Masacre de La Calle Azcuenaga

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ISSN 1852-5369 (impresa) / ISSN 2346-9471 (en línea)

[111-123] Historia, Voces y Memoria /8 (2015) 111

La masacre de la calle
Azcuénaga. Tucumán, 1976

"" Gustavo Cortés Navarro


Instituto de Investigaciones Históricas, Facultad de Filosofía y Letras, Universidad
Nacional de Tucumán - Asociación de Historia Oral de la República Argentina
(AHORA!) / [email protected]

Recibido: enero de 2015 Aceptado: abril de 2015.

Resumen

El objetivo principal de este estudio consiste en analizar un acontecimiento sucedi- Palabras clave
do en Tucumán el 20 de mayo de 1976, al que los militares llamaron “el combate de Tucumán
la calle Azcuénaga”, donde fueron “abatidos” cinco guerrilleros de la Agrupación Montoneros
Montoneros. Si bien estos fueron presentados como “delincuentes subversivos”, los
militares supieron que esta acción estaba dirigida contra el secretariado provincial
de la Agrupación Montoneros, concluyendo violentamente con las acciones de la
agrupación en esta provincia norteña de Argentina.

The slaughter of Azcuénaga Street. Tucumán, 1976

Abstract

The main objective of this article is to analyze an event happened in Tucumán on May Key words
20th 1976, that the military called the “Street Fighter Azcuénaga” where they “killed” Tucumán
five Montoneros guerrillas. While these were presented as “subversive criminals”, Montoneros
the military knew that this action was directed against the provincial secretariat of
Montoneros, concluding violently with the actions of the group in the northern pro-
vince of Argentina.

Introducción

El objetivo principal del presente estudio consiste en analizar un acontecimiento


sucedido en Tucumán el 20 de mayo de 1976, al que los militares denominaron “el
combate de la calle Azcuénaga” donde fueron “abatidos” cinco guerrilleros de la
Agrupación Montoneros. Si bien, en ese momento, estos fueron presentados como
“delincuentes subversivos”, los militares supieron que esta acción estaba dirigida
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contra el último secretariado provincial de la Agrupación Montoneros. Considerando


esta breve introducción, nos planteamos los siguientes interrogantes: ¿Cómo fue el
surgimiento de Montoneros en Tucumán y qué influencia tuvo esta agrupación en el
trabajo sociopolítico en la provincia? ¿Cómo se desarrolló la actividad político-militar
de Montoneros durante el “Operativo Independencia? ¿Cómo se desarrolló el trabajo
social en el Barrio Esteban Echeverría de la capital tucumana? ¿Cómo se interpretó,
según los protagonistas y testigos, lo acontecido en la casa de la calle Azcuénaga 1816?

La hipótesis de este trabajo plantea que con la “masacre de la calle Azcuénaga” el


gobierno de facto no sólo terminó con el Secretariado provincial de Montoneros sino
con la resistencia de esta agrupación en Tucumán.

La metodología de la presente investigación está vinculada con la Historia Oral,


señalando la trascendencia de la memoria histórica, en lo que respecta a la recupe-
ración de testimonios orales y la construcción de nuevas fuentes históricas que posi-
biliten la utilización de estas herramientas teóricas para nuevos estudios sobre
Historia Reciente de Tucumán. Las entrevistas fueron realizadas tanto a ex militantes
montoneros como a vecinos de la casa de la calle Azcuénaga 1816, en el Barrio Esteban
Echeverría de la ciudad capital tucumana, con el fin de interpretar el contexto histórico
donde ocurrió este acontecimiento. También se utilizaron fuentes escritas, como
bibliografía general y específica sobre la Historia Reciente nacional, diarios de tirada
provincial, tanto de la época como de la actualidad. A estos textos le sumanos una
fuente de importancia como es el escrito sobre la causa y veredicto final elevado por
el Tribunal Oral en lo Criminal Federal (TOF) de Tucumán sobre el Juicio Romero
1. Tribunal Oral en lo Criminal Niklison, desarrollado en el año 20111.
Federal (TOF) sobre la causa Poder
Judicial de la Nación Argentina.
Cámara del Tribunal Oral en lo
Criminal Federal de Tucumán.
31 de Marzo del 2011. Causa: Antecedentes históricos
“Romero Niklison María Alejandra
s/Su pedido. Nro. 401.118/04 y
sus acumulados: Romano Miguel
Armando y otros s/Inf. a los arts
213 bis y 189 bis del C.P. Expte Nro El cierre de los Ingenios azucareros y sus resultados socioeconómicos (1966-1973).
358/76 y “Meneses Adolfo Francisco
s/Su pedido” Expte 1119/00.
El 9 de julio de 1966 el General (R) Juan Carlos Onganía, líder de la “Revolución
Argentina” visitó la provincia de Tucumán. El dictador había prometido a los tucu-
manos un proceso de modernización del Estado y de la producción económica eficaz
y rentable tanto en la provincia como en el país. El nuevo gobierno buscó imponer,
según Mark Alan Healey, un plan de transformación para la provincia, donde se
eliminó los subsidios a los ingenios “improductivos” y, a su vez, se fortaleció a las
2. Mark Alan Healey. 2003. “El fábricas más eficientes y concentradas”2. El gobierno militar aplicó, según el diario
interior en disputa: proyectos
de desarrollo y movimientos de La Gaceta, el decreto-ley 16.926 del 21 de agosto de 1966 donde ordenaron el cierre
protesta en las regiones extrapam- forzado de 11 de los 27 ingenios existentes en Tucumán. Los gendarmes y policías
peanas”; en Daniel James (ed.).
Violencia, proscripción y autorita- federales enviados desde Buenos Aires no sólo traían la orden de iniciar de inmediato
rismo (1955-1976). Buenos Aires,
Sudamericana, Nueva Historia el desmantelamiento de las fábricas, sino también ocuparon militarmente a la pro-
Argentina, Tomo X; pág. 186. vincia”3. En opinión de Roberto Pucci, “El desmantelamiento de la estructura indus-
3. Diario La Gaceta: “Un golpe trial tucumana produjo una verdadera catástrofe demográfica y social, manifestada
demoledor a la economía tucu-
mana”, 03 de Agosto de 2006. en el éxodo de casi una tercera parte de la población de la provincia”4. Continuando
4. Roberto Pucci. 2008. Historia con este autor, “hacia el final de la década [de 1960], entre 160.000 y 230.000 tucu-
de la destrucción de una provincia. manos habían emprendido el camino al éxodo (…) la provincia presentaba una migra-
Tucumán, 1966. Buenos Aires,
Ediciones del Pago Chico; pág. 127. ción media de 28,9 por ciento en el período 1960-1970, es decir, un total de 220.000
5. Roberto Pucci, óp. cit.; pág. 128. habitantes, con el éxodo concentrado a partir de 1966”5. Los Departamentos terri-
toriales de Tucumán sufrieron una gran crisis demográfica por la migración de sus
habitantes en busca de mejores condiciones de vida. Como reflexiona Pucci, el depar-
tamento de Famaillá, donde funcionaban los ingenios cerrados Mercedes y Nueva
Baviera, habían perdido 35.000 habitantes. “…Le seguían Cruz Alta con 30.000 emi-
grados y la Capital con 20.000 personas menos a pesar de que esta última constituía
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el lugar de destino de muchos de aquellos que abandonaron los pueblos y campos


del interior”6. Los que no pudieron emigrar a las provincias pampeanas para prole- 6. Ibídem; pág. 128.
tarizarse en el “cordón industrial”, se trasladaron al gran San Miguel de Tucumán
y ocuparon terrenos fiscales circundantes a la ciudad capital. Por ejemplo, se for-
maron al norte de esta ciudad, en el límite con el Departamento de Tafí Viejo, las
villas miserias de “Aguas Corrientes” (donde se encuentra actualmente una de las
más antiguas plantas potabilizadoras de agua de la provincia) y “Villa Muñecas”
(antigua estación de cargas-descargas de Tucumán).

A partir de 1969, la problemática socioeconómica se profundiza en todo el país.


La CGT “de los Argentinos” (con Raimundo Ongaro a la cabeza), los sindicatos
clasistas, como el de Luz y Fuerza cordobés (liderado por Agustín Tosco) y los
estudiantes universitarios, dinamizan la lucha contra la “Revolución Argentina”.
Surgen en las ciudades y pueblos de la Argentina movimientos sociales, como
Corrientes, Rosario –el “Rosariazo”–, Cipolletti y sobre todo en Córdoba –el
“Córdobazo”–, los cuales protestaron en contra de las medidas políticas impo-
pulares adoptadas por el gobierno autoritario de Onganía. En Tucumán, se pro-
dujeron los movimientos populares conocidos como los “Tucumanazos” (1969,
1970 y 1972), donde obreros y estudiantes universitarios se levantaron no sólo en
contra de las decisiones económicas antipopulares (la principal el cierre de los
once ingenios azucareros) sino también contra la política represiva del gobierno
nacional y provincial. La crítica coyuntura que vivía la sociedad tucumana provocó
una concientización de amplios sectores juveniles, quienes empezaron a militar
en distintas agrupaciones políticas pero, en su mayoría, eligieron al peronismo,
sobre todo por la identificación histórica de este movimiento político con los
grupos sociales más empobrecidos de Tucumán. En un tiempo inmediato, estos
jóvenes adhieren su acción política en el “Luche y vuelve” local: comienzan a
vislumbrar la posibilidad del retorno del líder exiliado y que éste termine con la
delicada situación sociopolítica que vivía el país…

El surgimiento y desarrollo de Montoneros en Tucumán (1970-1973)

La agrupación peronista Montoneros, siguiendo a Lucas Lanusse7, nace en 1969 7. Lucas Lanusse. 2007. Monto-
neros. El mito de sus 12 fundado-
como una confluencia de diversos grupos (Grupo Fundador, Grupo Sabino, Grupo res. Buenos Aires, Vergara.
Santa Fe y el Grupo Córdoba) los cuales se fusionaron en una sola agrupación
política-armada. La presentación pública de Montoneros se produjo con el secues-
tro y asesinato del ex presidente de facto Pedro E. Aramburu (29 de Mayo de 1970)
lo que no sólo logró una propaganda política sino también comienza a posicionarse
dentro del movimiento peronista. La lucha política y armada de Montoneros contra
el gobierno de Agustín Lanusse (1971-1973) ganó la adhesión hacia esta agrupación
de diversos sectores juveniles del país. Y la provincia de Tucumán no fue la
excepción.

La formación de Montoneros en Tucumán se caracteriza por dos vertientes o


“vías”: la “vía” tucumana y la “vía” nacional. La vía tucumana surgió a partir
de finales de los ’50, con la primera “experiencia militante” en el Movimiento
Juventud Peronista “Tercera Zona”, una de las primeras agrupaciones juveniles
peronistas locales. Durante la década de los ’60, un sector de la juventud se separó
de Tercera Zona y formaron, primero, “Integralismo”, y, posteriormente, después
de un desmembramiento de este último, “Peronismo en lucha”. A partir de 1971,
a Integralismo y Peronismo en lucha se le unen jóvenes peronistas provenientes
del “Grupo Alfa” (quienes militaron socialmente en Lules y San Pablo, al sudoeste
de la capital), los estudiantes del “Frente de Estudiantes Revolucionarios de Base”
(FERBA) de la Universidad Tecnológica Nacional tucumana, “Peronismo de Base”
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y del “Movimiento Rural Católico”, con presencia en los departamentos del Sur
tucumano (Simoca, La Cocha y Graneros), constituyeron las bases para la futura
agrupación Montoneros en Tucumán.

Llamamos “vía nacional” a los militantes montoneros que llegaron a Tucumán a


partir de 1971 desde otras provincias y adoctrinaron a los cuadros políticos locales.
Los hemos denominado de esta manera, según el lugar desde donde provinieron:
Grupo “Reconquista” (Santa Fe; Hugo Medina, Ricardo Nadalich, Juan Belaustegui),
Grupo “Córdoba” (Fernando Vaca Narvaja, Susana Lesgart, Jorge Raúl Mendé y
María Pappaterra) y Grupo “San Juan” (Raúl Alberto Rossini, Lidia Alicia Zunino
8. Gustavo Cortés Navarro. 2013. y Federico Guillermo Soria)8. Con la actividad formativa de estos tres grupos, quedó
“La tendencia Montoneros−Juven-
tud Peronista durante el retorno consolidado “Montoneros” en Tucumán, formando parte de la Regional VI de la
del peronismo al poder. El caso Organización. A su vez, se puso en funcionamiento la formación de las distintas
tucumano, 1973-1976”. Tesis de Li-
cenciatura. Tucumán; Universidad agrupaciones que darán vida al “Frente de Masas” provincial: Montoneros; Juventud
Nacional de Tucumán, Facultad
de Filosofía y Letras; pág. 50.
Peronista (JP), Agrupación Evita (AE), Juventud Trabajadora Peronista (JTP), Unión
de Estudiantes Secundarios (UES), Juventud Universitaria Peronista (JUP)
9. El Grupo de Evolución de Movimiento Villero Peronista (MVP) y el Grupo Evolución de Tucumán (GET)9.
Tucumán (GET) fue el “brazo es-
tudiantil” de las Fuerzas Armadas
Revolucionarias (FAR). Militaban Los montoneros tucumanos estaban organizados, según recuerda el ex militante mon-
tanto en las Escuelas Secundarias
(por ejemplo Gymnasiun) y en tonero Oscar Holmquist, de la siguiente manera: la provincia (columna) “Tucumán”
las Facultades de la Universidad
Nacional de Tucumán (Facultad de se divide en tres “Unidades territoriales”: Este, Sur y Capital. Esta última, a su vez,
Medicina). Con la unificación de se dividió en siete bloques territoriales (barriales):
FAR con Montoneros (1973) pasan
a ser parte del Frente de Masas. En-
tre sus militantes podemos citar a »» Bloque N° 1: Villa Urquiza. Responsable Carlos Valenzuela.
Adriana Mitrovich,   Ricardo Torres
Correa y Ricardo Somaini, entre »» Bloque N° 2: Barrio Echeverría, Villa Muñecas (Norte y Sur), Canal Norte. Responsable
otros (muchos continúan desa-
parecidos). En la casa de Somaini Juan Carlos “el Perro” Clemente10.
(Av. Juan B. Justo, ‒sin especificar »» Bloque N° 3: Barrio Costanera y alrededores. Responsables Elías Llocra y ‘Chacho’
la altura‒) funcionó la imprenta
la agrupación Montoneros en Morantes.
Tucumán. En Diario Primera Fuente »» Bloque N° 4: (de avenida Jujuy hacia el Este) Barrio San Cayetano, Villa Alem y Villa
de Tucumán.10 de Mayo de 2013.
“Un ex preso político desmiente Amalia. Responsable Julio Jugo.
una versión publicada sobre
estudiantes asesinados por la dic- »» Bloque N° 5: (de avenida Jujuy hacia el Oeste) Barrio Victoria, Ciudadela, etc. Respon-
tadura” .www.primerafuente.com.ar sable Oscar Holmquist.
10. Clemente fue acusado por la »» Bloque N° 6: Sector oeste de la ciudad (barrios alrededor de la ex Cooperativa Tambera
Justicia Federal por haber sido un
“agente infiltrado” en las filas de −Cootam−): Villa Piolín, Villa Belgrano, etc. Responsable Esteban René Locascio.
la militancia montonera. Los ex »» Bloque N° 7: Sector oeste, Yerba Buena. Responsable Enrique Ávila11.
montoneros lo acusan de haber
sido “quebrado” por los servicios y
delatar a numerosos compañeros,
entre ellos a su propia esposa Una vez dividida la ciudad, los militantes profundizan no sólo el trabajo sociopolítico
María del Carmen Clemente, que en sus territorios sino también la búsqueda de nuevos integrantes para fortalecer
continúa desaparecida, en Gustavo
Cortés Navarro, óp. cit.; pág. 59. a la Organización Montonera. Un ejemplo de esto fue lo que sucedió en el Barrio
11. Oscar Holmquist. Entrevis- Echeverría.
ta realizada en San Miguel de
Tucumán, el día 26 de Sep-
tiembre de 2012. Entrevistador:
Gustavo Cortés Navarro.
La militancia montonera en el “Barrio Echeverría”

El Barrio Esteban Echeverría está ubicado aproximadamente a seis kilómetros,


orientación noroeste, del microcentro tucumano. En forma desproporcionada,
como la figura de una “q” minúscula, el barrio limita hacia el oeste con los Barrios
Zenón Santillán y Barrio Viamonte; hacía el norte con la Villa Muñecas y el Barrio
Aguas Corrientes; hacia el Este con el Barrio Juan B. Alberdi Norte (más conocido
en Tucumán como la ex villa miseria “Tru-la-la”) y parte del Barrio Juan XXIII (la
villa “La Bombilla”) y al Sur con el actual “Parque Norte”, llamado tradicionalmente
como el “Campo Norte”, terreno de 49 hectáreas que perteneció, hasta el año 2006,
al Ejército argentino antes de pasar a la intendencia capitalina (este terreno es lin-
dante con el ex Regimiento 19 de Infantería, el Hospital Militar y el Liceo Militar
“Gregorio Aráoz de Lamadrid”).
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Según los recuerdos de los vecinos que aún viven en el lugar (quienes pidieron que
se respete su anonimato durante las entrevistas), el Barrio Echeverría fue poblado a
partir de 1950 por jóvenes familias de clases medias bajas y sectores populares. A
fines de los ’60 e inicios de los ’70 numerosos jóvenes católicos, que en su mayoría
vivían allí, se unieron a la acción misionera de la Parroquia “Nuestra Señora de
Montserrat12” guiados por el sacerdote Vicente Sueco. Estos desarrollaron, tanto en 12. La Parroquia Nuestra Señora
de Montserrat fue puesta en fun-
este barrio como en las villas “Aguas Corrientes” y “Muñecas”, actividades solidarias cionamiento a fines de los ’50 por
con el objetivo de ayudar a las familias carenciadas de la zona. Holmquist recuerda el sacerdote Joaquín Cucala Boix,
ex capellán del Ejército franquista
la actividad social llevada a cabo por sus compañeros en este barrio: “…lo que nosotros en la Guerra civil española como
también del Ejército argentino
teníamos en el 73, en toda la zona de Echeverría es en base al trabajo realizado por la Acción en el Operativo Independencia.
Católica de Montserrat. Los compañeros son de ese sector. [Juan Carlos, “El Perro”] Clemente
viene de ahí: era el jefe de la Acción Católica en su adolescencia. Los curas habían hecho un
buen trabajo barrial”13. 13. Oscar Holmquist
(E. N° 1), óp. cit.

Lilian Reinaga, ex militante montonera, siempre vivió en el Barrio Echeverría. Reinaga


desarrolló su trabajo de base en esta zona a partir de 1970, muy vinculado con el
trabajo misionero de la Parroquia Montserrat. Reinaga afirma que su militancia en
estos barrios estaba marcada por la grave situación socioeconómica que vivía la
provincia desde 1966:

…nosotros como jóvenes, a través de la Iglesia, nos contactábamos mucho más con esas
realidades que eran muy crudas, si bien no tienen la densidad demográfica que tienen
hoy, que son barrios bastantes armados posterior a pasar toda la etapa de ‘villa’ de
emergencia,(…) ya comenzaba la gente a instalarse en la zona aledaña al canal que fue
posterior al cierre de los ingenios. Yo te estoy hablando fines de los ’60, comienzos de
los ’70, en esa época. Entonces empezamos a ver la aparición de los barrios periféricos
pero con una marginalidad muy notable, gente muy pobre…14. 14. Lilian Reinaga. Entrevista
realizada en San Miguel de Tucu-
mán, el día 3 de Octubre de 2012.
La actividad misionera de Reinaga paulatinamente se transformó en política orgánica, Entrevistador: Gustavo Cortés
Navarro. El subrayado es nuestro.
cuando comienza a tener contactos con militantes de las FAR:

… [En el] año ’70… ’71 (…) en ese momento nosotros veíamos llegar los compañeros de,
gente joven también –por supuesto-, pero con una mayor formación política que venían
como expresiones como las FAR o como el FANET [Frente de Asociaciones Nacionales
de Estudiantes de Tucumán] a los barrios. Y bueno, nos buscaban porque sabían que
existíamos, ellos sabían que estábamos mínimamente organizados y llegábamos a
estas comunidades…

¿Se acuerda quien venía de FAR? Por ejemplo…

Sí. En ese momento me contacta un personaje siniestro que terminó siendo para
nosotros: Juan Carlos Clemente, alias “el Perro” Clemente. Con su compañera, “Mary”
[María del Carmen] Clemente, que fue una gran compañera mía. En ese momento lo
conozco (…)15. 15. Lilian Reinaga. Óp. Cit.
El subrayado es nuestro

La unión entre FAR y Montoneros (concretada el 13 de octubre de 1973, formando


una sola agrupación: “Montoneros”16) fue vivida por Reinaga como algo “natural”, 16. Acta de Unidad FAR-
Montoneros. Folleto del 12 de
porque las acciones de ambas agrupaciones recorrían los mismos caminos: octubre de 1973. Ruinas Digitales,
revisado el 2 de Mayo del 2012

“Entonces nosotros vivimos ese proceso de integración hacia la fusión de FAR y


Montoneros lo vivíamos, yo te diría que, lo vivíamos desde esta óptica: desde esta
perspectiva: desde nuestra zona, desarrollándonos, organizándonos, llegando a la
conclusión de que era necesario la ‘síntesis’ de estas organizaciones en función
justamente de una concepción de movimiento pero que era necesario conducir todo
ese movimiento”17. 17. Lilian Reinaga. óp. cit.
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La militancia montonera del Bloque N° 2 “Barrio Echeverría, Villa Muñecas y


Aguas Corrientes” fue exitosa hasta mediados de 1974. Por ejemplo, con permiso
de la Parroquia Montserrat, instalaron en el mismo edificio de la Capilla “Santa
Rosa” (Villa Muñecas Norte) un dispensario, donde la gente de las villas pudiera
acceder a salud –acceso gratuito a medicamentos conseguidos por donación– y a
un aprendizaje elemental de lecto-escritura. Este dispensario se convirtió en el
actual Centro Asistencial Primario de Salud (CAPS) “Santa Rosa de Lima”, depen-
18. Ibídem. óp. cit. Se conoce como diente del SIPROSA18.
SIPROSA al Sistema Provincial de
Salud de la provincia de Tucumán.

La Memoria del “vecino” y la casa de calle Azcuénaga 1816, Barrio Echeverría

Lo que analizaremos a continuación son los testimonios de los vecinos que viven en
la actualidad cercanos a la propiedad de Azcuénaga 1816. Nuestra Entrevistada 1 nos
relata lo siguiente:

…El barrio, al momento de venir a vivir aquí, recién se estaba formando. Todos éramos
familias jóvenes, trabajadores (...) Esa propiedad tiene más de 60 años. Los primeros
propietarios de esa casa fue la familia Perea. El dueño se llamaba Jorge Rafael Perea.
Ellos llegan al barrio al mismo tiempo que mi familia, en la década del ‘50. A la señora
19. Entrevistada 1. Entrevista rea- de Perea la conocíamos como ‘Doña Gringa…’19.
lizada en San Miguel de Tucumán,
el día 07 de Mayo del 2014. Entre-
vistador: Gustavo Cortés Navarro. La Entrevistada 2 nos relató brevemente cuestiones que tienen que ver con el barrio
y la relación de los primeros propietarios:

Desde hace unos cincuenta años [que vivo en el barrio]. Cuando vine de chica con
mis padres y nos instalamos en Barrio Echeverría (…) Era un barrio joven en amplio
crecimiento. Algunos vecinos ya eran anteriores a nuestra llegada y nos fuimos
conociendo y a población se fue ampliando y se fue creciendo hasta llegar a lo que es
hoy: un barrio totalmente grande.

¿Ud. estudió en el Colegio Montserrat o todavía no funcionaba?

No. Yo al Colegio Montserrat lo ví en sus inicios y no tuvimos la suerte de hacer la


secundaría allí. Fuimos a escuela pública. Acá somos cinco hermanos y estudiamos en
el Colegio Nacional, o en la [Escuela de] Comercio [N°1]… mi hermano y yo en el Liceo
20. Entrevistada 2. Entrevista de Señoritas20.
realizada en San Miguel de Tucu-
mán, el día 14 de Mayo del 2014.
Entrevistador: Gustavo Cortés Al ser un barrio de familias jóvenes, comienzan a desarrollarse nuevas redes de
Navarro. El subrayado es nuestro.
sociabilización entre los flamantes vecinos. Los padres comienzan a conocer-
se, sus hijos, desde la niñez, empiezan a tener una relación amistosa. Nuestra
Entrevistada 2 recuerda a los primeros dueños de la casa de la calle Miguel de
Azcuénaga 1816:

¿Ud. Conocía a la familia Perea? De la calle Azcuénaga 1816…

Si lo conocí al matrimonio Perea. Conocí a sus hijos, que eran más o menos de la edad
nuestra. Sí, si fuimos vecinos y los conocí a los chicos.

Más o menos… ¿ellos en que época se fueron del barrio? ¿Vendieron la casa?

Creo que la vendieron, es la información probable que tengo. ¿Y en qué época? En


plena adolescencia nuestra y de sus hijos. Y les estoy hablando de unos cuarenta años
21. Entrevistada 2, óp. cit.
atrás. No los vimos más, no supimos más nada. Supe por referencia que el hijo mayor,
El subrayado es nuestro. “Jorgito” es médico, actualmente trabaja en un CAPS, en Villa Mariano Moreno (…)21.
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La masacre de la calle Azcuénaga. Tucumán, 1976 [111-123] Historia, Voces y Memoria /8 (2015) 117

Miguel Romano, empleado ferroviario, le compró la casa a la familia Perea a fines de


los ’60. Romano se transformó en el dueño de la casa de Azcuénaga N° 1816. Vivió
un par de años en el lugar, hasta que se mudó y comenzó a alquilar la propiedad.

La Familia Romero Niklison en el Barrio Echeverría

La familia compuesta por los militantes montoneros María Alejandra Niklison y Gerardo
Romero, arribó al Barrio Echeverría en 1974 encontrando un territorio propicio para
la militancia política. Según Roberto Baschetti22, Niklison nació en Santa Fe en 1948. 22. Roberto Baschetti. Militantes
del Peronismo Revolucionario
Oficial montonera (conocida con los apodos de “Mercedes” o “Mecha”), Niklison par- uno por uno. Desde la A has-
ticipó en el copamiento de San Jerónimo Norte, Santa Fe, el 1° de junio de 1971, resul- ta la Z”; sitio web revisado el
04/10/12 Letra N; pág. 18-19.
tando detenida. Partió al exilio y conoció a Romero en Perú, reencontrándose con él
en Chile (donde comenzaron a convivir) llegando hasta la Cuba castrista. Al regresar a
la Argentina (1973), la Organización ya le había asignado un territorio para militar:
Tucumán. Según Baschetti,

‘La Orga’ la destina a Tucumán. Primero su militancia política en la zona Sur: Simoca,
Bella Vista, Manantial, San Pablo (…). Luego tuvo nuevas funciones ligadas más a la
logística, funcionando en San Miguel, ciudad capital23. 23. Roberto Baschet-
ti. óp. cit.; pág. 18.

Gerardo Romero (“Emerson Fitipaldi” o “Fiti”) nació en Santa Fe. De actividad arte-
sano, se convirtió en un histórico militante montonero. Durante el Juicio Romero
Niklison, este expresó que a la casa de la calle Azcuénaga 1816 la habían alquilado
hacía un año y medio antes del acontecimiento que estamos estudiando: Después de
haber vivido en otros barrios tucumanos, a través de un aviso clasificado, se contac-
taron con Romano y alquilaron la propiedad situada en su zona de militancia.

Cristina Barrionuevo fue militante montonera. Ella, junto a otras mujeres tucumanas,
formó parte y dirigió la “Agrupación Evita” la rama femenina del Frente de Masas
de la Tendencia Montoneros-JP. Barrionuevo declaró en el juicio Romero Niklison
que, después de haberlos conocido por compartir la organización de numerosos actos
realizados por el Frente de Masas, se juntó con Niklison y Romero y “…empezaron a
diseñar la forma de organizar el agrupamiento de todas las mujeres (…) se decidió crear la
Agrupación Evita y la testigo comenzó a trabajar en Villa Muñecas, Echeverría…”24 conti- 24. Poder Judicial de la Nación Ar-
gentina. Causa: “Romero Niklison
nuando con una línea de trabajo social iniciada, como dijimos anteriormente, durante María Alejandra…”Óp. Cit.; pág. 29.
fines de la década de 1960 y que estaba alcanzando resultados positivos hasta media-
dos del año 1974. A partir de allí, comenzó la persecución de los militantes y la pau-
latina desaparición de las unidades básicas montoneras que existían en los barrios.

Del “Operativo Independencia” al golpe de Estado de 1976: Las


últimas acciones armadas de Montoneros

Tras la muerte del General Perón (1° de Julio de 1974) hasta Febrero de 1975, en
Tucumán como en el país, se había profundizado la violencia entre la “izquierda”
peronista (la Tendencia Montoneros-JP) –y no peronista (ERP)– contra la “derecha”
del movimiento. El ascenso de María Estela Martínez de Perón (“Isabel”) a la presi-
dencia de la Nación y el viraje del gobierno hacía un nacionalismo a ultranza, obligó
al gobernador tucumano Amado Juri a reacomodarse con el gobierno nacional y
permitir acciones represivas en la provincia, llevadas a cabo ilegalmente por la policía
local y militares. En Tucumán, antes del Operativo Independencia, funcionó el
“Comando Nacionalista del Norte Juan Manuel de Rosas”, cuyo jefe era el inspector
de la Policía provincial Roberto Heriberto Albornoz y el Comando “Libertadores de
América” liderado por el militar Luciano Benjamín Menéndez (Comandante del III
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25. Matías Artesse y Gabriela Roffi- Cuerpo del Ejército)25. Sumados a estos, el accionar de la Triple A y su persecución
neli. 2009. “Guerra y genocidio en
Tucumán. Tucumán, 1975-1983”; a referentes de la política, cultura, arte, música, etc., condicionó en toda la provincia
en Inés Izaguirre (comp.): Lucha el funcionamiento de las unidades básicas, dando lugar a la persecución y detención
de clases, guerra civil y genocidio en
la Argentina, 1973-1983. Anteceden- de centenares de militantes montoneros.
tes, desarrollos y complicidades.
Buenos Aires, Eudeba; pág. 320.
En Mayo de 1974, el ERP inició una experiencia foquista en la zona montañosa del
sudoeste provincial, con la Compañía de Monte “Ramón Rosa Jiménez”. Esta acción
guerrillera obligó al gobierno nacional a firmar el Decreto N° 261/75 del 10 de Febrero
de 1975 ‒y meses después se hizo extensiva a todo el territorio nacional mediante
los decretos 2270/1975, 2271/1975 y 2272/1975‒, donde posibilitó la represión militar
en la provincia de Tucumán con el inicio del “Operativo Independencia”. El decreto,
expresa en su artículo 1°

El comando General del Ejército procederá a ejecutar las operaciones militares que
sean necesarias a efectos de neutralizar y/o aniquilar el accionar de elementos
26. Decreto N° 261/75 - 5 de subversivos que actúan en la provincia de Tucumán26.
Febrero de 1975 (Decretos
de aniquilamiento), revisado
el día 3 de Abril de 2015. Según Marina Franco, el grupo gobernante informó a la población sobre las acciones
futuras en contra los grupos armados ERP y Montoneros:

La subversión ataca así a todo el pueblo argentino. Por ello, la lucha contra la subversión
requiere la participación de toda la comunidad. El poder ejecutivo nacional, fiel
intérprete del mandato que le confirieron las mayorías populares, ha decidido la
intervención del Ejército en la lucha contra la subversión apátrida. Una vez más las
Fuerzas Armadas están unidas e identificadas con el pueblo en la defensa de nuestro
27. Comunicado de la Secre- propio modo de vida…27.
taría de Prensa y Difusión,
Presidencia de la Nación, 10
de febrero de 1975, citado en Acdel Vilas, Jefe de las tropas del Ejército durante gran parte del Operativo
Marina Franco, óp. cit.; pág. 135.
Independencia, no sólo tenía bajo su mando a la policía provincial, fuerzas militares
o de Gendarmería sino también al mismo gobernador Juri, quien, si bien perdió manio-
brabilidad política frente al jefe militar, apoyó el accionar del Ejército en la provincia.

Los militares pusieron en práctica todas las enseñanzas recibidas por sus oficiales
durante de las décadas de los ‘60 y ’70, tanto por la OAS francesa como la “Escuela
de las Américas” estadounidense: la guerra contrainsurgente. Aparecieron propa-
gandas en los medios de comunicación masivos alentando a la intervención militar
en Tucumán; la desinformación a la sociedad; la invención de “héroes nacionales”
representados en militares de bajo grado que murieron en los “enfrentamientos” con
la guerrilla armada (crearon nuevos pueblos en la zona de combate, por ejemplo,
“Teniente Berdina” o “Soldado Maldonado”); la aparición de los centros clandesti-
nos de detención, torturas y desaparición y/o asesinatos de personas (como Escuela
Diego de Rojas, tristemente conocida como “la escuelita de Famaillá, primer centro
de detención y desaparición del personas del país) donde llegaron militantes del ERP
o, posteriormente, de Montoneros.

Según Pucci, tomando como datos los informes de la CONADEP y de la Comisión


Bicameral de la Legislatura de Tucumán, el número de personas desaparecidas en
nuestra provincia, tomando un breve período de tiempo antes del inicio del Operativo
Independencia (desde fines de 1974) hasta Febrero-Marzo de 1976, es de 239 víctimas,
28. Roberto Pucci. 2009. o sea, un 40% de los tucumanos desaparecidos entre los años 1975-197928.
“Tucumán, 1975. La guerrilla y el
terrorismo de Estado antes del
golpe militar”; en Luis Marcos El avance del “Operativo Independencia” obligó a Montoneros a enfrentar al ejército,
Bonano y Roberto Pucci (comp.):
Autoritarismo y dictadura en con acciones armadas entre agosto de 1975 a mayo de 1976, o sea, el inicio del final
Tucumán: estudios sobre cultura,
política y educación. Buenos de la acción montonera en Tucumán. La primera de estas acciones fue llevada a cabo
Aires, Catálogos; pág. 235-248. el 28 de Agosto de 1975, cuando en el Aeropuerto de la ciudad, “Benjamín Matienzo”
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La masacre de la calle Azcuénaga. Tucumán, 1976 [111-123] Historia, Voces y Memoria /8 (2015) 119

(actualmente Terminal de Ómnibus de Tucumán), atentaron contra un avión militar


Hércules C-130 de la Fuerza Aérea Argentina que transportaba gendarmes hacia la
provincia de San Juan. Los explosivos utilizados fueron colocados en un desagüe que
pasaba por la pista del aeropuerto. La operación estuvo a cargo de Juan Carlos “Paco”
Alsogaray29: Esta acción recrudeció la persecución del Ejército contra la militancia 29. Juan Carlos “Paco” Alsogaray,
sociólogo, hijo del general Julio
montonera: en toda la ciudad se acentuó la persecución, secuestros, detenciones, Alsogaray y sobrino del econo-
torturas y asesinatos de Montoneros mostrando una violencia “mórbida” ‒por ejem- mista Álvaro Alsogaray. En 1971
ingresa a Montoneros y llega a
plo las voladuras de automóviles con detenidos dentro de los mismos. ser el jefe de la columna La Plata.
Muere en Tucumán, en La Cruz,
departamento Burruyacu, el 23
El segundo intento importante llevada a cabo fue la formación de una “guerrilla rural” de febrero de 1976. En Roberto
Baschetti. Óp. cit.; Letra A, pág. 83.
Montonera, que ayudaría a el ERP en su lucha foquista. Según Pucci, “a comienzos
de 1976, Mario Firmenich y Roberto Perdía organizaron la ‘Fuerza de Monte del
Ejército Montonero’, con la idea de desarrollar un segundo foco rural en la zona del
Dique el Cadillal, al norte de la ciudad de Tucumán. La aventura fue abortada por el
Ejército apenas antes de comenzar, en una cacería que se extendió por Vipos,
Choromoro, Trancas, al norte de la provincia”30. Según la versión de Holmquist, 30. Diario La Gaceta. 25 de
Febrero de 1976. El primero de
Montoneros planteaba la formación de patrullas móviles: repliegue y operar pero no los partes del General Antonio D.
instalar el campamento. La denominación que habían pensado los representantes de Bussi sobre la acción represiva.
En Roberto Pucci. Tucumán,
las Unidades Territoriales a estas fuerzas fueron, según ellos “patrullas del llano”31. 1975. La guerrilla y el terrorismo
de Estado. Óp. Cit; pág. 238.
Después de esta derrota, comienza un proceso de repliegue por parte de Montoneros:
31. Oscar Holmquist. Óp. Cit.
alguno se marcharon al exilio; otros, se escaparon de la provincia y vivieron clandes-
tinos o con otra identidad en Buenos Aires o Córdoba y los restantes, vivieron clan-
destinos y ocultados por los pobladores de los pueblos del interior tucumano, donde
continuaban realizando un trabajo social.

A fines de 1975, la guerrilla del ERP fue totalmente aniquilada. A su vez, la guerrilla
urbana y las actividades barriales de Montoneros prácticamente habían desaparecido.
Acdel Vilas había dejado el terreno preparado para que Bussi propine el golpe final
a la lucha armada en Tucumán. A partir del golpe de Estado del 24 de Marzo de 1976,
el ensañamiento militar fue mayor con respecto a la persecución y aniquilamiento
de los grupos políticos opositores, no sólo vinculados a la guerrilla sino también al
grupo dirigente depuesto. Días antes y posteriores al golpe de Estado fueron asesi-
nados referentes de la política y el sindicalismo tucumano: Atilio Santillán32, Secretario 32. Atilio Santillán fue ase-
sinado en Buenos Aires el 22
de la Federación Obrera Tucumana de la Industria Azucarera (FOTIA), Isauro de marzo de 1976. Sus restos
Arancibia, secretario del gremio docente Asociación Tucumana de Educadores fueron velados en Tucumán horas
antes del golpe de Estado.
Provinciales (ATEP); fue detenido el Gobernador Amado Juri, detenidos y desapare-
cidos el abogado José Chebaía, el vicegobernador Dardo Molina y el senador provin-
cial Guillermo Vargas Aignasse33, entre miles de víctimas. La persecución fue tenaz. 33. Los restos de Guillermo Vargas
Aignasse fueron encontrados en
Entre enero y marzo de 1976, la guerrilla tanto del ERP como de Montoneros fue Diciembre del 2011 y los de Dardo
prácticamente aniquilada en la provincia. Pero los militares, al sostener la idea de Molina en Febrero del 2014 por
el Equipo Argentino de Antro-
aniquilar cualquier tipo de oposición “subversiva”, también protagonizaron acciones pología Forense en una finca de
la ciudad de Tafí Viejo conocida
represivas violentas como un modo de silenciar a la población. Esto fue lo que sucedió como “El Pozo de Vargas”.
en la calle Azcuénaga.

La “masacre” de la calle Azcuénaga

Como señalamos arriba, la propiedad de la Calle Azcuénaga 1816 estaba ubicada, por
un lado, en un territorio fértil para la militancia pero, por otro, se encontraba cercana
a un regimiento militar, lo que fue peligroso para las actividades de la agrupación34. 34. La calle Miguel de Azcuéna-
ga 1.816 se ubica entre la calle
Romero, explicó en su alegato durante el Juicio que Colombia y el pasaje Holmberg
al 2.800 en dirección Este-Oeste.
Dicha propiedad está ubicada
…había un control grande por la cercanía del Ejército, pasaban permanentemente en hacia el Norte, a una cuadra del
Campo Norte y a ocho del ex
control del barrio y en esa cuadra con mayor razón, los últimos quince días [antes del Regimiento 19 de Infantería.
allanamiento] pasaba un helicóptero que se quedaba sobre la casa y alumbraban con los
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reflectores y también hubo unos días antes, dos o tres días antes del hecho, un vehículo
policial que de noche bien tarde enfocó la casa en el frente, hubo también unas semanas
antes, un operativo rastrillo que hizo el ejército junto con la policía, era el cercado del
barrio y revisaban casa por casa buscando elementos que ellos consideraban ilegales
35. Poder Judicial de la Nación pasaron por su casa y no encontraron nada, fue tiempo antes de este hecho35.
Argentina. Causa: “Romero Nikli-
son María Alejandra…” Óp. Cit;
pág. 18. El subrayado es nuestro. El 20 de mayo de 1976, se reunió a horas del mediodía el último Secretariado de
Montoneros provincial en casa de los Romero Niklison. La mayoría de los asistentes
representaban a la Unidad Este, la única que sobrevivía en Tucumán. Según los ale-
36. Ibídem. Óp. Cit. gatos de María Alejandra Romero Niklison36, hija de María Niklison, fue posible que
los montoneros allí reunidos hayan usado identidades falsas para salvaguardar sus
vidas. Junto con Niklison participaban Fernando Saavedra Lamas (alías “Pepo”, de
Buenos Aires, antiguo dirigente juvenil peronista de “Descamisados” y uno de los
miembros más importantes de Montoneros a nivel nacional) Juan Carlos Meneses
(formador del sindicatos de changarines en Santa Fe), Atilio Brandsen (proveniente
de Córdoba) y Eduardo González Paz, (militante montonero oriundo de Jujuy). En
un operativo relámpago, fuerzas policiales y militares coordinadas por Menéndez y
Albornoz, llegaron a la calle Azcuénaga altura 1816/1820, ingresan violentamente a
la vivienda y acribillan a los militantes allí reunidos.

El día 22 de mayo de 1976, el diario La Gaceta de Tucumán, en primera plana, publica la


siguiente noticia: “Fueron muertos 6 extremistas en Tucumán”. En el subtítulo decía

En un procedimiento de Fuerzas Combinadas en el Barrio Esteban Echeverría. Hallazgo


37. Diario La Gaceta de Tucumán. de gran cantidad de armas y documentación37.
“Fueron muertos 6 extremistas en
Tucumán”. San Miguel de Tucu-
mán. 22 de Mayo de 1976; pág. 1. El informe militar que fue dado a conocer a los medios de comunicación decía lo
siguiente:

El comandante del III Cuerpo del Ejército comunica que durante un procedimiento a
cargo de efectivos del Ejército y de las Fuerzas de Seguridad, se logró abatir a seis
delincuentes subversivos pertenecientes a una organización de este tipo que opera al
margen de la ley. La operación aludida (agrega) se llevó a cabo en el mediodía del 20
de Mayo en una casa ubicada en la calle Azcuénaga 1816, de San Miguel de Tucumán,
en la que como consecuencia de la información obtenida se pudo detectar las actividades
de los componentes de la célula extremista. Al hacerse presentes las fuerzas conjuntas
en el citado inmueble y respondiendo a la agresión de sus ocupantes, se generó un
38. Diario La Gaceta de intenso tiroteo que dio por resultado el aniquilamiento total de los mismos38.
Tucumán, óp. cit. pág. 1.

Dentro de la casa, según los informantes militares, se encontraron todo tipo de armas
y documentos importantes para el funcionamiento de la organización Montoneros
(nombre omitido por las fuerzas militares al momento de informar a la población
–solo usaron la fecha donde el gobierno de Isabel Perón declara la inconstitucio-
nalidad de la agrupación por su paso a la clandestinidad) –. Antes de concluir, el
comunicado sostiene:

Asimismo (…) [se] ha permitido constatar una vez más el grado de preparación y
capacidad de la propia fuerza, reflejado en el profundo espíritu de lucha que la anima
a aniquilar al extremismo apátrida que pretende socavar los supremos intereses u
39. Diario La Gaceta, óp. cit. pág. 1. objetivos de la Nación39.

Para el recuerdo de los represores, esta fue una de las grandes victorias del Ejército
argentino frente a la “guerrilla izquierdista”. El represor Antonio D. Bussi, militar
que reemplazó a Vilas a fines de 1975 y posterior gobernador de facto de la provincia,
lo recordaba de esta manera:
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La masacre de la calle Azcuénaga. Tucumán, 1976 [111-123] Historia, Voces y Memoria /8 (2015) 121

…la guerrilla tenía toda su esperanza en Tucumán, y ante la eventualidad de una


derrota, Montoneros vienen en apoyo [del ERP] en el ’76 y prácticamente fue la única
vez que se unieron en combate. No vinieron como el ERP, sino vestidos de civil.
Estaban organizando en San Miguel de Tucumán la columna montonera del Noroeste,
y por circunstancias fortuitas, en un operativo en la calle Azcuénaga descubrimos a
todo el comando y al jefe de la columna que se estaba organizando la presencia
‘masiva’ de terroristas en Tucumán40. 40. Rafael Márquez. 2008. El
Vietnam argentino. La guerrilla
marxista en Tucumán. Buenos
En opinión Luis Alberto Cattaneo (quien se había desempeñado como el segundo Aires, el autor; pág. 212.
jefe militar de Tucumán, detrás de Bussi, en 1976, cuando se produjo el golpe de
Estado), los pobladores eran los que avisaban de actitudes sospechosas de personas
desconocidas en los barrios, pueblos, villas, etc.:

…nos llamaban cada vez que veían circunstancias sospechosas, viene el equipo de
combate, irrumpe, se genera el tiroteo y en Azcuénaga caen seis montoneros (la
conducción de la columna), y encontramos cualquier cantidad de armamentos y
explosivos, gran parte del arsenal…41. 41. Rafael Márquez,
óp. cit.; pág. 212.

Más de tres décadas después, a partir de los alegatos escuchados de los testigos,
los fiscales que llevaban la causa Romero–Niklison, reconstruyeron el hecho de la
siguiente manera:

…el día 20 de mayo de 1976 se produjo un allanamiento antijurídico por parte de


fuerzas militares y policiales, en horas cercanas al mediodía, en el domicilio de
calle Azcuénaga 1816/1820 de la ciudad de San Miguel de Tucumán. Las fuerzas
de seguridad ingresaron en el domicilio y ejecutaron a las personas que se
encontraban en el mismo y a una persona que logró escapar y la interceptaron y
ejecutaron llegando a la iglesia Montserrat. En el domicilio mencionado vivía María
Alejandra Niklison, Gerardo Romero y la hija de ambos, de un año y medio
aproximadamente de edad, María Alejandra Romero Niklison. El día del
allanamiento se encontraban en la vivienda, en una reunión de carácter político,
María Alejandra Niklison, Fernando Saavedra, Juan Carlos Meneses, Atilio
Brandsen y Eduardo González Paz. Las personas que se encontraban reunidas
pertenecían a la agrupación política Montoneros. El día en que ocurrieron los
hechos, Gerardo Romero había salido con su hija cerca del mediodía para
encontrarse con un compañero. Al regresar a su casa, aproximadamente a los 20
minutos, vio que las calles aledañas a su domicilio eran objeto de un fuerte operativo
policial y militar. Al querer aproximarse a su vivienda, una vecina, golpeándole el
capó del auto le dijo que se detuviera y que se fuera porque habían tirado bombas
contra una casa, que habían entrado a ella y que habían matado a todos los
ocupantes, y que inclusive a uno lo habían matado llegando a la iglesia que estaba
cerca, sobre calle Viamonte. Quedó acreditado que el operativo se llevó a cabo con
la participación conjunta de las fuerzas de seguridad militares y policiales (…) En
este operativo fueron ejecutadas las cinco personas que estaban reunidas en el
domicilio, cuatro de ellas -María Alejandra Romero Niklison, Juan Carlos Meneses,
Atilio Brandsen y Eduardo González Paz- en dicho lugar y la quinta - Fernando
Saavedra- llegando a la iglesia Montserrat (…) Quedó acreditado en la audiencia
que las cinco víctimas murieron como consecuencia de fusilamientos realizados
por fuerzas de seguridad militares y policiales…42. 42. Poder Judicial de la Nación
Argentina. Causa: “Romero
Niklison María Alejandra…
Romero, que había escapado junto a su hija, se enteró por los informes perio- ”Óp. Cit.; págs. 176-178.
dísticos, los cuales tenían como fuente informativa los comunicados del Ejército,
de lo sucedido en su casa: la muerte de su pareja y de los demás militantes. Acto
seguido, dejó a su hija en protección de amigos de la familia y se sumergió en la
clandestinidad.
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Al ser consultado por lo sucedido en la calle Azcuénaga 1816, Holmquist recordó lo


siguiente:

Eso fue ya en el ’76. Mayo del ’76. Ahí caen cinco compañeros (compañeros valiosos).
Cayó: Fernando Saavedra Lamas, el gordo ‘Pepo’, que fue uno de los fundadores de
Descamisados y nieto del primer premio nobel argentino [Carlos Saavedra Lamas],
−es de Buenos Aires−, y cae en Tucumán; María Alejandra Niklison (‘Mecha’), otros
compañeros de Entre Ríos son, y hay un quinto que no se supo. No se lo pudo
identificar. Ahí se junta la Conducción de las distintas unidades de Capital, del Este
y del Sur (…) se salvó un solo compañero que fue a cubrir una cita, el marido de
Mecha, Romero. También un histórico nuestro que viene de Santa Fe (…) el 20 de
Mayo fue el enfrentamiento en la calle Azcuénaga 1816 (…) el de más alto nivel era
Saavedra Lamas.

¿Fue ‘enfrentamiento’ o fue ‘masacre’?

Masacre.

Porque esto no fue como lo que ocurrió en la Calle Corro, donde murió la hija de
43. El 29 de setiembre de 1976, en Walsh…43
el barrio de Floresta, en C.A.B.A.,
el “combate” de la calle Corro. En
el mismo, murieron emboscados No. Acá le entran por todos lados: por el frente, por los costados, no tienen tiempo a
por la infantería, un tanque y un
helicóptero, cinco integrantes del nada. Sí, tenían pistolas los compañeros pero si te agarraban con fusiles (…) Y a parte
Secretariado Nacional Montonero:
Alberto “tito” Molina, María Victo-
suponte que haya cinco compañeros y te llegan cien… ¿qué van a resistir? Algo van a
ria “vicky” Walsh, Ismael “turco” resistir… uno por veinte tenés, ¿viste?
Salame, Eduardo “tucu” Coronel
y José “carlitos” Beltrán. Walsh y
Molina, quienes resistían desde Pero para la fecha que vos me estás contando tampoco servía sacar la “banderita
la terraza, dejaron de disparar,
se pararon en el parapeto y fue blanca”…
la primera, quien con los brazos
abiertos les gritó: “milicos, ustedes
no nos matan, nosotros elegimos No. Ya era entregarte o entregarte. Hay compañeros que consiguen escaparse, rompen
morir”, y se suicidaron con sus
propias armas delante de ellos...” el cerco: el “Gordo” Saavedra pero lo matan a dos cuadras de la casa. Él consigue
44. Holmquist, Oscar (E. N° 2), escaparse. Pero lo han agarrado y lo han masacrado44.
óp. cit. El subrayado es nuestro.

Los vecinos de la casa de la calle Azcuénaga 1816 recuerdan que las esquinas de calles
Colombia y pasaje Holmberg estuvieron rodeadas por efectivos del Ejército y de la
Policía quienes no dejaron entrar ni salir a nadie hasta que concluyó el allanamien-
to. Nuestra Entrevistada 1, quien vive sobre la calle Necochea al 1800 (a la vuelta
de la “manzana”, en dirección Este de la calle Azcuénaga) recuerda este hecho de la
siguiente manera:

Eran como las una menos cuarto de la tarde. Yo estaba cocinando. Mi esposo
Ernesto tenía una visita, el señor Alderete, un viejo amigo de su familia que había
venido a almorzar con nosotros. Mi hijo mayor se estaba preparando para ir al
Colegio Montserrat (en ese entonces el nivel secundario dictaba sus clases por la
tarde). Y de repente sentimos una gran cantidad de ruidos fuertes, como
explosiones. Mi esposo y su amigo salieron a la puerta y de ahí fueron para la
esquina de la Colombia para ver que estaba pasando. Mi hijo lo mismo. Él vuelve
y me dice ‘¡sienta el tiroteo mamá!’. Pero no se podía pasar. Después nos enteramos
que los que vivían ahí eran ‘subversivos’. Pero a la señora la matan en la puerta de
la casa… creo que tenían un bebé. Nada se supo de la criatura. Después, con el
paso del tiempo, juntaba recortes de ‘La Gaceta’, porque el barrio era renombrado
45. Entrevistada 1, óp. cit. a raíz de lo que pasó ahí.”45.

Otros vecinos se enteraron o por versiones de otros vecinos o por sus hijos. Cómo la
Entrevistada 3, que vive en la calle Azcuénaga 1850:
ISSN 1852-5369 (impresa) / ISSN 2346-9471 (en línea)
La masacre de la calle Azcuénaga. Tucumán, 1976 [111-123] Historia, Voces y Memoria /8 (2015) 123

Yo soy docente jubilada. En esa época trabajaba en el campo: entraba a la escuela un


domingo a la tarde y me quedaba hasta el viernes por la tarde. Yo nunca había visto
ningún movimiento raro en la casa de la esquina [la casa en cuestión]. Yo me enteré
por mis hijos: ellos iban al Colegio Montserrat, por la mañana. Mi marido los había
ido a buscar y dejado con la empleada que los cuidaba. Después, cuando volví a mi
casa me enteré que habían muerto cuatro. Mi esposo me había contado que no fue
algo largo, sino todo pasó rápido. Todo terminó cerca de las una de la tarde…46. 46. Entrevistada 3. Entrevista rea-
lizada en San Miguel de Tucumán
el día 14 de Junio del 2014. Entrevis-
A pesar de la gravedad del acontecimiento sucedido, para el gobierno militar provincial y tador: Gustavo Cortés Navarro.
los jueces que intentaban legalizar la violencia represiva, el tema de la “calle Azcuénaga”
todavía no había concluido. Según publicó el diario la Gaceta,

Una tarde fría de fines de mayo de 1976, cuando volvían del colegio, vieron cómo
policías empujaban a su padre hacia la entonces Brigada de Investigaciones, en
[Avenida] Sarmiento y Muñecas. Él estaba esposado, sucio y golpeado. Corrieron hasta
la casa de su abuela y le graficaron esa imagen. En ese momento, aseguraron, comenzó
el calvario de la familia. Delina y Patricia Romano  tenían 15 y 14 años cuando su
padre,  Miguel Romano, fue detenido por orden del entonces juez federal  Manlio
Martínez. Romano, empleado ferroviario, era el dueño de la casa de Azcuénaga N°
1.816 donde policías y militares ejecutaron a cinco militantes de Montoneros (…) el 20
de mayo de 197647. 47. La Gaceta, “Un caso
complejo. Testigos critican las
medidas del ex juez Martínez”,
Según la versión familiar, días después de la masacre, Miguel Romano se presentó sábado 14 de marzo del 2015.
El subrayado es nuestro.
voluntariamente a los tribunales como el propietario de la casa de la calle Azcuénaga
y a ponerse a disposición de la justicia para aportar lo poco que sabía de sus inqui-
linos. Sin embargo, juez Manlio Martínez ordenó la detención de Romano por
considerarlo parte integrante del “grupo subversivo” que había sido aniquilado
días atrás. Romano quedo detenido en la Brigada de Investigaciones de la Policía
provincial (otro centro de detención y desaparición de personas en Tucumán), a
manos del represor Roberto “el Tuerto” Albornoz. Sus hijas recordaron que Romano
padecía de una enfermedad psiquiátrica grave y que necesitaba medicación y buena
alimentación. Nada de eso pasó. Romano estuvo detenido y había sido torturado.
Fue procesado y después de un año, al no encontrársele prueba alguna que lo vincule
a Montoneros, fue sobreseído y liberado. Pero su salud desmejoró notablemente y
un año después falleció. El ex Juez Martínez –que en momentos de escribirse este
trabajo, está siendo juzgado por este caso– está acusado por encubrir asesinatos
durante la última dictadura militar en Tucumán. También por abuso de autoridad
y violación de sus deberes. A esto se suman el prevaricato y la privación ilegítima
de la libertad por lo sucedido con Romano. La Justicia lo sindica como presunto
miembro de una asociación ilícita orientada a cometer masivamente delitos de lesa
humanidad48. 48. Diario La Gaceta de Tucumán

Con la masacre de la calle Azcuénaga, las fuerzas represivas lograron matar a todo
el Secretariado Montonero y terminar con la acción de la organización guerrillera
en Tucumán. Se había profundizado la represión y ya no quedaba nada de la acción
guerrillera y sociopolítica de la agrupación en la provincia.

En el año 2011, el TOF, después de indagar y comprobar las acusaciones contra los
imputados, presentó su veredicto: Luciano B. Menéndez y Roberto Albornoz fueron
encontrados culpables por ser autores de los delitos de violación de domicilio de calle
Azcuénaga N° 1816/1820 y homicidio doblemente agravado por alevosía y por el
concurso premeditado de dos o más personas en perjuicio de María Alejandra
Niklison, Fernando Saavedra, Juan Carlos Meneses, Eduardo González Paz y Atilio
Brandsen; calificándolos como delitos de lesa humanidad. La pena correspondiente 49. Juicio Romero Nikli-
fue la de prisión perpetua y de inhabilitación perpetua49. son, págs. 176-177.
Conclusión

Cuando nos propusimos estudiar la “masacre de la calle Azcuénaga” intentamos, por


un lado, no caer en una mera crónica policial y, por otro, no dejarnos influenciar por el
pedido de justicia de los familiares y de las agrupaciones de derechos humanos tanto
de Tucumán como de Argentina, por sobre los crímenes de lesa humanidad ocurridos
durante la última dictadura militar (pedido de justicia al que adherimos totalmente).

Sin embargo, tratamos de interpretar este suceso desde un contexto más amplio.
Desde 1966, con el cierre de los ingenios azucareros tucumanos y cómo esta decisión
económica afectó y movilizó a la sociedad tucumana contra las políticas impopulares
puestas en práctica por los gobiernos de la “Revolución Argentina”. La movilización
social, sobre todo los sectores juveniles, posibilitaron que esta “franja social” se sume,
entre otras agrupaciones políticas y sociales, a los distintos grupos peronistas que,
en 1971, confluyeron en la formación de Montoneros en Tucumán.

Para analizar los antecedentes de la “masacre de la calle Azcuénaga” propusimos


un estudio sobre la organización interna y la división territorial de Montoneros en
Tucumán, lo que, a su vez, nos ha permitido construir la historia del Barrio Esteban
Echeverría: cómo era el barrio en 1970, cómo fue la acción y que resultados obtuvieron
gracias a su trabajo social los militantes de esta agrupación.

Lo que respecta a la “masacre” en la calle Azcuénaga 1816, fue una acción preparada
con un tiempo minucioso por las fuerzas represivas. Helicópteros sobrevolando la
zona, automóviles alumbrando de noche la propiedad, constantes rastrillajes milita-
res casa por casa, fue un aviso de que las fuerzas de seguridad estaban buscando a
miembros del Secretariado provincial de Montoneros. ¿Por qué la familia Romero
Niklison no se marchó de la zona? Es una respuesta que Romero no dio el Juicio
Romero Niklison. Sólo él lo sabrá contestar…

La masacre de la calle Azcuénaga presentó uno de los métodos criminales conocidos


por las fuerzas represoras en el país: asesinar a los mayores dirigentes montoneros
o del ERP. Se apeló al “descabezamiento” de los grupos armados para que sus “sub-
alternos” no tengan líneas de mandos para continuar resistiendo al avance represor
de la dictadura. Este acontecimiento es más grave aún porque el dueño de la casa
donde se sucedieron los hechos, fue detenido y torturado con una falsa acusación.
Algo característico de los jueces y fiscales adictos a los gobiernos militares.

Para terminar, la recopilación de los testimonios correspondientes a los vecinos.


Algunos vecinos hablaron contando versiones de otras personas, lo cual no fue per-
tinente presentarlos como testigos directos del suceso. Lamentablemente muchos
de ellos han fallecido, otros se han mudado del barrio, nuevas familias ocupan estas
viviendas lo que se ha hecho complicado buscar fuentes fidedignas. Sin embargo, el
aporte de los entrevistados que todavía continúan viviendo en la zona fue breve, pero
primordial para estudiar este acontecimiento político que si bien tiene una impor-
tancia provincial y nacional, es parte la historia del Barrio Echeverría. Seguramente
en otros barrios de la capital provincial o de las ciudades o pueblos del interior tucu-
mano, los vecinos guardan importantes datos del pasado inmediato, que pueden ser
importantes para reconstruir una parte de la Historia Reciente de Tucumán.

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