Ensayo El Quinto Oído
Ensayo El Quinto Oído
Ensayo El Quinto Oído
EL OTRO
Watzlawick, Beavin y Jackson (1991, p. 30) postulan contundentemente “no es posible no
comunicarse”, como axioma metacomunicacional de la pragmática de la comunicación, se infiere que
involucra toda forma de ser vivo desde el más simple al más complejo,
YO Y EL “OTRO”:
al ser la comunicación inevitable, se acepta que hay dos partes, un emisor y un receptor, dos
consciencias que se encuentran y descubren como ajenos pero afines.
Varios personajes ilustres se han encargado de discernir frente a este hito, dando cuerpo a muchas ideas
y propuestas para entender al “yo” y el “otro”, la que más llama mi atención es lo referido por Hegel
cuando dice “Yo soy nosotros”, lo que me lleva a resaltar la importancia del lazo, del vínculo entre el
yo y el otro, dado que el ser humano es un ser relacional, es ahí donde puede atreverme a dilucidar ese
terreno fértil para con el otro y todo lo que comprende, mi capacidad relacional es lo mas cerca que
puedo estar de cualquier otro que tenga enfrente.
LA COMUNICACIÓN INTERHUMANA
Watzlawick, Beavin y Jackson (1991 p. 37) detallan dos niveles de comunicacion, digital y analogico,
comprendiendo que la comunicacion no se basa propiamente a las palabras, el nivel digital, sino
tambien a los gestos y al modo como se dicen las cosas y la emocion que transmiten, nivel
analogico.
El texto de Seguin propone como hepitome comunicacional a la enfermedad ya que esta transmite
un mensaje mas profundo y significativo.
Por mencionar un ejemplo, Rosen (1999), refiere que cuando Milton Erickson atendio un caso
de psoriasis ayudo a su paciente a eteder lo que sucuerpo trataba de decirle, ella llevaba un exceso
de emociones que se expresaban en una proporcion de tres a uno a traves de su piel.
DEL “EN CONTRA” AL ENCUENTRO
Sartre, a pesar de pensar que “el infierno es los otros” está de acuerdo también que el hombre no puede
ser sólo ni vivir sólo. Existe una necesidad de comunicación humana a pesar de que esta comprenda
estar en comunicación con el otro, aquello que percibe como “infierno”.
El ensimismamiento narcisista individualista absoluto no existe, es solo el intento de imponer
resistencias absurdas que solo consiguen entorpecer las relaciones mas no impedir el encuentro, el
encuentro es conducta, y no existe nada opuesto a “conducta”. Watzlawick, Beavin y Jackson (1991)
Dos ejércitos medievales, fundidos en el fragor de la batalla, con los soldados sin armadura, me ayudan
a graficar ese encuentro sin resistencias, ese acercamiento incondicionado, “viceral”.
EL EROS PSICOTERAPEUTICO
Las relaciones interpersonales son interacciones recíprocas que siempre van cargadas de emociones y
sentimientos las cuales van a repercutir de manera positiva o negativa en cada uno de los implicados;
siendo así , el contacto interpersonal del PACIENTE con el TERAPEUTA o viceversa , no se exime
de un fuerte vínculo afectivo y profesional entre ambos; a esto se le denomina el EROS
TERAPEUTICO, que no es más que el sentimiento que el psicoterapeuta experimenta, cuando su
relación con el paciente es auténtica, relación en la que el afecto y empatía emocional es imprescindible
y que le permitirá estar junto a este , para acompañarlo en la lucha contra sus dificultades, gozar con
sus triunfos, ser testigo del despertar de su espíritu, estar presente en la batalla librada por un hombre
que en algún momento necesitó apoyo del profesional . Todo esto se da sin ningún interés personal de
por medio por parte del terapeuta, sabiendo que, una vez logrado el éxito, esa persona se reincorporará
a la vida y se alejará triunfador para seguir viviendo en la sociedad que le tocó estar.
Su práctica requiere de la vocación, la experiencia y la madurez necesaria de parte del psicoterapeuta
para no ser desvirtuada en otro tipo de emociones.
COMO OÍR
El saber oír es un fenómeno biológico y se le asocia a la capacidad de distinguir sonidos en nuestras
interacciones con un medio. Cuando atribuimos una interpretación a un sonido, pasamos del fenómeno
del oír al fenómeno del escuchar. El prestar atención a lo que se oye implica, no sólo tomar en cuenta
lo que se dice, sino también lo que no se dice, los silencios y los movimientos del cuerpo. Por lo tanto
cuando se escucha se realiza un proceso activo y complejo.
Esta acción es muy importante para cualquier tipo de relación interhumana.
EL QUINTO OÍDO
Cuando dos seres humanos se enfrentan se establece una comunicación. Éste enfrentamiento es una
batalla que se desenvuelve en una infinidad de frentes, de los cuales la conversación es apenas uno,
pues incluye su fisiología, hasta las más sutiles características de su espíritu.
Un estudio completo de la relación interhumana en su cabal sutileza y complicación es imposible. Para
hacerlo sería necesario disponer de registros completos que nos permitiera estudiar cada detalle
fisiológico y psicológico en su más delicada intimidad.
Por ahora solo contamos con la posibilidad de registrar, estudiar y comprender un aspecto fundamental
de la relación interhumana: la conversación.
La conversación es una comunicación hablada pero no puede separarse de ella el lenguaje silencioso
de los gestos, actitudes y pequeñísimos signos conscientes e inconscientes que acompañan a las
palabras, las subrayan, muchas veces o las desmienten. Como, por ejemplo: el rubor súbito puede
anular una frase impulsiva, un temblor de las manos traicionar, los ojos traducen ocasionalmente todo
lo contrario de lo que los labios expresan.
Para comprender al ser humano debemos hacerlo siquiera con sus manifestaciones verbales, lo que el
oído puede captar.
Sin embargo, se puede comprender aún más con lo siguiente:
1. El dialogo consciente:
Un dialogo es un conjunto de palabras que pronuncian dos hombres y que expresan o tratan de
expresar ideas. Por lo tanto, debemos estudiar las intenciones, conscientes pero ocultas o
disimuladas de cada una de los parlantes, pues sabemos que cada frase tiene, aun el diálogo
consciente, muchos posibles significados para comprender los cuales nos puede ayudar el tercer
oído.
2. El tercer oído:
Es capaz de captar, no solo lo que se dice sino también la manera como es dicho; en otras
palabras, el modo de decir las cosas puede cambiar totalmente su significado. Como por
ejemplo:
La diferencia de tono, las pausas, ruidos concomitantes, la respiración diversa durante el
vocalizar, el acento en la frase, son capaces, muchas veces de expresar más que mil palabras.
Es así que en la siguiente oración: “Volveré tarde a casa hoy” existen diferentes significados,
según el tono de las palabras.
1. Volveré tarde a mi casa hoy.
2. Volveré tarde a mi casa hoy.
3. Volveré tarde a mi casa hoy.
4. Volveré tarde a mi casa hoy.
El significado es resuelto por un lingüista antropológico, ya que estudia las posibilidades
expresivas de la fonética.
EL CUARTO OÍDO
El cuarto oído en realidad es el oído intermedio, las proyecciones que las personas hacen de sí
mismo mediante situaciones cotidianas que se les presente.
Está interpretación es muy subjetiva por ello que está sujeta a críticas.
Según Reik, en el cuarto oído el psicoterapeuta capta los mensajes inconscientes del paciente y
los emerge de forma conscientes.
El cuarto oído no solo es escuchar es el complemento de los gestos, contextos, características
que se comprenden las reales dimensiones de cada expresión verbal.
La información captada va cambiando con el tiempo.
Las palabras pueden ser interpretada según el contexto cultural.
Las palabras también pueden expresar hechos deseables que pueden ser diferente a la realidad.
El cuarto oído no es un privilegio del psicoterapeuta, es una facultad de todo ser humano que
se puede ver vulnerable por “simpatías” “antipatías”, no se puede generalizar, ni armar un
diccionario de significados inconscientes.
El psicoterapeuta con la experiencia se vuelve sensible y capta con mayor rapidez estos
mensajes inconscientes. Esto no quiere decir que lo subjetivo tiene más valor que el criterio
científico. Está subjetividad tiene que estar sometida a los criterios de valoración científica.
En las entrevistas sucesivas, son las encargadas de confirmar o negar nuestra interpretación
para ello el psicoterapeuta debe estar atento y profundizar en los mensajes repetitivos y
aclararlos.
El cuarto oído se va profundizando cada vez más con el tiempo y conociendo cada vez más con
la características del paciente.
EL QUINTO OÍDO
Cada paciente al momento de iniciar la entrevista está atento a demostrar una coherencia entre
las palabras, gestos y contextos intentando llegar a un equilibrio interpersonal de acuerdo a
las distintas situaciones presentadas tratando de mantener la homeostasis psicológica.
El quinto oído se concentra en descubrir como traducen las palabras lo que está ocurriendo en
su momento entre los interlocutores.
El quinto oído necesita dirigirse a dos aspectos:
a. Debe captar todas las maniobras hechas por el paciente.
b. Analizar las maniobras para descubrir las características de la personalidad del
paciente.
El análisis del quinto oído es fundamental para el manejo del proceso psicoterapéutico.
El quinto oído, desde el comienzo, nos permite saber lo que está ocurriendo entre los
interlocutores, informa acerca de las características de la personalidad del paciente y sus
peculiaridades de reacción y nos ayuda a conducir la entrevista de manera justa.
Por lo tanto, el tercer oído será el que aparte de lo que se dice, aprecie como se dice y al hacerlo nos
descubra una dimensión complementaria de la conversación, indispensable para entenderla justamente.
UNA ENTREVISTA
En este apartado se muestra la utilización de todo lo expuesto por Seguin (1990) en los apartados antes
mencionados, evidenciándose desde la entrevista cuan útil y necesarias son la escucha activa, empatía
y el grado de conciencia que necesitamos desarrollar y promover para lograr comprender no solo en
las entrevistas sino también en cualquier relación interhumana del que seamos parte.
Hace referencia que hay elementos importantes para que estas relaciones comunicacionales no solo
queden como una conversación, si no que se entienda en función al contexto, cómo lo dice, por qué se
dijo, y lo que desea comunicar inconscientemente, instándonos a desarrollar también el cuarto y quinto
oído.
Entonces diríamos que necesitamos aprovechar todos los momentos de la entrevista para poder
interpretar y lograr entender lo que la otra persona desea comunicar.
COMENTARIOS
El psicoterapeuta haciendo uso de sus facultades como dueño del consultorio donde tiene organizado
sus citas era obvio que tenía que incomodarse por la tardanza de su paciente quien a su vez había tenido
otra cita con su dentista, caso que el incomodado no lo sabía y que de haberlo sabido poco o nada le
hubiera importado; por su parte la paciente al ver al Dr. algo molesto trata de hacerle cambiar su estado
presentándole excusas algo alegres el cual no son aceptadas pero que finalmente la paciente logra
convencer no muy claramente al médico quien trata de olvidar los acontecimientos tan solamente por
ser psicoterapeuta.
Mientras atiende el Dr. Cambia de voz volviéndola un poco más amable y tratando de conciliar con su
paciente pero en el fondo el enojo continúa por la forma como le habla al decirle que por su culpa
queda poco tiempo para el servicio. Y, al decir un vamos a ver era como quien dice ojalá se logre hacer
algo durante el tiempo que le queda, la enferma muy consciente que eso cambiará, se muestra algo
coqueta y risueña buscando conquistar al médico.
Lo que en realidad desea la enferma es que el consejero le dé un poco de confianza para poder contarle
lo que sucede y el porqué de su visita al consultorio, y es que su matrimonio no anda bien culpándose
ella por haberse casado sin antes haber tenido la madurez del caso para hacerlo, manifiesta ser bastante
insegura cuando su esposo está lejos de ella, también atribuye con un poco de recelo el alejamiento
sexual por parte de su esposo y busca en el psicoterapeuta el apoyo necesario para poder superarlo pero
a su vez justifica a su marido afirmando que él es una persona muy buena, (esto da un indicio como
que no quiere separarse y lo que desea es que el psicoterapeuta le dé una salida loable como ella pueda
dar solución al problema pero sin separarse de su conviviente) , la paciente reconoce por su parte que
es una persona bastante preocupada por sus hijos y sus responsabilidades en el hogar el cual es bien
aceptado por el terapeuta pero a su vez reconoce que a pesar de ello no es feliz al decir que nadie es
feliz en su matrimonio, esto como reconocer que a pesar de lo que ocurra no será feliz y lo que busca
en el psicoterapeuta es una solución que le haga vivir feliz por el resto de sus días.
APRECIACION GENERAL
En esta parte se expone los diversos planos que entrecruzan en la comunicación interpersonal y muy
especial en esa modalidad relacional que es la psicoterapia. Sin embargo, el quinto oído es la facultad
que permite examinar cómo las palabras traducen lo que ocurre entre los interlocutores. Necesitamos
este oído para mantenernos sintonizados con lo que está ocurriendo en el momento del encuentro, es
un oído complicado porque necesita dirigirse simultáneamente a dos aspectos del diálogo. Por una
parte, debe captar todas las maniobras, recursos o estrategias de acercamiento que está utilizando el
interlocutor y al mismo tiempo descubrir a través de ellas quién es el otro, cuáles son las características
de personalidad, es decir nos permite conocer íntegramente a una persona.
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
Seguin, C. A. (2007). “El quinto oido” Ed. Libro Amigo, edicion mayo 2007, Lima-Peru.
Rosen, S. (1999). “Mi voz ira cotigo, los cuentos didacticos de Milton Erickson” Ed. Paidos terapia
familiar. Mexico.