Trabajo en Negro
Trabajo en Negro
Trabajo en Negro
Cómo es un reclamo laboral por empleo en negro o no registrado. Primero, cuándo una relación
laboral está en negro y cuando está correctamente registrada y es legal. La ley argentina apunta a
continuar la relación laboral pero en la práctica esto raramente sucede. Qué pasos debe segir el
trabajador. Actualizado a diciembre de 2017.
Federico lleva ya un par de años trabajando para una empresa que vende cocinas, estufas y
calefones en la Ciudad de Buenos Aires. Está “en negro” porque nunca registraron su contrato de
trabajo ante la AFIP y por eso mismo no le hicieron aportes ni contribuciones. A cambio, le
ofrecieron un sueldo un poquito mayor y el plan de blanquearlo.
Aunque empezó a prueba, Federico leyó y sabía que cuando la relación laboral no está registrada,
la empresa no puede despedirlo sin pagarle, ni siquiera en el período de prueba. Aún le adeudan el
aguinaldo, se quiere ir y tener tiempo para buscar otro empleo.
Si lo blanquean, al menos podría negociar algo, pero ya no quiere seguir en la misma situación.
Además le retacean las vacaciones porque la empresa no toma en cuenta el convenio colectivo que
le da dice días hábiles en lugar de corridos que dice la ley general. Y para colmo, le descontaron del
sueldo el precio de una estufa eléctrica que dos gordos se chorearon del local; sabe que esa política
es ilegal porque el riesgo empresario corre por cuenta de la empresa, pero se la banca igual… ¿O
acaso le participan las ganancias igual que las pérdidas? ¿Le convendrá iniciar un reclamo laboral?
Lo primero que debería saber es que iniciar un reclamo puede aparejar la pérdida del empleo, es un
dilema que suele estar presente… Nos puede gustar o no, pero es la realidad. Por eso, la mayoría de
los reclamos se producen cuando el trabajador tomó la decisión de irse. Para eso, debería consultar
a un profesional y evaluar las chances y alternativas.
Lo primero a ver es si hay o no relación de dependencia laboral. También puede haber casos grises,
pero en general se puede determinar esto sobre la base de una entrevista y si hay o no
subordinación con la empresa o bien, por el contrario, se trata de un trabajador free lance y
autónomo. Aunque esta última modalidad está en aumento por las distintas formas de trabajo, la
mayoría de los casos es una relación de dependencia laboral.
-Libro especial del artículo 52 de la ley 20744 que lleva la empresa y muestra en inspecciones
etcétera.
Entonces, si el trabajador está en dependencia, no vale que esté monotributando, con empresa
interpuesta, con persona interpuesta, con menos antigûedad, con menos sueldo, etcétera. Debe
estar registrado y en blanco, con ART y todo.
Incluso desde el período de prueba, como podés leer en la sentencia de abajo, en que la chica estaba
a prueba pero su relación laboral no estaba registrada. Los jueces dijeron que los efectos del período
de prueba resultan inaplicables si la trabajadora no estaba correctamente registrada, tanto en el
libro del art. 52 LCT, como en el Sistema Único de Registro Laboral.
Así que cuando la despidieron, lo consideraron empleo en negro y la tuvieron que indemnizar.
a) Abogado propio. Primero que nada, el abogado debe ser de confianza, no de la empresa. Ha
pasado que la empresa “designa” un abogado/a al trabajador para firmar un acuerdo laboral, y eso
es un peligro para ambas partes (digo peligro porque puede ir bien, pero hay riesgos). En varios
casos se decretó judicialmente la nulidad del acuerdo ante el SECLO (conciliación previa) porque al
trabajador le habían puesto un abogado.
Una empresa hizo la matufia de que, en la segunda audiencia, el abogado de la empresa se hizo
pasar por otro que laburaba con el abogado del trabajador; al final esto saltó y lo terminaron
sancionando por falta de ética. Aparte, chau acuerdo, todo a fojas cero.
Por eso, como empresario, incluso de buena fe, ni siquiera pensaría en designarle abogado al
laburante: supone un riesgo enorme de que después un juez lo considere nulo, y con razón. Como
el trabajador, en principio, no puede renunciar a sus derechos salvo ante autoridad administrativa
o judicial, todo acuerdo laboral que no represente una “justa composición de derechos e intereses
de las partes” (art.15 de la ley de contrato de trabajo) puede ser declarado inválido por un juez.
Esto también vale para las presiones de renuncia y demás. A veces la empresa dice “renunciá así te
pagamos, agilizamos las cosas“. Es un gran peligro. En varios casos esto se pudo probar; en otras
palabras, el trabajador pudo demostrar que la renuncia encubría un acto de despido, pero no
siempre es tan claro. Un caso ejemplar fue el de la Cámara de San Isidro, que tuvo probado que a
un trabajador lo obligaron a renunciar… Ni siquiera sabía leer ni escribir y fue al correo acompañado
por el jefe seguridad. Al final se probó todo y lo tuvieron que indemnizar. Lo barato…
b) Como la cumbia, “sin falsas promesas”… A veces el abogado/a hace pronósticos que, sumado al
miedo del trabajador despedido o próximo a perder su trabajo, contribuyen a quedarse con el caso.
No es el mejor abogado el que mas promete el mejor sino aquel que actúa con honestidad,
prudencia, astucia y conocimiento de las leyes y de la jurisprudencia, además de dar información
completa. Esto se da también con las inmobiliarias: ha pasado que tasan las propiedades en forma
altísima, para tentar al cliente (firman un compromiso, a veces con exclusividad, y después cuesta
mucho vender o alquilar el inmueble; la estimación debería ser real).
c) Información más información. Cuidado con el abogado/a que ofrece éxito o dinero en forma
inmediata. Una vez, Jorge Rizzo, presidente del Colegio Público de CABA, también dijo, en el
programa de radio, que lo primero que hay desconfiar es del que promete resultados. Es cierto que
hay casos más fáciles que otros, que la prueba ayuda más, pero un juicio representa un grado de
incertidumbre.
El abogado tiene que dar la información completa de las distintas alternativas, las mayores posibles,
y de las chances de éxito de cada una. Digo “chances”, con riesgos, debilidades y fortalezas pero no
necesariamente certezas, salvo casos excepcionales (ejemplo: si se trata de ejecutar una sentencia
ya firme, aunque aún así tiene sus bemoles). Trabajé con un colega en un estudio que me dejó su
definición de mala praxis: pasa, entre otros supuestos, si el abogado no da todas las posibles
alternativas que la ley o la jurisprudencia señalan como herramienta para solucionar un caso.
d) Honorarios, ouch. Se acostumbra cobrar el 20% del monto del juicio o del acuerdo, aunque
algunos abogados reducen sus honorarios al 10% si hay un acuerdo en el SECLO y al 20% si no se
llega a un acuerdo y hay que ir a juicio (ver abajo las etapas. En principio, el abogado no debería
cobrar gastos ni adelantos de honorarios. De hecho, y respecto de los gastos, los poderes (salvo si
se hace ante escribano), telegramas y tasa de actuación judicial son gratuitos. Puede parecer mucho
pero es una gran responsabilidad llevar un caso, y el tiempo que demanda es mucho más que el ir a
la audiencia. El abogado debe ir preparado, saber los antecedentes, conocer la estrategia, etc.
Si se puede, recomendable negociar un convenio de honorarios, por escrito. Esto vale para cualquier
clase de asuntos, porque es equivalente a un presupuesto. Las leyes arancelarias ponen topes de
honorarios pero, para ser honestos, están hechas para defender los honorarios del profesional, es
lógico.
Ahora bien, del lado del cliente, es un derecho tener un contrato de honorarios que deje las cosas
claras de antemano. Incluso se puede pactar un honorario de éxito o extra por ganar el caso, y pactar
según el avance de las distintas etapas (esto es más común en juicios civiles). En laboral, en general,
se paga cuando el trabajador cobra, si esto pasa, al final. Las empresas, en cambio, pueden contratar
a un profesional por el caso o tener algún abono. «¿El cheque, está el cheque?» era la pregunta de
un abogado engominado y algo apurado en ese momento, en un juzgado laboral donde me tocó
trabajar…. En lo posible, que el poder no incluya poder para percibir. Y ante cualquier duda,
consultar al colegio público de la zona.
d) Decir la verdad y respetar los intereses del cliente. Finalmente y en realidad esto debería ir
primero, hay que ver y conocer los intereses del cliente. Alguna persona puede estar más interesada
en conservar el laburo antes que pelear por algo que, incluso con razón, puede perjudicar su carrera
profesional. Esto es un hecho, puede gustar o no pero pasa. La mayor flexibilidad no se da por las
leyes sino por el factor desempleo. En otros casos, la persona puede preferir litigar y reclamar lo
que por ley corresponde. Si este es el caso, a continuación se explican las etapas.
-Despido directo:
cuando el empleador despide al trabajador , este despido puede ser o no con causa. Si el despido es
incausado, y salvo algún caso especial como puede ser el de un delegado gremial o la trabajadora
embarazada, el trabajador tiene derecho al cobro de una indemnizacion. En general se le notifica al
trabajador de su despido por carta documento, telegrama o acta notarial.
Si el despido no se instrumenta por algunos de esos medios, en principio, el despido no vale y debe
aclararse la situación laboral. En otras palabras, la frase “no vengas más” no vale en la medida en
que no se instrumente por escrito. Por eso, ante ese hecho o si niegan el ingreso a planta o al local,
contactar un/a abogado/a urgente porque debe reclamarse o el trabajador puede perder derechos
por abandonar el trabajo… Es una táctica que a veces usan. Técnicamente se llama “negativa de
tareas“.
-Despido indirecto:
este tipo de despido se da cuando la empresa incumple sus obligaciones, como por ejemplo sel
trabajo en negro. El trabajo en negro , según ley 24013 puede darse de tres formas. 1) la relación
laboral no se encuentra registrada, que incluye ciertos casos de monotributo (si factura como
empresa y lo es, en la realidad, vale, pero se usa mucho como fraude); 2) La relación laboral se
encuentra indebidamente registrada en cuanto al salario (parte en blanco y parte en negro), lo cual
también tiene impacto en aportes y contribuciones; 3) La relación laboral se encuentra
indebidamente registrada en cuanto a la fecha de ingreso.
Aclaración: si el trabajador a prueba no está en blanco, la empresa no puede prevalerse del beneficio
de despedirlo sin indemnización. #LaPruebaDeLaBlancura Por eso, es importante blanquearlo desde
el momento cero.
La intimación de la ley 24013 (ver texto abajo) es importante porque dispara multas a favor del
trabajador (gracias por la aclaración, @negrowernicke). Tanto si la relación no está registrada por
completo, negrura total, como si lo está parcialmente (el caso clásico es registrar menos horas o
sueldo, o mentir la fecha de ingreso) . Junto con ello se cursa copia del telegrama que describo abajo
a la AFIP, y podrían duplicarse indemnizaciones si el trabajador se ve forzado a iniciar las acciones
judiciales (ver ley 25323 abajo), incentivo de la empresa para arreglar en el SECLO…
En estos casos, Federico empieza por remitir un telegrama a su empleador intimándolo para que
regularice su situación laboral bajo apercibimiento de considerarse despedido. Puede pasar que la
empresa lo acepte, pero no es lo común. Si el empleador se niega o no contesta el telegrama,
entonces el trabajador envía otro telegrama haciendo efectivo el apercibimiento contemplado en
la carta anterior, y se considera despedido por culpa de la empresa (a esto se lo llama “despido
indirecto”).
Ha pasado que el trabajador sufre un accidente yendo o volviendo del laburo, en el trabajo (ej. se
cae de un andamio) o enfermedad profesional (ej. lumbaliga, tunel carpiano, etc.) pero la empresa
desconoce la relación laboral. En ese caso, debe igual hacer la denuncia ante la ART y el vínculo de
trabajo se dirime en un procedimiento especial. Es importante ir a un abogado/a para asesorarse y
redactar las intimaciones (telegramas, etc.).
b) SECLO
Qué hace este organismo se explica por la sigla SECLO: Servicio de Conciliación Laboral Obligatoria.
A fin de reducir la litigiosidad y descomprimir los juzgados abarrotados se instauró un procedimiento
previo a toda contienda judicial para que los trabajadores y empleadores puedan juntarse dirimir
sus diferencias. Cada parte con su abogado/a, como decía arriba, y aparte un mediador del
Ministerio.
Luego de realizar el tramite de sorteo para obtener la fecha y hora de la audiencia. Una vez
agendada, las partes concurren a la oficina del conciliador (pueden ser varias audiencias). En ese
marco puede o no arribarse a un acuerdo:
si se llega a un acuerdo se hace un convenio y se fija una fecha de pago. El convenio firmado y
homologado es como una sentencia firme y debe cumplirse (salvo que haya habido alguna matufia,
como la que contaba).
Si no se llega a un acuerdo: queda habilitada la vida para hacer el juicio, que es la etapa siguiente.
c) Juicio laboral
El abogado debe informar, cada una de las etapas, cómo va la marcha del juicio. Es un derecho
saberlo e incluso ir a verlo personalmente. Siendo parte, a Federico solo le hace falta llevar su DNI
y la dirección del juzgado. La empresa puede designar un apoderado o ir el representante legal.
Preguntarle al abogado esos datos y los de la causa, para que la gente de mesa de entradas pueda
ubicar fácil el expediente. [Excurso: En la cultura judicial argentina casi todo es por escrito y debe
estar en el expediente, o no se considera. La antropóloga Leticia Barrera se dedicó a estudiar esto.]
Primera instancia
El juicio comienza con la interposición de una demanda donde se describen los hechos , derecho y
la prueba con la que se intenta valer la parte. Luego de esto el juzgado corre traslado de la demanda
al empleador para que este pueda contestarla y defenderse.
Esto puede tomar un tiempo, porque a veces hay empresas que dicen no vivir allí o idean artimañas
para no ser notificadas. A la corta ganan tiempo pero a la larga pagan más intereses que no son
baratos. En el juzgado donde estaba se perdía bastante tiempo hasta que el Registro Electoral, la
PFA, el Registro de las Personas o la IGJ contestaran los oficios, que es donde consta el domicilio
posta de una persona o sociedad.
– El empleador contesta demanda y ofrece prueba.
El juzgado manda la contestación y el trabajador tiene 3 días para expedirse sobre la documentación
ofrecida en la contestación de demanda y ofrecer mas pruebas.
Luego el juez llama a una audiencia para que las partes traten de llegar a un acuerdo; si hay acuerdo
se firma ahí mismo; si no, se abre la causa a prueba.
Se fijan audiencias para que declaren los testigos y se produce la prueba. Los testigos deben ir y
decir la verdad. Si hay testigos falsos, es un deber del juez enviar copias a la justicia penal para
investigar la posible comisión del delito de falso testimonio. Ha pasado. Ojo que los testigos se
suelen ofrecer al principio: suele pasar que el abogado le pregunte a Federico qué personas conocen
del tema, ejemplo el encargado, el pibe de seguridad, para declarar. Hay dando vueltas un proyecto
de ley para que la empresa no tome represalias contra los testigos… Aunque esa ley no está, en
este caso la empresa tuvo que anular el despido de un testigo por haber sido tomado como
represalia. Una de las habilidades del abogado/a, igual que del periodista, es saber repreguntar al
testigo, buscar contradicciones. El objetivo del juicio es esclarecer los hechos para que el juez los
encuadre en el derecho aplicable. Según el derecho argentino, la ley procesal, vale un solo testigo,
pero claro que no es lo recomendable ni lo usual. Tampoco presentar una fila de testigos, es un
equilibrio.
A veces, más seguido de lo que debería ser, el abogado infla los montos, lo que puede perjudicar al
trabajador. En algún caso hasta se llamó la atención al abogado por esto pero se usa como
estrategia.
Cuando la sentencia se apela, que es lo usual, el tiempo aproximado que tarda un juicio es de 2
años y medio aunque depende mucho según la prueba, las notificaciones y actos que, en principio,
impulsa el juzgado. La justicia laboral tiene, hoy, un volumen grande de trabajo. Si es en provincia,
los paros pueden extender los plazos y además este procedimiento es ligeramente distinto (por
ejemplo, en la PBA hay un tribunal oral y demás). Después de la sentencia viene la etapa de
liquidación (para calcular los montos a pagar que decidió la sentencia, puede intervenir un perito, y
la etapa de pago, que es la emisión de cheques).
El artículo 20 de la ley de Impuesto a las Ganancias exime: “i) Los intereses reconocidos en sede
judicial o administrativa como accesorios de créditos laborales. Las indemnizaciones por antigüedad
en los casos de despidos y las que se reciban en forma de capital o renta por causas de muerte o
incapacidad producida por accidente o enfermedad, ya sea que los pagos se efectúen en virtud de
lo que determinan las leyes civiles y especiales de previsión social o como consecuencia de un
contrato de seguro.” Es decir, como regla general, las indemnizaciones laborales no pagan
ganancias.
El problema se dio cuando se empezaron a pagr extras o conceptos que podrían no encuadrar
estrictamente como indemnizaciones. Veamos.
Básicamente, la indemnización es un mes de sueldo por año trabajado o fracción mayor a tres
meses. Aparte hay un plazo de preaviso, que si se omite se paga igual. A eso hay que agregarle el
aguinaldo o sueldo anual complementario proporcional y demás conceptos que integran la
liquidación y que debe ser revisada, porque varía según el convenio colectivo.
Como la ley pone topes para la indemnización y la Corte los declaró inconstitucionales en ciertos
supuestos (caso “Vizzotti”), se discute si el extra que se paga es indemnización. Lo mismo pasa con
los bonus o extras por retiro voluntario. Y con la indemnización adicional por embarazo (la mujer
debe notificar por telegrama, para tener protección legal, igual el delegado) y así con varios
supuestos. Aunque hay que evaluar cada caso, en general, estos rubros no pagan el Impuesto a las
Ganancias. Sucede que como la empresa es agente de retención en general adopta la postura más
conservadora y retiene… porque si no lo hace es responsable ante la AFIP. Y suele suceder que la
empresa prefiera discutir con el empleado antes que con el inspector de la AFIP.
Hace unos meses, la Corte dictó sentencia en la causa “Negri, Fernando Horacio c/ EN – AFIP DGI”
en la cual decidió que la gratificación que se le paga al trabajador por cese no debe pagar el impuesto
a las ganancias, incluso en este caso en que los montos se pagaron de mutuo acuerdo. Así, tampoco
pagarían las sumas que excedan la indemnización vigente, hasta los topes del caso “Vizzoti”. Y
también posibilita al trabajador que se le retuvo de más repetir contra la AFIP.
Además, de la AFIP, la empresa puede ser responsable. En algún caso, el trabajador demandó a la
empresa porque le habían retenido de más de un convenio y al final tuvieron que pagarle los
intereses y resarcirlo. Igual, al ser un convenio es más facil predecirlo porque del propio texto se
puede pactar el tratamiento con la empresa y quién se hace cargo si llega a existir una diferencia.
Para leer más sobre las retenciones en caso de gratificaciones por cese o acuerdos voluntarios, ver
esta nota.
Finalmente, creo que es importante reforzar las inspecciones de trabajo para cumplir con la
normativa de seguridad e higiene, y chequear horarios (por ejemplo, la pausa entre jornada y
jornada debe ser igual o mayor a las 12 horas) así como la privacidad que a veces no se respeta con
micrófonos escondidos y demás. Es que, muchas veces, estos derechos, por no querer generar un
conflicto, no se reclaman, pero son igualmente importantes para un buen desarrollo de la relación
laboral.
Según informó Mariano Martín, periodista de Ámbito Financiero, «la Sala V de la Cámara laboral
negó la homologación de un entendimiento judicial por el cese del vínculo que, a criterio de los
magistrados, excedía “notablemente el importe” de una indemnización por antigüedad. En esa
línea, interpretaron que “la homologación afectaría los derechos del organismo público tributario,
tercero ajeno al convenio amparado por normas de orden público“».
El voto mayoritario entendió que la «imputación del monto total transado a la indemnización por
antigüedad excede notablemente el importe por el cual prosperarían esos reclamos en el marco
descripto precedentemente” y que en caso de ser homologado “afectaría los derechos del
organismo público tributario».
En cambio, en disidencia, el juez Enrique Arias Gibert dijo que la indemnización calculada era un
acuerdo de partes destinado a poner fin al conflicto por desvinculación y que no corresponde a la
Justicia impedirlo. «En lugar de eso, Arias Gibert propuso comunicar el acuerdo a la AFIP para que
fuese el organismo el que eventualmente hiciera el reclamo correspondiente por impuestos
impagos.» Link a la nota.
La AFIP actualizó la resolución sobre el procedimiento en caso de empleo en negro, desde el punto
de vista de la seguridad social. Como un trabajador no registrado supone el no pago de aportes y
contribuciones, la AFIP también interviene desde que el juez le avisa de la sentencia o incluso antes,
en el SECLO. Esta es otra contigencia para la empresa en caso de contratar a alguien y no registrarlo;
a la larga puede salir más caro.
SEGURIDAD SOCIAL
VISTO el Artículo 132 de la Ley N° 18.345 y sus modificaciones, el Artículo 15 de la Ley N° 20.744,
texto ordenado en 1976 y sus modificaciones, y el Artículo 17 de la Ley N° 24.013, y CONSIDERANDO:
Que conforme las disposiciones de las Leyes N° 18.345, N° 20.744 y N° 24.013, los Juzgados laborales
deben comunicar a esta Administración Federal las sentencias firmes, pasadas en autoridad de cosa
juzgada, en las que se determina una relación laboral —total o parcialmente— no registrada, o las
sentencias homologatorias de acuerdos conciliatorios referidos a ese tipo de relaciones laborales.
Que a los fines de facilitar la tarea de los tribunales competentes, este Organismo ha desarrollado
e implementado el sistema denominado “SEAH – Sistema Sentencias y Acuerdos Homologados en
Juicios Laborales” que permite la remisión y recepción de la información por vía electrónica. Que
esta Administración Federal, en cumplimiento de su función específica, debe intimar el pago de los
aportes y/o contribuciones omitidos, emergentes de las mencionadas relaciones laborales. Que
existen dos situaciones claramente diferenciadas a las cuales correspondería otorgarles
tratamientos distintos, según la información que se recibe y los elementos que han quedado
definidos en la causa. Que en los casos en que la justicia remite los datos referidos a la identificación
del empleado y del empleador, el reconocimiento de la relación laboral, el período trabajado y la
remuneración correspondiente al período laborado, se cuenta con la totalidad de los elementos
constitutivos del hecho imponible, pasados en autoridad de cosa juzgada en cuanto a la materialidad
de esos hechos, por lo que sólo resta la liquidación e intimación de los aportes y/o contribuciones
omitidos. Que en el supuesto indicado en el considerando anterior, no resulta necesaria la
determinación de oficio dado que tales hechos ya se encuentran probados, razón por la cual la
intimación sólo será susceptible de la vía recursiva establecida por el Artículo 74 del Decreto N°
1.397 de fecha 12 de junio de 1979 y sus modificatorios. Que, en cambio, cuando de la información
brindada por el tribunal no se cuente con la totalidad de los aludidos datos, como es el caso de la
remuneración correspondiente al período laborado por haberse determinado solamente aquella
para el cálculo de las indemnizaciones laborales, es menester efectuar la determinación de oficio en
los términos del Artículo 2° de la Ley N° 26.063 y del Artículo 11 de la Ley N° 18.820, en su caso,
proyectando la remuneración conocida o utilizando la presunción prevista en el inciso d) del Artículo
5° de la ley mencionada en primer término. Que en ese supuesto, el procedimiento previsto en la
Ley N° 18.820, quedaría circunscripto a la discusión del único hecho susceptible de ser impugnado
y probado, que es el monto de la remuneración real correspondiente al período en cuestión. Que
cuando se comuniquen sentencias homologatorias de acuerdos conciliatorios, en los que no se
hayan efectuado reconocimientos de hechos ni derechos dado el carácter indiciario de los mismos,
esta Administración Federal cargará la información dentro de sus planes generales de fiscalización,
aplicando, en su caso, los procedimientos corrientes. Que asimismo, se estima conveniente disponer
procedimientos especiales aplicables a los casos en que de las informaciones obrantes en este
Organismo surja que mediante la falsa declaración o adulteración de datos respecto de los
empleados o del empleador, el contribuyente o responsable, en su declaración jurada determinativa
invoque un beneficio de reducción en las alícuotas de aportes y/o contribuciones, diferenciando los
supuestos en que tal anomalía sea detectada por primera vez, respecto de un empleador, de
aquellos en los que éste reincide en dicha conducta. Que asimismo corresponde establecer, en el
marco de las intimaciones susceptibles de ser recurridas en los términos del Artículo 74 del Decreto
N° 1.397 de fecha 12 de junio de 1979 y sus modificatorios que por la presente se determinan, las
infracciones previstas por la Ley N° 17.250 y sus modificaciones que resultarán aplicables, fijando
las sanciones correspondientes y su reducción en caso de regularización, de conformidad con las
previsiones de la Resolución General N° 1.566, texto sustituido en 2010 y sus modificatorias. Que
han tomado la intervención que les compete la Dirección de Legislación y las Subdirecciones
Generales de Asuntos Jurídicos, de Fiscalización, de Recaudación, de Coordinación Operativa de los
Recursos de la Seguridad Social y de Técnico Legal de los Recursos de la Seguridad Social y la
Dirección General de los Recursos de la Seguridad Social. Que la presente se dicta en ejercicio de las
facultades conferidas por el Artículo 7° del Decreto N° 618, del 10 de julio de 1997, sus
modificatorios y sus complementarios. Por ello,
TÍTULO I
Artículo 1° — A los fines de la liquidación o determinación de oficio e intimación de los aportes y/o
contribuciones omitidos con destino al Sistema Único de la Seguridad Social (SUSS), emergentes de
relaciones laborales —total o parcialmente— no registradas, cuya existencia haya sido determinada
por sentencia laboral firme o ejecutoriada o por acuerdo conciliatorio homologado, comunicados a
esta Administración Federal por el Juzgado interviniente, mediante el “SEAH – Sistema Sentencias y
Acuerdos Homologados en Juicios Laborales”, en virtud de lo normado por el Artículo 132 de la Ley
N° 18.345 y sus modificaciones, el Artículo 15 de la Ley N° 20.744 y sus modificaciones y el Artículo
17 de la Ley N° 24.013, deberán observarse las disposiciones del presente Título.
CAPÍTULO I
Art. 2° — En los casos en que el Juzgado interviniente comunique a esta Administración Federal una
sentencia laboral firme o ejecutoriada o un acuerdo conciliatorio homologado, en el que consten la
totalidad de los elementos constitutivos del hecho y la base imponible de los aportes y
contribuciones de la seguridad social, si el empleador no hubiese presentado la o las declaraciones
juradas determinativas —originales o rectificativas—, consignando los mencionados aportes y
contribuciones omitidos por la relación objeto del juicio laboral, se procederá a liquidar e intimar
los aportes y/o contribuciones adeudados, así como los accesorios que pudieren corresponder, de
acuerdo con el procedimiento que se establece en el presente Capítulo.
Art. 3° — Los elementos emergentes de la sentencia comunicada, que den lugar al procedimiento
que se establece en este Capítulo, son los que se indican a continuación: a) Hecho imponible: La
relación laboral mantenida entre el actor y el demandado, con la identificación del trabajador y del
empleador, el tipo de contrato laboral y el período trabajado. b) Base imponible: La remuneración
devengada correspondiente a todo el período de la relación laboral.
Art. 4° — La alícuota de las contribuciones patronales omitidas, de acuerdo con lo normado por el
Decreto N° 814 del 20 de Junio de 2001, será la que haya declarado correctamente el empleador de
encontrarse inscripto ante esta Administración Federal o la que surja de los datos que posea este
Organismo que permitan su determinación. En el supuesto que no pudiera determinarse la alícuota
aplicable, se estará a la prevista en el inciso b) del Artículo 2° del mencionado decreto.
Art. 5° — Tomando como base los elementos descriptos en los Artículos 3° y 4°, esta Administración
Federal procederá a liquidar los aportes y/o contribuciones omitidos por todo el período de la
relación laboral objeto del litigio, con más los intereses resarcitorios previstos en el Artículo 37 de
la Ley N° 11.683, texto ordenado en 1998 y sus modificaciones, aplicará las sanciones que
correspondan de acuerdo con lo normado por el Artículo 16 de la presente, e intimará al
contribuyente la presentación de las declaraciones juradas —originales o rectificativas, según
corresponda— y el ingreso del importe resultante, dentro del plazo de QUINCE (15) días hábiles
administrativos.
CAPÍTULO II
Art. 8° — En los supuestos en que la comunicación formulada por el Juzgado interviniente careciera
de alguno de los datos indicados en el Artículo 3°, se procederá a la determinación de oficio de los
aportes y/o contribuciones omitidos, en los términos del Artículo 2° de la Ley N° 26.063 y del Artículo
11 de la Ley N° 18.820, a cuyo efecto regirá exclusivamente el procedimiento que se detalla en el
Anexo que se aprueba y forma parte de la presente, aplicando las sanciones que correspondan de
acuerdo con lo normado por la Resolución General N° 1.566, texto sustituido en 2010 y sus
modificatorias y, en su caso, las reducciones que correspondan atendiendo las particularidades de
este procedimiento.
Art. 9° — A los fines indicados en el artículo precedente, para la determinación de oficio se tendrá
en cuenta lo siguiente: a) El período de la relación laboral será el informado por el Tribunal. b) La
remuneración imponible se estimará proyectando la que hubiera sido tenida en cuenta por el
Juzgado para liquidar las indemnizaciones laborales o las remuneraciones básicas de convenio, en
los términos del inciso d) del Artículo 5° de la Ley N° 26.063, o el Salario Mínimo Vital y Móvil
(SMVM), el que sea mayor. c) La alícuota de las contribuciones patronales aplicable se determinará
de acuerdo con lo indicado en el Artículo 4°.
Art. 10. — Cuando el Tribunal laboral interviniente comunicara a esta Administración Federal la
homologación de un acuerdo conciliatorio —liberatorio o transaccional— sin reconocer hechos ni
derechos, se tendrá en cuenta su carácter indiciario y se cargará la información dentro de los planes
generales de fiscalización del Organismo, aplicando, en su caso, los procedimientos generales
vigentes.
TÍTULO II
Art. 11. — En los casos en que de las constancias obrantes en este Organismo surja que mediante la
falsa declaración o adulteración de datos respecto de los empleados o del empleador, un
contribuyente o responsable, en su declaración jurada determinativa de los recursos de la seguridad
social, haya invocado un beneficio de reducción en las alícuotas de aportes y/o contribuciones, se
procederá a la determinación de oficio de los aportes y/o contribuciones omitidos, en los términos
del Artículo 2° de la Ley N° 26.063 y del Artículo 11 de la Ley N° 18.820, y a la aplicación de las
sanciones que correspondan de acuerdo con lo normado por la Resolución General N° 1.566, texto
sustituido en 2010 y sus modificatorias, a cuyo efecto regirá exclusivamente el procedimiento que
se detalla en el Anexo de la presente.
Art. 13. — Cuando con posterioridad a que una liquidación realizada de acuerdo con lo indicado en
el artículo anterior hubiere quedado firme, se detecte que el empleador, por períodos posteriores,
ha continuado usufructuando en forma indebida el mismo beneficio —que fuera objeto de la
mencionada liquidación, existiendo identidad de sujeto, objeto y causa— esta Administración
Federal procederá a liquidar las diferencias resultantes, con más los intereses resarcitorios previstos
en el Artículo 37 de la Ley N° 11.683, texto ordenado en 1998 y sus modificaciones, aplicará las
sanciones que correspondan de acuerdo con lo normado por el Artículo 16 de la presente, e intimará
al contribuyente la presentación de las declaraciones juradas rectificativas y el ingreso del importe
resultante, dentro del plazo de QUINCE (15) días hábiles administrativos.
Art. 14. — Contra la liquidación referida en el artículo precedente el contribuyente podrá interponer
el recurso de apelación previsto en el Artículo 74 del Decreto N° 1.397/79 y sus modificatorios.
Art. 15. — En caso de incumplimiento a la intimación cursada respecto a la presentación de la
respectiva declaración jurada, una vez consentida la liquidación o, en su caso, dictada la resolución
rechazando la apelación, se procederá a suplir de oficio la obligación omitida, emitiéndose, de
corresponder, la boleta de deuda por el saldo deudor a los efectos previstos en el Artículo 92 y
siguientes de la Ley N° 11.683, texto ordenado en 1998 y sus modificaciones.
TÍTULO III
Art. 16. — Serán de aplicación para los supuestos contemplados en los Artículos 5° y 13 de la
presente las infracciones previstas en la Ley N° 17.250 y sus modificaciones y las sanciones y
reducciones fijadas por la Resolución General N° 1.566, texto sustituido en 2010 y sus modificatorias
que, para cada caso, a continuación se detallan: a) Intimación prevista en el Artículo 5°: 1. Infracción
contemplada en el Artículo 15, punto 1, inciso a) de la Ley N° 17.250 y sus modificaciones, anta la
falta de inscripción por parte del empleador —cuando así corresponda—: Multa fijada en el primer
párrafo del Artículo 4° de la Resolución General N° 1.566, texto sustituido en 2010 y sus
modificatorias. Sólo a los fines de la presente, y sin perjuicio de lo establecido por la norma remitida
sobre el particular, se entenderá por momento de constatación la oportunidad en que la sentencia
o el acuerdo homologatorio, fundamento de la intimación, le sea comunicado por el Juzgado
interviniente a esta Administración Federal. Si el contribuyente se inscribe ante esta Administración
Federal: 1.1 Con posterioridad a la fecha en que comenzó a tener carácter de empleador, pero antes
de la notificación de la intimación de la deuda liquidada, la multa se reducirá a un quinto de su valor.
1.2. Dentro del plazo de QUINCE (15) días hábiles administrativos desde la notificación de la
intimación cursada, la multa se reducirá a un tercio de su valor. 2. Infracción contemplada en el
Artículo 15, punto 1, inciso b) de la Ley N° 17.250 y sus modificaciones, por falta de denuncia de los
trabajadores en la declaración jurada determinativa de aportes y contribuciones y/o
Incumplimiento a la retención de aportes sobre el total que corresponda: Multa fijada en el primer
párrafo, o en su caso, en el segundo párrafo del Artículo 5° de la Resolución General N° 1.566, texto
sustituido en 2010 y sus modificatorias. Sólo a los fines de la presente, y sin perjuicio de lo
establecido por la norma remitida sobre el particular, se entenderá por momento de constatación
la oportunidad en que la sentencia o el acuerdo homologatorio, fundamento de la intimación, le sea
comunicado por el Juzgado interviniente a esta Administración Federal. Si el contribuyente
regulariza su situación: 2.1. Con anterioridad a la notificación de la intimación de la deuda liquidada:
la multa se reducirá a la prevista en el Capítulo D del Título I de la Resolución General N° 1.566, texto
sustituido en 2010 y sus modificatorias, de acuerdo, con el lapso de mora incurrido, sin la reducción
allí prevista. Sí en el mismo plazo se ingresan los aportes y/o contribuciones respectivos, el monto
de la multa se reducirá a la mitad de su valor. 2.2. Dentro del plazo de QUINCE (15) días hábiles
administrativos desde la notificación de la intimación cursada: las multas indicadas en cada caso, se
reducirán al TREINTA Y CINCO POR CIENTO (35%) del monto de los aportes y/o contribuciones
liquidados en dicho instrumento. Sin perjuicio de lo dispuesto, resultarán asimismo de aplicación las
sanciones previstas en el Artículo sin número agregado a continuación del Artículo 40 de la Ley N°
11.683, texto ordenado en 1998 y sus modificaciones, las que serán impuestas de acuerdo al
procedimiento previsto por la citada Ley y de conformidad con lo dispuesto por el Capítulo K de la
Resolución General N° 1.566, texto sustituido en 2010 y sus modificatorias. b) Intimación prevista
en el Artículo 13: 1. Infracción contemplada en el Artículo 15, punto 1, inciso e) de la Ley N° 17.250
y sus modificaciones por falsa declaración o adulteración de datos respecto de los empleados o del
empleador, mediante la cual se invoque un beneficio de reducción en las alícuotas de aportes y/o
contribuciones: Multa fijada en el primer párrafo del Artículo 16 de la Resolución General N° 1.566,
texto sustituido en 2010 y sus modificatorias, conforme la base de cálculo, el mínimo y el máximo
de la sanción que la citada disposición determina. Si el empleador rectifica su declaración de
acuerdo con lo determinado por esta Administración Federal dentro del plazo de QUINCE (15) días
hábiles administrativos desde la notificación de la intimación cursada, la multa se reducirá a un
tercio de su valor.
TÍTULO IV
DISPOSICIONES GENERALES
Art. 17. — Las disposiciones de esta resolución general entrarán en vigencia a partir del primer día
hábil del segundo mes siguiente al de su publicación en el Boletín Oficial y serán de aplicación a las
liquidaciones o determinaciones de oficio e intimaciones de aportes y/o contribuciones, que se
notifiquen a partir de dicha vigencia.
Art. 18. — Regístrese, publíquese, dése a la Dirección Nacional del Registro Oficial y archívese. —
Ricardo Echegaray.
Capítulo 1
Empleo no registrado
Las relaciones laborales que no cumplieren con los requisitos fijados en los incisos precedentes se
considerarán no registradas.
ARTICULO 8° — El empleador que no registrare una relación laboral abonará al trabajador afectado
una indemnización equivalente a una cuarta parte de las remuneraciones devengadas desde el
comienzo de la vinculación, computadas a valores reajustados de acuerdo a la normativa vigente.
En ningún caso esta indemnización podrá ser inferior a tres veces el importe mensual del salario que
resulte de la aplicación del artículo 245 de la Ley de Contrato de Trabajo (t.o. 1976).
ARTICULO 11. — Las indemnizaciones previstas en los artículos 8°, 9° y 10 procederán cuando el
trabajador o la asociación sindical que lo representen cumplimente en forma fehaciente las
siguientes acciones:
a. intime al empleador a fin de que proceda a la inscripción, establezca la fecha real de ingreso o el
verdadero monto de las remuneraciones, y b. proceda de inmediato y, en todo caso, no después de
las 24 horas hábiles siguientes, a remitir a la Administración Federal de Ingresos Públicos copia del
requerimiento previsto en el inciso anterior.
Con la intimación el trabajador deberá indicar la real fecha de ingreso y las circunstancias verídicas
que permitan calificar a la inscripción como defectuosa. Si el empleador contestare y diere total
cumplimiento a la intimación dentro del plazo de los treinta días, quedará eximido del pago de las
indemnizaciones antes indicadas.
A los efectos de lo dispuesto en los artículos 8°, 9° y 10 de esta ley, solo se computarán
remuneraciones devengadas hasta los dos años anteriores a la fecha de su entrada en vigencia.
El empleador que, dentro del mismo plazo, rectificare la falsa fecha de ingreso o consignare el
verdadero monto de la remuneración de una relación laboral establecida con anterioridad a la
vigencia de esta ley y comunicare simultánea y fehacientemente al trabajador esta circunstancia,
quedará eximido del pago de los aportes, contribuciones, multas y recargos adeudados hasta la
fecha de esa vigencia, derivados del registro insuficiente o tardío.
A los fines previsionales, las relaciones laborales registradas según lo dispuesto en este artículo:
ARTICULO 13. — En los casos previstos en el artículo anterior el empleador quedará eximido del
pago de las indemnizaciones que correspondieren por aplicación de los artículos 8, 9 y 10 de la
presente ley.
ARTICULO 15. — Si el empleador despidiere sin causa justificada al trabajador dentro de los dos años
desde que se le hubiere cursado de modo justificado la intimación prevista en el artículo 11, el
trabajador despedido tendrá derecho a percibir el doble de las indemnizaciones que le hubieren
correspondido como consecuencia del despido. Si el empleador otorgare efectivamente el preaviso,
su plazo también se duplicará.
La duplicación de las indemnizaciones tendrá igualmente lugar cuando fuere el trabajador el que
hiciere denuncia del contrato de trabajo fundado en justa causa, salvo que la causa invocada no
tuviera vinculación con las previstas en los artículos 8, 9 y 10, y que el empleador acreditare de
modo fehaciente que su conducta no ha tenido por objeto inducir al trabajador a colocarse en
situación de despido.
ARTICULO 16. — Cuando las características de la relación existente entre las partes pudieran haber
generado en el empleador una razonable duda acerca de la aplicación de la Ley de Contrato de
Trabajo (t.o. 1976), el juez o tribunal podrá reducir la indemnización prevista en el artículo 8, hasta
una suma no inferior a dos veces el importe mensual del salario que resulte de la aplicación del
artículo 245 de la Ley de Contrato de Trabajo (t.o. 1976).
Con igual fundamento los jueces podrán reducir el monto de la indemnización establecida en el
artículo anterior hasta la eliminación de la duplicación allí prevista.
ARTICULO 17. — Será nulo y sin ningún valor todo pago por los conceptos indicados en los artículos
8, 9 y 10 que no se realizare ante la autoridad administrativa o judicial.
Dentro de los 10 días hábiles siguientes a la fecha en que quede firme la resolución que reconozca
el derecho a percibir dichas indemnizaciones o de la resolución homologatoria del acuerdo
conciliatorio o transaccional que versare sobre ellas, la autoridad administrativa o judicial, según el
caso, deberá poner en conocimiento del Sistema Unico de Registro Laboral o, hasta su efectivo
funcionamiento, del Instituto Nacional de Previsión Social, Caja de asignaciones y subsidios
familiares y obras sociales, las siguientes circunstancias:
Constituirá falta grave del funcionario actuante si éste no cursare la comunicación referida en el
plazo establecido.
Establécese que las indemnizaciones previstas por la Ley N° 20.744 (texto ordenado en 1976) o las
que en el futuro las reemplacen, serán incrementadas al doble cuando se trate de una relación
laboral no registrada o que lo esté de modo deficiente.
El Senado y Cámara de Diputados de la Nación Argentina reunidos en Congreso, etc. sancionan con
fuerza de Ley:
ARTICULO 1° — Las indemnizaciones previstas por las Leyes 20.744 (texto ordenado en 1976),
artículo 245 y 25.013, artículo 7°, o las que en el futuro las reemplacen, serán incrementadas al
doble cuando se trate de una relación laboral que al momento del despido no esté registrada o lo
esté de modo deficiente.
Para las relaciones iniciadas con anterioridad a la entrada en vigencia de la presente ley, los
empleadores gozarán de un plazo de treinta días contados a partir de dicha oportunidad para
regularizar la situación de sus trabajadores, vencido el cual le será de plena aplicación el incremento
dispuesto en el párrafo anterior.
Sala/Juzgado: I
Fecha: 29-oct-2015
Y VISTOS:
En acuerdo estos autos caratulados: “MMM PAMELA DEL CARMEN C/ CCC.A. Y OTRO S/ DESPIDO
POR OTRAS CAUSALES” (EXP Nº 390343/2009) venidos en apelación del JUZGADO DE PRIMERA
INSTANCIA EN LO LABORAL NRO. 2 a esta Sala I integrada por los Dres. Cecilia PAMPHILE y Jorge
PASCUARELLI, con la presencia de la Secretaria actuante, Dra. Mónica MORALEJO, y de acuerdo al
orden de votación sorteado, la Dra. Cecilia PAMPHILE dijo:
1.- La sentencia de primera instancia condena a las accionadas a abonar a la actora la indemnización
prevista en el art. 182 de la LCT, con más intereses y les impone las costas del juicio.
Esta decisión es apelada por ambas demandadas, quienes expresan agravios en hojas 211/214 vta.
en idénticos términos.
Sostienen que, teniendo en cuenta la fecha de ingreso y egreso de la trabajadora, no hay dudas que
el distracto se produjo durante el período de prueba.
Indican que el mero hecho de que los libros contables se hubiesen rubricado fuera de término, no
determina que la actora no haya estado registrada.
Agregan que en ningún momento la ley impone una registración especial durante los primeros tres
meses, sino que debe registrarse el contrato como cualquier otro de tiempo indeterminado: debe
realizarse en el libro del art. 52 y en el sistema único de registro laboral, lo cual significa que debe
estar inscripto ante la AFIP y la obra social correspondiente, lo cual ha quedado acreditado en autos.
Se agravian porque, a raíz de que el juez entiende que se trata de un empleo no registrado, las privó
de las prerrogativas que otorga la LCT a los contratos de trabajo durante los primeros tres meses de
vigencia.
Esgrimen que dado que la relación laboral estaba transitando por el período de prueba, la actora no
estaba amparada por la protección legal alegada en la demanda.Insisten que aunque el empleador
haya extinguido la relación laboral inmediatamente de saber que la trabajadora está embarazada
durante el período de prueba, no afecta sus posibilidades legales, ya que en tal período cualquiera
de las partes puede poner fin a la relación sin expresar la causa, sin responsabilidad indemnizatoria
ni otra consecuencia legal que la cesación del período de prueba en trámite. Citan jurisprudencia.
2.- A fin de analizar los agravios traídos por las demandadas, creo necesario recordar cual fue el
razonamiento seguido por la magistrada para entender que, en el caso, el empleador había
renunciado al período de prueba, conforme lo establece el art. 92 bis de la LCT y, por ende, a valerse
de los beneficios acordados por ley para el mencionado período.
La jueza consideró que de las pruebas aportadas no surge el cumplimiento de los recaudos previstos
en el art. 7 de la Ley 24.013, todo lo cual revela que el empleador ha optado por salirse del diseño
creado por la ley, con pérdida de los incentivos respectivos.
Esta norma, según el propio apelante indica, exige la inscripción del trabajador en el libro especial
del artículo 52 y en los registros del Sistema Único de Registro Laboral (que comprende la
“inscripción del empleador y la afiliación del trabajador al Instituto Nacional de Previsión Social, a
las cajas de subsidios familiares y a la obra social correspondiente”).
En el caso, el perito contador informó que la actora se hallaba registrada en el libro especial del art.
52 LCT de la accionada.
Sin embargo, ésta no acreditó la inscripción en el restante registro, toda vez que la documental
acompañada a fs. 39 (alta temprana del trabajador), fue desconocida por la actora a fs.79, sin
ofrecer la interesada prueba subsidiaria al respecto ni agregar preguntas al perito contador que
permitan corroborar tal extremo (nótese que se limitó a adherir a los puntos de pericia indicados
por la actora).
Ante estas deficiencias probatorias, no puede acogerse el primer agravio, el cual, por otra parte, se
limita a aseverar que “ha quedado acreditado el cumplimiento de los recaudos del art. 7 de la L.E.”,
mas sin indicar concretamente de qué manera lo ha sido.
Al respecto, se ha dicho: “Si la demandada no ha aportado prueba alguna que acredite la inscripción
de la trabajadora en el libro especial del art. 52 de la LCT y en el Sistema único de Registro Laboral,
resultan inaplicables los efectos propios del período de prueba y el contrato suscripto por las partes
debe ser interpretado como celebrado por tiempo indeterminado, sin sujeción a plazo de prueba
alguno” (CNATr, sala VII, “Iorini, Patricia Soledad c. Frenkel, Damián Pablo”, AR/JUR/79885/2010 ).
Estas razones conducen a rechazar el primer agravio. Luego, toda vez que el restante reproche se
vincula a la facultad del empleador de denunciar la relación laboral durante el período de prueba,
es claro que tampoco podrá tener acogida, frente a la desestimación anterior.
Por estas razones, propongo al Acuerdo rechazar el recurso de apelación deducido por las
accionadas, con costas a su cargo (art. 17 ley 921). MI VOTO.
Por compartir los fundamentos vertidos en el voto que antecede, adhiero al mismo expidiéndome
de igual modo.
Por lo expuesto
SE RESUELVE:
1. Rechazar el recuso de apelación deducido por las accionadas y confirmar la sentencia de fs.
199/205 vta., en cuanto fue materia de recursos y agravios.
2. Imponer las costas de Alzada a las apelantes vencidas (art. 17 ley 921).
3. Regular los honorarios de los letrados intervinientes en la Alzada en el 30% de la suma que
corresponda por la labor en la instancia de grado (art. 15, LA).