Celebración del Sacramento del Matrimonio

Miguel Rivera

Veyra Castro

Bendición Nupcial Celebrada por

Pbro. Luis Alfonso Amador Ríos

Iglesia Nuestra Señora de Suyapa

28 de Diciembre del 2019
San Pedro Sula, Cortes.
Monición de Entrada
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 Monitor: Hermanos, estamos aquí reunidos para celebrar la unión
sagrada entre Miguel Abraham y Veyra Lizeth, que después de un hermoso
tiempo caminando como hermanos en Cristo, como amigos y como novios,
llenos de ilusión y alegría, nos invitan hoy a participar del inicio del largo
viaje que hoy emprenden . . .
Estamos aquí para ser testigos del amor que se tienen, mismo que los
ha llevado a este día, en que, con la providencia de Dios, el amor maternal
de María, y la protección de San José, empiezan a construir juntos sus vidas,
unidas por el Sagrado Sacramento del Matrimonio.
Alegrémonos y bendigamos con ellos este momento, disponiéndonos a
compartir su alegría; celebremos juntos el amor de Dios, que se hace visible
ahí donde los hombres se aman. Seamos pues, testigos del amor que ellos
profesarán hoy ante el altar y oremos por sus vidas, para que las promesas
hechas ante Dios se cumplan en su matrimonio a beneficio de toda la
humanidad.
En la presencia de Dios y unidos con la Virgen María, San José y todos los
santos, iniciamos esta celebración poniéndonos de pie . . .

RITOS INICIALES

Sacerdote: en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.

Todos: Amén.
Sacerdote: La gracia de nuestro señor Jesucristo, el amor del Padre y la
comunión del Espíritu Santo estén con todos ustedes.
Todos: Y con tu espíritu.

LITURGIA DE LA PALABRA

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Primera Lectura

Monición: Dios crea al hombre, varón y hembra, a Su propia imagen, se da

dominio al hombre sobre todas las cosas, y se le manda multiplicarse y
henchir la tierra. Escuchemos con atención la proclamación de la primera
lectura.

Lectura del Libro de Génesis 1, 26-28. 31

Dijo Dios: "Hagamos al hombre a nuestra imagen y semejanza; que domine

a los peces del mar, a las aves del cielo, a los animales domésticos y a todo
animal que se arrastra sobre la tierra.

Y creó Dios al hombre a su imagen;

a imagen suya lo creó;
hombre y mujer los creó.

Y los bendijo Dios y les dijo: "Sean fecundos y multiplíquense, llenen la tierra
y sométanla; dominen a los peces del mar, a las aves del cielo y a todo ser
viviente que se mueve sobre la tierra".

Vio Dios todo lo que había hecho y lo encontró muy bueno.

Palabra de Dios.

Salmo Responsorial

Monición: En el Salmo 44 tiene la perspectiva nupcial que nos permite

dedicarlo a todas las parejas que viven con intensidad y frescura interior su
matrimonio, signo de un «gran misterio», la liturgia, a su vez, amplía la
alegoría refiriéndolo a la Virgen María, acompañamos al salmista cantando.

Salmo 44

V. ¡Ya llega el esposo! ¡Salgamos a recibir a Cristo, el Señor!

(Aleluya)
R. ¡Ya llega el esposo! ¡Salgamos a recibir a Cristo, el Señor!
(Aleluya)

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 Escúchame, hija mía, y presta oído,
Olvida tu nación y tu familia;
Prendado está el rey de tu hermosura,
Ante él, que es tu Señor, la frente inclina

R. ¡Ya llega el esposo! ¡Salgamos a recibir a Cristo, el Señor!

(Aleluya)

Revestida de oro y brocados,

Majestuosa penetra la princesa;
La llevan ante el rey
Y un grupo de doncellas va tras ella.

R. ¡Ya llega el esposo! ¡Salgamos a recibir a Cristo, el Señor!

(Aleluya)

En gozoso cortejo
del palacio del rey cruzan las puertas.
A cambio de tus padres tendrás hijos
que príncipes harás sobre la tierra.

R. ¡Ya llega el esposo! ¡Salgamos a recibir a Cristo, el Señor!

(Aleluya)

Segunda Lectura
Monición: En la segunda lectura nos habla sobre el misterio de Cristo y
de la Iglesia en la precedente reflexión de la Carta a los Efesios hemos
llamado especialmente la atención sobre la analogía de la relación que
existe entre Cristo y la Iglesia, y de la que existe entre el esposo y la esposa
unidos por el vínculo matrimonial.
Escuchemos.

Lectura de la Carta de Efesios 5, 2. 21-33

Hermanos: Vivan amando, como Cristo, que nos amó y se entregó por
nosotros.
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Respétense unos a otros, por reverencia a Cristo: que las mujeres respeten
a sus maridos, como si se tratara del Señor, porque el marido es cabeza de
la mujer, como Cristo es cabeza y salvador de la Iglesia, que es su cuerpo.
Por lo tanto, así como la Iglesia es dócil a Cristo, así también las mujeres
sean dóciles a sus maridos en todo.

Maridos, amen a sus esposas como Cristo amo a su Iglesia y se entregó por
ella para santificarla, purificándola con el agua y la palabra, pues él quería
presentársela a si mismo toda resplandeciente, sin mancha ni arruga ni cosa
semejante, sino santa e inmaculada.

Así los maridos deben amar a sus esposas, como cuerpos suyos que son.
El que ama a su esposa se ama a sí mismo, pues nadie jamás ha odiado a
su propio cuerpo, sino que le da alimento y calor, como Cristo hace con la
Iglesia, porque somos miembros de su cuerpo.

Por eso abandonará el hombre a su padre y a su madre, se unirá a su mujer

y serán los dos una sola carne. Este es un gran misterio, y yo lo refiero a
Cristo y a la Iglesia.

En una palabra, que cada uno de ustedes ame a su mujer como a sí mismo,
y que la mujer respete a su marido.

Palabra de Dios

Santo Evangelio
Monición: El matrimonio es indisoluble por naturaleza y por positiva
institución de Dios. Se remonta al momento mismo de la creación, como
puede verse expresado en las palabras del Génesis (2,24): ‘’Por esto deja
el hombre a su padre y a su madre y se une a su mujer, y vienen a ser
una sola carne’’. Y termina su razonamiento diciendo: ‘’Así, pues, lo que
Dios ha unido no lo separe el hombre’’, hacemos la aclamación al Santo
Evangelio y nos ponemos de pie prestos a escuchar con atención.
Lectura del santo Evangelio según Mateo 19, 3-6

En aquel tiempo, se aceraron a Jesús unos fariseos y, para ponerle una

trampa, le preguntaron: ˝ ¿Le está permitido al hombre divorciarse de su
esposa por cualquier motivo?˝
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 Jesús les respondió: ˝ ¿No han leído que el Creador, desde un principio los
hizo hombre y mujer, y dijo: ‘Por eso el hombre dejara a su padre y a su
madre, para unirse a su mujer, ¿y serán los dos una sola carne’? De modo
que ya no son dos, sino una sola carne. Así pues, lo que Dios ha unido, que
no lo separe el hombre. ˝

Palabra del Señor

Homilía.

RITO DEL MATRIMONIO

Todos puestos de pie.

Monición: (Sacerdote)

Han venido aquí, hermanos, para que Dios garantice con su sello su amor,
ante el pueblo de Dios aquí congregado y presidido por su ministro. Un día
fueron consagrados en el bautismo; hoy, con un nuevo sacramento, Cristo
va a bendecir su amor, y los enriquecerá y dará fuerza, para que se guarden
siempre mutua fidelidad y puedan cumplir con su misión de casados. Por
tanto, ante esta asamblea, les pregunto sobre su intención.

Escrutinio
El Sacerdote pregunta a los novios:

Miguel Rivera y Veyra Castro, ¿vienen a contraer matrimonio sin ser

coaccionados, libre y voluntariamente?

Novios: Sí, venimos libremente.

¿Están decididos a amarse y respetarse mutuamente durante toda la vida?

Novios: Sí, estamos decididos.
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 ¿Están dispuestos a recibir de Dios responsable y amorosamente los hijos,
y a educarlos según la ley de Cristo y de su Iglesia?
Novios: Sí, estamos dispuestos.

Consentimiento

El Sacerdote invita a los novios a expresar su consentimiento, diciéndoles:

Así, pues, ya que quieren contraer santo matrimonio, unan sus manos, y
manifiesten su consentimiento ante Dios y su Iglesia.

Los Novios unen su mano derecha y dicen:

El Novio: Veyra ¿Quieres ser mi esposa?

La novia: Si quiero.
La novia: Miguel ¿Quieres ser mi esposo?
El novio: Si quiero.
El novio: Veyra, yo te acepto como esposa y prometo amarte fielmente
durante toda mi vida.
La novia: Miguel, yo te acepto como esposo y prometo amarte fielmente
durante toda mi vida.

El Sacerdote prosigue diciendo:

El Señor, que hizo nacer en ustedes el amor, confirme este consentimiento

mutuo, que habéis manifestado ante la Iglesia. Lo que Dios ha unido, que
no lo separe el hombre.

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Aclamación de la asamblea
Proclamemos la bondad de Dios para con estos dos hijos suyos.

La asamblea responde:

Bendito sea Dios, que les ha unido.

Canto de Acción de Gracias.

Bendición y entrega de los anillos

El Sacerdote:

El Señor bendiga estos anillos que van a entregarse el uno al otro en señal
de amor y de fidelidad.

R./: Amén.

El Novio pone el anillo a la Novia diciendo:

Veyra, recibe esta alianza, en señal de mi amor y fidelidad a ti.

La Novia pone el anillo al Novio diciendo:

Miguel, recibe esta alianza, en señal de mi amor y fidelidad a ti.

Bendición y entrega de las arras

Sacerdote:

Bendice, Señor, estas arras, que Veyra y Miguel intercambian y derrama

sobre ellos la abundancia de tus bienes.

El Novio toma las arras y las entrega a la Novia diciéndole:

Veyra, recibe estas arras como prenda de la bendición de Dios y signo de

los bienes que vamos a compartir.
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La Novia toma las arras y las entrega al esposo diciéndole lo mismo.

Miguel, recibe estas arras como prenda de la bendición de Dios y signo de

los bienes que vamos a compartir.

ORACIÓN DE LOS FIELES

Sacerdote: Oremos, hermanos, por las necesidades de la santa Iglesia y
de todo el mundo, y encomendemos especialmente a nuestros hermanos
Veyra y Miguel, que acaban de celebrar con gozo su matrimonio.

Lector: Por la santa Iglesia, para que Dios le conceda ser siempre la
esposa fiel de Jesucristo.

Todos: Roguemos al Señor.

Lector: Por la paz de todo el mundo, para que cesen las ambiciones,
desaparezcan las injusticias y enemistades y brote por todas partes el
amor y la paz.

Todos: Roguemos al Señor.

Lector: Por los nuevos esposos Miguel y Veyra, para que el Espíritu
Santo los llene con su gracia y haga de su unión un signo vivo del amor
de Jesucristo a su Iglesia.

Todos: Roguemos al Señor.

Lector: Por nuestro hermano Miguel, para que sepa amar a su esposa
como Cristo ama a su Iglesia, este siempre atento a honrarla y sea su
alegría y su ayuda.

Todos: Roguemos al Señor.

Lector: Por nuestra hermana Veyra, para que sea siempre irreprensible
en su conducta, brille en ella la dulzura y la pureza, la humildad y la
prudencia.

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 Todos: Roguemos al Señor.

Lector: Por las familias que sufren a causa de las enfermedades, por las
que no tienen el pan necesario o viven lejos de sus hogares, para que el
Señor sea su auxilio y su ayuda.

Todos: Roguemos al Señor.

Lector: Para que en el hogar de Miguel y Veyra siempre esté presente,

muestra amadísima Madre María y sea para ellos modelo de amor y de
aceptación a la voluntad del Padre.

Todos: Roguemos al Señor.

Lector: Para que su hogar dé testimonio perseverante de la fe cristiana

y sea para el mundo reflejo luminoso del amor de Dios.

Todos: Roguemos al Señor.

Sacerdote: Escucha, Padre de bondad, nuestra oración y concede a tus

siervos, que confían en ti, conseguir los dones de tu gracia, conservar el
amor en la unidad y llegar con su descendencia, después de esta vida, al
reino eterno. Por Jesucristo nuestro Señor.

Todos: Amén.

Liturgia Eucarística

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Monitor: Señor, te presentamos junto a las ofrendas del Pan y del Vino, el
anhelo de tenerte como centro de nuestras vidas toma el amor de nuestros
corazones y haz que todo sea tu mayor gloria y alabanza.
Sacerdote: Oren hermanos y hermanas para que este sacrificio, mío y de
ustedes, sea agradable a Dios Padre Todopoderoso.
Todos: El señor reciba de tus manos este sacrificio para alabanza y gloria de
tu nombre, para nuestro bien y el de toda su santa Iglesia.
Sacerdote: Escucha nuestras oraciones Señor, y recibe con agrado el
sacrificio que te ofrecemos por la unión sagrada de Miguel y Veyra; y ya que
eres el autor de ella, se también su protector y su guía. Que el misterio del
amor generoso de Cristo, el cual celebramos en esta Eucaristía, aumente
su amor por ti y el uno por el otro.
Todos: Amén.

Plegaria Eucarística.
Padre Nuestro.

Imposición del Rosario

Monitor: Los padrinos unirán con un lazo a los nuevos esposos. Es el lazo del
amor que nunca quita la libertad, al contrario, el lazo del amor es el único
que da la verdadera y plena libertad.
Sacerdote: Miguel y Veyra, que, al unirlos con este vínculo, el Rosario de la
Virgen María, sea una inspiración para los dos. Recuerden que la santidad
para preservar esta nueva familia, como familia de Dios, solo se obtiene por
medio del mutuo amor y sacrificio. Que la sagrada familia de Jesús, María y
José sea su ejemplo durante toda su vida.

Oración de Bendición Solemne para los Nuevos Esposos.

Rito de la Paz.

Comunión

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Monitor: No celebramos solamente la unión de los nuevos esposos,
celebramos también a Jesús Eucaristía, presente, en las especies de Pan y
Vino. Acerquémonos los que nos sentimos en su Gracia, para que se quede
en nuestras vidas, y podamos vivir las exigencias del Reino, mientras
entonamos que nos invita al encuentro personal con Cristo.

Canto de Comunión.

Consagración a la Virgen María

Los nuevos esposos llevan el ramo a la Virgen.

Oración después de la Comunión

Sacerdote: Por este sacrificio de salvación, protege Señor con tu providencia,

a la nueva familia Rivera Nolasco que has instituido y unifica en un mismo
corazón a los que uniste en una santa alianza y has alimentado con un
mismo pan y cáliz, para que en su hogar reine el amor, la paz y la
comprensión.
Te lo pedimos por Cristo nuestro Señor.

Todos: Amén.

Bendición Final.

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