Moléculas y Átomos
Moléculas y Átomos
Moléculas y Átomos
El átomo es la menor fracción en la que se puede dividir un elemento simple, pero sin perder sus propiedades
primas y pudiendo ser un objetivo de alguna reacción química. Esta formada por protones y neutrones,
situados en el núcleo, ya que concentra casi toda la masa atómica, y a cuyo alrededor giran unos numerosos
de electrones igual al de protones.
El concepto de átomo como una partícula invisible ya se encontraba en Grecia. En 1803 Dalton emitió la
hipótesis atómica: los elementos están formados por átomos y los compuestos por grupos de estos
(moléculas). Los elementos de Thomson (1897) con rayos catódicos y la identificación de estos con los
corpúsculos llamados electrones, constituyentes de la electricidad, indicaron la posibilidad de que el átomo
fuera divisible en componentes (partículas). Los trabajos de Rutherford (1911) bombardeando láminas
metálicas con partículas alfa llegaron a distinguir en el átomo un núcleo pequeño con un diámetro de 10-12
cm y pesado y una nube electrónica dispuesta en capas concéntricas que abarcaban un diámetro 10-8 cm.
El átomo mas sencillo es el de hidrógeno, consta de un solo protón y un solo electrón, los átomos más
complejos tienen en el núcleo tantos nucleones como indica su masa atómica, de los cuales son protones
(con carga positiva) en cantidad igual al número atómico (número de orden en la tabla periódica) y neutrones
(sin carga) el resto. La carga positiva del núcleo se contrarresta con una igual de sentido contrario
correspondiente a los electrones de la corteza atómica.
En 1913, N. Bohr, basándose en los conocimientos que facilitaba la mecánica cuántica, y para explicar de
modo adecuado las líneas espectrales, presentó un modelo atómico que establecía y cuantificaba (mediante
los números cuánticos) la distribución de los electrones alrededor del núcleo, la forma orbital en que se
movían y las condiciones bajo las cuales éstos saltaban de una a otra órbita. Posteriormente, Sommerfeld
completó el mencionado modelo con un tercer número cuántico, con el que precisó que las órbitas
electrónicas eran elípticas y no coplanarias.
En 1925, Uhlenbeck y Goudsmit demostraron que los electrones atómicos tienen un movimiento de rotación,
que se define con un cuarto número cuántico. El estudio del núcleo atómico ha dado lugar a la física nuclear, y
ésta ha puesto de manifiesto la existencia de numerosas partículas subatómicas. Las teorías ondulatorias de
E. Schrödinger sobre las partículas elementales hacen considerar los niveles energéticos u orbitales de N.
Bohr bajo una nueva perspectiva, en la que el concepto de posición de un partícula se convierte en la
probabilidad de presencia de una onda estacionaria.
Una molécula es una partícula formada por una agrupación ordenada y definida de átomos, que constituye la
menor porción de un compuesto químico que puede existir en libertad.
Aún las moléculas muy grandes son tan pequeñas que no seríamos capaces de ver a una molécula de una
sustancia. Pero cuando cientos de moléculas se encuentran juntas, podrían estar en forma de un vaso de
agua, el árbol de un bosque, la pantalla de la computadora; dependiendo del tipo de moléculas que sean.
Las moléculas sólo se hallan perfectamente individualizadas en los gases en estado de movimiento rectilíneo
desordenado, en cuyo caso su interacción se limita a choques muy breves. En los líquidos, si bien las
moléculas se desplazan libremente, existe un mayor contacto intermolecular. En los sólidos, las moléculas
ocupan por lo general posiciones fijas en los nudos de redes cristalinas. Los agregados atómicos moleculares
pueden ser polares o no polares. En el primer caso, las moléculas forman pequeños dipolos y es la atracción
que se manifiesta entre éstos lo que causa la unión intermolecular.
Las dimensiones de la molécula dependen de las características y del número de los átomos que la forman, y
pueden ir desde 2,4 ångström (molécula de hidrógeno) hasta longitudes perceptibles a simple vista (moléculas
orgánicas o macromoléculas). La masa de las moléculas es extremadamente pequeña, ya que guarda
relación con sus dimensiones, lo que hace evidente la necesidad de recurrir a unidades de masa especiales,
tales como la molécula gramo o mol, que equivale a la masa de un cuerpo que en estado gaseoso ocupa el
mismo volumen que 32 g de oxígeno (dado que la molécula de este elemento consta de dos átomos).
En el transcurso de las reacciones químicas a las que se ven sometidas, las moléculas experimentan todo tipo
de transformaciones (divisiones, uniones, cambios de parte de sus átomos, etc.), lo que permite la formación
de nuevas moléculas (es decir, de nuevos cuerpos).