Trabajo Concurso de Delitos
Trabajo Concurso de Delitos
Trabajo Concurso de Delitos
INTRODUCCION
El supuesto básico de la teoría del delito incluye un sujeto que mediante un hecho lesiona un tipo
delictivo conforme a cuyo marco de pena se determina la aplicable. Sin embargo, puede ocurrir que
al hecho realizado le sean aplicables, en principio, varios tipos delictivos, en cuyo caso habrá que
dilucidar cuál (o cuáles) de ellos se aplique y en que marco de pena. Y puede ocurrir asimismo que
el sujeto haya realizado una pluralidad de hechos por lo que es juzgado unitariamente, habiéndose
de dilucidar si esos hechos forman una unidad subsumible una única vez en un único tipo delictivo
cuyo marco de pena se aplique (intacto o modificado) o son subsumibles cada uno de ellos en su
respectivo tipo delictivo por separado (inclusión hecha del mismo tipo delictivo que se lesiona y aplica
varias veces)1.
En ese sentido se habla de Derecho Penal de concurso, distinguiéndose entre un concurso de leyes,
o concurso aparente, porque en él, en realidad, lo que se discute es en qué tipo delictivo (uno solo)
se subsume el hecho delictivo único por el que se va castigar; y los concursos ideal y real de delitos,
o auténtico, en los que sobre la base de que el hecho o los hechos realizados dan lugar a una
pluralidad de hechos, aplicar plenamente los marcos penales correspondientes a los tipos delictivos
realizados (o el mismo varias veces), pues se vulneraría el principio de ne bis in idem2.
ANTECEDENTES
Este sistema fue el seguido por el derecho romano que adoptó el principio “del concurso material
aún en la generalidad de aquellos casos que hoy se dicen de concurso ideal o formal, no existiendo
reglas fijas acerca de la acumulación de las penas”.
En el derecho bárbaro, la normalidad estuvo representada por la aplicación de las reglas de la
acumulación material, facilitada por el sistema de las composiciones y multas, sistema que prevaleció
en el derecho canónico y en la doctrina de los estatutarios y prácticos italianos, hasta las primeras
codificaciones, en los que manteniendo la regla del concurso material de los delitos, adoptaron el
principio de la acumulación jurídica de las penas, prescribiendo que no se pudiesen acumular
materialmente varias penas aflictivas de la misma especie, sino que se debía aplicar la pena por el
delito más grave, con un aumento relativo a la responsabilidad por los otros delitos.
1
CUELLO CONTRERAS, Joaquín y MAPELLI CAFFARENA, Borja, Curso de Derecho Penal – Parte General, Editorial Tecnos, Madrid, 2011,
p. 221
2
Ibídem
Resulta, por tanto, que hasta finales del siglo XVIII, el criterio seguido por la doctrina y la
jurisprudencia en materia de concurso de delitos, fue la adoptada por los glosadores, que basados
en la decisión de la ley De privatis delictis, creyeron que el principio consagrado por el derecho
romano en materia de concurso de infracciones era el de la acumulación de las penas.
A fines del siglo XVIII, al decir del profesor Juan del Rosal, se principia a distinguir técnicamente la
unidad de la pluralidad de acciones y se trae a juego el principio de la absorción. Fue Kosh el
fundador de la teoría moderna del concurso.
Para resolver la cuestión de los concursos de delitos hay que determinar cuándo estamos ante una
unidad de hecho y cuándo se trata de varios hechos punibles.
Antes de abordar específicamente la problemática del concurso, es decir, antes de analizar los casos
donde un mismo sujeto comete varios delitos, en uno o en varios hechos, debemos analizar qué se
entiende por “hecho” o “acción”.
Jescheck nos dice que el comportamiento humano se compone de una serie continua de acciones
y omisiones, hay que descomponer en partes ese proceso para poder ser consideradas en unidades
de acción o, en su caso, pluralidades de acciones. Y continua diciendo que la unidad de acción es:
“el cumplimiento de los presupuestos mínimos del tipo legal, aunque también se pueda fraccionar el
comportamiento típico en varios actos individuales desde un punto de vista puramente fáctico.” En
ese sentido parte de la doctrina define la unidad de hecho.
Los criterios apuntados para hacerlo son de diferente naturaleza (el plan del autor, el número de
resultados antijurídicos producidos o de tipos penales realizados, estar al sentido del
correspondiente tipo penal que ofrece lo que debe entenderse por unidad de acción, etc.), siendo el
más correcto el que atiende al concepto de acción, según el cual se estará ante un único hecho
cuando sea único también el acto de voluntad. Con base en la unidad de acción así determinada
pueden abordarse las cuestiones que plantea el que una sola acción del sujeto produzca dos o más
infracciones penales (concurso ideal) y el que varias acciones del mismo autor constituyan varios
delitos (concurso real). Hay veces, sin embargo, que por configuración legal o jurisprudencial, varias
acciones distintas del sujeto constituyen un solo delito; su problemática se incorpora por la doctrina
a la teoría del concurso.
Cuando hablamos de una unidad del hecho nos referimos a una acción en sentido jurídico-penal.
Hay dos factores que contribuyen a determinar si estamos o no ante una unidad de acción:
• El factor final: la voluntad del autor rige sus actos hacia un resultado final que es lo importante.
Ejemplo: Una persona mata a otra de varias puñaladas. No se puede asumir que cada puñalada es
una lesión que sumadas dan lugar a la muerte. La voluntad de matar unifica el hecho.
• El factor normativo: La descripción típica ayudará a determinar la unificación de un hecho cuando
así lo disponga el legislador:
Ejemplo: En una agresión sexual la violencia es consustancial al delito. Hablaremos, por tanto de un
solo hecho.
CONCURSO DE DELITOS
El concurso de delitos es un concepto jurídico penal que describe aquella situación en la cual existe
pluralidad de actividades delictivas: que el sujeto activo, con una misma conducta, o a través de
varias, comete diversos delitos.
Así podemos entender que “cuando un hecho constituye dos o más delitos o cuando varios hechos
de un mismo sujeto constituyen otros tantos delitos, si ninguno ha sido cometido después de haber
recaído condena por alguno de ellos.”
El concurso de delitos es un concepto jurídico penal que describe aquella situación en la cual existe
pluralidad de actividades delictivas: que el sujeto activo, con una misma conducta, o a través de
varias, comete diversos delitos.
El concurso de delitos es un problema objetivo, donde una sola acción produce varias infracciones
a la ley penal. Un ejemplo didáctico típico es el de un sujeto que coloca un artefacto explosivo en
cierto sitio. Cuando el objeto estalla, ocasionará la pérdida de la vida de una o más personas,
lesiones, daños al inmueble. De esta manera, con una misma conducta se han cometido los delitos
de homicidio, lesiones y daño en propiedad ajena; además de la posible existencia de un delito de
terrorismo. Aquí hay en un sentido estricto, un concurso de delitos, esto es, varios delitos se han
cometido con una sola conducta.
Art. 20.- Concurso real de infracciones.- Cuando a una persona le son atribuibles varios delitos
autónomos e independientes se acumularán las penas hasta un máximo del doble de la pena más
grave, sin que por ninguna razón exceda los cuarenta años.
Art. 21.- Concurso ideal de infracciones.- Cuando varios tipos penales son subsumibles a la
misma conducta, se aplicará la pena de la infracción más grave.
Ejemplo: un niño es secuestrado. Para concretar esto el autor ingresó subrepticiamente al domicilio
en el que pernoctaba el niño, sustrajo al menor de dichos aposentos y se lo llevó a una “casa de
detención”. Durante el cautiverio, y mientras realizó las gestiones pertinentes para obtener el rescate,
el niño fue violado reiteradamente por su captor.
Existen, dentro de nuestro ordenamiento jurídico penal, tipos penales que incluyen la lesión de varios
bienes jurídicos al momento de su consumación; en estos casos no se produce un concurso para
poder determinar la penal si no que el legislador ya ha realizado una valoración de bienes afectados
por lo que señala el marco de la sanción adecuada.
Se habla de concurrencia de delitos ante la posibilidad de diversos fenómenos antijurídicos de alguna
manera relacionados, concurrencia que se puede dar en dos sentidos, el Concurso Real y el
Concurso Ideal. Se llama concurso de delitos porque tanto como el concurso real y el concurso ideal
tienen que estudiar el delito para ver a cual se amolda más, esto quiere decir que “concursan” entre
ellos para ver cuál es el concurso que va a ser aplicado correctamente.
Es decir, una sola conducta infringe varios tipos penales (concurso ideal), como varias conductas
infringen varios tipos penales (concurso real). Aunado a ello, existen figuras afines al concurso, como
por ejemplo; el delito continuado, el concurso medial y concurso aparente de leyes, etc.
GARRIDO MONTT
Según GARRIDO MONTT, existe concurso real de delitos "cuando un mismo sujeto ha realizado dos
o más acciones que constituyen, a su vez, uno o más delitos independientes no conectados entre sí
y sin que en relación a ninguno de ellos se haya dictado sentencia condenatoria".
JIMENEZ ASÚA
Es la pluralidad de actos independientes que da, por ende, una pluralidad de delitos, destacando la
presencia de los siguientes elementos: una pluralidad de actos, el carácter independiente de los
actos y la producción de una pluralidad de delitos.
JESCHECK
Lo define como: “cuando el autor ha cometido varios hechos PUNIBLES (que debe ser castigado)
independientes que son enjuiciados en el mismo proceso penal, donde destacan los siguientes
presupuestos:
Como se ha señalado, existe concurso real de delitos cuando los hechos se suceden en el tiempo y
no es posible abarcar toda su gravedad aplicando un solo tipo. Procede en cambio apreciar tantos
delitos como hechos aislados dotados de sentido típico se identifiquen; es decir, se aprecian todos
los delitos por separado.
Por ejemplo:
Un ladrón decide robar un banco. Mientras escapa, se enfrenta con un policía, al que le quita la vida.
El ladrón ha cometido por lo menos dos tipos penales: el robo y el homicidio. Ya en el juicio penal,
para efectos de simplicidad procesal, se hace un solo juicio donde se le imputan ambos delitos,
formando así un concurso real.
El concurso real se presenta cuando hay una pluralidad de acciones realizadas por un sujeto activo
constituyendo una pluralidad de delitos, es decir, cada una de esas acciones debe ser independiente,
de tal forma que se puedan considerar como ilícitos autónomos.
En resumen el concurso real se conforma de tres elementos:
Las acciones deben ser realizadas por el mismo sujeto. No importa para el concurso real la
circunstancia de que esta persona haya actuado en diferentes calidades en los sucesivos delitos:
autor, autor, coautor, autor mediato, instigador, cómplice o que haya actuado solo o con participes
en los hechos.
Cada una de las acciones debe ser autónoma e independiente entre sí.
Homogéneo: cuando los delitos que se cometen son iguales o de la misma naturaleza.
Ejemplo: son iguales cuando el sujeto activo hurta todos los días y, son de la misma naturaleza
cuando se protege al mismo bien jurídico.
El concurso real se aplica en el caso de que, durante la comisión de un delito se realicen varios actos
de carácter ilegal, los cuales deben tratarse de diferentes tipos penales (recogidos en distintos títulos
del código penal).
En este caso, el juez determinará que se acumulen las penas, siempre que fuera posible por la
naturaleza de los mismos.
Cada uno de estos delitos se considera como un tipo penal con su propia pena. A la hora del juicio se
unifican formando una única pena que comprende todos los tipos penales.
El concurso real está regulado en el código penal en su artículo 20, siendo el primero de los tipos de
concurso de delitos. Es importante mencionar que la pena final nunca puede superar el triple de la
pena del delito más grave.
Caso 1. Un individuo decide robar a una pareja que va caminando por la calle, en el momento
de la comisión se tuerce la situación y el responsable roba a la chica, mata al chico y huye. Hay 2
tipos penales que afecta a dos bienes jurídicos distintos, se da el delito de robo homicidio.
El concurso ideal tiene su aplicación de 2 formas distintas. La forma del concurso ideal y la del
concurso medial. Los dos van incluidos en el artículo 21 del código penal sin hacer mención expresa
al concurso medial. Ambas figuras son lo que se denomina como concurso de delitos ideal o
concurso ideal.
El concurso ideal se da cuando un hecho sólo comprende 2 o más delitos. En este caso, únicamente
se castigará con el delito más grave en su mitad superior, sin que pueda exceder de la suma de las
penas por separado. Si se supera este límite se aplicará cada infracción penal por separado.
Otra temática interesante es advertir, como lo señala doctrina y jurisprudencia, que el concurso
puede ser heterogéneo y homogéneo. Veremos a continuación la diferencia entre uno y otro.
Concurso heterogéneo: aquél en el cual se ejecuta una acción que violenta diversos ilícitos (delitos).
“La doctrina distingue el concurso ideal heterogéneo del concurso ideal homogéneo. El primero se
produce cuando el hecho realiza delitos distintos, mientras que el segundo se dará cuando los delitos
cometidos son iguales”.3
Concurso ideal homogéneo: el hecho atenta varias veces contra bienes jurídicos de la misma
naturaleza.
Concurso ideal heterogéneo: el hecho atenta varias veces contra diferentes bienes jurídicos.
El concurso medial se aplica cuando un delito es un medio necesario para la comisión de otro. En
este caso el juez castiga únicamente con la pena superior del delito más grave.
Ejemplos de concurso ideal y medial
3
Mir Puig, Santiago, Op. cit., p. 640.
Caso 1 concurso ideal homogéneo. Una persona explota una bomba en un concierto,
muriendo 15 personas. En este caso el autor ha cometido 15 asesinatos.
Caso 2 concurso ideal homogéneo. Una persona decide coger un arma y disparar a todos los
locales del barrio. En la trayectoria de las balas mata a una persona y daña todos los escaparates y
productos, creando un perjuicio económico. En este caso el autor comete un asesinato y un delito
contra el patrimonio.
Hay concurso aparente de leyes o normas penales, cuando una misma conducta delictiva cae o está
comprendida por dos o más preceptos legales que la regulan, pero un precepto excluye a los otros
en su aplicación al caso concreto.
Que una misma acción sea regulada o caiga bajo la esfera de influencia de dos o más preceptos
legales.
Que uno de estos preceptos excluya la aplicación de los otros al aplicarlo al caso concreto.
El concurso aparente de leyes o normas penales, es cuando una misma conducta delictiva está
comprendida por dos o más preceptos que la regulan; pero uno de ellos excluye a los otros en su
aplicación.
Estamos frente a un concurso aparente de leyes cuando, frente a una conducta, concurren
aparentemente varias disposiciones legales, siendo sólo una de ellas la aplicable. Es un problema
de interpretación de la ley penal aplicable. Para determinar qué delito es el aplicable se toma en
cuenta una serie de principios: especialidad, subsidiaridad, consunción y alternatividad.
Hay concurso aparente de las leyes o normas penales, cuando una misma conducta delictiva cae o
está comprendida por dos o más preceptos legales, que la regulan, pero un precepto excluye a los
otros en su aplicación en el caso en concreto. Para que exista un concurso aparente de delitos es
necesario: Que una misma acción sea regulada por dos o más normas, que una de estas excluya a
la otra en la aplicación del caso concreto.
PRINCIPIOS DOCTRINALES
Alternabilidad
Hay alternatividad cuando dos tipos de delitos se comportan como círculos secantes; si las distintas
leyes amenazan con la misma pena, es indiferente qué ley ha de aplicarse, pero si las penas son
diferentes; el juez debe basar su sentencia en la ley que sea más severa.
El principio de alternatividad tiene lugar cuando dos o más disposiciones de un ordenamiento jurídico
vigente en el mismo tiempo y en el mismo lugar se presentan como igualmente aplicables a un mismo
hecho; pero siendo de tal naturaleza que la aplicación de una excluye la aplicación de la otra.
Karl Binding, considera que hay alternatividad cuando dos tipos de delitos se comportan como
círculos secantes; si las distintas leyes amenazan con la misma pena, es indiferente qué ley ha de
aplicarse, pero si las penas son diferentes, el juez debe basar su sentencia en la ley que sea más
severa.
Filippo Grispigni, manifiesta en torno al mismo principio que: "cuando dos o más disposiciones de un
ordenamiento jurídico vigente en el mismo tiempo y en el mismo lugar se presentan prima facie como
igualmente aplicable a un mismo hecho, pero siendo de tal naturaleza que la aplicación de una
excluye la aplicación de la otra".
Especialidad
En caso de que una misma materia sea regulada por dos leyes o disposiciones, una general y otra
especial; la especial debe aplicarse al caso concreto, es requisito que ambas estén vigentes al
tiempo de su aplicación.
Subsidiaridad
Una ley o disposición es subsidiaria de otra, cuando esta excluye la aplicación de aquella. El principio
de subsidiaridad tiende a inclinarse por el delito más grave o que esté castigado con la mayor pena,
por ello la ley principal excluye a la ley subsidiaria por ser menos grave.
Consunción o absorción:
Surge cuando un hecho previsto por la ley o por una disposición legal está comprendida en el tipo
descrito en otra, y puesto que ésta es de más amplio alcance; se aplica con exclusión de la primera.
En este principio prevalece para su aplicación el precepto más amplio
Con el tiempo, cuyo ámbito está determinado por dos momentos: la promulgación y la derogación o
abrogación de la ley. Aspecto que en la doctrina se le conoce la "sucesión de leyes";
Cuando la doctrina se refiere a la ley penal es el especio, lo hace con el fin de explicar el campo de
aplicación que puede tener la ley penal en un país determinado. La determinación del ámbito especial
de validez de la ley penal es el resultado de un conjunto de principios jurídicos que fijan el alcance
de la validez de las leyes penales del Estado con relación al espacio. El ámbito especial de validez
de una ley es mucho más amplio que el denominado territorio, la ley penal de un país regularmente
trasciende a regular hechos cometidos fuera de su territorio.
CONSIDERACIONES GENERALES
Cuando la doctrina se refiere a la ley penal en el tiempo, lo hace con el fin de explicar el tiempo de
duración de la misma y los hechos que debe regular bajo su imperio. Su ámbito de validez temporal
está limitado en dos momentos: El momento en que nace su promulgación y, el momento en que
fenece por la abrogación o derogación. A este aspecto en la doctrina se le conoce como "Sucesión
de Leyes", porque indiscutiblemente, a través del tiempo, unas suceden a otras.
Una ley sólo debe aplicarse a los hechos ocurridos bajo su imperio, es decir, bajo su eficacia temporal
de validez. Es posible aplicar la ley penal fuera de la época de su vigencia? La respuesta es
afirmativa y la encontramos en el artículo 2o. del Código Penal que dice: "Si la ley vigente al tiempo
en que fue cometido el delito fuere distinta de cualquier ley posterior, se aplicará aquella cuyas
disposiciones sean favorables al reo, aun cuando haya recaído sentencia firme y aquél se halle
cumpliendo condena".
RETROACTIVIDAD Y ULTRATIVIDAD
Retroactividad
La retroactividad consiste en aplicar una ley vigente con efecto hacia el pasado, a pesar de que se
haya cometido el hecho bajo el imperio de una ley distinta la sentencia se haya dictado sentencia.
Ultratividad
En caso de que una ley posterior al hecho sea perjudicial al reo, entonces seguirá teniendo vigencia
la anterior, es decir, que cuando una ley ya abrogada se lleva o utiliza para aplicarla a un caso nacido
bajo su vigencia; existe la ultraactividad.
Los especialistas han considerado que durante la sucesión de leyes penales en el tiempo pueden
presentarse cuatro casos que se describen de la siguiente forma:
La nueva ley crea un tipo penal nuevo: ello quiere decir que una conducta que con anterioridad
carecía de relevancia penal resulta castigada por la ley nueva. En este caso, la ley penal nueva es
irretroactiva, es decir; no puede aplicarse al caso concreto porque perjudica al sujeto activo.
La ley nueva destipifica un hecho delictuoso: quiere decir que una ley nueva le quita tácita o
expresamente el carácter delictivo a una conducta reprimida o sancionada por una ley anterior. En
este caso la ley penal nueva es retroactiva, es decir; debe aplicarse al caso concreto porque favorece
al reo.
La ley nueva mantiene la tipificación del hecho delictivo y es más severa: se trata de una ley nueva
que castigue más severamente la conducta delictiva que la ley anterior. En este caso la ley penal
nueva resulta irretroactiva, es decir; no puede aplicarse al caso concreto porque es perjudicial para
el reo.
La ley nueva mantiene la tipificación del hecho delictivo y es menos severa, debido a que se trata de
una ley nueva que castiga más levemente la conducta delictiva que la ley anterior. En este caso la
ley penal nueva es retroactiva, es decir; que puede aplicarse al caso concreto porque favorece al
reo.
En cualquiera de los cuatro supuestos planteados, cuando se aplica una ley cuya vigencia es
posterior a la época de comisión del delito, estamos frente al caso de la RETROACTIVIDAD; si por
el contrario, cuando aún bajo el imperio de la ley nueva, seguimos aplicando la ley derogada,
estamos frente al caso de la ULTRAACTIVIDAD.
En nuestro país ha sido motivo de discusión la existencia de una posible contradicción entre la
retroactividad de la ley penal y la denominada "Cosa Juzgada" que según dicen se convierte en un
obstáculo para la aplicación de la ley penal más benigna al condenado, por cuanto que el caso ya
está cerrado por una sentencia ejecutoriada. Nosotros consideramos que sí es procedente aplicar
retroactivamente la ley penal más benigna al condenado aun existiendo cosa juzgada, porque la
retroactividad de la ley penal favorable al reo tiene rango constitucional, y, desde el punto de vista
legal, una norma constitucional prevalece siempre sobre un precepto o disposición ordinaria.
A partir de su aplicación desde el 1 de Agosto del año 2014, nuestra legislación penal establece dos
tipos de concurso de Infracciones, el REAL y el IDEAL, los mismos que los encontramos planteados
en los Artículos 20 y 21 del Código Orgánico Integral Penal.
Se debe esta conceptualización al alemán de origen Austriaco Franz Von Liszt, integrante de la
escuela Causalista Naturalista a la que también perteneció otro brillante jurista Ernst Von Beling, el
concepto actual de la Infracción Penal, pues el mismo definió al Delito como un “Acto Humano,
culpable, antijurídico y sancionado con una pena”
Conducta Típica.- Conocemos como conducta típica aquella que se encuentra contenida en un
cuerpo de ley, aquella que está tipificada en un Código, Reglamento o demás conjuntos de leyes
que regulan o norman a los habitantes de un estado, así tenemos que la conducta típica se encuentra
también en las leyes de carácter social como el hecho de intentar apoderarse de un bien inmueble
que ha sido habitado por más de 15 años a través de una Prescripción Extraordinaria Adquisitiva de
Dominio en materia civil. Lo que no está prohibido, está permitido (Permittiur quod non prohibetur).
Caminar por las calles públicas a cualquier hora, no es una conducta típica, pues no existe normativa
legal alguna sobre aquello.
Antijurídica.- Es uno de los elementos esenciales para que la conducta sea de carácter penal, pues
debe transgredir los lineamientos que ha impuesto la sociedad como correctos o adecuados para su
convivencia, debe afectar al estado como ente regulador a través de las acciones no regulares que
sufra uno de sus integrantes, lo antijurídico lesiona el interese de las personas y por ende del estado.
Culpable.- Es la búsqueda del derecho penal, establecer si alguien a quien se considera sospechoso
de un hecho punible es inocente o culpable, recordemos que el proceso penal culmina con esta
premisa, ratificar el estado de inocencia de una persona el cual es un derecho intangible, conforme
lo consagra el numeral 2 del Art. 76 de la Constitución del Ecuador, así como el numeral 4 del Art. 5
del COIP, o en su defecto y una vez que el juzgador encuentre que existen elementos suficientes
constitutivos que hayan permitido destruir su estado de inocencia, declararlo culpable. De no existir
una declaratoria de culpabilidad por parte de la Autoridad competente, no existe la Infracción Penal,
o no por parte de quien haya sido ratificado inocente.
Sanción Prevista en el COIP.- En efecto este principio nace del PRINCIPIO DE LEGALIDAD que
consagra el numeral 3 del Art. 76 de la Constitución del Ecuador así como el numeral 1 del Art. 5 del
COIP, pues si la infracción penal no se encuentra tipificada con anterioridad al hecho, o se haya
declarado su antijuricidad no se configura, ni complementa. La Infracción Penal, su forma y su
penalidad deben encontrarse dentro del COIP, caso contrario adolece de legalidad y por el contrario
es una actividad permitida. No existe la prohibición de Comer por las noches, por lo tanto no se
encuentra previsto en el COIP, por lo tanto es permitido y no constituye Infracción Penal.
Este es el primer elemento para que se configure el Concurso de Infracciones, pues caso contrario
y de ser realizado por diferentes actores, las infracciones serian múltiples y no existiría un concurso
de infracciones, en su defecto estriamos tratando infracciones con carácter particular en las cuales
cada sospechoso, imputado o procesado debería responder por sus acciones de carácter individual.
Se deben configurar, comprobar o atribuir la existencia de varios delitos, que podrían ser de diferente
tipicidad o de la misma pero en diferentes ocasiones. No se configura cuando NN entra a un
restaurant a asaltar y a Pedro le roba el reloj, a María la Cadena y a Juan el Celular dentro del mismo
establecimiento, aun existiendo tres denuncias diferentes en su contra, comprende un solo delito por
lo que las tres acciones se deberán acumular en una sola acción penal.
Que se hayan afectado diferentes bienes jurídicos, o el mismo bien jurídico varias veces; y;
Manifestábamos en el Numeral 2 que es necesaria la comisión de varios tipos penales, es decir, que
sean afectados diferentes bienes jurídicos, pues si el bien jurídico es único, nos encontraríamos ante
una infracción penal aislada, o en su defecto ante la afectación de un mismo bien jurídico pero en
diferentes ocasiones. NN asesinó el 2 de julio de 2015, asesinó el 17 de Julio de 2015 y asesinó el
05 de Agosto de 2015.
Deben ser probados los hechos que pretendan configurar el concurso de infracciones, en especial
ante la presunción del Concurso Ideal de Infracciones, puesto que las presunciones son prohibidas
por el COIP, así lo determinan en su Artículo 455, pues el Nexo Causal exige hechos reales. JUAN
Y PEDRO fueron detenidos en Receptación (Art. 202 del COIP) de tres Televisores. Luego llega
ANA y aduce que fueron robados (Art. 189 del COIP) de su almacén, mientras no se demuestre lo
contrario no se podría establecer que JUAN Y PEDRO fueron quienes robaron el almacén, por lo
que mientras no se demuestre fehacientemente, no se podría aplicar un concurso real de
Infracciones, pues ANA debería demostrar que en efecto JUAN Y PEDRO fueron quienes robaron
su almacén.
La legislación penal ecuatoriana establece lo que se conoce en el derecho internacional penal como
CONCURSOS PROPIOS que se clasifican de acuerdo a la unidad o pluralidad de conductas llevadas
a cabo por el agente (persona) y son de dos tipos: CONCURSO REAL Y CONCURSO IDEAL.
Art. 20 del COIP.- Concurso real de infracciones.- Cuando a una persona le son atribuibles varios
delitos autónomos e independientes se acumularán las penas hasta un máximo del doble de la pena
más grave, sin que por ninguna razón exceda los cuarenta años.
EUGENIO CUELLO CALÓN, explica que el verdadero concurso real existe cuando concurren las
siguientes condiciones:
Es importante recalcar que el CONCURSO REAL procede sobre las sentencias ejecutoriadas, es
decir NO PROCEDE cuando se encuentran en etapa de Instrucción Fiscal o cualquier otra etapa del
Proceso, sino cuando se ha llegado a obtener varias sentencias ejecutoriadas en contra de una
misma persona.
El día 15 de Marzo de 2015, NN JUANITO entro a una cevichería de Guayaquil y Asalto a los
comensales, el día 27 de Mayo de 2015 hurto una computadora del Centro Comercial La Rotonda y
el 03 de Junio de 2015, se lo capturó en Receptación de una Cadena de Oro de la que no pudo
justificar su tenencia, por lo que se le formulo cargos. Actualmente tiene tres sentencias ejecutoriadas
de las que se desprende:
Por el Robo (Art. 189 Primer Inciso COIP) cometido el 15 de Marzo de 2015, fue sentenciado
a 5 años de Privación de la Libertad por parte del Tribunal Segundo de Garantías Penales
del Guayas;
Por el Hurto (Art. 196 COIP) cometido el 27 de Mayo de 2015, fue sentenciado a un año de
Privación de la Libertad por parte del Tribunal Undécimo de Garantías Penales del Guayas;
y,
Por la Receptación (Art. 202 COIP) cometido el 03 de Junio de 2015, fue sentenciado a un
año de Privación de la Libertad por parte del Juez B de la Unidad de Delitos Flagrantes de
Guayaquil.
NN PATUCHO ha sido sentenciado por 5 robos agravados cometidos, en cada uno la pena impuesta
ha sido de 7 años, en la sumatoria deberían hacerse el total de 35 años, la pena máxima que debería
estar privado de su libertad es de 14 años, pues ese sería el doble de la pena más grave.
El CONCURSO REAL una vez configurado, actúa sobre dos requisitos básicos, 1) Obra con
Sentencias Ejecutoriadas; y, 2) El encargado de su aplicación es el Juez de Garantías Penitenciarias.
Art. 21 del COIP.- Concurso Ideal de infracciones.- Cuando varios tipos penales son subsumibles
a la misma conducta, se aplicará la pena de la infracción más grave.
Esther Hava García, señala que se da el Concurso Ideal de Infracciones, cuando un solo hecho
constituye dos o más infracciones penales (concurso ideal stricto sensu) o cuando una de ellas es
medio necesario para cometer la otra (concurso medial).
En otras palabras, varios tipos penales, un solo sospechoso, diferentes bienes jurídicos afectados.
NN GORDO en compañía de sus compinches entra a asaltar el Restaurant ARENA, PEDRO que es
uno de los comensales, indignado por el hecho se para, forcejea con NN GORDO y de esta pelea el
arma con la que NN GORDO amedrentaba a sus víctimas es disparada, producto de aquello PEDRO
muere, NN GORDO huye del sitio en un vehículo y producto de su huida choca dos vehículos
estacionado, hasta que unas cuadras más adelante NN GORDO es capturado por la Policía.
Los 3 tipos penales son subsumibles a la misma conducta, pues el objeto principal del acto fue el
robo y las demás causas se dieron producto de aquel robo que cometió NN GORDO, definitivamente
aquí nos encontramos ante un Concurso Ideal de Infracciones por lo que NN GORDO deberá ser
sancionado por el Delito Más grave, esto es el Homicidio.
Cabe aquí la pregunta, PORQUE DECIMOS QUE FUE HOMICIDIO Y NO ASESINATO, pues esto
es claro, el hecho principal por el que NN GORDO se encontraba en el restaurant ARENA era el
Robo, las otras infracciones penales se dieron producto del Robo. Existe con claridad el dolo (Art.
26 COIP) en cuanto al Robo que se pretendió cometer o que se configuro en su totalidad, pero la
lamentable muerte de PEDRO se dio producto de la circunstancia, por lo que no complementa los
elementos solicitados en el Art. 140 para que se configure un ASESINATO.
La importancia del concurso de delitos consiste en facilitar o sintetizar la aplicación de la pena, este
concurso consiste en que un delito puede ser cometido por una o varias personas y que estas pueden
cometer una o varias acciones calificadas como delitos que son valorados en un mismo proceso.
Este tipo de concursos están contemplados en el código penal de nuestra legislación y varían en
cuanto la forma en que se comete un hecho o varios hechos y en la forma en que se aplican las
penas.
Bibliografía
Pavón Vasconcelos, Francisco, Manual de derecho penal mexicano. Parte General, 15ª
edición, México, Porrúa, p. 578.
Mario Garrido Montt, Derecho Penal Tomo II, tercera edición actualizada, Editorial Jurídica
de Chile, Santiago, 2003, pág. 344.-
Concurso ideal de delitos. El incremento de la sanción a que se refiere el artículo 64, párrafo
primero, del Código penal federal atañe sólo a la pena de prisión y no a la multa, Tesis XV.
5º. J/3, (Jurisprudencia),