Comportamiento Organizacional en Tiempos de Covid-19

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Introducción.

El comportamiento organizacional, como temática, se refiere a todo lo relacionado con


las personas en el ámbito de las organizaciones, desde su máxima conducción hasta el
nivel de base, las personas actuando solas o grupalmente, el individuo desde su propia
perspectiva hasta el individuo en su rol de jefe o directivo, los problemas y conflictos y
los círculos virtuosos de crecimiento y desarrollo. Todo esto y mucho más implica el
comportamiento de las personas que integran una organización, sea esta, de cualquier
tipo y tamaño.

Una de las más importantes razones por la cual hay que estudiar el comportamiento
organizacional es que ciertas problemáticas son comunes a ciertas organizaciones, por
lo cual su estudio y comprensión ayudad a conocer cuál es la mejor manera de
abordarlas. En este caso se estudia desde la perspectiva del covid-19 ya que el mismo ha
forzado a las empresas a adaptar sus modelos de negocio, a innovar en procesos,
productos y canales de comercialización.
¿Qué es el comportamiento organizacional?

Es un campo de estudio que investiga el impacto que tienen los individuos, los grupos y
las estructuras sobre el comportamiento dentro de las organizaciones, con el propósito
de aplicar tal conocimiento al mejoramiento de la eficacia de la organización.

Comportamientos organizacionales en tiempos de covid-19.


La situación generada por la pandemia del COVID-19 ha forzado a las empresas a
adaptar sus modelos de negocio, a innovar en procesos, productos y canales de
comercialización. Pero lo que se observa es que cada empresa ha mantenido
ciertos comportamientos respecto a esta situación. Grandes organizaciones tienen la
tendencia y necesidad de explotar sus activos para poder sobrevivir en situaciones de
crisis.

Desde el Innova Institute de La Salle-URL, se considera interesante analizar cómo han


sido los comportamientos de las organizaciones en esta situación de crisis, si han sido
de carácter explotativo, explorativo o solo un comportamiento oportunista de
aprovechar una ventaja durante el tiempo que dure la crisis. El estudio analiza por
sectores ejemplos que pueden ilustrar dichos comportamientos:

• El comportamiento oportunista para sobrevivir a la crisis: una vez que termine, las
empresas vuelven a sus actividades habituales.

• El comportamiento explotativo ante situaciones de crisis: explotan los recursos de una


manera diferente, pero no hay cambios de fondo en las competencias de la organización.

• El comportamiento exploratorio: en donde se modifican las competencias de la


organización para realizar sus actividades de una manera o con un objetivo diferente.
Industria del turismo.

La industria del turismo es una de las más afectadas por el brote de Covid-19 a nivel
mundial. De acuerdo con la ONU, las pérdidas podrían rondar los 1,2 billones de
dólares (en un escenario favorable) pero podría alcanzar los 3,3 billones si se prolonga
todo el año. En América Latina, países como República Dominicana (donde el sector
aporta de manera considerable en su PIB), México y Colombia estarían entre los más
afectados.

Actualmente, cómo serán Las industrias del turismo en el POST-Covid es una cuestión
en la que ya están trabajando los expertos y empresas del turismo; donde se está
sufriendo y se espera un elevado impacto negativo económico y social.

Realizando un breve análisis, es de entender que esta crisis obligará a tomar fuertes
medidas y cambios no sólo a corto plazo; sino que obligará a las industrias a plantearse
sus formas de interacción e incluso de servicios y estrategia de marketing a largo plazo.
Industria de la Automatización.

La pandemia ha tomado por sorpresa al mundo y ha comenzado a impactar de forma


considerable todas las industrias, unas de las más destacadas son sin duda las que
cuentan con pisos de fábrica, para las cuales la aceleración de procesos de
automatización podría ser clave para reestablecer un cierto orden económico.

La mano de obra ha sido un problema con el que se ha tenido que lidiar por años, ante la
etapa crítica que se vive en la actualidad, miles de fabricantes se cuestionan por la
importancia que debieron de darle a la automatización inteligente de su negocio junto
con la mano de obra.

Es un hecho que la mayoría de los mercados internacionales, la automatización no se ha


valorado ni tomado tan en serio, como deberían, y el escenario actual lo demuestra el
cierre de cientos de fábricas y negocios Un ejemplo muy claro que evidencia estos
comportamientos es el sector de la automoción. Las grandes compañías de fabricación
de automóviles, con una gran plantilla de empleados, han sido algunas de las empresas
que más han sufrido la crisis, ya que ha disminuido considerablemente la demanda y se
han cortado sus cadenas de suministros, que provenían de otros países y continentes. En
esta situación, han visto la posibilidad de explotar capacidades ociosas para la
producción de respiradores artificiales. Por ejemplo, SEAT pudo adaptar su línea de
fabricación de coches a respiradores en siete días, adaptando sus equipos y componentes
para fabricar un producto que es totalmente diferente a los coches. Esa capacidad para
explotar sus recursos en el corto plazo contribuyó a paliar la crisis sanitaria de falta de
respiradores, por un lado; y, por otro, a generar ingresos extras a la compañía. Gracias al
esfuerzo y la capacidad de explotación de SEAT, se han podido fabricar alrededor de
300 respiradores diarios, lo que supone el 75% de la producción nacional.

Así mismo, todas las grandes compañías del sector están destinando gran cantidad de
recursos a la exploración de nuevos modelos de coches, ya sean híbridos o eléctricos,
con menores emisiones de gases contaminantes.
Industria de los Alimentos y de la restauración.

La industria de los alimentos se caracteriza por la variedad de actividades que requiere


cada uno de los eslabones de su cadena y las particularidades que pueden darse en los
mismos, tanto en la producción de alimentos, su industrialización o su preparación o
venta para el consumo, poniendo un énfasis principal en la explotación.  Es así como la
siembra y cosecha de alimentos, al ser este un producto necesario para la supervivencia
y de alta demanda, presiona a que las pocas labores de exploración sean rápidamente
implementadas, como ha sido el caso de los alimentos transgénicos, que, si bien su
exploración fue criticada por los potenciales efectos negativos para el cuerpo humano,
su capacidad para calmar el hambre en regiones del planeta vulnerables es más fuerte y
promueve una rápida explotación.

En cuanto al control del cultivo y la logística de distribución, sí se ven capacidades de


exploración, en especial después del boom de las plataformas y el desarrollo de
los marketplace, con la inclusión de un renglón de alimentos en espacios como Alibaba
en países desarrollados, o la creación de plataformas para eliminar las centrales de
abastos y los intermediarios en países productores sudamericanos como Comproagro y
Fruvi para mercados locales en Colombia. O para mercados internacionales, cuyo
crecimiento ha enfrentado la resistencia al cambio de los productores tradicionales, pero
que, ante la situación que ha llevado el COVID-19 se han vinculado de forma
oportunista a las iniciativas digitales mencionadas, lo que en el PostCOVID-19 les
permitirá conservar las dos modalidades de comercialización.

De igual forma, la industria de los restaurantes se caracteriza por su énfasis en la


explotación, donde las iniciativas que surgen tienden a ser rápidamente capitalizadas en
ofertas para el mercado, mediante nuevos platos, comida saludable, alimentos que
responden a comunidades y estilos de vida alternativos. Sin embargo, estos cambios
tienden a ser pequeños en la producción, orientando la exploración hacia su principal
propuesta de valor: “la experiencia del comensal” en el sitio de consumo.
Ante los retos del confinamiento, este eslabón también se ha visto alterado, migrando a
procesos de venta a domicilio a través de plataformas digitales de distribución como
Glovo, Rappi o Uber Eats, o transformando su mercado hacia el institucional para evitar
que las pérdidas económicas sean mayores. Sin embargo, esta transformación será
temporal, si bien se espera que un gran número de restaurantes conservarán su
participación en estas plataformas de distribución, su operación retornará a la venta de
experiencias como principal ventaja competitiva.

Finalmente, el eslabón de la industria es quizás el de mayor capacidad de exploración,


donde se investigan permanentemente nuevas formas de producir, empacar y agregar
beneficios hacia los alimentos funcionales, y donde muchas de las propuestas deben
esperar pruebas y garantías de calidad y seguridad antes de salir al mercado. Además, si
a esto se le suma el temor natural de los consumidores y las restricciones que el efecto
económico del confinamiento conllevará, probablemente se demorará más aún pasar a
labores de explotación en este eslabón.
Industrias farmacéuticas.

La propagación del nuevo coronavirus es una gran amenaza para la salud pública de
todos los países afectados. Estas industrias apoyan plenamente los esfuerzos que
asegurarán que la comunidad científica pueda responder rápidamente a los desafíos que
esta pandemia representa.

La pandemia que vivimos exige que las organizaciones sepan capitalizar sus
capacidades y recursos, y aprovechar la riqueza del capital humano, para responder a la
altura de esta retadora situación. Sin duda nos ha tocado vivir una nueva condición
retadora que nos exige adaptación creativa, reinvención, resiliencia y el
redescubrimiento de los valores que nos hacen humanos. En esta pandemia causada por
Covid-19, mucho se ha reflexionado, escrito y dicho de esta nueva situación global que
nos ha hecho conscientes de nuestra vulnerabilidad como seres humanos y de la
debilidad de aquella ilusión de control que hemos cultivado con modelos mentales de
egocentrismo y antropocentrismo. Estos modelos, necesariamente, se están y estarán
reajustándose inevitablemente ante la nueva realidad que enfrentamos, misma que, a su
vez, construimos con nuevas perspectivas que generan transformación de fondo y de
forma.

El caso de Grifols La empresa ha puesto gran parte de sus activos a desarrollar a partir
de sus conocimientos e investigación un tratamiento para el COVID-19 y también a
fabricar a gran escala un test de diagnóstico del virus, más efectivo que los utilizados
actualmente. Es importante, resaltar que las capacidades organizacionales se basan en el
conocimiento y residen en las personas y en su capital intelectual, así como en sus
procesos y en sus sistemas organizacionales que tienen implicado conocimiento tácito.

Ejemplos sobresalientes de las capacidades del de GRIFOLS que hacen posible el


despliegue exitoso de la estrategia, son las competencias técnicas disciplinares en los
diferentes ámbitos que se requieren para realizar un análisis sólido de la situación y de
las mejores opciones para la toma de decisiones integral y fundamentada, así como
también, la capacidad de combinar y articular los recursos y las capacidades de la
organización. Otra organización es GSK está participando en el esfuerzo de
investigación colaborativa del Acelerador terapéutico COVID-19.
10 medidas que deben adoptar las empresas para afrontar una
pandemia.

En un momento en el que la mayoría de los países están luchando contra la pandemia, el


papel que desempeñan las empresas en este escenario es fundamental. Como actores
clave de la economía, la responsabilidad social de las compañías consiste en llevar a
cabo una buena gestión empresarial y, principalmente, garantizar la seguridad y la
organización adecuada de todos sus empleados. En este momento, las empresas se están
enfrentando a diversos riesgos estratégicos y operacionales, como el retraso o la
interrupción del suministro de materias primas; los cambios en la demanda de los
clientes; el incremento de los costes; las reducciones logísticas que provocan retrasos en
entregas; los problemas de protección de la salud y la seguridad de los empleados; la
insuficiencia de mano de obra; o las dificultades relacionadas con el comercio de
importación y exportación. Partiendo de un análisis de las principales prácticas
empresariales, en materia de planificación de continuidad de negocios y gestión de
emergencias, exponemos 10 medidas para hacer frente con garantías a esta situación:

1. Establecer equipos de toma de decisiones de emergencia.

Todas las compañías deberían contar con un “Equipo de Respuesta a


Emergencias" que establezca la estrategia y marque los objetivos del plan de
emergencia, garantizando que se toman las decisiones de la manera más rápida y
acertada posible. Este grupo también debería evaluar los puntos fuertes y débiles de la
compañía y de sus profesionales para ajustar procesos en momentos de crisis.

2. Evaluar los riesgos y establecer los mecanismos de respuesta de emergencia.

Muchas empresas multinacionales han establecido "planes de contingencia para


emergencias" o "planes de sostenibilidad empresarial", que suelen
aplicarse inmediatamente en caso de una emergencia importante. Si una empresa no
tiene un plan de este tipo, debe realizar una evaluación exhaustiva de todos los riesgos
de inmediato, analizando el capital humano de la compañía, las subcontrataciones, la
cadena de suministro, los clientes y el sector público (gobiernos).
De acuerdo con la evaluación de riesgos, la empresa debe responder a cuestiones
relacionadas con el espacio de oficinas, los planes de producción, las adquisiciones, el
suministro y la logística, la seguridad del personal y el capital financiero, así como
organizar otros aspectos relevantes relacionados con los planes de emergencia y la
división del trabajo.

3. Establecer un mecanismo de comunicación de información positiva para


empleados, clientes y proveedores, y crear documentos de comunicación
estandarizados.
Es necesario mantener una comunicación fluida tanto con los públicos internos como
con los externos, así como reforzar los servicios de atención al cliente. De esta forma
evitaremos que se produzca una opinión pública negativa. Al mismo tiempo, el sistema
de información establecido en la empresa debe utilizarse para recopilar, transmitir y
analizar la información sobre epidemias y emitir avisos de riesgo inmediatos.

4. Mantener el bienestar físico y mental de los empleados.


Según una encuesta realizada recientemente por Deloitte, el 82% de las empresas afirma
que la flexibilidad en el trabajo es, en estos momentos, el medio más importante de
gestión de los profesionales.

Es recomendable que las empresas establezcan mecanismo de vacaciones y trabajo


flexible, utilizando los medios técnicos y tecnológicos disponibles para establecer
métodos de trabajo no presencial durante periodos extraordinarios. Además, la empresa
debe establecer un sistema de vigilancia de la salud de los empleados y mantener la
información personal sobre la salud de estos con total garantía de confidencialidad.

La empresa debe garantizar la seguridad de los entornos de trabajo mediante la limpieza


y desinfección de estos espacios, cumpliendo con los requisitos de gestión de la higiene
de las autoridades de salud pública nacionales y regionales para los periodos de
enfermedades infecciosas graves. La empresa debe reforzar la educación sobre
seguridad epidémica, establecer directrices contrastadas de autoprotección de los
empleados y aumentar la conciencia sobre la seguridad y la prevención de riesgos.

 
5. Centrarse en los planes de respuesta por los riesgos generados en la cadena de
suministro.

Las empresas suelen contar con materias primas suficientes y diferentes canales de
adquisición de las mismas para no tener que detener la producción o reemprenderla en
cuanto pase el periodo de cuarentena. En la gestión de los inventarios, las
organizaciones deben tener en cuenta factores como el bloqueo del consumo, el
correspondiente aumento de los costes financieros y la presión sobre el flujo  de
efectivo. Al mismo tiempo, en las industrias con ciclos de producción prolongados, las
organizaciones deben prepararse con antelación para un repunte del consumo cuando la
epidemia se haya calmado, para evitar el riesgo de un inventario insuficiente.

 
6. Desarrollar soluciones para los riesgos de cumplimiento y mantenimiento de
las relaciones con los clientes que surgen de la incapacidad de reanudar la
Producción a corto plazo.
Después de una situación de emergencia sanitaria, las organizaciones deben trabajar

estrechamente con los clientes para comprender los cambios que ha sufrido el mercado
y entender el impacto de reanudar su actividad., Además, es importante analizar
exhaustivamente los contratos, ya que, debido a las causas excepcionales y a las leyes
emitidas durante el periodo de crisis, puede que los incumplimientos de contrato no
tengan consecuencias legales. Las empresas deben identificar y evaluar los contratos
cuya ejecución pueda verse afectada y notificarlo con celeridad a los clientes, para
mitigar las posibles pérdidas, así como evaluar si es necesario firmar un nuevo contrato
o cláusulas adicionales. Es importante generar y conservar todas las evidencias
documentales para utilizarlas en posibles demandas civiles.
7. Responsabilidad social y estrategias de desarrollo sostenible en la toma de

decisiones.
La publicación de información corporativa adecuada sobre la crisis puede mejorar la
imagen pública de una empresa. Es necesario poder aplicar la responsabilidad social de
las empresas desde las perspectivas del medio ambiente, la sociedad, la economía y la
estabilidad de los empleados, así como coordinar las relaciones con la comunidad y las
empresas de suministros. Se debe evaluar el posible impacto y la duración de la
epidemia, ajustar los planes y, a nivel de los accionistas o del consejo de administración,
comunicar las medidas propuestas y los resultados de las mismas.

8. Elaborar un plan de gestión de los datos de los empleados, la seguridad de la


información y la privacidad.
Las empresas deben establecer mecanismos de gestión de los datos de los empleados y
registrar al personal interno y externo, a los proveedores y al resto de empleados con el
que la organización tenga contacto. También es necesario formular planes de respuesta
de emergencia en materia de seguridad de la información para garantizar la misma y la
estabilidad de las operaciones. Deben existir protocolos para asegurar el funcionamiento
de redes, sistemas y aplicaciones. Es fundamental proteger la privacidad personal y de
los datos, tanto de clientes como de empleados. En el caso de los datos clínicos y
médicos, se debe establecer un control de acceso y un nivel de protección adecuado y
según lo establecido por la regulación. 

9. Las empresas deben considerar la posibilidad de ajustar sus presupuestos y sus


planes de ejecución.

Aconsejamos a las empresas prestar especial atención al flujo de caja, para garantizar la
seguridad de los fondos, de acuerdo con el ritmo de los proveedores y los planes de
trabajo de los empleados. Además, se debería prestar especial atención a la situación del
comercio internacional de importación y exportación, en particular a los cambios
producidos de manera repentina o a los posibles impactos en los lugares de origen de los
principales productos, lo que podría dar lugar a considerables pérdidas en la propia
empresa.
Para evitar estos incidentes, las empresas deben establecer diferentes escenarios que
incluyan las respuestas que se llevarían a cabo en estas situaciones, como planes de
emergencia para proveedores básicos, proveedores alternativos y la consideración de
otros medios de transporte. 

10. Actualizar los mecanismos de gestión de riesgos de la empresa.


Según la encuesta de Deloitte sobre Gestión de Riesgos Empresariales, el 76% de los
responsables de riesgos cree que su empresa podría responder eficazmente si mañana se
produjera una emergencia importante. Sin embargo, solo el 49% de las empresas ha
elaborado manuales pertinentes y realizados pruebas previas basadas en escenarios de
emergencia. Además, solo el 32% de las empresas ha llevado a cabo ejercicios de
simulación de emergencias para cada uno de esos escenarios.

La mayoría de las empresas están expuestas a sufrir diferentes tipos de crisis por riesgos
inesperados en cualquier momento. Por ello, es fundamental establecer o mejorar sus
sistemas de gestión de riesgos para poder identificarlos y elaborar un plan de
mitigación. Fortalecer el sistema de gestión de riesgos es tan importante como hacer
frente a los acontecimientos negativos cuando estos se producen.
Sector de la educación.

El COVID- 19 obligó a las instituciones a migrar al canal digital parte de sus


actividades para continuar con su plan de estudios. Esta decisión seguramente responde
a un comportamiento oportunista porque no estaban preparadas. Además, la educación
no debe parar. Por ejemplo, en Perú las escuelas y colegios privados y públicos tuvieron
que adaptarse a nuevas metodologías que tiene como protagonista a los medios
digitales, radio y televisión. Esto porque Perú cuenta con muy mala conectividad en
todo el país. A lo anterior hay que añadir la falta de equipamiento en algunos hogares,
además del ancho de banda que se contrata. Cabe resaltar que el ente regulador les exige
a los operadores en telecomunicaciones garantizar el 40% de velocidad que contratan.

Está claro que no todo es conectividad, se necesitan personas capacitados en nuevas


metodologías, que permita poder cumplir con los objetivos de aprendizaje en cada nivel.
Se necesita que los profesores, alumnos y padres vean todo esto como una oportunidad
para repensar la educación. La formación online ha venido para quedarse, por ende, las
instituciones deben incorporar la exploración en innovación como parte de la
transformación que se requiere para darle sostenibilidad a su organización, a su sector y
al país.

En entornos tan competitivos y volátiles, las organizaciones tienen que desarrollar


capacidades necesarias tanto para explotar sus recursos y competencias como para
explorar nuevas soluciones, innovaciones o mercados. Esta capacidad de hacer ambas
actividades de manera simultánea es conocida como la ambidestreza. A raíz de la
situación generada por la pandemia del COVID-19, se observa cómo las organizaciones
muestran comportamientos diferentes respecto a la crisis, algunas evidencian
comportamientos oportunistas, otras sacan provecho a su capacidad exploratoria. Se ha
hecho una reflexión con ejemplos de diferentes sectores, sobre cómo han sido los
comportamientos de las organizaciones frente a esta situación de crisis.

La actividad de exploración, es importantes para el presente y futuro de las empresas,


vemos que ellas tienden a realizar aquellas que saben hacer mejor. Por un lado, las
grandes organizaciones, como Grifols o SEAT, en tiempos récord han podido adaptar
sus capacidades para explotar sus activos de una manera eficiente.
Por otro lado, vemos cómo la startup MyWorkUp ha cambiado su modelo de negocio,
evidenciando un comportamiento netamente explorativo para poder adaptarse a estas
circunstancias. En el sector turístico, la empresa más grande a nivel mundial (Airbnb)
ha crecido gracias al carácter exploratorio de un nuevo modelo de negocio, aunque casi
todo el sector sigue manteniendo un comportamiento explotativo. Estos ejemplos,
indican cuán importante es cada una de las dos actividades y, a su vez, la capacidad de
hacer ambas simultáneamente, de ser ambidiestro.

Las empresas de países industrializados están experimentando cambios constantes en el


contexto competitivo que les llevan a reforzar determinados factores, principalmente los
centrados en la innovación.

Una de las principales acciones consiste en invertir en la construcción de capacidades


tecnológicas que les ofrezcan los conocimientos y las habilidades necesarios para poder
implementar y utilizar diferentes recursos y conocimientos técnicos. Así, estas
capacidades, que resultan esenciales para la adaptación y la supervivencia de la
empresa, pueden derivar, por un lado, en la búsqueda de nuevas oportunidades
(estrategias de exploración) y, por otro lado, en la búsqueda de ventajas de carácter más
inmediato (estrategias de explotación). En otras palabras, el desarrollo de capacidades
tecnológicas permite aumentar la capacidad de absorción al fomentar la habilidad de
explorar e incrementar la capacidad de organización en un área en particular, e impulsar
las habilidades de explotación en dicha área.

El concepto de exploración y explotación ha sido ampliamente utilizado en la literatura


sobre el área de empresa, incluyendo estudios sobre el aprendizaje organizacional, la
renovación estratégica y la innovación tecnológica. Estos 2 conceptos requieren
diferentes estructuras, procesos, estrategias, capacidades y culturas, y pueden tener
diferentes impactos en el desempeño de una organización.
Conclusión.
Para concluir este trabajo debemos resaltar que es muy importante adquirir todas las
informaciones acerca del COVID-19 y como nos podemos manejar a la hora de ir a
nuestros labores diarias. Aprendimos que si las organizaciones no tienen las medidas
que se deben utilizar para evitar este virus nosotros como colaboradores debemos de
implementar lo que sea necesario para mantener la higiene, mantener un
distanciamiento, saber de qué forma atender a los clientes, etc.

También pudimos investigar cómo podemos aprovechar la tecnología para seguir con
nuestras labores, no siempre debemos de dejarle todo al internet debemos poner en
práctica todo conocimiento adquirido y esto puede ser un plus tanto para nosotros los
colaboradores como para la empresa.

Pudimos ver que cada empresa se ha manejado con comportamientos distintos ante esta
situación pero lo importante es que muchas pudieron salir a flote por la manera en que
la administración se maneja, que evidentemente cuando hay una buena organización
salen a relucir resultados positivos.

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