Prueba Pericial
Prueba Pericial
Prueba Pericial
Las conclusiones del perito como fuente de conocimiento sobre los factores o
hechos establecidos en una cauda penal, aparecen como resultado de la realización
de la acción procesal denominada peritaje.
El objeto del peritaje son las huellas, objetos o eventos obtenidos en otras acciones
procesales (registro, inspección del lugar del suceso, etc.), cuya investigación se
realiza sobre la base de los conocimientos especiales del perito que exigen de él, el
esclarecimiento de las circunstancias que constituyen el objeto del peritaje o la
fundamentación de su imposibilidad cuando ello tuviera lugar.
Esto por supuesto depende del objeto concreto que se trate, pues no siempre se
puede dictaminar sobre algo en base a declaraciones de testigos o documentos, ya
que los sujetos del peritaje criminalístico son las propias huellas y pruebas
materiales y no su descripción.
En ocasiones el conocimiento de los factores que influyeron o caracterizaron la
formación del objeto de la investigación pericial criminalística, como por ejemplo la
posición asumida o el estado de salud del sujeto que elaboró un documento durante
su escritura, y que puede haberse reflejado en éste, las condiciones criminalísticas
y meteorológicas reflejadas en la formación de las huellas y otros, así como las
condiciones en que fueron conservadas las pruebas materiales hasta su recepción
por el perito, pueden ayudar a éste a resolver correctamente las preguntas a él
formuladas y realizar sus determinaciones con ayuda de la declaración de los
testigos, de los documentos que se posean y de otros antecedentes de que se
pueda disponer.
Antes de la designación del peritaje, el instructor debe tomar las medidas necesarias
para evitar que existan contradicciones entre los materiales relacionados con el
proceso penal que serán enviados al perito; no obstante, si a pesar de ello no se
logran eliminar algunas contradicciones entre las fuentes de prueba, el instructor
está en la obligación de dar cuentas al perito en la parte escrita de la solicitud de
peritaje, de las deducciones a las que él arribó como resultado de la valoración de
las pruebas y prevenir al perito de la contradicción por el encontrada.
Las conclusiones del perito sobre materiales del proceso penal en el que existan
contradicciones, pueden contener alternativas. El perito, no realizando valoración
de las pruebas, propone el investigador algunas soluciones a las preguntas
formuladas por él, en dependencia de cuales de las pruebas contradictorias son
situadas como base de la conclusión. Por cuanto la veracidad de las deducciones
del perito depende del material investigado, él tiene derecho a hacer la
correspondiente aclaración.
La negación categórica del valor de la utilización de estas reglas prácticas por parte
del perito como fundamento de las conclusiones periciales, es considerada
incorrecta.
El peritaje probable ha sido objeto de análisis por numerosos autores. Más adelante
profundizaremos en el estudio de este tipo de peritaje, aquí solo nos limitaremos a
señalar que el peritaje que sólo puede establecer una probabilidad determinada, por
ejemplo del 90% de que una sustancia tenga un origen común con otra enviada
para su comparación, en realidad se trata de una determinación de pertenencia de
grupo y no de una identificación propiamente dicha. Para que un peritaje tenga
fuerza probatoria, es decir, para que las conclusiones del perito constituyan medios
de prueba en el proceso penal, la conclusión tiene que ser categórica y estar basada
en la determinación de un conjunto de síntomas identificativos que establezcan que
ese y sólo ese es el resultado posible. Con el problema de la identificación y el
establecimiento de la pertenencia de grupo, están relacionadas las determinaciones
categóricas y probables. Como vemos la identificación está relacionada con el
peritaje categórico y el establecimiento de la pertenencia de grupo con el peritaje
probable. Si es posible determinar la suficiente cantidad de síntomas identificativos,
lograremos establecer un grupo que sólo tiene un elemento, que es el objetivo de la
identificación.
La unión de la actividad científica del perito, con la actividad procesal del Tribunal y
el instructor o el fiscal, se lleva a cabo en forma de relación legal, pudiéndose
diferenciar tres grupos de relaciones legales en el proceso de ejecución del peritaje
según Petrujin siendo ellas:
1) La relación entre el perito y el Tribunal, fiscal o instructor.
2) La relación entre el perito y las partes surgida y desarrollada bajo el control del
Tribunal, fiscal o instructor.
Con el objetivo de que los métodos utilizados para la realización de los diferentes
peritajes en nuestro país, respondan a las exigencias del desarrollo científico
técnico, de la ley y de la práctica judicial, el Laboratorio Central de Criminalística
como órgano rector de esta actividad, investiga y elabora nuevos métodos que una
vez comprobados fehacientemente, envía a los diferentes laboratorios provinciales
donde se aplican obligatoriamente.
Esto hace que exista uniformidad en los métodos utilizados y que las
determinaciones no dependan del criterio personal que pueda tener un perito,
garantizando así, la objetividad de que debe gozar toda determinación pericial.