Bosquejos de Sermones 2

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BOSQUEJO Nº 1

TEMA: ¡LIBRE DE LA ANSIEDAD!


(1ra Parte)

Introducción
¿Qué persona puede estar más ansiosa que una que se encuentre en la cárcel? De la
misma manera, muchas personas hoy se enfrentan a retos y desafíos que colocan su
mente en un estado extremo de tensión. Los problemas pueden ser acumulativos, ya sea
por asuntos familiares, de estudio, del trabajo, o asuntos de conflicto psicológico interno.
Hoy más que nunca, queremos encontrar la fuente de alivio. Hablemos hoy de esto...

I. ¿Cuál es la naturaleza de la ansiedad?

A. ¿Qué es la ansiedad?

1. Ansiedad es aquella inclinación interna que «tira para todo lado», por ejemplo
nuestra esperanza se inclina hacia un lado: la confianza en Dios; nuestras
ansiedades y miedos tiran en la dirección opuesta.

2. La «preocupación» o la ansiedad está muy ligada en su origen a la


“estrangulación”. Esto quiere decir que la preocupación (ansiedad) va
estrangulando poco a poco, produce efectos secundarios físicos bien definidos:
dolores de cabeza, dolores de cuello, úlceras, dolores de espalda. Estos males
afectan nuestro pensamiento, nuestra digestión e incluso nuestra coordinación. El
deterioro es paulatino.

B. Perspectiva espiritual de la ansiedad.

1. La ansiedad es un pensamiento o una sensación incorrecta que se relaciona con


circunstancias, personas y cosas. Se puede considerar como el ladrón más
sofisticado del gozo (capacidad de disfrutar y compartir libremente con otros).

2. ¿Cómo sacarla de nosotros? La ansiedad no es una cuestión de palabras; es de


decisiones. Es un esfuerzo radical que procura parar el robo que nos está
haciendo.

a) Es una «actitud interna».

b) Evitar la ansiedad es más que buenas intenciones.

Pablo nos da el antídoto:

II. Cómo sobrevivir a la ansiedad. (Lea Filipenses 4:6-7).

A. El antídoto principal es la Petición:

1. Pedir con expectativa es la actitud correcta frente a la ansiedad; es llevar delante


de Dios nuestras oraciones, la idea fundamental es evitar preocuparse por
cualquier cosa, y mas bien presentarla a Dios de manera sencilla (pedido).
Aprendamos no solo a pedir por las cosas grandes, también por las pequeñas.
2. Pedir también implica “rogar con suplica”. La suplica se refiere a pedir al Señor
por medio de la adoración y dedicación. Es pasar un tiempo de oración y
dedicación a solas con Dios.

a) Suplica es acercarse a Él, sabiendo que es Dios más que suficiente en poder;
e implica compartirle con libertad nuestras necesidades. Es un tiempo de
oración y dedicación a solas con Dios.

b) Indicarle cuáles son nuestras peticiones. (Véase Mt. 6:7-8; Mt. 7:7-11; 5:7)

3. Es acercarse a Dios con acciones de gracias.

a) El ser agradecido implica reconocer lo que el Señor está haciendo a favor


nuestro. Nos ayuda a mantener nuestros problemas en la perspectiva divina,
sabiendo que el Señor tiene un propósito y nos ayudará (Rom. 8:28).

B. El ruego produce fortaleza mental y emocional. (Lea Filipenses 4.7)

1. No significa que el Señor nos quita los problemas para siempre. El promete paz
que sobrepasa todo entendimiento.

2. Es una paz que el mundo no proporciona, pero que el Señor da. (Véase Jn 14:27;
16:33; Rom. 5:1; Ef. 2:14).

3. Es una paz que protege al corazón, el cual, en ocasiones actúa incorrectamente.


Protege la mente por inclinarse a la maldad.

4. Esto no significa la ausencia de problemas externos (Rom. 8:35-37).

a) Significa tener confianza completa. La confianza completa implica que


ninguna circunstancia, persona o cosa, nos puede robar nuestro gozo.

III. Conclusión

Dios nos otorga la paz necesaria para sobrellevar la ansiedad. Es el resultado de rogar y
suplicar, y ser agradecido al Señor. Salir adelante, en medio de situaciones difíciles, es
posible por medio de Jesucristo. ¿Quiere usted saber cómo alcanzar esta bendición?

IV. Modelo de Invitación para Aceptar al Señor Jesucristo:

Señor Jesús:
Gracias por el amor que me tienes. Gracias porque decidiste morir a causa de
mis pecados en esa cruz. Entiendo que tu sacrificio está vigente hoy y que yo
necesito de Ti. Te abro la puerta de mi vida y de mi corazón, y te reconozco
como mi Señor y Salvador. Sé parte de mi estilo de vida. Guíame, y hazme la
persona que Tú esperas que sea. Gracias porque hoy me regalas una vida llena
de bendición y propósito. Amén.
BOSQUEJO Nº 2
TEMA: ¡LIBRE DE LA ANSIEDAD!
(2da Parte)

Introducción
En la 1ra Parte consideramos la naturaleza de la ansiedad y la importancia de aprender a
buscar y pedir ayuda reconociendo nuestra necesidad, con ruego y humildad. Entre la
gente del mundo, primero se trata de entender las cosas, y luego, recién se confía en la
ayuda. Y muchas veces las emociones se desbordan cuando hay ansiedad, pero pueden
ser apaciguadas con la voluntad a través de pensar correctamente. Hablemos hoy de esto..

I. La paz mental y la paz de Dios. (Lea Filipenses 4:8).

Según Pablo, la paz mental y la paz con Dios, dependen de la manera cómo se medita, y
de la manera cómo se descansa en el Señor. La «meditación» aquí mencionada, no es
aquella que practican las religiones orientales. Lo que Pablo está diciendo es que las
personas ordenen, limpien, alimenten sus pensamientos. (Véase Gén. 24:63; Jos. 1:8; Sal.
1:1; Sal. 119:99; 1 Tim. 4:15). Entonces: ¿Cómo debemos meditar?

A. La meditación debe ser en la Palabra de Dios.

1. La meditación bíblica NO es...

Meditación trascendental, que consiste en vaciar la mente para descubrir la


verdad dentro de uno mismo; o, como practican algunos cristianos de meditar
para recibir cierta revelación de Dios. Esta es subjetiva, y no aprovecha.

2. La meditación bíblica ES...

 Objetiva. Es percibir o contemplar una realidad revelada. Es aplicar el


pensamiento correctamente y con propósito. Es lo que Pablo llama: lo
verdadero, noble, justo, etc.; cualquier cosa que tenga virtud (Fil. 4:8). Mucho
de esta objetividad se encuentra:

a) En El, en las cualidades de Su Persona (Sal. 25:4; 63.6; 104:34);


b) En sus obras (Sal. 77.12; 139:14; Rom. 1:19-21; Ap. 15:3-5);
c) En su Palabra revelada (Sal. 119.15, 23, 48, 97-99, 148).

 Alimento que nutre. Es recibir enseñanza práctica para hacer Su voluntad.


Implica también alimentar a la persona para que tenga gozo y poder espiritual
como comida, y pueda fortalecerse adecuadamente. (Sal. 1.1-3; Jer. 17:7-8).

B. ¿Porqué los cristianos deben meditar?

1. Porque la meditación es fuente de gozo y paz. (Is. 40.28-31). Debemos


motivarnos más a menudo a meditar. Es importante porque nos transforma, nos
renueva (Rom. 12.2), especialmente, cuando fijamos nuestra mente en el Señor
(Col. 3.1-2).
2. Muchos cristianos meditan en cosas incorrectas: en las cosas de la carne (Ro.
8.5-8). Cuando se medita en lo incorrecto, nuestros patrones internos tienden a
desviarse hacia ello.

C. Cómo Meditar Correctamente.

1. La mente es afectada por lo que ve. Por eso, se tiene que ser selectivo con lo
que se mira y se lee.

2. Llene su mente de pensamientos positivos y espirituales, que le renueven y le


transformen.

Preste atención a las meditaciones en los Salmos:

a) Que la prioridad sea la lectura de la Palabra. (Sal 1.2).


b) Se tiene que leer diariamente. (Sal 119.15).
c) Se debe leer con una actitud de ruego. (Sal 119.18).

II. La Condición para Obtener Paz. (Lea Filipenses 4:9).

La clave para la obtención de paz es: Hacer todas las cosas que Pablo nos ha
encomendado, quien conoce el papel de Dios en la obtención de paz. (Véanse Rom. 16.20;
2 Co. 13.11; 1 Ts. 5.23).

A. Y, ¿Cuáles Son Esas Cosas?

1. Lo que han aprendido de Pablo: el estar pendiente de los hermanos de Filipos,


estando dispuesto a morir por ellos (pensar en las necesidades de otros).
2. Lo que han recibido de Pablo: La Palabra de Dios (leerla, meditarla).
3. Lo que han oído de Pablo: Que él no es perfecto (no ser perfeccionistas).
4. Lo que han visto de Pablo: Su modelo (como creyente de Jesús), y por tanto,
deben imitarlo. También han visto su perseverancia (todo problema termina).

III. Conclusión.

Por tanto, es posible y sano experimentar gozo en medio de la preocupación, y como


cristiano uno llega a estar consciente de que la vida en la tierra es pasajera. Para obtener
paz se debe aprender a tener comunión con el Señor. Una persona obtiene paz cuando
está al servicio del Señor, cuando su meditación se centra en el Señor. ¿Estamos
experimentando la paz del Señor?

IV. Modelo de Invitación para Aceptar al Señor Jesucristo:

Señor Jesús:
Gracias por el amor que me tienes. Gracias porque decidiste morir a causa de
mis pecados en esa cruz. Entiendo que tu sacrificio está vigente hoy y que yo
necesito de Ti. Te abro la puerta de mi vida y de mi corazón, y te reconozco
como mi Señor y Salvador. Sé parte de mi estilo de vida. Guíame, y hazme la
persona que Tú esperas que sea. Gracias porque hoy me regalas una vida llena
de bendición y propósito. Amén.
BOSQUEJO Nº 3
TEMA: ¿EN QUÉ O EN QUIEN SE PUEDE CONFIAR?

Introducción
Las personas buscan diferentes maneras de salir adelante en medio de sus problemas.
Andan buscando en qué o en quién confiar. Notamos la incertidumbre de la gente porque
donde han plantado su seguridad se ha volteado o desaparecido o fracasado. Esta gente
se siente defraudada. Ahí han puesto su empeño y corazón, facultades y recursos pero ha
fallado. ¿Cómo podemos animarles a salir de ese atolladero? Hablemos hoy de esto...

I. En las riquezas no se puede confiar porque son inseguras

A. «Quién confía en las riquezas caerá» (Pr. 11.28).

1. “Caerá” indica que el resultado es la ruina, decepción.

2. La ruina no necesariamente es material, mas bien el énfasis está en la


decadencia de la persona.

B. La dependencia exclusiva en las riquezas no compra a Dios. «Los que confían


en los bienes… ninguno de ellos podrá… ni dará a Dios rescate» (Sal 49.6-7). Las
riquezas tienen sus límites, hágase lo que se haga a Dios no lo compra nadie. Note
como lo expresa la versión DHH:

«Ellos confían en sus riquezas y se jactan de sus muchos bienes, pero


nadie puede salvarse a sí mismo ni pagarle a Dios porque le salve la vida».

C. La dependencia exclusiva de las riquezas lleva y mantiene en la maldad. «He


aquí el hombre… que confío en la multitud de sus riquezas, y se mantuvo en su
maldad» (Sal 52.7).

D. Poner esperanza o confianza en el dinero tiene un final decepcionante. Job le


protesta a sus amigos, les indica que él no ha puesto su seguridad en el «oro» (Job
31.24).

II. Es inútil apoyarse en sus propias edificaciones y por ende en lo material

A. El intento de apoyarse en lo material lleva al fracaso. (Job 8.14-15; 18.14)

B. Ni en las ciudades fortificadas, ni en las murallas se puede confiar.

En ocasiones, las personas procuran confiar en el poderío de su «edificio», el que


tiene o espera tener. Algunas personas tienen cuidado de estar encerrados en la
fortaleza que han construido, llámese casa, edificio, quinta; o algún negocio,
empresa o trabajo (empleo), hasta un lugar de ministerio, o la iglesia misma como
edificación (Jer. 5.17; Dt. 28.52).
III. Tampoco se puede confiar en la fortaleza del hombre.

A. No se puede confiar en el hombre. (Pr 25.19; Jer 17.5).

B. Ni puede sentirse seguro con el gobierno. “Príncipes” = “Hombres importantes”.


También se aplica a autoridades académicas (científicos), autoridades políticas, o
autoridades económicas (Sal 146.3; Sal 118.8-9; Is 2.22; 31.3).

C. Ni en los amigos, porque se pueden equivocar. (Jr 9.4, Miq 7.5; Sal 41.9-10).

D. Ni confiar en:

1. Su propia fuerza. (Is 30.12; Sal 62.10; Pr 21.22).

2. En sí mismo. (Pr 3.5-8; 28.26).

3. En su propia justicia. (Is 64.5-7; Ez 33.13).

4. En su maldad. (Is 47.10).

IV. Quien busca la seguridad en los ídolos hallará fracaso.

A. Porque no se puede confiar en las obras de los hombres. (Sal 115.8; 135.18).

B. No se puede confiar en las imágenes. (Is 42.17; Hab 2.18).

V. No se debe confiar en las cosas santas.

A. Algunas personas confían en el lugar en que se encuentra Dios (sea templo, iglesia,
edificio), y no confían en él. (Jr 7.4; Jr 7.14).

B. O en los líderes en lugar de Dios (Jr 7.8; Jr 13.25; 28.15; 29.31).

VI. Conclusión.

¿En quién podemos confiar?


Vea la respuesta en el Sal 37.3-4; 118.8-9; Pr 29.25; Mat 6:31-33; Jn 14:1; Os. 12.6

VII. Modelo de Invitación para Aceptar al Señor Jesucristo:

Señor Jesús:
Gracias por el amor que me tienes. Gracias porque decidiste morir a causa de
mis pecados en esa cruz. Entiendo que tu sacrificio está vigente hoy y que yo
necesito de Ti. Te abro la puerta de mi vida y de mi corazón, y te reconozco
como mi Señor y Salvador. Sé parte de mi estilo de vida. Guíame, y hazme la
persona que Tú esperas que sea. Gracias porque hoy me regalas una vida llena
de bendición y propósito. Amén.

BOSQUEJO Nº 4
TEMA: REFLEJANDO AMOR
(1ra Parte)

Introducción

Nuestra conducta funciona como un espejo, un termómetro, o un televisor. Como un


espejo, cuando lo que hacemos refleja la condición de nuestro corazón. Como un
termómetro, cuando nuestro comportamiento indica la intensidad de nuestro amor a Dios. y
como un televisor, cuando nuestros hábitos reflejan lo que cosecharemos en el futuro. El
amor hace la diferencia en este mundo de tanta violencia. Hablemos hoy de esto...

I. Nuestro estilo de vida determina la duración de nuestros días. (Léase Pr. 9.10-12)

Las compañías de seguros calculan los años que un cliente probablemente vivirá utilizando
un cuestionario como el siguiente:

 Se empieza con 72 años. Si eres varón, sustrae 3 años, si eres


mujeres, añade 4. En promedio, las mujeres viven 7 años más que
los hombres.
 Si vives en un área urbana de más de 2 millones de habitantes,
sustrae 2 años. Las ciudades significan concentración de población y
tensión.
 Si vives en el campo o en un pueblo de menos de 10 mil habitantes,
suma 2.
 Si trabajas detrás de un escritorio, sustrae 3. Si tu trabajo requiere
esfuerzo físico regular y pesado, añade 3.
 Si haces algún tipo de deporte fuerte a lo menos media hora 5 veces
a la semana, añade 2.
 Si vives acompañado, añade 5. Si vives sólo, sustrae un año por cada
10 años que has vivido solo a partir de los 25 años. La gente que
vive acompañada se deprime menos y la depresión mata.
 Si duermes más de 10 horas diarias, sustrae 4 años. El sueño
excesivo es señal de mala circulación o de depresión emocional.
 Si eres intenso, agresivo y te enojas con facilidad, sustrae 3. Si eres
fácil de tratar, amigable, relajado, añade 3. Si eres feliz, añade 1.
 Si fumas de media un paquete diario, sustrae 3 años. Si fumas de 1 a
2 paquetes, sustrae 6, si fumas más de 2 paquetes, sustrae 8.
 Si tienes más de 65 años y todavía trabajas, añade 3. La jubilación
mata. Si pesas entre 5 y 8 kilos de más, sustrae 2 años.
 Si practicas la homosexualidad, sustrae 30. Se ha calculado que el
promedio de vida de los homosexuales en Estados Unidos es de 40
años.

II. Dios manda por amor (Cant 8.6; 1 Jn 4.8; 1 Jn 4.16; 1 Jn 5.23; 2 Jn 2.6).
Cuando Dios da mandamientos en Su Palabra es para encauzar nuestra conducta, y lo
hace para nuestro bien. Dios está interesado en la cantidad y en la calidad de nuestra vida.
Mediante el sacrificio de Cristo, Dios nos extiende el regalo de la salvación. Si lo
aceptamos, tenemos la vida eterna. Si lo rechazamos, tenemos la condenación. ¿Qué
sucede cuando entregamos nuestras vidas a Dios? Si le entregamos nuestras vidas a Dios:
seremos transformados en nuestra forma de pensar y en nuestra forma de entender y
comunicarnos con el Dios vivo y verdadero (Rom 12.1-10).

A. ¿Qué es el amor?

1. Los refranes populares nos tratan de definir lo que es el amor. Por ej:

 «Amor fuerte, hasta la muerte».


 «Amor de boca, bicoca; amor de corazón, verdadera pasión».
 «Amor que como entra, sale; nada vale».
 «Amor de estudiante, inconstante».
 «El amor es loco, pero a muchos vuelve tontos».
 «El amor es una ratonera: entra el ratón, cuando quiere, pero no sale cuando
quiera».
 «El amor vive en presencia, y muere en ausencia».
 «El amor y la luna se parecen: menguan cuando no crecen».
 «En amor, lo importante no es decir cómo se ama, sino demostrar cómo se
ama».
 «Cuando no se ama demasiado, no se ama».

2. Dios nos recuerda lo que es el amor desde Su punto de vista, que es el


verdadero:

 1 Corintios Capítulo 13. El amor del cual nos habla Romanos 12.9-10 no es
cualquier amor. Es el amor que viene de Dios (Ro. 5.5) y que ha de ser el
distintivo de un verdadero cristiano (Jn. 13.34-35).

B. Cuatro distintivos del amor divino que se nos dan en Romanos 12.9-10

1. El amor para el cual Dios nos quiere transformar es un amor sincero. (12.9a).
2. El amor para el cual Dios nos quiere transformar ha de ser exclusivo. (12.9b).
3. El amor para el cual Dios nos quiere transformar ha de ser fraterno. (12.10a).
4. El amor para el cual Dios nos quiere transformar ha de ser dador. (12.10b).

En la siguiente parte profundizaremos en cada uno de los puntos mencionados.

III. Conclusión

Dios es amor. Nosotros necesitamos Su amor, más que cualquier otro amor. El amor de
Dios no es un amor impersonal; ¡es muy personal! Dios nos ama tal cual somos, pero no
nos va a dejar como somos actualmente, el quiere que seamos transformados a la imagen
de Su Hijo: Jesús. Eso es parte del amor: la transformación. ¡La buena noticia es que tú
puedes serlo a partir de hoy. ¿Quieres saber cómo? ¡Acépta a Jesús en tu corazón!...
IV. Modelo de Invitación para Aceptar al Señor Jesucristo:

Señor Jesús:
Gracias por el amor que me tienes. Gracias porque decidiste morir a causa de
mis pecados en esa cruz. Entiendo que tu sacrificio está vigente hoy y que yo
necesito de Ti. Te abro la puerta de mi vida y de mi corazón, y te reconozco
como mi Señor y Salvador. Sé parte de mi estilo de vida. Guíame, y hazme la
persona que Tú esperas que sea. Gracias porque hoy me regalas una vida llena
de bendición y propósito. Amén.
BOSQUEJO Nº 5
TEMA: REFLEJANDO AMOR
(2da Parte)

Introducción
En la primera parte veíamos el contraste entre los que las personas piensan que es el
amor, y lo que es el amor que tiene para dar el único Dios verdadero. Ahora,
profundizaremos un poco en 4 distintivos que nos ayudarán a ver cuán único es el amor de
Dios. Hablemos hoy de esto...

I. Cuatro distintivos del amor divino que se nos dan en Romanos 12.9-10

1. El amor para el cual Dios nos quiere transformar es un amor sincero. (12.9a).

a. La palabra traducida «fingimiento» es anypókritos. Se usaba para referirse a una


actor. De ahí, adquirió su significado negativo, de «fingidor», «comediante», «uno
que está representando un papel», «uno que hace teatro».

b. El Señor Jesucristo acusó varias veces a los fariseos por se hipócritas. Daban
limosna, oraban, ayunaba, par ser vistos de los hombres. (Mt. 6.1-6). Un hipócrita
es una persona que rehusa obedecer a Dios con la excusa de practicar la
religión. (Mt. 15.1-9) Un hipócrita es el que oculta sus verdaderos motivos con
palabras piadosas. (Mt. 22.15-22). Un hipócrita es aquel que cuida más de su
apariencia externa que de su condición interna. (Mt. 23.25-28).

2. El amor para el cual Dios nos quiere transformar ha de ser exclusivo. (12.9b)

a. El verdadero amor es selectivo. No se puede amar lo bueno y lo malo al mismo


tiempo. Quien es indiferente a lo bueno, NO es indiferente a lo malo. Pero quien
ama lo bueno, odia lo malo. Son mutuamente excluyentes.

b. Dios quiere que nosotros no seamos tibios ante lo malo, ante lo pecaminoso, ante
lo que nos acerca al mundo y nos aparta de Dios, sino que lo aborrezcamos. Por
ej.: El SIDA ha puesto freno a mucha inmoralidad sexual. Amamos al pecador (al
homosexual; Mat 9:12-13); pero decididamente aborrecemos los resultados de lo
malo (el SIDA). (Sal. 97.10; Sal. 119.104; Pr. 8.13; Pr. 28.16; He. 1.9; Ap. 2.6).

3. El amor para el cual Dios nos quiere transformar ha de ser fraterno. (12.10a).

a. Lo fraternal es lo que ocurre entre los hermanos, entre los miembros de una
familia. Se cuenta que Robespierre, el revolucionario francés responsable de
parte del llamado «reinado del terror» rehusó interceder para salvar de la
guillotina al pariente de un amigo, porque se hubiera tenido que levantar para
hacerlo antes de las 9 de la mañana.

b. Como creyentes en Cristo pasamos a formar parte de la familia de Dios. Dentro la


de verdadera iglesia (Col 1:13-14), compuesta por todos los que reciben a
Jesucristo como único y suficiente Salvador, yo no somos extraños, no somos
islas, somos miembros los unos de los otros y nos amamos como Cristo nos
ama.

c. ¿Pero cómo vamos a amarnos unos a otros cuando, como Robserpierrre, no


estamos dispuestos a salir de nuestra rutina diaria para reunirnos para interceder
los unos por las necesidades de los otros? ¿Cómo vamos a decir que nos
amamos cuando no hemos aprendido a dejarnos amar sino a mantenernos
dentro de una coraza para que nadie se entremeta en nuestra privacidad?

4. El amor para el cual Dios nos quiere transformar ha de ser dador. (12.10b).

a. Una de las ironías de algunos matrimonios es que en vez de verse los esposos y
las esposas como aliados, se ven como rivales. Compiten uno con el otro. Esto
no es amor. El amor busca el bien de la persona amada. El amor busca dar y no
recibir. El amor es generoso: «En cuanto a honra, prefiriéndoos unos a los otros».
Con frecuencia el enfocar únicamente lo negativo de una persona nos lleva a
pasar por alto todo lo positivo que pueda tener».

II. Encontrando un lugar donde existe el verdadero amor: Una iglesia amante...
(Léase Ef 4.1-6, 31-32; Gál 6.2-3; Col 3:12-13).

 Es definida por la cualidad de su compromiso, no por su edad;


 Es un «hogar» donde los temores, gozos, anhelos y aspiraciones de uno pueden ser
compartidos sin temor de ser condenado y rechazado.
 Es donde el amor de Dios es experimentado de manera concreta a través de su pueblo.
 Es donde las imperfecciones de la gente son aceptadas; donde descubren su potencial
más grande; donde se sienten amados.
 Es un lugar incondicional en su aceptación de las personas...donde hay oportunidad
para el servicio y el ministerio cristianos.

III. Conclusión

Se cuenta que Ciro, rey de Persia, hizo cautivo a un príncipe, su esposa y sus hijos.
Cuando los prisioneros fueron conducidos ante el rey, éste les preguntó: —¿Qué me darás
si te libero? —La mitad de mi reino —fue la respuesta. — ¿Y si libero a tus hijos? —Todo mi
reino. —¿Y si libero a tu esposa? —Sin vacilar el príncipe respondió: —Me daría a mí
mismo. —Ciro quedó tan impresionado por la respuesta que liberó a toda la familia sin
pedir rescate alguno. En el viaje de vuelta, el príncipe preguntó a su mujer si había notado
el aspecto noble y hermoso de Ciro; ella respondió: —Sólo vi al que estaba dispuesto a
darse en rescate por mi libertad. —También tú puedes aprender a mirar sólo a Jesús, el
que se dio a sí mismo por ti. ¡Conócelo hoy!
IV. Modelo de Invitación para Aceptar al Señor Jesucristo:

Señor Jesús:
Gracias por el amor que me tienes. Gracias porque decidiste morir a causa de
mis pecados en esa cruz. Entiendo que tu sacrificio está vigente hoy y que yo
necesito de Ti. Te abro la puerta de mi vida y de mi corazón, y te reconozco
como mi Señor y Salvador. Sé parte de mi estilo de vida. Guíame, y hazme la
persona que Tú esperas que sea. Gracias porque hoy me regalas una vida llena
de bendición y propósito. Amén.

BOSQUEJO Nº 6
TEMA: EL PERDON
(1ra Parte)

Introducción

«Yo jamás perdono», le dijo un general americano a Juan Wesley. «Entonces, señor», le
contestó Wesley espero que usted jamás peque»,. Todos ofendemos, y todos necesitamos
ser perdonados. ¿Has sido ofendido? ¿Te has sentido insultado, marginado, engañado,
traicionado, defraudado, criticado injustamente? ¿Hay alguien en tu vida a quien tengas
que perdonar? ¿Qué detalles nos da Dios acerca de esta tarea tan difícil? Al entregar
nuestras vidas a Dios podemos comenzar a ser transformados de modo que nuestra vida
llegue a estar caracterizada por el perdón. En Romanos 12.17-21, aunque la palabra
perdón no aparece, se muestra una descripción bastante completa de lo que el perdón es.
Hablemos hoy de esto...

I. El perdón es la mejor alternativa a la venganza.

A. El perdón levanta el ánimo.

Se dice que “cuando hacemos mal, nos colocamos por debajo de nuestro enemigo;
cuando nos vengamos, nos colocamos al nivel de nuestro enemigo; pero cuando
perdonamos, nos colocamos por encima de nuestro enemigo.”

B. La violencia engendra más violencia.

Cuando alguien decide vengarse es arrastrado inevitablemente a una espiral


descendente. Como bumerang, la venganza volverá y nos golpeará con amargura y
rencor. «Pero», podría decir alguno, «¿no dice la misma Biblia, “ojo por ojo y diente
por diente”?» Si. Lo leemos en Éxodo 21.23-25. No obstante, hay tres observaciones
que se pasan por alto al citar este pasaje para dar apoyo a la venganza.

1. La «ley de talión», como se le llama, tenía como propósito limitar la venganza. La


«vendetta» y la enemistad de sangre era algo normal en la sociedad tribal de
aquellos tiempos. Si un miembro de una tribu mataba o dañaba a otro, “la
obligación” de todos los varones miembros de la segunda tribu era la de
vengarse. Y esta venganza, no era otra cosa sino la muerte. La ley de talión limita
deliberadamente los alcances de la venganza. Establece que solamente deberá
ser castigado el responsable por la herida y que su castigo no debe ser mayor
que la herida que hubiera provocado.

2. La ley de talión nunca dio al individuo como tal el derecho de tomarse la justicia
en su propia mano. Se trataba de una ley que era aplicada por un juez mediante
un proceso legal de carácter público (Éx. 19.18). Esta ley nunca tuvo como
propósito darle al individuo el derecho de venganza personal.

3. Finalmente, tenemos las palabras del mismo Señor Jesucristo dándonos la


interpretación correcta de la intención de la ley de talión: Mt. 5. 38-42.

II. El perdón es motivado por el deseo de restaurar relaciones (Ro. 12.17b).

A. Existen diferentes pautas de conducta.

¿Cómo es posible hacer lo bueno delante de personas que tienen diferentes pautas
de conducta? La humanidad está dividida en dos bandos: - los hijos de Dios y los
hijos del diablo (Jn 8:42-44) - los que están en tinieblas y los que están en la luz (Jn
12:35-36) - los que están bajo condenación y los que tienen sus pecados
perdonados (1 Jn 1:11-12) - los que reciben a Jesucristo como su Salvador y los que
rechazan a Jesucristo (Ro 10:6-11) - los que se rigen por las normas que Dios nos
ha dado en Su Palabra y los que se rigen por los deseos de la carne, el mundo y el
diablo (Gál 5:16-18).

B. La responsabilidad de hacer lo bueno.

¿Cómo es posible hacer lo bueno delante de todos los hombres? Haremos lo bueno
delante de todos los hombres cuando no traicionemos las normas de Dios ni delante
de los creyentes ni delante de los incrédulos. El verbo traducido «procurad» significa
literalmente «pensad con anticipación». Esto sugiere que nuestra conducta como
cristianos no ha de estar regida por las reacciones impulsivas, ni por el hábito. Al
contrario, debemos de actuar pensado en las consecuencias de nuestra acción.

C. El testimonio de Jesús.

El perdón es motivado por el deseo de dar un buen testimonio de Jesucristo. Cuando


perdonamos estamos dando testimonio de que Dios nos ha perdonado, porque
perdonamos como resultado de haber sido ya perdonados. Después de languidecer
por meses en las prisiones de Hitler, un cristiano llamado Martín Niemeller salió
diciendo, «Me llevó un largo tiempo aprender que Dios no es enemigo de sus
enemigos». Por la misma razón el Hijo de Dios perdona: porque ha escogido no ser
enemigo de sus enemigos. (Ef 4:31-32; Col. 3:12-14).

III. Conclusión

Cuando Dios no está en nuestras vidas, perdonar parece impensable. Si lo piensas hacer
en tus propias fuerzas, puede ser que no lo logres. Se requiere de la fuerza divina para
hacerlo. No existe mejor enseñanza de perdón que la que Dios el Padre hace con todos
aquellos que de todo corazón desean arrepentirse y comenzar a vivir bajo los principios
dados por Jesús y la Palabra de Dios. También tú puedes aprender a perdonar como
Jesús, quién que se dio a sí mismo por ti. ¡Conócelo hoy!

IV. Modelo de Invitación para Aceptar al Señor Jesucristo:

Señor Jesús:
Gracias por el amor que me tienes. Gracias porque decidiste morir a causa de
mis pecados en esa cruz. Entiendo que tu sacrificio está vigente hoy y que yo
necesito de Ti. Te abro la puerta de mi vida y de mi corazón, y te reconozco
como mi Señor y Salvador. Sé parte de mi estilo de vida. Guíame, y hazme la
persona que Tú esperas que sea. Gracias porque hoy me regalas una vida llena
de bendición y propósito. Amén.
BOSQUEJO Nº 7
TEMA: EL PERDON
(2da Parte)

Introducción

En el transcurso de nuestra vida experimentamos situaciones adversas que causan un


impacto profundo en la mente, especialmente cuando esas situaciones adversas son
provocadas, intencionalmente o no, por otras personas, y con frecuencia, por nuestros
mismos familiares. Podemos pensar que lo han hecho a propósito y de pronto empezar a
sentir un vivo deseo de desquite, de revancha, buscando “alivio” o “satisfacción” a nuestras
almas. Sin embargo, esto no es lo mejor, pues existe una manera especial de tratar con
toda situación adversa, desde la perspectiva correcta. Hablemos hoy de esto...

I. El perdón permite encontrar verdadera paz con nuestros semejantes (Ro 12:18).

El mandamiento: «estad en paz con todos los hombres», está basado en dos
condicionantes. Estos dos condicionantes nos muestran lo difícil que es hacerlo realidad.

A. La posibilidad de perdonar.

En primer lugar dice, «si es posible». Esto nos indica que habrá oportunidades en
que las mejores intenciones y los mejores esfuerzos se verán frustradas. No siempre
es posible estar en paz con todos los hombres. Dada la tendencia hacia el pecado
de nuestro corazón, lo que hagamos por agradar a unos, va a desagradar a otros.
Por eso debemos decidir agradar primeramente a Dios, porque cuando decidimos
agradar primeramente a Dios, los que se oponen a Dios se van a oponer también a
nosotros. Jesucristo dijo: (Mt. 10.32-39).

B. Evitar los conflictos.

En segundo lugar dice: «en cuanto de vosotros dependa». Nuestra responsabilidad


será evitar los conflictos mediante el perdón. Prov. 14:29; 19.11; Stg. 1:19-21. Y para
cultivar una actitud de perdón, hay que aprender a dar genuino perdón, teniendo
cuidado de no andar dando falso perdón. Hay por lo menos cuatro clases:
1. El «perdón» que rebaja a la otra persona, y hace a la otra persona deudora nuestra, o
que nos hace «santos» a expensas de la otra persona.
2. El «perdón» que no nos lleva a intentar la reconciliación, sino que sólo es dado para
tranquilizar nuestra conciencia. Tal perdón no es de corazón.
3. El «perdón» que sólo es una fachada, que nos permite guardar por dentro dolor o enojo.
Recuerda que la represión es un mecanismo natural e inconsciente, que, aunque
ofreciendo alivio temporal de una emoción dolorosa, a la larga resulta destructivo. No
permitas que tu perdón se convierta en un medio de reprimir sentimientos que están ahí
y tienen que ser reconocidos, controlados y solucionados.
4. El «perdón» que no olvida. El verdadero perdón olvida el agravio. Como el amor, «no
guarda rencor» (no lleva registro de maltratos) (1 Co. 13.5). Es verdad, la herida será
guardada en la memoria, pero no nos va a corroer. No vamos a traerla a colación vez
tras vez. La cicatriz permanece, y podemos verla; pero la herida habrá sido sanada. No
hay dolor. Este es el significado de olvidar. Si no hemos olvidado, lo más probable es que
no hayamos perdonado.
C. Cómo proceder.

Desarrollar una actitud pacificadora puede ser algo costoso. Vivimos en un mundo
malo, donde en muchos sentidos rige la ley de la selva. Muchos querrán
aprovecharse de la enseñanza de que no hay que vengarse. ¿Qué debemos hacer
entonces? ¿Qué puedes hacer cuando has hecho todo lo que debías y la otra
persona continúa levantando una barrera de hostilidad en contra tuya?

1. Debes preguntarte si has hecho «todo lo que debías». Tenemos que confesar
que a veces sólo hacemos el amago de cumplir con nuestra parte.

2. En caso de hostilidad.
Pero puede llegar el momento en que la hostilidad de la otra persona es tan
profunda que no importa lo que tú hagas, vas a ser rechazado o mal interpretado.
Nada de lo que hagas será «correcto» a los ojos de esa persona. Entonces
debes retirarte de la confrontación y esperar en el Señor. «Esperar en el Señor»
no significa lavarte las manos y permanecer como un espectador. Significa
buscar a Dios en oración, y realizar un auto examen (Prov. 20:22).

3. Decidir no vengarse, en actitud de agradar a Dios. (Rom. 12:19).


La enseñanza es clara: no debemos vengarnos. Pero, entonces, ¿cómo se hará
justicia? «Yo», es la respuesta divina. Dios es el juez. (Véase Dt. 32.31-42).
Debemos notar que no hay indicación de que la ira de Dios será ejercitada
inmediatamente (Éxodo 34.6-7). Jacob experimentó esta verdad: Gn. 31.1-16.
También David cuando sorprendió a Saúl haciendo sus necesidades fisiológicas
en la cueva, pudo haberlo matado, pero no lo hizo, sino: (1 Sam. 24:12.13).

D. Efectivamente, Dios se hace cargo.

La Biblia deja claro que habrá un día de la venganza divina al final de los tiempos:
Isaías 63.1-6; Ap. 6.12-17. También hay un día de la venganza divina para el
individuo que lo rechaza deliberadamente (Heb. 10:26-31).

II. Conclusión
El perdón resulta imposible si uno está centrado en uno mismo. La falta de perdón en el
corazón de la persona da espacio a huéspedes indeseables y destructivos para la misma
persona: amargura y frustración. Sólo hay una Persona completamente justa, y esa
persona, pudiendo reprocharnos, no lo hace, más bien perdona. Su nombre es Jesús, te
conoce, y quiere ayudarte a perdonar, pues Él te perdona si tú le aceptas ¡Acéptalo hoy!

III. Modelo de Invitación para Aceptar al Señor Jesucristo:

Señor Jesús:
Gracias por el amor que me tienes. Gracias porque decidiste morir a causa de
mis pecados en esa cruz. Entiendo que tu sacrificio está vigente hoy y que yo
necesito de Ti. Te abro la puerta de mi vida y de mi corazón, y te reconozco
como mi Señor y Salvador. Sé parte de mi estilo de vida. Guíame, y hazme la
persona que Tú esperas que sea. Gracias porque hoy me regalas una vida llena
de bendición y propósito. Amén.

BOSQUEJO Nº 8
TEMA: EL PERDON
(3ra Parte)

Introducción

Durante la guerra de Corea, un cristiano sudcoreano fue arrestado por los comunistas y
condenado al fusilamiento. Sin embargo, cuando el joven comunista que dirigía al pelotón
supo que el prisionero estaba a cargo de un orfanato que cuidaba de niños pequeños,
decidió no fusilarlo a él, sino a su hijo en lugar suyo. Así que el muchacho que tenía 19
años fue acribillado en presencia de su padre. Posteriormente el joven comunista fue
tomado prisionero por las fuerzas de las Naciones Unidas, y fue juzgado y condenado a
muerte. Sin embargo, antes de que la sentencia fuese cumplida, el cristiano cuyo hijo había
sido asesinado intercedió por el joven comunista para que fuese perdonado. «Déjenlo bajo
mi tutela», dijo, «yo lo orientaré». Las fuerzas de las Naciones Unidas le concedieron el
indulto y el cristiano tomó al asesino de su hijo bajo su cuidado. Hoy, aquel empedernido
joven comunista es un pastor evangélico. El perdón ha de manifestarse en acciones
concretas que abran la puerta al arrepentimiento. Hablemos hoy de esto...

I. El perdón requiere acciones concretas que guíen al arrepentimiento (Ro. 12:20).

A. Perdonar no significa ser tolerante.

Cuando una persona viene, nos pide perdón y le decimos, «Déjalo; no tiene
importancia», estamos siendo deshonestos. ¿Por qué? Porque su hubo una ofensa,
la cosa tiene importancia. Perdonar es más que ser tolerante o de aparentar que no
hemos sido afectados. Perdonar es estar dispuesto a asumir el precio de la ofensa
del otro.

Si el Estado perdonara a un criminal, la sociedad carga con el peso de sus fechorías.


Si alguien rompe una valiosa reliquia familiar y el dueño lo perdona, el dueño se
hace cargo de la pérdida, absorbe el daño, y el culpable queda libre. Si yo arruino la
reputación de alguien, para perdonarme ese alguien, tiene que aceptar plenamente
las consecuencias que para él ha tenido mi pecado y dejarme libre de cargo.
B. El ejemplo del Padre celestial.

Dios es el ejemplo por excelencia del perdón. Pero Dios no nos perdona diciendo,
«olvídalo, no tiene importancia». Dios nos perdona asumiendo Él mismo su propia ira
por nuestro pecado: 2 Corintios 5:18-21.

C. Objetivo del perdonar: conseguir genuino arrepentimiento.

¿Qué es lo que se consigue con esta disposición a pagar el precio por amor del
ofensor? Se consigue el arrepentimiento. Jesucristo dijo: Juan 12.32. A través de los
siglos, la obra de Cristo consumada en la cruz del Calvario ha funcionado como un
imán que ha despertado la vergüenza, el arrepentimiento y la fe en millones de
corazones.

Así es como también nuestro perdón ha de funcionar. Cuando asumimos el peso de


la ofensa y hacemos obras de amor por aquel que nos ha agraviado, «ascuas de
fuego amontonaremos sobre su cabeza». La expresión viene quizá de la práctica
antigua de conservar el fuego constantemente en las casas. No existían las cerillas y
dejar que el fuego se apagara era un descuido muy grande. La persona podría tener
que ir a solicitar a algún vecino algunas ascuas, las que se transportaban en una
piedra plana, usualmente sobre la cabeza. Esto era una vergüenza pública.

II. El perdón es una forma de vencer el mal (Rom. 12:21).

A. Es una lucha a muerte.

Estamos en una batalla espiritual. Cuando por la fe recibimos al Señor Jesucristo


como nuestro único y suficiente Salvador, cambiamos de bando (Col. 1:13). Satanás
ha declarado a la humanidad una guerra a muerte y sin cuartel. (Jn 8:44-47; 2 Cor.
2:10-11).

B. El perdón vence al mal.

Cuando somos ofendidos y respondemos con rencor y venganza, hemos sido


vencidos por el mal. Cuando siendo ofendidos decidimos responder con perdón,
vencemos con el bien el mal.

En el año 1818, Tomato, rey de la isla de Huahina, en los Mares del Sur, recibió a
Jesucristo como su Salvador. Poco después descubrió una conspiración en la que
sus súbditos planeaban capturarlo y quemarlo juntamente con otros creyentes.
Entonces organizó una expedición que atacó a los conjurados, los capturó y luego
hizo una fiesta en honor de ellos. Esta bondad inesperada sorprendió tanto a los
nativos, que arrepentidos, quemaron sus ídolos y recibieron a Jesucristo en sus
vidas. La única manera de destruir a un enemigo es hacerlo nuestro amigo.

III. Conclusión

¿Hemos sido ofendidos, traicionados, defraudados y agraviados por otros? ¿Cómo


estamos respondiendo a estas ofensas? Sólo hay una forma de responder aceptable a
Dios: perdonar; porque hemos sido perdonados. (véase Mateo 18.21-35) ¿Has echado
mano del perdón que Dios te ofrece en Cristo? Él puede ofrecer perdón completo porque
ha pagado tus deudas en la cruz: (1 Ped. 3:18). El perdón que Dios ofrece es un perdón
completo: (Sal. 103.12; Is. 38.17; Is. 43.25; Miq. 7.18-19). ¿Cómo es posible este perdón?
En base de los méritos de la sangre de Cristo: (Mt. 26.28). El medio para apropiarnos de
este perdón es la fe: (Hch. 10.43).

IV. Modelo de Invitación para Aceptar al Señor Jesucristo:

Señor Jesús:
Gracias por el amor que me tienes. Gracias porque decidiste morir a causa de
mis pecados en esa cruz. Entiendo que tu sacrificio está vigente hoy y que yo
necesito de Ti. Te abro la puerta de mi vida y de mi corazón, y te reconozco
como mi Señor y Salvador. Sé parte de mi estilo de vida. Guíame, y hazme la
persona que Tú esperas que sea. Gracias porque hoy me regalas una vida llena
de bendición y propósito. Amén.
BOSQUEJO Nº 13
TEMA: VENCIENDO EL ESTRÉS,
LA ANGUSTIA Y LA ANSIEDAD

Introducción
¿Sufres de estrés, angustia, ansiedad? La vida es muy corta como para no disfrutarla
¿Porqué entonces nos empecinamos en confiar en nuestra suficiencia a sabiendas de que
necesitamos ayuda? Cualquier persona puede frenar tu entusiasmo, al menos por un
tiempo; pero solamente tu puedes detenerlo definitivamente. Considera estas claves para
combatir el estrés...

I. Identifica QUÉ te hace sentir así.

A. ¿Un problema familiar? ¿El trabajo? ¿Muchas responsabilidades?

B. ¿Quizás sean temores? ¿Temor al futuro? ¿Temor por la salud? ¿Temor por la
economía? ¿Temor a fracasar?

C. Analiza: Acepta lo que NO puede ser cambiado, y empieza a cambiar lo que SI se


puede cambiar.

D. Entiende que muchas de las cosas o eventos que nos preocupan en realidad
NUNCA llegan a ocurrir.

II. Enfrenta la vida con una actitud positiva.

A. No seas pesimista acerca de ti mismo y de las situaciones.

B. No te maltrates tratando de alcanzar expectativas irreales tuyas o de los demás.

C. No eres un superhombre tampoco eres una supermujer. Haz lo mejor que puedas
con lo que tienes.
D. Reconoce que el mayor problema no es lo que sucede, sino cómo lo enfrentas.

III. Toma decisiones oportunas.

A. Haz un alto y organiza tus actividades cotidianas.

B. Date tiempo para relajarte y descansar. El descanso es una inversión.

C. Establece prioridades en tu vida. Lo urgente no siempre es lo más importante.

D. Determina metas realistas diarias que puedas conseguir.

IV. Reconoce que la vida no es fácil.

A. Siempre habrá problemas que enfrentar.

B. Los fracasos tienen la virtud de pulirnos en la vida y madurarnos el carácter.

C. Los desafíos más exigentes nos ayudan a replantear nuestras vidas y cambiar.

D. Cuando caemos, podemos levantarnos con más fuerza.

V. Tienes opción. No tienes que enfrentar sólo(a) los desafíos de la vida.

A. Dios conoce perfectamente tus frustraciones, temores y anhelos.

B. Dios quiere acompañarte y darte paz en medio de los problemas. Recuerda:


Después de la tormenta, siempre sale el arco iris…

VI. Conclusión

Dios nos otorga la paz necesaria para sobrellevar la ansiedad. Es el resultado de buscarle
de veras y ser agradecido con el Señor. Salir adelante, en medio de situaciones difíciles, es
posible por medio de Jesucristo. ¿Quieres saber cómo alcanzar esta bendición?

IV. Modelo de Invitación para Aceptar al Señor Jesucristo:

Señor Jesús:
Gracias por el amor que me tienes. Gracias porque decidiste morir a causa de
mis pecados en esa cruz. Entiendo que tu sacrificio está vigente hoy y que yo
necesito de Ti. Te abro la puerta de mi vida y de mi corazón, y te reconozco
como mi Señor y Salvador. Sé parte de mi estilo de vida. Guíame, y hazme la
persona que Tú esperas que sea. Gracias porque hoy me regalas una vida llena
de bendición y propósito. Amén.

BOSQUEJO Nº 14
TEMA: CÓMO DERROTAR
LA CRISIS ECONÓMICA

Introducción
¿Te está agobiando la crisis económica? Si realmente deseas cambiar tu condición, con
una decisión a no darte por vencido puedes cambiar el giro de tu destino. Si la vida te da un
limón, ¡haz una limonada! En la vida no hay víctimas, solo voluntarios a serlo. Aunque las
cosas estén mal… ¡nunca te rindas! Es de sabios aprender de los errores propios.
Considera estas reflexiones, de manera pausada, para derrotar a la crisis económica...

I. Reconoce la necesidad de cambiar.

A. Siéntate y con calma haz un diagnóstico de tu condición económica actual.

B. ¿Haz cometido errores en el pasado? ¿Haz tomado malas decisiones? ¿Quizás


piensas que haz tenido “mala suerte”?

C. Sé honesto(a) contigo mismo(a). Reconoce tus responsabilidades en tu situación


económica actual.

D. Acepta las cosas difíciles que NO puedes cambiar y enfréntalas. Empieza a cambiar
aquellas que SI puedes cambiar.

II. Entiende que la crisis trae enseñanzas para ti.

A. En la vida siempre habrá desafíos y problemas que enfrentar.

B. Los fracasos tienen la virtud de pulirnos y madurarnos.

C. Los desafíos más exigentes nos ayudan a replantear nuestras metas de vida.

D. Cuando caemos, podemos levantarnos con más fuerza.


III. Toma decisiones oportunas.

A. Haz un alto y piensa las alternativas que tienes para salir de la crisis.

B. Sé realista. Elimina actividades, rutinas y gastos innecesarios.

C. Reemplaza todo sistema que no te haya funcionado adecuadamente en el pasado.

D. Busca decididamente nuevas fuentes de ingresos.

IV. No te desesperes; siempre hay una salida.

A. No te paralices emocionalmente. Este momento pasará.

B. Comunícate más con tu familia. Únete más con ellos.

C. Reconoce que necesitas ayuda. Busca consejo de amigos maduros.

D. Rechaza todo pensamiento de desesperanza y falta de fe.

V. Tienes opción. No tienes que pasar sólo(a) por esta situación difícil.

A. Dios conoce tus angustias, tus luchas y quiere ayudarte a vencerlas.

B. Él tiene reservada para ti una mejor vida; por eso, ¡toma en cuanta a Dios!

VI. Conclusión

Es erróneo pensar que somos víctimas del destino o de las decisiones de otros. Muchas de
las situaciones por las que pasamos son producto de nuestras propias decisiones, y con
frecuencia de malas decisiones. Las malas decisiones no se dan porque seamos tontos,
sino porque existe una naturaleza pecaminosa en nuestro ser, que nos hace ser
caprichosos o egoístas, y de la que necesitamos ser salvados. ¿Desea saber cómo?…

IV. Modelo de Invitación para Aceptar al Señor Jesucristo:

Señor Jesús:
Gracias por el amor que me tienes. Gracias porque decidiste morir a causa de
mis pecados en esa cruz. Entiendo que tu sacrificio está vigente hoy y que yo
necesito de Ti. Te abro la puerta de mi vida y de mi corazón, y te reconozco
como mi Señor y Salvador. Sé parte de mi estilo de vida. Guíame, y hazme la
persona que Tú esperas que sea. Gracias porque hoy me regalas una vida llena
de bendición y propósito. Amén.

BOSQUEJO Nº 15
TEMA: SUPERANDO LOS CONFLICTOS
DEL MATRIMONIO

Introducción
¿Estás experimentando problemas en el matrimonio? Empieza el cambio ahora. El
matrimonio no es un duelo; es un DÚO. Te puedes cansar pero ¡nunca te debes rendir! Si
realmente deseas cambiar con tu decisión a no darte por vencido, entonces no hay
secretos: ¡Si tu quieres, puedes! El fracaso es la oportunidad para volver a empezar con
mayor inteligencia. Considera, a manera de reflexión, estas claves para superar los
conflictos en el matrimonio...

I. No te enfoques sólo en las debilidades de tu cónyugue.

A. Tú tampoco eres perfecto(a), así que no es justo ver sólo lo malo de tu pareja.

B. Recuerda las cosas que admirabas de tu pareja y los buenos tiempos que
disfrutaban juntos

C. Las diferencias no son amenazas. Tú tienes lo que al otro le falta y viceversa.

D. Piensa positivamente. Podemos mejorar. No hay peor lucha que la que no se pelea,
en lo que a mejorar nuestras actitudes se refiere.

II. No puedes cambiar al otro pero puedes empezar a cambiar primero TÚ.

A. Tu cónyugue necesita cambiar; pero NO LO HARÁ bajo tu presión y tu insistencia.

B. Piensa qué actitudes y acciones tuyas ayudarán a la actual situación de conflicto y


¡hazlas!

C. Elimina la queja y la crítica de tu vocabulario.


D. Acuérdate de las cosas que molestan a tu cónyugue y evítalas.

III. Perdona a tu cónyugue para liberarte.

A. Mantener el recuerdo vivo de las ofensas sufridas contamina tu mente y tu corazón y


no te permitirá pensar con claridad.

B. Decide perdonar a tu cónyugue por las ofensas, humillaciones, falta de amor, etc.
Perdónale, aunque estés convencido(a) de que no lo merece, incluso aunque no le
veas cambiar. ¡Decide perdonar!

C. Reconoce tus faltas. Sé valiente y pide perdón.

D. Además de decidir perdonar. Decide olvidar; pero no lo hagas en tus propias fuerzas.
Reconoce que necesitas la ayuda de Dios para esto.

IV. Recuerda que al casarte asumiste un compromiso serio.

A. Lucha por mantener tu compromiso, tu palabra. No te rindas ante la dificultad,


cualquiera que sea esta (Salmo 15:1-4).

B. El valor que le das al matrimonio marcará la vida de tus hijos.

C. Mucho de lo que sucede en tu matrimonio también tiene que ver con la manera
cómo enfocaron el matrimonio tus antepasados. Pide a Dios que evite que caigas en
sus errores.

D. Si asumes tu compromiso con Dios, Él no te dejará solo(a) en esto.

V. Dios NO se equivocó al crear el matrimonio.

A. Él conoce tu frustración actual, tu soledad y amargura. Sabe también que aunque


eres débil, deseas cambiar.

B. Él tiene un futuro diferente para ti; por eso te animamos a que conozcas el plan que
tiene para ti y tu familia.

VI. Conclusión

El matrimonio es uno de los diseños de Dios más maravillosos, cuando funciona basado en
sus principios sobre la vida conyugal. La idea de que las personas vivan solas no es de
Dios. Él desea que todos vivan en familia, y especialmente en Su familia; y quiere invitarte
a que aprendas a amar con la fortaleza que sólo Él puede dar. ¿Deseas saber cómo
alcanzar esta bendición?…

IV. Modelo de Invitación para Aceptar al Señor Jesucristo:


Señor Jesús:
Gracias por el amor que me tienes. Gracias porque decidiste morir a causa de
mis pecados en esa cruz. Entiendo que tu sacrificio está vigente hoy y que yo
necesito de Ti. Te abro la puerta de mi vida y de mi corazón, y te reconozco
como mi Señor y Salvador. Sé parte de mi estilo de vida. Guíame, y hazme la
persona que Tú esperas que sea. Gracias porque hoy me regalas una vida llena
de bendición y propósito. Amén.

BOSQUEJO Nº 16
TEMA: CÓMO LOGRAR ENTENDERTE
CON TUS PADRES

Introducción
¿No puedes entenderte con tus padres? ¡Anímate! ¡Es posible hacerlo! Debes entender
que el amor a los padre no es negociable. No debes esforzarte tanto en ser comprendido,
como en comprender. Ama a tus padres como quisieras que un día te amen tus hijos.
Considera estas claves para poder entenderte con tus padres...

I. Ponte en el lugar de tus padres.

A. Son muy diferentes a ti, tal vez limitados, pero te aman.

B. Entiende que ellos mismos no saben cómo tratar contigo.

C. No son perfectos, como tú tampoco lo eres.

D. A pesar de todo, quieren lo mejor para ti.

II. Enfrenta tus sentimientos negativos.

A. ¿Sientes enojo? ¿Sientes amargura? ¿Te sientes avergonzado(a)? ¿Sientes


frustración?

B. Decide perdonar a tus padres por sus faltas y errores; si haces esto experimentarás
un poder liberador en tu interior.

C. Perdónate a ti mismo(a) por tus propias equivocaciones. Aprende a pedir perdón.


D. Oblígate a cambiar pensamientos negativos por positivos. Si sientes que te es
imposible, haz una sencilla oración a Dios pidiéndole sinceramente que te ayude en
esto.

III. No puede cambiar a tus padres por acción directa tuya.

A. Tu crítica, tu queja, tu rebeldía no lograrán nada positivo. Mas bien te resultarán en


perjuicio de tu propia vida y de tu propio futuro.

B. Si tú cambias, ellos cambiarán en respuesta a la razón de tu cambio.

C. Haz una lista de acciones y actitudes que tú SI puedes cambiar (aunque no sientas
el más mínimo deseo de cambiar, pero sabes por tu conciencia que sí debes
cambiar). Ahora, pon manos a la obra, y pídele a Dios que te ayude.

D. No te frustres si no hay cambios en tus primeros intentos. ¡Siembra!

IV. Reconoce que la vida no es fácil.

A. Comparte con tus padres tus planes, amistades, sueños, etc.

B. Hazles notar que su opinión te interesa. Acepta sus consejos, aunque a veces no los
entiendas.

C. Interésate en sus proyectos y actividades.

D. Agradece a Dios porque aún tienes una familia ¿sabes cuántos no la tienen?…

V. Tienes opción. No tienes que enfrentar sólo(a) éste desafío.

A. Dios conoce tus luchas y quiere ayudarte a vencerlas.

B. Él tiene un futuro pleno para ti. Sólo cuando amas, puedes hacer lo que quieras.

VI. Conclusión

La juventud no es una de las etapas más fáciles de la vida. Existe mucha confusión en los
pensamientos y en los sentimientos. Existe una búsqueda tremenda por definir tu identidad.
Dios, por ser quien te creó, quiere que pases de ser Su criatura a ser Su hijo(a). Quiere que
sepas que tiene propósitos especiales para ti, y que al descubrir esos propósitos
descubrirás el significado de tu existencia y el comienzo de los nudos de pensamiento y
sentimiento que estás experimentando ahora. ¿Quieres saber cómo alcanzar esta
bendición?…

IV. Modelo de Invitación para Aceptar al Señor Jesucristo:


Señor Jesús:
Gracias por el amor que me tienes. Gracias porque decidiste morir a causa de
mis pecados en esa cruz. Entiendo que tu sacrificio está vigente hoy y que yo
necesito de Ti. Te abro la puerta de mi vida y de mi corazón, y te reconozco
como mi Señor y Salvador. Sé parte de mi estilo de vida. Guíame, y hazme la
persona que Tú esperas que sea. Gracias porque hoy me regalas una vida llena
de bendición y propósito. Amén.

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