Medicina Ancestral
Medicina Ancestral
Medicina Ancestral
Las plantas en su contexto general constituyen la verde capa de hierbas que cubre el
planeta tierra, absorbe los rayos del sol y los almacena en forma de energía química
mediante la llamada fotosíntesis. Las plantas nos proveen de sustancias que
actúan como remedios curativos, otros como venenos, incluso existen algunas con
sustancias químicas poderosas que pueden influir en el ánimo y en la esfera psíquica
de las personas. Así también existen algunas que actúan sobre el ámbito sexual como
sustancias afrodisíacas y muchas otras pueden actuar como anticonceptivos.
En todas las partes del mundo las plantas acompañan al hombre desde su origen.
Pueblos distantes, que habitan en continentes diversos y lejanos, pueden tener el
mismo tipo de plantas y las utilizan con fines similares, pero en otros casos los usos y la
forma de aplicarlas difiere notablemente.
En la mentalidad religiosa, las fuerzas del bien, del mal y de la naturaleza son
regentadas por sus dioses y la idea de la enfermedad esta producida debido al pecado,
a la culpa; prevenida mediante el uso de amuletos o talismanes y curada por la
expulsión de espíritus del cuerpo por medio de preparados con plantas de acción
emética o purgante, hoy en día estas ideas las encontramos en civilizaciones y lugares
geográficamente muy alejados y son parte de las creencias internas de las personas, se
manifiestan en los actos de curanderismo, sanación o durante rituales de tipo mágico-
religiosos.
Existen en el mundo unas 250 mil especies vegetales de las cuales sólo se conocen
científicamente el 10% de ellas, considerándose como medicinales alrededor de 12 mil
especies en total. Lo cual no significa que el resto no sea medicinal, sino que aún
carecen de evidencia científica que las avale como tales. Según datos de la OMS, casi el
80% de la población mundial depende para su atención primaria de la salud, de las
plantas medicinales. Al existir un gran número de plantas y una alta demanda de las
mismas a nivel global, comprenderemos que es muy largo el camino que aún queda
por recorrer y que son muchos los medicamentos que restan por descubrir para lograr
sustancias químicas de interés farmacológico que permitan al hombre tener la calidad
de vida que merece.
En la actualidad, la ciencia esta interesada en modo siempre creciente por las plantas
medicinales, la potencialidad de su uso aplicativo es alta, en especial en el campo de la
farmacéutica o terapia galénica preventiva, aún hoy en día en los países de América del
sur tenemos una gran biodiversidad que puede ser considerada como una fuente
importante de nuevas biomoléculas o sustancias químicas de interés farmacológico. De
la misma manera en Latinoamérica y América Central, aún hoy en día se mantiene un
importante patrimonio de conocimientos tradicionales sobre el uso medicinal de las
plantas que con fines de investigación y búsqueda de nuevas sustancias naturales
resulta enormemente significativo.
Del punto de vista estético, la planta medicinal no es solo un contenedor de principios
activos (sustancias químicas con acción terapéutica), tiene una forma, un determinado
color, en varios casos algún olor característico, cumple con un ciclo vital, ofreciendo a
más de una acción benéfica para la salud humana, un aporte al paisaje natural.
Unas veces los usos de las plantas medicinales son determinados por un efecto
farmacológico evidente que presentan en el organismo humano, otras veces por su
empleo en ceremonias o rituales mágico-religiosos (uso importante del proceso de
sanación en comunidades y pueblos indígenas).
En el presente curso, trataremos de poner a la luz algunos de los instrumentos que nos
permitan obtener conocimientos sobre el origen y el uso común de especies
medicinales desde tiempos milenarios, los mayores testimonios sobre el uso
tradicional y ancestral de especies medicinales se han obtenido de estudios de tipo
etnohistórico, etnobotánico y arqueobotánicos; por ello, en las varias ocasiones que se
traten temas relacionados al empleo de recursos terapéuticos vegetales se pondrán
ejemplos de este tipo.
En algunas partes del curso pondremos en consideración también conceptos del uso
terapéutico de fitocomplejos o fitopreparados (fito=planta), proponiendo una
integración entre el conocimiento farmacológico-fitoquímico y el etnobotánico-
tradicional de comunidades y pueblos ancestrales.
Para finalizar la parte de introducción al curso, debemos indicar que en diversas partes
del mundo, el conocimiento ancestral y tradicional del uso de plantas medicinales hoy
en día se integra con la ciencia médica para lograr potenciar efectos terapéuticos en la
salud, más adelante existirá un capítulo específico sobre el tema.
Suerte en su estudio.
Chabaco A.
La primera droga primitiva que entra a un registro escrito es el opio conocido también
como adormidera (Papaver somniferum), planta que pertenece a la familia botánica de
la Papaveráceas, la especie produce de forma mayoritaria el alcaloide llamado morfina.
El nombre (morfina) fue puesto en honor a Morfeo, el Dios griego del sueño (de ahí el
dicho popular de caer en los brazos de Morfeo). A pesar de su fama como planta
adictiva, los usos primitivos que se le conocieron datan del siglo IV antes de Cristo
siendo utilizada como antidiarreica y antidisentérica. En el tercer milenio anterior a la
era cristiana, se descubrieron tablillas cuneiformes en Uruk, en las cuales se recomienda
como un medio para obtener salud y goce corporal.
Una de las recetas del papiro de Ebers que habla del uso de la
adormidera en los niños está a medio camino entre lo hilarante y lo
intrigante: “Mézclese el jugo de la planta spen con estiércol de
moscas que hay en las paredes, hágase una masa, pásese por tamiz
y adminístrese durante cuatro días. Los gritos de los niños cesarán
enseguida”.