Rorty, Etica para Laicos
Rorty, Etica para Laicos
Rorty, Etica para Laicos
Presentación de G. Vattimo
Espiritualidad y secularismo
Dedicarse a un ideal moral es como dedicarse a otro ser humano, no hace falta
interrogarse por el origen del afecto para procurar el bien al otro. El problema es
que la filosofía occidental, al igual que la teología cristiana, es un intento de
ponernos en contacto con algo más grande que nosotros mismos.
Aceptar la idea de Santayana es rechazar la ontoteologia (así nombrada por
Heiddeger), lo que significa “dejar ya de plantearse ya sea preguntas metafísicas
acerca del fundamento o el origen de nuestros ideales, y a preguntas
epistemológicas acerca de cómo uno puede estar seguro de haber elegido el ideal
correcto”. Esta idea es contraria a la tradición filosófica fundada por Sócrates y
Platón, en el sentido de que “lanzarse simplemente a la concreción de un proyecto
equivale a volverse una criatura de voluntad ciega”.
Para Rorty, el relativismo consiste en dejarse llevar por el viento, es decir, abrirnos
a la posibilidad de tomar en consideración todas aquellas sugerencias acerca de lo
que podría aumentar la felicidad humana, pero no significa que cualquier postura
sea válida. Por el contrario, el fundamentalismo considera que los ideales son
válidos si están fundados sobre la realidad. El relativismo es la negación del
fundamentalismo. La democracia se funda sobre la idea de que ninguna verdad es
sagrada porque puede discutirse cualquier cosa.
Bibliografía
Rorty, R. (2009). Una ética para laicos. Madrid: Katz editores.