El Artificio, Reverso de La Ficción - Marie-Helene Brousse
El Artificio, Reverso de La Ficción - Marie-Helene Brousse
El Artificio, Reverso de La Ficción - Marie-Helene Brousse
El momento de la invención
Vemos en este texto cómo la traducción de Meyerson “Science des rêves”[3], aunque
imprecisa, no resulta infiel a la posición subjetiva de Freud: avanzar en un
conocimiento hasta ahora desconocido mediante la modelización de un fenómeno
psíquico universalmente compartido por los seres humanos. El valor de este modelo
teórico, por lo tanto, se basa, a diferencia de los fenómenos que él llama patológicos,
en el hecho de que es válido para todos. Pero es privado. Se aventura así en un
dominio prohibido por el discurso del amo de la época. En el siglo XXI el discurso del
amo ha cambiado y lo privado se ha diluido. El psicoanálisis contribuyó, no poco, a
este movimiento.
¿Se trata de retomar algunas referencias de Lacan, quien no solo ha retomado los
sueños trabajados por Freud, sino también de algunos de sus propios pacientes y
también, aunque en raras ocasiones, es verdad, sus propios sueños, para modificar el
modelo freudiano en la medida que avanzaba su enseñanza? Nuestros colegas,
directores del próximo Congreso, lo hicieron maravillosamente en su texto.
Sin embargo, es en este punto que me detengo: ¿Qué hay de nuevo en el
psicoanálisis sobre el sueño 120 años después?
Docilidad analítica
Fue entonces que me introduje en los conceptos; releí algunos de los últimos
seminarios de Lacan, los cursos de JAM de 2007 a 2011. Por ejemplo, encontré esta
frase de JAM en 2007: “Me encanta interpretar sueños”. Allí habla de un verdadero
diálogo analista/analizante a través de la sucesión de sueños del lado analizante y la
interpretación del lado analista. En este mismo curso también me enganché con
varios ejemplos, desplegados con la mayor precisión, interpretación tipo
desciframiento, criptografía, no solo del sueño, sino de otras formaciones del
inconsciente, a saber, dos actos fallidos de Freud, descascarados hasta el hueso, el
ombligo. Una lección, por lo tanto: el inconsciente-desciframiento y el inconsciente
real no están en una relación de exclusión. Pensar que son incompatibles es del
orden de la doxa, y si Lacan corrigió a Freud es porque toda su enseñanza está
construida para evitar la transformación de los avances del psicoanálisis en doxa, una
tendencia que mató la transmisión de Freud entre los post-freudianos.
Pero, precisamente, decir que el sueño interpreta es una tesis lacaniana. Para Freud,
es el analista quien interpreta el sueño del analizante de acuerdo con un método
preciso, sabiendo que el analista puede ser el soñador. Entonces el asunto se
complica: el sueño es interpretable de acuerdo con ciertas reglas de desciframiento,
que responden esencialmente a la metáfora y la metonimia, por lo tanto, a la
sustitución; es la “vía regia” del inconsciente freudiano. Pero también el sueño
interpreta, es su lado “ombligo”. Interpreta el traumatismo inaugural, el momento en el
que el sujeto y el objeto coincidieron, su diferencia abolida. Por un lado, la vía regia
basada en la dictadura loca del sentido que siempre es servil, como Lacan lo
mostrará; por el otro, el ombligo, un agujero en el saber, un agujero que resuena y
produce ondas. Troumatisme, dirá Lacan.
¿Qué produce el sueño? Los efectos de saber agujereado que aparecen tan
rápidamente como se desvanecen porque las nominaciones que produce están al
borde del no-quiero-saber. Pero también efectos de cuerpo: movimientos diversos,
placer sexual, felicidad, incomodidad, malestar, lágrimas, angustia, horror, risa,
enigma. El sueño siempre va acompañado de fenómenos de cuerpo, una verdadera
interpretación en acto.
Al llegar a este punto, la pregunta, “qué hay de nuevo en la época del binario
inconsciente desciframiento relacionado con lo simbólico e inconsciente real al
imaginario”, podría recibir un bosquejo de respuesta.
El sujeto barrado, efecto de S1-S2, sujeto representado por un significante para otro
significante, no es sin el cuerpo hablante y los diferentes modos de goce. Dicho de
otro modo, el fantasma se sitúa en la sombra del sinthome. Sería entonces lógico que,
en la época del inconsciente real, el sueño siga siendo un elemento central de la
experiencia analítica. Luego fui a releer los testimonios de los AE, colocándolos en
series (porque como todos saben, la serie es el comienzo de la seriedad) para
verificar qué lugar tiene hoy el sueño en la práctica analítica.
Verificación
2. Estos sueños son tratados ya sea como portadores de un saber, como generadores
de una escansión o como productores de un corte. En resumen, funcionan sobre el
modelo de las diferentes modalidades de interpretación. La parte común entre sueño
e interpretación se valida.
7. Los sueños movilizados en la transmisión del testimonio, (pero también fuera del
contexto del dispositivo del pase, los sueños ya contados en un análisis anterior),
pasan al estatuto de escritura. Escapan así al olvido que es la modalidad más común
de la memoria.
Para concluir
Algunos sueños dan una forma épica a la estructura. Habrán reconocido la definición
lacaniana de mito. ¿A qué estructura le dan esta forma? Creo que es a la estructura
del fantasma sobre la cual contribuyen a revelar el sesgo al analizante. Interpretan el
fantasma mediante una orgía de sentido gozado, situándola en relación a un Otro que
no está barrado porque hay un sin límite en el sentido.
Otros sueños son del orden de la escritura. Escriben una palabra, o algunas letras
indescifrables y sin sentido al principio. Movilizan el equívoco, implican una lectura, a
veces un witz, una invención y no un relato ni una historia.
Puede suceder que el mismo sueño dé lugar, en dos momentos diferentes de la cura,
a una y luego a otra de estas categorizaciones.
Un ejemplo
Quizás para encarnar esto un poco más, puedo referirme a un ejemplo tomado de dos
testimonios de B. Seynaeve que pone a trabajar en el mismo sueño, en dos
momentos de su testimonio, estas dos modalidades de las que hablo.
Este sueño surgió como resultado de una intervención del analista y fue una pesadilla.
Cuento la historia tal como aparece en su comunicación dada durante el curso de
JAM el 25 de marzo de 2009: “Deambulo por el corredor del Refuge de la saintFamille
(que es el hospital donde mi madre dio a luz a todos sus hijos), que tiene la forma de
la letra ele, los mosaicos, inestables, tiene forma de damero, son negros y blancos.
Me desplazo cuidando de no caminar por las junturas. De repente, siento una
necesidad imperiosa de orinar. Los baños se encuentran en el ángulo de la ele. Se
presentan con dos puertas, una a cada lado de la ele. Hay que elegir una puerta.
Entro en los baños y empiezo a orinar en el inodoro sin poder detenerme. El inodoro
se desborda, y me despierto orinándome en la cama.”[6] Primera interpretación:
pesadilla de castración y aparición de síntomas transitorios ligados a la puesta en
marcha de un binario S1-S2.
Con respecto al sueño, la reducción del sentido borra el mito y, por lo tanto, la
dominación del Otro y la modalidad de lo necesario. Entonces permite una escritura
que está fuera de sentido, vinculada al entramado del núcleo traumático contingente
que es el “hueso” del sinthome.
El sueño, de las delicias del “érase una vez” lleno de significado, al poema o Witz, un
agujero negro en el sentido, tal como lo define la astrofísica actual, un objeto muy
simple caracterizado por su masa y el número de rotaciones por segundo y que no
tiene estructura, una superficie matemática definida por el hecho de que cualquier
información u objeto que ingresa allí desaparece. Desde el agujero, uno solo atrapará
las ondas que emite.
NOTES
1. Nota de traducción (NT): La primera traducción al castellano data de 1923, por L. López-Ballesteros.
2. Advertencia a la primera edición.La interpretación de los sueños. Traducción de J.L. Etcheverry. Amorrortu Editores, p.
17-18.
3. (NT) El título de La interpretación de los sueños fue traducido por Meyerson al francés como: “La ciencia de los sueños”.
4. Jacques Lacan, Momento de concluir, clase de 15 noviembre 1977, inédito. Tomado
de: http://www.bibliopsi.org/docs/lacan/30%20Seminario%2025.pdf
5. N.T. En francés la palabra lettre quiere decir letra y carta. La autora alude al equívoco carta robada (lettrevolée).