Las Víctimas, Cómo Vencer La Mentalidad de Víctima

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“Consultes hoy la palabra de Jehová”.

1 Reyes 22:5

Las víctimas
Cómo vencer la mentalidad de víctima
por June Hunt

Se cuenta que en el mundo del circo se somete a los elefantes recién nacidos a un
entrenamiento llamado “cadena del control”. En cuanto nace, se ata la pata del elefante a
una estaca. No importa cuánto trate de soltarse, no puede lograrlo. Pronto, el joven
elefante se da por vencido y deja de tirar de la cadena. Acepta el hecho de que no tiene la
fuerza para librarse. Con el tiempo, el elefante crece, llega a la edad adulta y alcanza un
enorme tamaño. Sin embargo, su mente queda en la etapa infantil. A pesar de que posee
la suficiente fuerza física como para librarse con facilidad, carece de la capacidad mental
y emocional para lograrlo… y ni siquiera lo intenta. Los adultos que en su niñez fueron
víctimas del abuso, viven esa misma contradicción. Su percepción de la realidad está
distorsionada. Se ven a sí mismos como incapaces de soltarse de aquello que los ata. ¡No
se dan cuenta de que Dios puede romper las cadenas que los atan al abuso del pasado y
que él tiene el poder para liberarlos!
“Estad, pues, firmes en la libertad con que Cristo nos hizo libres, y no estéis otra vez sujetos al
yugo de esclavitud”.
(Gálatas 5:1)

I. DEFINICIONES
A. ¿Quién es una víctima?
• Una víctima es una persona tratada de manera abusiva.
(la persona que ha sido descuidada por un esposo(a) alcohólico(a) o por padres
adictos al trabajo)
• Una víctima es una persona que ha sido timada o engañada.
(es víctima de robo y otras prácticas deshonestas)
• Una víctima es una persona que ha sido lastimada, destruida o sacrificada.
(la víctima de incesto, violencia doméstica, violación o abuso debido a un ritual
satánico)
• Una víctima es una persona sometida a la opresión, sufrimiento o maltrato.
(una víctima de cualquier tipo de abuso emocional o físico)
“¿Acaso ve Dios el dolor de mi corazón?”
Sí. El ve su dolor y lo toma muy en serio.
“Tú lo has visto; porque miras el trabajo y la vejación, para dar la recompensa con
tu mano; A ti se acoge el desvalido; Tú eres el amparo del huérfano”. (Salmos
10:14)

B. ¿Quiénes son víctimas según la Biblia?


• La palabra hebrea en el Antiguo Testamento que se refiere a víctima es cheleka, que
significa “desventurado, infortunado, desgraciado”.
“Se sienta en acecho cerca de las aldeas; En escondrijos mata al inocente. Sus ojos están
acechando al desvalido”.
(Salmo 10:8)
• En el Antiguo Testamento, las diferentes traducciones para víctima son:
el herido la víctima los muertos los accidentados

los que perdieron la vida los despreciados los heridos

los masacrados

“Mas él herido fue por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados; el castigo de nuestra
paz fue sobre él, y por su llaga fuimos nosotros curados”.
(Isaías 53:5)
• Ejemplo bíblico de una víctima
TAMAR
2 Samuel capítulo 13
Tamar, la hija del rey David, fue víctima de una horrenda violación perpetrada por su
propio hermano. Fue la inocente víctima del deseo egoísta y desenfrenado de su
medio hermano Amnón. Según el trágico relato, Tamar fue doblemente agredida,
pues Amnón nunca recibió castigo. Su padre, el rey David, nunca actuó a favor de
ella. Los pecados de lujuria, adulterio y asesinato del mismo David lo alcanzaron de
nuevo a través de los horribles actos de su propio hijo.
Dios ha dotado a cada persona de la capacidad de escoger entre lo bueno y lo malo.
En ocasiones, Dios permite grandes sufrimientos y dolor para que las personas dirijan
su mirada hacia él y se vuelvan de sus pecados. Sin embargo, en medio de las
tormentas de la vida, y las circunstancias de las que somos víctimas, Dios promete
darnos de su gracia y de su bondad para aprender y crecer durante ellas.
“Y me ha dicho: Bástate mi gracia; porque mi poder se perfecciona en la debilidad. Por tanto,
de buena gana me gloriaré más bien en mis debilidades, para que repose sobre mí el poder de
Cristo”.
(2 Corintios 12:9)

C. ¿Qué es la mentalidad de víctima?


• La mentalidad de víctima consiste en pensar que por haber sufrido algún abuso,
continúa siéndolo y se siente incapaz de liberarse aunque el abuso ya no exista.
• Las personas con mentalidad de víctima tienden a ver a otros como personas fuertes,
pero se perciben a sí mismos como débiles.
• Los niños que han sido víctimas de algún tipo de abuso fueron realmente incapaces de
detenerlo, y cuando llegan a la edad adulta, siguen asumiendo la misma mentalidad.
Esa manera de pensar destructiva necesita ser remplazada con la verdad de Dios para
aspirar al futuro de victoria que Dios ha planeado para ellos.
“¿Cómo puedo erradicar la mentalidad de víctima?”
Usted puede despojarse de esa mentalidad cambiando la manera en que se percibe
a sí mismo. Cuando era niño(a), era indefenso(a), pero ahora que ha alcanzado la
edad adulta, ya tiene capacidad para enfrentar y detener cualquier abuso.
“Cuando yo era niño, hablaba como niño, pensaba como niño, juzgaba como
niño; mas cuando ya fui hombre, dejé lo que era de niño”. (1 Corintios 13:11)

D. Traspasando los límites personales de una víctima


• Debido al abuso físico y emocional del pasado, las víctimas siguen teniendo
dificultad para definir y defender sus límites personales.
• Los adultos que poseen una mentalidad de víctima y se relacionan con otras personas
tienen dificultades para ser honestos y seguros de sí mismos.
PRUEBA PARA IDENTIFICAR SI SUS LÍMITES PERSONALES HAN SIDO TRASPASADOS
¿Tiene dificultad para tomar decisiones y apegarse a ellas cuando recibe oposición?
¿Siente la necesidad de buscar la opinión de otras personas antes de tomar una
decisión?
¿Duda en expresar su opinión cuando alguien la solicita?
¿Tiene temor de expresar lo que siente en realidad?
¿Le falta seguridad en sus convicciones?
¿Evita encontrarse con ciertas personas pues teme sentirse avergonzado(a)?
¿Tiene dificultad para mantener la mirada directa con alguna persona?
¿Tiene dificultad para pedir la ayuda de otros?
¿Hace favores a otras personas aunque sabe que no debería hacerlo?
¿Evita pedir a la gente algún objeto que usted le haya prestado?
¿Tiene dificultad para recibir una palabra sincera de felicitación?
¿Necesita en gran manera que otros lo aprueben?
¿Siempre hace más de lo que le corresponde en un trabajo de equipo?
¿Tiene dificultad para señalar situaciones injustas?
¿Dice que sí a los que desearía decir que no?
“¿Cómo puedo dejar de complacer a toda la gente?”
Comience por reconocer la verdad acerca de usted mismo estudiando la palabra
de Dios. Pídale a él que abra sus ojos y mente a su verdad. Comience a buscar la
aprobación de Dios según la Biblia y deje de buscar la aprobación de los hombres.
“Pues, ¿busco ahora el favor de los hombres, o el de Dios? ¿O trato de agradar
a los hombres? Pues si todavía agradara a los hombres, no sería siervo de
Cristo”. (Gálatas 1:10)

II. SÍNTOMAS DE LA MENTALIDAD DE VÍCTIMA


En el corazón de una víctima, las emociones están heridas, se siente indefensa y débil. La
persona cree que no puede tomar decisiones correctas en cuanto a sus circunstancias y
relaciones interpersonales. La auto estima de las víctimas está seriamente dañada y en
consecuencia desarrollan patrones de conducta destructivos. Debido a que no pudieron
controlar lo que sufrieron en el pasado, con frecuencia sienten miedo de volver a ser
controladas. Por ello, se convierten en personas controladoras. Incluso, esas dificultades
emocionales no resueltas, pueden acarrear consecuencias físicas.
“Ten misericordia de mí, oh Jehová, porque estoy enfermo; Sáname, oh Jehová, porque mis
huesos se estremecen”.
(Salmos 6:2)

A. ¿Cuáles son algunas de las dificultades emocionales?


• Baja auto-estima
—Acepta el abuso
—Acepta la culpa
—Acepta la condenación
• Temor
—Al abandono
—A las muestras de cariño
—A las figuras de autoridad
• Obsesión
—Por tener el control
—Por ser una persona demasiado seria
—Por el trabajo
• Dependencia
—De la comida
—De las drogas /alcohol
—De la gente
• Compulsión
—Perfeccionismo
—Irresponsabilidad
—De seguir siendo víctima de la situación de abuso
“Cercano está Jehová a los quebrantados de corazón” (Salmos 34:18)

B. ¿Cuáles son las consecuencias físicas?


• Problemas sexuales
—Frigidez/impotencia
—Promiscuidad
• Interrupción del sueño
—Pesadillas
—Insomnio
• Desórdenes alimenticios
—Anorexia
—Bulimia
• Alteración de la memoria
—Bloqueo de la memoria/olvido
—Regresiones mentales
“Si he sido víctima de abuso, ¿realmente hay esperanza para salir adelante?”
Si, con el poder de Dios. Puede llevar tiempo, pero el camino a la sanidad interior
puede ser un proceso positivo que le ayude a experimentar crecimiento espiritual.
“Sáname, oh Jehová, y seré sano; sálvame, y seré salvo; porque tú eres mi
alabanza”. (Jeremías 17:14)

C. ¿Cuál es el grito de angustia del corazón de una víctima?


¿DÓNDE ESTÁS DIOS?
“¿Por qué estás ausente en el tiempo de angustia?
¿Por qué permites que gobiernen los que no te temen?
Las víctimas son objeto de abuso, son pisoteadas y lastimadas,
a los hombres malvados no les importa… son soberbios y crueles.
¡Dios se ha olvidado! digo en mi corazón,
¡No está presente! ¡Nunca ve lo que sucede!
Pero vuelvo en mí y veo que tú das valor al afligido y lo levantas.
Quebrantas el brazo fuerte del mal.
Tú sí escuchas el llanto de los que sufren,
tomas al corazón herido en las alas de los ángeles,
me haces mirar la gloria de los cielos,
tú, mi Dios, ¡eres mi Padre, mi Rey!”
—Basado en el salmo 10
“El deseo de los humildes oíste, oh Jehová; tú dispones su corazón, y haces atento tu
oído”. (Salmos 10:17)

III. CAUSAS DE LA MENTALIDAD DE VÍCTIMA


Los niños que han sufrido el trauma del abuso llevan sobre sus hombros una carga imposible
de soportar. A menudo sacan conclusiones distorsionadas acerca de sí mismos y del mundo
que los rodea. Esos conceptos incorrectos llevan a esos tiernos corazones a adoptar distintos
patrones de conducta para esconder su intenso dolor. Sin saberlo, las víctimas permiten que
sus actitudes inmaduras levanten barreras que impiden una relación cercana con Dios. Sin
embargo, el Señor en su amor, utiliza los fracasos y problemas que enfrentamos en nuestras
relaciones interpersonales como adultos para resolver las dificultades enterradas de nuestra
infancia. Cuando Dios nos llama a cuentas de manera individual, su deseo es derribar las
barreras que construimos a nuestro alrededor para ¡dar libertad a los cautivos!
“Pues habiendo conocido a Dios, no le glorificaron como a Dios ni le dieron gracias, sino que
se envanecieron en sus razonamientos, y su necio corazón fue entenebrecido”.
(Romanos 1:21)

A. Barreras espirituales
PRISIONERO DEL PASADO
Pensamientos falsos Pensamientos infantiles Verdad

Culpar a Dios “Es culpa de Dios”. “El es la Roca, cuya obra es


“¡Dios es injusto!” perfecta, porque todos sus
caminos son rectitud; Dios
de verdad, y sin ninguna
iniquidad en él; es justo y
recto”. (Deuteronomio 32:4)

Enojo contra Dios “¿Cómo pudo permitir Dios“Justo es Jehová en todos


que me sucediera esto a mí?” sus caminos, y
“A Dios no le importa lo que misericordioso en todas sus
me suceda”. obras”. (Salmos 145:17)

Falta de confianza en Dios “No puedo confiar en Dios”. “Fíate de Jehová de todo tu
“No creo en Dios”. corazón, y no te apoyes en tu
propia prudencia”.
(Proverbios 3:5)

Miedo de Dios “Le tengo miedo a Dios”. “Jehová es mi luz y mi


“Quiero huir de Dios”. salvación; ¿de quién temeré?
Jehová es la fortaleza de mi
vida; ¿de quién he de
atemorizarme?”. (Salmos
27:1)

Duda del amor de Dios “Realmente Dios no me“Jehová se manifestó a mí


ama”. hace ya mucho tiempo,
“No merezco el amor dediciendo: Con amor eterno te
Dios”. he amado; por tanto, te
prolongué mi misericordia”.
(Jeremías 31:3)
B. Barreras emocionales
PRISIONERO DEL PASADO
Pensamientos falsos Pensamientos infantiles Verdad

Amargura “Desearía no haber nacido en“Mirad bien, no sea que


esta familia”. alguno deje de alcanzar la
“Desearía ser otra persona”. gracia de Dios; que brotando
alguna raíz de amargura, os
estorbe, y por ella muchos
sean contaminados”.
(Hebreos 12:15)

Culpa falsa “Todo esto es por mi culpa”. “He aquí, tú amas la verdad
“No debo decir nada, o meen lo íntimo, y en lo secreto
meteré en problemas”. me has hecho comprender
sabiduría”. (Salmos 51:6)

Vergüenza “Algo anda mal conmigo”. “Te alabaré; porque


“Soy una persona mala”. formidables, maravillosas
son tus obras; estoy
maravillado, y mi alma lo
sabe muy bien”. (Salmos
139:14)

Falta de perdón “Nunca lo(s) perdonaré”. “Y cuando estéis orando,


“Desearía estar muerto(a)”. perdonad, si tenéis algo
contra alguno, para que
también vuestro Padre que
está en los cielos os perdone
a vosotros vuestras ofensas”.
(Marcos 11:25)

Temor “¿Qué pasará si alguien se“Busqué a Jehová, y él me


entera?” oyó, Y me libró de todos mis
“¿Y si alguien me lastimatemores”. (Salmos 34:4)
otra vez?”

Desesperanza “Las cosas nunca han sido“Hubiera yo desmayado, si


buenas”. no creyese que veré la
“La vida no mejorará”. bondad de Jehová en la
tierra de los vivientes”.
(Salmos 27:13)

Egocentrismo “Nunca me divierto ni“Porque yo sé los


disfruto la vida como lospensamientos que tengo
demás”. acerca de vosotros, dice
“No puedo pensar en otraJehová, pensamientos de paz,
cosa que mi infelicidad”. y no de mal, para daros el fin
que esperáis”. (Jeremías
29:11)

A medida que las víctimas de abuso infantil crecen, tratan de sobreponerse a su tragedia e
intentan ver la vida de manera diferente. Entierran el pasado y comienzan a buscar
satisfacción persiguiendo sus metas, tales como servir al Señor, el matrimonio, la paternidad
o maternidad, el éxito financiero y otros logros personales. Infortunadamente, los patrones
que se desarrollan para poder sobrevivir aún están arraigados en su personalidad; se erigen
como una muralla de acero alrededor de las heridas emocionales e impiden al corazón ser
vulnerable, sincero y sensible para desarrollar relaciones profundas con los demás. Aunque el
anhelo del corazón es experimentar el amor maduro, para ellos es aterrador ¡el sólo pensar en
volver a escarbar en su corazón apagado!
“Engañoso es el corazón más que todas las cosas, y perverso; ¿quién lo conocerá?”
(Jeremías 17:9)

C. La raíz del problema


Las personas que siguen esclavizadas por la mentalidad de víctima no pueden ser libres.
Siguen pensando que son incapaces de cambiar la situación de abuso y ésta los sigue
controlando. Rehúsan asumir la responsabilidad de promover su recuperación emocional
y crecimiento.
CREENCIA EQUIVOCADA:
“Mi pasado en sumamente doloroso. No tengo la fuerza para cambiar. Además, no
tengo lo que se requiere para salir de esto. Otros pueden, yo no. Me paraliza el temor
a ser descubierto como un fracasado”.
CREENCIA CORRECTA:
Soy hijo(a) de Dios, Cristo vive en mí y me da el poder que necesito para cambiar.
Entrego mi temor al fracaso en sus manos y acepto la responsabilidad de trabajar para
vencer el pasado porque sé que Dios es fiel. ¡Él lo hará!
“Como todas las cosas que pertenecen a la vida y a la piedad nos han sido dadas por
su divino poder, mediante el conocimiento de aquel que nos llamó por su gloria y
excelencia”. (2 Pedro 1:3)
“Fiel es el que os llama, el cual también lo hará”.
(1 Tesalonicenses 5:24)

IV. PASOS PARA ENCONTRAR LA SOLUCIÓN


A. VERSÍCULO CLAVE para memorizar
“Tú lo has visto; porque miras el trabajo y la vejación, para dar la recompensa con tu mano;
a ti se acoge el desvalido; tú eres el amparo del huérfano”.
(Salmo 10:14)

B. PASAJE CLAVE para leer y meditar


Lea el Salmo 91.
SUS ÁNGELES GUARDIANES NOS CUIDAN
“Pues a sus ángeles mandará acerca de ti, que te guarden en todos tus caminos”
(Salmo 91:11)
Confíe en la presencia del Dios v. 1
Todopoderoso.

Confíe en que su Dios amoroso v. 2


lo defiende.

Crea en la fidelidad de Dios. vv. 3–7

Espere la reivindicación de v. 8
parte de Dios.

Viva bajo las alas protectoras de vv. 9–10


Dios.

Recuerde que Dios envía a sus vv. 11–13


ángeles para protegerlo.

Cuente con la protección del v. 14


Dios de amor.

Pida liberación de su Dios y vv. 15–16


Salvador.

C. Mecanismos de defensa para sobrevivir que terminan por derrotarnos


En ocasiones, todos recurrimos a ciertos trucos que sacamos de la manga para evitar las
situaciones desagradables y evadir nuestra responsabilidad. Pero el individuo que vive
controlado por la mentalidad de víctima se convierte en un mago de la auto-protección.
Dicha habilidad se adquiere muy temprano en la vida ya sea por ejemplo o por
creatividad propia. Son conductas aprendidas o formas de relacionarse con los demás que
llegan a ser indispensables para sobrevivir. Ese comportamiento, que a menudo opera al
nivel del subconsciente, va minando nuestra relación con nuestros seres queridos y
detiene el proceso de sanidad emocional.
“He aquí, tú amas la verdad en lo íntimo, Y en lo secreto me has hecho comprender sabiduría”.
(Salmos 51:6)
PERSONALIDAD DE SUPERVIVENCIA
• El que depende de los demás—
Delega sus responsabilidades de las distintas áreas de su vida a otros y utiliza el
pretexto de que “no puede” para obtener el apoyo de los demás. Con esa máscara que
utiliza, envía el mensaje, “Yo te necesito” y aún cuando llega a la edad adulta, sigue
recurriendo a esa arma poderosa para controlar y manipular a los demás.
• El que complace a todo el mundo—
Vive bajo el lema “paz a cualquier precio”. En su deseo de complacer a todo el
mundo, ese individuo paga un precio muy alto para obtener la aprobación y
aceptación de los demás. Cuando el complaciente llega a su edad adulta, ya ha
perdido gran parte de su identidad como persona.
• El que lo soluciona todo—
Padece de una baja auto-estima e intenta compensarla sintiéndose responsable de
solucionar la vida a los demás. Las personas que pretenden solucionarlo todo son
consideradas muy sacrificiales, interesadas en los demás y muy espirituales. Sin
embargo, esto puede ser un problema, pues están tan preocupadas por arreglar la vida
a otros, que se olvidan de sus propias necesidades.
• El que siempre logra lo que se propone—
Aparece como alguien altamente competente y parece tener todo bajo control. La
meta de esta clase de personas es hacer todo de manera perfecta. A pesar de que sí
existe cierto nivel de satisfacción personal al realizar tantas cosas tan bien,
internamente se sienten paralizados por el miedo de que se descubran sus debilidades.
• El que controla todas las situaciones—
Sólo se siente seguro cuando tiene el control de todo. Cuando alcanza la edad adulta,
el controlador llega a creer que siempre tiene la razón y que los demás lo tienen en
alta estima. El temor a mostrar vulnerabilidad es lo que hace que una ovejita se
comporte como un león.
• El mártir—
Con frecuencia sufre en verdad. Ciertamente una persona que ha sido víctima de
algún tipo de abuso merece la compasión de otros, pero el mártir pretende controlar a
los demás exigiendo compasión por tiempo indefinido por haber sido sacrificado en el
altar del abuso.
“Por tanto, nosotros también, teniendo en derredor nuestro tan grande nube de
testigos, despojémonos de todo peso y del pecado que nos asedia, y corramos con
paciencia la carrera que tenemos por delante, puestos los ojos en Jesús, el autor y
consumador de la fe, el cual por el gozo puesto delante de él sufrió la cruz,
menospreciando el oprobio, y se sentó a la diestra del trono de Dios”.
(Hebreos 12:1–2)

D. Cómo librarse de las cadenas que lo atan a un pasado abusivo


La recuperación es un proceso que lleva tiempo y tiene períodos de regresión. Puede que
tenga temporadas en las que parezca que no hay ningún avance. El primer paso es tomar
la decisión de querer recuperarse y creer que esto es posible sólo con la ayuda de Dios. Si
pone su esperanza en él, busque conocer su plan para usted y espere pacientemente, él le
mostrará el camino.
“Ciertamente ninguno de cuantos esperan en ti será confundido; serán avergonzados los que se
rebelan sin causa. Muéstrame, oh Jehová, tus caminos; enséñame tus sendas”. (Salmos 25:3–4)
“¿Cómo puedo sanar mis heridas?”
Crea y confíe en las promesas de la palabra de Dios.
“Envió su palabra, y los sanó, y los libró de su ruina”. (Salmos 107:20)
Enfrente su prisión
• ¿Siente que no hay salida para sus problemas?
• ¿Se siente incapaz de relacionarse bien con los demás?
• ¿Desconfía de los demás?
“¿Es posible que me recupere?”
¡Claro que sí! “para Dios todo es posible”. (Mateo 19:26)
“¿En quién puedo confiar para que me ayude?”
Dios sabe cómo aclarar las cosas en medio de la confusión y él es digno de toda
su confianza.
“Fíate de Jehová de todo tu corazón, y no te apoyes en tu propia prudencia.
Reconócelo en todos tus caminos, y él enderezará tus veredas”. (Proverbios 3:5–
6)
Enfrente el pasado
• Recordar que es el primer paso hacia la recuperación.
Para activar nuestra memoria, a veces Dios usa
—regresiones mentales — paternidad/maternidad

—eventos que vemos a través — el contacto físico

de los medios de comunicación — victoria sobre alguna adicción

—sueños y pesadillas — la muerte de alguien cercano

—el testimonio de otras personas

• Llevar un diario le ayuda a caminar a través de las diferentes etapas de su pasado


Escribir lo que está pensando y sintiendo le ayudará a:
—enfrentar el hecho de que sufrió abuso
—recordar cómo se sintió cuando abusaron de usted
—intentar sacar la furia que sintió cuando abusaron de usted
“¿Qué puedo hacer si tengo dificultad para recordar?”
Pida a Dios que traiga a su mente cualquier cosa que él quiera que usted recuerde.
Haga esta oración, “Señor, estoy dispuesto(a) a enfrentar cualquier situación
dolorosa del pasado. Sé que no es necesario recordar todos los detalles para
alcanzar una recuperación emocional completa. Ayúdame a recordar aquello que
tu quieras utilizar”.
“He aquí, tú amas la verdad en lo íntimo, y en lo secreto me has hecho
comprender sabiduría”. (Salmos 51:6)
Enfrente sus patrones de conducta
• “¿Qué está haciendo para satisfacer sus necesidades interiores?”
—¿Está comprometiendo sus valores para sentirse amado(a)?
—¿Es perfeccionista, adicto al trabajo o siempre quiere solucionarlo todo para
sentirse importante?
—¿Depende más de lo debido de otras personas para sentirse seguro?
“¿Cómo puedo eliminar mis patrones negativos de conducta?”
Recuerde que en Cristo es libre de los viejos patrones del pasado.
“Sabiendo esto, que nuestro viejo hombre fue crucificado juntamente con él, para
que el cuerpo del pecado sea destruido, a fin de que no sirvamos más al pecado”.
(Romanos 6:6)
Enfrente su gran secreto
• Hablar acerca del pasado ayuda a ubicarlo en la realidad.
• Contárselo a alguien le da credibilidad a su pasado.
“¿Para qué contárselo a alguien? ¡Es demasiado vergonzoso!”
Guardar el “secreto” tiene un gran poder sobre usted y el “silencio” le mantiene
en una esclavitud que debe romper.
“Péseme Dios en balanzas de justicia, y conocerá mi integridad”. (Job 31:6)
Enfrente el dolor
• El dolor confirma la situación de abuso.
• El dolor expresado es dolor liberado.
“¿Cómo puedo soportar recuerdos tan dolorosos?”
El Señor le ayudará y él llevará sus cargas. Viva un día a la vez, dependiendo del
Señor.
“Bendito el Señor; cada día nos colma de beneficios el Dios de nuestra
salvación”. (Salmos 68:19)
Enfrente al agresor, pero evite el peligro
• Ore pidiendo el tiempo de Dios y pida que él le prepare para el encuentro.
• Cuando llegue el tiempo apropiado, pida a alguien de confianza que lo acompañe.
• Abandone sus esperanzas y expectativas secretas.
• Identifique cuál es el objetivo de la confrontación.
• Comparta antes con alguien lo que piensa decir.
• Vaya preparado(a) para que el agresor niegue las cosas.
“¿Es apropiada la confrontación para un cristiano?”
Si. La confrontación es un principio bíblico. Mateo 18:15–17 incluye directrices
muy específicas para llevarla a cabo.
“Por tanto, si tu hermano peca contra ti, ve y repréndele estando tú y él solos; si
te oyere, has ganado a tu hermano”. (Mateo 18:15)
“¿Cuándo debo confrontar a la persona?”
Cuando no exista peligro. Cuando sienta la fortaleza para hacerlo y cuando lo
pueda hacer de manera positiva.
“Hay hombres cuyas palabras son como golpes de espada; mas la lengua de los
sabios es medicina”. (Proverbios 12:18)
Enfrente el perdón
• Perdónese usted mismo.
• Perdone al agresor.
• El perdón le da a Dios la libertad de tomar la venganza en sus manos.
“¿Tengo que perdonar aunque la ofensa haya sido terrible?”
El enfoque debe estar en perdonar a su agresor, no el abuso.
“Porque si perdonáis a los hombres sus ofensas, os perdonará también a
vosotros vuestro Padre celestial; mas si no perdonáis a los hombres sus ofensas,
tampoco vuestro Padre os perdonará vuestras ofensas”.
(Mateo 6:14–15)
“¿Perdonar significa que debo seguir siendo víctima del abuso?”
No. Perdonar lo libera de la falsa culpa que lo está esclavizando.
“Mas si no perdonáis a los hombres sus ofensas, tampoco vuestro Padre os
perdonará vuestras ofensas”. (Mateo 6:15)
Enfrente el hecho, Dios lo permitió
• Distinga entre el libre albedrío humano de la voluntad de Dios.
• Permitir el pecado no es lo mismo que causarlo o estar de acuerdo con los actos
pecaminosos.
• Dios juzgará todo pecado.
“¿Dónde estaba Dios cuando estaban abusando de mí?”
Dos de los atributos que Dios posee son su omnisciencia (todo lo sabe) y su
omnipresencia (esta en todas partes). Dios nunca desea el mal, y él está a nuestro
lado cuando somos víctimas del sufrimiento.
“Los ojos de Jehová están en todo lugar, mirando a los malos y a los buenos”.
(Proverbios 15:3)
“Porque no aflige ni entristece voluntariamente a los hijos de los hombres”.
(Lamentaciones 3:33)
“¿Por qué Dios no castiga al agresor?”
Él castigará a los que cometen maldad y levantará a los inocentes a su tiempo.
“Porque los brazos de los impíos serán quebrados; mas el que sostiene a los
justos es Jehová”. (Salmos 37:17)
“¿Si Dios es amor, ¿cómo pudo permitir esto?”
De la misma manera que permitió el sufrimiento de su propio Hijo Jesús, nuestro
Padre celestial tiene un propósito para permitir que sucedan las cosas.
“Porque esto merece aprobación, si alguno a causa de la conciencia delante de
Dios, sufre molestias padeciendo injustamente”. (1 Pedro 2:19)
“Pues para esto fuisteis llamados; porque también Cristo padeció por nosotros,
dejándonos ejemplo, para que sigáis sus pisadas”. (1 Pedro 2:21)
“Quien cuando le maldecían, no respondía con maldición; cuando padecía, no
amenazaba, sino encomendaba la causa al que juzga justamente”. (1 Pedro 2:23)

E. Encuentre la Promesa
¿Existe en su vida un evento aislado o una serie de experiencias dolorosas que han
apagado su corazón, ahogado su gozo y dominado su existencia hasta el día de hoy?
Todos llevamos heridas del pasado, algunos más que otros, pero sólo el que es hijo de
Dios tiene esperanza y la promesa de una nueva vida.
“No os acordéis de las cosas pasadas, ni traigáis a memoria las cosas antiguas. He aquí que yo
hago cosa nueva; pronto saldrá a luz; ¿no la conoceréis? Otra vez abriré camino en el desierto,
y ríos en la soledad”.
(Isaías 43:18–19)
“¿Cómo recibo una ‘nueva vida’ de parte de Dios?”
Una nueva vida es un regalo de Dios. Puede ser suya con sólo pedirla. Todo aquél
que abre su corazón será recibido.
“He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y abre la puerta,
entraré a él, y cenaré con él, y él conmigo”. (Apocalipsis 3:20)
• Reconozca y confiese su pecado de enojo y falta de perdón
• Confíe en que la muerte de Cristo en la cruz ha pagado la pena de sus pecados.
• Renuncie al control que tiene de su propia vida y entréguelo a Dios que lo creó.
• Reciba a Cristo en su vida y confíe en él como su Señor.
ORACIÓN PIDIENDO NUEVA VIDA
“Padre celestial, me siento sin fuerzas para enfrentar la culpa y el dolor que llevo dentro.
Gracias por tu promesa de amarme sin importar lo que haya sucedido en el pasado. Quiero
comenzar una nueva vida por medio de una relación genuina contigo. Decido confiar en ti con
todo mi corazón y acepto el perdón que me ofreces por todos mis pecados. Jesús, te pido que
entres en mi vida y que seas el Señor de ella. Gracias por el regalo de la vida eterna. Gracias
porque Cristo quiere vivir en mí y darme el poder para comenzar una nueva vida que te agrade.
En el nombre de Jesús. Amén”.
¡Dios puede romper las “cadenas que lo controlan”! ¡Permita que su poder sanador lo libre
de lo que lo ha estado atando al pasado!
—June Hunt

UNA NUEVA CADENA DE EVENTOS


“¿No es más bien el ayuno que yo escogí, desatar las ligaduras de impiedad, soltar las cargas
de opresión, y dejar ir libres a los quebrantados, y que rompáis todo yugo? ¿No es que partas tu
pan con el hambriento, y a los pobres errantes albergues en casa; que cuando veas al desnudo,
lo cubras, y no te escondas de tu hermano? Entonces nacerá tu luz como el alba, y tu salvación
se dejará ver pronto; e irá tu justicia delante de ti, y la gloria de Jehová será tu retaguardia”.
(Isaías 58:6–8)
Cuando Dios nos libra de las cadenas que nos han esclavizado por años, comenzamos a
ver su gracia fluyendo en nuestras vidas por medio de diferentes canales. Puede ser a
través del apoyo de otras personas o por medio de nuevas oportunidades de servicio. El
último paso para lograr la recuperación emocional no consiste en seguir mirando hacia
nuestro interior, sino mirar hacia afuera para ayudar a otros. Los sobrevivientes del abuso
pueden entender a otros y sentir simpatía por los corazones heridos que necesitan la
ayuda de alguien que les muestre el camino para salir de su situación. ¡En la medida que
extienda su mano hacia aquellos que tienen necesidad, Dios extenderá su mano hacia
usted, tocando su corazón con el milagro de la recuperación total!
ESLABONES DE LA NUEVA CADENA
Eslabón 1: Ponga toda su confianza en Dios para
comprobar que el que comenzó la buena
obra en usted, será fiel en completarla.

Eslabón 2: Haga de su relación con Dios su


prioridad

Eslabón 3: Aproveche las oportunidades de apoyo y


crecimiento espiritual que Dios ponga en
su camino

—Asista a una iglesia donde se predique y


honre la palabra de Dios.

—Participe en estudios bíblicos y


seminarios de madurez espiritual.

—Desarrolle nuevas amistades y permita


que le pregunten cómo va en su proceso.

Eslabón 4: Esté preparado para cuando Dios le de la


oportunidad de compartir parte de su
experiencia con alguien, aunque piense
que todavía no está listo(a).

—Pida a Cristo que le de sabiduría para


utilizar palabras apropiadas al compartir.

—Enfóquese en cómo ha encontrado en


Jesucristo la fuente de sanidad
verdadera.

Eslabón 5: Considere la oración como un pilar en su


vida.

Eslabón 6: Considere a su familia como su primera


oportunidad de ministerio.

Eslabón 7: Busque la dirección de Dios cuando él


abra nuevas alternativas de ministerio.

Eslabón 8: Vea a las personas que llegan a su vida


como “enviadas por Dios”.

Eslabón 9: Comience a ver que Dios transforma su


vida “de cenizas en belleza”.

Eslabón 10: Reconozca el tremendo valor que tiene


servir a otros.

“Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, Padre de misericordias y Dios de
toda consolación, el cual nos consuela en todas nuestras tribulaciones, para que podamos
también nosotros consolar a los que están en cualquier tribulación, por medio de la consolación
con que nosotros somos consolados por Dios”.
(2 Corintios 1:3–4)

Las porciones son tomadas de la versión Reina-Valera 1960 Copyright © 1960 Sociedades Bíblicas en
América Latina; Copyright © renovado 1988 Sociedades Bíblicas Unidas. Usado con permiso.
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Traducción: Elizabeth Cantú de Márquez
Todos los derechos reservados. Este material no puede reproducirse
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Hope For The Heart/Esperanza Para El Corazón
BIBLIOGRAFÍA

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Buhler, Rich. Pain and Pretending. “El dolor y la simulación” ed. rev y ed. aumentada.
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Dobson, James C. When God Doesn’t Make Sense. “Cuando lo que Dios no tiene sentido”
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