DON DE MANDO PRINCIPIOS Y NORMAS (ME 31-5) EDICION 2000

CAPITULO 1
INTRODUCCIÓN

Sección II. DEFINICIONES

4. MÉTODO DE MANDO.

a. El Mando, es el atributo esencial del militar, mandar es ejercer la autoridad

con que esta investido, para imponer la propia voluntad a fin de conducir a los
subordinados en el cumplimiento del deber. Mediante el mando de la unidad
a las acciones colectivas, se impone, afianza y mantiene la disciplina.

b. Ejercer el Mando es prever, organizar, dar oportunidades, dar órdenes claras

precisas y controlar su ejecución.

c. El Jefe asegura su autoridad por la firmeza de su carácter, por su valor

profesional y moral, y por el exacto cumplimiento de los deberes que son
colectivos a las prerrogativas del mando. Siendo exigente para consigo
mismo, tendrá autoridad suficiente para exigir a sus subordinados todos los
sacrificios que imponen el servicio de la patria.

d. Todo militar tiene su función en la jerarquía y para cumplirla ejercita su

iniciativa y asume sus responsabilidades.

e. la iniciativa contribuye poderosamente a fortificar el carácter y a desarrollar el

sentido de responsabilidad mantenida dentro de los justos limites, es una alta
cualidad militar.
f. Para que pueda ejercerse justiciosamente en cada grupo, y a fin de que no
sean invalidadas las atribuciones de los escalones inmediatos, se hace
indispensable limitar en forma precisa la esfera de acción de cada cual. El
superior evita encerrar a sus subordinados con las prescripciones de detalle
capaces de restrigirles sus iniciativas en la ejecución.

g. Cualesquiera que fuesen las circunstancias y a los obstáculos todo militar se

esforzará por alcanzar el fin que le ha asignado. Hace frente a los
acontecimientos imprevistos, adoptando las disposiciones necesarias para
realizar las intenciones del Comando.

h. La responsabilidad es consecuencia necesaria de la iniciativa y constituye

deber de cada superior evidenciarla y reafirmarla en sus propios actos y
decisiones. De ahí que toda orden deba ser impartida en forma tal que
inmediatamente después de cumplida, pueda deslindarse las
responsabilidades sin lugar a dudas. Este material define, desde el punto de
vista de establecimiento de las responsabilidades y de lo concerniente a las
iniciativas, los deberes y las atribuciones de cada uno, en relación a las
funciones que desempeña. En tal efecto, es importante que las
responsabilidades sean absolutas en cada grado y que el jefe del escalón
 superior no sea, en principio, responsable de las pequeñas faltas de los
subordinados; porque la responsabilidad, así generalizada, es forzosamente
contraría a toda iniciativa y conduce al jefe responsable a querer
reglamentarlo todo.

i. La autoridad superior, teniendo en cuenta las circunstancias, establece las

consignas temporales o permanentes ampliatorias del reglamento y
necesarias en la buena ejecución del servicio, dejando a los subordinados la
facultad de dictar las disposiciones de detalle concurrentes al mejor
cumplimiento de los propósitos del jefe.

j. Toda “Consigna”, cuyo cumplimiento interesa a varias autoridades

independientes, debe emanar del comando que tenga autoridad sobre ellas.

k. Los comandos superiores tiene el deber de controlar que las consignas

impartidas sobre sus subordinados en sus respectivos mandos, guarden
conformidad con el espíritu de los reglamentos, directivas e instrucciones
vigentes, que estén basadas en una apreciación juiciosa de las circunstancias
y que no sean susceptibles de ser modificadas sino bajo situaciones
especiales.

l. En los altos escalones del mundo, conviene, preferentemente, emitir

“Directivas” e “Instrucciones” indicando el fin que se persigue dejando a los
subordinados la elección de las medidas de ejecución. Sin embargo, estas
pueden ser establecidas cuando el escalón interesado sea el único capaz de
ponerlas en acción, o cuando se halle comprendida exclusivamente la
responsabilidad personal del jefe.

m. A medida que se descienda en la escala jerárquica, las órdenes van siendo

cada vez más detalladas, no quedando al último escalón subordinado sino la
iniciativa apropiada a su grado, situación y capacidad.

n. A medida que se descienda en la escala jerárquica, las órdenes de su Jefe,

en ausencia de él, bajo situaciones urgentes introduce por si bajo su
responsabilidad, las modificaciones que las circunstancias hacen
indispensables, dando cuenta tan pronto como sea posible.

5. CUALIDADES PARA EL DON DE MANDO

Son los rasgos característicos personales y necesarios que ayudan en el

ejercicio del mando.

6. PRINCIPIOS DEL DON DE MANDO

Son fundamentos que le sirven al Jefe para la selección de las acciones y

órdenes apropiadas.

7. INDICATIVOS DEL DON DE MANDO

 a. Moral.- Es el estado mental y emocional del individuo que lo induce al
cumplimiento de su obligaciones y participar, como miembro de su grupo, en
el logro de un objetivo común.

b. Disciplina.- Es la estricta observación de las leyes, de las disposiciones

vigentes, de las ordenes superiores que esta obligado todo el personal militar
e implica la subordinación consiente y constante de la voluntad individual en
provecho del conjunto. Constituye la base fundamental del Ejército y es el
factor mas poderoso del éxito y su importancia esta que no puede concebir
una fuerza organizada sin disciplina.

c. Espíritu de Cuerpo.- Es el sentido que une los componentes de una unidad

o repartición militar, considerándola entre la mejor entre sus equivalentes.
Es fundamental para lograr la cohesión de conjunto y se le cultiva
fomentando el compañerismo, enalteciendo las glorias pasadas de la unidad,
conservando sus banderas y trofeos y, rindiendo tributo a sus comandantes y
miembros distinguidos del pasado y presente.

d. Eficiencia.- Es la capacidad técnica, táctica y física del individuo y de la

unidad.

8. EFECTIVIDAD DE LA UNIDAD

Una Unidad de combate es efectiva cuándo estando bien organizada, entrenada

y equipada, cumple cualquier misión asignada o deducida con un mínimo de
equipo y de medios.

9. ORDENES Y ACCIONES DEL DON DE MANDO

Es todo lo que un jefe hace o dice con el fin de dirigir e influir en sus
subordinados.

10. SUPERVISIÓN PERSONAL

Es el arte de asegurar personalmente el cumplimiento de las acciones y ordenes

sin llegar a obstruir ni hostilizar a los subordinados, lo cual podría disminuir la
iniciativa de estos.

11. Jefe

En la terminología militar es la terminología que ejerce autoridad en una entidad

o instalación militar cualquiera.

12. Comandante

La persona a la que virtud de su grado y designación formal o sucesión bajo

principios fijos establecidos por la ley o reglamentos, se le asigna la
responsabilidad de dirigir las actividades de una Sub Unidad, Unidad o Gran
Unidad.
Nota : Aún cuando es un sentido técnico se hace una distinción entre
comandantes y jefes, en un sentido amplio no hay tal distinción. Para que el
comandante o jefe sea eficiente, debe poseer cualidades para el don de
mando y aplicar los principios que se exponen en este manual.

13. Comando

Comando es la autoridad que un individuo en el servicio militar ejerce

legalmente sobre subordinados en virtud a su rango y asignación. Lleva
consigo la responsabilidad de planear, organizar, entrenar, dirigir, coordinar,
controlar y mandar a las fuerzas militares para que el cumplimiento de la misión
asignadas (implícitas o deducidas), conjuntamente con la responsabilidad
administrativa.

14. Administración

a. El proceso mediante el cuál los recursos en personal, dinero, material,

tiempo y facilidades son utilizados para cumplir las misiones y tareas de la
organización.

b. Las funciones de administración son : Planeamiento. organización,

dirección, coordinación y control. c. las funciones del administrador son :
establecimiento de objetivos, motivación, comunicación, innovación,
mantenimiento de la cooperación, formación de los subordinados y
elaboración de decisiones.

c. Aún se han hecho intentos para establecer diferencias entre la eficiente

“Administración” y el acertado don de mando no se han podido determinar,
ya que los objetivos de ambos son idénticos. En resumen las funciones del
administrador y del jefe o Comandante son inseparables.

CAPÍTULO 2
CARACTERÍSTICAS DEL DON DE MANDO

SECCIÓN I. GENERALIDADES

15. Naturaleza Universal del Don de Mando

La profesión militar no tiene el monopolio del don de mando. Se encuentran

jefes no sólo de la FFAA, en la industria y el gobierno, sino también en todos
los campos de la actividad humana. El progreso y el éxito dependen de la
calidad y efectividad del don de mando.

16. Elementos del Don de Mando

El don de mando es efectuado por tres elementos básicos : El jefe, la unidad o

grupo que dirige, y la situación en que actúan. No hay formula para hacer un
jefe o líder y nunca dos jefes obtienen igual resultados aún actuando en la
misma forma. Cada jefe al analizar los diversos elementos de un problema de
don de mando se vera afectado en forma diferente por su personalidad por las
personalidades de los miembros de su unidad y por los factores de la situación
que confronta. Estas variables hacen imposible el empleo de un patrón o
solución standarizada. Cualquier persona razonando inteligentemente,
presidiendo de su experiencia, puede estudiar, cultivar y aplicar las técnicas
del don de mando debe formular su propia solución, basándose del análisis de
estos tres elementos básicos.

a. El Jefe.- Los primeros resultados del don de mando se concentraban en

la persona del jefe. Por centurias del hombre heredaba su posición
directriz o la ganaba en virtud a su fortaleza física o personalidad
compulsiva y dominante. Gradualmente se desarrollo la opinión de que el
don de mando podría adquiriese y que ciertas cualidades o características
estaban invariablemente asociadas con él.

Se emprendieron muchos estudios para descubrir algún rasgo que fuera

una característica común para todos los jefes o también una combinación
de cualidades que indicará aptitud del don de mando. Los diversos
informes presentados por las autoridades, respecto a las cualidades
asociadas a los individuos con probadas aptitudes de don de mando,
revelaron muchas diferencias de opinión. Todos los jefes competentes
tienen algunas de estas cualidades. Ninguno tiene todas, y pocos son los
que tienen idénticas cualidades. No obstante emergió un hecho el de la
herencia, que como en todos los aspectos del comportamiento humano,
probablemente también el don de mando tiene una función parcial, no
constituyendo un factor determinante, En el desarrollo del don de mando
los factores de la experiencia, aprendizaje, y medio ambiente son
considerablemente más importantes que la herencia.

b. El Grupo.- El grupo afecta de dos maneras las decisiones del don de

mando : como un grupo y por la acción individual de cada uno de sus
componentes. Los factores que deben considerarse comprenden : la
estructura de su organización comprendiendo la disponibilidad y
efectividad de los sub jefes; las características culturales del grupo que
incluye antecedentes de que el eficiente toma decisiones que se ajustan a
las necesidades y deseos del grupo, en el marco militar este principio debe
aplicarse con cautela, ya que el cumplimiento de la misión, es una
consideración determinante y puede hacer imposible su aplicación. No
obstante el buen jefe realiza siempre todos los esfuerzos para comprender
aquellas necesidades y deseos y en el grado que sea posible, tomarlos en
consideración al establecer metas u objetivos y al adoptar los medios y
formas para lograrlos.

c. La Situación.- La situación comprende la misión asignada, el factor

ambiental, y otros con discutidos en “a” y “b”, anteriores, que afectan su
cumplimiento. Nunca dos situaciones son exactamente iguales. Los
medios ambientales y misiones pueden variar desde la confusión natural
urgencia y rapidez de las acciones de combate. cada situación debe
encararse como un problema nuevo y separado con su propia solución, y
 debe hacerse una continua evaluación de la situación conforme esta
cambia. Las diversas situaciones que confronta un jefe requiere una
sustancial adaptabilidad de don de mando.

17. Don de Mando Autoritario y persuasivo

La actuación del jefe militar es esencialmente autoritaria, aún cuando puede ir

acompañada de cierta persuasión, esto no quiere decir que llegue a actuar en
forma arbitraria; las decisiones del jefe no pueden someterse a debate ni a
discusiones democráticas, de allí la responsabilidad de este en no emitir
decisiones apresuradas e irreflexibles; evitar herir la dignidad de sus
subordinados y actuar desprovisto de toda arrogancia. Si observa estos
principios pronto reconocerán que sus decisiones son sabías y cumplirán sus
ordenes con voluntad y agrado.

18. Relación entre Don de Mando, Comando y Administración.

El Don de Mando eficaz debe estar presente para que el Comando (con su
autoridad) y la administración (con su planeamiento, dirección y coordinación)
alcancen el máximo potencial . La aplicación apropiada de los principios y
técnicas de don de mando en el comando y administración, proporcionará la
fuerza e influencia necesaria para que el grupo aplique el máximo esfuerzo
hacía el logro del objetivo común.

Sección II. CONCEPTO DEL DON DE MANDO

19. Generalidades

El concepto del don de mando militar vislumbra un jefe enterado de sus

responsabilidades, que saca provecho se su energía y habilidad corrige sus
debilidades, y se guía por los principios del don de mando. Durante su ejercicio
del comando, emplea ciertas técnicas de don de mando en la forma de ordenes
y acciones seleccionadas para dirigir en influir a sus subordinados. Sin llegar
a hostilizar, supervisa su unidad verificando su progreso en el cumplimiento
de las órdenes y acciones. Evalúa su unidad mediante los indicativos de don de
mando, para que asi el pueda moldear con sus hombres una unidad de
combate efectiva.

20. Estado de Don de Mando

Todo Comandante ejerce una influencia sobre el estado del don de mando de
su unidad, pero no lo establece por el mismo. Su influencia radica en la forma
y grado en que el induce a que se le practique. Este estado ambiental,
llamado algunas veces medio ambiente del don de mando, es el resultado de
la influencia y practica del don de mando por todos los jefes que ejercen
comando. En resumen es el efecto total del don de mando existente dentro de
la Unidad.
21. El Don de Mando es un Arte

a. El arte es la habilidad de la ejecución de alguna cosa adquirida por la

experiencia, el estudio o la experiencia.

b. El arte del don de mando puede adquirirse y perfeccionarse en diversos

grados por cualquiera que sea adecuadamente motivado y posea la
capacidad física y mental necesaria. Debe respetar normas y
disposiciones a fin de conseguir los objetivos.

22. Responsabilidades Básicas del Jefe y/o Comandante.

El Comandante de Unidad tiene total responsabilidad de las actividades dentro

de su unidad. Es responsable de todo lo que su Unidad hace o deje de hacer.
Esta amplitud de responsabilidades puede resumirse en dos básicas : el
cumplimiento de la misión, el bienestar de sus hombres. Para cumplirlas, el
comandante práctica el arte del don de mando. En la mayoría de las
situaciones las dos responsabilidades básicas son de igual importancia.
Cuando exista un conflicto, el cumplimiento de la misión debe tener
precedencia sobre el bienestar de sus hombres

23. El jefe debe capitalizar sus mejores cualidades.

El jefe debe comprender a sus hombres tanto en función individual. como en

la de pequeños grupos. debe también comprenderse a si mismo. ya que el
efecto del don de mando depende de la interacción de dos o más
personalidades. es necesario que el jefe se evalúe a si mismo y determine las
cualidades personales que posee (rasgos) y que le han de ayudara a obtener
confianza, obediencia voluntaria respeto y leal cooperación de sus hombres.
Es importante que la auto-evaluación sea honesta para determinar el grado en
el cual posee las características deseables propias de un jefe. Después de
determinar sus cualidades sobresalientes, debe capacitarlas y al mismo tiempo
tomar las previdencias para corregir las débiles.

24. El jefe debe guiarse por los principios de Don de Mando.

Los principios del don de mando son criterios y guías para el correcto ejercicio
del comando. Estos principios representan las mejores generalizaciones
practicadas en el pasado por comandantes que han tenido éxito. Del estudio de
los conceptos de la guerra actuales y futuros se puede predecir que estos
principios tendrán igual validez en el mañana.

25. El jefe debe guiarse por los principios de Don de Mando.

a. Las acciones y las ordenes del Don de Mando son técnicas usadas por el
jefe para poner su ejecución las formas de acción consideradas apropiadas
para el cumplimiento de una o más de sus responsabilidades. A causa de
muchos factores que intervienen. un jefe o puede estar seguro si las
 acciones u ordenes que dicta tendrá un éxito completo. SQin embargo
puede tener confianza en la efectividad de una acción u orden si ha
considerado en forma completa la información disponible. Esto incluye el
conocimiento de su propia personalidad, de las personalidades de sus
superiores y subordinados de una evaluación apropiada de la situación y del
medio ambiente en la cual opera la Unidad. Después de tomar una acción o
expedir una acción o expedir una orden, el jefe debe permanecer alerta y
hacer los reajustes oportunos requeridos de acuerdo a los cambios de
situación.

b. la comunicación del jefe debe ser efectiva. No solamente debe trasmitir una
información inteligible, sino que debe estar seguro de que esta sea
plenamente entendida por el que la recibe. Las ordenes aún cuándo sean
claras, precisas y completas pueden resultar inútiles a causa de una
comunicación inefectiva.

c. Por otra parte, el jefe puede predeterminar la efectividad de una acción o

una orden examinando sus técnicas propuestas para descubrir asi :

(1) Ayudan en el cumplimiento de una o ambas de las responsabilidades

básicas del comandante.
(2) Se cumplen los principios del don de mando.
(3) Aprovechan las ventajas de las mejores cualidades del jefe.

26. Supervisión

Un jefe capaz, indudablemente empleará más tiempo en la supervisión de una

acción que esta en desarrollo que el que quisiera utilizar en la formación y
expedición de ordenes y acciones. Para supervisar adecuadamente, debe
desarrollar una técnica efectiva en le aspecto que esta verificando a fin de ser
capaz de reconocer si el trabajo se conduce satisfactoriamente. debe realizar
la supervisión de tal forma que el trabajo se verifique sin hostilizar a los
subordinados.

27. El jefe continuamente evalúa su Unidad.

El Comandante debe aprender a evaluar a su unidad, utilizando los cuatro

indicativos del don de mando: moral, espíritu de cuerpo, disciplina y eficiencia
practicados en el pasado por comandantes que han tenido éxito.

Esta valorización proporciona una manera práctica de determinar los problemas

de donde mando que existe en la unidad, la capacidad del jefe y la probable
efectividad de combate de la organización.
 CAPITULO 4

CUALIDADES DEL DON DE MANDO

37. Generalidades

Las cualidades del Don de Mando son rasgos distintivos de la personalidad. Si

estas se demuestran en las actividades diarias, ayudan al comandante a ganar
respeto, confianza obediencia voluntaria y cooperación leal de sus hombres .
Los individuos se diferencian sobre todo en el grado en que manifiestan cada
una de las cualidades de su personalidad. Nuestra reacción a otros individuos
depende de gran parte de las responsabilidades de estos. La reacción del
soldado hacia el comandante será de acuerdo al tipo de responsabilidad que
este demuestre en el trato diario con el personal bajo su comando. las actitudes
de los hombres hacia el comandante pueden ser influenciadas por las
cualidades del jefe ya que efecto del donde mando en una unidad militar , como
en cualquier otra agrupación depende de la interacción de dos o más
personalidades. En conclusión los rasgos de manifiesto por un comandante
afectan directamente el comportamiento de sus hombres y su voluntad para
cumplir una misión. Por consiguiente es un extremo importante que el
comandante comprenda el grado en el cual los diversos rasgos de don de
mando, se desarrollan en su propia personalidad, pero solo algunas individuos
son capases de aceptar y sacar provecho de esa critica personal y constructiva
es importante hacer una honesta y objetiva auto-evaluación que permita
capitalizar sus fuertes rasgos y fortalecer los débiles.

38. CUALIDADES CONVENIENTES

a. Al termino de la II guerra mundial en el ejercito de los EE.UU se hizo un

estudio de la vida profesional de los Comandantes que tuvieron éxito; para
lo cual se realizo un encuesta en el personal militar de todos los grados,
indicándoles que anotaran las cualidades mas importante que ellos creían
habían sido puesto de manifiesto por los comandantes que tuviera éxito. A
un cuando muchos poseían cualidades similares, se determino que no
existía un conjunto de cualidades que pudiera considerarse fundamentales
que distinguiesen al jefe con éxito. Como resultado de este estudio, fueron
clasificados catorce cualidades que dicho jefe tenían en común, aunque
en diversos grados se hacían muy dudoso que la mera posesión de estas
cualidades fuese suficiente para el éxito de estos jefes; pero al mismo
tiempo había muy poca duda que la ausencia de estas eran un
impedimento. Cualquier buen soldado, sin consideración de su grado,
debe poseer estas cualidades las cualidades que se demuestra en el
cuadro 1, proporciona una buena guía para el desarrollo de la
personalidad del futuro jefe militar. Debe reconocerse, sin embargo, que el
mayor énfasis que el jefe ponga en una u otra de sus cualidades
dependerá; de sus objetivos, la personalidad de la gente con quien
trabaja, y lasa circunstancia de la situación.
 b. La lista del cuadro 1 no es completa pero si es representativa de aquellas
cualidades más deseables de un jefe militar. los párrafos 39 al 52
describen cada una de estas.

___________________________________________________________

MODALES INTEGRIDA
VALOR(FISICO Y MORAL) JUICIO
DESICION JUSTICIA
CONFIANZA CONOCIMIENTO
RESISTENCIA LEALTAD
ENTUCIASMO TACTO
INICIATIVA ABNEGACION
___________________________________________________________

cuadro I. CUALIDADES DEL DON DE MANDO

39. MODALES

a. Los modales, crea una impresión favorable en el porte apariencia y

conducta personal en todo tiempo, es una cualidad que todo jefe debe
poseer; los modales cualquiera que sean, configuran un modelo que los
subordinados imitan. El porte que debe ser erguido, la apariencia general y
la condición de vestuario y equipo deben constituir un modelo para el resto
de la unidad. El jefe debe mostrar actividad y energía en sus gestos,
acciones y movimientos.

b. La presencia y sus modales deben exhibir competencia y confianza

algunas veces ser superior a lasa que realmente siente. Por medio del
control de la voz y los gestos, puede ejercerse una firme y constante
influencia sobre los que nos rodean, especialmente en combate. Todo
buen jefe capaz sabe que su confianza en si mismo sus tropas, en el
equipo y en el resultado de la situación, se reflejan en sus hombres; pocas
cosas pueden fortalecer más la moral de las tropas, que ver que el
jefe, con pleno conocimiento de las dificultades de una situación y no
muestra ni actúa con preocupación, a la que tal vez podría tener derecho:
El exceso de rigor y estrictez disminuye la simpatía o confianza que deben
tener los hombres. La irritación frecuente y la irascibilidad indican falta de
auto-disciplina. El que no puede dominarse a si mismo, no puede esperar
controlar a otros.

c. El Lenguaje es otro los signos exteriores por medio del cual se puede ser
juzgado y también influye en los subordinados. Debe hablarse en forma
franca y clara; las frases deben ser cortas, simples, positivas y directas. Si
se emplea términos que no pueden comprenderse claramente, se
explicara su significado. Se evitaría hablar demasiado a los subordinados.
d. Es de responsabilidad del comandante hacer correcciones verbales
cuando sean necesarias; las que serán directas, decorosas y en un
lenguaje moderado. Un lenguaje inmoderado invariablemente produce
resultados desfavorables en el individuo y en la unidad. El empleo de un
lenguaje indecente u obsceno, o el permitir su empleo por jefes
subordinados, especialmente al dar ordenes, expone al riesgo de crear
fricciones, resentimientos, pugnacidad, y aun insubordinación. Los
hombres se resisten cuando son injuriados por sus superiores; creen y con
razón, que el superior se aprovecha de su autoridad, lo cual también se
aplica a cualquier lenguaje inmoderado. Los “gritos o bravatas” por lo
común resisten tanto como una ataque personal y en realidad, a menudo ,
son puntos en cuestión se obscurece y el asunto se convierte en un
conflicto personal entre individuos. no se debe pues emplear ni permitir un
lenguaje indecente, obsceno e inmoderado.

e. Debe evitarse particularmente la crítica o condenación de todo un grupo.

Es casi improbable que alguna vez se tenga una unidad que merezca una
reprimenda general. Nada crea un resentimiento tan rápido en un
subordinado que ser injustamente incluido con otros que merecen esta
acción disciplinaria; lo cual es cierto, no solamente en el caso de
represiones verbales, sino en la generalidad de los castigos. Si hay alguna
base para el empleo de un lenguaje violento, se reservará para una
emergencia extrema en el campo de batalla, en tales ocasiones puede
tener un efecto estimulante y fortalecedor, que se perderá si se le hace
habitualmente.

f. El sarcasmo y la ironía rara vez dan bueno resultados. Muchos hombres

no los entienden y nunca están completamente seguros de lo que su jefe
quiere decir. Ni siquiera un tono burlón debe usarse
con frecuencia, lo que no quiere decir que no pueda nunca emplearse una
broma, pero cuando el jefe hace uso de demasiada agudeza
inevitablemente origina respuestas similares de parte de sus tropas. Al
mismo tiempo, todo jefe juicioso sabe que algunas circunstancias una
cierta dosis de broma puede ser de gran ayuda. Cuando cunde el
desaliento o cuando se pide a las tropas agotadas un esfuerzo adicional,
un destello de humor será de bastante ayuda. Tiende a aliviar la tensión e
imparte confianza en momentos críticos, a un en los instantes más arduos
y confusos del combate. En verdad, es una forma de obtener simpatía,
comprensión y cooperación cuando se esta en dificultades.

g. El jefe debe ser digno. La dignidad implica una condición honorable o

meritoria. Requiere el control de las acciones y propias emociones. Un jefe
que hace un espectáculo de si mismo embriagándose, gritando o
incontrolando sus emociones pierde rápidamente el respeto de su
hombres.

h. Desarrollo de los modales de un jefe:

(1) Participar uno las más elevadas manifestaciones en apariencia y

conducta.
 (2) Evitar un comportamiento ordinario y el empleo de un lenguaje
vulgar.
(3) Si se toma bebidas alcohólicas, hacerlo moderadamente.
(4) Aplicar moderación en todas las actividades personales.
(5) Mantener habitualmente maneras ligeras.

40. Valor (Físico y Moral).

a. El valor es una cualidad mental que reconoce el temor al peligro o la critica

pero permite al individuo proceder, con calma y firmeza, cuando se esta
frente a ellos. En términos simples el valor es el control de si mismo
permitiéndole aceptar las responsabilidades y actuar apropiadamente frente
a una situación amenazadora. Es cualidad vital para el Don de Mando.

b. El jefe debe poseer tanto valor moral como físico. El valor moral significa
conocer y defender lo que es correcto. El jefe que tiene valor moral
admirará sus errores, pero hará cumplir sus decisiones cuando está seguro
que no está equivocado.

(1) Estudiar y comprender las relaciones propias frente a la emoción del

temor.
(2) Controlar el propio temor por medio del desarrollo de la auto-disciplina
y serenidad.
(3) Conservar en orden el proceso del pensamiento propio. No exagerar
mentalmente la adversidad ni el peligro físico.
(4) Si Ud. tiene temor de realizar ciertas acciones necesarias en su vida
diaria esfuércese a ejecutarlas hasta que pueda controlarlas
completamente.
(5) Defender lo que es correcto aun frente a toda opinión desfavorable.
(6) Aceptar la culpa cuando se ha incurrido en un error.

41. Decisión

a. El jefe debe tener capacidad para tomar decisiones rápidamente y

anunciarlas en forma clara y enérgica.

b. Muchas situaciones tiene más que la solución. El jefe juicioso obtiene todos
los hechos, los relaciona luego serenamente y con rapidez llega a una
decisión cabal. La autoridad decisiva es en gran parte una cuestión de
práctica y experiencia.

c. Lo siguiente desarrollará la autoridad decisiva.

(1) Aprenda a ser positivo en sus acciones. No cause demoras: no “ande

con rodeos”.
(2) Obtenga los hechos, precise una solución luego expida la orden
confiadamente.
(3) Revise las decisiones que ha tomado para determinar si son cabales y
oportunas.
 (4) Analice las decisiones tomadas por otros. Si no esta de acuerdo
determine si son justas sus razones a cerca del desacuerdo.
(5) Amplíe sus puntos de vista, estudiando las acciones de otros y saque
provecho de sus aciertos o errores.

42. Confianza.

a. Es la seguridad en el cumplimento correcto del deber.

b. Del jefe confiable puede esperarse que cumpla el propósito de su

comandante en forma inteligente, activa y con un esfuerzo espontaneo.
Esta anuncia voluntaria con respecto a los planes y determinaciones del
superior no significa una siega obediencia. La mayoría de los comandantes
escuchan las sugerencias de sus subordinados, pero una vez que el
comandante toma una decisión final, el subordinado debe darle su mas
completo y enérgico apoyo.

c. El jefe que tiene un alto sentido del deber continuamente desplegará su

esfuerzo para lograr el más elevado nivel en su desempeño. Deberá
también subordinar los intereses personales a las necesidades militares.

d. Lo siguiente desarrollará la confianza:

(1) No presentar excusas

(2) Cumplir toda tarea que se le asigne aportando lo mejor de su
capacidad y prescindiendo de intereses personales.
(3) Ser exacto en los detalles.
(4) Formarse el hábito de ser puntual.
(5) Cumplir el propósito, el espíritu asi como el significado literal de una
orden cuando parezca existir un conflicto entre dos situaciones
obtendrá una aclaración de la autoridad apropiada.

43. Resistencia

a. Resistencia es el vigor mental y físico, de acuerdo a la capacidad de cada

cual para soportar el dolor, la fatiga, la tensión y las penalidades por eso
tiene relación con el valor. Es una importante cualidad del don de mando
que se debe poseer para merecer el respeto apropiado de los subordinados
la carencia de resistencia puede confundirse con la falta de valor y tildarse
de cobarde de colaborar a un jefe a causa de su pobre condición física.
La resistencia implica también la capacidad para preservar en una tarea y
no ceder hasta verla terminada.

b. Lo siguiente desarrollará la resistencia:

(1) Evitar las actividades innecesarias que puedan ocasionar una

disminución del vigor.
(2) Cultivar hábitos de entrenamiento físico que fortalezcan el cuerpo.
Incrementar la resistencia por medio de la ejecución de tareas físicas
difíciles.
 (3) Probar frecuentemente su resistencia. Sometiéndose a intensos
ejercicios físicos y mentales.
(4) Forzarse a sí mismo a continuar un trabajo en ocasiones en que se
esta cansado y la mente pesada.
(5) Cumplir toda área con lo mejor de su capacidad.

44. Entusiasmo

a. El entusiasmo es un fervor de interés sincero en el cumplimiento del

deber. Implica que se trabaje con una actitud animosa y optimista
determinando a realizar una buena tarea. Tal actitud es un ejemplo que
será acumulado por los subordinados.

b. El entusiasmo es particularmente importante en el entrenamiento y en la

instrucción. El interés y entusiasmo se reflejan en los hombres.

c. Lo siguiente desarrollará el entusiasmo:

(1) Comprender la misión y crecer en ella.

(2) Ser Optimista.
(3) Explicar a los hombres el “por que” de tareas desagradables y
carentes de interés.
(4) Capitalizar el éxito. El entusiasmo es contagioso y nada desarrollará
más el éxito de la unidad o del individuo.
(5) No agotarse. Fijar diariamente un periodo para liberar la mente de
asuntos oficiales y descansar.

45. Iniciativa

a. Es ver lo que puede hacerse y darle comienzo inmediato aún en ausencia

de órdenes. Es una cualidad necesaria en todos los niveles. Los hombres
se agrupan rápidamente ante un jefe que se agrupa prontamente frente
a situaciones nuevas e inesperadas. Se alentará la iniciativa entre los
subordinados asignándoles tareas de acuerdo con su grado permitiéndole
luego que elaboren los detalles y determinen el trabajo esto no significa
que el jefe al asignar tareas haya terminado su misión. El debe
conocerlas para supervisarlas en forma apropiada.

b. Estrechamente unida a la iniciativa esta la cualidad de la ingeniosidad

que es la habilidad para hacer frente a una situación en ausencia de
medios o métodos normales la instrucción organización y
abastecimientos militares están preparadas para hacer frente a todas las
situaciones normales. Algunas veces fracasan en su cometido
particularmente bajo condiciones de combate donde lo inesperado es
normal: Nunca se justifica la inactividad o la aceptación pasiva de una
situación insatisfecha, por razón de la falta de medios normales para
hacerle frente.

c. Lo siguiente desarrollará la iniciativa:

 (1) Permanecer mental y físicamente alerta
(2) Entrénese en descubrir las tareas de deben hacerse y ejecutarlas sin
vacilación.
(3) Aprenda a participar pensando provisoriamente.
(4) Buscar y aceptar responsabilidades con toda voluntad.
(5) Utilizar los recursos disponibles en la forma más efectiva y eficiente.

46. Integridad.

a. Es la rectitud del carácter debido a la firmeza de los principios morales.

Las dos cualidades indispensables de la integridad de un jefe son :
honestidad y veracidad absoluta.

b. En las Fuerzas Armadas los riesgos son demasiados grandes para poner
la vida de sus miembros en manos de hombres con una integridad
indiscutible. Por ejemplo: La inteligencia de combate es necesaria para
los responsables de tomar decisiones en combate en el intercambio de
informaciones entre la más pequeña unidad y el escalón superior
cualquier ligera alteración de la verdad por algún individuo puede poner
en peligro toda la operación. Si un hombre no es probablemente honesto
no se puede confiar en él en esto no hay componenda ni termino medio
la profesión militar no permite ni la mas ligera desviación de los elevados
standard de la integridad personal.

c. Lo siguiente desarrollara la integridad personal:

(1) Practicar en todo tiempo una honestidad y veracidad absoluta.

(2) Ser exacto y veraz en todas las manifestaciones tanto oficiales como
no oficiales.
(3) Defender lo que se cree que es correcto.
(4) Cuando uno sea tentado a componendas debe colocar por encima
de todo el sentido del deber, la honestidad y los principios morales.

47. Juicio.

a. Juicio o cierto es la cualidad de evaluar lógicamente hechos y soluciones

posibles, sobre las cuales se basa una acertada decisión. El juicio es
tanto más valioso cuanto más técnicamente calificado.

b. Lo siguiente mejorará el juicio:

(1) Practican constantes apreciaciones de la situación.

(2) Prever situaciones con sus respectivas decisiones a fin de estar
preparado cuando estas se presenten.
(3) Evitar decisiones precipitadas.
(4) Abordar los problemas con sentido común.
48. Justicia

a. Justo es el jefe que actúa con justicia. Justicia es la capacidad de ser

imparcial y firme en el ejercicio del comando. La justicia incluye la
adjudicación de premios y la administración de castigos de acuerdo con
los méritos del caso. El enojo y otras emociones deben ser excluidos de
una situación. Debe evitarse todo perjuicio de raza o credo. Pocas
actitudes afectan más rápidamente la moral de una organización que la
injusticia o imparcialidad de un jefe hacia cierto individuo o grupo.

b. Como Jefe uno puede ser solicitado, para administrar justicia en

cuestiones de ascensos y castigos. Las decisiones constituyen una
prueba de la equidad que uno posee. Toma bastante tiempo formarse una
reputación de justo pero un error irreflexivo o una injusticia pueden
destruirla en un momento.

c. Para administrar justicia se tiene que comprender el comportamiento

humano. Estudiar a la gente con el empeño de comprender porque ciertos
individuos proceden de una forma o en forma diferente, bajo en las
mismas condiciones. Analizar los casos que ya han sido enjuiciados y
determinar lo que Ud. hubiese hecho frente a ese caso. Desde luego que
este es un proceso mental personal, y no debe emplear nunca una
ocasión para criticar las decisiones de otro jefe.

d. Lo siguiente desarrollará la cualidad de ser justo:

(1) Ser consecuente a sus convicciones, imparcial, impersonal y decidido

a imponer un castigo.
(2) Considerar cada caso de acuerdo a sus propios méritos.
(3) Castigar en privado, con dignidad y con comprensión humana.
(4) Examinar las propias actitudes mentales para determinar si uno
tiene perjuicios y en caso de tenerlos, hacer, esfuerzos consientes
para evitar que no influyan en las decisiones.
(5) Analizar los casos en los que han actuado jefes con reputación de
justos.
(6) Nunca se castigará a un grupo por las faltas de un individuo.
(7) Ser honesto consigo mismo.
(8) Distinguir a los subordinados que sean dignos de encomio o
recompensa uno no debe ser conocido como alguien que solo
administra castigos.
(9) Procurar que el individuo tenga la sensación de que el castigo es
temporal y que se esperan mejoras.
(10) No establecer favoritismo.
49. Conocimiento

a. Es la adquisición de información incluyendo lo profesional y una

comprensión de los subordinados. Nada inspira más confianza y respeto
que la demostración de este conocimiento. El individuo que reconoce sus
funciones siente confianza en si mismo, e inspira confianza en los
demás, la ignorancia no se puede ocultar. Si se desconoce la respuesta
sobre una cuestión particular debe admitirse y luego obtener la
información correspondiente y trasmitida a los interesados.

b. El conocimiento no deberá estar limitado a asuntos militares. Un

conocimiento amplio de los problemas nacionales e internacionales dará
una personalidad más completa.

c. Lo siguiente incrementará el conocimiento:

(1) Mantener un archivo militar y una biblioteca personal.

(2) Estudiar manuales de campaña y otra literatura militar tales como :
reglamentos, directivas de instrucción y campañas militares pasadas.
(3) Leer la información correspondiente al servicio.
(4) Leer los diarios y revistas; tratar de evaluar las noticias presentes en
forma correcta e imparcial.
(5) Formarse el hábito de desarrollar conversaciones serias.
(6) Evaluar la propia experiencia y la de otros.
(7) Estar, alerta, escuchar, observar, e investigar sobre materias que no
se comprenden.

50. Lealtad.

a. Lealtad es la cualidad de fidelidad al país, al ejército a la unidad y a sus

superiores a sus subordinados y a los asociados. Esta sola cualidad es
suficiente para obtener confianza y respeto de sus superiores,
subordinados y camaradas las acciones deben reflejar lealtad a su
comando.

b. Lo siguiente desarrollará la lealtad.

(1) Defender en forma inmediata a sus subordinados de todo abuso.

(2) No dar la más ligera insinuación de desacuerdo con las ordenes del
superior especialmente cuándo se relaciona con instrucciones a los
subordinados.

(3) Realizar las tareas con lo mejor de su capacidad y apoyar

sinceramente y con tesón las decisiones de su comandante.

(4) Nunca discutir con otros los problemas personales de sus

subordinados.
 (5) Defender al país, al ejército a su unidad a sus superiores,
subordinados y camaradas cuando son acusados injustamente.

(6) No criticar a sus superiores estando presente los subordinados.

(7) Observar discreción al discutir los problemas de comando fuera de la

propia Unidad.

51. Tacto

a. El tacto o uno es la capacidad de tratar con otras personas sin crear

conflictos u ofensas. En el campo de relaciones humanas, el tacto es la
capacidad para decir y hacer lo apropiado en el momento oportuno. El tacto
envuelve la comprensión de la naturaleza humana y la consideración de los
sentimientos de otros.

b. El tacto es importante en todas las relaciones personales. La critica debe

ser clara y constructiva. No debe desalentar al subordinado, ni disminuir
su impulso o energía. Todo comandante precisa de tacto cuando tiene que
aconsejar sobre asuntos personales y difíciles: Algunas veces el grado más
elevado de tacto consiste simplemente en escuchar con un interés
comprensivo y permitir al soldado que llegue a su propia solución,
confirmándole o sugiriéndole otra.

c. la cortesía es una parte del tacto de la cuál no se puede prescindir en las

relaciones con los superiores o los subordinados. Demandar cortesía y no
corresponderla en igual medida, indica ya, arrogancia o una falta de interés.
El militar sin experiencia piensa algunas veces que la cortesía en un
comando implica debilidad de carácter; o aún peor “servilismo”, lo que no
es verdad. La cortesía emana de una actitud mental y es expresada tanto
en acciones como en palabras. Un jefe puede vociferar sus órdenes en
forma impersonal y abrupta, otro puede darles en un tono cortés que
insinúe obediencia. Pero el segundo caso será voluntaria y leal. En
momentos de emergencia, son mas convenientes las órdenes directas y
cortas pues ahorran tiempo y no existe la necesidad de insinuar obediencia;
el tono energético puede reemplazar muy bien al tono cortes, pero en tales
casos no existe razón para prescindir de toda cortesía están estrechamente
relacionados a la actitud mental las maneras y al lenguaje.

d. Lo siguiente desarrollará el tacto:

(1) Ser cortes y animoso.

(2) Ser considerado con los demás.
(3) Estudiar las acciones de Oficiales que han tenido éxito y que gozan de
una reputación de ser expertos en las relaciones humanas.
(4) Estudiar los diferentes tipos de personalidades para obtener un
conocimiento de la naturaleza y comportamiento humano.
(5) Desarrollar el hábito de cooperar tanto espiritual como materialmente.
(6) Ser tolerante.
(7) Tratar a otros conforme conforme se desea que lo traten uno.
 (8) Saber cuando es el momento oportuno de presentarse ya sea en forma
oficial o social. Anticiparse al hecho de que nuestra presencia y
ausencia pueda ser dificultades ya en uno mismo como en los demás.

52. Abnegación

a. Es la virtud del renunciamiento y del sacrificio sea en lo pequeño o en

lo grande. a favor de los subordinados y del bienestar y éxito de su
Unidad. Nadie respeta a un jefe que acapara para si egoístamente los
valores bienes de una Unidad. Un jefe debe compartir toda clase de
peligros, penalidades e incomodidades con su tropa.

b. Lo siguiente desarrolla la abnegación:

(1) Se evitará utilizar el puesto o grado para aprovechar de sus

beneficios en detrimento de los otros.
(2) Atender a los problemas, tanto militares como personales, de sus
subordinados y ayudarlos en cuanto sea posible.
(3) Reconocer el mérito de sus subordinados por el trabajo bien
hecho.

CAPITULO 5

PRINCIPIOS DEL DON DE MANDO

53. Generalidades

Ciertas reglas generales han sustituido a través del tiempo, parecen haber
guiado el comportamiento y la acción de los comandantes que tuvieron éxito.
En el curso de la historia militar, estas reglas conocidas como Principio de Don
de Mando, han afectado en diversos grados las acciones de todos los jefes. El
hecho de que los jefes no hayan utilizado totalmente cada uno de estos
principios , no les resta valor. Pero que los descarta está en peligro de
fracasar. Estos principios están el cuadro 2 y su aplicación se discute en los
párrafos 54 y 64.

PRIMER PRINCIPIO : SER TECNICAMENTE Y TACTICAMENTE EFICIENTE.

SEGUNDO PRINCIPIO : CONOCERSE A SI MISMO Y BUSCAR EL AUTO
MEJORAMIENTO.
TERCER PRINCIPIO : CONOCER A SUS HOMBRES Y BUSCAR SU
BIENESTAR.
CUARTO PRINCIPIO : MANTENER A SUS HOMBRES INFORMADOS
QUINTO PRINCIPIO : DAR EL EJEMPLO
SEXTO PRINCIPIO : ASEGURASE DE QUE LA ORDEN SEA COMPRENDIDA
SUPERVISADA Y CUMPLIDA.
OCTAVO PRINCIPIO : TOMAR DESICIONES ACERTADAS Y OPORTUNAS.
NOVENO PRINCIPIO : DESARROLLAR UN SENTIDO DE RESPONSABILIDAD
EN SUS SUBORDINADOS.
DECIMO PRINCIPIO : EMPLAER SU COMANDO D ACUERDOA SUS
POSIBILIDADES.
UNDECIMO PRINCIPIO BUSCAR Y ACEPTAR LA RESPONSABILIDAD POR
SUS ACCIONES.

Cuadro 2. PRINCIPIOS DE DON DE MANDO

54. Primer Principio: Ser técnicamente y tácticamente eficiente.

a. Para realizar una labor, se debe poseer un conocimiento general y amplio

de las tareas que incluye asi como lo especifico de ella. Se deberá ser
competente en las operaciones de combate y en el entrenamiento, asi
como en los aspectos técnicos y administrativos de su deberes. Si se
demuestra deficiencia en estas funciones los subordinados perderán la
confianza de su jefe.

b. Las técnicas de aplicación son las siguientes

(1) Tratar de obtener una amplia instrucción y cultura militar por medio
de la concurrencia a las diversas Escuelas del Ejército y también a
través de la lectura. Investigación, estudio y meditación.
(2) Buscar y fomentar la comunicación con Jefes capaces. Observar y
estudiar sus acciones.
(3) Ampliar el conocimiento por el contacto con miembros de otras
Armas e Institutos.
(4) Buscar oportunidades para ampliar el conocimiento a través del
perjuicio del comando. El verdadero don de mando se adquiere
preferentemente por medio de la práctica.
(5) Mantenerse enterado de los progresos militares de actualidad.
(6) Por medio del estudio y de frecuentes visitas a los subordinados,
familiarizarse con las posibilidades y limitaciones de todos los
elementos de su comando.
(7) Aprovechar toda oportunidad de preparar para el comando en el
escalón superior inmediato.
(8) Comprender y aplicar buenos principios de administración.

55. Segundo principio: Conocerse a sí mismo y buscar el automejoramiento.

a. Evaluarse a si mismo y reconocer sus propias fuerzas y debilidades,

Difícilmente puede alcanzarse el éxito como jefe, si se desconoce las
propias posibilidades y limitaciones y si no es dueño de si mismo.

b. Las técnicas de aplicación son las siguientes:

(1) Analizarse objetivamente para determinar las cualidades personales

fuertes y débiles que uno posee. Hacer un es esfuerzo para superar
las débiles y vigorizar aún las más fuertes.
 (2) Solicitar, cuando sea apropiado, las opiniones honestas de otros,
para mejorar nuestras propias cualidades del don de mando.
(3) Estudiar las causas de los éxitos o fracasos de otros Jefes, sea en el
pasado o en el presente.
(4) Procurar un mayor contacto con la gente para analizar los conflictos
y las soluciones humanas.
(5) Dominar el arte de la redacción y expresión oral.
(6) Cultivar relaciones amigables con miembros de otras armas,
institutos y con civilidad.
(7) desarrollar una filosofía relativa a la vida y al trabajo, Tener una
meta precisa y trazarse planes para alcanzarla.

56. Tercer Principio - Conocer a sus hombres y buscar su bienestar.

a. Se tendrá una mejor comprensión de cómo reaccionan y actúan los

subordinados: Se hace un esfuerzo consiente para observarlos, si se les
conoce personalmente y se catalogan sus diferencias individuales. de sus
hombres, todo lo cuál ayudará a obtener obediencia voluntaria,
confianza, respeto y leal cooperación.

b. El deseo de los hombres de satisfacer ciertas necesidades es la base de

su comportamiento. El mejor esfuerzo que pongan en el cumplimiento del
deber dependerá de la satisfacción adecuada de estas necesidades.
Conocimiento a los hombres y dando disposiciones con respecto a sus
necesidades básicas y espirituales, se incrementará la productividad de
los individuos dentro de la Unidad y se mejorará la condición de esta .
Cuando los hombres comprueban que existe interés por su bienestar,
ofrecerán una mejor actitud hacia el Ejército y hacia la vida militar.

c. Las Técnicas de aplicación son las siguientes:

(1) Ser accesible y amigable con sus subordinados.

(2) Desarrollar una comprensión y conocimiento íntimo de sus
subordinados a través del contacto personal y por la información
disponible. En Sub unidades no es suficiente que lo que el jefe
conozca y se dirija a sus subordinados por su nombre; es
indispensable que se familiarice con sus personalidades.
(3) Interesarse por las condiciones de vida de sus subordinados
incluyendo su medio ambiente, alimentación vestuario y alojamiento.
(4) Disponer en forma adecuada de los servicios de personal,
particularmente aquellos que conciernen a los problemas
personales (párrafo 78, e. (5)).
(5) Atender el bienestar espiritual de sus subordinados apoyando las
actividades religiosas.
(6) Proteger la salud de sus subordinados por medio de una activa
supervisión de la higiene y salubridad.
(7) Apoyar activamente un programa de seguridad.
(8) Vigilar la actitud mental de los subordinados por medio de frecuentes
visitas y por empleo de todas las fuentes de información disponible.
(9) Administrar justicia imparcialmente sin temores ni favores.
 (10)Asegurar una justa y equitativa distribución de los permisos, cambios,
rotaciones y otros privilegios.
(11)Alentar el progreso individual dando oportunidad educacional para los
miembros de su comando.
(12)Proporcionar suficientes facilidades deportivas y recreativas dentro de
la organización.
(13)Compartir los problemas de sus hombres para comprenderlos mejor.

57. Cuarto Principio: mantener a sus hombres informados.

a. Cada individuo desea saber su grado de efectividad y lo que se espera

de él. Dentro de los limites de la exigencia de su seguridad el jefe debe
mantener informado a sus hombres, pues ello alienta la iniciativa, mejora
el trabajo en equipo e incrementa la moral. El individuo que conoce la
misión de la unidad y la situación correspondiente es mas efectivo que el
que las ignora.

b. Normalmente, el militar bien informado tiene una mejor actitud hacia el

jefe y la unidad como un todo, asi como también comprende mejor, lo que
se espera de él. Con esta comprensión el individuo puede señalarse una
meta y adaptar su comportamiento hacia ella. El individuo y el grupo como
un todo, aprecian que se reconozca una tarea bien hecha o una misión
bien cumplida. Se reconozca una tarea bien hecha o una misión bien
cumplida. Por medio de la aplicación apropiada de premios y
recompensas de un programa efectivo de información, el jefe puede
influenciar favorablemente en la moral, espíritu de cuerpo, la disciplina y
la eficiencia. Normalmente es lo desconocido lo que mas temen los
hombres. Manteniéndolos informados se disminuirá el temor y los
rumores. también se podrá eliminar muchas condiciones que causan
pánico durante el combate.

c. Las técnicas de aplicación son las siguientes:

(1) Explicar a sus principales subordinados porque debe cumplirse

cualquier tarea y como se propone hacerlo.
(2) Asegúrese uno mismo por medio de visitas e inspecciones frecuentes
de los jefes subordinados trasmitan a sus hombres la información
necesaria.
(3) Tener informado a sus principales subordinados de los planes para
futuras operaciones, sujetándose solo a las restricciones de
seguridad.
(4) Distribuir información concerniente a las posibilidades de nuestras
armas comparadas con las que un enemigo activo o potencial.
Cuando un enemigo tenga una ventaja inicial se enseñara como
superarla.
(5) Asegúrese que las tropas estén informadas en las posibilidades y
limitaciones de las unidades, armas y servicios de apoyo.
(6) Estar alerta para detectar la difusión de falsos rumores; desmentirlos
y dar a conocer la verdad.
 (7) Incrementar la moral y el espíritu de cuerpo explotando al máximo
toda la información concerniente a los éxitos del comando.
(8) Mantener informado al personal a cerca de la legislación y
reglamentos vigentes que afectan sus derechos a ascensos,
privilegios y otros beneficios.

58. Quinto Principio - Dar Ejemplo

a. Sus hombres buscarán en Ud. ejemplos que puedan seguir, o que

puedan utilizar como disculpa de sus propios defectos. Su conducta y
apariencia individual debe inspirar respeto, orgullo y un deseo de
alcanzar los estándares fijados para el comando, por medio de un
sobresaliente desempeño del deber. El comandante que ofrece un mal
ejemplo destruye la confianza y el respeto que debe existir entre el jefe y
sus subordinados.

b. Las técnicas de aplicación son las siguientes :

(1) Mantenerse en todo momento físicamente acto, mentalmente alerta,

pulcro y correctamente vestido.
(2) Dominar sus emociones. El comandante que esta sujeto a estallidos
incontrolados de cólera o a periodos de depresión tendrá dificultad
para obtener el respeto y la lealtad de sus subordinados.
(3) Mantener un espíritu optimista. El deseo de triunfar es contagioso, y
se desarrollará capitalizando las posibilidades y éxitos de la unidad
mostrar calma y confianza cuanto más difícil es la situación,
adquiere más importancia.
(4) Conducirse de tal forma que los hábitos personales no estén
expuestos a la censura. Un comportamiento ordinario y vulgar es
signo de un carácter débil e inestable la impuntualidad las actitudes
egoístas y la complacencia excesiva, crean resentimientos en
todos los niveles.
(5) Cooperar en lo espiritual y en lo material. La cooperación de dos
direcciones. tiene su origen en el deseo sincero de todos los
miembros de conseguir resultados efectivos de todo el grupo.
(6) Ejercer la iniciativa y fomentarla entre sus subordinados.
(7) Ser completamente leal a sus superiores y a sus subordinados.
Apoyar a estos últimos mientras cumplan sus deberes
escrupulosamente. El comandante que trata de proteger a un
subordinado incompetente evitando que sea corregido por el superior
desleal para consigo mismo. La lealtad es un rasgo importante en el
Comandante y demanda un apoyo incondicional a las normas de los
oficiales de mayor jerarquía, sin considerar si se esta de acuerdo o
no con ellas.
(8) procurar que no se forme una camarilla de favoritismo. Es difícil evitar
ser parcial hacia sus subordinados con quienes se ha tenido un
compañerismo por un periodo de tIempo. No obstante debe resistirse
vigorosamente la tentación de mostrar parcialidad.
(9) Ser moralmente valiente. El comandante que no es capaz de
sostener sus principios en los que se juzga el bienestar de su
 comando, o que trate de eludir la responsabilidad debido a errores,
no podrá obtener o mantener el respeto de sus subordinados.
(10) Compartir el peligro y las penalidades. El Comandante que tiene su
Unidad en condiciones penosas o peligrosas, debe visitarla tan a
menudo como le sea posible, para demostrar su determinación de
compartir las dificultades.

59. Sexto Principio - Asegurarse de que la orden sea comprendida,

supervisada y cumplida.

a. Dar órdenes claras y concisas. Asegurarse que sean comprendidas y

luego supervisadas para tener la certeza que sean correctamente
ejecutadas. El jefa capaz hace un juicio empleo de sus subordinados a fin
de que cumplan sus órdenes en forma efectiva. cualquier comandante que
no sea capaz de emplear apropiadamente a su EM y subordinados de
acuerdo con sus posibilidades pone de manifiesto su debilidad de don de
mando.

b. Los hombres responderán más rápidamente a las órdenes que sean

claras, concisas y fácilmente comprensibles. Por otra parte, puede
confundírseles cuando se de muchos detalles de una orden. Complace a
los subordinados saber que el jefe esta disponibles para consejo y
asesoramiento cuando se le necesite. En cambio el exceso de supervisión
podrá crear resentimientos y hasta hostilidad. La iniciativa individual se ve
estimulada en los subordinados, cuando estos pueden usar su
imaginación en el desarrollo de técnicas propias para el cumplimiento de
tareas y misiones.

c. Las técnicas de aplicación son las siguientes :

(1) Estar seguro de que existe la necesidad de una orden.

(2) Emplear el canal de comando respectivo.
(3) Desarrollar por medio del estudio y práctica, la capacidad de pensar
con precisión y expedir ordenes claras, concisas y positivas.
(4) Alentar a los subordinados a buscar la inmediata aclaración de
cualquier punto que no comprendan en sus ordenes o directivas.
(5) Interrogar a sus subordinados para determinar si existe alguna duda
o algún mal entendido con respecto a la tarea a cumplirse.
(6) Supervisar la ejecución de sus ordenes. Esta debe ser firme e
insistir en su cumplimiento. Cuando sea apropiado, indicar a sus
Oficiales de EM que visiten a sus subordinados los ayuden en lo que
sea posible.
(7) facilitar a sus subordinados los medios necesarios para el
cumplimento de su misión.
(8) Durante la supervisión variar los procedimientos para evitar rutinas y
desintereses.
(9) Tener cuidado con la supervisión. Una supervisión excesiva perjudica
la iniciativa y crea resentimientos y un poco supervisión pone en
peligro la realización de la tarea.
60. Sétimo Principio: Instruir a sus hombres como a un equipo.

a. Es un deber del Comandante desarrollar el trabajo en un equipo por medio

de la instrucción. El trabajo en un equipo es la clave para tener éxito en
las operaciones; comienza en las más pequeñas unidades y alcanza
hasta las más altas organizaciones. La organización militar incluye
diversos servicios y armas diferentes, trabajando todos aunadamente
como un equipo de objetivo común. Cada miembro debe comprender
donde encaja mejor en el equipo. El comandante que pone énfasis en el
desarrollo del trabajo en equipo, al mismo tiempo que instruye obtendrá la
eficiencia deseada para la Unidad. El trabajo en equipo efectivo, requiere
de un levado grado de moral, espíritu de cuerpo, disciplina y eficiencia.

b. Las necesidades y objetivos del grupo son más fácilmente alcanzados

mediante el desarrollo del trabajo en equipo por que el Don de Mando
permite una mejor interacción entre todo el personal de la unidad. La
Unidad otorga una identificación de la necesidad individual del
reconocimiento. El grado de eficiencia logrado por la unidad en su
desempeño en la forma de equipo, da al individuo una sensación de
seguridad y efectividad.

c. Las técnicas de aplicación son las siguientes:

(1) Asegurar por medio de inspecciones y exámenes de instrucción que

su comando procede de acuerdo con la doctrina y programas de
instrucción prescritos por las autoridades superiores.
(2) Cerciorarse que se otorguen las necesidades disponibles para la
instrucción en equipo y que se emplean al máximo toda clase de
recursos tales como ejercicios.
(3) Asegurarse en toda instrucción sea de importancia y que se aplique
el propósito de ella en todos los miembros del comando.
(4) Asegurar que cada elemento del comando éste enterado de las
posibilidades y limitaciones de todos los otros; con lo cual se
desarrolla una comprensión y confianza mutua.
(5) Asegurar que cada Comandante subordinado comprenda la
mecánica del empleo táctico de su unidad.
(6) Basar la instrucción del grupo sobre condiciones realistas presentes.
(7) Insistir que cada Oficial y soldado conozca las funciones de aquellos
con quienes opera habitualmente.
(8) Insistir que cada Comandante subordinado conozca y comprenda las
peculiaridades, rasgos, fuerza y debilidades de cada miembro de su
grupo.
(9) Aprovechar las oportunidades para entrenar con otras unidades,
tanto de servicio como de combate.
(10) Explicar a cada hombre sus responsabilidades y la importancia de
su función para la efectividad general de la unidad.

61. Octavo Principio: Tomar decisiones acertadas y oportunas.

 a. Se debe tener la capacidad de hacer una rápida apreciación de la
situación y llegar a una buena decisión. Ser capaz de razonar con lógica
bajo las más exasperantes condiciones y decidir rápidamente que acción
es necesario ejecutar para sacar ventaja de las oportunidades que se
presentan. El comandante indeciso no solamente es incapaz de emplear
su unidad en forma efectiva, sino que crea también irresolución, pérdida
de confianza, y confusión dentro de su comando. Cuando las
circunstancias dictan un cambio de los planes, una decisión rápida en el
jefe. El estudio constante, el entrenamiento y el planeamiento apropiado
sentarán las bases de la competencia profesional necesaria, para
decidirse en forma eficiente y oportuna.

b. Las técnicas de aplicación son las siguientes:

(1) Desarrollar un proceso de pensamiento lógico y ordenado por medio

de una practica constante en la elaboración de apreciaciones
objetivas de la situación la elaboración de apreciaciones no esta
restringida a la profesión militar, se le emplea en la vida diaria de
todas las personas.
(2) Conforme el tiempo y las circunstancias lo permitan, debe planearse
todo acontecimiento posible que pueda presentarse.
(3) Considerar los consejos y sugerencias de los subordinados antes de
tomar decisiones.
(4) Anunciar con tiempo las decisiones, a fin de permitir a los
subordinados confeccionar los planes necesarios.
(5) Alentar en su comando el planeamiento y las apreciaciones
concurrentes.
(6) Cerciorarse que su EM y subordinados estén familiarizados con los
planes y normas vigentes.
(7) Considerar los efectos de su decisión en los subordinados y en los
elementos de apoyo.

62. Noveno Principio: Desarrollar un sentido de responsabilidad en sus

subordinados.

a. La delegación de autoridad proporcional a la responsabilidad desarrolla

una confianza y respeto mutuo entre el jefe y los subordinados. También
alienta al subordinado a ejercer la iniciativa, y prestar una sincera
cooperación. El jefe que, al delegar apropiadamente autoridad, demuestra
fe en sus subordinados incrementa la voluntad es éstos para aceptar
mayores responsabilidades.

b. Las técnicas de aplicación son las siguientes :

(1) Operar a través de la cadena de comando.

(2) Decir a los subordinados que hacer, no como hacerlo; hacer
responsable de los resultados. Delegar y supervisar, pero no
interferir, excepto cuando sea necesario.
(3) Dar a la mayor cantidad de individuos, frecuentes oportunidades de
desempeñar deberes del escalón superior inmediato.
 (4) Reconocer rápidamente las realizaciones de sus subordinados
cuando demuestren iniciativa e ingeniosidad.
(5) Corregir los errores en el uso del juicio y la iniciativa de tal forma que
no se desaliente el individuo. evitar la cadena o critica pública. Ser
liberal en elogiar abiertamente a quien lo merece.
(6) Dar sin reserva consejos y ayuda cuando sean solicitados.
(7) Asegurarse de que se asigna a su personal puestos de acuerdo
con su capacidad y méritos.
(8) Ser pronto y justo en apoyar a sus subordinados. Al menos que se
este convencido de lo contrario, debe tenerse fe en cada
subordinado.
(9) Demostrar buena voluntad para aceptar las responsabilidades e
insistir en los comandantes y subordinados actúen en igual forma.

63. Décimo Principio: Emplear su Comando de Acuerdo con sus

posibilidades.

a. Se debe tener el conocimiento cabal de las posibilidades y limitaciones del

Comando a fin de emplearlo apropiadamente. Debe utilizarse un buen juicio
en el empleo de la unidad. El fracaso en el cumplimiento de la misión
causa una perdida de confianza lo que a su vez debilita la moral, el espíritu
de cuerpo, la disciplina y la eficiencia.

b. Las técnicas de aplicación son las siguientes:

(1) Conocer, comprender y aplicar los principios de la guerra.

(2) Mantenerse informado con respecto a la efectividad operacional
relativa de su comando.
(3) Asegurarse que son razonables las tareas asignadas a los
subordinados no vacilar en demandarles el máximo esfuerzo en una
emergencia determinada.
(4) Analizar todas las tareas asignadas. Si los medios a su disposición
parecen inadecuados, informar a su comandante inmediato y solicitar
el apoyo necesario.
(5) Hacer cualquier esfuerzo por equilibrar proporcionalmente las
señaladas los diversos elementos de su comando.
(6) Emplear al máximo las posibilidades de su unidad antes de solicitar
apoyo.
(7) Dar decisiones a la luz de los principios aceptados.

64. Undécimo principio - Buscar y aceptar la responsabilidad.

a. Se debe actuar con iniciativa en ausencia de órdenes. Al buscar la

responsabilidad, uno desarrolla profesionalmente e incrementa su
capacidad de don de mando. Se aceptará la responsabilidad por todo lo
que la unidad haga o deje de hacer. El jefe que no acepta la responsabilidad
perderá la confianza de sus hombres.

b. Las técnicas de aplicación son las siguientes:

 (1) Estar enterado de los deberes de su jefe inmediato y estar preparado
para aceptar sus responsabilidades.
(2) Buscar colocaciones diferentes que le den a uno experiencia en la
responsabilidad correspondiente.
(3) Aprovechar cualquier oportunidad que ofrezca una mayor
responsabilidad.
(4) Desempeñar toda tarea, grande o pequeña con lo mejor de su
capacidad. Su recompensa será una mayor oportunidad para
desempeñar tareas más importantes.
(5) Aceptar la crítica justa y admitir los errores.
(6) Defender lo que se cree que es correcto y tener el valor de sostener
sus convicciones.
(7) Antes de efectuar una acción. evaluar cuidadosamente el fracaso de
un subordinado. Cerciorarse de que sus faltas aparentes pueden
deberse a errores de su parte. Considerar al potencial humano
disponible, recuperar al individuo si es posible y reemplazarlo cuando
es necesario.
(8) En ausencia de órdenes, tomar la iniciativa y realizar la acción que
posiblemente habría realizado el superior en esas circunstancias.

CAPITULO 6
INDICATIVOS DEL DON DE MANDO

65. Generalidades

a. En un comando existen cuatro indicativos que permiten determinar el éxito o

fracaso en el ejercicio del don de mando o dirección militar moral disciplina,
espíritu de cuerpo y eficiencia. La evaluación deberá ser continua y
ayudará a determinar la efectividad de la unidad.

b. Conforme Ud., evalúa su unidad, descubre problemas que afectan

adversamente a uno más de estos indicativos, con una consecuente
disminución de la efectividad de la unidad. Ud. deberá resolver estos
problemas a fin de continuar esforzándose para alcanzar su objetivo como
comandante, que es el desarrollo y mantenimiento de una unidad de
combate efectiva.

c. Los siguientes párrafos de este capitulo examinan los indicativos del don
de mando de tal forma que se pueda comprender su significado y los
métodos para desarrollarlos y evaluarlos.

66. Interrelación de los Indicativos del Don de Mando.

Los cuatro indicativos del Don de Mando contribuyen a la efectividad de una

unidad y son en algún grado interdependientes. Por ejemplo : un porcentaje
bajo de faltas puede indicar no solamente buena disciplina, sino también una
elevada moral y espíritu de cuerpo. Por lo tanto en la siguiente explicación se
apreciará como ciertos factores pueden tener afecto sobre más de uno de los
 indicativos. Aún cuando la disciplina, es el espíritu de cuerpo y la eficiencia
dependen del grado de moral presente, los cuatro son de igual importancia.
Los tres primeros dependen de la moral porque constituyen la suma total de
todas las actitudes del individuo. Puede decirse que la moral es el suelo fértil
sobre la cual se siembran las semillas de la disciplina, el espíritu de cuerpo y la
eficiencia. De este modo, aún cuando se luche inicialmente por la moral, los
esfuerzos de uno deben estar siempre dirigidos hacia la cimentación de un alto
grado, de todos los indicativos del don de mando. La ausencia o disminución
de uno de ellos podría afectar adversamente a los otros o destruirlos.

67. Moral

a. Puede definirse como estado mental del individuo. Depende de su actitud

hacia todo lo que afecta : sus compañeros, sus jefes, la vida del Ejército en
general y otros valores que considera importantes. La moral esta
estrechamente relacionada a la situación de las necesidades básicas de
los hombres se desarrollará una actitud favorable. La moral elevada es un
estado mental positivo que da al soldado una sensación de confianza y
aliento que le permite hacer frente a las penalidades con valor, resistencia
y determinación.

b. Evaluación de la moral

(1) El estado de la moral no es permanente el mismo; mas bien, se

encuentra en constante cambio. La moral del personal de su unidad
es un índice que señala efectividad y capacidad del Don de Mando.
Se puede apreciar la moral por medio de una observación de sus
hombres en sus actividades diarias, por medio de inspecciones,
entrevistas formales e informales, y evaluando los informes. Los rasgos
y actitudes que deben observarse son :

a. Apariencia
b. Conducta personal
c. Cortesía Militar
d. Higiene
e. Tipo de recreación
f. Excesivas tendencias
g. Rumores perjudiciales e irresponsables
h. Calidad de rancho y condiciones de alojamiento.
i. Cuidado del equipo e instalaciones
j. Obediencia a las ordenes y directivas.
k. Eficiencia en la tarea.
l. Apreciación de las motivaciones durante la instrucción.

(2) Los informes administrativos concernientes al estado de personal,

cuando son evaluados apropiadamente, ayudan en la apreciación de
la moral. Particularmente valiosos son los informes referentes a :

a. Castigos y sanciones
b. Equipo dañado o perdido por descuido
 c. Problemas familiares
d. Deudas
f. Desertores y ausencias sin permiso.
g. Solicitudes de cambios
h. Heridas por mano propia
i. Cantidad de visitas médicas.
j. Rezagados.

68. Espíritu de cuerpo

a. Espíritu de cuerpo es la realidad, orgullo y entusiasmo que muestran los

miembros por su Unidad. Mientras que la moral se refiere a la actitud de un
individuo, el espíritu común reflejado por todos los miembros de una
unidad y confiere solidaridad al grupo. Implica devolución y lealtad a la
unidad, identificación con todos valores y una profunda consideración por
su honor, tradiciones e historia. El espíritu de cuerpo es la personalidad de
la unidad y expresa la voluntad de luchar y vencer a pesar de los obstáculos
aparentemente insuperables. El espíritu de cuerpo depende de la
satisfacción que sientan los miembros de pertenecer a la unidad, de las
actitudes reciprocas y de la confianza de sus jefes.

b. Los factores que a continuación se enumeran son las más importantes para
evaluar el espíritu de cuerpo en una unidad.

(1) Expresiones de entusiasmo y orgullo por su unidad.

(2) Prestigio de la unidad dentro de sus similares.
(3) Un fuerte espíritu de competencia.
(4) Participación voluntaria de sus miembros en las actividades de la
unidad.
(5) Orgullo en las tradiciones y en la historia de la Unidad.
(6) Disposición para una mutua y constante colaboración.
(7) Creencia de que su unidad es la mejor.

69. Disciplina.

a. Disciplina es la actitud individual o de grupo, que asegura una pronta y

estricta obediencia de las ordenes. Esto es un estado mental que se
inspira en la posesión de los más puros ideales del culto a la patria, el
Ejército y el cumplimiento voluntario del deber, que genera una conducta
adecuada y una disposición para obedecer en forma reflexiva, inteligente y
con verdadera convicción, aún sin supervisión o precisiones exteriores.

b. Dentro de una Unidad, asegura estabilidad aún en situaciones inesperadas

y fuertes y constituye un pre - requisito para determinar el cumplimiento
de una misión.

c. Es el resultado de un don de mando inteligente, y de una instrucción

efectiva que ayuda al individuo a soportar los rigores del combate y hacer
frente a situaciones difíciles sin vacilación alguna.
 d. Contribuye a sostener la disciplina militar, el sentimiento instintivo que se
deriva por si solo de la capacidad del superior, de su energía y dotes de
mando, de su amor a la justicia y de sus desvelos en beneficio del
subordinado; asi como la aplicación de sanciones oportunas y bien
proporcionadas a las faltas cometidas, asi como el estudio oportuno a todo
acto meritorio.

e. Para que un hombre pueda actuar con todo su ingenio en ausencia de

órdenes, debe saber con precisión lo que va a ejecutar y conocer la función
que ha de cumplir y todo esto depende en gran parte de una eficiente
instrucción.

f. Por otra parte, para responder de una manera voluntaria e inteligente a las
órdenes, se necesita la misma comprensión y capacidad, pero además es
indispensable la confianza en sus superiores. La autoridad no emana
solamente del grado de jerarquía, sino principalmente de la personalidad
del deber, condiciones que están en razón directa al grado jerárquico que
se posee y del don de mando que se despliegue.

g. Algunos de los factores que deben considerase al evaluar el grado de

disciplina en una unidad son los siguientes:

(1) Atención a los detalles.

(2) Relaciones apropiadas entre unidades e individuos.
(3) Devoción del deber.
(4) Relaciones apropiadas entre superiores y subordinados
(5) Conducta apropiada de los individuos en y fuera del servicio.
(6) Estado de cortesía militar; el orden, la limpieza y todos los aspectos.
(7) Pronta respuesta a órdenes y directivas.
(8) Respeto al conducto regular y el canal de comando.
(9) Capacidad y buena voluntad para desempeñarse en forma efectiva con
poca o ninguna supervisión.

70. Eficiencia.

a. Eficiencia es la capacidad técnica, táctica y física del individuo y de la

unidad para cumplir una misión o tarea. La eficiencia de la unidad es la
suma de las habilidades de todos sus individuos de la unidad. Estos son
indicados por el jefe para lograr un funcionamiento preciso y completo. La
eficiencia resalta en gran parte de la instrucción; y en consecuencia, como
comandante, la supervisión de ella debe ocupar, considerable para su
tiempo. Esta vigilancia es un método muy apropiado para juzgar la
eficiencia de los individuos y de la unidad.

b. Algunos de los factores que deben considerar el evaluar la eficiencia de

una unidad son los siguientes:

(1) Apariencia personal y estado físico de los hombres.

(2) Aspecto y condición de las armas, del equipo y de las instalaciones.
(3) Tiempo de reacción de una unidad y sus miembros.
 (4) Actitud profesional demostrada por la unidad y sus miembros.
(5) Capacidad de los jefes jóvenes para conducir tropas.
(6) Rapidez y exactitud en la difusión de ordenes instrucciones e
información.
(7) Grado de habilidad demostrada en el cumplimiento de las tareas.
(8) Adelantos técnicos y tácticos.

71. Desarrollo de los indicativos del Don de Mando.

a. El desarrollo de los indicativos del Don de Mando es un proceso continuo

que debe cumplirse particularmente durante la instrucción y las operaciones
de su unidad. Si Ud. comprende los factores y las fuerzas que producen
resultados deseados, estará mejor capacitado para dirigir sus esfuerzos
sobre líneas productivas.

b. Ciertas acciones conocidas ayudan en el desarrollo de los indicativos. Una

acción proyectada para mejorar uno de los indicativos del Don de Mando
puede también a los otros. A continuación se dan los indicativos y algunas
normas específicas que desarrollarán cada uno de ellos.

(1) Moral

(a) Enseñar a creer en los motivos que justifiquen una misión.

(b) Inculcar a sus hombres confianza en si mismo, en sus jefes en su
instrucción y en su equipo.
(c) Ayudar a tener satisfacciones en el cumplimiento de las tareas
mediante una asignación cuidadosa de estas.
(d) mantener a los hombres enterados de la preocupación y del
interés del Ejército por su propio bienestar físico, moral y
espiritual y de los que dependen de ellos.
(e) Establecer un efectivo sistema de premios y recompensas.
(f) Hacer que los hombres sientan que son parte esencial de la
unidad.
(g) Reconocer el deseo del soldado de retener su personalidad y
tratarlo como tal.
(h) Alentar el fortalecimiento de sus vinculaciones con su hogar, su
familia y su región.

(2) Espíritu de Cuerpo

(a) Incorporar a los hombres recientemente asignados mediante una

recepción apropiada, incluyendo una explicación de la historia
tradiciones y funciones de la unidad.
(b) Desarrollar el sentimiento de que la Unidad debe sobresalir.
(c) Reconocer las obras realizadas por las Unidades y sus miembros,
y asegurar que se le dé la publicidad conveniente.
(d) Utilizar símbolos, ceremonias, gritos de combate y música militar.
(e) Fomentar la competencia para desarrollar el trabajo en equipo.
(f) Otorgar permiso y condecoraciones con toda justicia y equidad.
 (3) Disciplina

(a) demostrar disciplina con la conducta y ejemplo propio.

(b) Instruir un sistema justo e imparcial para los castigos y una
distribución equitativa de premios y privilegios.
(c) Conseguir confianza y respeto mutuo por medio de la instrucción.
(d) Alentar y auspiciar entre sus hombres la auto-disciplina.
(e) Estar alerta en las condiciones a la relajación de la disciplina y
eliminarlas en cuanto sea posible.

(4) Eficiencia.

(a) Instruir sólidamente a sus hombres en sus deberes individuales.

(b) Poner énfasis en el trabajo en equipo a través del conducto
regular.
(c) Establecer un buen programa de actividades físicas.
(d) Programa de Instrucción variada.
(e) Hacerlos participar en ejercicios dentro de situaciones realistas.
(f) Dar oportunidad al mayor número para que cumpla funciones del
escalón superior inmediato.
(g) Cerciorarse de que su comando esta cumpliendo con los
programas de instrucción y la doctrina prescrita por la autoridad
superior.
(h) Fijar niveles de gran calidad en el desempeño de sus deberes e
insistir de que se cumplan.

CAPITULO 8
EL DON DE MANDO EN EL BATALLON Y UNIDADES SUPERIORES

82. Generalidades

El Comandante del más alto escalón encarará el problema de establecer un

medio ambiente que conduzca un Don de Mando efectivo dentro de la unidad.
Lleva a cabo esto a través del contacto con sus subordinados, por medio de
sus normas y la manera con sus interpretados, por la forma en que ejerce el
Comando mediante su habilidad para tomar decisiones y resolver problemas y
también por su capacidad de comunicarse dentro de la unidad a través de sus
subordinados.

83. Medio Ambiente del Don de Mando

a. Relaciones con el EM y los subordinados. Las relaciones del Comandante

del más alto escalón con su EM y comandantes subordinados inmediatos,
implica la aplicación directa de las cualidades y principios del don de
mando. Es a través de estos subordinados que el comandante influencia
el medio ambiente del don de mando dentro de la unidad; en
consecuencia, debe esforzarse para asegurar que EM y comandantes
 subordinados inmediatos, desarrollen y practiquen las cualidades y
principios del Don de Mando y sus respectivas esferas de influencia.

b. Normas del comandante del más alto escalón. El que exista una decidida y
eficiente actitud para el trabajo, asi como el amplio sentido de cooperación
de una Gran Unidad, dependerá en gran medida de las normas del
comandante y de la forma como son interpretadas. Por consiguiente, es
esencial que el comandante se asegure de sus normas estén de acuerdo
con los principios del don de mando y que apoyen el cumplimiento de la
misión de la Unidad. Las normas del comandante deben ser razonables,
comprensibles y completas. deben ser ampliamente difundidas y
enteramente comprendidas por aquellos que tengan que obrar de acuerdo
con ellas. Pueden obligarse de que se cumplan o pueden ser suprimidas.
Como práctica normal, el comandante del más alto escalón permite a sus
subordinados desarrollar los procedimientos y técnicas convenientes para
implementar sus normas. Se cerciora de que sean comprendidas y
cumplidas en los niveles subalternos por medio de las usuales
inspecciones de rutina.

c. Ejercicio del Comando. Conforme se indicó anteriormente, el jefe puede

ser autoritario y en ciertas ocasiones persuasivo. Ambas modalidades son
posibles y pueden utilizarse de acuerdo a la situación el conocimiento de
los principios de organización relacionados con el Don de Mando, y la
habilidad para delegar y descentralizar autoridad y responsabilidad en
forma inteligente y ofensiva, son cualidades esenciales de la destreza del
comandante para la aplicación de los principios del Don de Mando en la
Unidad. En el proceso de delegación, el comandante asigna
responsabilidad para la toma de decisiones a nivel más inferior, en el cual
existen información y posibilidades para llegar a estas; No obstante, él
retiene todas sus responsabilidades originales. la delegación efectiva es
un elemento esencial para el desarrollo del sentido de responsabilidad
entre los subordinados y para el empleo de la Unidad de acuerdo con sus
posibilidades.

84. Organización y Control

a. Generalidades. La organización de la unidad afecta los resultados que un

jefe puede lograr con ella. Las relaciones que se establezcan entre el jefe
y sus subordinados, sus camaradas y sus superiores deben realizarse
con miras a incrementar su efectividad como jefe, por esta razón el jefe
debe comprender los principios de organización (Ver RE 10-1)

b. Criterios de organización.

(1) Ser esencial. Cada elemento debe ser necesario para el

cumplimiento de la de la misión de la organización.
 (2) Equilibrio. Cada elemento de la organización debe designarse para
cumplir efectivamente su parte del trabajo. pero sin duplicar las
misiones de los otros elementos de la organización.

(3) Coordinación. La organización debe facilitar una completa

coordinación del trabajo a fin de evitar vacíos o superposiciones en
su ejecución.

(4) Flexibilidad. La organización debe designarse para cumplir su misión

de tal manera que no sufra alteraciones cuando se varíe el trabajo
en alcance o se produzca cambios en la situación.

(5) Eficiencia. La organización debe permitir el empleo al máximo de

hombres, dinero, material y facilidades.

c. Proceso de organización

(1) Organizar es el proceso de desarrollar y mantener la estructura de la

unidad a fin de facilitar el control y proporcionar seguridad para que
la unidad pueda cumplir eficientemente su misión. Esto requiere que
el jefe determine todas las funciones que deben desempeñarse para
cumplir el trabajo proporcionando los medios suficientes para la
realización funcional resultante constituye una estructura dentro de la
cual los individuos puedan trabajar juntos y eficientemente para
alcanzar una meta común el cumplimiento de la misión de la
Unidad.

(2) Una organización eficiente debe responder a tres consideraciones :

(a) Determinar las tareas. Debe determinar el trabajo como un

todo. Luego dividirse en las funciones componentes que deben
ejecutarse. Cada función puede comprender una o varias tareas.
Cuando se ha formulado una lista completa de todas estas
operaciones deben agruparse las tareas afines para ser
asignadas a los elementos de la organización.

(b) Establecer el organigrama. Después de establecida esta

estructura viene como resultante la creación o visualización de
un cuadro orgánico. Este organigrama muestra gráficamente
cómo cada elemento de la organización se relaciona con otros
elementos y también la cadena través de la cual se ejerce la
autoridad. Nuevamente el jefe capaz considera las posibilidades
de los hombres que manejarán la organización.

(c) Asignar recursos. La asignación de recursos es la etapa final en

la organización. A las Unidades Militares se les asigna algunos
recursos por medio de un cuadro de organización y equipo
(COEq) y por un cuadro de asignación de personal (CAP), los
que muestran que personal, equipo y otros recursos tendrá
disponible el Comandante de la Unidad.
 d. Limitaciones en la organización militar, El Comandante de Unidad,
organiza a su unidad según el COEq o CAP, la emplea de acuerdo como
lo ordene la autoridad competente, las que limita sus prerrogativas en el
desarrollo de una nueva organización o en la modificación existente.
Dentro de las limitaciones impuestas por la autoridad superior puede
organizar su EM y elementos subordinados en la forma que crean que han
de cumplir mejor la misión de la unidad. Tales reordenamientos pueden
requerirse para hacer frente a las necesidades especiales de su personal
o equipo, o para eliminar la inefectividad causada por la escasez de
éstos.

85. Alcance del Control.

a. El alcance del control se refiere a la cantidad de subordinados inmediatos

que una persona pueda controlar, supervisar o dirigir en una forma
efectiva. El jefe capaz debe conocer a fondo el alcance del control y todo
aquello que lo afecte.

b. Un factor que influye en el alcance del control, es el grado de atención; la

habilidad de un individuo para dividir su atención entre dos o más tareas.
Cada uno de nosotros tiene un límite máximo más allá del cual no se
puede prestar atención a otro trabajo. la asignación de una nueva tarea,
aún por debajo de este límite, tiende a disminuir el desempeño eficiente de
las que ya se ha emprendido. Por otra parte, nuestra capacidad para
dividir la atención, va disminuyendo conforme uno se aproxime al
agotamiento físico, o mental.

c. Otro factor que afecte el alcance del control es el que se refiere a la

actitud del individuo. Si tiene actitudes preconcebidas, su habilidad para
razonar, lógicamente se verá afectada desfavorablemente. Puede
interpretar mal o entender mal lo que ve o escucha a fin de adaptarlo a
sus conceptos anticipados, lo que a su vez afecta su capacidad para
controlar, supervisar y dirigir a sus subordinados. Al final, su alcance de
control puede disminuir hasta un punto mínimo.

d. La acción reciproca de las relaciones humanas afecta también el alcance

del control mínimo que es de tres. El máximo varia bastante, cuando éste
se excede la organización se hace incomoda y difícil de dirigir. Algunos de
los factores que influencian el límite máximo del alcance son :
(1) La experiencia e instrucción del jefe.
(2) La experiencia e instrucción de sus subordinados
(3) La cantidad de comunicaciones que han sido claramente
comprendidas entre Ud. y sus subordinados.
(4) El grado de similitud entre las tareas de sus subordinados.
(5) La distancia que separa al jefe de sus subordinados
(6) El tiempo disponible para que su organización convierta sus
decisiones de acciones.
(7) Su personalidad y la personalidad de cada uno de sus subordinados.
(8) Su conducción física y mental y la de sus subordinados.
(9) La complejidad de la organización.
86. Cadena de Comando

a. La cadena de comando es la sucesión de comandantes a través de los

cuales se trasmite la autoridad y se ejerce el mando. Es el canal normal a
través del cual se difunden las órdenes, se remiten los informes y se
efectúa la comunicación de dos direcciones. A través de la cadena de
comando se establecen líneas precisas de responsabilidad, autoridad y
supervisión; lo cual evita alguna superposición de los deberes y
responsabilidades y se facilita el control. Asi pues, para tener una unidad
efectiva, el jefe debe comprender y utilizar apropiadamente la cadena de
comando, llamada también “conducto regulara”

b. La operación efectiva de la cadena de Comando requiere que :

(1) Se delegue suficiente autoridad a los subordinados para que puedan

cumplir las tareas de su responsabilidad.
(2) Se asigne a cada subordinado responsabilidad precisa por cada tarea
que va a cumplir.
(3) Los hombres separan para quien trabajan y ante quienes son
responsables.
(4) Que los subordinados hagan todas las solicitudes a través de su EM
o comandante inmediato.
(5) Cada hombre este enterado del lugar que ocupa en la cadena de
comando.
(6) Ningún hombre tenga más de un superior que le dé ordenes con
respecto a la misma área de responsabilidad.

87. Relación Comandante - Oficial de Estado Mayor.

a. La función primaria de cada oficial de Estado Mayor es ayudar al

comandante en el cumplimiento de las órdenes. La responsabilidad de
comando permanece con el comandante y no puede ser delegada a
miembros de su EM ya que estos no están en la cadena de comando. Por
consiguiente los Oficiales de Estado Mayor expiden solo órdenes del
comandante o a nombre de él.

b. Un Oficial de Estado Mayor efectivo se mantiene informado a si mismo por

medio de frecuentes visitas a los comandantes de las unidades
subordinadas. Conforme sea necesario, interpreta y explica las normas,
órdenes y directivas de su comandante, pero sin expedir ni alterar
órdenes. Observa la ejecución de lo indicado por el comandante y lo
mantiene informado de la forma como se cumplen, lo cual hace que tenga
que subordinar sus juicios personales a los deseos de su comandante.

c. Un buen oficial de Estado Mayor necesita tener mucho tacto. Por falta de
tacto, puede ponerse seriamente en peligro sus relaciones con el Cuartel
General Superior y adyacentes, con los comandantes de estados
mayores subordinados, con las tropas y con los otros miembros de su
propio Estado Mayor. Su efectividad depende de su habilidad para generar
 un ambiente de verdadera cooperación y coordinación, así como también
de su capacidad y reconocimientos profesionales.

d. Por consiguiente. El comandante espera que el Oficial de Estado Mayor:

(1) Trabaje en estrecha armonía con otros miembros de Estado Mayor,

con los comandos superiores, adyacentes y con las Unidades
subordinadas.
(2) Analice correctamente, evalué en forma apropiada y recomiende
juiciosamente buenas formas de acción respecto a los problemas que
se presenten dentro del comando.
(3) Prepare directivas a los comandos subordinados de conformidad con
las normas del comandante.
(4) Mantenga completamente informado al comandante sobre el estado
de las unidades subordinadas sin crear en ellas resentimientos
desconfianza.
(5) Desarrolle en las unidades subalternas una sensación de confianza
en el Estado Mayor y en sus acciones, de tal forma que sean bien
acogidas sus visitas a la Unidad.
(6) Asegúrese que la coordinación se efectúe en forma completa antes
de poner en práctica o recomendar una acción.

e. El Oficial de Estado Mayor debe evitar cualquier tendencia a informar al

Comandante sólo asuntos que considera, que el comandante desea
saber. Debe esforzarse constantemente en presentar al comandante
información significativa en una forma objetiva e imparcial. Una vez que
el comandante ha anunciado su decisión política, el oficial de Estado
Mayor debe apoyarla sincera y entusiastamente y no permitir que
sentimientos personales interfieran en el cumplimiento de la tarea.

f. A su vez, dentro de estas relaciones los Oficiales Miembros del Estado

Mayor esperan con todo fundamento que su comandante:

(1) Establezca y mantenga una estrecha relación con ellos.

(2) Cree un ambiente que fomente la confianza y el respeto mutuo.
(3) Expida órdenes claras, positivas y oportunas que suministren una
guía adecuada para las acciones del Estado Mayor.
(4) Antes de tomar una decisión final, considere plena y objetivamente
las recomendaciones del Estado Mayor.
(5) Auspicie la expresión de nuevas ideas, francas evaluaciones y
honestas convicciones mediante el estímulo personal.
(6) Reconozca y premie el esfuerzo consiente y productivo.
(7) Apoye sus acciones que estén en armonía con las normas del
comandante.

88. Proceso para decidir y solucionar problemas

Muchos de los problemas del Comandante de un escalón superior derivan de

las acciones e inexperiencia de sus subordinados o se complican por esta
razón; por consiguiente es esencial que el comandante aplique las cualidades y
 principios del Don de Mando de estas funciones se guiará en un sentido
general por la apreciación de situación y por el método de solución de
problemas; sin embargo, desde que sus decisiones tendrán con frecuencia un
efecto sobre varios escalones de personal en el canal de comando, debe
continuamente tener presente los principios de administración de personal y
los fundamentos de las relaciones humanas. El no respetar esas
consideraciones puede dar como resultado una actitud negativa hacia los
elementos inferiores. Lo cual será perjudicial para sus esfuerzos de crear un
medio ambiente conducente hacía un don de mando efectivo en su unidad.

89. Comunicación dentro de la Unidad.

a. El grado en el cual el comandante de un escalón superior hace que sus

normas y decisiones sean comprendidas y aceptadas por su organización,
afectará materialmente su efectividad como jefe. La comunicación es uno
de los instrumentos más difíciles e importantes de la responsabilidad de
comando.
b. La comunicación para ser efectiva no solamente debe trasmitir
información, sin además motivar en el destinatario, el deseo de recibirla y
comprenderla. Sin una comunicación efectiva no puede haber acción
cooperativa. El proceso mismo de la elaboración de la decisión depende
de la confiabilidad e integridad de la información referente a los problemas
que se van a resolver.
c. Es responsabilidad del comandante tener informados a sus subordinados.
No es suficiente una orden con la esperanza de que sea ejecutada tal
como la visualiza el comandante. Deberá darse a los subordinados toda la
oportunidad para participar e n el desarrollo de los planes, normas y
procedimientos. Por medio de tal participación tendrá una mejor
comprensión del problema y de las razones de la decisión
d. La transmisión de información no estará limitada a ordenes o directivas;
debiendo incluirse también los antecedentes y toda la información
adicional relacionada. Aun cuando es un procedimiento normal expedir
órdenes o directivas en forma escrita, también es efectivo suministrar a
los subordinados informaciones verbales conexas. Cuando se emplee
ambos métodos para trasmitir información, es imperativo que el
comandante sea claro, conciso y preciso; en caso de no serlo; pueden
peligrar sus órdenes escritas a causa de una errónea interpretación de su
explicación oral.
e. El Comandante de un escalón superior, aplicando los principios del Don
de Mando, puede desarrollar en sus subordinados el deseo de contribuir
en un intercambio útil de informaciones a través de toda la Unidad,
incluyendo la rápida presentación de información al Comandante. El
temor de ser criticado o castigado, el no querer completar una acción
correctiva, o el fracaso en el logro de los objetivos son frecuentemente
las razones principales por lo que los subordinados no presentan
rápidamente la información. El comandante que se haya ganado la
confianza, el respeto y la leal cooperación de sus subordinados tendrá
poca dificultad en realizar el intercambio de información.