El Turpial Es El Ave Nacional de Venezuela
El Turpial Es El Ave Nacional de Venezuela
El Turpial Es El Ave Nacional de Venezuela
El turpial es una hermosa ave cantora que se distingue por su plumaje de color negro en la
cabeza, parte del pecho y alas; el resto del cuerpo es amarillo terroso, casi anaranjado. En sus
alas se aprecia una fina línea de color blanco. Llega a medir entre 15 y 22 cm. Su pico es
coniforme, haciéndose puntiagudo de forma extrema.
El 23 de mayo de 1958 fue declarada Ave Nacional de Venezuela, tras un concurso promovido
por la Sociedad Venezolana de Ciencias. Lo acompañan como símbolos Nacionales de
Venezuela el Araguaney y la Orquídea.
El turpial habita en casi todo el territorio venezolano, alcanzando en sus viajes los llanos
orientales de Colombia y Panamá, así como el resto de la zona norte de Suramérica.
Frecuentemente recorre las sabanas y selvas de galería que son zonas cálidas y de poca
precipitación, donde consigue las provisiones necesarias que constituyen su dieta, tales como
insectos, frutas, huevos de otras aves y ocasionalmente una que otra ave más pequeña.
En muchas viviendas venezolanas que aún poseen soleados jardines interiores, es costumbre de
sus habitantes colocarles trozos de diversas frutas como naranja, lechoza (papaya) o cambúr
(banano), para que acudan a comer junto a otras aves de vivos colores. El atiplado y sonoro
canto del turpial venezolano es uno de sus principales atributos, que lo convierten en una de las
especies predilectas para la observación de aves. Cada año, miles de turistas de todas las
regiones del planeta visitan Venezuela atraídos por la posibilidad de contemplar este pájaro en
sus distintos hábitats.
La Cotorra Margariteña
Patricia Mraffko
Un ave curiosa y bastante sociable, la Cotorra Margariteña (Amazona Barbadensis) Explorar
recónditos parajes de la Isla de Margarita, viviendo en la urbe de Porlamar, es una experiencia
bien gratificante. El poder alejarse de todo el concreto, calor, hacinamiento, tráfico y estrés,
para irse a perder en una de las pocas zonas casi despobladas a respirar otro aire es
particularmente relajante y más aún si en el trayecto se va disfrutando de un hobby como la
fotografía, para capturar escenas que ya solo quedan en el ámbito de lo fantástico: fauna en
libertad, horizontes infinitos y, cada tanto, la aparición de una que otra ranchería, donde
también se dan hallazgos suspendidos en el tiempo como Tacuantar: donde un artesano elabora
botes de pesca a escala con latas de leche y detalles en madera, a la usanza antigua. Fue en esta
ranchería donde tuve la suerte de poder observar por primera vez, luego de años viviendo en la
Isla, un par de cotorras margariteñas (Amazona Barbadensis).
Si bien estas estaban domesticadas por pertenecer al artesano, también comparten con el resto
de los integrantes de la ranchería, vagando libremente por la zona. Hubo una en particular con
la cual hice buenas migas desde el principio. Siguiendo todas mis peripecias fotográficas desde
los techos de láminas de asbesto y zinc, me “conversaba” incesantemente. Su curiosidad
excedía el concepto de persona ajena a la zona que podría percibir de mí. Tanta insistencia se
tradujo en ese primer plano que adjunto, donde ella francamente y sin el menor atisbo de miedo
observa el lente sin pestañear. La otra, más reacia, me observaba a lo lejos. De nada valieron
mis esfuerzos por tratar de acercarme. La Cotorra margariteña se encuentra en la península de
Macanao. El centro montañoso de esta zona es ideal para la especie porque predominan el
cactus y la tuna, y existen árboles dispersos que crecen sobre el suelo arenoso. Se alimentan de
frutas, tanto silvestres como las cultivadas, además de semillas y flores de árboles. El cactus les
asegura alimento para todo el año pues comen sus semillas, pimpollos, flores, fruta y jugo. Sin
embargo. por el hecho de vivir en una ranchería es más que seguro que disfrutan de una buena
porción de arepa o mazamorra según sea el caso , además frutas. La Cotorra Margariteña se
aparea desde fines de marzo hasta mediados de agosto, mes en el que los ejemplares jóvenes
abandonan el nido. El período de incubación es de 26 días y el de alimentación de los pichones,
de 59 días. Vive en parejas o en pequeños grupos y anida en los huecos de los troncos de los
árboles o en las grietas de los arrecifes; de los arboles prefiere el palosano, que usa como
posada temporal, pues los nidos serán ocupados por otras parejitas en los años siguientes.
Cuatro son los lugares de la península de Macanao donde la cotorra se aparea y anida: 1-
Quebrada la Chica 2- Ríos San Francisco y Guainamal 3- Río Chacual 4-Río Guayacancito. Es
una especie incluida en la lista de especies en peligro de extinción, visto que sus nidos son
asaltados por humanos para robar los pichones, para comercializarlos, o también son blanco de
depredadores de la zona.
PERRO:
Mamífero carnívoro doméstico de la familia de los cánidos que se caracteriza por tener los
sentidos del olfato y el oído muy finos, por su inteligencia y por su fidelidad al ser humano,
que lo ha domesticado desde tiempos prehistóricos; hay muchísimas razas, de
características muy diversas.
GALLO
Ave doméstica; el macho es de pico corto y arqueado, plumaje lustroso y abundante, con
una cresta roja en lo alto de la cabeza, una carnosidad colgante a cada lado de la cara y
patas escamosas con espolones largos y agudos; la hembra es de menor tamaño, cresta
más corta y no tiene espolones.