Convención Sobre Nacionalidad y Derechos Adquiridos.
Convención Sobre Nacionalidad y Derechos Adquiridos.
Convención Sobre Nacionalidad y Derechos Adquiridos.
PODER LEGISLATIVO
DECRETO No.95-99
EL CONGRESO NACIONAL,
D E C R E T A:
ARTÍCULO 1.- Ratificar en todas y cada una de sus partes el Decreto No.88-98
de fecha 2 de abril de mil novecientos noventa y ocho, que literalmente dice:
POR TANTO:
DECRETA:
ARTICULO 1.- Aprobar en todas y cada una de sus partes el ACUERDO No.2-
DSL, emitido por el Presidente de la República de Honduras, Carlos Roberto Flores
Facussé, el cinco (5) de marzo de mil novecientos noventa y ocho, mediante el cual se
remite al Congreso Nacional la "CONVENCION SOBRE NACIONALIDAD Y
DERCHOS ADQUIRIDOS EN LAS ZONAS DELIMITADAS POR LA SENTENCIA DE
LA CORTE INTERNACIONAL DE JUSTICIA DEL 11 DE SEPTIEMBRE DE 1992".,
suscritos por los Presidentes de Honduras y El Salvador en fecha 19 de enero de 1998,
señores Carlos Roberto Reina Idiáquez y Armando Calderón Sol; que literalmente dice:
POR TANTO,
ACUERDA:
CAPITULO I
DISPOSICIONES GENERALES
ARTICULO 1.- Cada parte se obliga respetar los derechos y libertades de los
nacionales de los dos Estados que quedaron viviendo o tuvieren derechos en los
territorios de uno u otro Estado delimitados por las sentencias del 11 de septiembre de
1992 de la Corte Internacional de Justicia y de manera especial, a los derechos a la
vida, seguridad personal, libertad, nacionalidad, propiedad, posesión y tenencia de la
tierra, facilidad de circulación de personas y de bienes, integridad familiar y demás
derechos adquiridos. También se obligan a garantizar el libre y pleno ejercicio de tales
derechos y libertades y a velar porque no se violen o conculquen por autoridades,
funcionarios, empleados públicos o particulares.
CAPITULO II
DERECHOS ADQUIRIDOS
CAPITULO III
NACIONALIDAD
ARTICULO 10.- Los nacionales de uno u otro Estado, para ejercer el derecho
de opción que les corresponde, presentarán personalmente o por medio de su
representante legal o apoderado, una solicitud a las gobernaciones políticas
departamentales correspondientes, acompañada únicamente de la certificación de la
partida de nacimiento y de la constancia de estar inscrito en el censo de población,
vivienda y propiedad. La certificación de la partida de nacimiento deberá ser expedida
gratuitamente por las autoridades correspondientes y autenticada, libre de derechos,
solamente por los Ministerios de Relaciones Exteriores. Asimismo, dichos Ministerios
extenderán la constancia de estar inscrito en el Censo de Población, Vivienda y
Propiedad. Se podrán incluir en una misma solicitud las peticiones de dos o más
personas. En caso que existiese diferencia en el nombre de las personas según su
partida de nacimiento y los datos del censo, la autoridad municipal correspondiente
hará constar que se trata de la misma persona. La solicitud deberá resolverse sin más
trámite ni diligencia, dentro de los sesenta (60) días posteriores a la fecha de su
presentación. Pasados los sesenta (60) días de la fecha de su presentación sin que
haya resolución, se entenderá que ésta ha sido concedida. El Estado otorgante
inscribirá de inmediato en los registros civiles o familiares correspondientes, la
resolución que dicte en que se reconozca la nacionalidad. Siendo que la presente
Convención regula una situación excepcional, en caso que las constituciones de las
partes exijan determinados requisitos para poder optar a la otra nacionalidad, se
entenderá que los peticionarios, con la sola presentación de la solicitud y los
documentos a que se refiere el presente Artículo, cumplen con todas las formalidades
legales exigidas.
CAPITULO IV
ARTICULO 12.- Las partes reconocen, en los términos y con los alcances
establecidos en la legislación bajo la cual fueron adquiridos los derechos de propiedad
así como la posesión, tenencia y otros derechos sobre la tierra en los territorios
delimitados por la sentencia de la Corte Internacional de Justicia, cuando hayan sido
adquiridos por personas naturales o por personas jurídicas de derecho privado antes
del 11 de septiembre de 1992. De igual manera reconocen, conforme a la legislación
bajo la cual se obtuvieron los otros derechos adquiridos antes de esa fecha, sean
reales o personales. Los reconocimientos que figuran en los párrafos que preceden,
tendrán lugar sin tomar en cuenta la nacionalidad de los titulares de los derechos. A
partir de la vigencia de la presente Convención, el ejercicio y la transferencia de los
derechos reconocidos en los dos primeros párrafos de este Artículo, se regirán por las
Leyes internas de cada Estado.
ARTICULO 13.- Cada Estado reconocen con la misma fuerza y valor que lo
hace la legislación interna del Estado que los inscribió antes del 11 de septiembre de
1992, los títulos o instrumentos en que: A) Se constituyan, reconozcan, transfieran,
modifiquen o cancelen el dominio o posesión; B) Se constituyan, transfieran,
modifiquen o cancelen derechos de usufructo, herencia, uso, habitación o servidumbre
sobre inmueble; C) Los contratos de arrendamiento sobre bienes inmuebles cuando
deban hacerse valer contra terceros; y, D) Aquellos en que se constituya, modifique,
extinga o cancele algún derecho de hipoteca. Los títulos o instrumentos a que se
refiere el presente Artículo, deberán inscribirse en el registro correspondiente del
Estado que actualmente ejerce jurisdicción; y para hacerlo el interesado, apoderado o
representante legal presentará certificación extendida por el registro donde fueron
originalmente inscritos, únicamente autenticada gratuitamente por los Ministerios de
Relaciones Exteriores de ambos Estados. Si pasados tres (3) años desde la vigencia
del presente Convenio, los interesados no han procedido a efectuar el registro de los
títulos o instrumentos a que se refiere el párrafo anterior, no podrán disponer
jurídicamente de los mismos hasta tanto no efectúen dichos registros. Los Estados
deberán promover, incentivar y facilitar a los nacionales de uno y otro Estado que
ejerzan ese derecho. Dentro del plazo de tres (3) años señalados en el presente
Artículo la inscripción será gratuita. Los registradores de los respectivos Estados Partes
procederán a inscribir en un plazo no mayor de treinta (30) días los títulos e
instrumentos que amparan los derechos a que se refiere este Artículo.
CAPITULO V
DISPOSICIONES ESPECIALES
CAPITULO VI
CAPITULO VII
RATIFICACION Y VIGENCIA
Al Poder Ejecutivo.