Analisis Del Multiplicador de Empleo 3

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Análisis del multiplicador de empleo

El multiplicador del empleo es una formula usada por Keynes, pero que mucho

antes se encontraba en los trabajos de Kahn. La fórmula indica la relación existente entre

los incrementos determinados en el nivel de empleo en un sector específico y el

incremento que resulta del empleo total de esa economía. La definición del concepto de

multiplicador fue publicado por primera vez por RF Kahn en junio de 1931 en su artículo

"La relación de la inversión doméstica con el desempleo" en el Diario económico. La

fórmula de Kahn era el Multiplicador de empleo y de esta fórmula el economista Keynes

tomó la idea de Kahn para lo cual formuló el Multiplicador de inversiones.

La definición del multiplicador de empleo fue empleado por RF Kahn en 1931

como la relación entre el incremento total en el empleo y el empleo primario, lo que quiere

decir que K 1 = ∆N / ∆N 1 donde K 1 significa el multiplicador de empleo, ∆N 1 significa

para el incremento en el empleo total y ∆N 1 para el incremento de la ocupación primaria

Formula de multiplicador de empleo:


Fuente: The Economic Journal, Vol. 41, No. 162 (Jun., 1931), pp. 173-198

Según Kahn (1931) el significado del multiplicador de empleo es un indicador que

relaciona un incremento del empleo primario en obras del sector público al incremento que

resulta del empleo total, primario y secundario combinados. Para ilustrar este tipo de

situación con un ejemplo, podríamos suponer que existen 200.000 hombres que

adicionalmente se han empleado en obras públicas para que el empleo secundario se

incremente en la cantidad de 400.000. Como consecuencia el empleo total se incrementa en

el valor de 600.000 (= 200000 de primario + 400000 de secundario). Al ejecutar la formula

correctamente el multiplicador de empleo tendría el resultado de 600000/200000 = 3.

Adicionalmente en términos Algebraicos, el multiplicador del economista Keynes

∆Y = K∆I es casi igual al multiplicador de Kahn ∆N = K 1 ∆N 1 . Aunque Keynes menciona

que no existe razón alguna de forma general para creer que K = K 1 porque los ingresos si

se hablan en términos de unidades salariales pueden aumentar más que el empleo.

De acuerdo a Keynes (1936) el incremento del empleo sólo se encontrara adscrito

al empleo primario el cual viene siendo proporcionado por las obras del sector público en

el evento de que la población que consume no cambiase aunque hubiera mejorado en el

empleo y aun en el ingreso real. En tanto, por otro lado, opta por realizar el consumo total
de otro aumento del dinero que ingresa, no existirá un enfoque de estabilidad ocasionado

que los precios comiencen a elevarse sin limitación alguna. Si establecemos concepciones

psicológicas normales, el incremento en el empleo solo podrá ir seguido por un descenso

del consumo si simultáneamente aparece un cambio en la predisposición del consumo,

siendo resultado, por decirlo así, de una campaña publicitaria en tiempos de conflicto

armado con el objetivo de colocarle una restricción al consumo individual, y en esa

situación el incremento del empleo en el sector industrial de la inversión tendrá que ir

acompañado de consecuencias desfavorables sobre el empleo en las empresas que producen

para el consumo humano.

Keynes (1936) también refiere en su libro de la Teoría general de la ocupación, el

interés y el dinero que esta situación solo puede indicar que no pueden ocurrir aumentos

de la inversión que se mide en unidades salariales, a excepción de que la población se

encuentre dispuesta a elevar sus ahorros, que se han de contar en las mismas unidades. Es

decir que la población no va a inclinarse por esta acción a excepción que su ingreso total

en unidades salariales esté elevándose. De esta manera, se considera que otro esfuerzo para

consumir una porción de sus ingresos aumentados tendrá como efecto estimular la

producción hasta que el nuevo grado y repartición de los ingresos haya proporcionado una

línea de ahorro lo suficientemente grande para que pueda corresponder a la inversión

aumentada. El multiplicador ha de indicar cuánto tiene que aumentar el empleo para que

ocurra un incremento en el ingreso real que baste lo necesario para incitar a la población a

que realice ahorros de forma extraordinaria lo que va acorde con sus tendencias

psicológicas. Si se supone que el ahorro es remedio y el consumo es una mermelada,


entonces la mermelada adicional tendrá que ser acorde al tamaño del remedio adicional.

Con excepción de que las tendencias psicológicas de la población vayan a ser distintas de

las que se suponen que deberían ser, se establece que la ley de que el incremento del

empleo a causa de la inversión tiene que estimular de forma necesaria a las empresas que

se encuentran produciendo para el consumo y de esta forma se puede ocasionar un

incremento total del empleo, que es considerado un múltiplo del empleo primario que es

requerido por la inversión misma.

Keynes (1936) también supone en su capítulo 10 de su libro de la Teoría general

de la ocupación, de las anteriores afirmaciones que si la predisposición marginal a

consumir no está lejos de la unidad, las pequeñas variaciones en la inversión van a producir

grandes variaciones en el empleo y simultáneamente, un aumento relativamente pequeño de

las inversiones tendrá que producir el empleo pleno. Si por otro lado la predisposición

marginal a consumir no se encuentra por encima de cero, las pequeñas variaciones en la

inversión tendrán que ocasionar las pequeñas variaciones en el empleo; aunque al mismo

tiempo, podría necesitarse un elevado aumento de las inversiones para que se produzca el

empleo pleno. En la práctica real, la predisposición marginal del consumo podría

encontrarse en ambos lados. Aunque hay que tener en cuenta que las variaciones en el

empleo son considerables y, al mismo tiempo, el aumento de la inversión que se requiere

para que se produzca el ingreso pleno es bastante grande para que sea manejado de la

manera más fácil.


Cabe mencionar que al momento de alcanzar el ingreso pleno, cualquier otro intento

de incrementar la inversión tendrá que colocar en movimiento una mayor inclinación de los

precios para que se eleven sin alguna restricción y también muy independiente de la

predisposición marginal del consumo, con lo cual se abre el escenario a una situación de

inflación verdadera. En esta situación, se destaca que el incremento de los precios tendrá

que ir acompañado de un incremento del ingreso global.

Hasta este punto estamos describiendo el incremento neto de la inversión. Keynes

(1936) aclara que si se quiere aplicar lo anterior sin ningún tipo de corrección a los

efectos como pueden ser del incremento de las obras del sector público, se tiene que

suponer que no existen contrapesos representados en inversiones que están decreciendo en

otras direcciones, y adicionalmente que ha existido algún cambio en la predisposición

marginal del consumo de la población. Los contrapesos se deben tener en cuenta ya que

tienen probabilidades de importancia y por qué sugieren estimaciones de aspectos

cuantitativos; ya que en las situaciones reales se encuentran varios aspectos, y también

algún incremento especifico de una inversión que es una porción del resultado final. Se

tiene el ejemplo de que si un gobierno empleara 100,000 trabajadores de forma adicional

en obras del sector público y el multiplicador da como resultado 4, no se debe hacer la

suposición de que el empleo total se incrementara en 400,000; ya que la nueva política

podría tener consecuencias desfavorables sobre la inversión en otros lados.


Según Keynes (1936) los aspectos clave que se deben de tener en cuenta en una

sociedad moderna son:

La forma de financiación de la política, y la gran cantidad de efectivo que conlleva

el aumento del empleo y el incremento de los precios podría tener el efecto de conducir a

la elevación de la tasa de interés con lo que se ocasionaría el retarda miento de la inversión

en otros lados, con excepción de que las autoridades que prescriben las políticas

monetarias quieran tomar alguna providencia a su vez que de igual manera, el incremento

en el costo de los bienes de capital ha de disminuir su eficacia marginal con respecto al

inversionista del sector privado lo que conllevara a el requerimiento de un descenso real en

la tasa de interés para lograr su equilibrio

El programa de la psicología confusa usada por el gobierno para promover la

confianza de los inversionistas y aumentar la tendencia por la liquidez de dinero podría

ocasionar el retarda miento de otras inversiones, a menos que se tomen medidas para

disiparlo.

En un sistema monetario abierto al comercio internacional, parte del multiplicador

de la inversión incrementada ha de beneficiar al empleo en lugares extranjeros, ya que

cierta proporción del incremento en el consumo ha de reducir la balanza exterior que es

desfavorable del país anfitrión; de tal forma que si se considera solo el efecto sobre el

empleo local, contrariamente a la extranjera, se tendrá que disminuir la cifra del

multiplicador. Por otro lado el país anfitrión podría recuperar una porción de este desgaste
a través de repercusiones que favorecen que se deben a los efectos del multiplicador en los

países extranjeros, al aumentar su actividad económica.

Conclusión

La predisposición marginal del consumo no es continua para todos los tipos de

empleo, y es bastante probable que exista una inclinación a disminuir a cada vez que el

empleo se incrementa lo que quiere decir que cuando el ingreso real sube, la sociedad va a

querer consumir una porción que de manera gradual desciende del mismo.

Por otro lado, si existen rendimientos decrecientes, la producción total debería aumentar de

forma proporcional un poco menos que el empleo. En términos generales, el ingreso en

definido de unidades salariales tendría que aumentar más, el empleo sería el siguiente y el

menor. Asimismo, si hablamos del corto plazo, las tres variables tendrían la tendencia a

subir y caer al mismo tiempo de acuerdo a lo establecido por la teoría de la economía

keynesiana referente al ingreso y el empleo.

Aunque hay que destacar que si la producción comienza a aumentar hacia la producción de

continuo empleo, las unidades de trabajo comenzaran a disminuir a causa de los

rendimientos decrecientes. En dicha situación, se considera que K 1 es mayor que K cuando

el multiplicador está gestionando para lograr el aumento de la producción y el empleo. Pero

es necesario tener en cuenta que K 1 es de menor valor que K cuando el multiplicador se

encuentra trabajando en la dirección opuesta.


Se señala que el multiplicador de empleo es un indicador beneficioso para identificar la

relación entre el empleo primario y secundario de las obras públicas. Pero la definición de

Keynes se considera superior a la de Kahn ya que se le dio el lugar que tiene su popularidad

actualmente al ser transformado de una herramienta para el análisis de la construcción de

vías en uno para el análisis de la construcción de ingresos.

Bibliografía

Kahn, R. (1931). The Relation of Home Investment to Unemployment. The Economic

Journal, Vol. 41, No. 162 (Jun., 1931), pp. 173-198. Published by: Blackwell Publishing for

the Royal Economic Society. Disponible en: http://www.jstor.org/stable/2223697

Keynes, J. (1936). Teoría general de la ocupación, el interés y el dinero.

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