Ensayo - Diplomado CIDH ENVIADO

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INTRODUCCION

El desplazamiento forzado en Colombia tiene una historia que viene desde las
estructuras de la década de los 90, donde dichas estructuras eran de extrema violencia
social, conflictos internos, guerras y desapariciones forzadas que dieron lugar a
movimientos migratorios internos y obligaron a más de 50 millones de personas y en
especial de campesinos a huir de sus hogares, siendo estos últimos los más afectados
al encontrarse en territorios susceptibles de violencias y encontrarse en un entorno de
constantes enfrentamientos entre la fuerza pública y los grupos al margen de la ley.
Este flagelo del conflicto armado interno que padece Colombia constituye una de las
más valiosas oportunidades para comprender la espiral de violencia que durante
décadas ha azotado, el impacto que ha tenido la población civil que a diario evidencia
las consecuencias de estos desplazamientos, como es apenas natural; a los más
vulnerables.
En este sentido, la precitada violencia y sus factores desencadenantes han conculcado
los derechos humanos de la población civil al punto de haber sido injustamente hasta
re victimizados en su afán de búsqueda de justicia, reparación y verdad.
La población afectada y los territorios involucrados en el desplazamiento forzado
interno de dichas poblaciones vulnerables, se mostró en una creciente a partir de 1995,
que hoy en día se refleja como las significativas del país, por su nivel de crueldad y
como una estrategia de violación a los Derechos Humanos y de Derecho Internacional
Humanitario

En 1995 migraron forzadamente 89.000 personas, en 1997 migraron 257.000 (un


incremento de 188% en sólo dos años) y en 1998, 308.000. El año 1999 presentó una
reducción de 6% al terminar con 288.000 nuevas personas desplazadas. Esta
reducción es leve si se tiene en cuenta que el crecimiento entre el comienzo y el final
del periodo alcanzó el 223%. En total, en sólo cinco años tuvieron que migrar 1.123.000
personas.

Por lo anterior, podemos evidenciar que la frecuencia del desplazamiento no ha sido de


gran importancia para las ciencias sociales, ya que, estas se han centrado en el estudio
del desplazamiento como un enfoque económico, pero el impacto social que se deriva
de esta problemática y las producidas por los conflictos armados, especialmente los
internos, no han recibido igual atención. De acuerdo a esto es importante plantearnos
ciertos interrogantes para evaluar o investigar métodos que hayan sido reconocidos y
aceptados en nuestra legislación interna y de plano internacional y constitucional

¿Cuáles son las causas de estos desplazamientos? ¿A quiénes afectan? ¿Qué hace el
gobierno por los desplazados? La importancia del análisis de contexto radica en la
existencia de factores reales de poder determinantes de la masacre conocida,
estudiada, investigada y fallada por la corte interamericana de derechos humanos
como órgano colegiado dentro del sistema interamericano.

DESARROLLO
La violación de los derechos humanos resulta de una gravedad tal que en su afán por
investigar la ocurrencia o no de los hechos denunciados, la búsqueda de mejores
condiciones de vida, educación e ingresos, nos ayudan a explicar la radical
transformación de la estructura y el asentamiento de la población durante la segunda
mitad del siglo pasado: hace medio siglo 70% de la población vivía en el campo, hoy
solo 30% continúa allí. El Estado debe desplegar toda su capacidad resolutiva a fin de
establecer responsabilidades y consecuencias. Y es precisamente en dicho instante
que desde la óptica de un Estado robusto institucionalmente y responsable que asimila
como imperativo la investigación de los hechos sin escatimar recurso alguno
Desplegar el andamiaje estatal y el concurso de sus agentes resulta decisivo a la hora
de preservar el derecho, mas aún, si se trata del bien máximo de la vida (Arango:2007).
Existen diversas teorías que se han ofrecido en el país al problema del desplazamiento
forzado en Colombia: su relación con el conflicto armado, con las condiciones de vida,
pobreza y abandono; con el aceleramiento de las transformaciones económicas y la
presencia de recursos estratégicos. No es la primera vez que el país debe enfrentarse
al problema del desplazamiento interno. En diferentes momentos de su historia ha
sufrido las consecuencias políticas, sociales y demográficas de los conflictos armados.
Las acciones cometidas por los grupos armados aparecen como las principales
causantes de desplazamientos. El conflicto armado interno que libra el Estado contra
movimientos guerrilleros desde hace tres décadas y la violación de las normas del
Derecho Internacional Humanitario por parte de los actores en confrontación, son
causas directas o indirectas de desplazamiento violento. Masacres, tomas a
poblaciones, ataques indiscriminados, combates, amenazas y otras múltiples formas de
terror expresadas en torturas, violaciones, mutilaciones, secuestros, desapariciones
caracterizan el escenario del que miles de personas huyen abandonando su territorio,
sus costumbres, formas de ser y hacer y medios, modos y fuentes de subsistencia.
[Rojas 1993, 25]
Nos encontramos ante un fenómeno nuevo en nuestra historia. Pero el recrudecimiento
del conflicto armado, a lo largo de los últimos años, ha involucrado de manera
significativa a la sociedad civil y ha alcanzado proporciones superiores, que implican
diversos tipos de problemas: desde el punto de vista de los derechos fundamentales lo
que está en juego es el propio derecho a la vida y a la seguridad personal; la gente que
busca protección en otros territorios y les toca desplazarse de sus hogares enfrenta el
desmembramiento familiar, la pérdida de la tierra, de su poco patrimonio familiar, de los
lazos sociales, de su trabajo y de su entorno; causan también retos a las regiones a
donde llegan los desplazados que muchas veces se ven desbordadas en su capacidad
de atención, incorporación, inclusión social y respuestas de acción para sus
necesidades. (Guzmán Campos,1988).

1.CONTEXTO SOCIO POLITICO Y ECONOMICO


Nuestra realidad ha concitado desde 1995 la especial atención tanto de la comisión
como de la corte ya que la existencia del que ha sido denominado el conflicto armado
interno y las desapariciones forzosas más antiguo del continente y quizá nivel orbital
presupone la comisión de actos atentatorios de los derechos humanos agenciados
desde la totalidad de los actores del conflicto, dinámica ésta que ésta que ubica a la
población civil en un plano de manifiesta inferioridad e indefensión (Cancado:2003).

La violencia hace parte de los negocios en Colombia. Sobre los escenarios de la guerra
civil, confluyen las estrategias por el control de la tierra, las inversiones en
infraestructura, la gestión de los macroproyectos de desarrollo, la explotación de
recursos naturales, renovables y no renovables, las dinámicas de acumulación
impulsadas por el Estado y el sector privado, y los principales procesos demográficos
en términos de muertes, desplazamiento forzado y repoblamiento inducido por los
grupos en conflicto (Sarmiento 2000, 10).

Esta perspectiva tiene antecedentes en el informe del Instituto Interamericano de


Derechos Humanos [1997], en el que citando a Deng [1994], argumentan que las
contradicciones existentes en Colombia que inciden en el desplazamiento son entre
otras: las enormes desigualdades en la distribución de la tierra y de la riqueza, la falta
de autoridad estatal en partes enteras del país y la inaccesibilidad del poder y del
Estado para ciertos sectores de la sociedad. La cuestión de la distribución de la tierra
es el quid del problema de los conflictos sociales en Colombia[IIDH 1997, 23].

La relación desplazamiento-conflicto agrario se expresa fundamentalmente en dos tipos


de territorios: zonas de viejos conflictos agrarios donde la población campesina se
moviliza por la tierra y confluyen grupos guerrilleros, fuerzas paramilitares y agentes del
Estado, y zonas de alta concentración de la propiedad rural donde grupos de
narcotraficantes han encontrado atractivas las tierras de campesinos(as) para expandir
los cultivos, instalar laboratorios, construir pistas de aterrizaje o como simples canales
de comercialización. En estos segundos territorios, a los que ingresan dineros y
actividades de los narcotraficantes, se extiende un dominio económico y coercitivo,
puesto que penetra las estructuras regionales de poder y encarece el valor de los
predios, dando lugar a una valorización especulativa que diezma la capacidad de
adquisición del Estado y menoscaba las posibilidades de presión o la demanda
campesina frente a los terratenientes (IIDH 1997,24).
En los últimos años se ha realizado un esfuerzo importante por parte de la Red de
Solidaridad Social para generar información con la metodología de fuentes
contrastadas, que permite tener en cuenta diferentes fuentes de información para la
estimación de los desplazados. Así mismo existe el Registro Único de desplazados que
lleva la Red, pero este no puede tomarse como un buen estimador del número de
desplazados ya que contabiliza sólo a aquellos que han recurrido a las entidades
estatales en busca de ayuda y protección y les ha sido reconocida la condición de
“desplazamiento”, caso en el cual no se encuentran todos los desplazados.

En cuanto a lo económico el panorama resultaba menos esperanzador, una comunidad


marginal cuya vocación agrícola proporcionaba el congruo sustento de sus habitantes
pero que sin desearlo y contra su voluntad debían convivir tanto con la insurgencia
como con los paramilitares o grupos privados de justicia

En estos escenarios el desplazamiento es agravado por la lógica con la que sectores


económicos inmersos especialmente a la ganadería, agroindustria, explotación de
recursos naturales y narcotráfico, cooperan o financian grupos paramilitares que
encuentran en el desplazamiento el mecanismo más ágil y más barato de llevar a cabo
un reordenamiento territorial a través de una contrarreforma que despoja o paga a muy
bajos precios las tierras de la población campesina.

En síntesis, lo que se plantea es que los desplazamientos forzados de población


responden fundamentalmente a las estrategias de guerra que los grupos armados
desarrollan con gran importancia en escenarios donde los conflictos son más intensos.
Los lugares geográficos donde coincide la violencia política con la violencia relacionada
con la tenencia de la tierra (Costa Atlántica, Chocó y Antioquia-Urabá), los
desplazamientos son significante mente mayores respecto a zonas de violencia política
y menor incidencia del conflicto por la tierra (Nororiente, región andina central, sur
occidente) (IIDH 1997, 31).

2. OBJETIVOS:
2.1 OBJETIVO GENERAL.
Indagar la situación del desplazamiento forzado en Colombia, sus causas y
consecuencias a nivel económico, político y social y el impacto dentro de los territorios
receptores de las poblaciones desplazadas.

2.2 OBJETIVOS ESPECÍFICOS:


 Investigar entorno internacional a nivel de violación de los derechos humanos,
cobertura y conceptos de la Corte Interamericana de Derechos Humanos.
 Estudiar las teorías y preceptos jurídicos que protegen los derechos de las
poblaciones desplazadas a causa del conflicto armado interno. violencia
escolar en las Instituciones Educativas de malambo Atlántico.
 Analizar los determinantes empíricos del desplazamiento forzado.

3. ANALISIS DEL DESPLAZAMIENTO

Las poblaciones victimas del desplazamiento forzado, no son una sola comunidad.
Estas víctimas resultan de diversos lugares y diferentes culturas donde fueron foco
sensible de diversos grupos armados y, aunque la mayoría son campesinos pobres,
encontramos a sí mismo, empresarios, comerciantes, que también han sido víctima del
desplazamiento, además, personas pertenecientes a diferentes grupos étnicos y a
diferentes credos, sin que esto quiera decir que se trata de un conflicto étnico o
religioso. Esta heterogeneidad dificulta no solamente la caracterización de los
desplazados sino también la formulación de reivindicaciones y el diseño de políticas.
El análisis de los determinantes del desplazamiento forzado es un tema ampliamente
investigado desde distintas perspectivas teóricas, pero tiene un escaso nivel de
estructuración y formalización, lo que limita su uso como instrumento para derivar
recomendaciones de política pública. Más que existir un modelo interpretativo que dé
cuenta de los factores que determinan el desplazamiento, existe una diversidad de
hipótesis con escasa evidencia empírica. En sentido estricto se tiene un buen número
de generalizaciones empíricas (conflicto armado y sus múltiples expresiones; pobreza,
vacíos de Estado y modelo de desarrollo; dinámica económica, presencia de recursos
estratégicos y concentración de la propiedad), que son hipótesis que requieren ser
falseadas empíricamente para mejorar el conocimiento de las causas del
desplazamiento forzado.
No es fácil establecer una geografía del desplazamiento. Uno de sus denominadores
es que responde en gran medida a la dinámica del conflicto armado. Al mismo tiempo,
autores como Fajardo (1999) plantean que al tomar en consideración algunas
características de los desplazamientos tales como la temporalidad, tamaño de las
poblaciones afectadas y lugares de origen, se puede advertir que la naturaleza del
fenómeno está ligado a ordenamientos estructurales de la apropiación de la tierra y de
otros recursos estratégicos y a relaciones políticas, que trascienden los conflictos de
carácter coyuntural. El autor señala que los actuales desplazamientos internos tienden
a ocurrir –con intensidades y velocidades mayores– dentro del marco de migraciones
internas ocurridas durante décadas, las cuales han sido impulsadas por las estructuras
económicas regionales. (Fajardo 1999)

Al observar las cifras del desplazamiento se observa que las expulsiones de población
no son simultáneas en diferentes regiones y por esto se puede encontrar que un
municipio o un departamento que ha sido responsable de una buena proporción de
desplazados en un año determinado, no lo es en el siguiente, y otra toma su lugar. La
dinámica del conflicto incide también en el itinerario de la población y en los lugares de
destino. Las grandes ciudades garantizan una solución adecuada, para quienes buscan
ante todo no ser reconocidos. Sin embargo, se pueden presentar algunos hechos
geográficos sobresalientes, que dibujan la dinámica geográfica del desplazamiento.

El análisis empírico para identificar los principales factores que determinan el


desplazamiento se fundamenta en cuatro tipos de ejercicios estadísticos:

3.1 Análisis de correlación para determinar las diferencias entre municipios expulsores


y no expulsores y el grado de asociación de las siguientes variables e indicadores:
variables vinculadas al conflicto armado (acciones armadas, violaciones de DDHH y al
DIH, siembra de cultivos ilícitos, erradicación de cultivos, presencia de actores
armados, presencia de minas antipersonal, homicidios, secuestros, asesinatos a
población no armada, variables vinculadas al nivel de pobreza, calidad de vida y
presencia institucional del Estado, variables referentes al potencial económico de los
municipios (regalías mineras y petroleras, infraestructura petrolera, capacidad de gasto,
ingresos por transferencias de la nación, presencia de grandes proyectos de inversión)
y cantidad de población desplazada.

3.2 Análisis factorial para obtener combinaciones lineales de conjuntos de variables


que presentan alta correlación entre sí y son capaces de explicar, a través de factores,
relaciones multidimensionales. En particular se empleó el análisis factorial para
construir un indicador de potencial económico que recoge las relaciones entre las
variables ingresos totales, transferencias de la nación y capacidad de generar ingresos
propios.

3.3 Análisis de regresión lineal. Este procedimiento se utilizó para identificar el conjunto


de variables explicativas (independientes) capaces de explicar (estimar) la variación en
la cantidad de población desplazada.

3.4 Análisis de regresión logística. Este procedimiento se empleó para que de acuerdo


con el conjunto de variables que explican las variaciones en la cantidad de población
desplazada, se determine la probabilidad de que los municipios presenten o no,
expulsión de población.

4. NUESTRA LEGISLACION
El estado Colombia en pro de atender de manera oportuna y proteger los derechos de
las poblaciones victimas del desplazamiento forzado establece ciertos decretos y
leyes entro los que encontramos los siguientes:
Decreto 2007: Por el cual se reglamentan parcialmente los Artículos 7º,17 y 19 de la
Ley 387 de 1997, en lo relativo a la oportuna atención a la población rural desplazada
por la violencia, en el marco del retorno voluntario a su lugar de origen o de su
reasentamiento.
Decreto 2131:Por el cual se reglamenta el numeral 4 del artículo 19 de la Ley 387 de
1997, el último inciso del artículo 54 de la Ley 812 de 2003 frente a la atención en salud
de la población desplazada por la violencia y se dictan otras disposiciones.
Decreto 250 Por el cual se expide el Plan Nacional para la Atención Integral a la
Población Desplazada por la Violencia y se dictan otras disposiciones.
4633 Por medio del cual se dictan medidas de asistencia, atención, reparación integral
y de restitución de derechos territoriales a las víctimas pertenecientes a los Pueblos y
Comunidades indígenas.
Decreto 4634: Por el cual se dictan medidas de asistencia, atención, reparación
integral y restitución de tierras a las víctimas pertenecientes al pueblo Rrom o Gitano.
Decreto 4635:Por el cual se dictan medidas de asistencia, atención, reparación integral
y de restitución de tierras a las víctimas pertenecientes a comunidades negras,
afrocolombianas, raizales y palenqueras.
Decreto 4829: Por el cual se reglamenta el capítulo 111 del título IV de la Ley 1448 de
2011 en relación con la restitución de tierras.

5. JURISPRUDENCIA COLOMBIANA
La corte suprema de justicia máximo órgano de la jurisdicción ordinaria itera en varias
ocasiones la obligación que le asiste al Estado, al ser depositario de la legitima
confianza; para iniciar sin vacilación alguna la investigación pertinente para determinar
la violación de los derechos humanos de cualquier persona
No obstante, lo anterior, es fácilmente apreciable como la actitud renuente de los
agentes estatales contravino el ordenamiento jurídico y su desarrollo jurisprudencial,
ocasionando un daño a las poblaciones victimas del desplazamiento forzado.
Lo verdaderamente censurable para la corte es que, existiendo el deber legal de actuar
para evitar la consumación del acto antijurídico, no hacerlo equivale a ocasionarlo
6. REALIDAD FORMAL Vs REALIDAD MATERIAL
En la sentencia la corte pone de relieve una verdad incontrovertible, la existencia de un
voluminoso cuerpo normativo y la existencia de organismos judiciales no garantizan por
si solo la recta administración de justicia, pues en el libelo quedo demostrado como las
actuaciones a pesar de iniciarse no garantizaron justicia.

Destinar los recursos necesarios para cubrir la deuda social que el Estado colombiano
tiene con la población desplazada y que cada día es creciente en la medida en que el
fenómeno se recrudece y el tema de la prevención solo aparece en el discurso de las
entidades responsables del desarrollo de los programas.

Diseñar mecanismos presupuéstales para que las entidades territoriales asignen


recursos para la atención del desplazamiento y que dentro de estos, no sobra insistir,
se asignen recursos al tema de la prevención. Un instrumento útil para priorizar esta
tarea es la lista de 302 municipios identificados como los más críticos y en los cuales, a
través de los comités territoriales de atención y prevención del desplazamiento forzado,
previstos por la Ley 387/97, se puede dinamizar el tema de la prevención.

Esa realidad formal a la que nos referimos resulta conforme, paquidérmica, burócrata y
hasta insultante en la medida que se transforma en un aliciente para los procesados en
calidad de presuntos responsables pues conocen a la perfección los artilugios de los
cuales han de valerse para evadir la consecuencia de sus actos.

Esta lectura del desplazamiento que es la obligada y de alguna manera la ‘evidente no


es suficiente para explicar la disputa de poderes que ha hecho que el desplazamiento
haya pasado de ser ‘una más de las violaciones a los Derechos Humanos y al Derecho
Internacional Humanitario a convertirse en una de las principales estrategias de guerra
mediante la cual los actores armados ocupan posiciones estratégicas y se apropian de
recursos mediante el arrasamiento y el asesinato de población inerme. En este sentido
se invita a repensar las lecturas del desplazamiento centradas exclusivamente en el
conflicto armado y el registro de todo tipo de acciones bélicas por considerarse que
aportan poco para la búsqueda de alternativas de solución al problema en el corto
plazo.

Estas aproximaciones resultan de la creencia de que el desplazamiento es más una


consecuencia que una acción deliberada por parte de los actores armados y por lo
tanto con la firma de la paz se acaba el desplazamiento, limitan el panorama sobre el
cual el Estado debe trabajar para prevenir que nuevas personas vivan este drama. Es
decir, el desajuste de las relaciones sociales y políticas durante el periodo reciente ha
sido demasiado profundo como para que pueda creerse que la violencia pueda
desaparecer por la mera decisión de los actores organizados (Pecaut 1999,23).

7. NO REPETICION
En una sociedad tan desigual y convulsionada por el conflicto y sus actores es apenas
natural que el Estado garantice la no repetición de los hechos victimizantes tanto a
familiares como al conglomerado social al cual pertenecían aquellas comunidades que
habitaban en territorios vulnerables por los grupos armados
8. CONCLUSION

La evidencia empírica demuestra que las distintas expresiones del conflicto armado
interno son la principal causa de desplazamiento en el periodo de estudio. Combates
entre actores armados, hostigamientos a la población, actos de sabotaje, toma de
municipios, ataques a instalaciones, bombardeos de la fuerza pública, ametrallamientos
indiscriminados, siembra de minas antipersonal, la sola presencia de grupos
guerrilleros y paramilitares en algunos casos, y todas las formas de amenaza que
pasan muchas veces por la tortura y por el terror inducido mediante matanzas
"ejemplarizantes" son el escenario del que 1.123.000 colombianos y colombianas han
tenido que salir en los últimos cinco años, para pasar en muchos casos a mendigar en
las ciudades, ver empeorar sus condiciones de vida y negados sus derechos de acceso
a titularidades como el alimento, la justicia, la seguridad y la restitución de derechos
sociales, políticos, económicos y culturales.

Las violaciones a Derechos Humanos y al DIH que se expresan además mediante


desapariciones forzadas, reclutamiento de menores, uso de armas de alcance
indiscriminado, toma de rehenes, extralimitación en los métodos y medios de combate
entre otros, desplazan en promedio 37 personas. En particular se conoce que acciones
como combates, siembra de minas y masacres desplazan en promedio 22, 14 Y8
personas respectivamente.

Podemos igualmente concluir que aun cuando no se profundizo en la existencia activa


de agentes estatales se evidencio como la connivencia y aquiescencia de estos con
grupos del conflicto arremeten inmisericordemente contrala población civil al punto de
plantear la equivalencia malévola de una vaca por la vida de un humilde campesino.
Horrendo
Para finalizar, se aprecia en las lecturas y sentencias de desplazamiento forzado y la
comisión por Colombia en el entendido que se acepta la existencia de un conflicto
armado interno en donde los más sacrificados resultan ser la población civil, inerme e
indefensa. Colombia cada día lucha por fortalecer las políticas públicas de las regiones
sensibles y en donde habitan los grandes grupos armados para restituir a las víctimas y
reincorporarlas a su núcleo social y civil, con el fin de volver a la normalidad su vida y
acabar con el miedo que los invade por el hecho de pensar que pueden ser
nuevamente víctima de los actores del conflicto.

BIBLIOGRAFIA
ARANGO, R. (2007). Realizando la justicia global. Editores F. Cortes & M. Bogotá:
Siglo del Hombre Editores
CANÇADO, A. (2003). El derecho de acceso a la justicia internacional y las condiciones
para su realización en el Sistema Interamericano de protección de derechos humanos.
RAJAGOPAL, B. (2005). El derecho internacional desde abajo. El desarrollo, los
movimientos sociales y la resistencia del tercer mundo. Bogotá: Ilsa
VENTURA, M. (2007). Estudio sobre el Sistema Interamericano de Derechos Humanos.
San José: Instituto Interamericano de Derechos Humanos
[10] Fajardo, Darío. (1999). “Ordenamiento territorial de los desplazamientos
campesinos”, Periódico Universidad Nacional de Colombia 5, diciembre 12.       
[13] Instituto Interamericano de Derechos Humanos (lIDH). (1997). Consulta
permanente sobre desplazamiento interno en las Américas. Informe final. Misión in situ
de asistencia técnica sobre desplazamiento interno en Colombia. 
Pecaut, Daniel.(1999). “Respecto a los desplazados en Colombia ”, El desplazamiento
por la Violencia en Colombia. Experiencias, análisis y posibles estrategias de atención
en el departamento de Antioquia. Memorias del Foro Internacional: Desplazados
Internos en Antioquia. Comitato Internacionale per lo suillupo dei popoli (CISP).
Departamento de ayuda humanitaria de la Comunidad Europea. ECHO. Medellín.
ENSAYO DIPLOMADO – OPCION DE GRADO

ESTUDIANTE:

GRACE VARGAS FIGUEROA

INSTITUTO INTERAMERICANA DE DERECHOS HUMANOS.

UNIVERSIDAD DEL ATLANTICO


FACULTAD DE DERECHO

BARRANQUILLA JULIO DE 2019

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