Leyendas Mateo

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UNIDAD EDUCATIVA “IBARRA”

NOMBRE: Mateo Rosero

GRADO: Quinto EGB “E”

EL GIGANTE Y LAS LAGUNAS

                                                                                 

Cuenta la historia que hace miles de años en Imbabura


vivía un gigante que le gustaba pasear en busca de aventuras,
se divertía por los senderos y visitaba cada monte y espeso
bosque. Un día cansado de sus caminatas el gigante
decidó tomar un plácido baño. Fue entonces que se
acercó al Lago San Pablo que a simple vista parecía tener
bastante agua, pero al adentrarse en sus aguas, se sorprendió
porque las aguas le llegaron hasta las rodillas. El gigante
defraudado se dirigió hasta las Lagunas de Mojanda y el agua
le sirvió para refrescarse sus pies y solo le llegó hasta
más arriba de sus pantorrillas; continuó su recorrido y llegó
hasta Yahuarcocha, pero el charco de agua lo utilizó para
lavarse las manos.

Sin darse por vencido el gigante continuó con la búsqueda y se dirigió a la Laguna de Cuicocha,
sorprendido por su belleza empezó a bajar por sus laderas y sintió el agua muy fría, con miedo
de tener otra desilusión continuó entrando a la laguna poco a poco, finalmente tocó fondo y el
agua le llegó hasta  su cintura. El gigante pudo bañarse mejor pero insistió en encontrar una
laguna donde el agua le cubra hasta su cuello; es así que continuó subiendo por el Taita
Imbabura y divisó una pequeña laguna en su cumbre, el gigante al ver el tamaño de la laguna
dio una gran carcajada, pero arrogante se dirigió hasta allí para intentar por última vez. El
momento que el gigante se adentró en las negras aguas de la laguna el Cunrru no encontraba
fondo y su desesperación fue tal que para no ahogarse, levantó su brazo y con uno de sus
dedos trató de sostenerse de alguna roca, provocando un hueco, que existe hasta hoy y se le
conoce como la ventana del Imbabura.

Del gigante nunca se supo – unos dicen que se ahogó – y bajó a las profundidades de la laguna,
porque según los lugareños ésta no tiene fondo y se conecta con el mar; otros dicen que se
salvó y abandonó nuestras tierras por la lección que recibió.

UNIDAD EDUCATIVA “IBARRA”

NOMBRE: Mateo Rosero

GRADO: Quinto EGB “E”


 LA CAJA RONCA

LA CRUZ VERDE DE IBARRA


  
La historia dice que era una procesión de lamas que salían del antiguo hospital de San Vicente
de Paul, esta procesión iba por la calle Maldonado hasta la Colon donde de ahí se dirigían al
cementerio de San Francisco donde entraban a la fosa común, luego seguían la procesión
hasta donde ahora es la cruz verde, la cruz fue colocada para que no atormenten con los
ruidos que realizaba. Las personas que veían empezaban a votar espuma por la boca y los
perros y caballos también tenían un aspecto diabólico.La cruz fue remodelada y desde su
ubicación ya no se ha escuchado nada.

UNIDAD EDUCATIVA “IBARRA”

NOMBRE: Mateo Rosero

GRADO: Quinto EGB “E”


El padre Almeida

El padre Almeida es un personaje de las leyendas ecuatorianas del cual se dice que le gustaba


salir por las noches sin ser visto para poder tomar un trago de aguardiente.

La manera en la que abandonaba la Iglesia, era un tanto extraña, ya que subía hasta lo alto de
una torre y luego se descolgaba hacia la calle. Lo que no todos sabían es que, para arribar a ese
lugar, tenía que pararse encima de una estatua de Jesucristo de tamaño natural.

Una noche que planeaba salir a «saciar su sed» se posó encima del brazo y cuando estaba a
punto de irse, alcanzó a escuchar una voz que le decía:

– ¿Cuándo será la última vez que hagas esto padre Almeida?


El sacerdote creyó que la voz había sido producto de su imaginación y sin más le contestó:
– Hasta que vuelva a tener ganas de tomar otro trago.

Luego de decir eso, se dirigió a la cantina clandestina en donde bebía y no salió de ahí hasta
que estaba completamente borracho.

El cura iba dando tumbos por la calle, hasta que chocó de lleno con unos hombres que
llevaban un féretro en camino hacia el cementerio. El féretro cayó a media calle, ocasionando
que la tapa se rompiera.

El padre Almeida no podía creer lo que veían sus ojos, el hombre que estaba dentro del ataúd
era el mismo.

Sobra decir que de inmediato recobró la sobriedad y en cuanto llegó a su Iglesia le juró al
Cristo de la torre que nunca volvería a probar una gota de vino. Desde ese entonces, la gente
afirma que el rostro de dicha imagen cambió completamente y que aún hoy en día se puede
ver que esboza una sonrisa de satisfacción, pues una de sus ovejas volvió al redil.

UNIDAD EDUCATIVA “IBARRA”

NOMBRE: Mateo Rosero


GRADO: Quinto EGB “E”

La Tacona (También conocida como La Tacona de Esmeraldas)

Esmeraldas es una ciudad de Ecuador en la que alguna vez vivió una muchacha de cabellos
rubios, quien una noche de luna llena salió a dar un paseo.

Mientras caminaba por una estrecha calle, un sujeto se le acercó y la jaló hasta llevarla a la
fuerza a una esquina en donde le robó un beso.

Después de un rato, la muchacha regresa a su casa con el vestido maltratado y sus ojos llenos
de lágrimas, debido al terrible susto que se llevó. Posteriormente se metió al cuarto de baño, y
mientras estaba lavándose el pelo, hizo el juramento de que ningún otro hombre se
aprovecharía de ella.

Del armario sacó un hermoso vestido rojo y unas zapatillas a juego. Luego salió de su domicilio
con la intención de tomar unos tragos para olvidar lo que le había pasado.

Los hombres no paraban de admirar su gran belleza. Pronto, le apodaron la «Tacona», dado a
que sus zapatos tenían el tacón sumamente alto. De pronto un hombre, decide sacarla a bailar
y al terminar la pieza le propone que le acompañe a la orilla del mar, para poder platicar a
solas con ella.

La muchacha accede y una vez que están en la playa, el sujeto la toma fuertemente de la
cintura para besarla a la fuerza. Sin embargo, antes de que sus labios toquen los de la joven, se
da cuenta de que la muchacha se ha transformado en un horrible cadáver.

Lo que ocurrió es que aquella dama había hecho un pacto con la muerte, para cobrar venganza
de todo aquel que quisiera hacerle daño a una mujer.

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