El quinto

postulado
de Euclides...
y la geometría
del universo
Vicente Trigo Aranda

Trescientos años antes de nuestra era surgió una

figura que destaca sobremanera en el panorama cientí-
fico de aquella época... y también en la de decena de
siglos posteriores: Euclides. Su principal obra, los Ele-
mentos, perduró durante más de dos mil años y fue el
pilar fundamental de la ciencia occidental... y no sólo
porque incluyera gran parte del saber geométrico sino,
sobre todo, porque es un paradigma de argumentación
y precisión científica.
Las altísimas cotas de formalismo y rigor expositivo
alcanzadas por Euclides sólo fueron superadas en el
siglo XX. ¡Ahí queda eso! Piense que en unos pocos
siglos Einstein superó a Newton y supongo que no
pasará mucho tiempo antes de que la teoría de la relati-
vidad pase al baúl de los recuerdos... ¡y Euclides fue la
referencia científica por antonomasia durante más de
dos mil años!
Para hacerse una idea de su importancia, baste
decir que los Elementos han sido, tras la Biblia, el libro
de mayor difusión en Occidente... y hasta el siglo XIX
fue seguido como libro de texto en gran número de
universidades de todo el mundo.
Pero la trascendencia de los Elementos va más allá
de su gran valor científico y académico, ya que el análi-
sis de su famoso V postulado abrió el camino a nuevas Figura 1. Primera edición inglesa de los Elementos de
geometrías que permiten comprender mejor el universo Euclides, Londres 1570

Autores científico-técnicos y académicos 37

 El quinto postulado de Euclides

que nos rodea. La geometría euclídea, la que se históricamente la más importante fue la que erigió en
enseña en colegios e institutos para entendernos, es Egipto, ya que allí Ptolomeo I, sucesor de Alejandro en
válida a escala humana pero cuando entran en escena el imperio africano, estableció (300 a.C.) la famosa
las medidas astronómicas su vigencia desaparece y se Biblioteca-Museo de Alejandría.
precisa otra geometría para describir el cosmos.
La Biblioteca de Alejandría fue un precedente de lo
que ahora se entiende por una universidad y allí confluyó
todo el saber del mundo griego y oriental. Por primera
¿QUIÉN FUE EUCLIDES? vez en la historia se creó un centro de investigación
científica donde los sabios de la época podían dedicar
En realidad es muy poco lo que sabe con certeza todo su tiempo a investigar y enseñar. Lógicamente, tam-
sobre la vida de Euclides, por no decir nada. La mayor bién fue lugar de peregrinación imprescindible para quien
parte de los datos proceden de una misma fuente: un deseaba aprender y completar su formación2; por ejem-
libro que escribió sobre Euclides el filósofo Proclo1... plo, Arquímedes pasó una etapa de su vida allí.
que vivió siete siglos después que él. Por tanto, la certe-
za y veracidad de los datos que siguen es algo que dejo Durante casi mil años la Biblioteca de Alejandría fue
a su consideración. el faro que iluminó científicamente a toda su amplia zona
de influencia y en el momento de su destrucción, 642
Parece ser que Euclides nació alrededor del año d.C., se estima que contenía más de setecientos mil volú-
325 a.C. y falleció en Alejandría hacia el 265 a.C. Es menes3. Por cierto, se habla desde hace unos años de un
pues, posterior a Platón y Pitágoras y anterior, aunque proyecto para erigir una nueva Biblioteca en Alejandría
contemporáneo, de Arquímedes y Eratóstenes. que recopile todo el conocimiento científico-técnico de la
humanidad; sin embargo, no creo que el proyecto pase
de diseñar un atractivo edificio y poco más. Hoy en día
ya se dispone del equivalente a una Biblioteca de Ale-
jandría, aunque mucho más completa. ¿Adivina cuál?...
Exacto, Internet.

Figura 2. Euclides... presuntamente

El gran Alejandro de Macedonia, que murió a los

33 años (323 a.C.) fundó gran número de ciudades a
lo largo de sus desplazamientos guerreros y a muchas
de ellas las llamó Alejandría... como ve, la originalidad
y la modestia no eran valores en alza en aquellos tiem- Figura 3. Diseño de Alejandría, obra del
pos. De entre todas las ciudades con ese nombre, arquitecto griego Dinocrates
1 Proclus Diadochus, nació el 8 de febrero de 411 en Constantinopla y murió el 17 de abril de 485 en Atenas

2 Para más información sobre este tema, pude acudir a la siguiente dirección:
http://www.perseus.tufts.edu/GreekScience/Students/Ellen/Museum.html
3 “Sabemos que en esta biblioteca había 123 obras de Sófocles, de los que sólo siete han llegado a nuestra época. Una de esas de esas
siete es Edipo rey. Lo mismo ocurrió con las obras de Esquilo, Eurípides y Aristofanes. Es un poco como si las únicas obras de un hombre lla-
mado William Shakespeare fueran Coriolano y Cuento de invierno; aunque hubiéramos oído decir que había escrito otras obras muy alaba-
das en su tiempo como Hamlet, El sueño de una noche de verano, Julio César, El rey Lear y Romeo y Julieta”. Carl Sagan, Cosmos.

38 Autores científico-técnicos y académicos

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Volviendo a Euclides, se supone que debía haber • Euclides podría haber sido lo que ahora llamaría-
adquirido un cierto renombre en su Grecia natal y por mos un catedrático de mucho prestigio, que
ese motivo Ptolomeo lo invitó a incorporarse al claus- fundó un grupo de trabajo y todo lo que éste
tro de profesores de la Biblioteca. En Alejandría impar- publicaba, incluso después de que Euclides
tió clase durante varios años y escribió unos cuantos hubiera muerto, siguió llevando el nombre del
libros, de los que sólo han llegado hasta nuestros días fundador del grupo.
los Elementos (que comentaré detenidamente más
• Un equipo de matemáticos de Alejandría podría
adelante) y los Datos, una colección de problemas y
haber publicado obras conjuntas, a lo largo de
proposiciones para determinar figuras.
varios años, y adoptado el nombre de Euclides
De otras de sus obras sólo se tienen referencias, ya en honor de Euclides de Megara, un discípulo de
que son citadas en libros de otros autores. Así, algunos Sócrates que tuvo cierto renombre un siglo antes.
títulos atribuidos a Euclides fueron Sobre la división de Antes de pasar a comentarle los Elementos, le indi-
las figuras, Sofismas, Cónicas, Lugares superficiales, co unas cuantas direcciones de Internet donde puede
etc. Seguramente su obra desaparecida más célebre es encontrar mucha más información sobre la vida y obra
Porismas que constaba de 38 lemas y 171 teoremas y de Euclides.
era, según Pappus, una colección de “cosas útiles para
resolver los problemas más difíciles”... y no puedo http://www.obkb.com/dcljr/euclid.html
menos que poner en duda lo de útiles. http://www-groups.dcs.st-and.ac.uk/~history/Mat-
¿Qué por qué la coletilla anterior? Muy sencillo, no hematicians/Euclid.html
hay que olvidar que Euclides fue fruto de su tiempo y http://www.treasure-troves.com/bios/Euclid.html
de su educación. Una sociedad basada en la esclavi-
tud, como era la griega de aquella época, es lógico que
despreciara el trabajo manual, pues se consideraba
propio de esclavos. Por esta razón las matemáticas LOS ELEMENTOS
griegas derivaron en una especie de entelequia abstrac-
ta que se emparentaba con la filosofía y que, desde Los Elementos de Euclides constan de trece libros,
luego, no debía tener ninguna utilidad si quería alcan- en los cuales aparecen un total de 465 proposiciones,
zar un cierto reconocimiento social. Por ejemplo, en los 372 teoremas y 93 problemas4.
Elementos no aparece ninguna aplicación práctica ni • Los primeros cuatro libros se denominan pitagóri-
ningún ejemplo numérico... y en esa misma dirección cos, pues son un compendio del saber matemáti-
encaja como anillo al dedo la siguiente anécdota, atri- co de esa escuela filosófico-matemática. En ellos
buida a Euclides. se estudia geometría plana: propiedades de los
«Un estudiante que había empezado a estudiar geo- triángulos y paralelogramos, teorema de Pitágo-
metría con Euclides preguntó, al aprender el primer ras, circunferencia y polígonos.
teorema: “¿qué ganaré aprendiendo estas cosas?”. • Los dos siguientes están dedicados al estudio de
Euclides llamó a su esclavo y dijo: “dale tres monedas, la proporcionalidad y semejanza de polígonos.
puesto que debe sacar algún provecho de lo que
aprende” » Los grandes matemáticos, Herbert Westren • Los tres siguientes son los llamados aritméticos,
Turnbull. pues están centrados en la teoría de números:
divisibilidad, primos, perfectos, etc. Eso sí, enten-
De todas formas, tampoco está muy claro siquiera diendo los números como segmentos; es decir,
que Euclides existiera. Son tantas las referencias a sus geometría pura y dura.
cualidades y tan perfecto el rigor de sus Elementos, sin
• El décimo libro trata de la clasificación de los irra-
olvidar la ímproba tarea de recopilar tal cantidad de
cionales... no de su cálculo, ya que eso tendría
saber geométrico disperso, que parece como si una
alguna utilidad práctica.
vida humana no diese para tanto y, por eso, es lógico
que haya hipótesis alternativas. Quizás las dos que ten- • Los tres últimos libros dan un salto y pasan a
gan más visos de verosimilitud sean las siguientes: analizar la geometría del espacio (poliedros, esfe-
4 Los Elementos es un texto que ha llegado hasta nosotros a través de la mano de Teón de Alejandría (siglo IV) por lo que no es descar-
table que haya más de una modificación con respecto al original.

Autores científico-técnicos y académicos 39

 El quinto postulado de Euclides

ras, etc.) para finalizar con los cinco poliedros texto de aquellos años: ¿Qué diferencia hay entre un
regulares que tan caros eran a la escuela platóni- número racional y una fracción?
ca. La respuesta correcta, y así aparecía en el solucio-
nario, es que un número racional es una clase de equi-
valencia en el conjunto ZxZ y una fracción es cualquier
representante de dicha clase. Desde el punto de vista
matemático es una respuesta perfecta, pero didáctica-
mente no es muy adecuada... en un libro para niños de
once años.
Pues algo así pasa con los Elementos de Euclides.
Aunque formalmente sean una maravilla, seguro que
han provocado más de un dolor de cabeza a millones
de estudiantes... y, lo que es mucho peor, ocasionado
un odio feroz a todo cuanto huela a geometría.

AXIOMAS Y POSTULADOS
Euclides se basó en la lógica aristotélica para cons-
truir un bello edificio, el de la geometría, sirviéndose del
método axiomático, que es el que actualmente siguen
todas las disciplinas científicas. Así, partiendo de una
serie de premisas previas, los axiomas, y auxiliándose
exclusivamente en razonamientos lógicos, Euclides fue
deduciendo una serie de resultados encadenados.
Figura 4. Fragmento de los Elementos. Manuscrito griego Euclides comenzó los Elementos definiendo una
del siglo IX. serie de axiomas generales, aplicables a cualquier tipo
de razonamiento... Como puede apreciar, no son nada
Pero una cosa es que los Elementos hayan sido del otro mundo.
sinónimo de geometría y otra muy distinta es que su 1. Cosas iguales a una tercera son iguales entre sí.
lectura fuese asequible... “Un día Ptolomeo preguntó a 2. Si a cosas iguales se añaden cosas iguales, los
Euclides si para aprender geometría no existía un cami- totales son iguales.
no más breve que el de los Elementos, obteniendo la 3. Si a cosas iguales se sustraen cosas iguales, las
respuesta: en la geometría no existe ningún camino diferencias son iguales.
especial para los reyes” Historia de la Matemática, J. 4. Si a cosas desiguales se añaden cosas iguales, los
Rey Pastor y José Babini. totales son desiguales.
Como puede imaginar, estoy en completo acuerdo 5. Las cosas dobles de una misma cosa son iguales.
con Euclides... pero también en desacuerdo. La geo- 6. Las mitades de una misma cosa son iguales.
metría no dispone de atajos regios, evidentemente, 7. Cosas que pueden superponerse una a la otra
pero de ahí a considerar que los Elementos son el son iguales.
mejor camino para aprender geometría media un buen 8. El todo es mayor que su parte.
trecho. Sólo una vez en mi vida me he cruzado con los A continuación Euclides especificó una serie de
Elementos en plan serio y puedo asegurarle que se axiomas particulares de la ciencia a estudiar, los deno-
trata de un texto de una dureza bestial, que merece minados postulados. Él consideró los cinco siguientes:
cualquier calificativo menos el de didáctico.
I. Por dos puntos distintos pasa una recta.
A mí me recuerda en cierto modo a aquella moda II. Un segmento rectilíneo puede ser siempre pro-
de la matemática moderna, donde el rigor formalista longado.
anulaba los conceptos más intuitivos y fundamentales. III. Hay una única circunferencia con un centro y
Todavía recuerdo una pregunta que leí en un libro de un diámetro dados.

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 El quinto postulado de Euclides

IV. Todos los ángulos rectos son iguales. “Toda recta que corte a una de dos rectas para-
V. Si una secante corta a dos rectas formando a un lelas corta también a la otra”
lado ángulos interiores cuya suma es menor de “Una recta paralela a una dada dista de ella una
dos rectos, las dos rectas suficientemente pro- longitud constante”
longadas se cortan en este mismo lado.
Más de mil años después John Wallis, autor de
Arithmetica infinitorum, pensó que había demostrado
por fin el V postulado. De nuevo partía de una premisa
que resulta equivalente a él:
“Existen triángulos semejantes no iguales”

Figura 5. Los cinco postulados en una edición de los Ele-

mentos de 1482.

Nunca dejará de sorprenderme la finura y el rigor

de Euclides con respecto a su celebérrimo V postulado.
Si observa atentamente los cinco, es evidente que el V
es de una índole distinta a los cuatro anteriores: es más
complicado y su redacción recuerda más a la de un
teorema que a la de un axioma.
Por ese motivo a lo largo de la historia se invirtió
muchísimo trabajo en intentar demostrar precisamente
eso: que el V postulado es realmente un teorema y, por
tanto, puede demostrarse a partir de los cuatro prime-
ros postulados. De hecho, el propio Euclides no utilizó
el quinto hasta después de haber deducido 29 proposi- Figura 6. John Wallis, 23 Nov 1616 (Ashford) - 28 Oct
1703 (Oxford)
ciones, por lo que puede sospecharse que él mismo no
estaba muy seguro de su evidencia.
Habrá observado que hay varias expresiones equi-
Seguidamente veremos los principales trabajos rela- valentes al V postulado (y todavía le indicaré alguna
cionados con el V postulado, que finalmente dieron otra), pero la más difundida se debió al matemático
lugar a las geometrías no euclídeas. escocés John Playfair (1748-1819) que la expuso en
1795. Tan es así que en muchos textos esta versión es
la que se expone como V postulado de Euclides:
“Desde un punto exterior a una recta se puede
ATAQUES AL QUINTO POSTULADO trazar una, y sólo una, paralela a la misma”
El primer intento serio del que se tienen noticias
llegó de la mano del ya citado Proclo, que creyó haber
conseguido demostrar que el V postulado es un teore-
ma, deducible de los cuatro postulados anteriores. Su
SACCHERI CASI LO CONSIGUE
error fue basarse en una de las dos suposiciones El problema del V postulado estuvo a punto de
siguientes que es, en realidad, son equivalentes al V resolverlo en el siglo XVIII el matemático y jesuita ita-
postulado: liano Giovanni Saccheri (1667-1733) En su libro Eucli-

Autores científico-técnicos y académicos 41

 El quinto postulado de Euclides

des ab omni naevo vindicatus Saccheri aplicó el méto- Buscando estas incoherencias, Saccheri demostró
do de reducción al absurdo para intentar probar que el más de 30 proposiciones, alguna de ellas de indudable
V postulado de Euclides se puede deducir de los ante- dificultad, que conforman en realidad el primer tratado
riores. de las geometrías no euclídeas. Consiguió “demostrar”
que la hipótesis de ángulos obtusos es contradictoria,
basándose en que la longitud de una recta es infinita
(lo que no se recoge en ningún postulado de Euclides),
pero no logró encontrar ninguna contradicción en la
hipótesis de ángulos agudos.
En resumen, Saccheri encontró resultados que
parecían contradecir el sentido común y dio por con-
cluida su obra, sin percatarse de que lo antiintuitivo no
tiene necesariamente que ser antilógico ni antinatural.
Por tanto, Saccheri tuvo al alcance de la mano la crea-
ción de las geometrías no euclídeas, pero no lo consi-
guió debido a que estaba absolutamente convencido
de que sólo podía existir la geometría euclídea.

Figura 7. Euclides exonerado de todo error, 1733

Saccheri partió de un cuadrilátero birrectangular

isósceles ABCD, en el que los lados AD y BC eran
iguales y los ángulos A y B rectos, y demostró, basán-
dose sólo en los cuatro primeros postulados, que los
ángulos C y D deben ser iguales. Llegado a este punto,
analizó las tres posibilidades que se le ofrecían: esos
dos ángulos son rectos, obtusos o agudos.

Figura 8. Cuadrilátero de Saccheri

En primer lugar demostró la equivalencia entre el

V postulado de Euclides y la condición de que Figura 9. Una página de Die teorie der parallellínien
ambos ángulos sean rectos. Por tanto, su trabajo se
encaminó a comprobar que si los ángulos son obtu- Unos años más tarde, en 1763, el matemático
sos o agudos se contradice alguno de los cuatro pri- Georg S. Klügel (1739-1812) introdujo en su tesis doc-
meros postulados. toral una novedosa idea: el V postulado está basado en

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 El quinto postulado de Euclides

la experiencia, no en la evidencia. Además, observó

que Saccheri no había encontrado ningún absurdo
sino sólo una serie de resultados aparentemente
extraños.
Siguiendo este camino, el matemático Johann
Heinrich Lambert (1728-1777) intentó probar que el V
postulado era independiente de los demás. En su obra
Die teorie der parallellínien, escrita en 1766 y publica-
da en 1786, sigue un razonamiento análogo al de Sac-
cheri: construye un cuadrilátero formado por tres ángu-
los rectos y analiza las hipótesis de recto, obtuso y
agudo para el restante ángulo, buscando alguna con-
tradicción, que claro está no encontró. De hecho, el
propio Lambert insinuó la posibilidad de introducir un
postulado alternativo al V de Euclides e incluso indicó
que la geometría esférica era independiente del postu-
lado de las paralelas.
Por último, antes de pasar al nacimiento de las geo-
metrías no euclídeas, no puedo dejar de citar la
siguiente anécdota, atribuida al matemático Joseph
Louis Lagrange (1736-1813) Había preparado una Figura 10. Janos Bolyai, 15 Dic 1802 (Cluj) -
conferencia ante la Academia Francesa en la que pen- 27 Ene 1860 (Tirgu-Mures)
saba dejar totalmente resuelto el problema del V postu-
lado y, justo al empezar su exposición, se quedó un
momento pensativo y dijo su célebre frase “Il faut que Janos Bolyai partió de la hipótesis de que el V pos-
j’y songe encore”, tras lo cual recogió sus papeles y dio tulado era independiente de los otros cuatro y, por
por terminada la conferencia. tanto, si se sustituía por otro no equivalente podría
construirse una nueva geometría, tan coherente (es
decir, sin contradicciones) como la euclídea. El suyo
fue:

BOLYAI Y EL NACIMIENTO “Desde un punto exterior a una recta pueden

trazarse infinitas rectas paralelas a la dada”
DE UNA NUEVA GEOMETRÍA
Sin embargo, su nuevo mundo quedó en agua de
Janos Bolyai (1802-1860) fue oficial del ejército borrajas y su descubrimiento no fue publicado hasta
húngaro y era hijo del matemático Farkas Bolyai, que 1832... como un apéndice del libro de texto Tentamen
había sido compañero de Gauss y con él que mantenía de su padre. ¿Y por qué Bolyai abandonó su investiga-
correspondencia a pesar de trabajar en un pequeño ción? Pues por una razón de peso, al menos para él...
colegio. Gracias a eso conocemos que, en 1799, Gauss alguien se le había adelantado.
le indicaba: “el camino elegido no conduce en absolu-
to a deducir el axioma de las paralelas, que me ase- Cuando Bolyai padre apreció la importancia del
guráis haber alcanzado” trabajo de su hijo, no tardó mucho en enviar una copia
a Gauss, con la esperanza de que éste alabase el traba-
Su hijo Janos prosiguió los trabajos sobre el V pos- jo de Janos y así su hijo obtuviese un merecido recono-
tulado y, el 3-XI-1823, envió una carta a su padre en la cimiento en el mundo matemático. No obstante, la res-
que decía: “He llegado a realizar algo tan asombroso puesta de Gauss le dejó helado: “elogiar la obra de tu
que yo mismo me hallo terriblemente azorado. Si echa- hijo es elogiarme a mí mismo, pues coincide casi exac-
ras una mirada a mi trabajo verías que no exagero. tamente con los trabajos que he ido desarrollando en
Puedo asegurarte que he creado un mundo nuevo”... los últimos treinta años. Mi intención era no publicar
¡Y tenía toda la razón del mundo! estos trabajos durante mi vida”

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 El quinto postulado de Euclides

Lobachevski partió de la misma hipótesis que Bol-

yai (“desde un punto exterior a una recta se pueden
trazar infinitas paralelas a ella”) y presentó sus trabajos
en dos memorias publicadas entre 1826 y 1829 en su
universidad. Posteriormente publicó Geometrie imagi-
naire (1837) y Geometrische untersuchungen zur theo-
rie der parallelinien (1840); por último, en 1855 cuan-
do ya estaba ciego, publicó el compendio de toda su
geometría, Pan geometrie.
Dada una recta y un punto exterior a ella, Loba-
chevski postuló de que al menos se pueden trazar dos
paralelas a la recta pasando por el punto y demostró
una serie de sorprendentes resultados:
• La suma de los ángulos de un triángulo es infe-
rior a 180º.
Figura 11. Carl Friedrich Gauss (1777-1855), el príncipe • La intersección de dos planos paralelos contiene
de las Matemáticas rectas paralelas entre sí.

¿Y por qué el gran Gauss callaba su descubrimien- Una vez que se probó que esta nueva geometría no
to? Pues, aunque parezca mentira, por miedo. Según euclídea (que se denominaría hiperbólica) no ofrecía
cuenta en una carta enviada a Bessel el 27 de enero de ninguna contradicción, y por tanto era coherente, se
1829, silenció sus investigaciones porque temía “el gri- buscaron modelos geométricos en los cuales pudiera
terío de los beocios”, refiriéndose a los filósofos kantia- aplicarse. Veamos a continuación dos de ellos.
nos que consideraban la geometría euclídea consustan-
cial con la naturaleza.
MODELOS DE GEOMETRIA HIPERBÓLICA
El italiano Eugenio Beltrani (1835-1900) presentó
LOBACHEVSKI DIFUNDE LA GEOMETRÍA en 1868 la pseudoesfera, que es la superficie engen-
drada al girar la curva tractriz alrededor de su asíntota.
HIPERBÓLICA Por si no lo recuerda, le diré que la tractriz puede defi-
nirse como la trayectoria descrita por una persona que
Esa nueva geometría, que Gauss no quiso dar a sigue a otra que se mueve en línea recta (la asíntota),
conocer y que Janos Bolyai dejó abandonada, fue cuando la distancia entre ambas permanece constante.
revelada a la comunidad científica por el matemático
ruso Nicolai Ivanovich Lobachevski (1793-1856), pro- Sobre esta superficie pueden definirse los siguientes
fesor y rector de la universidad de Kazan. entes geométricos:
• Punto: un punto de la pseudoesfera.
• Línea que pasa por A y B: la curva más corta
sobre la pseudoesfera que une A y B; es decir, la
curva geodésica.
• Distancia entre dos puntos: longitud de la línea
que los une.
Con estas definiciones, que no negaré resultan un
tanto extrañas, puede demostrarse que la geometría
sobre la pseudoesfera coincide con parte de la geo-
metría hiperbólica, ya que sólo se prolongan infinita-
Figura 12. Nikola Lobachevski, 1 Dic 1792 (Gorky) - mente los segmentos del meridiano y, aún así, única-
24 Feb 1856 (Kazan) mente en un sentido de la recta.

44 Autores científico-técnicos y académicos

 El quinto postulado de Euclides

• Recta: cuerda del círculo, excluidos sus extremos

sobre la circunferencia.
• Rectas paralelas: cuerdas del círculo con un
mismo extremo común.
• Rectas secantes: las que se cortan en el interior
del círculo.
• Rectas no secantes: las que se cortan en el exte-
rior del círculo.
• Distancia entre los puntos P y Q: el logaritmo de
[d(A,Q) x d(B,P)]/ [d(A,P) x d(B,Q)], donde A y
B son los puntos de la circunferencia en que corta
la prolongación de la recta que une P y Q.
Klein demostró que la geometría así construida
sobre el círculo se corresponde con la geometría
hiperbólica de Bolyai y Lobachevski, satisfaciendo
todos los postulados de Euclides excepto el V. Siguien-
do esta misma línea, también puede construirse un
modelo de geometría hiperbólica espacial; basta consi-
derar como espacio el interior de una esfera: las rectas
Figura 13. Gráfica de tractriz siguen siendo cuerdas y los planos son círculos cuya
circunferencia está sobre la esfera.

LA GEOMETRÍA ELÍPTICA DE RIEMANN

Hasta ahora hemos visto dos geometrías, la euclí-
dea y la hiperbólica, en las cuales la longitud de la
recta es infinita y donde desde un punto exterior a una
recta se pueden trazar una o varias paralelas, respecti-
vamente. Sin embargo, ¿es posible definir alguna geo-
metría donde esto no suceda? La respuesta es afirmati-
va, y el primero en darla fue el matemático alemán
Bernhard Riemann (1826-1866).

Figura 14. Mitad superior de la pseudoesfera

En 1870 el matemático alemán Félix Klein (1849-

1925) dio otra interpretación real de la geometría
hiperbólica sobre todo el plano y, además, ampliándola
al espacio. Klein consideró un círculo euclídeo, exclu-
yendo su circunferencia, y estableció las siguientes defi-
niciones:
Figura 15. Bernhard Riemann, 17 Sept 1826
• Punto: punto del interior del círculo. (Breselenz) - 20 Jul 1866 (Selasca)

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 El quinto postulado de Euclides

Riemann estudió en la universidad de Gotinga • Dos rectas siempre tienen un punto en común,
donde fue alumno de Gauss, y posteriormente también por lo cual desde un punto exterior a una recta
lo fue de Jacobi y Dirichlet en Berlín. Para obtener su no es posible trazar ninguna paralela.
título de Privatdozent presentó, el 10-VI-1854, su obra • Las rectas son ilimitadas pero su longitud es finita
Ueber die hypothesen, welche der Geometrie zu Grun- y siempre la misma.
de liegen (Hipótesis en que se basa la geometría) que
dio nacimiento a la geometría elíptica... ¡y no fue publi- • La suma de los ángulos de un triángulo es siem-
cada hasta 1868! pre superior a 180º.
Y, para terminar, nada mejor que una tabla que
resuma todo lo visto hasta el momento:

Desarrollada Paralelas desde Suma ángulos Las rectas

Geometría por un punto de un son
exterior triángulo
Euclídea Euclides Una 180º Infinitas
Hiperbólica Bolyai y Más de una Menor que Infinitas
Lobachevski 180º
Elíptica Riemann Ninguna Mayor que Finitas
180º

¿CUÁL DE LAS TRES GEOMETRÍAS

ES LA REAL?
Una vez aquí, la cuestión es saber cuál de estas tres
geometrías encaja mejor con el mundo físico. Como los
siglos han ido demostrando, la euclídea es totalmente
válida si se trabaja con medidas a escala terrestre, pero
con distancias superiores esto no es tan evidente.
Gauss y Lobachevski intentaron probar experimen-
Figura 16. Primera página de Ueber die hypothesen, wel- talmente la validez de la geometría hiperbólica. Gauss
che der Geometrie zu Grunde liegen midió los ángulos de un triángulo cuyos vértices eran
las cimas de tres montañas y encontró que, como era
Como era de esperar, en la geometría elíptica no se de esperar, la suma de sus ángulos resultaba ser 180º.
satisface el V postulado pero es que, además, las rectas Lobachevski observó que un triángulo terrestre era
no son infinitas sino cerradas... y, por otro lado, es muy demasiado pequeño como para permitir apreciar las
sencillo visualizar un modelo de esta geometría elíptica. diferencias, así que pretendió estudiar uno astronómi-
Basta considerar una esfera y definir los siguientes ele- co... y tampoco llegó a ningún lado, porque las diferen-
mentos: cias en distancias Tierra-Sol son inferiores a la milésima
• Plano: superficie esférica. de segundo.
• Punto: par de puntos diametralmente opuestos Actualmente, según la teoría de la relatividad, es la
en la esfera. geometría elíptica de Riemann la que más se ajusta a la
métrica del universo. Según palabras de B. Lewis: “En
• Recta: círculo máximo sobre la esfera; es decir, la teoría general de la relatividad de Einstein, la geo-
línea geodésica. metría del espacio es una geometría riemanniana. La
A poco que enrede con este modelo, puede obser- luz viaja a través de geodésicas y la curvatura del espa-
var fácilmente los resultados de la geometría elíptica. cio es función de la naturaleza de la materia que lo
Por ejemplo: compone”

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