Calvo y Pesini CSJN
Calvo y Pesini CSJN
Calvo y Pesini CSJN
24/02/1998
Voces
Fecha: 24/02/1998
Hechos
Una persona de nacionalidad española promovió amparo contra la Provincia de Córdoba a fin de
que ésta se abstenga de aplicar el art. 15, inc. a), de la ley 7625 que impide el ingreso, reingreso o
reincorporación al Régimen de Personal que integra el Equipo de Salud Humana, a personas que
no cumplan con el requisito de ser argentinas. Sostuvo haber obtenido la radicación permanente
en el país y el reconocimiento del título de licenciada en psicología, y que además fue puesta en
posesión de un cargo en un hospital provincial, pero que no fue designada por no ser argentina. La
Corte Suprema de Justicia de la Nación admite el amparo.
Sumarios
1 - Corresponde declarar la inconstitucionalidad del art. 15, inc. a), de la ley 7625 de la Provincia
de Córdoba (Adla, XLVIII-A, 774), que exige ser argentino para ingresar como personal
permanente al régimen del "equipo de salud humana", ya que, no se ha justificado la existencia de
un interés estatal que ampare la restricción, teniendo en cuenta el principio general que consagra
el art. 16 de la Constitución Nacional a favor de todos los habitantes y el reconocimiento pleno de
los derechos de los extranjeros al ejercicio de su profesión.
TEXTO COMPLETO:
Dice que nació en Huesca, España, y que cursó sus estudios superiores en psicología en la
Universidad de Salamanca y los concluyó a los fines de la especialidad en la Universidad
Complutense de Madrid donde obtuvo el título de licenciada en psicología (especialidad psicología
clínica).
Antes de esa fecha -agrega- supo de la existencia de una suplencia que se cubriría según el
régimen que prevé el art. 13 de la ley 7625, situación que la llevó a renunciar al contrato ante la
incompatibilidad que surgía entre ambos cargos.
III) A fs. 125/131 se presenta la Provincia de Córdoba por medio del Procurador del Tesoro.
Plantea en primer lugar la insuficiencia formal de la acción intentada y considera luego los
aspectos de fondo.
En ese sentido manifiesta que el ejercicio de los derechos reconocidos en la Constitución está
sujeto a reglamentación legal. Esa reglamentación está subordinada a los principios de legalidad y
razonabilidad y la norma impugnada se ajusta a ellos.
Cita la opinión de tratadistas para destacar que en lo que hace a la admisión en los empleos
públicos debe tenerse en cuenta que el art. 16 proscribe las discriminaciones subjetivas pero no las
que establezcan razonables requisitos de carácter objetivo general, entre los cuales está el de la
ciudadanía argentina. Reproduce conceptos de esta Corte sobre el principio de la igualdad ante la
ley y, finalmente, entiende que la prescripción legal encuadra en las facultades que competen a la
autonomía provincial.
Considerando:
1°) Que este juicio es de la competencia originaria de la Corte Suprema (arts. 116 y 117,
Constitución Nacional).
2°) Que, en primer término, debe recordarse que el ejercicio de esa competencia en los juicios en
que es parte una provincia no está subordinado al cumplimiento de requisitos establecidos en el
ámbito local (Fallos: 304:1129, entre otros). Ello basta para desestimar las reservas expuestas por
la demandada en el sentido de que la actora debió agotar la vía administrativa como requisito
previo a la judicial.
3°) Que en el presente caso, la actora plantea la inconstitucionalidad del art. 15 de la ley local 7625
en cuanto exige la nacionalidad argentina para ingresar como personal permanente al régimen del
"equipo de salud humana", lo que en su condición de española le impide desempeñarse en su
profesión de psicóloga en el Hospital Neuropsiquiátrico de la ciudad de Córdoba.
4°) Que si bien el art. 20 de la Ley Fundamental dispone que los extranjeros gozan en el territorio
de la Nación de todos los derechos civiles del ciudadano, lo que es objeto ahora de enfática
ratificación, la decisión del caso planteado pasa por la consideración del principio establecido en el
art. 16 en cuanto dispone que "todos sus habitantes son iguales ante la ley, y admisibles en los
empleos sin otra condición que la idoneidad" en relación con la reserva que respecto a los
extranjeros ofrece el recordado art. 15 de la ley 7625, que reproduce, cabe señalar, pareja
exigencia contenida en otras reglamentaciones respecto de los puestos públicos.
5°) Que resulta oportuno recordar que en el caso publicado en Fallos: 311:2272, esta Corte ha
establecido que "en cuanto al ejercicio de los derechos civiles y, especialmente, al desempeño de
sus profesiones, dentro de la República los extranjeros están totalmente equiparados a los
argentinos por expresa prescripción constitucional, de donde toda norma que establezca
discriminaciones entre aquéllos y éstos en tales aspectos, estaría en pugna con la antes transcripta
prescripción constitucional" (voto de los jueces Belluscio, Petracchi y Bacqué); y más adelante,
como corolario de tal afirmación, se dijo que "si bien es cierto que la Constitución no consagra
derechos absolutos, y que los consagrados en ella deben ser ejercidos conforme a las leyes que
los reglamentan (Fallos: 305:831 y sus citas), esa reglamentación, en lo que hace a los derechos
civiles, no puede ser dictada discriminando entre argentinos y extranjeros, pues entonces no
constituiría un ejercicio legítimo de la facultad reglamentaria porque entraría en pugna con otra
norma de igual rango que la reglamentada, y no puede constituir criterio interpretativo válido el de
anular unas normas constitucionales por aplicación de otras, sino que debe analizarse el conjunto
como un todo armónico, dentro del cual cada disposición ha de interpretarse de acuerdo con el
contenido de las demás".
6°) Que a pesar de las diferencias que ostenta el caso recordado con el sometido a estudio, tales
afirmaciones conforman una valiosa pauta hermenéutica al tiempo de considerar si el derecho de
todos los habitantes a ser admitidos en los empleos tolera sufrir, por vía de reglamentación -en el
caso el art. 15 de la ley 7625- la exclusión de los extranjeros. Parece ocioso destacar que la
cuestión consiste en esclarecer si media un razonable interés estatal que justifique la restricción
que sufre Rocío Calvo y Pesini, por su condición de española, de asistir a los pacientes que
requieran su apoyo terapeútico como psicóloga en el Hospital Neuropsiquiátrico.
9°) Que habida cuenta de lo expuesto, en particular del principio general que consagra el art. 16 en
favor de todos los habitantes y el reconocimiento pleno de los derechos de los extranjeros al
ejercicio de su profesión, rasgo dominante en la vocación igualitaria de la Constitución, parece
propio exigir una justificación suficiente de la restricción consagrada en la ley 7625, extremo que de
modo alguno ha satisfecho la demandada, limitada a una dogmática afirmación de su postura que
excluye la acreditación de su razonabilidad o del interés estatal que la ampare.
10) Cabe señalar por último que la actora fue propuesta al cargo por recomendación de la Junta de
Calificación de Psicología, cuya intervención prevé el art. 32 de la ley 7625, la que consideró, entre
otras razones, los servicios prestados con anterioridad en el Hospital Neuropsiquiátrico (ver fs. 41).
Por ello, se decide: Hacer lugar a la acción de amparo promovida por Rocío Calvo y Pesini contra
la Provincia de Córdoba y, declarar la inconstitucionalidad del art. 15, inc. a, de la ley 7625. Con
costas.
Teniendo en cuenta la labor desarrollada en el principal y de conformidad con lo dispuesto por los
arts. 6°, incs. b, c y d; 36 y concs. de la ley 21.839, se regulan los honorarios del doctor Enrique H.
Martínez Paz y Gustavo A. Mansilla Martínez Paz, en conjunto, por la dirección letrada de la actora,
en la suma de treinta mil pesos ($30.000). -
Julio S. Nazareno. - Eduardo Moliné O'Connor. - Carlos S. Fayt. - Augusto C. Belluscio. - Enrique
S. Petracchi. - Guillermo A. F. López. - Gustavo A. Bossert. - Adolfo R. Vázquez.