Juegos de Cuentosías
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Cuentosías
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BIOGRAFÍA
Gabriel Celaya
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MI CUERPO Y YO
Jorge Luján
4
La Cigarra y la Hormiga
El sol del verano ardía sobre el campo. La cigarra cantaba a toda voz en las largas
horas de la siesta, tranquilamente sentada en una rama. Comía cuando se le antojaba y no
tenía preocupaciones.
Entretanto, allá abajo, las hormigas trabajaban llevando la carga de alimentos al
hormiguero.
Terminó el verano, quedaron desnudos los árboles y el viento comenzó a soplar con
fuerza. La cigarra sintió frío y hambre. No tenía nada para comer y se helaba. Entonces
fue a pedir auxilio a sus vecinas, las hormiga. Llamó a la puerta del abrigado hormiguero y
una hormiga acudió. La cigarra le pidió comida.
—¿Por qué no guardaste en el verano cuando abundaba? ¿Qué hiciste? — le
preguntó la hormiga.
—Cantaba... —respondió la cigarra.
—¿Mientras yo trabajaba? ¡Bueno ahora bailá! —dijo la hormiga cerrándole la puerta
en las narices.
Debemos ser prevenidos y pensar en el futuro,para
no vernos luego en dificultades.
Esopo
La Cigarra y la Hormiga
Había una vez una Hormiga y una Cigarra que eran muy amigas. Durante todo el
otoño la Hormiga trabajó sin parar, almacenando comida para el invierno. No aprovechó
el sol, ni la brisa suave del fin de la tarde, ni la charla con amigos tomando una cervecita
después de un día de labor.
Mientras, la Cigarra, que andaba cantando con los amigos en los bares de la ciudad,
no desperdició ni un minuto. Cantó durante todo el otoño, bailó, aprovechó el sol y
disfrutó muchísimo sin preocuparse por el mal tiempo que estaba por venir.
Pasados unos días, empezó el frío. La Hormiguita, exhausta de tanto trabajar, se
metió en su pobre guarida repleta hasta el techo de comida. Pero alguien golpeó a la
puerta y al abrir vio a la Cigarra dentro de una Ferrari con un valioso abrigo de pieles. La
Cigarra le dijo: “¡Hola! Me voy a pasar el invierno en París. ¿Me cuidás la casa?”
“No hay problema. Pero, ¿dónde conseguiste el dinero para ir a París, comprar la Ferrari
y ese abrigo tan bonito y tan caro?”, preguntó la hormiga. “Estaba cantando en un bar la
semana pasada, a un productor le gustó mi voz y firmé un contrato para hacer shows en
París. A propósito, ¿necesitas algo de allá?”, contestó la Cigarra. “Sí, por favor…”,
respondió la Hormiga, “…Si llegás a encontrar por allá a La Fontaine, decile de mi parte
que se puede ir bien a la m…”..
Anónimo
P
5
PP
Feng Meng-lung
P
6
Había una vez un joven que estaba muy celoso de una muchacha bastante
voluble.
Un día le dijo:
-Tus ojos miran a todo el mundo.
Entonces, le arrancó los ojos.
Después le dijo:
-Con tus manos puedes hacer gestos de invitación.
Y le cortó las manos.
“Todavía puede hablar con otros”, pensó. Y le extirpó la lengua.
Luego, para impedirle sonreír a los eventuales admiradores, le arrancó todos los
dientes.
Por último, le cortó las piernas. “De este modo -se dijo- estaré más tranquilo”.
Solamente entonces pudo dejar sin vigilancia a la joven muchacha que amaba. “Ella
es fea -pensaba-, pero al menos será mía hasta la muerte”.
Un día volvió a la casa y no encontró a la muchacha: había desaparecido, raptada
por un exhibidor de fenómenos.
I.A. Ireland
William Ospina
P
7
"A pesar de lo que digan, la idea de un cielo habitado por Caballos y presidido
por un Dios con figura equina repugna al buen gusto y a la lógica más
elemental, razonaba los otros días el caballo.
Todo el mundo sabe -continuaba en su razonamiento- que si los Caballos
fuéramos capaces de imaginar a Dios lo imaginaríamos en forma de Jinete."
Augusto Monterroso
Julio Cortázar
Julio Torri
P
8
Augusto Monterroso
9
Después de todo un día de viaje en tren, Giuseppe Corte llegó, una mañana
de marzo, a la ciudad donde estaba una casa de salud. Tenía un poco de
fiebre; sin embargo, quiso recorrer a pie el camino entre la estación y el
hospital, llevando consigo su maletita.
Fragmento 3
Calculaba ella que sería medianoche, porque la luna muy baja empezaba a
iluminar la pieza, cuando de repente un bultito negro, casi imperceptible,
saltó sobre el dintel de la puerta que no había cerrado por el calor y Antonia
se estremeció de angustia.
Fragmento 4
“las cosas tienen vida propia – pregonaba el gitano con áspero acento, sólo
es cuestión de despertarles el ánima”
Fragmento 5
10
"el poeta no escribe sobre las cosas / escribe sobre el nombre de las cosas”
Cristina Peri Rossi.
cristales de agua
mantienen en reposo
la intención de un verso
la significación
un fragmento
que se refugia
descendente
Suele ocurrir
que las afinidades del espíritu
no se resuelvan en gestos y palabras
sino que permanezcan escondidas
como un magnetismo. Es raro, mas sucede.
Eugenio Montale
LAGO
Una 0 que se cayó del CIEL
elgalo pedé
elcaballí todé
madé radá
dequé hablar
alosár bolés
C que TduL
S Bso D Fcto que no muR
NoTmas
-que hiR más lo que no toK-,
Y Dja que yo suÑ
Y yRR
En el Pqueño mull D tu boK
Jorge Luján
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Palabras Maleta
Definecciones
Greguerías
Extraña familia
Soledad–Domingo-Sarmiento-once-torres-ajedrez-estratega-San Martín-
París-Soledad.
Alberto Montt
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