Definición Los Recursos Humanos
Definición Los Recursos Humanos
Definición Los Recursos Humanos
MAZATENANGO SUCHITEPÉQUEZ
Sección: “B”
RECURSOS HUMANOS
Específicos
Definición Los Recursos Humanos
En la administración de empresas, se denomina recursos humanos (RR. HH.) al
conjunto de los empleados o colaboradores de una organización, sector económico
o de una economía completa. Frecuentemente también se utiliza para referirse al
sistema o proceso de gestión que se ocupa de seleccionar, contratar, formar,
emplear y retener al personal que la organización necesita para lograr sus objetivos.
El objetivo básico es alinear el área o profesionales de RR. HH. con la estrategia de
la organización,1 lo que permitirá implantar la estrategia organizacional a través de
las personas, quienes son consideradas como los únicos recursos vivos y eficaces
capaces de llevar al éxito organizacional y enfrentar los desafíos que hoy en día se
percibe en la competencia mundial. Es imprescindible resaltar que no se administran
personas ni recursos humanos, sino que se administra con las personas, viéndolas
como agentes activos y proactivos dotados de inteligencia, innovación, creatividad
y otras habilidades.
Generalmente la función de Recursos Humanos está compuesta por áreas tales
como reclutamiento y selección, contratación, capacitación, administración o
gestión del personal durante la permanencia en la empresa. Dependiendo de la
empresa o institución donde la función de Recursos Humanos opere, pueden existir
otros grupos que desempeñen distintas responsabilidades que pueden tener que
ver con aspectos tales como la administración de la nómina de los empleados o el
manejo de las relaciones con sindicatos, entre otros. Para poder ejecutar la
estrategia de la organización es fundamental la administración de los Recursos
humanos, para lo cual se deben considerar conceptos tales como la comunicación
organizacional, el liderazgo, el trabajo en equipo, la negociación y la cultura
organizacional.
Por lo tanto, la administración de recursos humanos se refiere también a las políticas
y prácticas que son imprescindibles para manejar las relaciones personales, así
como las necesidades de éstos, la selección de candidatos, la aplicación de
programas de inducción, administración de sueldos, incentivos, prestaciones y la
comunicación dentro de la empresa.Habitualmente podemos ver cómo se abrevia
el concepto de recursos humanos usando RR.HH. o incluso HR (este es el término
en inglés). En los últimos años muchos de los profesionales que se dedican a los
recursos humanos han propuesto nuevas formas de denominar al departamento y
alejarse de esa visión un tanto desfasada de referirse como recurso humano a una
persona que trabaja en una empresa. Algunos profesionales proponen el cambio de
rrhh a: Gestión de personal, departamento de personas, People, People &
Happiness o incluso Happiness department.
Las personas son la parte fundamental de una organización, y junto con los recursos
materiales y económicos conforman el “todo” que dicha organización necesita.
Es por esto que, en la mayoría de las empresas por ejemplo, se realizan exhaustivos
análisis y evaluaciones a los candidatos que desean ocupar un puesto de trabajo
en la empresa convocante. Incluso, existen áreas dentro de la empresa destinadas
a la gestión de los recursos humanos y profesionales especializados en esta
disciplina, que abarca desde conocimiento legal de contrataciones hasta principios
de psicología y desempeño actitudinal.
En síntesis, podemos decir que estas áreas se encargan de elegir al recurso
humano más apropiado para la empresa, de acuerdo no sólo con sus habilidades y
destrezas para desempeñar el trabajo requerido, si no también evaluando otras
condiciones y actitudes personales que impacten –o puedan impactar- de manera
positiva en la organización: responsabilidad, emprendedurismo, compañerismo,
respeto, honestidad, transparencia, etc.
Claro que para esto, también la empresa u organización debe ofrecer buenas
condiciones laborales: en principio, un correcto ambiente de trabajo que permita el
desarrollo normal y cómodo de las actividades, y algunas otras condiciones que los
futuros trabajadores siempre considerarán: posibilidades de progreso dentro de la
organización, capacitación permanente, premios por logros, incentivos, entre otras
cosas.
En este sentido, quienes están a cargo de gestionar el área de recursos humanos,
en contacto permanente con las personas que trabajan en la organización, deben
ser capaces de vincular las inquietudes de los trabajadores y los intereses de la
empresa a fin de lograr un beneficio y equilibrio laboral hacia ambas partes.
Por lo que decíamos respecto de la importancia de las personas como motores
impulsores dentro de la empresa en cuanto crecimiento y desarrollo, desde hace
algunos años, diferentes universidades o centros de enseñanza superior han
incorporado a su oferta académica cursos, diplomados, o licenciaturas enteras
destinadas al estudio del área de recursos humano (su sigla es RRHH) y la
formación de profesionales idóneos para desenvolverse en dichas áreas dentro de
organizaciones. Junto con el management, merchandising, marketing,
comunicación corporativa y responsabilidad social empresarial, conforma el
conjunto de las denominadas “ciencias empresariales”.
Por lo general, la política de recursos humanos (que pueden abreviarse como
RR.HH.) se centra en lograr que los empleados estén en la misma sintonía que la
empresa, haciendo coincidir los anhelos y las aspiraciones de los trabajadores con
la estrategia de la compañía.
El armado de una plantilla laboral eficiente, la construcción de un buen clima de
trabajo y el desarrollo del potencial de cada trabajador son algunos de los objetivos
habituales en el ámbito de los recursos humanos.
Historia De Los Recursos Humanos
La primera persona que acuñó el término de recursos humanos fue el economista
John R. Commons en su libro titulado “Distribución de la riqueza”, publicado en
1984 pero no sería hasta el 1910 y 1920 cuando el término rrhh se popularizara y
las empresas empezaran a ver a sus trabajadores como activos del capital dentro
del negocio.
Podríamos enmarcar el auge de los departamentos de recursos humanos entre el
final de la Primera Guerra Mundial (1914 – 1918) hasta la Gran Depresión (1939 –
1938), período en el que aparecieron nuevas leyes que obligaban a las empresas
a cumplir determinadas funciones sociales y en el que el departamento empezó a
crecer y asimilarse a lo que es hoy en la actualidad.
El Taylorismo
A finales del siglo XIX, con el fondo de las grandes industrias que dominaban el
panorama económico en los países desarrollados, aparece una escuela que
empieza a unificar los diversos criterios que se aplicaban en cada fábrica, intentando
en todo momento producir más a un menor coste. Nos referimos a la
famosa escuela clásica o dirección científica del trabajo, cuyo máximo exponente
es el norteamericano Frederic Winslow Taylor (1856- 1915), que reprodujo parte de
su teoría en su obra Los principios de la Dirección Científica (The Principles of
Scientific Management), 1911. Este obrero que empezó de la nada y fue subiendo
escalones en las diversas empresas en las que trabajó, llegando a compaginar sus
estudios como ingeniero con sus horas de trabajo, basa su teoría en la siguiente
idea “El hombre es un ser racional, que trabaja porque está obligado a ello para
satisfacer sus necesidades materiales”. Centrado en el bajo rendimiento de los
trabajadores en cualquier fábrica, intenta conocer mejor a los trabajadores y expone
una serie de ideas interesantes.
Las ideas principales del Taylorismo no son muy beneficiosas para los
trabajadores. Según esto, de forma general en los empleados podemos encontrar:
Que aplican la ley de mínimo esfuerzo.
No necesita pensar.
No es beneficioso que trabaje en grupo.
Únicamente se motiva mediante compensaciones económicas.
Intenta tener la menor iniciativa posible.
Partiendo de los departamentos de bienestar antes indicados, inician su andadura
ésta nueva concepción del trabajo defendida por Taylor y sus seguidores (como
Ford, famoso por su cadena de montaje de automóviles). En éstos departamentos
se encargarán de las nóminas, selección de personal, negociar con sindicatos,
asesorar en diversos aspectos o recoger la mayor cantidad de información sobre
los trabajadores.
El Taylorismo fue la corriente más utilizada, aunque no consiguió resolver los
problemas más importantes que se planteaban en un departamento de personal,
principalmente porque resultaba incompleto. Teniendo en cuenta lo anterior, a
principios del siglo XX, Elton Mayo y F.J. Roethlisberger, realizaron un famoso
estudio, apoyados por la universidad de Harvard, sobre la conducta humana en el
trabajo. Dicho estudio consistió en modificar las condiciones laborales de cinco
trabajadores de una fábrica utilizando sobre todo la iluminación. Lo curioso fue que
la productividad aumentó tanto si las condiciones de trabajo eran mejores, como si
por otro lado, eran peores. Lo principal era la atención especial y personal que esos
empleados recibían. Dicho experimento finalizo con el efecto Hawthorne,
demostrando la influencia de los factores psicológicos y sociológicos en el mundo
del trabajo. Negados anteriormente por la escuela Taylorista basada solamente en
la motivación económica.
Revolución Industrial
El primer antecedente de los Recursos Humanos debemos situarlo a mediados del
siglo XIX, en plena Revolución Industrial, que se desarrolló básicamente en Europa
y Estados Unidos. La excesiva mecanización de las tareas generó una creciente
insatisfacción entre el personal de las empresas y las grandes fábricas, lo cual dio
origen a las primeras medidas para tratar de solucionar problemas asociados a la
salud, la vivienda y los horarios de los trabajadores. La más importante de ellas fue
la creación de los llamados Departamentos de Bienestar.
Principios del siglo XX
Surgieron las primeras oficinas dedicadas a la gestión del personal. Sin embargo,
se centraban sólo en acciones disciplinarias y algunas veces en sistemas
retributivos. Poco a poco se empezaron a explorar otros frentes como la
contratación, el despido, las fórmulas salariales y el análisis de la productividad. Sus
responsables tenían un marcado carácter autoritario y en muchos casos estaban
adscritos a la dirección.
Años 70 y 80’s
El enfoque disciplinario de la etapa anterior es reemplazado por otro en el que se
tienen en cuenta los factores psicológicos y sociológicos en el rendimiento laboral.
Los líderes del área dan los primeros pasos para mejorar la adaptación del personal
a la empresa y, a la vez, ganan más independencia dentro los mapas corporativos.
Además, se profundiza en la gestión del personal y se empieza a hablar de forma
abierta de un concepto hasta entonces difuso: el clima laboral.
Del año 2000 en adelante
Tras la llegada de Internet y la progresiva consolidación de las nuevas tecnologías,
los modelos de empresa dan un giro rotundo. El personal de las compañías, que
ahora está mucho más cualificado para ejercer sus labores, reclama cada vez más
espacios de participación, interacción y decisión en las empresas. La gestión del
talento se convierte en una prioridad. Los Recursos Humanos amplían su núcleo de
operaciones: además de la contratación y el despido, ahora también se ocupan de
la formación, la capacitación, la conciliación horaria y, en último término, de todo lo
que guarde relación con el bienestar de sus trabajadores. Los procesos son mucho
más dinámicos, ágiles y están integrados con los objetivos generales de la empresa.