D
D
D
que componen la propuesta, los actores que intervienen, los recursos y los mecanismos
de resolución de conflictos.
• Movilizar a todos los sectores y comunidades para garantizar que cada sector del gobierno
y de la sociedad asuma la responsabilidad y participe en la respuesta y en la prevención de
casos mediante la higiene de manos, el protocolo de higiene respiratoria y el
distanciamiento físico a nivel individual.
• Controlar los casos esporádicos y grupos de casos y prevenir la transmisión comunitaria
mediante la detección rápida y el aislamiento de todos los casos, la prestación de los
cuidados adecuados y la trazabilidad, cuarentena y apoyo de todos los contactos.
• Contener la transmisión comunitaria mediante la prevención del contagio y medidas de
control adecuadas al contexto, medidas de distanciamiento físico a nivel de la población y
restricciones adecuadas y proporcionadas en los viajes domésticos e internacionales no
esenciales.
• Reducir la mortalidad prestando una atención clínica adecuada a los enfermos de
COVID-19, asegurando la continuidad de los servicios sanitarios y sociales esenciales y
protegiendo a los trabajadores de primera línea y las poblaciones vulnerables.
• Desarrollar vacunas y terapias seguras y eficaces que puedan ofrecerse a escala y que
estén accesibles en función de la necesidad.
Para vencer a la COVID-19 necesitamos un enfoque que unifique en una causa común a
cada persona y comunidad, a cada empresa y a cada organización sin ánimo de lucro, a
cada departamento de cada gobierno, a cada organización no gubernamental, a cada
organización internacional y a cada órgano de gobierno regional y mundial para encauzar
su capacidad colectiva en una acción colectiva. Todo el mundo tiene un papel importante a
la hora de detener la COVID-19:
• Las personas deben protegerse a sí mismas y a los demás y adoptar conductas como
lavarse las manos, evitar tocarse la cara, practicar una buena higiene respiratoria,
distanciamiento a nivel individual, aislamiento en una instalación comunitaria o en el hogar
si están enfermas, identificarse como contacto de un caso confirmado cuando proceda y
cooperar con las medidas de distanciamiento físico y las restricciones de movimiento
cuando se solicite adoptarlas.
• Las comunidades deben empoderarse para garantizar que los servicios y la ayuda se
planifiquen y adapten en función de su opinión y contexto locales. Las funciones críticas,
como la educación comunitaria, la protección de los grupos vulnerables, el apoyo a los
trabajadores sanitarios, la detección de casos, el rastreo de contactos y el cumplimiento de
las medidas de distanciamiento físico solo pueden darse con el apoyo de todas y cada una
de las partes de las comunidades afectadas.
• Los gobiernos deben liderar y coordinar la respuesta de todos los partidos para activar y
empoderar a todas las personas y comunidades de modo que se impliquen en la respuesta
mediante la comunicación, la educación, la participación, la creación de capacidades y el
apoyo. Los gobiernos también deben reutilizar y hacer uso de toda la capacidad disponible
en el ámbito público, comunitario y privado para ampliar rápidamente el sistema de salud
pública para detectar y realizar pruebas a posibles casos, aislar y atender a los casos
confirmados (tanto en el hogar como en un centro médico) e identificar a los contactos,
rastrearlos, ponerlos en cuarentena y brindarles apoyo.
• Las empresas privadas deben garantizar la continuidad de los servicios esenciales como la
cadena alimentaria, los servicios públicos y la fabricación de suministros médicos. Las
empresas privadas pueden ofrecer conocimientos especializados e innovación para ampliar
y mantener la respuesta, principalmente mediante la producción y distribución igualitaria de
diagnósticos de laboratorio, equipos de protección individual, respiradores, oxígeno
medicinal y otros equipos médicos esenciales a precios justos, y la investigación y
desarrollo de pruebas de diagnóstico, tratamientos y vacunas.
Coordinación y planificación La implantación efectiva de estrategias adaptativas de
preparación y respuesta a la COVID-19 dependerá de la participación de toda la sociedad
en el plan y de una firme coordinación. 5 nacional y subnacional. Para proporcionar una
gestión coordinada de la preparación y respuesta a la COVID-19, deben activarse
mecanismos nacionales de gestión de emergencias de salud pública, incluida una célula de
coordinación nacional multidisciplinar o estructura de gestión de incidentes, con la
participación de los ministerios pertinentes como los de salud, asuntos exteriores,
economía, educación, transporte, viajes y turismo, obras públicas, agua y saneamiento,
medioambiente, protección social y agricultura. En algunos contextos, esto puede llevarse a
cabo con el apoyo de la autoridad nacional de gestión de desastres o de otras autoridades de
gestión de crisis
Un líder debe ser una persona con habilidades y capacidades básicas para la resolución de
conflictos, cuando una persona decide tomar el rol de líder debe tener en cuenta que se
vuelve un referente y hasta puede llegar a ser el juez donde se debe ser imparcial a la hora
de participar en la solución de un problema o conflicto. Los líderes deben asumir su
responsabilidad de encarar los problemas, buscar alternativas de solución y así ganar
autoridad y respeto.
https://www.who.int/docs/default-source/coronaviruse/covid-strategy-update-
14april2020_es.pdf