basado en la teoría de la fractura, con ablandamiento de Hordijk et al (TNO,
1996), fig 2.b. En la mecánica de la fractura se reconoce que al iniciarse la formación de una
grieta, la rigidez en cortante del material se reduce. Con este fin se introduce el factor de
retención de cortante β, menor que la unidad y mayor que cero, que multiplica al módulo de
cortante G, en este caso se tomó un valor constante de β=0.001. Este valor es demasiado
pequeño y no tiene una justificación física o experimental; sin embargo, numéricamente
ofrece la ventaja de evitar que los esfuerzos principales giraren lo suficiente como para que se
inicie la formación de otra grieta, con diferente orientación, en un mismo elemento.
Los elementos interfaz de cuatro nudos que se utilizaron para modelar el contacto
entre el muro y el resto de la estructura tienen rigideces elásticas, normal y tangencial, dadas
por:
f c /3 g
fc
fc
ft
fc
ft σ2
fc
4. EJEMPLO DE APLICACION
Como una aplicación práctica de los resultados obtenidos de modelos numéricos como
el presentado en la sección anterior, se propone el desarrollo de un modelo simplificado de
muro para el análisis de marcos con rellenos. El objetivo principal de proponer un nuevo
modelo para el análisis de muros diafragma es intentar reproducir lo mejor posible la
distribución de elementos mecánicos en el marco obtenidos mediante un análisis no lineal,
12.0
10.0 experimental
8.0
6.0
4.0
2.0
0.0
γγ
0.000 0.002 0.004 0.006 0.008 0.010 0.012 0.014 0.016
a) b)
Figura 6. Modelo de tres diagonales; a) Idealización del trabajo de un muro como un puntal en
compresión; b) modelo propuesto para análisis.
16.0
P (ton)
14.0 m08j
12.0
experimental
10.0
8.0
muro
6.0
4.0
marco
2.0
0.0
0.000 0.002 0.004 0.006 0.008 0.010 0.012 0.014 0.016 0.018
γ
La fig 7 muestra la proporción de la carga lateral que toman el marco y el muro para
algunos pasos de carga, desafortunadamente no se cuenta con un desglose de cargas similar
para el modelo experimental, por lo que no se puede establecer una comparación. Se puede
observar que el cortante en el muro se incrementa con una tendencia bilineal, esto refuerza la
propuesta de hacer que la diagonal central fluya al producirse el agrietamiento del muro. De
esta forma, la suma de las rigideces iniciales de las tres diagonales debe ser la rigidez de la
primera rama de esta curva, mientras que la segunda rama, define la suma de las rigideces de
las diagonales excéntricas. Se hicieron una serie de análisis del modelo descrito, en los que se
fueron modificando los módulos de Young de las diagonales hasta obtener un
comportamiento global similar al presentado por los modelos de elementos finitos y
experimental. Las resistencias se definieron de manera que la diagonal central fluya cuando
alcanza la carga de agrietamiento, mientras que las diagonales externas fluyen cuando
alcanzan la carga correspondiente con el estado último. Las propiedades de los elementos
equivalentes se determinaron por prueba y error; sin embargo, la intención es que, una vez
que se cuente con una cantidad suficiente de modelos así obtenidos para diferentes casos, se
puedan obtener reglas de aplicación general.
De la forma descrita se llegaron a definir los valores de los parámetros de los
elementos diagonales que se indican en la tabla 2 con los cuales se obtiene la curva carga
contra deformación angular que se muestra en la fig 8. En esta figura se incluyen, con fines
comparativos, las curvas obtenidas con el modelo de elementos finitos y con el modelo
experimental, además, se muestran los cortantes que toman el muro en el modelo de
elementos finitos, y las diagonales en el modelo simplificado. Se observa que el modelo de
tres diagonales se comporta en forma muy similar a los otros dos. La fluencia de las
diagonales excéntricas ocurre antes de la deformación angular de 0.006; sin embargo, esto
hace que al s curvas sean más parecidas entre sí. Asimismo, se observa que el cortante que
toman las diagonales en el modelo simplificado concuerda aproximadamente con el que toma
12.0
experimental
10.0
3 diagonales
diagonales en modelo
6.0 simplificado
4.0
2.0
0.0
0.000 0.002 0.004 0.006 0.008 0.010 0.012
γ
Figura 8. Gráficas carga contra deformación angular de los tres modelos, del muro en el
modelo de elemento finitos y de las diagonales en el modelo simplificado.
-1
2 1 0 -1 -2 1 0 -1 -2 -3
Cortante
5
4
3
2
1
0
0 2 4 6 0 2 4 6
Fuerza normal
0
-1
-2
-3
-4
-5
0 5 10 -6 -4 -2 0
CONCLUSIONES
AGRADECIMIENTOS
REFERENCIAS