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Universidad de Sonora Departamentos De Ciencias
Biológicas de la Salud Campus Cajeme
Bioquímica Médica
Enzimas
Docente: Dr. Mario Hiram Uriarte Montoya
Integrantes: Ashley Ochoa Arballo 1B-A201 Grupo 2 MED
Ciudad Obregón, Sonora A 08 de Febrero de 2019
ENZIMAS ¿QUÉ SON Y CUÁL ES SU IMPORTANCIA? Las células vivas obtienen la energía y los componentes necesarios para su supervivencia mediante reacciones químicas que transcurren constante y ordenadamente. Estas reacciones deben producirse en condiciones relativamente constantes, de pH próximo a la neutralidad y temperatura cercana a 37 °C. En estas condiciones suaves, muchas de ellas no transcurrirían a velocidad apreciable. Para acelerar estos procesos metabólicos, las células poseen catalizadores específicos denominados enzimas, que hacen compatibles sus necesidades metabólicas con las condiciones de temperatura, pH y presión del medio celular.
La presencia y el mantenimiento de un conjunto completo y equilibrado de enzimas son
esenciales para la desintegración de nutrientes a fin de que proporcionen energía y bloques de construcción químicos; el montaje de esos bloques de construcción hacia proteínas, DNA, membranas, células y tejidos, y la utilización de energía para impulsar la motilidad celular, la función neural y la contracción muscular. Con la excepción de las moléculas de RNA catalíticas, o ribozimas, las enzimas son proteínas. La capacidad para valorar la actividad de enzimas específicas en la sangre, otros líquidos hísticos, o extractos celulares, ayuda en el diagnóstico y el pronóstico de enfermedad. Las deficiencias de la cantidad o la actividad catalítica de enzimas clave pueden sobrevenir por defectos genéticos, déficit nutricionales o toxinas. Las enzimas defectuosas pueden producirse por mutaciones genéticas o infección por virus o bacterias patógenos (p. ej., Vibrio cholerae). Los científicos médicos abordan desequilibrios de la actividad de enzimas al utilizar fármacos para inhibir enzimas específicas, y están investigando la terapia génica como un medio para corregir déficit de la concentración de enzimas o la función de las mismas. Además de servir como los catalizadores para todos los procesos metabólicos, su impresionante actividad catalítica, especificidad para sustrato y estereoespecificidad permiten a las enzimas desempeñar funciones clave en otros procesos relacionados con la salud y el bienestar de seres humanos. La estereoespecificidad absoluta de enzimas es en particular valiosa para uso como catalizadores solubles o inmovilizados para reacciones específicas en la síntesis de un fármaco o antibiótico. Las enzimas proteolíticas aumentan la capacidad de los detergentes para eliminar suciedad y colorantes. Las enzimas tienen importancia en la producción de productos alimenticios o el aumento del valor nutriente de los mismos tanto para seres humanos como para animales. Por ejemplo, la proteasa quimosina (renina) se utiliza en la producción de quesos, mientras que la lactasa es empleada para eliminar lactosa de la leche y beneficiar a quienes sufren intolerancia a la lactosa por deficiencia de esta enzima hidrolítica. NOMENCLATURA Y CLASIFICACIÓN Inicialmente, las enzimas se identificaban por un nombre trivial, que solía referirse al sustrato preferente de la enzima y acababa normalmente en el sufijo «–asa». Sin embargo, esta nomenclatura no permitía deducir el tipo de reacción catalizada, por lo que era poco informativa. El nombre de una enzima debe permitir identificar el tipo de reacción que cataliza y su sustrato fisiológico preferente. Pero esta nomenclatura ideal da lugar a nombres largos, a veces incómodos de utilizar. Por ello, en la práctica se emplean dos tipos de nomenclatura, que conservan el sufijo -asa. Una de ellas, la nomenclatura recomendada, pretende ser informativa y sencilla. La otra, la nomenclatura sistemática, es de manejo menos cómodo, pero más específica y rigurosa. El nombre recomendado es corto e informativo; indica, tanto el sustrato, como el tipo de reacción catalizada. Un ejemplo sería glucosa oxidasa, que identifica ambas cosas, de acuerdo con la ecuación: Glucosa + O2 → Gluconato + H2O2
Sin embargo, la reacción no queda caracterizada totalmente, pues el nombre no especifica el
aceptor de los electrones que pierde la glucosa al oxidarse. El nombre sistemático lo hace de forma más completa. En la reacción anterior, sería α-Dglucosa: oxígeno oxidorreductasa. Las enzimas se identifican, además, mediante un número de clasificación, fijado por la Comisión de enzimas de la IUPAC (Unión Internacional de Química Pura y Aplicada). Este número, precedido por las siglas EC, contiene cuatro dígitos, que designan la clase, subclase, subsubclase y el número de orden de la enzima dentro de una clasificación internacional, que se resume en la tabla colocada abajo, y especifica seis clases, en función del tipo de reacción catalizada: oxidorreductasas, transferasas, hidrolasas, liasas, isomerasas y ligasas. Dentro de cada clase, la subclase y la subsubclase aportan una información cada vez más precisa acerca de la reacción. Por ejemplo, en la clase 1, las oxidorreductasas, las subclases especifican el grupo donador de los electrones intercambiados en la reacción, y las subsubclases, el aceptor de dichos electrones. Dentro de cada subsubclase, a cada enzima se le asigna un cuarto número, correspondiente al orden en el que se ha incorporado a la clasificación. ¿CÓMO ACTÚAN LAS ENZIMAS? Al igual que todos los catalizadores, las enzimas afectan la rapidez de una reacción disminuyendo la energía de activación (EA) necesaria para iniciar una reacción química. Si las moléculas necesitan menos energía para reaccionar porque ha descendido la barrera de activación, entonces en un tiempo dado reacciona una mayor proporción de moléculas del reactivo. Como resultado, la reacción ocurre más rápidamente. No obstante que una enzima reduce la energía de activación de una reacción, ésta no tiene efecto sobre el cambio total de energía libre; es decir, una enzima sólo puede impulsar una reacción química que podría ocurrir sin ella. Si la reacción tiende al equilibrio, entonces ningún catalizador puede hacerla ir en una dirección termodinámica desfavorable o influir en las concentraciones finales de reactivos y productos. Las enzimas simplemente aumentan la rapidez de la reacción.
Una enzima funciona formando un complejo enzima-sustrato Una reacción no catalizada
depende de las colisiones aleatorias entre los reactivos. Debido a su estructura ordenada, una enzima reduce esta dependencia sobre eventos aleatorios y por lo tanto controla la reacción. La enzima logra esto formando un complejo intermedio inestable con el sustrato, la sustancia sobre la que actúa. Cuando el complejo enzima-sustrato, o complejo ES, se descompone, el producto se libera; la molécula de la enzima original se regenera y queda libre para formar un nuevo complejo ES. La enzima en sí misma no resulta permanentemente alterada o consumida por la reacción, así que se puede reutilizar. Cada enzima contiene uno o más sitios activos, regiones en las cuales se une el sustrato, para formar el complejo ES. Los sitios activos de algunas enzimas son ranuras o cavidades en la molécula de la enzima, formadas por cadenas de aminoácidos. En la mayoría de las enzimas, los sitios activos se localizan aproximadamente en la superficie. Durante la reacción, las moléculas de sustrato que ocupan esos sitios se juntan para reaccionar entre sí. La forma de la enzima no parece exactamente complementaria a la del sustrato. El enlace del sustrato a la molécula de la enzima causa un cambio, conocido como ajuste inducido, en la forma de la enzima La proximidad y orientación de los reactivos, junto con las tensiones en sus enlaces químicos, facilitan el rompimiento de los viejos enlaces y la formación de nuevos enlaces. Así, el sustrato es cambiado a un producto, que se difunde lejos de la enzima. Entonces la enzima queda libre para catalizar la reacción de más moléculas del sustrato para formar más moléculas del producto. Como catalizadores, las enzimas aceleran los procesos formadores y rompedores de enlaces para lograr esta tarea las enzimas tienen Una partición íntima en las actividades Que ocurren entre los reactivos; lo hacen mediante la formación de un complejo con los reactivos, el complejo encima-sustrato (ES). La parte de la molécula de la enzima que se une en forma directa con el sustrato es el sitio activo. El sitio activo y el sustrato tienen formas complementarias, lo que les permite unirse con mucha precisión. La unión del sustrato y la enzima se realiza por los mismos tipos de interacciones no covalente es que determinan la estructura de la proteína misma. Además de unirse con el sustrato, el sitio activo contiene un conjunto particular de cadenas laterales de aminoácidos que influyan en el sustrato y disminuyen la energía de activación de la reacción. El sitio activo está sepultado en una hendidura o grieta que conduce desde los alrededores acuosos hacia las profundidades de la proteína. Cuando un sustrato entra a la hendidura del sitio activo casi siempre libera sus moléculas de agua unidas y entra al ambiente Hidrófobo dentro de la enzima. La reactividad de las cadenas laterales del sitio activo puede ser mucho mayor en este ambiente protegido, comparado con el solvente acuoso de las células. La estructura del sitio activo explica no sólo la actividad catalítica de la enzima, también su especificidad, la mayor parte de las enzimas es capaz de unirse sólo con una o unas cuantas moléculas biológicas muy relacionadas.
¿CÓMO ACELERAN LA VELOCIDAD DE LOS PROCESOS?
Las enzimas y todos los catalizadores aceleran la reacción, pero no alteran la constante de equilibrio o el cambio de energía libre. La velocidad de la reacción depende de la energía libre de activación o energía de activación (∆Gº++), que es el aporte de energía requerido para iniciar la reacción. La energía de activación requerida para una reacción no catalizada es mayor que la de la catalizada. Por esta razón es más lenta que la catalizada. Las enzimas aceleran una reacción al bajar la energía de activación requerida para una reacción. Estas ayudan al sustrato y la enzima alcance el estado de transición, el punto más alto del diagrama de energía para la reacción.
FACTORES QUE AFECTAN LA VELOCIDAD DE UNA REACCIÓN CATALIZADA
POR ENZIMAS Uno de los factores clave que afecta la velocidad de una reacción catalizada por una encima es la concentración del sustrato presente. El estudio de los efectos de la concentración es difícil porque (S) cambia durante el transcurso de una reacción in vitro a medida que el sustrato se convierte en producto. Una aproximación que sirve para simplificar los experimentos cinéticos consiste en medir la velocidad intima. Por otro lado los inhibidores enzimáticos son moléculas que interfieren en la catálisis, atrasando o deteniendo las reacciones enzimáticas. Hay dos grandes tipos de inhibidores enzimáticos: reversibles e irreversibles. Inhibidor reversible se denomina inhibición competitiva, porque compite con el sustrato por el sitio activo del enzima. Mientras el inhibidor ocupa el sitio activo impide al sustrato fijarse en la enzima. Hay otros dos tipos más de inhibición reversible: a competitiva y mixta. El inhibidor a competitivo se fija a un sitio distinto del que se fija el sustrato en el sitio activo, solo se une al complejo. Un inhibidor mixto se denomina inhibición no competitiva, este se fija a un sitio distinto al sustrato, pero se fija tanto a la enzima como al complejo enzima- sustrato. Los inhibidores irreversibles se unen de manera covalente, destruyen un grupo funcional del enzima que es esencial para su actividad o forman un enlace no covalente muy estable. Los tipos de inhibidores irreversibles son: Los inactivadores suicidas son poco reactivos, hasta que se unen al sitio activo de una enzima específica. Inactivan a la enzima utilizando el mecanismo de reacción normal enzimático. La actividad enzimática también depende del pH. Las enzimas tienen un pH óptimo o un intervalo de pH en el que su actividad es máxima. Algunas cadenas de aminoácidos pueden actuar como ácidos o bases débiles que desarrollan funciones críticas en el sitio activo de la enzima y dependen de cierto grado de ionización.
ENZIMAS UTILIZADAS EN EL DIAGNÓSTICO CLÍNICO.
Alanina aminotransferasa (ALT) También llamada GPT (Transaminasa glutámico-pirúvica) Cataliza la transferencia de alanina al ácido acetoglutárato, formando piruvato y ácido glutámico. Localizada en el citoplasma Valores normales: < 50 U/ml Aumento importante: Shock, hepatitis. Aumento moderado: cirrosis, mononucleosis, ictericia.
Aspartato aminotransferasa (AST)
También conocida como GOT (Transaminasa glutámico-oxalacético) Cataliza la transferencia del grupo a-amino del ácido aspártico al ácido a-cetoglutárico, formando oxaloacetato y glutámico. Localización: citoplasma y mitocondria Valores normales: < 40U/ml Aumento importante: Infarto del miocardio, hepatitis, traumatismos. Aumento moderado: cirrosis, mononucleosis, ictericia, hemólisis. Creatina kinasa (CK) Importante para la contracción muscular. Transfiere el fosfato de la fosfocreatina al ADP, formando ATP. Localización: citoplasma y mitocondria de miocitos. Valores normales: < 160U/ml en varones y <130U/ml en mujeres Aumento importante: Infarto de miocardio CK-MB Aumento moderado: miopatías, distrofia muscular, accidente cerebro-vascular Fosfatasa alcalina (AP, ALP, SAP) Metaloenzima que cataliza la hidrólisis de diferentes ésteres de fosfato. Requiere pH alcalino y cofactores (iones zinc y magnesio). Localización: asociada a membrana Valores normales: 85-190U/ml en el adulto. Hasta 500U/ml en niños en desarrollo. Aumento importante: ictericia obstructiva, colelitiasis, neoplasia de vías biliares, cirrosis, hematomas Aumento moderado: neoplasias óseas osteogénicas, osteomalacia, enf. Paget, hiperparatiroidismo g-glutamil transpeptidasa (GGT) Cataliza la transferencia de grupos glutamil C-terminales de unos péptidos a otros o a aminoácidos. Es importante en el metabolismo del glutatión, la absorción de aminoácidos y en la antioxidación. Localización: membrana y citoplasma (5%) •Valores normales: < 35U/ml en varones y y <25U/ml en mujeres Aumento importante: Hepatitis vírica, obstrucción biliar, metástasis hepáticas, enf. Alcohólica Aumento moderado: infecciones que afectan al hígado (citomegalovirus, mononucleosis infecciosa) Amilasas Hidroliza carbohidratos complejos para formar maltosa y glucosa. Localización: Se produce en páncreas, hígado e intestino delgado. Se filtra y reabsorbe a través del riñón Valores normales: <50U/ml Aumento importante: pancreatitis aguda y crónica, cáncer de páncreas. Aumento moderado: parotiditis, algunos carcinomas, procesos parapancreáticos (gastritis, úlcera duodenal, peritonitis, obstrucción intestinal. Lipasas Hidroliza triglicéridos. Localización: Se sintetiza en el páncreas y en la mucosa gástrica. Se elimina a través del riñón Causas del incremento de lipasa: Pancreatitis Gastrointestinales Renal. REFERENCIAS Solomon E. (2013). Biología (9na edición). Impreso en México D.F: engage Learning Editores. • Claramunt Vallespi, R., Farran Morales, A., Lopez Garcia, C., Perez Torralba, M., & Santa Maria Dolores, M. (2013). Quimica bioorganica y productos naturales. [Place of publication not identified]: Uned - Universidad Nacion. • Monge-Nájera, J., Gómez Figueroa, P., & Rivas Rossi, M. (2002). Biología general. San José, C.R.: EUNED. • Voet, D., & Voet, J. (2006). Bioquímica. Buenos Aires: Editorial Médica Panamericana. Campbell M, Farrell S. (2010). Bioquímica 6ta Edition. Learning Editores, S.A. Nelson, D. & Cox M.. (2009). LEHNINGER. PRINCIPIOS DE BIOQUÍMICA 5ª ed. España: OMEGA.