Resumen Enseñanza Jere Brophy
Resumen Enseñanza Jere Brophy
Resumen Enseñanza Jere Brophy
Enseñanza
Jere Brophy
Prefacio
Esta guía aborda los aspectos generales de la enseñanza efectiva, orientada al
mejoramiento del aprendizaje y se enfoca en el acto central de la educación: la enseñanza.
Introducción
Esta guía resume los principios de la enseñanza efectiva que surgen de la investigación en
las aulas. Aborda aspectos generales del currículo, la instrucción y la evaluación, así como la
organización en el salón de clases y las prácticas de gestión que los sustentan. Se centra en
los resultados del aprendizaje pero reconoce la necesidad de un ambiente escolar
cooperativo y una actitud positiva de los estudiantes hacia la educación, los maestros y los
compañeros de clase.
Los planes de estudios incluyen diferentes tipos de aprendizaje que requieren distintos tipos
de enseñanza, de modo que no existe un método único de enseñanza.
En cualquier materia escolar o dominio de aprendizaje la instrucción de los estudiantes
necesita cambiar en la medida en que mejora su conocimiento sobre el tema.
Los alumnos deben aprender conforme a los mayores niveles de dominio pero, a la vez,
progresar normalmente en el currículo. Esto significa que el contenido curricular y las
actividades de aprendizaje deben ser lo suficientemente difíciles como para desafiar a los
estudiantes e incrementar su aprendizaje.
3. Consistencia curricular
Todos los componentes del currículo convergen para crear un programa consistente, con la
finalidad de alcanzar los propósitos y objetivos educativos.
Los maestros al planear su clase se concentran en el contenido que pretenden cubrir y en
los pasos involucrados en las actividades que sus alumnos realizarán, sin pensar demasiado
en las metas o resultados esperados de la instrucción.
Se debe buscar desarrollo de un currículo orientado al cumplimiento de objetivos, cuya
planeación se guíe por los propósitos y metas generales de la enseñanza y no por la presión
para cubrir el contenido o por los reactivos de una prueba.
En el aula: el currículo no es un fin en sí mismo, es un medio que ayuda a los estudiantes a
aprender lo que se considera esencial en su preparación para desempeñar su función como
adulto en la sociedad y desarrollar su potencial como individuo. Sus objetivos son los
resultados de aprendizaje: conocimientos, habilidades, actitudes, valores y disposiciones a la
acción que la sociedad desea desarrollar en sus ciudadanos.
Se requiere de una planeación curricular que incluya el desarrollo de capacidades que los
estudiantes puedan emplear en sus vidas dentro y fuera de la escuela, ahora y en lo futuro.
A este respecto es importante poner énfasis en los objetivos relacionados con la
comprensión, valoración y aplicación en la vida. Comprensión significa que los estudiantes
aprendan tanto los elementos individuales de una red de contenidos entrelazados como las
conexiones entre ellos, de manera que puedan explicar el contenido con sus propias
palabras y vincularlo con su conocimiento previo. La valoración es que los estudiantes
aprecien lo que están aprendiendo y aplicación en la vida supone que los estudiantes
retengan lo aprendido de manera que les sea útil cuando lo necesiten en cualquier contexto
porque entienden que existen buenas razones para hacerlo
5. Contenidos coherentes
Para facilitar el aprendizaje significativo y la retención, los contenidos deben explicarse
claramente y desarrollarse con énfasis en su estructura y relaciones.
Las redes de conocimientos interrelacionados, estructuradas en torno de ideas generadoras
o clave, pueden ser aprendidas significativamente y retenidas en forma tal que permiten su
posterior aplicación. Es más probable que las habilidades sean aprendidas y usadas
efectivamente si se enseñan como estrategias orientadas por propósitos y situaciones
específicos, con énfasis en cuándo y cómo aplicarlas.
En el aula: la información es más fácil de aprender en la medida en que es coherente; si la
secuencia de las ideas o eventos tiene sentido y la relación entre ellos es evidente es más
fácil comprenderla. Cuando hacen presentaciones, dan explicaciones o efectúan
demostraciones, los buenos maestros muestran entusiasmo por el contenido, y lo organizan
y jerarquizan de manera que se alcance la mayor claridad y coherencia. El maestro presenta
nueva información relacionándola con lo que los estudiantes ya conocen del tema; avanza
gradualmente para que puedan seguirlo; hace pausas en el momento preciso y utiliza todos
los recursos y habilidades de comunicación a su alcance para apoyar la comprensión; evita
el lenguaje vago o ambiguo y las digresiones; provoca respuestas de los estudiantes con
regularidad para estimular el aprendizaje activo y cerciorarse de que cada punto está
dominado antes de continuar con el siguiente; termina con una revisión de los aspectos
principales, recalca conceptos integradores y profundiza con preguntas o tareas que
requieren que los estudiantes expliquen el material en sus propias palabras y lo apliquen o
extiendan a nuevos contextos.
Los principios que subyacen en la integración del currículo y en la coherencia de contenidos
implican que para conseguir estudiantes capaces de construir aprendizajes significativos que
puedan usar en contextos extraescolares, los maestros necesitan: a)dejar de lado la idea de
amplitud de cobertura para disponer de tiempo para desarrollar con mayor profundidad el
contenido relevante; b) representar este contenido como redes de información
interconectada, organizadas en torno de ideas integradoras; c) desarrollar los contenidos
enfocándose en la explicación de las ideas importantes y en su relación entre ellas, y d)
profundizar con auténticas tareas de aprendizaje y medidas de evaluación que ofrezcan a
los estudiantes las oportunidades de desarrollar y desplegar aprendizajes que reflejen los
resultados esperados.
6. Diálogo reflexivo
Se plantean preguntas para propiciar entre los estudiantes disertaciones fundamentadas,
alrededor de ideas integradoras.
Además de presentar información y demostrar la aplicación de habilidades, los buenos
maestros propician gran cantidad de disertaciones basadas en los contenidos; formulan
preguntas para motivar a los estudiantes a reflexionar sobre dichos contenidos, reconocer
las relaciones entre las ideas clave y su implicaciones, pensar críticamente sobre ellas y
usarlas en la solución de problemas, toma de decisiones y otras aplicaciones más
elaboradas. Mediante la participación en tales disertaciones, los estudiantes construyen y
comunican los conocimientos relacionados con el contenido; en ese proceso, abandonan
sus ideas ingenuas o conceptos erróneos y adoptan ideas más sofisticadas y válidas,
imbricadas en los objetivos que persigue el proceso enseñanza-aprendizaje.
En el aula: cuando un nuevo contenido es introducido y desarrollado, se emplea más
tiempo en sesiones caracterizadas por diálogos maestro-alumno que en tareas de trabajo
independiente. El maestro planea secuencias de preguntas diseñadas para desarrollar los
contenidos sistemáticamente y ayudar a los estudiantes a construir –mediante el diálogo– la
comprensión del nuevo conocimiento relacionándolo con su conocimiento previo.
Algunas preguntas básicas, cerradas y prácticas pueden ser las apropiadas cuando los
maestros evalúan el conocimiento previo o revisan un nuevo conocimiento, pero para
alcanzar objetivos didácticos más significativos son necesarias preguntas abiertas que
propicien que el alumno aplique, analice, sintetice o evalúe lo que está aprendiendo.
Puesto que las preguntas se formulan para involucrar a los estudiantes en procesos
cognoscitivos y en la construcción de conocimientos, deben ser dirigidas a toda la clase.
Además de brindar retroalimentación, el maestro alienta a los alumnos a explicar sus
respuestas, o bien a comentar las de sus compañeros.
Las discusiones, que comienzan con un formato de preguntas y respuestas, con frecuencia
evolucionan hacia un intercambio de puntos de vista en el cual los estudiantes dialogan
entre sí y con el profesor y responden a aseveraciones y no sólo a preguntas.
9. Enseñanza de estrategias
El maestro modela e instruye a los estudiantes en estrategias de aprendizaje y
autorregulación.
El aprendizaje en general y las aptitudes para el estudio, así como las habilidades en
dominios específicos (como comprender el significado de un texto, resolver problemas
matemáticos o razonar científicamente) tienen mayor posibilidad de ser aprendidas y ser
accesibles para su aplicación si se enseñan como estrategias con propósitos específicos y se
ponen en práctica con conciencia metacognitiva y autorregulación. La enseñanza de
estrategias es particularmente importante para los estudiantes menos capaces, quienes de
otro modo podrían no llegar a entender el valor del control consciente, la autorregulación y
la reflexión sobre sus procesos de aprendizaje.
En el aula: muchos estudiantes no desarrollan por su cuenta estrategias efectivas de
aprendizaje y de resolución de problemas, pero son capaces de hacerlo a partir de la
demostración y la enseñanza directa de sus maestros.
La enseñanza no sólo debe incluir demostraciones y la posibilidad de aplicar la habilidad
aisladamente, sino también explicaciones acerca del propósito de la habilidad (para qué le
sirve al que la aprende) y las ocasiones en las que podría ser usada. De hecho, la enseñanza
de estrategias es más efectiva cuando incluye una demostración cognoscitiva: el maestro
piensa en voz alta mientras demuestra el uso de una estrategia.
Mientras retroalimenta a sus estudiantes en sus tareas y dirige las subsecuentes actividades
de reflexión, el maestro puede hacer preguntas y comentarios que ayuden a los alumnos a
verificar y reflexionar sobre su aprendizaje.
Conclusiones
La mayoría de estas investigaciones sobre la enseñanza se han realizado en Estados Unidos,
Canadá, Europa occidental y Australia, de modo que el grado en que los resultados aquí
vertidos puedan aplicarse a otros países aún debe ser establecido. No obstante, los
principios presentados en esta guía se consideran de aplicación universal por dos razones.
Primero, investigaciones hechas en todo el mundo indican que la escolaridad tiene más
semejanzas que diferencias a través de países y culturas. Segundo, los principios se refieren
a aspectos generales de la enseñanza que atraviesan los distintos niveles y materias
escolares, no a un contenido curricular determinado. Estos principios se pueden aplicar
universalmente porque se enfocan en aspectos básicos de la educación escolarizada.
Evidentemente requieren adaptarse a los contextos locales, incluidas las características
relevantes del sistema educativo de cada país y la cultura de los estudiantes.
A pesar de que los 12 principios se han resaltado para su discusión y énfasis individual, cada
uno debe ser aplicado en conjunción con los demás. Los principios deben de ser entendidos
como componentes complementarios de un enfoque coherente sobre la enseñanza, en el
cual los planes y expectativas del maestro, el ambiente de aprendizaje en el aula y el manejo
del sistema, el contenido del plan de estudios y los materiales de enseñanza, las actividades
de aprendizaje y métodos de evaluación están todos coordinados para ayudar a los
estudiantes a lograr los resultados esperados.
Referencias
Consultar la página 44 del documento original.
CUADRO
NP PRINCIPIO RESUMEN
1 Un ambiente de apoyo en el salón de clases Los estudiantes aprenden mejor en comunidades de aprendizaje cohesivas y de apoyo.
2 Oportunidades para aprender Los alumnos aprenden mejor si la mayoría del tiempo disponible se destina a actividades relacionadas con el currículo y la
organización de la clase los conduce a comprometerse con ellas.
3 Consistencia curricular Todos los componentes del currículo convergen para crear un programa consistente, con la finalidad de alcanzar los propósitos y
objetivos educativos.
4 Establecimiento de orientaciones de Los maestros pueden preparar a los estudiantes para aprender al proporcionarles una estructura inicial que aclare los resultados
aprendizaje esperados y que indique las estrategias de aprendizaje adecuadas.
5 Contenidos coherentes Para facilitar el aprendizaje significativo y la retención, los contenidos deben explicarse claramente y desarrollarse con énfasis en
su estructura y relaciones.
6 Diálogo reflexivo Se plantean preguntas para propiciar entre los estudiantes disertaciones fundamentadas, alrededor de ideas integradoras.
7 Actividades de práctica y aplicación Los estudiantes necesitan suficientes oportunidades para practicar y aplicar lo que aprenden, y para recibir retroalimentación.
8 Construcción de un soporte al compromiso de El maestro proporciona a los estudiantes la asistencia necesaria que les permita comprometerse en las actividades de
los estudiantes con sus tareas aprendizaje de manera productiva.
9 Enseñanza de estrategias El maestro modela e instruye a los estudiantes en estrategias de aprendizaje y autorregulación.
10 Aprendizaje en colaboración A menudo los estudiantes se benefician al trabajar en parejas o en pequeños grupos, pues ello les permite construir significados
o ayudarse unos a otros en el dominio de sus habilidades.
11 La evaluación enfocada al cumplimiento de El maestro utiliza una variedad de métodos de evaluación formales e informales para encauzar los avances hacia el cumplimiento
objetivos de los objetivos de aprendizaje.
12 Logros esperados El maestro establece y desarrolla las tareas de enseñanza a partir de las expectativas que tiene sobre los logros de aprendizaje.