Apuntes Magnéticos

Del átomo a la foto: el fenómeno de

resonancia magnética nuclear

Aníbal J. Morillo, 2020

 Presentación
Las imágenes por resonancia magnética (RM) representan un avance tecnológico cuya importancia se ha comparado
con la del descubrimiento de los rayos X. A partir del magnetismo, un fenómeno natural conocido desde la antigüedad,
y gracias al ingenio de varias mentes brillantes, se llega al fenómeno físico de
la resonancia magnética nuclear. Gracias al esfuerzo -combinado o
enfrentado- de muchos otros, se obtienen imágenes mediante este método.
La formación de las imágenes difiere en forma sustancial de lo conocido en
los métodos que utilizan radiación ionizante. Los principios físicos que rigen
las imágenes por RM resultan completamente novedosos, incluso para
quienes tengan experiencia previa con otras modalidades de imagen.
La comprensión de la física básica de la resonancia magnética puede
permitir un mejor aprovechamiento de este método. Sin duda, con un mejor
conocimiento del origen de las imágenes, se podrá planear mejor su uso.
Tuve la fortuna de conocer este método en 1988, cuando no existían en
Colombia equipos de RM. Mi primera experiencia con la física de la resonancia magnética fue casi traumática. Es
tanta la información nueva que hay que procesar, y de un grado de dificultad tan alto, que inicialmente es difícil creer
que uno puede llegar a entender la física de la resonancia magnética. La mala noticia es que, tras algo más de tres
décadas de trabajar con RM, es claro que muchos de los aspectos de la física de la resonancia magnética no podrán
ser comprendidos jamás por muchos de los involucrados en el uso de esta técnica, incluyendo tecnólogos y
radiólogos u otros especialistas, a menos que se tenga formación avanzada en física cuántica.
Ni el haber leído cientos de veces un número similar de artículos o capítulos sobre el tema, ni el haber tenido la
fortuna de recibir información de primera mano de algunos expertos, pioneros en este campo, parece suficiente.
Mi primer acercamiento a la física de la Resonancia Magnética fue estimulado por el Dr. Robert Quencer, en la
Universidad de Miami. En los primeros años de la RM en Colombia, participé con César Maldonado (q.e.p.d.) en la
divulgación de esta técnica en diferentes regiones del país, tanto en sus aplicaciones clínicas como en algunos
aspectos de la física de este método. El Dr. Peter Rinck nos acompañó en uno de estos primeros eventos de
divulgación. Años después, durante mi paso por la Universidad de Pensilvania, pude hablar con doctores en física,
bioquímica, física nuclear y astrofísica. Las conversaciones de física con Leon Axel, por ejemplo, fueron una
experiencia tan inolvidable como inalcanzable. El equipo dirigido por el Dr. Herbert Kressel, que incluía nombres tan
importantes como el del físico Felix Wehrli, el bioquímico Robert Lenkinski, y el físico y radiólogo Mitchell Schnall,
entre muchos otros, ayudaron a consolidar algunos de los conocimientos de los conceptos físicos aquí presentados.
Las limitaciones de memoria y espacio me impiden hacer un listado de los nombres de aquellos lo suficientemente
generosos como para compartir conmigo sus conocimientos a lo largo de todos estos años. Entre ellos recuerdo a
Hernán Jara, Norbert Pelc, Erwin Hahn, Georg Bongartz y tantos otros.
La repetida presentación de conferencias sobre el tema y los muchos intentos propios por explicar estos
interesantísimos fenómenos me han permitido recopilar estos apuntes, una especie de guía para aproximarse a la
comprensión de los principios físicos de la resonancia magnética, una técnica verdaderamente fascinante, con un
futuro tan prometedor como lo fue su nacimiento. Esta entrega de los apuntes se centra en el fenómeno físico de la
resonancia magnética nuclear. Para comprender mejor estos apuntes, vale la pena conocer antes los principios de la
estructura atómica, las herramientas usadas para hacer resonancia magnética: imanes, antenas y gradientes, y los
tipos de magnetismo que existen. Cada uno de estos temas ha sido tratado en otros Apuntes Magnéticos, que
conforman la base de un curso de los principios físicos de las imágenes por resonancia magnética, al que he dado el
nombre «Del átomo a la foto». En este capítulo, el fenómeno de resonancia magnética nuclear (RMN), base para la
formación de imágenes con esta modalidad.

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 Organización
1. Presentación
2. Organización
3. Momento angular
4. Ecuación de Larmor
5. Relación giromagnética

6. Representación vectorial
7. Orientación de la magnetización
8. Pasos para hacer RMN
9. Magnetismo poético
10. Preparación
11. Impulsos de saturación
12. Impulsos de inversión
13. Excitación

14. Relajación

15. Bibliografía

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 Momento angular
«La mayor parte de las ideas esenciales en ciencia son fundamentalmente simples
y pueden, en términos generales, ser explicadas en un lenguaje comprensible por
todo el mundo.» Albert Einstein.

La materia está compuesta de átomos.

Los elementos que poseen átomos con
Quizá con el ánimo de confundirnos, los
número impar de electrones tienen físicos usan indistintamente los
términos protón y espín como
una propiedad conocida como sinónimos. Esto solo funciona con el
momento angular o espín. Esto hidrógeno, que posee un solo protón.
En los átomos de sodio (23Na), fósforo
significa que tienen un campo (31P) y otros, la resonancia también está
influida por otras partículas
magnético propio, es decir, se subatómicas, no solo por los protones.

comportan en forma similar a

pequeños imanes. Los átomos tienen dos
tipos de movimiento, uno de rotación
alrededor de su eje, el otro, de precesión,
en forma similar a lo que hace un trompo, o
como lo hacen los planetas alrededor del
sol.

Es una fortuna que el átomo de hidrógeno -el mas

abundante del cuerpo-, tenga esta propiedad.

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 En una muestra de átomos de hidrógeno -como los que se encuentran dentro
de cualquier tejido- sus campos
magnéticos se encuentran
orientados al azar, es decir, se
cancelan unos a otros.
Esta es la razón por la cual los
tejidos no poseen magnetismo
neto.
(No somos magnéticos, aunque se
faltaría a la verdad si no
reconocemos que algunas Muestra de átomos de hidrógeno con
momentos magnéticos representados como
personas poseen cierto vectores orientados al azar: se cancelan
unos a otros.
«magnetismo»).
Si se somete una muestra de tejido
a un campo magnético
(que es lo mismo que
introducir a un paciente
en un imán), sus átomos de
hidrógeno se alínean con este
campo externo, al que llamamos
B0.
De hecho, le sucede lo mismo a los
átomos de elementos distintos al Muestra de átomos de hidrógeno dentro de
un campo magnético (B0): sus momentos
hidrógeno, siempre que tengan la magnéticos tienden a orientarse a lo largo
del eje del campo magnético.
propiedad descrita como momento
angular, como el sodio, carbono,
nitrógeno y otros. Todos estos tienen en común el hecho de contar con un
número impar de electrones.

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 Ecuación de Larmor

La alineación es un proceso dinámico, en el cual existe una precesión

alrededor del eje del campo magnético externo. La frecuencia de dicha
precesión es exclusiva para cada elemento, y depende de la intensidad del
campo magnético aplicado, según la
ecuación de Larmor:
El irlandés Sir Joseph Larmor (1857- 1942)
f0 = γ · B0 fue un científico muy prolífico, con
importantes contribuciones a la física, la
química y las matemáticas.
donde f0 es la frecuencia de En 1897 describió la ecuación que lleva su
nombre, en un intento por explicar el
precesión, γ corresponde a la comportamiento de los espectros ópticos,
mucho antes de su aplicación en
relación giromagnética y B0 es la resonancia magnética.
potencia del campo magnético
externo.

Cada elemento tiene una relación giromagnética específica, por cada

unidad T (Tesla) de campo magnético utilizado. Para el hidrógeno, la
relación giromagnética es de aproximadamente cuarenta y dos y
medio millones de veces por segundo (42.5 megaHercios o MHz) por Tesla.

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 Relación giromagnética
Los átomos de cada elemento con momento angular o espín tienen una
relación giromagnética única. Esto significa que cada elemento va a girar a
una frecuencia dada, por unidad de campo magnético.
La tabla de relaciones
Relación giromagnética
giromagnéticas muestra la
Núcleo MHz/T Sensibilidad
frecuencia específica de
precesión para distintos 1H 42.56 100
13C 10.7 0.25
elementos con número impar de 14N 3.1 0.20
electrones, pero además hace 23Na 11.3 0.13
32P 17.2 0.41
evidente que no todos los átomos
tienen la misma sensibilidad.
Los átomos de hidrógeno, que casualmente son los más abundantes en el
cuerpo humano, son los más sensibles (100%) al fenómeno de resonancia
magnética nuclear. Esto puede significar que fuimos hechos para ser
resonados…

Se necesitan grandes esfuerzos de ingeniería para interactuar con los átomos

de otros elementos, precisamente por ser menos sensibles al fenómeno de
resonancia magnética nuclear.
Los átomos de sodio, elemento también frecuente en nuestras células, son
unas 760 veces menos sensibles a este fenómeno. Por este motivo, los
estudios convencionales de resonancia magnética se centran en el análisis
de los átomos de hidrógeno en diferentes moléculas, que se encuentran
dentro de las células que conforman los tejidos de los que están hechos los
órganos.

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 Representación vectorial
Antes de continuar, es importante tener
claridad acerca del concepto de vector y
a
geométrico o espacial, también llamado
vector euclidiano, o vector, a secas.
Un vector es una cantidad que tiene
dos características: magnitud y
x
dirección. Los vectores se representan
gráficamente como flechas sobre un b
z
plano cartesiano de tres ejes (x, y, z).
Su magnitud corresponde a la longitud
de la flecha y su dirección es el ángulo
con respecto al centro del plano Vectores: Sobre un plano cartesiano
(x,y,z) cada vector o flecha tiene una
cartesiano. magnitud o longitud y una
orientación o ángulo. Cada vector
Cada vector tiene componentes sobre los tiene además componentes sobre los
diferentes planos. El vector amarillo
diferentes ejes, según su orientación. (a) tiene un componente sobre el eje
Algunos vectores pueden tener x (verde) y uno sobre el eje y (azul).
El vector rojo (b) tiene un
componentes positivos o negativos sobre componente sobre el eje x (marrón),
uno negativo sobre el eje y (violeta) y
los planos que se forman con base en los uno sobre el eje z (verde oscuro).

ejes cartesianos.
Como se verá, estos componentes son la clave para comprender la
representación gráfica de un fenómeno como el de la resonancia magnética
nuclear.
El matemático griego Euclides (325 a.C. - 265 a.C *)
es reconocido como el padre de la geometría. Sus cinco
postulados básicos siguen vigentes en lo que se conoce
como geometría del espacio físico o euclidiana.
En 1637, casi 1800 años después, el filósofo, físico y
matemático francés René Descartes (1596 -1650), cuyo
nombre latinizado fue Renatus Cartesius, describió el
sistema de coordenadas que es usado para la
descripción de los vectores.

*a.C. hace referencia al uso común de esta sigla para referirse

a la era actual, «antes de Cristo», no al uso mas
recientemente postulado -y no oficial- «antes del coronavirus».

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 Orientación de la magnetización
Orientación paralela

Orientación antiparalela

Bajo la influencia de un campo magnético externo, los átomos se orientan a lo

largo del eje de dicho campo, ya sea en la misma dirección (paralela) o en la
dirección opuesta (antiparalela). Evidentemente, sería imposible dibujar
cientos de millones de protones, por lo cual solo incluyo unos cuantos. En el
esquema, la proporción entre los que se encuentran en orientación paralela y
antiparalela tampoco corresponde a la realidad. El dibujo representa una «foto»
de un momento dado de un proceso dinámico.

De nuevo, la muestra de átomos de hidrógeno que es

sometida a la influencia de un campo magnético externo B0,
precesa alrededor del eje de dicho campo, pero con dos
opciones. Una es de baja energía, llamada orientación paralela, y la otra es de
alta energía, llamada antiparalela. Estas orientaciones son dinámicas, es
decir, van cambiando con el tiempo. En cualquier momento dado, la mayoría
de los protones estarán en orientación paralela, precisamente porque no
requiere de tanta energía. Solo unos pocos estarán en la posición contraria.
Por cada millón de protones, unos tres o cuatro átomos de hidrógeno estarán
en orientación antiparalela. Esta diferencia en la orientación es la
responsable de las señales que se procesan para formar las imágenes. Esa
pequeña proporción de protones antiparalelos fluctúa con el tiempo, lo cual
significa que no siempre son los mismos protones los que están en dicha
orientación, aunque la proporción se mantiene y depende de la intensidad
del campo magnético. Esto explica la ventaja de los imanes mas potentes,
que reciben mayor señal para procesar las imágenes.

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 No es fácil representar este fenómeno gráficamente, pues un esquema
muestra una «foto» o imagen estática. Quizá una animación sea
mejor para comprender los cambios en la orientación de cada
protón, que en un momento dado estará paralelo, y al momento
siguiente antiparalelo, para retomar su posición paralela y volver a orientarse
en forma antiparalela, y así sucesivamente, pero manteniendo la proporción
mencionada.
Así, la analogía con un trompo o con los planetas no es muy adecuada, pues
los trompos convencionales no se invierten. Los planetas de nuestro sistema
solar tampoco cambian así de drásticamente su orientación, pues sería como
si de un momento a otro, en el planeta Tierra, el cono sur se
volteara para quedar en el hemisferio norte y norteamérica
quedara en el hemisferio sur, con fluctuaciones periódicas
entre una posición y otra…
Cuando me encuentro en un salón
de clases adecuado, con un grupo
reducido de asistentes, suelo hacer
la demostración con un pequeño
trompo metálico convencional y con
algunos trompos cuyo diseño les
permite invertirse.

En tiempos de conferencias
virtuales y de distanciamiento, en Fotografía de unos trompos que uso para
mostrar el fenómeno de precesión.
vez de girar unos trompos en una
mesa, puede ayudar un vídeo que
pretende mostrar el comportamiento de diferentes trompos, para explicar la
rotación, la precesión y la inversión, así como los estados paralelo y
antiparalelo, de baja y alta energía, respectivamente.
He aquí el enlace al vídeo Trompos y espines:

https://youtu.be/rzgh5PVWoPc

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 Bo
42.5 MHz/T

Como es imposible dibujar todos los protones de una muestra y puede resultar
confuso dibujar solo algunos cientos de ellos, uso el dibujo de un «gran protón»
que representa la tendencia general de la mayoría, que es la orientación
paralela al campo B0, con una frecuencia de precesión específica para el
hidrógeno de 42.5 MHz por unidad Tesla.

Para facilitar la representación del fenómeno de precesión alrededor del eje

del campo magnético externo, dibujo (como hacen muchos autores) un solo
protón que representa a la tendencia de la mayoría, es decir, la orientación
paralela. Al estar bajo la influencia del campo magnético, los protones son
susceptibles de ser estimulados. La manera de estimularlos es mediante
ondas de radiofrecuencia (RF) cuya oscilación coincida con la frecuencia de
la relación giromagnética, es decir, aproximadamente 42.5 MHz por unidad
Tesla. Son precisamente estos estímulos los que se necesitan para producir
resonancia, el fenómeno mediante el cual interactúan dos o mas objetos que
vibran a una misma frecuencia. La definición de resonancia sugiere la
interacción entre un sistema que vibra, el cual obliga a otro sistema vecino a
vibrar a una frecuencia específica, con una mayor amplitud. Así, si se hace
vibrar una cuerda de una guitarra y se acerca una segunda guitarra, la
misma cuerda en la segunda guitarra comenzará a vibrar.
En física, es común que se use el ejemplo de dos diapasones que se ubican
muy cerca el uno del otro. Al hacer vibrar uno de ellos, el
segundo comenzará a vibrar, cuando esté lo suficientemente
cerca, si está «afinado» en la misma frecuencia del primero.

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 Bo
42.5 MHz/T

El estímulo para producir el fenómeno de resonancia se emite desde una

antena en forma de ondas. Al apagar el estímulo, la energía aplicada en forma
de ondas de RF produce un «eco», ondas de RF que son captadas por la antena
para su procesamiento.

En el caso de la resonancia magnética nuclear, el estímulo para hacer

«vibrar» a los protones se hace con ondas de radiofrecuencia, emitidas desde
una antena a una frecuencia específica. Al suspender el estímulo, las ondas
de RF se «reflejan» (por eso se llaman «ecos») y son captadas por una antena,
que puede ser la misma que se usó para la emisión de RF, o una distinta.
Las ondas de RF reflejadas contienen información acerca de la estructura de
las moléculas donde se encuentran los átomos de hidrógeno estimulados.
De nuevo, los tejidos no «emiten» ondas de RF, simplemente «devuelven» la
energía que se les había aplicado. Como se discute en un documento aparte,
sobre imanes y antenas, las ondas de radiofrecuencia no son iguales a las
ondas de radio, diferencia que parece ser muy importante para los físicos.

Sin embargo, debido a que usamos ondas y antenas, yo sigo

usando (impunemente) la analogía con ondas de radio y con
emisoras que usan diferentes frecuencias para explicar el
fenómeno de resonancia.

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 Pasos para hacer RMN
Como se ha descrito, la manera de interactuar con los átomos en precesión
es mediante la aplicación de una forma de energía que tenga la misma
frecuencia que la de dicha precesión. Esta forma de energía es
una onda de radiofrecuencia, la cual se emite a la frecuencia
exacta que corresponde a los átomos de hidrógeno. En un equipo de
1.5 T, esta frecuencia se puede calcular, son casi sesenta y tres
millones de ciclos por segundo (haga la cuenta). La interacción entre la
frecuencia de precesión de los átomos sometidos a la influencia de un
campo magnético externo y una onda de radiofrecuencia produce un cambio
en la orientación de los átomos, que depende del tiempo de duración del
impulso de radiofrecuencia aplicado. Lo más común es utilizar impulsos
capaces de cambiar la orientación atómica en 90º. La interacción entre
los protones y las ondas de radiofrecuencia, gracias a la coincidencia de sus
frecuencias de rotación es, precisamente, el fenómeno de resonancia
magnética nuclear, poéticamente comparado con un «canto protónico» por
Alain Coussement.
Para hacer resonancia magnética nuclear (RMN), se
RMN en tres pasos:
necesitan tres pasos: preparación, excitación y Preparación
relajación. Para muchos, la descripción de estos Excitación
Relajación
componentes evoca otras actividades mas
interesantes y puede resultar en una revelación
inspiradora. Lo sé, porque en versiones previas de esta conferencia, es en
este momento de la charla cuando comenzaban a circular entre los
asistentes algunos mensajes escritos en trozos de papel, que parecían
buscar algo de excitación, y que configuraron un estilo literario que yo llamé
«magnetismo poético». Lamentablemente, no he podido seguir decomisando
(perdón, «coleccionando») estos mensajes. Supongo que las nuevas
generaciones ahora se «textean» cosas similares con sus teléfonos móviles…

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 Magnetismo poético

Tu magnetis
mo
me supera!

m i e je de
Eres
ón!
precesi

Alineemos
nuestros vectores
en el plano
horizontal…!
¿Resonamos
juntos?!

vam
os a
prep

s tan
para
una
S U R
ara
A DO !
rnos
a CEN
exci
¡ N o se taci
ón…
o!!
antiparalel

Ejemplos de la inspiración de que es capaz la descripción de las secuencias de impulsos

de radiofrecuencia usadas en resonancia magnética como una sucesión de eventos que
comienza con la preparación, sigue con la excitación y continúa con la relajación.

La divulgación de algunos de los mensajes que circulan entre los asistentes a este tipo
de conferencia se sale del alcance de estos apuntes; fue necesario censurarlos...

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 Preparación
La preparación comienza con el ingreso del paciente al interior del imán, con
la magnetización de los tejidos. Esto significa que la orientación de los
protones cambia gradualmente de
una distribución al azar, en la cual
sus vectores se cancelan, a una
orientación preferencial hacia la
posición paralela al campo
magnético externo. Es importante
recordar que este es un proceso
dinámico, en el que unos pocos
átomos cambian de la orientación
paralela a la antiparalela y
viceversa, siempre predominando, Esquema que muestra la tendencia
preferencial de los átomos de hidrógeno
por mucho, la orientación paralela. bajo la influencia del campo magnético a
orientarse en forma paralela. Este
También es muy importante
esquema apareció en un número de
entender que estas fluctuaciones en National Geographic ® de 1987, dirigido al
público general, en el que se explica el
la orientación no se refieren a un fenómeno de la RMN.
proceso en el cual los átomos
cambian físicamente de posición, sino a un fenómeno cuántico, en el cual la
orientación del vector de magnetización cambia de dirección. Si la inmensa
mayoría de los átomos de una muestra (paciente) realmente girara 90º (o
cualquier otro ángulo), seguramente veríamos al paciente dar vueltas en el
interior del imán. El cambio en la orientación de los vectores es necesario,
pues para obtener una señal para procesar, se requiere de un componente
vectorial de magnetización transversal.
Antes comenzar a estimular los átomos magnetizados, el área a examinar se
puede preparar de diferentes maneras. Esto se logra mediante la aplicación
de impulsos de saturación o de inversión.

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 Impulsos de saturación
Hay tres tipos de impulsos de saturación: espacial, de flujo y espectral.
Los impulsos de saturación espacial también son ondas de radiofrecuencia,
aplicadas en un área específica. Se
puede escoger manualmente su
ubicación, angulación y espesor
para interferir con la señal para
eliminar adrede las señales de
alguna región anatómica. Su uso
mas común es la eliminación de
artefactos de movimiento. Un
ejemplo común es la aplicación de
una banda de RF por delante de la
columna cervical, con el fin de
evitar que los movimientos de
deglución se proyecten encima de la Corte sagital que muestra una banda de
saturación espacial de unos 5 a 10 cm de
columna cervical. Obviamente, estos grosor, la cual se aplica por delante de la
columna cervical para eliminar las señales
impulsos no se usarían si el estudio
de esta zona, con el fin de evitar la
no es de la columna cervical sino del propagación de movimientos de deglución
sobre la columna.
cuello (por ejemplo, para caracterizar
una masa de tiroides), pues se
borrarían las señales de esta zona.
Las empresas que fabrican los equipos de resonancia magnética le han dado
diferentes nombres a estos impulsos. General Electric® los llama Sat pulses,
Philips® llama a su técnica REgional Saturation Technique (REST), mientras
que para Siemens®, Hitachi® y Toshiba® /Canon ® son impulsos de
presaturación, Presat pulses.
El segundo tipo de impulsos que se puede aplicar durante la fase de
preparación es el de flujo. Como su nombre lo indica, los impulsos de
saturación de flujo pretenden eliminar las señales que se pueden producir
por el flujo sanguíneo, las cuales también pueden manifestarse como
artefactos dentro de los vasos o proyectados por fuera de los mismos.

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 El desplazamiento de los
protones a lo largo de los vasos
sanguíneos hace que, en general,
no haya señal en su interior, por
lo cual es común que los vasos,
especialmente los de alto flujo, se
vean sin señal, es decir, de color Flujo y señal.
negro en la escala de grises. A este Esquema de un vaso con flujo laminar cuyo
flujo se dirige de izquierda a derecha. El bolo
fenómeno se le conoce como de protones que fueron fueron estimulados en
cortes realizados mas a la izquierda ingresa al
«ausencia de señal (o vacío de
primer corte con alta señal, muestra algo de
señal) por flujo». Sin embargo, hay señal en el siguiente corte y no produce señal
en el tercer corte.
ocasiones en que los vasos pueden A la derecha, se aplica un impulso de
mostrar alta señal en su interior. saturación (líneas gruesas amarillas verticales)
que acompaña a cada corte y elimina
Para evitar esto, se pueden aplicar efectivamente la señal del bolo de sangre, para
volverla negra. Abajo, un corte transversal del
impulsos de RF por encima o por
abdomen sin impulso de saturación de flujo,
debajo de los vasos cuya señal se que muestra alta señal en la aorta (flecha
roja), como en el primer corte del esquema de
quiere eliminar. Por ejemplo, si se arriba a la izquierda.
examina el cuello para evaluar las
arterias carótidas, estos impulsos se
pueden aplicar por encima de cada
corte para eliminar las señales que
vienen en sentido contrario, es
decir, las de la vena yugular. Estos
impulsos son de menor espesor y
pueden aplicarse junto con cada
corte, como si «caminaran»
detrás de cada corte, por lo
que se conocen genéricamente
como walking pulses. General Electric® los llama Walking sat, Philips®
llama a su técnica Travel REST, mientras que para Siemens® es Travel sat o
Tracking sat. Para Hitachi® es sequential presat y para Canon® es Blood
Flow Artifact Suppresion Technique (BFAST). Algunos las llaman «técnicas de
sangre negra», por razones obvias.

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 El tercer tipo de impulsos de que se puede
aplicar durante esta fase de preparación es
el espectral. Los impulsos de saturación
espectral están diseñados para suprimir
especies químicas en forma selectiva. El
ejemplo mas común es la anulación de la
grasa, que puede usarse para disminuir
algunos artefactos, para mejorar la
visualización o caracterización de algunos Saturación espectral del tejido
tejidos o lesiones y para la cuantificación graso. Estudio de las órbitas, en las
que se ha eliminado la grasa.
de la grasa, útil en el estudio de síndromes Durante la calibración se pueden
identificar los espectros del agua y
metabólicos.
de la grasa. Se aplica un impulso
Estos impulsos espectralmente selectivos de RF químicamente selectivo que
elimina selectivamente la señal de la
también pueden usarse para eliminar la grasa (área sombreada en el
señal del agua o de sustancias como la esquema de abajo).

silicona. Gracias a un fenómeno conocido

como desplazamiento químico, los espectros
del agua y de la grasa se separan unos 210 a
220 Hz en un equipo de 1.5 T (el doble en
uno de 3T). Una vez identificados, se aplica
un impulso de RF cuya amplitud de banda es
angosta, sintonizada en el centro de la
frecuencia de resonancia de la grasa, que
elimina su señal.
En forma genérica, estas técnicas se conocen como Chemical Shift Selective
(CHESS).
Las técnicas para la separación del agua y de la grasa se describen en un
documento aparte.

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 Impulsos de inversión
Otra manera de afectar los tejidos durante la preparación de los mismos, es
con la aplicación de impulsos de inversión. Esto se hace mediante la
aplicación de un impulso de RF de 180º, con el cual se logra invertir la
magnetización de todos los tejidos. Al suspender el impulso, todos los tejidos
comienzan a recuperar su magnetización, pero cada uno lo hace a una
velocidad distinta. La idea es escoger un tejido que se quiere eliminar o
atenuar para trabajar con las señales de los que no se han recuperado aún,
lo cual explica que estas técnicas se
llamen Inversion recovery (IR). Esto se
logra escogiendo un tiempo conocido
como tiempo de inversión o tau, que es
el momento en el cual el tejido
seleccionado carece de señal. Las
aplicaciones mas comunes son la
secuencia Fluid Attenuated Inversion
Recovery (FLAIR), de uso frecuente en la
evaluación del cerebro, y la secuencia
Short Time Inversion Recovery (STIR), la
cual atenúa la señal de la grasa. Como Secuencia FLAIR para la atenuación del
líquido cefalorraquídeo.
los impulsos de inversión se aplican
antes de comenzar la secuencia de
impulsos de RF con la cual se adquieren diferentes tipos
de información, se consideran como parte de la
preparación de los tejidos. Los detalles de estas técnicas
de inversión se describen en otros documentos, uno
sobre las secuencias, y otro sobre los métodos para
separar el agua y la grasa con RM.

Secuencia STIR para la atenuación del

tejido graso.

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 Excitación
La cosa se pone interesante:
después de la preparación viene la
¡excitación!
La manera de excitar a los
protones es relativamente sencilla:
se usa una forma de energía que
tenga la misma frecuencia que la
que adquieren los espines durante
la preparación. Si mencioné antes
que la frecuencia de precesión se
El proceso de excitación se lleva a cabo
mide en millones de ciclos por cuando una onda de RF, sintonizada a la
misma frecuencia a la que giran los
segundo o MHz, resulta obvio usar protones dentro del campo magnético, es
emitida por una bobina (placa roja a la
ondas de RF «sintonizadas» a esa derecha). La excitación produce un cambio
en el nivel de energía que se representa
misma frecuencia. Así, si la relación como una deflección del vector, cuyo grado
depende de la duración del estímulo,
giromagnética del hidrógeno es de comúnmente 90º en la secuencia conocida
4258/G, en un equipo de 1.5 T se como eco de espín.
National Geographic Society © 1987.
requiere de una onda de RF de
(4258Hz/G) • (15,000 G) = 63,87 MHz.
La excitación se lleva a cabo mediante una secuencia de impulsos de RF, es
decir, la aplicación de una serie de ondas de RF que se «encienden» y
«apagan» en forma secuencial o sucesiva, para obtener diferentes tipos de
contrastes entre los tejidos. Para que la excitación funcione, debe ser
selectiva: esto significa que se aplica en una región específica (posición de
corte) y en un volumen dado (espesor de corte). Obviamente, se debe escoger
también el plano del corte. Por ejemplo, un corte transversal en el ápice
torácico, de 5 mm de espesor, o uno sagital oblicuo sobre el cóndilo interno
del fémur, de 3 mm de espesor.

Apuntes Magnéticos - el fenómeno de resonancia magnética nuclear AJ Morillo 20

 Relajación
Es apenas lógico: después de la
preparación y la excitación, sigue
la relajación. Se trata del
proceso de recuperación luego de
que los tejidos han recibido los
estímulos, en este caso, las
ondas de RF. La energía recibida
debe regresar cuando se
interrumpe su aplicación.
La interrupción de la secuencia de estímulos
(ondas de RF) hace que el protón vuelva a su
El resultado de la estado basal, liberando la energía en forma de
una onda de RF, que es captada por la antena
excitación es que la (placa roja) y convertida en un señal. Nuestro
«radio» debe estar «sintonizado» en la frecuencia
energía se libera en una
correcta, para oír «el canto de los
forma similar a la que fue protones» (difícilmente se puede ser mas poético).
Esquema de la National Geographic Society ©
aplicada, es decir, como una 1987.
onda de radiofrecuencia. Lo
interesante es que esa onda refleja la composición molecular de los tejidos
estimulados.
Es un eco, pero modificado por el tipo de molécula a partir del cual se refleja.
Se hace la analogía con una cueva u otro lugar donde sea posible obtener
uno o varios ecos luego de un estímulo sonoro. El eco no reproduce
exactamente el sonido emitido. Se modifica su tono o su volumen de acuerdo
a las propiedades acústicas del lugar y a la composición de las paredes o
superficies desde donde se refleja el sonido emitido.
La onda recibida se puede caracterizar con dos constantes de tiempo, que
corresponden a los dos componentes longitudinal y transversal de una onda,
dado por su comportamiento vectorial. Estos componentes corresponden a
los tiempos de relajación.

Apuntes Magnéticos - el fenómeno de resonancia magnética nuclear AJ Morillo 21

 El componente vertical se conoce como el tiempo de relajación longitudinal o
T1, consecuencia del intercambio térmico con el entorno.
El componente horizontal es el tiempo de relajación transversal o T2, el cual
surge del intercambio energético con otros protones.
Los dos componentes hacen se pueden graficar como vectores en un plano
cartesiano, y su comportamiento en el tiempo se conoce como tiempo de
relajación. Su descripción detallada se hará en un documento aparte, sobre
la apariencia de los tejidos en RM.

La preparación, excitación y relajación de los protones es la base para

obtener las ondas que permiten formar las imágenes por RM. Hay varias
técnicas para aplicar las secuencias de los impulsos de excitación. Con cada
una se obtiene información distinta, que permite caracterizar los tejidos
examinados. Dichas técnicas también serán descritas en otros documentos.

Apuntes Magnéticos - el fenómeno de resonancia magnética nuclear AJ Morillo 22

 Bibliografía
Casi todos los textos sobre resonancia magnética, los generales sobre diferentes
aplicaciones o los específicos sobre las aplicaciones de la técnica en diferentes áreas
del cuerpo, incluyen uno o varios capítulos introductorios sobre los principios
físicos de la resonancia magnética. En algunos casos, el mismo experto en física
escribe y reescribe sobre el tema en diferentes textos. En otros casos, cada editor de
esos textos escribe sobre diferentes aspectos técnicos o físicos, o consigue a un
experto que contribuye con una nueva manera de explicar los mismos fenómenos.
Algunos ejemplos son los libros de Edelman, Higgins y Hricak, Brant-Zawadski,
Newton, y Stark y Bradley, este último famoso por su enciclopédico alcance y por el
hecho de llenar uno de sus tres tomos con algunos de los principios físicos que aquí
nos ocupan.
Las empresas fabricantes de equipos de diagnóstico por resonancia magnética
también se encargaron de contribuir con manuales que resultaron siendo
verdaderos clásicos sobre la física de la resonancia magnética. General Electric® ,
Philips® y Siemens® son ejemplos de los orígenes de estos manuales, pero casi que
cada fabricante puso su grano de arena para ayudarnos a comprender los
requerimientos técnicos y físicos de la resonancia magnética. Algunos de estos
manuales no eran firmados por un autor específico al que pueda hacerse un
reconocimiento en esta bibliografía.
Las referencias anotadas no son todas las que hay ni son todas necesarias para
entender el fenómeno físico conocido como resonancia magnética nuclear, el cual
usamos para hacer imágenes. Esta es solo una muestra de las fuentes que he usado
para aproximarme a esta técnica, para comprenderla parcialmente y para tratar de
explicarla. Algunas de las ideas arriba presentadas fueron tomadas de conferencias
que he tenido el privilegio de presenciar, de estos mismos u otros autores.

-Bradley WG, Newton TH, Crooks LE: Physical principles of nuclear magnetic
resonance. En: Newton TH, Potts DG (eds.) Modern Neuroradiology, vol II. Advanced
Imaging Techniques. Clavadel Press, San Anselmo, 1983.

-Coussement A: El canto de los protones. (RM ¿Sin esfuerzo?) Nycomed Amersham,

2000.

-Dixon RL, Ekstrand KE: The Physics of proton NMR. Med Phys 1982; 9: 807-818.

-Duerk JL: Principles of image formation and reconstruction. MRI Clin North Am
1999; 7(4): 629- 659.

Apuntes Magnéticos - el fenómeno de resonancia magnética nuclear AJ Morillo 23

 -Edelman RR, Hesselink JR (eds): Clinical Magnetic Resonance Imaging. WB
Saunders Co. Harcourt Brace Jovanovich Inc. Philadelphia 1990.

-Elster AD: Questions and Answers in Magnetic Resonance Imaging. Mosby-Year

Book, St. Louis, 1994.

-Felmlee JP, Ehman RL. Spatial presaturation: a method for suppressing flow
artifacts and improving depiction of vascular anatomy in MR imaging. Radiology
1987;164:559 –564.

-Harms SE, Kramer DM: Fundamentals of magnetic resonance imaging. Critical

Review Diag Imag. Vol 25, No. 1: 79-111

-Hendrick RE: Basic physics of MR imaging: an introduction. RadioGraphics 1994;

14: 829- 846.

-Jacobs MA, Ibrahim TS, Ouwerkerk R: MR Imaging: Brief overview and emerging
applications. RadioGraphics 2007; 27:1213-1229.

-McGowan JC: Basic principles of magnetic resonance imaging. Neuroimag Clin

North Am 2008; 18(4): 623- 636.

-McRobbie DW, Moore EA, Graves MJ, Prince MR: MRI From Picture to Proton.
Cambridge University Press, Cambridge, 2003.

-Pipe JG: Basic Spin Physics. MRI Clin North Am 1999; 7(4): 607-627.

-Pooley RA: Fundamental physics of MR imaging. RadioGraphics 2005; 25:

1087-1099.

-Sochurek H, Melzer D: Medicine’s New Vision. National Geographic 1987; January:

1-40.© National Geographic Society.

-Stark DD, Bradley WG, Bradley WG: Magnetic Resonance Imaging. 3rd ed. CV
Mosby, St Louis, 1999.

Tubridy, N., & McKinstry, C. S. (2000). Neuroradiological history: Sir Joseph Larmor
and the basis of MRI physics. Neuroradiology, 42(11), 852–855.

-Villafana T: Fundamental physics of magnetic resonance imaging. Radiol Clin

North Am 1988; 26(4): 701- 715.

Bo
42.5 MHz/T

Preparación
Excitación
Relajación

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