Evolucion Del Derecho Mercantil en Venezuela
Evolucion Del Derecho Mercantil en Venezuela
Evolucion Del Derecho Mercantil en Venezuela
4. En el siglo XX el derecho mercantil sufre unos cambios debido a los surgimientos de nuevos
sistemas económicos como lo fue: CAPITALISMO Y COMUNISMO. Este último tuvo ideas que
fueron de gran influencia en el derecho mercantil ya que crean normas de protección al
comerciante, la tutela del consumidor, así mismo el comunismo desincorpora el derecho privado y
crearon sistemas de seguridad social a cargo del estado, en Venezuela se promulga el código de
comercio que está inspirado en el código de comercio francés y el español, con unas ideas de
código de comercio chileno. En 1955 obtiene una reforma la cual adapta normas del código civil,
además el siglo XX da inicio a un fenómeno económico llamado globalización, este es
caracterizado por el movimiento de personas al extranjero, movimientos de capital de un país a
otro, el desarrollo acelerado y la democratización de las telecomunicaciones, debido a esto son
creadas las organizaciones que se encargan de redactar leyes que tiene valor internacionalmente,
como por ejemplo, COMISIONES DE LAS NACIONES UNIDAD PARA EL DERECHO MERCANTIL
INTERNACIONAL, por lo tanto ya no se regirán por las normas internas de un país sino también por
la realidad global. Aun así seguimos siendo parte de la globalización, debido a la crisis global del
2007 deja a la intemperie una serie de deficiencia en la regulación, que pone en duda el
capitalismo y deja a ver que próximamente abran nuevas reforma al derecho mercantil, pero aun
es imposible determinar su rumbo..
El devenir del tiempo, un exceso de confianza o simplemente una falta de atención pueden dar
lugar a que existan, treinta o cuarenta años después, documentos privados, como por ejemplo
contratos, que no se han elevado a escritura pública y que pueden y dan lugar a numerosas visitas
a los Juzgados.
Pese a que la acción de elevar a públicos documentos privados no prescribe y por lo tanto puede
realizarse en cualquier momento, dicha acción queda supeditada a que el contrato tenga vigencia
y eficacia.
El hecho que sea imprescriptible no conlleva necesariamente que no tenga un límite o control: no
es legítimo su ejercicio cuando contradice la situación fáctica y jurídica legítimamente consolidada.
Las cláusulas o compromisos de los contratos privados expresan las voluntades de las partes, por
lo que nace precisamente también de dicho acuerdo la necesidad o no de elevar a público un
documento privado. Es decir, se trata de una facultad de los integrantes, que se exterioriza ante
terceros mediante la pertinente escritura pública ante Notario.
Aunque se trate de una facultad sin plazo fijado, ello no implica que pueda ejercitarse de forma
ilimitada en cualquier circunstancia y con cualquier propósito. Con independencia del tiempo
transcurrido desde el otorgamiento del documento privado, para admitir el ejercicio de la facultad
de elevarlo a público, hay que atender a otras circunstancias.
Por un lado, no debe utilizarse la facultad de elevar a público un contrato celebrado en documento
privado cuando el contrato no se ha cumplido, y por tanto, las pretensiones dirigidas al ejercicio
de los derechos relativos al cumplimiento de sus prestaciones hayan prescrito. Entonces, mediante
su elevación a documento público se estaría otorgando eficacia a unas obligaciones que ya no son
exigibles.
Imprescriptibilidad
Debemos tener claro dos conceptos diferentes que pueden llevar a equívoco: por un lado nos
encontramos con el cumplimiento del contrato, y por otro lado, el plazo para elevara público o no.
En el primer caso, determina que el contrato tiene que ejecutarse en los términos pactados, por lo
tanto, será la voluntad de las partes manifestada en las cláusulas del contrato la que determine
cuándo se debe cumplir el mismo.
En el segundo caso, cuando hablamos de la elevación a público del documento, no podemos habla
de un plazo determinado o prescripción, porque el otorgamiento de la escritura es considerado
como medio para hacer efectivas las obligaciones contractuales cumplidas, es una cuestión
accesoria.
Si no se cumple lo acordado en el contrato privado, no puede exigirse por una de las partes que se
eleve a escritura pública, pues carecería en absoluto de efecto jurídico, al no resultar viable que a
través de dicha pretensión se pudiera obtener de modo indirecto el cumplimiento de las
auténticas obligaciones derivadas del contrato, y en concreto la entrega o “traditio ficta” de la
cosa con la finalidad de posibilitar el acceso del contrato al Registro de la Propiedad.
En definitiva, es esencial que hayan prescrito las pretensiones de cumplimiento del contrato de
modo que, a través de la solicitud de otorgamiento de escritura pública lo que se pretende es
lograr el cumplimiento de un contrato cuando ya están prescritas las acciones para exigirlo.
La escritura pública.
Los notarios han de velar por la regularidad, no sólo formal sino también material, de los actos o
negocios jurídicos que autoricen o intervengan, por lo que están sujetos a un deber especial de
colaboración con las autoridades judiciales y administrativas.
Puede encontarar más información detallada acerca de este tema en nuestro dossier ELEVACIÓN
A ESCRITURA PÚBLICA DE DOCUMENTOS PRIVADOS.