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PERMANECE Y DARÁS FRUTO

TEXTO: S. JUAN 15:1-17 NVI

Jesús, la vid verdadera

15 »Yo soy la vid verdadera, y mi Padre es el labrador.
2Toda rama que en mí no da fruto, la corta; pero toda rama que da fruto la poda [a] para que dé más fruto
todavía.
3 Ustedes ya están limpios por la palabra que les he comunicado.
4Permanezcan en mí, y yo permaneceré en ustedes. Así como ninguna rama puede dar fruto por sí misma,
sino que tiene que permanecer en la vid, así tampoco ustedes pueden dar fruto si no permanecen en mí.
5»Yo soy la vid y ustedes son las ramas. El que permanece en mí, como yo en él, dará mucho fruto;
separados de mí no pueden ustedes hacer nada.
6El que no permanece en mí es desechado y se seca, como las ramas que se recogen, se arrojan al fuego y
se queman.
7 Si permanecen en mí y mis palabras permanecen en ustedes, pidan lo que quieran, y se les concederá.
8 Mi Padre es glorificado cuando ustedes dan mucho fruto y muestran así que son mis discípulos.
9 »Así como el Padre me ha amado a mí, también yo los he amado a ustedes. Permanezcan en mi amor.

Si obedecen mis mandamientos, permanecerán en mi amor, así como yo he obedecido los

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mandamientos de mi Padre y permanezco en su amor.

11 Les he dicho esto para que tengan mi alegría y así su alegría sea completa.
12 Y este es mi mandamiento: que se amen los unos a los otros, como yo los he amado.
13 Nadie tiene amor más grande que el dar la vida por sus amigos.
14 Ustedes son mis amigos si hacen lo que yo les mando.

Ya no los llamo siervos, porque el siervo no está al tanto de lo que hace su amo; los he llamado amigos,
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porque todo lo que a mi Padre le oí decir se lo he dado a conocer a ustedes.

16No me escogieron ustedes a mí, sino que yo los escogí a ustedes y los comisioné para que vayan y den
fruto, un fruto que perdure. Así el Padre les dará todo lo que le pidan en mi nombre.
17 Este es mi mandamiento: que se amen los unos a los otros.

CONTEXTO
 Jesús está hablando con sus once discípulos en intimidad, Jn 13:30 Judas ya se había ido a cometer la
traición.
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 Era una conversación de camino al Monte de los Olivos, previa a la muerte de Jesús.
 Jesús utiliza una metáfora para dar una enseñanza, menciona una planta muy útil, muy importante en la
economía de entonces, era el sustento de muchas familias, era la fuente de un producto esencial en una
fiesta de bodas, el vino, podemos hablar muchas bondades de este producto como es la Vid, la uva.
 Jesús no hace sus enseñanzas lejanas, incomprensibles, difíciles.. él está acercándose lo más posible al
entendimiento y al corazón de sus discípulos con estas palabras de Juan 15.

La Vid es una planta que requiere mucha atención si se quiere obtener un fruto de calidad. El terreno tiene
que estar perfectamente limpio, y las plantas se separan convenientemente para que se puedan
desarrollar.

Se suelen podar los sarmientos en el invierno reduciendo la cepa a su mínima expresión. Algunas veces se
poda la cepa a menos de un metro de altura, dejándole brazos radiales que se atan a tutores hasta que se
hacen resistentes, que son los que producen los sarmientos, y estos el fruto; otras veces se apoyan las varas
en espalderas o en árboles. Y, desde luego, a veces como parras, que se hacen muy frondosas a la puerta
de las cabañas. Pero siempre requieren una buena preparación y un buen cuidado del suelo.

No se deja que la vid dé fruto los tres primeros años, para que desarrolle conservando toda su energía. Ya
adulta produce dos tipos de sarmientos, unos que dan fruto y otros que no. Los que no van a dar fruto se
cortan bien atrás para que no vuelvan a brotar ni esquilmen la fuerza de la planta. La vid no puede dar buen
fruto a menos que se la pode drásticamente-y Jesús lo sabía muy bien.

Además, la madera de la vid tiene la curiosa particularidad de que no sirve para nada. Es demasiado fibrosa
y poco com- pacta. En ciertas épocas del año, establecía la ley, se tenían que llevar al templo ofrendas de
madera para los fuegos de los altares; pero no se consideraban aceptables las cepas. Lo único que se podía
hacer con los sarmientos de la poda o con las cepas que se arrancaban era una fogata, para que no trajeran
miseria -plagas-a los árboles. En España se usa para leña en las casas de los pueblos o para encender los
hornos. Este es otro detalle que añade verosimilitud a la alegoría de Jesús.

ANÁLISIS

El drama que se desarrolla en esta analogía es simple. Hay una vid, hay alguien que cuida la vid, y hay dos
tipos de ramas o pámpanos. Pámpanos que dan frutos y que son podadas para dar más fruto, pámpanos
que no dan fruto y son cortadas, se secan y quemadas. Así de simple.

“yo soy la vid verdadera” implica que había otra vid, una no genuina, impostora, no verdadera

ISRAEL en el AT es considerada como la vid.

La vid era símbolo del pueblo de Israel y se encontraba representada en la entrada del templo y en las
monedas judías.

El Salmo 80:8-9 dice: “De Egipto trajiste una vid; expulsaste a los pueblos paganos, y la plantaste. Le
limpiaste el terreno, y ella echó raíces y llenó la tierra.”

El pueblo de Israel fue la vid que Dios plantó para que se extienda y lleve fruto.. Dios quería regocijarse con
su pueblo compartir con ellos, mostrarle su amor, sus propósitos buenos, derramar sus abundantes
bendiciones.. pero con tristeza tuvo que hacer esta declaración…
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Jeremías 2:21: Yo te planté como vid de la mejor calidad, como vid de la semilla más fina. ¡Pero te has
degenerado tanto, que ya ni te reconozco!

“Tenía mi amado una viña en una ladera fértil. La había cercado y despedregado y plantado de vides
escogidas; había edificado en medio de ella una torre, y hecho también en ella un lagar; y esperaba que
diese uvas, y dio uvas silvestres” (Is 5:1-2).

Dios tenía una expectativa alta por su pueblo Israel… era su pueblo, los amaba como a su especial tesoro.
Pero fueron rebeldes a su voz, idólatras, orgullosos, desobedientes, tercos y obstinados en hacer maldad
por lo cual sufrieron la consecuencia de su rebeldía.

Pero en consecuencia a Israel y su pecado, al no poder cumplir con lo ordenado por Dios, de ser una nación
santa, apartada y que diera fruto de justicia para Él, vino Jesús la vid verdadera de Dios.

JESÚS COMO LA VID VERDADERA

V.1 Yo soy la vid verdadera...” Esta es una de las famosas afirmaciones “Yo soy” de Jesús en el Evangelio de Juan:
yo soy la puerta, yo soy el camino, yo soy la verdad, yo soy la vida, yo soy el buen pastor, etc…

Israel era mencionado como la vid, pero una vid que fracasó. Aquí Jesús presenta cual es la vid verdadera, la que
permanece, la que tiene vida.

…Mi Padre es el labrador.

En toda viña es necesario que haya una persona que cuide, limpie, riegue y vigile constantemente las plantas. Esta
persona es el labrador o viñador

Cada año el labrador tiene que limpiar el suelo en donde se encuentran las plantas, ver la condición de las
plantas, recortar el exceso de hojas, podar las ramas para que los pámpanos o renuevos puedan crecer vigorosos y
producir una buena cosecha, y quitar las ramas secas, que luego son echadas al fuego y quemadas.

A veces es necesario recortar las plantas hasta el mismo tronco de la mata, para que los renuevos surjan con
mas vigor y produzcan una cosecha súper abundante.

En el relato bíblico de la vid, Jesús dice que el labrador es su Padre. Y si Jesús es la vid y nosotros las ramas o
renuevos (pámpanos), nosotros también somos cuidados por nuestro Padre celestial, somos podados para
producir mejor fruto y hasta quitados y echados al fuego si estamos secos.

El Padre es el Dueño de la vid. Nunca hubo un dueño tan sabio, tan cuidadoso con su viña como Dios.

El dueño dispone, el dueño es el que se alegra, se regocija con los frutos de la vid, es el dueño el que alaga
sus frutos y los exhibe con orgullo, el dueño es el que toma cuidado de su viñedo.

Al mismo tiempo, Jesús afirma su relación intima con el Padre, y su sujeción a Él.

V.2 2 Toda rama que en mí no da fruto, la corta; pero toda rama que da fruto la poda [a] para que dé más
fruto todavía.

Es atribución del dueño, el Padre, de la viña velar que su planta sea fructífera y es atribución de él cortar y
podar con la finalidad de hacer exitoso su huerto..
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Toda rama que en mi no da fruto: si está en Jesús la rama es imposible que no de fruto, o sea quiere decir
que sino está con frutos es una rama que solo perjudica, consume alimento del tallo para desgastar la
fuerza de la planta, es inútil y no queda otro camino que cortar esa rama.

Tiene una semejanza a la persona que religiosamente sigue a Jesús, que está presente solo buscando un
milagro, que está buscando las bendiciones, que está buscando a Jesús que lo ayude en su problema, pero
que no está dispuesto/a a obedecer la palabra de Dios, por lo tanto no está dispuesto/a a llevar fruto.

Las ramas que no dan fruto se identifican con las personas que ya no viven en Cristo o dejan de tener una
relación intima con el Señor.

Ejemplo de ello fue Judas Iscariote. El andaba con Jesús, era uno de sus discípulos, pero sus frutos fueron
malos.

“Vid frondosa era Israel produciendo fruto a su aire” (Os 10,1).

Jeremías 2:21: Yo te planté como vid de la mejor calidad, como vid de la semilla más fina. ¡Pero te has
degenerado tanto, que ya ni te reconozco!

ISAIAS 5 NVI
5 Cantaré en nombre de mi amigo querido
una canción dedicada a su viña.
Mi amigo querido tenía una viña
en una ladera fértil.
2 La cavó, la limpió de piedras

y la plantó con las mejores cepas.

Edificó una torre en medio de ella
y además preparó un lagar.
Él esperaba que diera buenas uvas,
pero acabó dando uvas agrias.
3 Y ahora, hombres de Judá,

habitantes de Jerusalén,
juzguen entre mi viña y yo.
4 ¿Qué más se podría hacer por mi viña

que yo no lo haya hecho?

Yo esperaba que diera buenas uvas;
¿por qué dio uvas agrias?
5 Voy a decirles

lo que haré con mi viña:

Le quitaré su cerco, y será destruida;
derribaré su muro, y será pisoteada.
6 La dejaré desolada,

y no será podada ni cultivada;

le crecerán espinos y cardos.
Mandaré que las nubes
no lluevan sobre ella.

Las ramas vivas QUE LLEVAN FRUTO son aquellas personas que guardan y cuidan su relación con
Cristo y a las cuales Dios les poda de sus vidas cualquier cosa que pueda desviar o estorbar el flujo vital de
la vida de Cristo en sus vidas. Ejemplo: Pedro.
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“La poda” significa, la limpia, esto puede significar un sufrimiento pasajero pero que tiene un propósito:
aumentar la producción de frutos, saca a la luz lo falso, lo enfermo, lo que es perjudicial…

Debemos ser fructíferos. Esperamos uvas de una vid, y del cristiano esperamos un temperamento, una
disposición y una vida cristiana.

Debemos honrar a Dios y hacer el bien, esto es, llevar fruto. Los estériles son cortados.

Hasta las ramas fructíferas necesitan poda, porque, en el mejor de los casos, tenemos ideas, pasiones y
humores que requieren ser quitados.

V.3 Ustedes ya están limpios por las palabras que yo les he dado.. osea ustedes once ramitas ya las he
podado, les he limpiado con mi palabra..

David preguntaba y también se respondía.. Salmo 119:9 ¿Con qué limpiará el joven su camino? Con
guardar tu palabra.. Joven tú eres limpiado, por la corrección de la palabra de Dios.. nuestra vida es
ordenada por las enseñanzas de su palabra.

Salmo 119:105 Lámpara es a mis pies tu palabra y lumbrera a mi camino…

Somos limpiados por las enseñanzas sabias del Señor..

V.4 4 Permanezcan en mí, y yo permaneceré en ustedes. Así como ninguna rama puede dar fruto por sí
misma, sino que tiene que permanecer en la vid, así tampoco ustedes pueden dar fruto si no permanecen
en mí.

El término “permanecer” es usado al menos 112 veces en el Nuevo Testamento. Cuarenta de ellas
aparecen en el Evangelio de Juan; y 26, en sus Cartas. Es un concepto teológico principal para Juan.

Jesús no obliga a nadie pero señala que tan importante es estar ligados a él o permanecer en él para que nuestro
resultado sean frutos de bendición, que dignifiquen el nombre de Dios..

Jesús nos garantiza con su palabra que el va a permanecer con nosotros.. no estás solo/a en esos días de lucha con
tu carácter, con tu mente, con tu falta de fe.. un día normal de luchas internas, no estás solo/a.. tú vas a dar frutos..
no hagas el esfuerzo por el fruto.. haz el esfuerzo por estar en él los frutos vendrán como resultado de permanecer
unido a la vid que es Jesús..

Es nuestra relación con Jesús lo que nos conecta a la vid de Dios. Ya no es por la sangre judía que el pueblo de Israel
se conecta o se relaciona con Dios, es ahora por su relación con Jesús.

V.5 5 »Yo soy la vid y ustedes son las ramas. El que permanece en mí, como yo en él, dará mucho fruto;
separados de mí no pueden ustedes hacer nada.

Verso que resume el mensaje central de esta enseñanza que Jesús da a sus discípulos, no hay nada que podamos
hacer como hijos de Dios, respecto a llevar frutos, si estamos separados de Él.

TIPOS DE FRUTOS QUE DIOS ESPERA DE NOSOTROS..

Cada creyente es un pámpano o brote que anuncia la llegada de los frutos, revelando con ello la divina
circulación de aquella savia que recorre su esencia. No puede haber pámpano de Cristo que no lleve fruto.
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Por esta razón, debemos entender que aquel que esta injertado en esta Vid verdadera, debe
necesariamente llevar fruto, de lo contrario, solo se evidenciaría que el tal no está en Cristo.

Si alguien dice que es cristiano, pero su vida no evidencia cambios como parte del fruto, es muy probable
que solo estemos frente a una vida de concepción religiosa y nada más que eso.

El creyente verdadero, cual pámpano, debe tener frutos que mostrar.

Salmo 1: 3, los cristianos son como “árboles plantados junto a las corrientes de las aguas, que da su fruto a
su tiempo... y todo lo que hace prosperará”.

Gálatas 5:22-23 Reina-Valera 1960 (RVR1960)

22 Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe,

23 mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley.

Estos frutos no son producidos en forma natural por los seres humanos, sino que son el resultado de
permanecer unidos a la Vid.

Frutos que se expresan en nuestro carácter, comportamiento, manera de hablar…

Frutos de nuevos convertidos a los caminos de Dios. …no quiero, hermanos, que ignoréis que muchas
veces me he propuesto ir a vosotros… para tener también entre vosotros algún fruto, como entre los
demás gentiles” Romanos 1:13.

Proverbios 11:30 El fruto del justo es árbol de vida, y el que gana almas es sabio.

V.16 No me escogieron ustedes a mí, sino que yo los escogí a ustedes y los comisioné para que vayan y
den fruto, un fruto que perdure. Así el Padre les dará todo lo que le pidan en mi nombre.

 ¿Hay fruto en la vida suya para la gloria de Dios?

 Frutos es el resultado de una vida que está conectada a la vid que es Cristo.
 La rama que no lleva fruto se corta, se bota y se quema.
 Somos escogidos por el Padre para que llevemos frutos.