DIETAS y Nutrición
DIETAS y Nutrición
DIETAS y Nutrición
Antes de entrar a determinar conceptos más amplios como los macro nutrientes es
necesario que conozcamos la información nutricional básica.
Lo primero que debemos saber es qué son los nutrientes, que tipos hay y en que
alimentos podemos encontrarlos.
- Los nutrientes son sustancias químicas que forman parte de la composición de los
alimentos. El organismo los utiliza para su desarrollo, mantenimiento y funcionamiento,
además de para proporcionar energía al cuerpo.
- Los macronutrientes sin embargo son los nutrientes que suministran la mayor parte de
la energía metabólica del organismo. Estos son requeridos en grandes cantidades para
cumplir las diferentes funciones en nuestro organismo.
Los principales son los glúcidos, las proteínas, y los lípidos. Se diferencian de los
micronutrientes, en la cantidad requerida por el cuerpo humano.
Ejemplo:
Dieta de 2000 Kcal con el siguiente porcentaje de macronutrientes:
Hidratos de Carbono 55%
Proteínas 15-20 %
Grasas 25-30 %
Hidratos de Carbono / 4……..275 g
Proteínas 360 /4………………..90 g
Lípidos 540/ 9………………..…… 60 g
Pero la regla de oro en nutrición es que ningún alimento, por muy completo que sea, es
capaz por sí mismo de cubrir las necesidades nutricionales de cada individuo. Por eso hay
que comer de todo, y tomar una alimentación saludable, variada y equilibrada. Solo una
dieta que incluya diferentes alimentos de todos los grupos será capaz de aportarnos los
nutrientes que necesita nuestro cuerpo.
Beneficios de la actividad física y alimentación saludable
Publicada en 6 agosto, 2017
El concepto moderno de nutrición fue establecido por Lavoisier a mediados del siglo XVIII.
Demostró que la alimentación respondía a un problema energético. Sin alimentos un
organismo muere igual que un coche sin gasolina. Pero, además, de proporcionar la
energía necesaria, los alimentos deben aportarnos ciertas sustancias químicas que se
llaman nutrientes. Estos son liberados por los alimentos durante la digestión.
Macronutrientes y micronutrientes
Cualquier dieta (sea la que sea) para ser considerada de muy adecuada tiene que
cumplir con un doble requisito:
1) Asegurarse que la persona obtiene las calorías suficientes para mantener un peso
corporal constante dentro de los límites considerados normales para esa persona
Alimentación y cultura
La alimentación satisface una necesidad biológica primaria del hombre, entendido como
un ser social dotado de cultura. Ésta influye sobre el comportamiento relacionado con el
consumo de alimentos y en última instancia sobre el estado nutricional de los individuos
que integran cada población.
Aporte energético: Este punto resulta fundamental para cualquier ser humano y
para cualquier actividad que se desempeñe. Los aportes de hidratos de carbono,
proteínas y grasas deben ofrecerse en cantidad, calidad y proporción adecuadas.
De este modo, se consigue un correcto funcionamiento del sistema metabólico.
Aporte plástico: Para cumplir este propósito deben considerarse la incorporación
adecuada de proteínas, grasas y ciertos minerales. Las proteínas son parte básica
de la estructura de toda célula viva y ejercen la función indispensable de
construcción tisular. Dentro de los minerales a tener en cuenta, destacamos el
calcio, quien como elemento plástico cumple un papel fundamental en la
contracción muscular y en la transmisión de los impulsos nerviosos.
Aporte regulador: Viene dado generalmente por la incorporación al organismo de
vitaminas y minerales. En el caso de las vitaminas, funcionando como catalizadoras
de las reacciones bioquímicas permitiendo la liberación de energía.
Aporte de reserva: Teniendo en cuenta que hidratos de carbono y grasas son las
principales fuentes de energía, se presupone el almacenamiento de estos
substratos en el organismo para colaborar en el metabolismo energético a la hora
de un esfuerzo físico. Las grasas son fácilmente acumulables, por tanto no
presentan problemas de almacenamiento ni disponibilidad. Todos los seres
humanos contamos con un porcentaje de grasas considerable. Aproximadamente
un 11 % del peso de una persona en buen estado físico que desarrolle actividad en
forma cotidiana (unos 7 kilogramos, para un individuo de 70 kilogramos de peso).
Los hidratos de carbono se acumulan como glucógeno en hígado y músculos, pero
no superan el 0,5 % del peso total del individuo (alrededor de 500 gramos en una
persona de 70 kilogramos de peso.). Este glucógeno se va metabolizando a glucosa
y así convirtiendo en energía. Por esta causa aparece la fatiga muscular después
del gasto excesivo de glucógeno después del ejercicio.
Importancia y objetivos de la nutrición
Las enfermedades del ser humano han variado a lo largo de la historia. Muchas de las que
estaban relacionadas con la escasez de alimentos o la malnutrición han desaparecido en la
mayoría de los países desarrollados y han dado paso a otras de carácter degenerativo o a
enfermedades crónicas. También han aparecido otras ligadas a la sobrealimentación
derivadas de las costumbres alimentarias y hábitos de vida de la sociedad industrial de
finales del siglo XX y principios del XXI.
Los alimentos que consumimos, en toda su variedad cultural, definen en gran medida la
salud, el crecimiento y el desarrollo personal.
Tanto a nivel individual como colectivo, la alimentación tiene gran importancia en la salud
de la población. La dieta forma parte del entorno que afecta a los individuos, y constituye,
además, un elemento de abordaje esencial en la promoción de la salud, en la prevención
de las enfermedades y en la rehabilitación de los enfermos.
En la salud de las personas, la alimentación tiene una importante dimensión social, de tal
manera que factores como la cultura, la religión, el poder adquisitivo, el clima, los mitos o
tabúes, los acontecimientos familiares o sociales, el status social o las modas, son
determinantes en los hábitos alimentarios. A esta dimensión social debemos añadir la
implicación de valores y actitudes propios de cada persona, familia o sociedad.
No podemos olvidar que la comida es un momento importante en la dinámica familiar
como espacio de diálogo, de encuentro o de comunicación, en la dinámica laboral y en las
relaciones sociales o en las cenas con la pareja o con los amigos.
Los cambios en la dieta y/o alimentación pueden generar problemas de salud de carácter
psicosocial, al ser valorados habitualmente de forma negativa por el impacto social que
conlleva, entre otros.