RÉGIMEN PROCESAL - Derecho Procesal Comparado
RÉGIMEN PROCESAL - Derecho Procesal Comparado
RÉGIMEN PROCESAL - Derecho Procesal Comparado
El legislador añade la excepción del fraude de ley a todos los supuestos del precepto,
ya que la norma no se refiere exclusivamente a los últimos.
Las persona jurídicas inimputables, pues en esta se trata exclusivamente sobre las
conocidas como sociedades instrumentales o sociedades pantalla, es decir, aquellas
que operan sin un sustrato material suficiente.
La nacionalización de las personas jurídicas, la conversión a través de la nacionalización
de una persona jurídica privada a publica impide imputar a la sociedad resultante,
convierte en inoperante cualquier mecanismo para luchar contra la criminalidad de las
personas jurídicas. La necesidad de descubrir la verdad no ampara limitar el derecho de
defensa de la persona jurídica.
Resultaría entonces conveniente que no se pudiera citar como testigo al director de
programa de cumplimiento, ante la apuesto de probar la exención de responsabilidad.
En cuanto a su capacidad procesal, es evidente que la persona jurídica debe valerse de
una persona física que actué como su representante. Asimismo los entes sin
personalidad jurídica, también deberán comparecer por medio de un representante.
Sobre la imputación del representante, se considera apropiada la sustitución del
representante de la persona jurídica, imputado como persona física por un conflicto de
intereses defensivos.
CONCLUSIÓN
Resulta necesaria una reforma de manera urgente en lo concerniente al panorama penal
y económico (administrativa), a fin de salvar las dificultades jurídicas, cuando afirmamos
la imperiosa necesidad de ahondar en el concepto la responsabilidad penal de las
personas jurídicas, las mismas que se encuentran inmersas en cuestiones vinculadas
al problema del sujeto y la norma jurídica, lo que nos trae a colación la idea de adecuar
una orientación político criminal a la dogmática penal, pues considerar posible la
responsabilidad penal de las personas jurídicas nada más significa que conceder a los
entes colectivos la idéntica importancia jurídica que la sociedad ya les concedió en un
primer momento desde su creación.