Debe La Iglesia Cristiana
Debe La Iglesia Cristiana
Debe La Iglesia Cristiana
ENSEÑAR EL DIEZMO?
CONCLUSIONES DE UN TEÓLOGO
SOBRE UNA DOCTRINA TABÚ
INTRODUCCIÓN
Cada uno dé como propuso en su corazón; no con tristeza, ni por necesidad, porque
Dios ama al dador alegre (2 Cor. 9:7).
Según el Nuevo Testamento, es claro que los cristianos deben dar, aun con
sacrificio, para satisfacer las necesidades del misterioso organismo viviente, la
iglesia, el cuerpo de Cristo, en el cual son llamados a servir. Dar es parte importante
de la nueva naturaleza que los creyentes tienen en Cristo. Los cristianos dan, no a
causa de ningún mandamiento o amenaza de maldición por no dar, sino porque dar
es parte de su nueva naturaleza.
Este libro apoya plenamente este dar como una ofrenda de buena voluntad y una
respuesta de fe del corazón motivado por el amor y el Espíritu Santo. Sin embargo,
este autor está igualmente convencido de que predicar un diez por ciento
obligatorio (llamado diezmo) del ingreso bruto, sin importar las circunstancias, es
antibíblico y hace más mal que bien al cuerpo de Cristo.
Muchas iglesias enseñan que el diezmo es obligatorio y que los cristianos tienen
que dar el diez por ciento de su ingreso bruto a la iglesia. Otras enseñan que los
principios de dar en el Nuevo Pacto no incluyen dar obligatoriamente el diez por
ciento del ingreso bruto. A menudo, los que enseñan el diezmo desprecian a los que
discrepan con ellos, considerando que, o no creen en la Biblia o no son cristianos
maduros. A menudo, los puestos de dirigencia, como los de pastor, diácono, y
maestro de escuela dominical se les niegan a los que no enseñan el diezmo, aunque
éstos puedan estar bien capacitados y sobresalgan en la ganancia de almas.
Partners with God tiene 142 páginas y sólo dedica las páginas 63-79 al diezmo.
Eklund comienza su discusión sobre el diezmo atacando a los que discrepan
con su posición. En la página 63, comienza la sección sobre el diezmo con una
historia verdadera de una madre que mató a sus dos hijos y luego se suicidó porque
pensaba erróneamente que tenía cáncer terminal. Eklund entonces escribe: "Este
relato trágico y extremo ilustra una importante verdad: creer en una mentira
siempre conduce a la tristeza y la destrucción". "La mentira [de Satanás]
simplemente afirma que el diezmo es una práctica del Antiguo Testamento que ya
no es válida para el cristiano del nuevo pacto. Este engaño ha encerrado a muchos
cristianos en la esclavitud financiera y ha robado a la iglesia una considerable
porción de recursos monetarios" (3).
Puesto que en cada lado del problema hay iglesias muy grandes que tienen mucho
éxito en ganar almas, estoy convencido de que el evangelismo, no el diezmo,
determina el éxito financiero de una iglesia. Como se dijo anteriormente, este libro
no debe en modo alguno ser interpretado en el sentido de disminuir la importancia
de dar ofrendas voluntarias cristianamente para ayudar a sufragar las legítimas
necesidades en el nuevo pacto. Este libro contesta la pregunta: "¿Se da en la iglesia
por ley, por necesidad, por exactitud y obligación, o es totalmente una respuesta
por fe, enteramente del corazón?"
Según la Escritura, es claro que conocer la verdad nos hará libres del error (Juan
8:32), y que actuar sobre esa verdad nos acerca a Cristo (Juan 3:21). Al evitar este
problema, la iglesia está perdiendo las bendiciones y la santificación de Dios (Juan
17:17). Como en cualquier otra doctrina bíblica, cada cristiano tiene una
responsabilidad individual de saber personalmente lo que dice la palabra de Dios.
Tal es el propósito de este libro. La mayordomía total está más allá de su esfera.
Se ha incluido cada uno de los textos, desde Génesis hasta Apocalipsis, que se
refiere al diezmo y su equivalente, la décima parte. A esto le sigue un vistazo a los
conceptos de "ley" y "pacto". Luego, se examinan los principios del nuevo pacto
relativos a dar dinero y especie. Se ha incluido un examen de la iglesia primitiva
antes del Concilio de Nicea, con muchas citas claves de reconocidos historiadores
cristianos sobre el tema de la organización de la iglesia primitiva y el dar.
La siguiente lista incluye cada uno de los textos bíblicos sobre el diezmo.
................
Ralph Bartlett, el evangelista llamado por Dios a quien ha sido dedicado este libro,
ha ganado literalmente miles de preciosas almas para la gloria de Dios. Como yo
mismo, creció bajo la enseñanza de iglesias que concuerdan con las premisas
básicas de este libro en relación con la ley y el diezmo. ¡Cuán triste es descubrir que
este gran hombre de Dios no es considerado apto para enseñar la clase de escuela
dominical sólo porque cree que el diezmo no es una doctrina del nuevo pacto! ¡Qué
terrible desperdicio de los dones y el llamado de Dios que Él ha puesto en su iglesia
para su edificación! La iglesia de Dios en toda esta nación y este mundo sufre a
causa de este pecado de no usar el don de este talento.
CONCLUSIONES DE UN TEÓLOGO
SOBRE UNA DOCTRINA TABÚ
Capítulo 1
Esta regla general es de origen pagano y precede en muchos siglos a la ley mosaica
del diezmo. en Génesis 41:34, José instó a los egipcios a duplicar su diezmo para
cubrir los años de escasez. En Génesis 14, Abraham estaba obligado a entregar un
diezmo del botín de guerra en obediencia a la costumbre árabe sobre la guerra. En
tiempos del Nuevo Testamento, el Imperio Romano recibió el primer diezmo, el
diez por ciento de los granos y el veinte por ciento de los árboles frutales, de sus
súbditos conquistados, incluyendo a Judá.
Además, muchos de los que sostienen esta posición prefieren usar la palabra
"diezmo" para referirse al ingreso "neto", con ciertas limitaciones. Es más probable
que digan que a los pobres no se les requiere que den diezmos,y que éstos sólo se
requieren de los que ganan dinero con su trabajo. También es más probable que
digan que el sostenimiento de la iglesia no es la obligación de los que apenas viven
de una pensión del gobierno o de ayuda de supervivencia. El primer deber de los
padres es proporcionar para las necesidades esenciales de alimento, ropa, y
alojamiento para su familia.
El diezmo básico no debía ser usado para construir casas de culto. Puesto que el
polvo pagano profanaba, el diezmo original consistía únicamente de los aumentos
en los productos agrícolas de la tierra santificada por Dios y de los aumentos en los
rebaños de animales criados en la tierra de Israel. Aunque el diezmo podía ser
intercambiado por su valor monetario, ¡el diezmo nunca consistía de dinero! Un
segundo (y tercer) diezmo se entregaba también para proveer alimento para
ocasiones festivas, y para la alimentación de subsistencia de las viudas, los que no
tenían padre, los huérfanos y los extranjeros en Israel.
Por medio de la lista en este capítulo, es fácil demostrar que el contenido de todos y
cada uno de los diezmos registrados y que se encuentran en la ley mosaica
procedesolamente de propietarios de tierras y pastores del territorio de Israel. Esta
es una verdad totalmente inesperada, pero muy clara, sobre el diezmo que fue
revelada por un estudio bíblico con una concordancia exhaustiva. Además, por
extraño que parezca, el diezmo bíblico sólo era para una sociedad sostenida casi
enteramente por medio de cosechas agrícolas y rebaños de animales.
También tenemos que recordar que la ley mosaica de los 'primogénitos' sacaba a
todos, excepto el primogénito en una familia de cuatro hijos, fuera de la tierra en la
segunda o tercera generación porque el primogénito recibía una doble porción de
la herencia de la tierra (Deut. 21:17). Los que poseían parcelas de tierra demasiado
pequeñas para sostener a una familia tenían que vender su parcela al pariente que
tuviera una herencia mayor.
Luego, tenían que trabajar como peones asalariados en la tierra de sus parientes o
mudarse a la aldea y conseguir una ocupación. Por ejemplo, una parcela de 1000
acres sería dividida por cuatro hermanos en parcelas de 400, 200, 200, y 200 en la
primera generación; 160, 80, 80, y 80 después de dos generaciones; 32, 16, 16, y 16
en después de tres generaciones. De este modo, al subdividir la tierra
continuamente, el diezmo de la tierra permanecería sin cambio, pero se reduciría
seriamente el número de personas que pagaban diezmo de la tierra.
Lev. 27:30, 32 Y el diezmo de la tierra, así de la simiente de la tierra como del fruto
de los árboles, de Jehová es; es cosa dedicada a Jehová. ... Y todo diezmo de vacas o de
ovejas, de todo lo que pasa bajo la vara, el diezmo será consagrado a Jehová.
Núm. 18:27 La contribución que ustedes me presenten les será contada como si fuera
trigo de la era o mosto del lagar.
Núm. 18:28 Así que reservarán para mí, como su contribución, el diezmo de todos los
diezmos que reciban de los israelitas, y se lo entregarán al sacerdote Aarón.
Deut. 14:22 Indefectiblemente diezmarás todo el producto del grano que rindiere tu
campo cada año.
Deut. 14:23 Y comerás delante de Jehová tu Dios en el lugar que él escogiere para
poner allí su nombre, el diezmo de tu grano, de tu vino y de tu aceite, y las primicias
de tus manadas y de tus ganados, para que aprendas a temer a Jehová tu Dios todos
los días.
Deut. 26:12 Cuando acabes de diezmar todo el diezmo de tus frutos en el año tercero,
el año del diezmo, darás también al levita, al extranjero, el huérfano y a la viuda; y
comerán en tus aldeas, y se saciarán.
2 Crón. 31:5 Y cuando este edicto fue divulgado, los hijos de Israel dieron muchas
primicias de grano, vino, aceite, miel, y de todos los frutos de la tierra; trajeron
asimismo en abundancia los diezmos de todas las cosas.
2 Crón. 31:6 También los hijos de Israel y de Judá, que habitaban en las ciudades de
Judá, dieron del mismo modo los diezmos de las vacas y de las ovejas; y trajeron
los diezmos de lo santificado, de las cosas que habían prometido a Jehová su Dios, y
los depositaron en montones (7).
Neh. 10:37 Que traeríamos también las primicias de nuestras masas, y nuestras
ofrendas, y del fruto de todo árbol, y del vino y el aceite, para los sacerdotes, a las
cámaras de la casa de nuestro Dios, y el diezmo de nuestra tierra para los levitas; y
que los levitas recibirían las décimas de nuestras labores en todas las ciudades.
Neh. 13:5 Y le había hecho una gran cámara, en la cual guardaban antes las ofrendas,
el incienso, los utensilios, el diezmo del grano, del vino y del aceite, que estaba
mandado dar a los levitas, a los cantores y a los porteros, y la ofrenda de los
sacerdotes.
Mal. 3:10 Traed todos los diezmos al alfolí, y haya alimento en mi casa.
Mat. 23:23 ¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! porque diezmáis la menta
y el eneldo y el comino ...
Alfred Edersheim: "Y es notable que la ley parece considerar a Israel como
destinado a ser sólo un pueblo agrícola - no se ha hecho ninguna provisión para
ingresos procedentes del comercio o las mercaderías" (8).
Fausset´s Bible Dictionary: "El diezmo de todos los productos agrícolas, así como el
de los rebaños y el ganado, pertenecía a Jehová" (9).
Nelson´s Illustrated Bible Dictionary: La ley de Moisés prescribía los diezmos con
algún detalle. Levítico 27:30-32 dice que el diezmo de la tierra incluiría
las semillas de la tierra y el frutoEn ninguna parte ordena el Nuevo Pacto que los
cristianos deben diezmar ..." (10).
The New Unger´s Bible Dictionary: "La décima parte de todos los productos
agrícolas, los rebaños y el ganado estaba declarado como santo a Jehová a manera,
por decirlo así, de alquiler para El que era, estrictamente hablando, el Dueño de la
tierra, y a cambio de los productos de la tierra ... Aunque la ley no especificaba que
los varios frutos del campo y de los árboles debían ser diezmados, el Mishnah
(Maaseroth 1.1) incluye 'todo lo que es comestible, todo lo que estaba almacenado
o que nacía de la tierra ..."(12) de los árboles. Además, el pueblo hebreo debía
apartar todo décimo animal de sus rebaños y manadas para el Señor. ...
2. Bobby Eklund y Terry Austen, Partners With God, Bible Truths about Giving,
(Convention Press: The Sunday School Board of the Southern Baptist
Convention, 1994), copyright page.
3. Ibid., 63.
8. Alfred Edersheim, The Temple, Its Ministry and Services, Wm. B. Eerdman´s
Grand Rapids, cap. 19, p. 379.
11. David I. Eggenberger, ed., New Catholic Encyclopedia (New York: McGraw-
Hill, 1967), s.v. "diezmo".
12. Tomado de New Unger´s Bible Dictionary, Merrill Unger, Moody Press, 1986,
s.v. "diezmo". Usado con permiso.
Capítulo 2
Génesis 14
Abraham, Melquisedec
y las costumbres árabes
Eklund, un miembro de los Bautistas del Sur, escribe; "La idea de entregar un
diezmo a Dios puede ser encontrada en el primer libro de la Biblia (véase Gén.
14:20; 28:22). El diezmo fue practicado por Abraham cuatrocientos años antes de
Moisés. Llevar un diezmo a su dios era una práctica común en muchas sociedades
antiguas. El hombre siempre ha usado el número diez como base para enumerar. El
número diez representa plenitud. Por lo tanto, el diezmo simbolizaba dar nuestro
todo a Dios" (13).
Para entender correctamente por qué se menciona el diezmo en este capítulo. Dios
presenta el incidente en una narración extensa y detallada porque no quería que
fuese tomado fuera de su contexto histórico. Tenemos que recordar que el clímax
de una narración ocurre al final de la historia, no en la mitad.
Después de pagar tributo durante doce años, estos cinco reyes se rebelaron (v. 4).
Los cuatro reyes del este regresaron. Avanzando hacia el sur desde Damasco,
derrotaron a numerosos reyes de ciudades-estados al este, al sur, y al suroeste del
Mar Muerto hasta que llegaron a En-gedi. Esto les colocó como a veinte millas de
Salem.
En esa época, Abraham (Abram) vivía cerca de Hebrón, que está situada
aproximadamente a mitad de camino entre Salem y Sodoma (vv. 13, 24). Cuando
Abraham oyó decir que Lot había sido tomado prisionero, tomó a 318 siervos
adiestrados y aliados amorreos y persiguió al enemigo (vv. 13-14, 24). Atacando de
noche, derrotó a las fuerzas enemigas, rescató a Lot, y recuperó a todos los
cautivos y bienes que habían sido tomados del área de Sodoma y Gomorra (vv. 15-
16).
14:16 Así recuperó todos los bienes, y también rescató a su sobrino Lot, junto con
sus posesiones, las mujeres y la demás gente.
14:20 Y le dio el diezmo de todo.
Heb. 7:4 Consideren la grandeza de ese hombre, a quien nada menos que el patriarca
Abraham dio la décima parte del botín.
Como cabeza de su casa, Abraham era él mismo sacerdote y, como tal, construía
altares y adoraba a Dios directamente (Gén. 12:7, 8; 13:4, 18; 15:9-18). No
necesitaba un sacerdote como Melquisedec para que intercediera por él delante de
Dios. Como los líderes árabes de clan en nuestro tiempo, como sacerdote de su
familia hacía contribuciones directas de caridad para los pobres mientras servía a
Dios durante sus viajes nómadas. Una correcta exégesis debería comenzar la
discusión del versículo 20 por lo menos en el versículo 16, en vez de en el versículo
18, y continuar más allá del versículo 20, por lo menos hasta el versículo 21.
Cuando Abraham llegó a las afueras de Salem, tomó posesión del botín. Esto incluía
todos los bienes que el enemigo derrotado había tomado de la región de Sodoma,
más todos los rehenes, incluyendo a Lot. Es muy claro que Abraham dio su
"diezmo" a Melquisedec de este botín. Como rey victorioso, con Abraham como su
"general", Melquisedec tenía derecho a elegir primero, de la parte más alta del
montón de despojos, el primer diez por ciento del botín. Sin embargo, no hay
ningún barrunto en la Escritura de que Abraham jamás entregara a Melquisedec
ningún diezmo de su propiedades personales, ni en ese momento ni más tarde.
Puesto que el incidente ocurrió justo fuera del palacio del rey-sacerdote,
Melquisedec, el rey de Sodoma ciertamente debe haber estado actuando como el
representante personal de Melquisedec, su embajador. Pero no se indica ninguna
desaprobación ni etiqueta incorrecta.
Hebreos 7:6 dice: "Pero aquel cuya genealogía no es contada de entre ellos".
Aunque existe mucha especulación, el texto mismo no da evidencia de que
Melquisedec fuese otra cosa que un rey-sacerdote pagano auto-designado y auto-
nombrado, similar a cientos de otros que se encontraban en su época y en las
cercanías alrededor del año 2000 a. C.
The Wycliffe Bible Dictionary: "El nombre de esta misteriosa persona significa o
bien 'rey de justicia', 'mi rey es justicia', o 'mi rey es Zedek'. Zedek es la palabra
hebrea para ´justicia´ y también el nombre de una deidad cananea. Melquisedec era
el rey-sacerdote de Salem, que es la forma abreviada de 'Urusalem', 'ciudad de paz',
identificada como Jerusalén. 'Shalom' es la palabra hebrea para 'paz' y 'Shalem' era
probablemente el dios cananeo de la paz. Este amable rey-sacerdote, reconociendo
la nobleza y la dignidad de Abraham, proporcionó refrigerio y alimentos para el
cansado guerrero y sus hombres. Estos dones eran símbolos de amistad y
hospitalidad" (15).
La cita que entecede me abrió los ojos para llevar a cabo una extensa investigación
sobre el ignorado panteón fenicio y cananeo. Extrañamente, esta declaración
procede de un comentario re-publicado por la Southwestern Company (Bautistas
del Sur) por Moody Press en 1968. El capítulo sobre Génesis fue escrito por Kyle M.
Yates, Sr., Th. D., Ph. D., profesor de Antiguo Testamento, Baylor University, Waco,
Texas, que es Bautista del Sur. Si, como afirma Yates, Melquisedec adoraba a los
dioses cananeos, Zedek y Salem, entonces, lógicamente, El Elyon debe haber sido
también un dios cananeo!
The New Bible Commentary: "No hay nada misterioso acerca de él, a pesar de la
interpretacxión que algunos le han dado a Heb. 7:3. Era rey de algún clan semítico,
que todavía ocupaba Salem, antes de que los jebuseos la capturaran. Nunca hubo
una completa extinción del conocimiento de Dios en el mundo, y aquí, también,
Dios había preservado algún conocimiento de sí mismo" (16).
¿Quién era Melquisedec? La respuesta a esta pregunta varía casi tanto como el
número de teólogos que comentan sobre él. La imposibilidad de identificar
correctamente al Melquisedec histórico conduce a este uso típico por parte del
escritor de Hebreos. Sin embargo, para los fines de esta discusión sobre el diezmo,
simplemente no hay suficiente evidencia para afirmar sin reservas que el hecho de
que Melquisedec haya recibido diezmos debe ser interpretado como prueba
positiva de que los cristianos del nuevo pacto deben diezmar. Si Dios hubiese
querido revelar esta verdad, Dios ciertamente habría hecho énfasis en ella en el
nuevo pacto, especialmente en pasajes como Hebreos 7 y 1 Corintios 9. Pero ni
Moisés en la ley ni ningún escritor del Nuevo Testamento usó a Melquisedec como
ejemplo para que los hebreos o los cristianos diezmaran.
Cuando los jebuseos llegaron, no eligieron la mejor ubicación porque el lugar alto
arriba de Cedrón ya estaba ocupado por un templo cananeo que los jebuseos no
quisieron desplazar. Los arqueólogos afirman que el fuerte jebuseo data de por lo
menos el año 2000 a. C., que es la época del tributo de Abraham a Melquisedec
(18).
Puesto que el nombre de "Jerusalén" era conocido antes de la ocupación por los
jebuseos, probablemente se refería originalmente a la colina alta del templo de
Melquisedec al lado del valle de Zedek. Los jebuseos se mencionan ya en Números
13:29. Llamaban a su ciudad "Jebus" o "Jebusi". David la capturó y la llamó "Ciudad
de David" (Josué 15:8; 18:16, 28; Jueces 19:10; 2 Sam. 5:8; 1 Crón. 11:4).
Evidentemente, el nombre original de "Jerusalén" ganó prominencia bajo el reinado
de David. Nuevamente, Shalim era el nombre de un dios cananeo.
El punto principal de esta discusión es que el lugar que Melquisedec llamó "Salem"
era su residencia pagana cananea y en ese momento no era la ciudad santa de Dios.
Hasta el término "Sión" era originalmente el nombre jebuseo de su fuerte (2 Sam.
5:7).
"Dios Altísimo" era también un título cananeo
común tanto para "El" como para "Baal".
Fussett´s Bible Dictionary comenta sobre el nombre "El Elyon" diciendo: "Los
fenicios llamaban así a su dios principal, según Sanchoniathon en Enseb. Praep.
Event., sin duda a partir de la revelación primitiva" (20).
¡Los que eran especiales para Dios conocían su nombre! "Yahvé", el "Señor", es el
nombre especial con el cual Dios se reveló primero a Adán y a Eva en Génesis 2:4.
Dios habló a Caín como Yahvé en 4:6, a Noé en 5:29; 6:3; 7:1; 8:20 y 9:26; a Nimrod
en 10:8, 9; a los de la torre de Babel en 11:5; y a Abram en 12:1. El nombre "Yahvé"
ocurre más de 160 veces sólo en Génesis. Los adoradores de todas las épocas,
especialmente los de la época de Abraham, eran muy exigentes acerca de conocer
el NOMBRE del dios al cual oraban. A causa de este hecho bíblico, ¡es casi
inconcebible que Melquisedec pueda haber sido un verdadero sacerdote del
verdadero Dios, y sin embargo no haya conocido su nombre especial! Por lo tanto,
creo que la ignorancia de Melquisedec sobre el verdadero nombre de Yahvé
debería descalificarle para ser el que transmitiera el nombre desde el tiempo de
Noé.
"El", la palabra hebrea que más a menudo se ha traducido como "Dios" en nuestras
Biblias, es una palabra de referencia genérica y no es necesariamente un "nombre".
"El" puede significar igualmente "dios" con "g" minúscula, "el poder de la
naturaleza", y hasta "un ángel" (Éx. 3:14; Deut. 32:12; Jue. 9:46; Isa. 44:10). "El"
(Strong´s 410) y sus palabras raíces, uwl (Strong´s 193) y ah-yil (Strong´s 352),
significan básicamente "poder" y "fortaleza". Como se mencionó anteriormente,
cualquier cananeo asociaría inmediatamente a "El Elyon" bien con "El" o con "Baal"
- en vez de con el Yahvé hebreo (22)..
Hasta Génesis 14, Dios se había identificado como "Elohim" y como "Yahvé".
Subsiguientemente, se identificó como "Todopoderoso" en 17:1; 35:11; 43:14, y
48:3. En Génesis, Dios se refirió a sí mismo como al "Dios de Abraham, Isaac, y
Jacob". Por revelación, Balaam, el profeta no hebreo, identificó al Dios de Israel
como Yahvé, el Todopoderoso, el Altísimo en Números 24:13-16. Aunque se refería
a todas las naciones, Moisés llamó a Dios el "Altísimo" en Deuteronomio 32:8. El
punto es que, aunque es el verdadero Altísimo, ¡Dios no prefirió ser identificado
como El Elyon en el Pentateuco! Aunque Génesis 14, Números 24, y Deuteronomio
32 son las tres únicas ocasiones en que se usa "Altísimo" en el Pentateuco, este
nombre de Dios no aparecería nuevamente durante más de mil años, cuando David
lo pronunció en 2 Samuel 22:14 - después de capturar a Jerusalén de manos de los
jebuseos en 5:7.
Tercero, la Escritura no nos dice que Abraham reveló a Melquisedec el nombre del
verdadero Dios Altísimo. El pensamiento clave y el clímax de la narración se
encuentran en los versículos 21-24, no en los versículos 18-20, que reciben
demasiada atención. ¿Por qué? ¡Porque el "campeón" de Dios en este punto del
Antiguo Testamento es Abraham, no Melquisedec! Aunque Abraham ciertamente
debe haber hablado con Melquisedec, la Escritura no registra ni una sola palabra
hablada entre Abraham y Melquisedec!Verdaderamente extraño si Dios
consideraba tan importante este encuentro.
"Fue a un sacerdote del Dios altísimo a quien Abraham dio un décimo de los
despojos en señal de gratitud y en honor a una ordenanza divina" (v. 20) ...
contradice
"según costumbres guerreras que todavía existen entre las tribus árabes, Abram
podría haber conservado los bienes recuperados, y su derecho fue reconocido por
el rey de Sodoma" (v. 21) (25) . ¿Fue "en honor a una ordenanza divina" o "según
las costumbres guerreras"?
"Como ofrenda prometida en voto y dedicada al Dios altísimo, y por lo tanto puesta
en manos de Melquisedec, su sacerdote" (v. 20) ...
contradice
"cuando un derecho es dudoso y está dividido, es sabio arreglar el asunto haciendo
concesiones mutuas, más bien que entrando en conflicto. El rey de Sodoma tenía
un derecho original tanto sobre las personas como sobre los bienes, y sería
debatible si el derecho adquirido de Abram por el rescate estaba por encima de su
título y lo extinguía; pero, para evitar toda disputa, el rey de Sodoma hace esta justa
propuesta" (v. 21) (27). ¿Dio Abraham el diez por ciento como una "dedicación"
voluntaria a Dios, y tenía también "derecho" a conservar el noventa por ciento a
causa de la costumbre árabe en la guerra?
"Al entregar los diezmos, Abram reconocía al Dios de Melquisedec como el Dios
verdadero y al sacerdocio de Melquisedec como el verdadero" (v. 20) ...
contradice
"según las leyes árabes, y esto puede haber sido obtenido en tiempos de Abram, si
cualquiera recibe un botín, entrega sólo las personas pero tiene derecho a
conservar el resto para sí" (v. 21) (28).
¡Sea honesto con usted mismo y con la palabra de Dios aquí! El sentido común nos
dice que el diez por ciento del versículo 20 no puede definirse como el culto
voluntario de Abraham al Dios Altísimo si el noventa por ciento del versículo 21
está controlado por las exigentes leyes árabes! La razón más obvia y más probable
de que Abraham diera diezmos a Melquisedec fue la obligatoria costumbre árabe
en tiempo de guerra, que requería que la décima parte del botín de guerra se le
entregara al gobernante local. Abraham no decidió diezmar libremente para
proclamar que Melquisedec era sacerdote de su Dios - de lo contrario, el
razonamiento para el versículo 21 es contradictorio. Este hecho simplemente no
puede ser ignorado.
Núm. 31:21 Y el sacerdote Eleazar dijo a los hombres de guerra que venían de la
guerra: Esta es la ordenanza de la ley que Jehová ha mandado a Moisés ... [Los
versículos 22-25 discuten los ritos de purificación de los despojos y de las personas
después de la batalla del versículo 19].
.............
Núm. 31:25 Y el Señor habló a Moisés diciendo ... [los versículos 25-54 discuten la
división de los despojos después de la batalla].
Núm. 31:27 Y partirás por MITADES el botín entre los que pelearon, los que salieron
a la guerra, y toda la congregación.
Núm. 31:28 Y apartarás para Jehová el tributo de los hombres de guerra que salieron
a la guerra; de quinientos uno ... [1/500 de la mitad; 1/1000; .1% para los
sacerdotes].
Núm. 31:29 De la mitad de ellos lo tomarás; y darás al sacerdote Eleazar la ofrenda
de Jehová.
Núm. 31:30 Y de la mitad perteneciente a los hijos de Israel tomarás uno de cada
cincuenta de las personas ... y los darás a los levitas, que tienen la guarda del
tabernáculo de Jehová. [1/50 de la mitad; 1/100; 1% a los levitas].
Según las costumbres ÁRABES, el diezmo de guerra era el DIEZ por ciento, 10%. Sin
embargo, según la ley mosaica, el diezmo de guerra era sólo UNO por ciento (1%)
para los levitas (Números 31:27, 28) y sólo un décimo de uno por ciento (.1%) para
los sacerdotes (Números 31:29, 30).
En realidad, si la palabra que Dios habló a Moisés en Números 31:25 tiene el valor
de una "ordenanza" y si ésta se añade a la ordenanza del versículo 21, entonces
estos versículos contienen LA ordenanza de la ley mosaica que fija el impuesto de
los despojos en sólo uno por ciento (1%) (1/50 de la mitad, o 1/100), ¡no el diez por
ciento (10%) que la tradición árabe requería en Génesis 14:20! Los sacerdotes
todavía recibían 1/10 de lo que recibían los levitas. Por consiguiente, cuando
comparamos un impuesto de botín con el otro, descubrimos por qué ni Moisés ni la
ley se refieren a Abraham como ejemplo de la práctica del diezmo - ¡eran
diferentes!
Además, aunque vale la pena notar que los sacerdotes recibían un "diezmo", o un
décimo de lo que recibían los levitas (1/1000 es el 10% de 1/100), la costumbre
árabe de un diezmo como impuesto de guerra en Génesis 14 queda muy reducida a
sólo uno por ciento de la ley mosaica. Véase también 1 Samuel 30:20-35 para un
ejemplo de la manera en que David distribuía los despojos de guerra.
El rey de Sodoma siguió la antigua tradición cuando pidió que se le devolvieran las
personas que le habían sido quitadas. Evidentemente, la costumbre cananea
permitía a Abraham conservar los bienes y devolver sólo las personas. Por lo tanto,
tan pronto como Abraham ofreció un décimo de los despojos de guerra a
Melquisedec, el rey de Sodoma insitió en que Abraham se quedara para sí con el
resto de los bienes, el noventa por ciento (vv. 20-21). El versículo 21 simplemente
debe ser incluido en cualquier discusión sobre el versículo 20.
Por qué el capítulo 14 divide a los capítulos 12-13 y a los capítulos 15-17.
14:23 Que desde un hilo hasta una correa de calzado, nada tomaré de todo lo que es
tuyo, para que no digas: Yo enriquecí a Abram,
14:24 Excepto solamente lo que comieron los jóvenes, y la parte de los varones que
fueron conmigo, Aner, Escol, y Mamre, los cuales tomarán su parte.
Algunos creen que este pasaje demuestra que el diezmo es un mandamiento para la
iglesia del Nuevo Testamento porque existió antes de la ley, del mismo modo que el
matrimonio existía antes de la ley. Pero esta comparación no es válida. El
matrimonio precedió a la ley, fue incluido en ella, y también fue repetido después
de la ley. Sin embargo, el diezmo, la observancia del sábado y los alimentos impuros
también precedieron a la ley, fueron incluidos en ella, pero no fueron repetidos
después del Calvario como mandamientos para la iglesia cristiana.
Génesis 28
El acuerdo de Jacob con Dios
29. Gén. 28:20-22 E hizo Jacob voto, diciendo: Si fuere Dios conmigo, y me
guardare en este viaje en que voy, y me diere pan para comer y vestido para
vestir, y si volviere en paz a casa de mi padre, Jehová será mi Dios. Y esta
piedra que he puesto por señal, será casa de Dios; y de todo lo que me dieres,
el diezmo apartaré para ti.
30.
31. La promesa de Jacob de diezmar, antes de la ley mosaica, no es un ejemplo
para la iglesia. Este incidente registra la única otra ocasión en que se
menciona el diezmo antes de la ley mosaica. Además, este no es
definitivamente un diezmo de botín de guerra como el de Génesis 14. Sin
embargo, aunque puede haber existido una tradición de ayudar a los pobres,
Jacob, como Abraham, no estaba respondiendo a una orden de Jehová de
diezmar para un ministerio particular de servicio sagrado. La ley formal
todavía estaba siglos en el futuro.
32.
33. Fiel a su carácter, Jacob hizo a Dios un voto apresurado. Prometió entregar a
Dios un décimo de todas sus posesiones. Sin embargo, el diezmo que Jacob
prometió a Dios era condicional. Primero, Dios tenía que bendecirlo y luego
traerlo de vuelta a la casa de Jacob en paz. Jacob puso las condiciones, no
Dios. Jacob hizo un voto de diezmar; Dios no se lo pidió. Aunque Dios
bendijo grandemente a Jacob en Harán, no se vuelve a mencionar más el
diezmo en la vida de Jacob (ni en el libro de Génesis).
34.
35. Con toda justicia hacia el tema, tenemos que preguntarnos: "¿A quién
entregó Jacob estos diezmos?" No es suficiente decir que "se los dio a Dios".
¡Dios no extiende la mano desde el cielo para recibirlos! Como Abraham,
Jacob estaba rodeado por reyes-sacerdotes cananeos paganos. Si les daba un
diezmo a ellos, ¡estaría en realidad promoviendo la idolatría, los sacrificios
de niños, sexo con animales, y la prostitución en los templos! No había
ningún sacerdocio levítico llamado por Dios para recibir estos diezmos.
Tampoco había ningún templo en Jerusalén, como se prometió y se ordenó
más tarde en Deuteronomio. Como cabeza de su propia familia, Jacob, como
todos los patriarcas desde Adán hasta la ley, era él mismo sacerdote y no
requería una jerarquía como sacerdote. A menos que estemos dispuestos a
aceptar la opinión extremadamente liberal de que Abraham y Jacob son
meras tradiciones mitológicas escritas después de que Betel tuvo un templo
en el norte de Israel, entonces mi pregunta es válida.
36.
37. Nuevamente, como cabeza de familia antes de la ley, Jacob servía como su
propio sacerdote. Construyó altares para Yahvé y ofreció sacrificios sobre
ellos (Gén. 35:1, 10). Pidió "alimento para comer y ropa para vestir".
Prometió dar a Dios "el diezmo" "de todo lo que me dieres". ¿Estaba Jacob
prometiendo también dar a Dios un décimo del alimento y la ropa? ¿Cómo
haría eso? No lo sabemos. Quizás Abraham, Isaac y Jacob construyeron y
dedicaron altares a Jehová (Yahvé). Podrían entonces llevar alimnento a
esos altares para los pobres y los necesitados. Sabemos que Jacob sí
construyó un altar en Betel. Sin embargo, si hubiera habido de por medio
cualquier mandamiento de diezmar, no habría habido lugar para negociar.
38.
Números 18:
El estatuto/la ordenanza del diezmo
Mientras usted lee muy cuidadosamente Números 18, preste especial atención a las
palabras que he puesto en cursiva porque todas ellas juegan papeles
importantes en este libro.
18:1 Jehová dijo a Aarón: Tú y tus hijos, y la casa de tu padre contigo, llevaréis el
pecado del santuario; y tú y tus hijos contigo llevaréis el pecado de vuestro
sacerdocio.
El sacerdocio de los primogénitos, o del varón cabeza de cada familia por separado,
activo desde el tiempo de Adán, ha sido abolido entre los israelitas. Ya los israelitas
individuales no pueden levantar altares y hacer sacrificios directamente a Dios,
como lo hacían todos los padres de Israel.
18:2 Y a tus hermanos también, la tribu de Leví, la tribu de tu padre, haz que se
acerquen a tí y se junten contigo, y te servirán; y tú y tus hijos contigo serviréis
delante del tabernáculo del testimonio.
La tribu de Leví ha sido separada de las otras tribus. Y la casa de Aarón dentro de la
tribu de Leví ha sido además separada para que sus miembros sirvan como
sacerdotes. Aunque separados, los otros levitas no serán sacerdotes, sino que sólo
ayudarán a los sacerdotes.
Nuevamente, los levitas que no eran sacerdotes eran sólo asistentes de los
sacerdotes. Si los levitas entraban al Lugar Santo o al Lugar Santísimo, morirían
junto con los sacerdotes que les permitían entrar.
El decreto de muerte se repite una segunda vez para recordar a todos que sólo los
sacerdotes pueden "acercarse" a la presencia de Dios para adorarle directamente.
18:8 Dijo más Jehová a Aarón: He aquí yo te he dado también el cuidado de mis
ofrendas; todas las cosas consagradas de los hijos de Israel te he dado por razón de la
unción, y a tus hijos, por estatutoperpetuo.
Este capítulo (no Levítico 27 ni Malaquías 3) ES la ordenanza importante
fundacional, o el estatuto, que define cómo iban a ser sostenidos por Israel los
sacerdotes y los levitas bajo el Antiguo Testamento. La palabra se usa a menudo en
este capítulo.
18:9 Esto será tuyo de la ofrenda de las cosas santas, reservadas del fuego; toda
ofrenda de ellos, todo presente suyo, y toda expiación por el pecado de ellos, y toda
expiación por la culpa de ellos, que me han de presentar, será cosa muy santa para ti
y para tus hijos.
18:10 En el santuario la comerás; todo varón comerá de ella; cosa santa será para ti.
Sólo a los sacerdotes (no a los levitas) se les permitía participar de las ofrendas de
sacrificio. Debían ser COMIDAS dentro del Lugar Santísimo del santuario/templo y
no podían ser llevadas a casa para el resto de la familia.
18:11 Esto también será tuyo: la ofrenda elevada de sus dones, y todas las ofrendas
mecidas de los hijos de Israel, he dado a ti y a tus hijos y a tus hijas contigo,
por estatuto [ordenanza] perpetuo; todo limpio en tu casa comerá de ellas.
18:12 De aceite, de mosto y de trigo, todo lo más escogido, las primicias de ello, que
presentarán a Jehová, para ti las he dado.
18:13 Las primicias de todas las cosas de la tierra de ellos, las cuales traerán a
Jehová, serán tuyas; todo limpio en tu casa comerá de ellas.
18:14 Todo lo consagrado por voto en Israel será tuyo.
18:15 Todo lo que abre matriz, de toda carne que ofrecerán a Jehová, así de hombres
como de animales, será tuyo; pero harás que se redima el primogénito del hombre;
también harás redimir el primogénito del animal inmundo.
18:16 De un mes harás efectuar el rescate de ellos, conforme a tu estimación, por el
precio de cinco siclos, conforme al siclo del santuario, que es de veinte geras.
18:17 Mas el primogénito de vaca, el primogénito de oveja y el primogénito de cabra,
no redimirás; santificados son; la sangre de ellos rociarás sobre el altar; y quemarás
la grosura de ellos, ofrenda encendida en olor grato a Jehová.
18:18 Y la carne de ellos será tuya; como el pecho de la ofrenda mecida y como la
espaldilla derecha, será tuya.
18:19 Todas las ofrendas elevadas de las cosas santas, que los hijos de Israel
ofrecieren a Jehová, las he dado para ti, y para tus hijos y para tus hijas contigo,
por estatuto [ordenanza] perpetuo; pacto de sal perpetuo es delante de Jehová para
ti y para tu descendencia contigo.
Porciones específicas de las ofrendas de sacrificio ded animales y alimento (v. 11).
Primicias del aceite, del vino, y del grano (vs. 12-13).
Todas las ofrendas de votos, dinero y otros (v. 14).
Los primogénitos de animales (v. 15).
Dinero de la redención de los primogénitos humanos y animales inmundos (v. 15-
17).
Pieles de los animales sacrificados (v. 18).
Sólo un décimo del diezmo (vs. 25, 26).
18:20 Y Jehová dijo a Aarón: De la tierra de ellos no tendrás heredad, ni entre ellos
tendrás parte. Yo soy tu parte y tu heredad en medio de los hijos de Israel.
18:21 Y he aquí yo he dado a los hijos de Leví todos los diezmos en Israel por
heredad, por su ministerio, por cuanto ellos sirven en el ministerio del tabernáculo
de reunión.
18:22 Y no se acercarán más los hijos de Israel al tabernáculo de reunión, para que
no lleven pecado por el cual mueran.
18:23 Mas los levitas harán el servicio del tabernáculo de reunión, y ellos llevarán su
iniquidad; estatuto [ordenanza] perpetuo para vuestros descendientes; y no
poseerán heredad entre los hijos de Israel.
18:24 Porque a los levitas he dado por heredad los diezmos de los hijos de Israel, que
ofrecerán a Jehová en ofrenda; por lo cual les he dicho: Entre los hijos de Israel no
poseerán heredad.
18:29 De todos vuestros dones ofreceréis toda ofrenda a Jehová; de todo lo mejor de
ellos ofreceréis la porción que ha de ser consagrada.
18:30 Y les dirás: Cuando ofreciéreis lo mejor de ellos, será contado a los levitas
como producto de la era, y como producto del lagar.
18:31 Y lo comeréis en cualquier lugar, vosotros y vuestras familias; pues es vuestra
remuneración por vuestro ministerio en el tabernáculo de reunión.
18:32 Y no llevaréis pecado por ello, cuando hubiereis ofrecido la mejor parte de él; y
no contaminaréis las cosas santas de los hijos de Israel, y no moriréis.
Los levitas debían tratar los diezmos que recibían como si fueran de su propias
tierras de labranza, y entregaban un décimo de estos diezmos a los sacerdotes. Los
sacerdotes no diezmaban. Si bien los sacerdotes debían comer en el Lugar Santo del
templo una gran porción del alimento que recibían, los levitas podían comer todos
sus diezmos en cualquier parte que lo desearan.
Existe el mito de que el diezmo era siempre lo MEJOR. ¡Esta no es una verdad
bíblica! En realidad, el diezmo en alimento entregado a los levitas era un DÉCIMO, y
no necesariamente el mejor; además, los diezmos en animales entregados a los
levitas eran TODAS LAS DÉCIMAS PARTES, no las mejores (Lev. 27:32-33). Sin
embargo, cuando los levitas entregaban su diezmo del diezmo a los sacerdotes, sólo
esa porción debía ser la MEJOR.
Resumen
El diezmo era una ordenanza (un estatuto) que estaba en el corazón mismo de la
ley mosaica, y Números 18 es la redacción exacta de esa ordenanza.
Uno: Sólo al Israel nacional se le ordenó diezmar. Casi todos los versículos del
capítulo hacen referencia al Israel nacional y a sus hijos bajo términos especiales de
pacto. Esta ordenanza jamás fue expandida fuera de esos términos del Antiguo
Testamento del Israel nacional para incluir a la iglesia.
Dos: Sólo los sacerdotes aarónicos de entre los levitas podían "acercarse" a oficiar
en el altar entrar a los lugares santos, y tocar los vasos y el mobiliario dentro del
santuario (vv. 1, 2b, 4, 7). El culto directo a Dios sólo se llevaba a cabo "por poder",
por medio de los sacerdotes. No había ningún sacerdocio de los creyentes; el
sacerdocio del cabeza de familia había sido hecho a un lado en el Antiguo
Testamento; y ni siquiera la mayoría de los levitas podía rendir culto a Dios
directamente. La razón para hacer énfasis en los pasajes que hablan de
"acercamiento" se verá clara en capítulos posteriores de este libro relativamente a
cómo la doctrina del sacerdocio de los creyentes afecta el diezmo. Además, vea la
muy importante discusión en Hebreos 7:19.
Tres: Los levitas, que recibían la totalidad del primer diezmo, meramente
desempeñaban deberes de sirvientes para los sacerdotes. Hasta ellos morirían si se
"acercaban" a Dios (vv. 2a, 3, 4, 6). Véase el punto 6.
Cuatro: Ni los sacerdotes ni los levitas podían poseer ni heredar propiedades (vv.
20, 23, 24, 26). Los diezmos reemplazaban todos los derechos a heredar
propiedades. Esta parte clave del diezmo del Antiguo Testamento se discute en un
capítulo separado de este libro.
Cinco: Aunque no recibían la totalidad del diezmo, a los sacerdotes se les daban las
ofrendas mecidas, las primicias de la tierra, los primogénitos de los animales
limpios, las ofrendas de voto, y el dinero del rescate de los primogénitos de
hombres y animales inmundos (vv. 8-19) (Neh. 10:35-37b). Cualquier extensión de
los diezmos y las ofrendas debía incluir éstos también.
Seis: Sólo los levitas recibían diezmos, no los sacerdotes (vv. 21-24). El diezmo les
era entregado por sus deberes de sirvientes de los sacerdotes "ungidos". Los
levitas NOllevaban a cabo el ritual del culto mismo. Este aspecto también ha sido
mayormente olvidado en la actualidad en un intento por volver a redactar el
diezmo para los cristianos.
Siete: En Números 18, los sacerdotes, los descendientes de Aarón, los que de hecho
llevaban a cabo el ritual del sacrificio, ¡NO recibían diezmos! Sólo recibían 1/10 de
1/10 de lo que se les entregaba a los levitas por todas las otras formas de servicio
(vv. 25-3). (Neh. 10:38). Por lo tanto, los sacerdotes recibían sólo el uno por ciento
(1%), o "un diezmo del diezmo" (v. 26). Este aspecto también ha sido mayormente
pasado por alto sin principios bíblicos válidos.
Ocho: El diezmo sólo consistía de alimento, y era comido (v. 31). Véase la discusión
completa en el capítulo uno sobre la definición de "diezmo". Este es también otro
cambio no autorizado de la Palabra de Dios para convertir la ley del Antiguo
Testamento en algo que Dios nunca tuvo en mente.
Nueve: Puesto que una parte de la porción de los sacerdotes siempre se llevaba
inicialmente al DEPÓSITO, Dios ordenó que los sacerdotes varones la COMIESEN
dentro de los lugares santos del alfolí (18:10). Sin embargo, puesto que el diezmo
de los levitas NUNCA se llevaba al DEPÓSITO, Dios les permitía COMERLO "en
cualquier parte, vosotros y vuestras familias" (18:31). Esto concuerda con
Nehemías 10:37b, donde se ordenaba a Israel llevar el diezmo a las ciudades
levitas, y no al alfolí del templo en Jerusalén. Por lo tanto, Malaquías 3:10 sólo se
refiere al "décimo del diezmo", que era la porción tomada DE las ciudades levitas y
llevada AL alfolí.
Doce: Habiendo estudiado Números 18, es bien difícil entender por qué Eklund
dice: "A pesar de todo lo que Jesús llevó a cabo por amor a nosotros, no revocó la
propiedad del diezmo de Dios. La práctica del diezmo en el Antiguo
Testamento no era parte del sistema legal" (30). ¡En realidad, el diezmo
era el "corazón" mismo del sistema de culto ceremonial! El diezmo reemplazó el
antiguo sistema del sacerdocio familiar y era fundacional en que hacía provisión
para la existencia misma del sacerdocio levítico para que se cumplieran las
provisiones religiosas, ceremoniales, y cúlticas de la ley (Núm. 3:6-13; 18:1, 2).
Levítico 27:30-34
"Es dedicado a Jehová"
27:30 Y el DIEZMO DE LA TIERRA, así de la simiente de la tierra como del fruto de los
árboles, de Jehová es; es cosa dedicada a Jehová.
27:31 Y si alguno quisiere rescatar algo del diezmo, añadirá la quinta parte de su
precio por ello.
27:32 Y todo DIEZMO DE VACAS o de ovejas, de todo lo que pasa por debajo de la
vara, el diezmo será consagrado a Jehová.
27:33 NO mirará si es bueno o malo, NI lo cambiará; y si lo cambiare, tanto él como el
que se lo dio en cambio serán cosas sagradas; no podrán ser rescatados.
27:34 Estos son los mandamientos que ordenó Jehová a Moisés para los hijos de
Israel, en el monte de Sinaí.
La frase clave: "Consagrado a Jehová" aparece en los versículos 30 y 32. Los que
creen que los cristianos del nuevo pacto deben continuar obedeciendo su propia
definición del diezmo (mu modificada) emplean esta frase como su argumento más
poderoso en favor de la naturaleza eterna del diezmo.
Por ejemplo, Eklund escribe: "La razón más básica para diezmar es el hecho de que
la Escritura enseña claramente que el diezmo es del Señor. [Cita Levítico 27:30, 32).
Dios es el dueño de todo en los cielos y en la tierra (véase Sal. 24:1). Pero el diezmo
le pertenece a él en un sentido distintivo. Dios le permite al hombre usar nueve
décimos, pero el diezmo es sagrado y no debe ser gastado. El diezmo
es 'consagrado al Señor', apartado, para ser usado sólo por Dios" (31).
El principio básico de que el diezmo "no es una ley moral eterna" es presentado por
William Kaiser. "La ley que se basa, no en la naturaleza de Dios, sino en sus dichos
particulares en una ocasión especial se llama ley positiva ... El mandamiento sobre
el sábado es el único de los Diez Mandamientos que está mezclado con aspectos
tanto morales como positivos. Es moral en que dice que Dios es dueño de todo el
tiempo y que, por lo tanto, tiene derecho a recibir una porción de nuestro tiempo
para rendirle culto a él. Pero es positivo, o ceremonial, en que especifica el séptimo
día como ese tiempo" (32). Como el sábado, hay un aspecto moral en dar porque
Dios es el dueño de toda la creación, y hay también un
aspecto positivo, o ceremonial en dar en que el diez, el veinte, o el veintitrés por
ciento exacto fue especificado en la ley para Israel.
Por muchas razones bíblicas, este autor discrepa con la afirmación de Eklund. No es
posible interpretar las frases "pertenece al Señor" y "consagrado a Jehová" en el
sentido de que "es un principio moral eterno que existía antes de la ley formal".
¿Por qué? Porque estas frases son muy comunes en el libro de Levítico y se aplican
a muchas otras ordenanzas que casi todas las iglesias concluyen que terminaron en
el Calvario cuando Jesús dijo: "Consumado es". En el contexto de los versículos 30-
32, el diezmo es "santo al Señor", (1) porque viene de la tierra santa de Canaán
prometida a Israel, (2) porque se dio a los levitas santificados a cambio de su
herencia de la tierra, y (3) porque los sacerdotes levitas habían reemplazado el
sacerdocio de los creyentes con un sacerdocio cúltico bajo las ordenanzas
temporales del Antiguo Testamento. En consecuencia, se suponía que los que
recibían los diezmos no poseían tierra. ¡Pero las iglesias cristianas que enseñan el
diezmo no apelan actualmente a ninguna de estas razones para declarar santo al
diezmo!
El Wycliffe Bible Commentary (publicado por los Bautistas del Sur) colocal el
diezmo en la misma categoría que la ordenanza para animales cuando dice: "Los
diezmos pertenecían al Señor y estaban sujetos a las mismas reglas de redención
que loas animales limpios que habían sido dedicados (vv. 9-10)" (33).
Los defensores del diezmo a menudo se refieren a Salmos 24:1 en apoyo del
diezmo, como si el pasaje estuviera conectado directamente con él. "De Jehová es la
tierra y su plenitud; el mundo, y los que en él habitan". Sin embargo, David no
relaciona el diezmo con Salmo 24:1. ¡En realidad, la palabra
"diezmo" nunca aparece en ningún escrito atribuido al rey David! Aunque es
verdad que Dios es el creador que creó y es el dueño de todo, también es verdad
que los diezmos de Levítico 27 no podían ser recibidos de los prosélitos, los no
israelitas, los animales impuros, las tierras contaminadas dentro de Israel, ni de las
tierras contaminadas fuera de Israel. ¡El diezmo era sólo israelita del Antiguo
Testamento! Simplemente, no hay ningún principio eterno universal declarado, ni
implícito, en el contexto inmediato mismo.
Cualquier seria afirmación de que el diezmo debe ser obedecido porque es parte de
la eterna ley de Dios, que refleja su carácter eterno, ciertamente debe demostrarse
que es correcta por medio de algo diferente de la metodología de texto de prueba, o
por medio del argumento de "porque yo lo digo". Los sinceros sostenedores del
diezmo en el nuevo pacto deberían desear entrar en extensas discusiones y
defender su posición con sólidos razonamientos. Sin embargo, rara vez harán algún
intento por apoyar su posición sin usar la metodología de textos de prueba.
Considérese lo siguiente:
Dos: La mayoría de los llamados diezmadores hoy día sólo lo aplican a sus ingreso
bruto. Reemplazan la definición literal con su propia definición artificial.
El Diccionario de Webster pesa más que la Biblia.
Cinco: Originalmente, los diezmos podían proceder de cualquier parte del territorio
de Israel usado por los israelitas. Sin embargo, Alfred Edersheim dice que más
tarde este requisito se estrechó mucho más, en lugar de expandirse. [Los
predicadores expandieron la definición; los judíos limitaron el significado].
Después del regreso del exilio, la tierra fue subdividida en tres diferentes zonas de
santidad. El segundo y el tercer diezmo no podían llegar al templo procedentes de
territorios más allá del Jordán. Aunque el territorio israelita que había sido
capturado por el rey David [O.K.], partes de Egipto [no bíblico], y parte de Babilonia
[no bíblico] podían usarse para diezmos menores por levitas locales, la mayoría de
las otras tierras se consideraba contaminada e incapaz de producir diezmos santos
aceptables para el templo de Jerusalén (34).
Además del diezmo, el capítulo también contiene otras cosas que son "santas para
Jehová". Levítico 27:9 llama a todas las ofrendas consagradas [por voto] "santas
para Jehová"; 27:14 describe las casas santificadas como "santas para Jehová";
27:21 describe los campos dedicados por voto como "santos para Jehová, como un
campo consagrado; cuya posesión será del sacerdote". ¡Estas cosas eran
"santas" porque ellas, como el diezmo, pertenecían al sacerdote levítico bajo la ley
mosaica! No eran santas a causa de alguna cualidad eterna inherente.
La enciclopedia judía, Encyclopedia Judaica, hasta afirma que este diezmo era
voluntario. Y, aunque el diezmo de Levítico 27:32-33 ocurre en el capítulo que trata
de las donaciones sagradas voluntarias de varias clases, los primogénitos en los
versículos 26-27 son una excepción de la regla (39).
El diezmo no sólo era una "parte" importante de la ley del Antiguo Testamento, sino
que era la parte básica que permitía a todo el resto funcionar bajo su sacerdocio.
Claramente, la ordenanza del diezmo estableció y fundó el sacerdocio levítico (Heb.
7:9-11). Esto, a su vez, permitía los servicios rituales y religiosos diarios de la
nación. Por lo tanto, es imposible separar el diezmo de su contexto en Levítico.
_______________
Núm. 18:20 Y Jehová dijo a Aarón: De la tierra de ellos no tendrás heredad, ni entre
ellos tendrás parte. Yo soy tu parte y tu heredad en medio de los hijos de Israel.
Núm. 18:21 Y he aquí yo he dado a los hijos de Leví todos los diezmos en Israel
por heredad, por su ministerio, por cuanto ellos sirven en el ministerio del
tabernáculo de reunión.
..............
Núm. 35:1 Habló Jehová a Moisés en los campos de Moab, junto al Jordán frente a
Jericó, diciendo:
Núm. 35:2 Manda a los hijos de Israel que den a los levitas, de la posesión de su
heredad, ciudades en que habiten; también daréis a los levitas los suburbios de esas
ciudades alrededor de ellas.
Núm. 35:3 Y tendrán ellos las ciudades para habitar, y los suburbios de ellas
serán para sus animales, para sus ganados y para todas sus bestias.
..............
Josué 21:2 Y [Eleazar y Josué] les hablaron [a las tribus de Israel] en Silo en la tierra
de Canaán, diciendo: Jehová mandó por medio de Moisés que nos fuesen dadas
ciudades donde habitar, con sus suburbios para nuestros ganados.
Josué 21:3 Entonces los hijos de Israel dieron de su propia herencia a los levitas,
conforme al mandato de Jehová, estas ciudades con sus suburbios.
¡El diezmo fue dado a los levitas, y la décima parte del diezmo fue dado a los
sacerdotes, como su herencia en lugar de herencia de la tierra, porque ellos servían
a Dios!¡Punto! El plan de Dios era que no poseyeran tierra, porque Él sería su
herencia (su tierra) por medio de la posesión del diezmo. Ciertamente, esto ha
cambiado en nuestra sociedad moderna, pues los obreros evangélicos por lo
general poseen y heredan propiedades, a menudo obtienen gran riqueza de las
iglesias en las cuales sirven, y todavía exigen el diezmo entero para sí mismos.
A causa de sus muchas repeticiones en la Escritura, tenemos que suponer que Dios
sabía que algunos con el tiempo se olvidarían de este hecho acerca del diezmo del
Antiguo Testamento. Es igualmente importante repetir este hecho en el contexto de
este libro por la misma razón. Aunque los que apoyan el diezmo citan a menudo a
Génesis 14:18-20, Levítico 27:30-34 y Malaquías 3:8-10, otros, que rechazan el
diezmo en el nuevo pacto, citan Números 18:20-26, Deuteronomio 12:11-12; 1;27-
29, Efesios 2:13-17, Colosenses 2:14 y Hebreos 7:5, 12, 18; 8:6. Y los textos claves
del documento fundacional son Números 18:20-26.
"Herencia" y "tierras" son dos de los conceptos más importantes del Antiguo
Testamento. Mientras el pensamiento religioso occidental habla de la salvación en
términos de gracia y fe, es más probable que el marco mental hebreo hable de la
salvación en términos de herencia y tierra. Éstas son también ideas claves en la
doctrina del diezmo, porque Dios describió a Israel, su tierra y su pueblo, como su
singular herencia. "Porque tú los apartaste para tí como heredad tuya de entre
todos los pueblos de la tierra" (1 Reyes 8:53).
¡A cambio de su servicio a Dios, a los levitas y a los sacerdotes se les negó herencia de
tierra en Israel. Esta verdad fue repetida seis veces en siete versículos en Números
18:20-26! La regla de "no herencia" para los que recibían diezmos se repite también
en Deuteronomio 12:12; 14:27, 29; 18:1-2; Josué 13:14, 33; 14:3; 18:7; y Ezequiel
44:28.
Cuando Pablo dijo en 1 Corintios 9:14, "los que predican el evangelio deben vivir
del evangelio", claramente tenía en mente principios evangélicos de gracia y
fe, a diferencia de muchos acaudalados líderes religiosos de la actualidad. Durante
casi 300 años, hasta el Concilio de Nicea en el año 325 D. C., la vasta mayoría de los
obispos, presbíteros, y diáconos vivía vidas ascéticas de auto-negación y pobreza
para servir mejor a los pobres de la iglesia. Entendían plenamente lo que Pablo
quería decir.
Deut. 14:29 Y vendrá el levita, que no tiene parte ni heredad contigo, y el extranjero,
el huérfano y la viuda que hubiere en tus poblaciones, y comerán y serán saciados;
para que Jehová tu Dios te bendiga en toda tu obra que tus manos hicieren.
Por otra parte, Dios le diría al sacerdote levita: "Los que predican la ley, deben vivir
de la ley". Esto significa que vivirían como los pobres de la tierra, que dependían
diariamente de Dios. Esto significa que rechazarían la riqueza mientras hubiese
pobres a quienes pudieran ayudar [¿redistribuyendo los diezmos y las ofrendas
que recibieran?].
Aunque esta tierra estaba ocupada por sacerdotes y levitas (tenían que vivir en
alguna parte), todavía pertenecía a la tribu en la cual existía. Por lo tanto, la tierra
no podía ser poseída o heredada de modo permanente. Sin embargo, vale la pena
notar el hecho de que esta tierra debía ser específicamente para el "ganado" y las
"bestias" que eran recibidas como diezmos. Aunque no servían en el templo (había
24 turnos semanales cada vez), es evidente que muchos estaban en sus tierras de
pastoreo apacentando sus animales. Véase también 2 Crónicas 31:15-19 y
Nehemías 10:37-38; 13:10.
Capítulo 7
¿Cuánto diezmo?
¿10%, 20%, o 23 1/3%?
¿Era el diezmo bíblico sólo del 10%, o pudo haber sido hasta del 23 1/3%? ¿Había
sólo un diezmo, o había dos diezmos, o tres? Una discusión sobre estas preguntas
no era originalmente parte de este libro, sino hasta que fue evidente por qué sólo
una respuesta es aceptable para la mayoría de los que enseñan el diezmo en el
nuevo pacto.
Charles Ryrie combina el segundo y el tercer diezmo en uno. "Se requerían dos
doezmos: un diezmo anual para el sostenimiento de los levitas (Lev. 27:30; Núm.
18:21) y un segundo diezmo, que era llevado a Jerusalén para las fiestas de Jehová
(Deut. 14:22). Sin embargo, cada tercer año el segundo diezmo era guardado en
casa para los pobres (Deut. 14:28" (40). La McClintock and Strong Encyclopedia,
diezmo, Sección I, último párrafo, también llega a la conclusión de que sólo existían
dos diezmos. Mi única objeción es que, si esto fuera cierto, entonces tendríamos
que llegar a la conclusión de que no había ninguna fiesta cada tercer año si no se
llevaba alimento.
Para los que, como este autor, creen que dar bajo el nuevo pacto bajo principios de
gracia reemplaza la totalidad del sistema de diezmo, no hay razón para ser
dogmático sobre cuál posición es la correcta. Sin embargo, para los que creen que el
diezmo ha de esperarse del cristiano del nuevo pacto, el diezmo del diez por ciento
puede ser la ÚNICA explicación verdadera y aceptable. ¡Esta posición es por
razones muy obvias! Mientras ya es bastante difícil pedirles el diez por ciento al
promedio de los miembros de iglesia, ¡sería mucho más difícil pedirles el veinte o
hasta el veintitrés un tercio por ciento!
Por lo tanto, los que defienden el diezmo exacto se colocan a menudo en una
posición intransigente, que llega a la conclusión de que el Antiguo Testamento sólo
enseñaba un diezmo del diez por ciento. Nótese el tono de las observaciones de
Eklund: "La idea de tres diezmos separados se ha hecho circular entre los
comentaristas por largo tiempo. Sin embargo, nosotros debemos permanecer fieles
a la Escritura y no a las tradiciones de los intérpretes bíblicos. Algunos han usado la
idea de tres diezmos separados como un medio para convertir el diezmo en una
doctrina anticuada, que no es válida para los creyentes del nuevo pacto. Esto se
hace presentando el diezmo levítico como un impuesto gubernamental, el diezmo
de festival como un ritual anticuado, y el diezmo de beneficencia como el dar a los
pobres. Puesto que los impuestos y los fondos para beneficencia son aplicados por
el gobierno, se supone que el diezmo ya no es necesario". (41).
Núm. 18:20 Y Jehová dijo a Aarón: De la tierra de ellos no tendrás heredad, ni entre
ellos tendrás parte. Yo soy tu parte y tu heredad en medio de los hijos de Israel.
Núm. 18:21 Y he aquí yo he dado a los hijos de Leví todos los diezmos en Israel por
heredad, por su ministerio ...
Deut. 12:6 Y allí [el lugar que más tarde sería Jerusalén] llevaréis vuestros
holocaustos, vuestros sacrificios, vuestros diezmos, y la ofrenda elevada de vuestras
manos, vuestros votos, vuestras ofrendas voluntarias, y las primicias de vuestras
vacas y de vuestras ovejas.
Deut. 12:7 Y comeréis allí delante de Jehová vuestro Dios, y os alegraréis, vosotros y
vuestras familias, en toda obra de vuestras manos en la cual Jehová tu Dios te
hubiese bendecido. ["Regocijarse" está en los versículos 7, 12, y 18).]
Deut. 14:23 Y comerás delante de Jehová tu Dios en el lugar que él escogiere para
poner allí su nombre, el diezmo de tu grano, de tu vino y de tu aceite, y las primicias
de tus manadas y de tus ganados, para que aprendas a temer a Jehová tu Dios todos
los días. ["Regocijarse" está en el versículo 26].
Si bien el primer diezmo era llevado a las ciudades levitas [" ... el diezmo de nuestra
tierra para los levitas, porque los levitas son los que reciben los diezmos en todas
las aldeas. Neh. 10:37b, NASU], el segundo diezmo anual era llevado a Jerusalén
para las festividades que acompañaban las numerosas reuniones. Además, a
diferencia del primer diezmo, junto con los levitas, los otros israelitas, los
miembros de sus familias, y los siervos, TODOS COMÍAN porciones de este diezmo.
También, a diferencia del primer diezmo, este diezmo era parte integral de del
REGOCIJO y la celebración en presencia del Señor. Es claramente diferente del
primer diezmo.
Deut. 14:28 Al fin de cada tres años sacarás todo el diezmo de tus productos de aquel
año, y lo guardarás en tus ciudades.
Deut. 14:29 Y vendrá el levita, que no tiene parte ni heredad contigo, y el extranjero,
el huérfano y la viuda que hubiere en tus poblaciones, y comerán y serán saciados;
para que Jehová tu Dios te bendiga en toda obra que tus manos hicieren.
Deut. 26:12 Cuando acabes de diezmar todo el diezmo de tus frutos en el año
tercero, el año del diezmo, darás también al levita, al extranjero, al huérfano y a la
viuda; y comerán en tus aldeas, y se saciarán.
Deut. 26:13 Y dirás delante de Jehová tu Dios: He sacado lo consagrado de mi casa, y
también lo he dado al levita, al extranjero, al huérfano y a la viuda, conforme a todo
lo que me has mandado; no he transgredido tus mandamientos, ni me he olvidado de
ellos.
A diferencia del primer diezmo, el diezmo del tercer año (en el año del diezmo) era
específicamente para todos los necesitados - ¡incluyendo el extranjero que no era
israelita!Sus recipientes incluían a los levitas, las viudas, los huérfanos, los sin
padre, y los extranjeros gentiles. Además, a diferencia del segundo diezmo, que iba
para Jerusalén, el tercer diezmo debía permanecer en las aldeas, "dentro de tus
ciudades", en casa. Este diezmo no podía ser el mismo que el primer o segundo
diezmo.
Matthew Henry se encuentra entre los que piensan que se debe enseñar el diezmo
del veinte por ciento para el cristiano del nuevo pacto. En realidad, le añade el
diezmo del rey y ¡consigue un total de tres diezmos que suman por lo menos 30 por
ciento! "Usted considera el diezmo, el doble diezmo, que la ley de Dios ha designado
para el sostenimiento de la iglesia, bastante gravoso, y resiente tener que pagarlo;
pero si usted tuviera un rey, habría otro diezmo de sus propiedades, que sería
recogido con más rigor, para el sostenimiento de la dignidad real" (42). Sin
embargo, los impuestos modernos llegan a más del treinta por ciento.
Hay buenas razones para discrepar con Eklund y aceptar dos o tres diezmos
separados. Primera, es extremadamente difícil interpretar la Escritura de otra
manera. Los levitas merecían ser sostenidos, y probablemente alimentaban a los
pobres con todos los tres diezmos, puesto que no existía un sistema secular de
beneficencia gubernamental. ¿No nos fija nuestro gobierno un impuesto de por lo
menos el diez por ciento para establecer cargos judiciales y proteger a la gente?
¡Recordemos que estos textos describen un gobierno teocrático (gobierno de
Dios)! Segunda, las festividades eran también importantes como reuniones
familiares nacionales; eran muchas y prolongadas y el gobierno no apartaba ningún
fondo para ellas. Si los ciudadanos de Israel hubiesen combinado todos los gastos
de cada festividad religiosa y nacional durante el año, habrían descubierto que
habían gastado por lo menos otro diez por ciento.
El diezmo del tercer año era suplementario para los pobres. En la actualidad,
nuestro gobierno, no nuestras iglesias, nos fija impuestos por encima del tres y un
tercio por ciento extra para Medicare, viviendas públicas, estampillas para
alimentos, y otros programas sociales. También debemos recordar que no se debía
recoger ningún diezmo de la tierra cada séptimo año, cada quincuagésimo año, y
cuando la sequía y la hambruna impedían la producción de la tierra. A causa de la
ocupación de los romanos, puede que esto se haya abandonado por completo.
El tercer diezmo revela que se esperaba que el levita estuviese entre los pobres. La
manera en que en Israel se trataba a los extranjeros, los huérfanos y las viudas era
extremadamente importante. Después de ser mencionados en Éxodo 22:21, y diez
veces en Deuteronomio, estas personas son enlazadas en Salmos, Isaías, Jeremías,
Ezequiel, Zacarías, y el muy importante texto sobre el diezmo de Malaquías 3:5 - un
total de 21 veces. Dios ordenó al Israel del Antiguo Testamento que cuidase de los
necesitados; ¡no era una opción!
Nuevamente, el diezmo del tercer año permanecía en las aldeas en vez de ser
enviado al alfolí del templo en Jerusalén. Además de los levitas, estaban incluidos
todos los demás que no tenían ninguna herencia. Dios responsabilizó a los
dirigentes religiosos cuidar de los necesitados. Otra vez, uno de los requisitos para
participar del diezmo era la carencia de una herencia de tierra en Israel.
Al dar una porción del diezmo para los pobres y los necesitados, el israelita
demostraba su compromiso de guardar TODA la ley. En la actualidad, no hay
ningún principio bíblico que permita a la iglesia enseñar sólo uno de los tres tipos
de diezmo para sostener a sus ministros y luego ignorar los diezmos de las
festividades nacionales y los diezmos del tercer año para los pobres y los
necesitados. Como el resto de la ley, el diezmo era un paquete completo de tres
partes inseparables que no se pueden divorciar del contexto de la totalidad de la
ley mosaica.
Deuteronomio 12:1-19;
Deuteronomio 14:22-26
Extraños hechos sobre el diezmo
Deut. 12:1 Estos son los estatutos y decretos que cuidaréis de poner por obra en la
tierra que Jehová el Dios de tus padres te ha dado para que tomes posesión de ella,
todos los días que vosotros viviréis sobre la tierra [heb. adamah].
Deut. 12:5 Sino que el lugar que Jehová vuestro Dios escogiere de entre todas
vuestras tribus, para poner allí su nombre para su habitación, ése buscaréis, y allá
iréis.
Deut. 12:6 Y allí llevaréis vuestros holocaustos, vuestros sacrificios,
vuestros diezmos, y la ofrenda elevada de vuestras manos, vuestros votos, vuestras
ofrendas voluntarias, y las primicias de vuestras vacas y de vuestras ovejas.
Deut. 12:19 Ten cuidado de no desamparar al levita en todos sus días sobre la
tierra. [heb. adamah].
¿Se dio cuenta usted de que Israel no entregó diezmos durante los 40 años que
pasó en el desierto? El diezmo de la ley mosaica del Antiguo Testamento estaba
integralmente conectado con la tierra de Canaán. Por lo tanto, no hubo diezmos
durante los 40 años en el desierto. Esto es lógico porque ninguna tribu tenía
ninguna herencia y a los levitas no se les dieron diezmos antes de que hubiese una
herencia de la cual diezmar. Según Deuteronomio 12:1, los estatutos y los juicios
sobre dar, incluyendo el diezmo, no comenzaron sino hasta que Israel estuvo
realmente en la tierra, y habrían de durar mientras Israel permaneciese en la
tierra.
Cuando Levítico 27:30 dice "todo el diezmo de la tierra es santo", se refiere a "LA
TIERRA DE CANAÁN" después de que Dios la hubiese santificado, ¡no a cualquier
tierra! La Palabra de Dios no dice, ni explícita ni implícitamente, que es todo el
diezmo "de la tierra de los Estados Unidos" ni "de la tierra de Gran Bretaña", etc. No
es un diezmo santo meramente porque procede de la "tierra" per se; sólo es un
diezmo santo si procede de "la tierra santificada de Israel". Moisés oró en
Deuteronomio 26:15: "Mira desde tu morada santa, desde el cielo, y bendice a tu
pueblo Israel, y a la tierra que nos has dado, como juraste a nuestros padres, tierra
que fluye leche y miel". La reverencia por la tierra es la razón de que al cuerpo de
Cristo no se le permitiese permanecer en la cruz durante la noche. "Si alguno
hubiere cometido algún crimen digno de muerte, y lo hiciereis morir, y lo colgáreis
en un madero, no dejaréis que su cuerpo pase la noche sobre el madero; sin falta lo
enterrarás el mismo día, porque maldito por Dios es el colgado; y no contaminarás
tu tierra que Jehová tu Dios te da por heredad" (Deut. 21:22-23).
12:19 Ten cuidado de no desamparar al levita en todos tus días sobre la tierra.
(Varias versiones dicen: "mientras vivas en tu tierra".
Después del exilio, esto fue modificado ilegalmente para incluir las tierras en las
que los israelitas vivían en Babilonia y Egipto, pero hasta esos diezmos inferiores
no eran lo bastante santos para ser llevados a Jerusalén y permanecían en las
sinagogas locales para los pobres. El concepto básico de que el polvo pagano
contaminaba jamás cambió por lo que concernía a los diezmos del templo
procedentes de las ciudades levitas.
14:23 Y comerás delante de Jehová tu Dios, en el lugar que él escogiere para poner
allí su nombre, el diezmo de tu grano, de tu vino y de tu aceite, y las primicias de tus
manadas y de tus ganados, para que aprendas a temer a Jehová tu Dios todos los
días.
Originalmente, el segundo diezmo anual debía ser llevado sólo a la ciudad de
Jerusalén para que todos lo consumiesen. Esto era para impedir puntos
competitivos de importancia y el falso culto. Después de que la nación se dividió, el
Israel del norte estableció sus propios centros de culto en Betel y en Dan, dando
como resultado un culto falso. Amós 4:4 es un ejemplo de lo que sucede al incluir el
diezmo en un culto falso.
14:24 Y si el camino fuere tan largo que no puedas llevarlo, por estar lejos de ti el
lugar que Jehová tu Dios hubiere escogido para poner en él su nombre, cuando
Jehová tu Dios te bendijere,
14:25 entonces lo venderás y guardarás el dinero en tu mano, y vendrás al lugar que
Jehová tu Dios escogiere;
14:26 y darás el dinero por todo lo que deseas, por vacas, por ovejas, por vino, u otra
bebida fermentada, o por cualquier cosa que tú deseares; y comerás allí delante de
Jehová tu Dios, y te alegrarástú y tu familia.
Deuteronomio 14, versículos 22-26, es uno de los pasajes más fuertes de la Biblia.
Puesto que transportar el diezmo en alimento era una carga física cuando uno vivía
demasiado lejos de Jerusalén, esto también prueba que el diezmo no era dinero, ¡el
cual no crearía ninguna carga! En realidad, Dios ordenaba la compra de vino o
bebidas fermentadas para la celebración de la festividad. A los alcohólicos les
encanta descubrir estos textos y tratar de justificar sus hábitos. Sin embargo, esto
no autoriza en modo alguno la borrachera ni el abuso del alcohol. Estos textos
describen el regocijo en los servicios de culto, no el abuso del consumo personal.
Además, puesto que la destilación no se practicaba como la conoce el hombre
moderno, el contenido alcohólico estaba muy por debajo de lo que se consume en
nuestros tiempos. A menudo, el agua de beber local estaba contaminada y era
peligroso beberla. También, la Escritura proporciona muchos textos que advierten
contra los males del abuso del alcohol, y no podemos alegar falta de acceso a agua
de beber potable.
Comer y beber del diezmo (14:23) en el "lugar" en presencia de del Señor no era
práctica normal, sino que estaba reservada para ocasiones especiales - el segundo
diezmo de festividad. La importancia de estos textos está en regocijarse y alabar a
Dios por sus bendiciones.
Dios no exigía ningún diezmo de la tierra cada séptimo año y cada quincuagésimo
año para permitir que la tierra santa reposara.
Éx. 23:11 Mas el séptimo año la dejarás libre, para que coman los pobres de tu
pueblo; y de lo que quedare comerán las bestias del campo; así harás con tu viña y
con tu olivar.
Lev. 25:11 El año cincuenta os será jubileo; no sembraréis, ni segaréis lo que naciere
de suyo en la tierra, ni vendimiaréis sus viñedos.
Lev. 25:12 Porque es jubileo; santo será a vosotros; el producto de la tierra
comeréis.
Lea Éx. 23:9-11 y Levítico 25:3-7, 11, 20-22. En estos "sietes" especiales, la tierra no
era ni sembrada ni cosechada. Quedaba abierta para que los levitas, los pobres, y
los trabajadores asalariados comeran libremente junto con el dueño de la
tierra. ¿No es justo preguntar cuántas iglesias de las que enseñan el diezmo también
les dicen a sus miembros que NO traigan diezmos cada séptimo año y cada
quincuagésimo año? ¿Qué principio les da a los que sostienen el diezmo autoridad
para eliminar los aspectos del diezmo discutidos en este capítulo?
Deut. 26:12 Cuando acabes de diezmar todo el diezmo de tus frutos en el año
tercero, el año del diezmo, darás también al levita, al extranjero, al huérfano y a la
viuda; y comerán de tus aldeas y se saciarán.
Deut. 26:13 Y dirás delante de Jehová tu Dios: He sacado lo consagrado de mi casa, y
también lo he dado al levita, al extranjero, al huérfano y a la viuda, conforme a todo
lo que me has mandado; no he transgredido tus mandamientos, ni me he olvidado de
ellos. [Véase también 14:28-29].
Mal. 3:5 Y vendré a vosotros [sacerdotes] para juicio [contra] ... los que defraudan en
su salario al jornalero, a la viuda y al huérfano, y los que hacen injusticia al
extranjero, no teniendo temor de mí, dice Jehová de los ejércitos.
1 Tim. 5:8 Porque si alguno no provee para los suyos, y mayormente para los de su
casa, ha negado la fe, y es peor que un incrédulo.
¡El Antiguo Testamento no ordenaba que los pobres diezmaran! ¡En realidad, el
hecho bíblico es que sucedía todo lo contrario! La ley mosaica mandaba que el
pueblo de Israel, especialmente los sacerdotes, alimentaran y cuidaran de los
pobres, las viudas, los huérfanos, los extranjeros, y los levitas con el diezmo. Los
pobres recibían parte de los diezmos, las ofrendas, las rebuscas, y la liberalidad de
Israel.
El Código de Leyes Judías dice: "El que apenas tiene lo suficiente para sus propias
necesidades, no está obligado a hacer caridad, porque su propio sostenimiento
tiene prioridad sobre el ajeno" (46). El Mishnah judío contiene otras exenciones
que se aplican a los pobres. Desafortunadamente, es demasiado común ver iglesias
grandes con muchos pobres que dan por encima y más allá de sus medios por
temor a la maldición de Malaquías 3:9. Es una desgracia esperar que los pobres
entreguen diezmos de sus cheques de beneficencia y del Seguro Social. Muchos
pobres que diezman luego se ven obligados a depender aun más de la beneficencia
porque la iglesia no devuelve más a los pobres de lo que recibe de ellos. Tal
tratamiento es opresivo para los pobres y un escándalo en la actualidad.
La ordenanza de la rebusca.
A causa de que el propósito era que fuese un siervo pobre de Dios y que no tuviese
herencia de la tierra ni ninguna riqueza personal, el levita era a menudo puesto a la
cabeza de la lista de los necesitados y los pobres. Como tal, el levita y los de su casa
recibían diezmos (Deut. 14:29; 16:11, 14, 26:11-13). Sin embargo, la lista de los que
tenían derecho a recibir diezmos también incluía otras personas que no poseían
tierras, como los extranjeros, los sin padre, los huérfanos, y las viudas. Como se
mencionó antes, el extranjero, el huérfano y la viuda son parte de tema recurrente
en el Pentateuco y los profetas mayores. Como pobres que no poseían tierras,
recibían diezmos, pero no estaban exentos de ciertas ofrendas.
Lev. 14:21 Mas si fuere pobre, y no tuviere para tanto [dos corderos], entonces
tomará un cordero [solamente] para ser ofrecido como ofrenda mecida por la culpa,
para reconciliarse, y una décima de efa de flor de harina amasada con aceite para
ofrenda, y un log de aceite.
Lev. 27:8 Pero si fuere muy pobre para pagar su estimación, entonces será llevado
antes el sacerdote, quien fijará el precio; conforme a la posibilidad del que hizo el
voto, le fijará precio el sacerdote.
Además de recibir diezmos, a los pobres también se les permitía llevar ofrendas
requeridas más pequeñas y se les permitía pagar menos dinero de redención. Los
pobres tenían muchas otras leyes especiales que les protegían. Siempre se les
permitía recuperar sus propiedades (Lev. 25:25-28); se exigía justicia igual para
ellos (Éx. 23:6; Prov. 31:9); Israel tenía que abrir sus puertas para ellos y prestarles
dinero libremente sin intereses (Deut. 15:7-8, 11; Lev. 25:35-36); las piezas de ropa
dadas en prenda por préstamos debían ser devueltas antes de la puesta del sol
(Deut. 24:12; y los salarios debían ser pagados diariamente antes de la puesta del
sol (Deut. 24:15; Mat. 29:8; Sant. 5:4). Estas leyes se aplicaban tanto a los israelitas
como a los extranjeros (Deut. 24:14).
Se le ordenaba a Israel hacer regalos especiales a los pobres during las festividades
(Ester 9:22) y cada séptimo año toda la tierra de labranza debía permnanecer
ociosa y estaba disponible para los pobres (Lev. 25:6). Lo mismo ocurría con cada
quincuagésimo año de jubileo; el gran festival del jubileo era especialmente para
los pobres y los necesitados (Lev. 25:8-16, 23-35; 27:16-25; Núm. 36:4; Eze.
46:17). Dios honra la cantidad de sacrificio al dar más que el valor de las cosas
dadas (Mar. 12:42-44). Deja claro que oprimir al pobre es pecado (Deut. 10:19;
Prov. 14:31, Jer. 22:16-17; Eze. 16:49; Amós 2:6-7; 4:1; 5:12; 6:4; Zac. 7:9-10; Mal.
3:5-6). Dios ciertamente castigará a los que oprimen a los pobres (Isa. 3:14-15;
10:1-2; 11:4), y los justos serán conocidos según cómo trataron a los pobres (Deut.
12:13; 15:11; Sal. 140:12-13; Prov. 19:17; 31:20; Jer. 22:16).
¿Cómo escapará el dirigente religioso rico? Isaías 3:14: "Jehová vendrá a juicio
contra los ancianos de su pueblo y contra sus príncipes; porque vosotros habéis
devorado la viña, y el despojo del pobre está en vuestras casas".
Lucas 2:22 Y cuando se cumplieron los días de la purificación de ellos [la de María,
por haber dado a luz], conforme a la ley de Moisés, le trajeron [a Jesús] a Jerusalén
para presentarle al Señor
Lucas 2:23 (como está escrito en la ley del Señor: Todo varón que abriere la matriz
será llamado santo al Señor) [Lev. 12:6-8]
Lucas 2:24 Y para ofrecer conforme a lo que se dice en la ley del Señor: Un par de
tórtolas, o dos palominos.
Los padres de Jesús no tenían que entregar diezmos. Eran pobres carpinteros a los
que nos se les exigía entregar diezmos del producto de la tierra si no poseían tierra.
Cuando presentaron al niño Jesús en el templo, no se les exigió la acostumbrada
ofrenda de un cordero del primer año, a causa de su pobreza.
Jesús no diezmó.
¡Jesús no diezmó! ¿Blasfemia? No, en absoluto. Los títulos de estos capítulos son
una verdadera sorpresa para la mayoría de los que abogan por el diezmo. La simple
razón de estas afirmaciones verdaderas se encuentra en la definición bíblica del
diezmo como se explica en el capítulo uno. La Biblia enseña claramente que sólo a
los propietarios de tierra israelitas y a los dueños de rebaños israelitas dentro de
Israel se les exigía diezmar sus productos. Esta definición muy estrecha, pero muy
verdadera, elimina a todos los que no eran propietarios de tierras, a todos los
comerciantes, y a todos los que eran demasiado desafortunados para criar animales
para ganarse la vida en Israel. Tampoco cambió jamás esta estrecha definición del
diezmo entre los judíos durante más de mil años; todavía era la definición en
tiempos de Jesús.
Mat.12:1 En aquel tiempo iba Jesús por los sembrados un día de reposo; y sus
discípulos tuvieron hambre, y comenzaron a arrancar espigas y a comer.
Mat. 12:2 Viéndolo los fariseos, le dijeron: He aquí tus discípulos hacen lo que no es
lícito hacer en el día de reposo.
¡Jesús no era una de las personas a las que se les exigía diezmar! Jesús había sido
carpintero y muchos de sus discípulos habían sido pescadores. Si ninguno de sus
doce discípulos era granjero ni ganadero, entonces, por ley, a ninguno de ellos se le
exigía diezmar, sólo hacer ofrendas voluntarias. Además, el incidente de más arriba
sobre la rebusca es notable. Primero, puesto que éste no era un año sabático ni un
año de jubileo, este incidente tiene que referirse a las leyes de la rebusca. Segundo,
las leyes sobre la rebusca eran específicamente para los pobres. Tercero, ¡los
fariseos no reprendieron a Jesús y a sus discípulos por no diezmar la cosecha! La
única acusación es la de que trabajaron en sábado.
En conclusión, puesto que los pobres no poseían tierras y, puesto que los pobres en
realidad recibían diezmos, Dios no requería que los pobres del Antiguo Testamento
diezmaran. Los pobres ni poseían tierras labrantías ni criaban rebaños
(sustancialmente) y, puesto que Dios está lleno de gracia y de misericordia, no está
dentro del ámbito de su carácter divino y santo pedirle a una persona pobre que
diezme y se prive a sí mismo y prive a su familia de las necesidades básicas de la
vida. No hay ni un solo texto del Antiguo Testamento que ordene diezmar a los
pobres. Dios estaba satisfecho con aceptar sus ofrendas voluntarias.
Los que les dicen a los pobres que den a la iglesia el diez por ciento de su ingreso
bruto y de esa manera hacen que esos mismos pobres sean privados de las
necesidades básicas simplemente no están enseñando principios de gracia y
ofrendas voluntarias ni del antiguo pacto ni del nuevo pacto.
46. Solomon Ganzfried, Code of Jewish Law, traducido por Hman E. Goldin
(Spencetown, New York: Hebrew Publishing, 1961), 1-111.
47. Rhodes Thompson, Stewards Shaped by Grace (St. Louis: Chalice Press,
1990), 122.
48. James Kennedy, Tithe, Coral Ridge Ministries, undated 4-page position
mailer (1999?).
49. Edersheim, Temple, 378.
Capítulo 10
I Samuel 8:14-17
I Crónicas 23-26
Reyes, diezmos e impuestos
1 Sam. 8:7 Y dijo Jehová a Samuel: Oye la voz del pueblo en todo lo que te digan;
porque no te han desechado a ti, sino a mí me han desechado, para que no reine
sobre ellos.
1Sam. 8:14 Asimismo [vuestro rey] tomará lo mejor de vuestras tierras, de vuestras
viñas y de vuestros olivares, y los dará a sus siervos.
1 Sam. 8:15 Diezmará vuestro grano y vuestras viñas, para dar a sus oficiales y a sus
siervos.
1 Sam. 8:16 Tomará vuestros siervos y vuestras siervas, vuestros mejores jóvenes, y
vuestros asnos, y con ellos hará sus obras.
1 Sam. 8:17 Diezmará también vuestros rebaños, y seréis sus siervos.
Mientras que los levitas sólo desempeñaban las tareas rutinarias y humildes de
sirvientes para sus hermanos aarónicos, su recibo de los diezmos era
probablemente muy inconsistente y hasta inexistente (Números 3, 4, y todo el 8).
La recolección de los diezmos también sería esporádica durante el reinado de reyes
extranjeros, la ocupación extranjera, y durante los tiempos de apostasía pagana.
Algunas familias hasta utilizaban a los levitas ordinarios como sacerdotes
familiares personales.
Cuando los israelitas pidieron un rey que les gobernase como a sus vecinos, Dios
declaró que ellos habían rechazado su reinado y le habían reemplazado con un rey
ungido. Desde la remota antigüedad hasta el Imperio Romano, el gobernante
político recogía el diezmo-impuesto en alimento y animales, y hasta sometía al
pueblo para financiar su gobierno, pagar los gastos del gobierno, construir edificios
gubernamentales, y proveer un ejército nacional. El rey Salomón hasta usaba mano
de obra forzada de israelitas y no israelitas para hacer que muchos ciudadanos
trabajasen cada tercer mes en las granjas y los proyectos del rey sin paga.
Tan pronto como Israel se convirtió en una nación gobernada por un rey, EL
PRIMER DIEZMO se convirtió en parte de un impuesto nacional que era recogido y
redistribuido por el rey de acuerdo con sus necesidades. 1 Samuel 8:10-17 dice que
el rey, a quien Dios "ungiría" como su representante, tomaría "lo mejor" y el
"décimo" que anteriormente pertenecían a Dios. El "décimo" era considerado como
"la porción del rey". El diez por ciento ya era una tradición de siglos entre los
vecinos cananeos de Israel y las naciones que lo rodeaban. Más tarde, como lo
testifican las reformas del rey David, el rey Ezequías y el gobernador Nehemías, los
políticos supervisaban la recolección y la distribución del diezmo. Debemos
recordar que, bajo Esdras y Nehemías, lo mejor y el impuesto del primer diezmo
iban para los persas, que eran los conquistadores y gobernantes. Los diezmos
recogidos por estos dos dirigentes eran sólo secundarios.
El rey David usó a los levitas, que recibían diezmos, como el núcleo de su
gobierno. En caso de que usted haya pasado por alto esta última afirmación, voy a
repetirla: El rey David usó a los levitas, que recibían diezmos, como el núcleo de su
gobierno. ¿Qué nos dice esto sobre cómo se usaba el diezmo durante los reinados
bendecidos por Dios de David y Salomón? Claramente, David tomó el control de los
levitas, y cualesquiera diezmos que ellos hayan podido recoger anteriormente. Sin
embargo, ningún diezmo se menciona en realidad en relación con David. Los
diezmos estaban más probablemente incluidos como parte adicional de los
impuestos reales pagados directamente a él, como sucedía en otras naciones de
alrededor.
Puesto que Dios había sido reemplazado por el rey como gobernante, era
responsabilidad del rey gobernar las instalaciones del culto, los levitas y los
sacerdotes. Este principio se usó más tarde para legitimar el "derecho divino de los
reyes" a recoger diezmos para el sostenimiento de una iglesia estatal. Vale la pena
notar que ni Dios, ni ninguno de sus profetas, objetó jamás este arreglo entre la
iglesia y el estado, comparable con el originado entre David e Israel.
Como obreros en el templo, David reorganizó los turnos de trabajo de los levitas
bajo su autoridad política. Los levitas servían en 24 divisiones, cada una de las
cuales servía en el templo sólo por una semana cada vez, o aproximadamente dos
semanas cada año (1 Crón. 24 completo; Lucas 1:5-56). Durante la construcción del
templo, David dividió a los 38,000 levitas como sigue: 24,000 supervisores de
construcción; 6,000 tesoreros y jueces; 4,000 porteros, y 4,000 músicos (1 Crón.
23:4-5).
Aunque los predicadores quieren que creamos que los levitas recibían diezmos
porque eran obreros de tiempo completo para Dios, ¡nos están engañando! ¡Mire la
lista que antecede! Como obreros del templo y supervisores de los obreros del
templo, ¡ciertamente deben haber sido expertos en las artes y los oficios! También
eran políticos y soldados. Después de que terminó la construcción del templo, es
muy probable que muchos de los 24,000 levitas que habían sido supervisores de la
construcción continuaran sirviendo al rey en otras posiciones. 1 Crónicas 26 es un
capítulo muy interesante para los que desean saber cómo se usaban sus diezmos.
Aunque sólo servían como dos semanas al año en actividades religiosas en el
templo, el resto del tiempo muchos levitas continuaban siendo el núcleo de los
oficiales del rey.
Ciertamente, David (y Salomón) habrían sido corregidos por Dios, o por los
profetas, si hubiesen usado los diezmos incorrectamente. Como escritores
inspirados de la Escritura, el Espíritu Santo guiaba sus decisiones. Pero la Escritura
registra el hecho de que los levitas eran para las actividades externas de Israel,
(1) "para todas las cosas de Dios" y (2)"los negocios del rey" (26:32). Compárese
también con Esdras 2:40-42,61; Neh. 7:43-45; Neh. 8:9; 10:28, 39; 12:44-45.
Una teocracia combina impuestos tanto civiles como religiosos.
Dios puso todos estos versíuculos en la Biblia para recordarnos que los levitas eran
oficiales públicos del estado y que los diezmos estaban incluidos como impuestos
estatales para sostenerles. Para algunos es difícil entender que las posiciones
"políticas" eran sostenidas por medio de los diezmos, para el sostenimiento de los
levitas, lo cual permitía al rey usar su primer impuesto-diezmo para otros fines.
Usar el número de levitas sobrantes (los cuales ya tenían derecho al diez por
ciento) era una cuestión simple de buena administración política del dinero por
parte del rey.
Es aun más difícil de entender cómo pueden los cristianos que enseñan el diezmo
ignorar este contexto del diezmo como impuesto político en el Antiguo Testamento.
Los impuestos totales, incluyendo los diezmos, fácilmente se aproximaban al
cuarenta (40) por ciento, lo cual es comparable con los que se encuentran en
nuestra sociedad moderna. ¡Además de sus deberes completamente religiosos, los
levitas (que recibían la totalidad del diezmo) desempeñaban puestos
gubernamentales normales, como jueces, tesoreros, secretarios, censadores,
genealólogos, policías de construcción y urbanos, y obreros de servicio social!
"Como es bien sabido, el rey controlaba los tesoros del palacio y del templo por
igual, lo que es comprensible, puesto que ellos eran responsables del
mantenimiento del santuario y su servicio ... Es razonable pensar que el diezmo,
que originalmente era un tributo religioso, vino a ser dirigido a la corte, y por lo
tanto, era supervisado por las autoridades reales" (50).
El Keil and Delitzsch Commentary dice: "Él [el rey] también retenía todas las
posesiones de ellos: los buenos (es decir, los mejores) campos, viñedos, y olivares
los quitaba y los daba a sus sirvientes; tomaba el diezmo de la siembra y los
viñedos (es decir, los productos que rendían) ... y levantaba el diezmo de los
rebaños ...(52).
Aunque una acción como ésta no era objetada por los profetas de Dios como en
desacuerdo con la ley del Antiguo Testamento, ninguna iglesia cristiana de la
actualidad querría que los políticos administraran sus finanzas. Sin embargo, seguir
el ejemplo del Antiguo Testamento debería obligarles a hacerlo. Pero, puesto que el
diezmo no pertenece al nuevo pacto, no tenemos guías en relación con su
recolección y redistribución.
Capítulo 11
2 Crónicas 31
El rey Ezequías restauró
el diezmo; 720 A. C.
Este capítulo más bien oscuro sobre el diezmo se combina con Nehemías para
ofrecer un trasfondo para Malaquías 3:10 al describir el uso de los diezmos y las
vidas fuera del templo tanto de los sacerdotes como de los levitas. Desde
Deuteronomio 26:13 hasta 2 Crónicas 31:5, no se menciona la palabra diezmo en la
Escritura. Este período abarcaba desde los Jueces, el reino unificado bajo los reyes
Saúl, David y Salomón, hasta el intento de reformas del rey Ezequías justo antes del
700 a. C. - ¡aproximadamente 800 años!
31:4 Mandó también al pueblo que habitaba en Jerusalén, que diese la porción
correspondiente a los sacerdotes y levitas, para que ellos se dedicasen a la ley de
Jehová.
La porción (que usted debería conocer si ha estado leyendo este libro) significa que
un décimo de los productos agrícolas y de los rebaños de Israel se le daba a los
levitas, los cuales, a su vez, daban un décimo de su décimo a los sacerdotes (Núm.
18:21-26). (A menos que Jerusalén se hubiese añadido más tarde) Ezequías erró al
ordenarles a los que vivían en Jerusalén que llevasen sus diezmos directamente al
templo, porque Jerusalén no era una ciudad sacerdotal levita (véase Josué 21:9-19).
Puede que el diezmo haya sido descuidado por tanto tiempo que este detalle de la
ley hubiese sido olvidado.
31:5 Y cuando este edicto fue divulgado, los hijos de Israel dieron muchas primicias
de grano, vino, aceite, miel y de todos los frutos de la tierra; trajeron asimismo en
abundancia los DIEZMOS de todas las cosas.
31:6 También los hijos de Israel y de Judá, que habitaban en las ciudades de Judá,
dieron del mismo modo los DIEZMOS de las vacas y de las ovejas; y trajeron
los DIEZMOS (53) de lo santificado, de las cosas que habían prometido a Jehová su
Dios, y los depositaron en montones.
Algo no tenía sentido. ¿No era éste el mismo templo que Salomón había construido?
¿Qué había hecho Salomón con todo este alimento y todos estos animales? ¿Dónde
los había puesto Salomón? ¿Había ocurrido antes este problema? El rey tuvo que
preguntarles a los sacerdotes y a los levitas. ¿Debía el rey haber ordenado al pueblo
que llevara sus diezmos directamente al templo? Para gran desengaño de los que
interpretan mal Malaquías 3:10, los versículos 15 al 19 [sic] dejan bien claro que
sólo una pequeña cantidad de diezmos fue realmente llevado directamente al
templo en Jerusalén (véase Neh. 10:37, 38).
Aunque el rey preguntó tanto a los sacerdotes como a los levitas sobre lo que se
debía hacer con los montones de diezmos, sólo el sacerdote en jefe contestó. Me
pregunto por qué. ¿Sería que sabía que se suponía que hasta la gente que vivía en
Jerusalén traería los diezmos a las ciudades levitas, como Nehemías dispuso más
tarde en Nehemías 10:37?
Si de hecho TODOS los diezmos habían sido llevados al alfolí en Jerusalén, ¡entonces
Ezequías estaba errado! Esto querría decir que Ezequías y el sumo sacerdote,
Azarías, no habían leído la ley con cuidado, como lo hizo Nehemías (in Neh. 10:29).
En consecuencia, ¡la orden de Ezequías sería una aberración y no la norma! Sin
embargo, el contexto de los siguientes textos demuestra que la mayor parte de los
diezmos NO era llevada al templo.
Aunque a los que enseñan el diezmo les gusta llamar a la iglesia el alfolí de Dios
para el diezmo, ¡fueron el rey Ezequías y y el sumo sacerdote Azarías, NO Dios,
quienes primero ordenaron incorrectamente que (algunos) diezmos fueran
llevados por el pueblo directamente a los almacenes en Jerusalén! Un alfolí era la
tesorería para el botín de guerra y las riquezas. Otro alfolí (más bien un cuarto de
depósito) guardaba las primicias y los primogénitos que serían consumidos por los
turnos semanales de los sacerdotes que ministraban. Por supuesto, esos levitas que
hacían sus turnos de una semana sirviendo en el templo también requerían un
lugar para almacenar su alimento de los diezmos (Neh. 12:44, 47). Considere esto:
Si el rey Salomón había construido almacenes para alimentos dentro de Jerusalén
para los diezmos en tiempos de abundancia, entonces Ezequías ya tenía los
almacenes de Salomón para usarlos en su tiempo, cuando había mucho menos.
Números 34, Josué 21, 2 Crónicas 31:15, 19; y Nehemías 10:37-38; 13:10 nos
recuerdan que los levitas y los sacerdotes vivían en suburbios "proporcionados" de
ciudades levitas designadas. Nehemías 10:37 está en lo correcto cuando dice "y
traeríamos el diezmo de nuestra tierra para los levitas; y que los levitas recibirían
las décimas de nuestras laboresen todas las ciudades". Y Nehemías 10:38 está en lo
correcto cuando dice que los sacerdotes recibían su décimo del diezmo de los
levitas, no en Jerusalén, sino en los suburbios de las ciudades. "Y el sacerdote hijo
de Aarón estaría con los levitas, cuando los levitas recibiesen el diezmo".
Finalmente, Nehemías 10:38 señala correctamente que los levitas (con los
sacerdotes) traían porciones de los diezmos al templo para los sacerdotes (y los
levitas) que servían diariamente; - "y los levitas traerán el diezmo de los diezmos a
la casa de nuestro Dios, a las cámaras, dentro de la casa del tesoro". ¡ESTE ES EL
CONTEXTO DE MALAQUÍAS 3:10!
Nuevamente, el sentido común nos dice que la mayor parte del DIEZMO era traído a
localidades rurales para ser distribuido a los 23 de 24 grupos que en ese momento
no estaban ministrando en el templo, y al resto de las familias de los varones que
estaban fuera para servir en el templo durante una semana. La distribución era
controlada por los levitas.
31:16 Se distribuían [las porciones] entre los varones de tres años para arriba que
estuvieran inscritos en el registro genealógico y que prestaran diariamente sus
servicios en el templo del Señor, según sus respectivos TURNOS y oficios.
Los levitas asignados a la distribución de los diezmos en el versículo 15 no tenían
que distribuir a los que en ese momento servían en el templo porque éstos recibían
distribuciones de las traídas en los versículos 5 y 6. Este texto es claro: la única
porción del diezmo necesaria para el templo era la justamente suficiente para
alimentar a los sacerdotes y levitas para su semana particular. Hasta las esposas,
las hijas, y los varones jóvenes de estos sacerdotes y levitas comían de los diezmos
de sus ciudades. Es muy probable que hasta esta excepción a la ley ordenada por
Ezequías hubiese sido corregida por Nehemías, y que cada sacerdote y cada levita
trajera su propia porción del diezmo de las ciudades al ir a servir.
31:17 También a los que eran contados entre los sacerdotes según sus casas
paternas; y a los levitas de edad de veinte años arriba, conforme a sus oficios y
GRUPOS.
31:18 Eran inscritos con todos sus niños, sus mujeres, sus hijos e hijas, toda la
multitud; porque con fidelidad se consagraban a las cosas santas.
Estos textos son más fáciles de leer en otras traducciones. Hay un recordatorio más
de que el rey David había dividido a los sacerdotes y a los levitas en 24 diferentes
grupos o divisiones para que se turnaran ministrando en el templo.
31:19 Del mismo modo para los hijos de Aarón, SACERDOTES, que estaban en los
SUBURBIOS DE SUS CIUDADES, por todas las ciudades, los varones nombrados
tenían cargo de dar sus porciones a todos los varones de entre los sacerdotes, y a
todo el linaje de los levitas.
Josué 21, 2 Crónicas 31:19, Nehemías 10:37 y 13:10 enseñan que, aunque estaban
fuera del templo durante 23 de las 24 semanas, los sacerdotes y levitas vivían
permanentemente "en los suburbios". La NAS dice "tierras de pastoreo"; la NKJV
dice "tierras comunitarias"; la NIV dice "tierras de labranza".
"¡Yo creía que, puesto que recibían el diezmo, se suponía que ellos eran ministros de
tiempo completo en el templo!" ¡Ése es el MITO que los predicadores quieren que
creamos! ¡En realidad, muchos de ellos tenían que ser PASTORES o granjeros la
mayor parte del tiempo! ¡Cuando no estaban en el templo llevando a cabo rituales,
cantando, haciendo guardia, o reparando, estaban cuidando de los animales traídos
a ellos en forma de DIEZMOS! ¡Deténgase y piense por un momento! SI cada
DÉCIMO animal se les daba a los levitas, y los levitas daban cada DÉCIMO animal a
los sacerdotes - ¿exactamente QUIÉNES creen ustedes que cuidaban de estos
animales? "Y tendrán ellos las ciudades para habitar, y los suburbios de ellas
serán para sus animales, para sus ganados y para todas sus bestias" (Núm. 35:3).
Esto nos lleva 1 Crónicas 23:4 nuevamente: "De éstos, veinticuatro mil [24,000]
para dirigir la obra de la casa de Jehová, y seis mil [6,000] para gobernadores y
jueces[civiles y religiosos]". ¿Dónde creen ustedes que los 24,000 levitas obtuvieron
toda la habilidad necesaria para construir, mantener, y supervisar la construcción y
el mantenimiento del templo? ¡Seguramente no podían supervisar algo que ni
siquiera conocían! La respuesta que yo sugiero es probablemente "tabú". La única
conclusión lógica es que muchos de ellos adquirían estas habilidades como
artesanos en sus ciudades levitas cuando no estaban en sus puestos en el templo.
Los levitas y sacerdotes eran usados también como jueces tanto CIVILES como
religiosos y dirigentes durante todo el reinado de David y después de su muerte.
La Biblia NO dice que no se suponía que los levitas y los sacerdotes trabajasen fuera
del templo. De ser esto cierto, entonces el rey David cometió un terrible error en 1
Crónicas 23:4. Además, esto convertiría a los sacerdotes y a los levitas poco más
que en gorrones que sólo trabajaban una semana de cada veinticuatro. El texto de
prueba que se da a menudo, Números 18:21-24 (que pocos leen en realidad), sólo
enseña que ellos recibían el diezmo en lugar de una herencia de la tierra. La lógica
enseña que, así como los que SÍ tenían herencia de tierra también podían trabajar
en otras ocupaciones, los sacerdotes y los levitas que NO tenían herencia de tierras
también podían trabajar en otras ocupaciones.
Mucho antes del tiempo de Jesús, los sacerdotes y los levitas se habían distanciado
de los judíos promedios por razones de política, riqueza, rituales, y puro
esnobismo. Vemos esto mejor en la parábola de Jesús sobre el buen samaritano.
Capítulo 12
Nehemías
El Contexto de Malaquías
Nehemías: El contexto de la declaración
de Malaquías sobre el diezmo.
Con excepción de los que se ofrecieron como voluntarios para vivir en la Jerusalén
llena de escombros, y los que formaban el grupo del cual uno de cada diez fue
obligado por sorteo a vivir allí, según el capítulo once de Nehemías, tenemos que
reconocer que ¡NUNCA se supuso que Jerusalén fuese la residencia permanente de
ninguno de los sacerdotes o levitas!
Cómo afectan la ley del diezmo las ciudades levitas y los 24 grupos.
Neh. 10:29 "Se reunieron con sus hermanos y sus principales, para PROTESTAR y
jurar que andarían en la LEY de Dios, que fue dada por Moisés siervo de Dios, y que
guardarían y cumplirían todos los mandamientos, decretos y estatutos de Jehová
nuestro Señor".
Nehemías y Malaquías fueron escritos para el mismo pueblo. Las cuatro
maldiciones de Malaquías son estas maldiciones autoimpuestas del Antiguo
Testamento, o la ley mosaica, cuando juntos reafirmaron el pacto con un
juramento.
Neh. 10:32-33 "Nos impusimos además por ley, el cargo de contribuir cada año con la
tercera parte de un siclo para la obra de la casa de nuestro Dios; para el pan de la
proposición y para la ofrenda continua, para el holocausto continuo, los días de
reposo, las nuevas lunas, las festividades, y para las cosas santificadas y los
sacrificios de expiación por el pecado d Israel, y para todo el servicio de la casa de
nuestro Dios".
Según Edersheim, este siclo del templo, no el diezmo, era con mucho la principal
fuente de ingreso del templo. Todo hebreo y todo siervo circuncidado y todo
prosélito estaba obligado a pagar el siclo del santuario. Después de comprar los
animales del sacrificio para todas las fiestas, lunas nuevas, y días de reposo, todavía
quedaba dinero para las necesidades civiles, como la reparación del muro y los
caminos. En palabras sencillas, el pueblo estaba de acuerdo en pagar impuestos
para sufragar las necesidades del templo.
Neh. 10:34 "Echamos también suertes los sacerdotes, los levitas y el pueblo, acerca
de la ofrenda de la leña, para traerla a la casa de nuestro Dios, según las casas de
nuestros padres, en los tiempos determinados cada año, para quemar sobre el altar
de Jehová nuestro Dios, como está escrito en la ley".
Este sencillo texto ilustra que los sacerdotes y levitas también estaban incluidos en
la labor manual de traer leña al templo. Se turnaban de acuerdo con el sorteo para
los "grupos" asignados. Para los sacerdotes y levitas, esto significaba una semana
de cada 24 cuando les tocaba ministrar en el templo (2 Crón. 23:8).
Neh. 10:35-37a "Y que cada año traeríamos a la CASA DE JEHOVÁ las PRIMICIAS de
nuestra tierra, y las primicias del fruto de todo árbol. Asimismo los primogénitos de
nuestros hijos y de nuestros ganados, como está escrito en la ley; y que traeríamos
los primogénitos de nuestras vacas y de nuestras ovejas a la casa de nuestro Dios, a
los sacerdotes que ministran en la casa de nuestro Dios; que traeríamos también las
primicias de nuestras masas, y nuestras ofrendas, y del fruto de todo árbol, y del vino
y del aceite, PARA LOS SACERDOTES, A LAS CÁMARAS DE LA CASA DE NUESTRO
DIOS ..."
Esta lista concuerda con la lista que se encuentra en la ordenanza de Números 18.
Además de su porción del diezmo, los sacerdotes que asumían su turno de una
semana ministrando en el templo tenían abundante comida de las primicias y
ofrendas de los primogénitos que era obligación llevar al templo en Jerusalén. A
esta lista se añadían muchos más alimentos provenientes de los sacrificios y
ofrendas voluntarias. Sin embargo, ninguno de estos artículos debía darse a sus
sirvientes levitas que ministraban junto a ellos como ayudantes, guardias del
templo, cantores, etc.
Neh. 10:37b "... y el DIEZMO de nuestra tierra para los levitas; y que los levitas
recibirían las DÉCIMAS de nuestras labores en todas las ciudades". [Compárese con
Núm. 18:21 Y he aquí yo he dado a los hijos de Leví todos los diezmos en Israel por
heredad, por su ministerio, por cuanto ellos sirven en el ministerio del tabernáculo
de reunión].
En toda la Biblia, este texto es posiblemente el que más perjudica a los que creen que
los diezmos deben ser llevados sólo al alfolí del templo (¿de la iglesia?). Esta sola
declaración arroja mucha luz sobre el verdadero significado de Malaquías 3:10:
"traigan todos los diezmos al alfolí". Puesto que la Palabra de Dios es exacta,
entonces o Nehemías 10:37b o Malaquías 3:10 ha sido "sacado de contexto"
drásticamente. La NKJV dice "comunidades agrícolas", y la NAS y la RSV dicen
"aldeas rurales".
¡ESTO ES MUY IMPORTANTE! Aunque los versículos 35-37b dicen que las primicias
y los primogénitos eran llevados "a los sacerdotes" en la "casa de Jehová" en
Jerusalén, el versículo 37b dice claramente que ¡el DIEZMO pertenecía a los levitas
en sus campos! Así, pues, en estricta obediencia a la ley, los judíos bajo Nehemías
llevaban las primicias y los primogénitos al templo para los sacerdotes que estaban
de turno ministrando (Neh. 10:35-37a), PERO llevaban los diezmos a los levitas
para que fuesen repartidos al resto de los sacerdotes en las ciudades levitas (Neh.
10:29, 37b).
"Manda a los hijos de Israel que den a los levitas, de la posesión de su heredad,
ciudades en que habiten; también daréis a los levitas los alrededores de esas
ciudades alrededor de ellas. Y tendrán ellos las ciudades para habitar, y los
alrededores de ellas serán para sus animales, para sus ganados y para todas sus
bestias" (Números 35: 2-3).
Por razones obvias, esta es la tercera vez que este texto es citado en este libro.
Números 35, Josué 20, 21, 1 Crónicas 6:48-81; 2 Crónicas 31:15-19, y Nehemías
10:37; 11:29; y 13:10, todos dan evidencia de que los sacerdotes y levitas no vivían
permanentemente en Jerusalén. Aunque no podían heredar tierras, vvían
originalmente, trabajaban la tierra, y pastoreaban ganado en 48 ciudades dispersas
en toda la nación. Estas 48 ciudades se nombran en Josué 20, 21 y 1 Crónicas 6.
Después de que la guerra civil dividió a la nación a la muerte de Salomón, la mayor
parte de las ciudades levitas dejó de existir y los levitas se trasladaron a Judá, que
tenía 13 ciudades sacerdotales (Josué 21:9-12) (2 Crón. 11:13-14; 13:10-12).
Aunque no se conocen los detalles exactos, los levitas (incluyendo los sacerdotes)
ocupaban tierras no heredables (que habían sido proporcionadas) alrededor de la
ciudad misma (que todavía pertenecía a la tribu en la cual estaba situada). Uno
puede sólo especular que: (1) o las 13 ciudades sacerdotales fueron ampliadas
grandemente para hacer lugar para los levitas no sacerdotes procedentes de las
otras 35 ciudades, o (2) los levitas no sacerdotes les fueron dadas otras ciudades en
Judá y Benjamín para reemplazar las que habían perdido.
Neh. 10:38 "Y que estaría el sacerdote hijo de Aarón con los levitas, cuando los
levitas recibiesen el DIEZMO; y que los levitas llevarían el DIEZMO DE LOS DIEZMOS
A LA CASA DE NUESTRO DIOS, a las cámaras de la casa del tesoro". [Compárese con
Núm. 18:26 "Así hablarás a los levitas y les dirás: Cuando toméis de los hijos de Israel
los diezmos que os dado de ellos por vuestra heredad, vosotros presentaréis de ellos
en ofrenda mecida a Jehová el diezmo de los diezmos"].
Primero, ¡se suponía que los sacerdotes recibirían los diezmos del pueblo, no en el
templo, sino en las ciudades levitas! Para entender Malaquías 3:10, vale la pena
repetir esto. ¡Se suponía que los sacerdotes recibirían los diezmos del pueblo, no en
el templo, sino en las ciudades levitas! En realidad, se suponía que los recibirían de
los LEVITAS, no directamente del pueblo. Cuando los diezmos eran recibidos en las
ciudades levitas, los sacerdotes separaban su parte, el diezmo del diezmo, del resto,
o la porción de los levitas, el 90%. Los levitas eran entonces responsables de llevar
el diezmo del diezmo, la porción de los sacerdotes, al templo en Jerusalén (y
seguramente los sacerdotes les acompañaban). ¡Esto no es lo que enseñan los
expositores de Malaquías 3:10!
Segundo, este versículo afirma claramente que ¡sólo "el diezmo del diezmo", la
"porción" de los sacerdotes, en la ley en Números 18:26, pertenece propiamente al
alfolí del templo! Aunque la sincronización y los detalles exactos seguirán, este
versículo exige que Malaquías 3:10 debe entenderse como sólo una orden para que
los sacerdotes deshonestos "traigan al alfolí todas 'LAS NECESARIAS PORCIONES
DE LOS SACERDOTES' del diezmo del diezmo".
Neh. 10:39 "Porque a las cámaras del tesoro han de llevar los hijos de Israel y los
hijos de Leví la ofrenda del grano, del vino y del aceite; y allí estarán los utensilios del
santuario, y los SACERDOTES que ministran, los porteros [LEVITAS] y los cantores; y
no abandonaremos la casa de nuestro Dios".
Recordando los versículos 35-38, la "ofrenda" de los "hijos de Israel" eran las
primicias, mientras que la "ofrenda" de "los hijos de Leví" es "el décimo del diezmo"
para los sacerdotes y el "diezmo" para los levitas que estaban ministrando. De
acuerdo con 2 Crónicas 31:15-19, las porciones de los levitas eran porciones
diarias.
Neh. 11:1, 3 "Habitaron los jefes del pueblo en Jerusalén; mas el resto del pueblo
echó suertes para traer uno de cada diez para que morase en Jerusalén, ciudad santa,
y las otras nueve partes en las otras ciudades"... "pero en las ciudades de Judá
habitaron cada uno en su posesión, en sus ciudades; los israelitas,
los sacerdotes y levitas, los sirvientes del templo y los hijos de los siervos de
Salomón".
Neh. 11:20-21 "Y el resto de Israel, de los sacerdotes y de los levitas, en todas las
ciudades de Judá, cada uno en su heredad. Pero los sirvientes del templo habitaban
en Ofel; y Ziha y Gispa tenían autoridad sobre los sirvientes del templo".
Los cristianos que enseñan el diezmo no quieren que usted lea los versículos que
anteceden. Quieren que usted crea que los sacerdotes y levitas pasaban todo su
tiempo ministrando en el templo. En realidad, pasaban la mayor parte de su tiempo
atendiendo sus animales y trabajando en sus campos. Jerusalén estaba todavía en
ruinas después de noventa años después de haber sido recuperada. Simplemente,
no hay una manera lógica de comparar a los sacerdotes del Nuevo Testamento con
los predicadores del nuevo pacto. Nuevamente, sería tonto enviar alimentos de los
diezmos a un lugar diferente de donde vivía la gente. Sólo sus dirigentes y obreros
especiales vivían permanentemente en Jerusalén (11:4-17).
Neh. 11:23, 36 "Porque había mandamiento del rey acerca de ellos [los cantores
levitas del versículo 22], y distribución para los cantores para cada día". ... Neh. 11:36
"Y algunos de los levitas, en los repartimientos de Judá y Benjamín".
Como veremos también en los textos siguientes, una pequeña porción del diezmo
de los levitas era llevad desde sus ciudades y usada día tras día para alimentar a los
cantores que estaban de turno durante su rotación de grupo semanal. Nuevamente,
se nos recuerda que los levitas vivían tanto en Judá como en Benjamín. ¡Esto es muy
diferente de decir que todo el diezmo se guardaba en el templo todo el tiempo!
¿Cuáles eran las "divisiones" de los levitas?
Estrechamente relacionado con las ciudades levitas está el hecho de que tanto
sacerdotes como levitas habían sido divididos por el rey David en 24 grupos, que
consistían de varias casas, o familias, por grupo. Véase 1 Crónicas 24 sobre los
sacerdotes y los capítulos 25 y 26 sobre los levitas. Cada grupo ministraba en el
templo sólo una semana de cada venticuatro (1 de 24), y dependiendo de cuántas
familias había en cada grupo, cada familia sólo ministraba en el templo dos o tres
días durante la semana de ministerio de su grupo. Véase también Esdras 6:18; 1
Crónicas 28:13, 21; 2 Crónicas 8:14; 23:8; 31:2, 15-19; 35:4, 5, 10; Neh. 11:30;
12:24.
Neh. 12:27-29 "Para la dedicación del muro de Jerusalén, buscaron a los levitas de
todos sus lugares para traerlos a Jerusalén ... tanto de la región alrededor de
Jerusalén como de las aldeas de los netofatitas; y de la casa de Gilgal, y de los campos
de Geba y de Azmavet; porque los cantores se habían edificado aldeas alrededor de
Jerusalén".
Neh. 12:44,47 "En aquel día fueron puestos varones sobre las cámaras de los
TESOROS, de las OFRENDAS, de las PRIMICIAS y de los DIEZMOS, para recoger en
ellas, de los suburbios de las ciudades, las PORCIONES LEGALES para los sacerdotes
y levitas; porque era grande el gozo de Judá con respecto a los sacerdotes y levitas
QUE SERVÍAN".
Neh. 12:47 "Y todo Israel en días de Zorobabel y en días de Nehemías daba
ALIMENTOS a los cantores y a los porteros, CADA COSA EN SU DÍA; consagraban
asimismo sus porciones a los levitas, y los levitas consagraban parte a los hijos de
Aarón".
Neh. 13:4-5 "Y antes de esto, el [sumo] sacerdote Eliasib, siendo JEFE DE LA CÁMARA
DE LA CASA de nuestro Dios, había emparentado con Tobías, y le había hecho una
gran cámara, en la cual guardaban ANTES las ofrendas, el incienso, los utensilios, el
DIEZMO del grano, del vino y del aceite, que estaba mandado dar a los levitas, a los
cantores y a los porteros, y la ofrenda de los sacerdotes".
Mientras Nehemías había estado fuera, en Babilonia, todo lo que había llevado a
cabo en los capítulos 10-12 se había detenido (versículo 6). ¡Este texto tiene todos
los componentes para ser el CONTEXTO de Malaquías 3:8-10! Primero, había
habido un alfolí designado para guardar las ofrendas, las primicias, y las porciones
diarias de los diezmos para los sacerdotes y levitas que ministraban durante su
turno rotativo de una semana. Segundo, Eliasib, el sumo sacerdote, había VACIADO
este alfolí y permitido que Tobías, el enemigo de Nehemías, lo ocupara. Tercero, la
responsabilidad por este pecado recaía en los sacerdotes, bajo la dirección del
sumo sacerdote.
Neh. 13:8-9 "Y me dolió en gran manera; y arrojé todos los muebles de la casa de
Tobías fuera de la cámara, y dije que limpiasen las cámaras, e hice volver allí los
utensilios de la casa de Dios, las ofrendas y el incienso".
¡Nótese que los DIEZMOS NO estaban incluidos entre los artículos devueltos al
alfolí! ¡Los DIEZMOS HABÍAN SIDO ROBADOS POR LOS SACERDOTES! Compárese
con Malaquías 3:8: "¿Robará el hombre a Dios? Pero vosotros me habéis robado.
Pero dijísteis: '¿En qué te hemos robado?' En los diezmos y las ofrendas". ¡Muy
claramente, los sacerdotes, NO EL PUEBLO, eran culpables de robar a Dios al quitar
y conservar para sí mismos los diezmos y las ofrendas! (¡No se olvide del 10:38!).
Neh. 13:10 "Encontré asimismo que las porciones para los levitas no les habían sido
dadas, y que los levitas y cantores que hacían el servicio habían huido cada uno a su
heredad".
Nehemías notó que habían desaparecido las porciones diarias de los diezmos que
se habían guardado para alimentar a los levitas que ministraban! ¡Nótese que él no
dijo que faltaban las porciones de los sacerdotes! ¡Realmente extraño! No teniendo
nada para comer, los levitas habían regresado a sus campos. Nuevamente, los
SACERDOTES habían robado las porciones del DIEZMO que pertenecían a los
LEVITAS. Por lo tanto, los levitas regresaron a sus hogares y reanudaron sus
actividades agrícolas y ganaderas (tal como de todos modos hacían el resto del
año).
Neh. 13:11-13 "Entonces reprendí a los oficiales, y dije: ¿Por qué está la casa de Dios
abandonada? Y los reuní y los puse en sus puestos. Y todo Judá trajo el DIEZMO del
grano, del vino y del aceite, a los almacenes. Y puse por mayordomos de ellos al
sacerdote Selemías y al escriba Sadoc, y de los levitas a Pedaías; y al servicio de ellos
a Hanán hijo de Zacur, hijo de Matanías; porque eran tenidos por fieles, y ellos tenían
que repartir a sus hermanos".
Con los levitas de vuelta en sus puestos, el diezmo de sus alimentos que había sido
robado debía ser reemplazado. Aunque no se nos dice qué sucedió con Eliasib, al
comparar el versículo 4 con el 13, la lógica nos dice que Nehemías lo había
reemplazado. Los "oficiales" entonces recibieron órdenes de indicarles a los
ciudadanos que debían reemplazar las porciones de los diezmos requeridas para
sostener a los que ministraban - una única excepción temporal a 10:37-38. En
consecuencia, la discusión de Nehemías sobre los diezmos termina cuando él
reemplazó a un supervisor del alfolí con cuatro personas fieles y dignas de
confianza que representaban tanto a los sacerdotes como a los levitas.
Como tipo del Mesías, Nehemías fue el primero que literalmente cumplió el tipo
mesiánico cuya sombra se ve en Malaquías 3:2-3 "¿Y quién podrá soportar el tiempo
de su venida? ¿o quién podrá estar en pie cuando él se manifieste? Porque él es como
fuego purificador, y como jabón de lavadores. Y se levantará para afinar y limpiar la
plata; porque limpiará a los hijos de Leví, los afinará como a oro y como a plata, y
traerán a Jehová ofrenda en justicia". En varias ocasiones, Nehemías purificó el
templo, a los sacerdotes, y a los levitas y puso a cargo a los que podían literalmente
presentar una ofrenda en justicia. Los sucesos históricos de Nehemías simplemente
deben ser incluidos en cualquier interpretación del libro de Malaquías.
Capítulo 13
Malaquías
Ministros que roban a Dios
Introducción
Aunque el libro de Malaquías sólo tiene cuatro (4) cortos capítulos, muchos no lo
han leído nunca completamente de una sola vez. Para beneficio de la claridad,
ruego a usted que lea cuidadosamente y con oración todos los cuatro capítulos
después de leer este párrafo. Mientras lee, hágase estas preguntas: "¿A quién está
hablando Dios en esta sección? ¿Cuándo comenzó Dios a hablar a este grupo de
personas? ¿Ha cambiado el grupo de personas a las cuales Dios se dirigió? Si es así,
¿qué evidencia hay de que Él ha cambiado de hablar a un grupo para dirigirse a
otro?" - Por favor, deténgase y lea Malaquías ahora.
Este autor cree que Malaquías debería ser dividido en sólo tres secciones: La
primera sección, 1:1 al 1:5, es la introducción. Dios quería que todo Israel, todo
Jacob, escuchara este mensaje porque todos estaban involucrados, directa o
indirectamente, en las causas y las consecuencias del mensaje. La segunda sección,
1:6 a 1:14, es la queja principal de Dios contra los sacerdotes arrogantes y
deshonestos. Esta sección es crucial para entender el resto del libro porque
proporciona la base fundamental para todos los otros problemas en el libro. La
tercera sección, 2:1 a 4:6, es el mensaje específico de Dios para los sacerdotes.
Aunque el resto de Israel está afectado indirectamente por las acciones de los
sacerdotes, Dios no cambia su mensaje después de que comienza en 2:1. Este
capítulo intentará revelar de modo convincente las razones para este
procedimiento. Si es correcto, entonces esta interpretación es devastadora para la
lógica usual presentada a favor del diezmo en la mayoría de las iglesias cristianas.
Es especialmente importante descubrir el verdadero significado de Malaquías 3:8-
10.
Mal. 1:1 Carga de la palabra de Dios para Israel por medio de Malaquías.
Mal. 1:6 El hijo honra al padre, y el siervo a su señor. Si, puies, soy yo el padre,
¿dónde está mi honra? y si soy señor, ¿dónde está mi temor?, dice Jehová de los
ejércitos a vosotros, OH SACERDOTES, que menospreciáis mi nombre. Y decís: ¿En
qué hemos menospreciado tu nombre?
Mal. 1:7 En que ofrecéis sobre mi altar pan inmundo. Y dijísteis: ¿En qué te hemos
deshonrado? En que pensáis que la mesa de Jehová es despreciable.
Mal. 1:8 Y cuando ofrecéis el animal ciego para el sacrificio, ¿no es malo? Preséntalo,
pues, a tu príncipe; ¿acaso se agradará de ti, o le serás acepto?, dice Jehová de los
ejércitos.
Mal. 1:9 Ahora, pues, orad por el favor de Dios, para que tenga piedad de nosotros.
Pero, ¿cómo podéis agradarle, si hacéis estas cosas?, dice Jehová de los ejércitos.
Mal. 1:10 ¿Quién también hay de vosotros que cierre las puertas o alumbre mi altar
de balde? Yo no tengo complacencia en vosotros, dice Jehová de los ejércitos, ni de
vuestra mano aceptaré ofrenda.
Mal. 1:12 Y vosotros lo habéis profanado cuando decís: Inmunda es la mesa de
Jehová, y cuando decís que su alimento es despreciable.
Mal. 1:13 Habéis además dicho: ¡Oh, qué fastidio es esto!, y me despreciáis, dice
Jehová de los ejércitos; y trajísteis lo hurtado, o cojo, o enfermo, y presentásteis
ofrenda. ¿Aceptaré yo eso de vuestra mano?, dice Jehová.
Mal. 1:14 MALDITO el que engaña, el que, teniendo machos en su rebaño, promete, y
sacrifica a Jehová lo dañado. Porque yo soy Gran Rey, dice Jehová de los ejércitos, y
mi nombre es temible entre las naciones.
(1:6) Según 1:6 y 2:1, Malaquías se dirige de lo más específicamente a los ministros
deshonestos, es decir, ¡a sacerdotes del Antiguo Testamento! Estos dos versículos,
1:6 y 2:1, son las CLAVES para entender el libro entero de Malaquías. En realidad,
estos dos versículos dicen lo OPUESTO de lo que a la mayoría de nosotros nos han
dicho toda la vida. Al estudiar el resto de Malaquías, no olvide el contexto de estos
dos versículos. Dios reprende específicamente a sus ministros, los sacerdotes, no al
pueblo. El primer "vosotros" en Malaquías 1:6 se refiere a los sacerdotes. Ellos son
culpables de deshonrar a Dios y de despreciar su nombre.
(1:7-8) Dios reprende a los ministros por darle lo que nadie más quiere. Al hacerlo,
los ministros son culpables de despreciar "la mesa de Jehová". Nótese que Dios no
dice que ellos no "tenían" la ofrenda adecuada para presentársela a Él. No hay
ninguna razón para concluir que los ministros se veían obligados a dar alimento
contaminado porque no tenían nada más que dar.
(1:9) Dios sólo critica a los SACERDOTES (no al pueblo) por traer OFRENDAS
inaceptables. Dios dice que ni siquiera su gobernante aceptaría estas ofrendas de
animales cojos o enfermos para su mesa. Esto es porque el gobernante sabía que
estos ministros tenían abundancia de animales buenos y saludables para sacrificar
de las ofrendas de los primogénitos y de su parte de los animales diezmados. ¿Por
qué es cierto esto? Porque Nehemías había ordenado al pueblo traer estas
ofrendas, y era tal la abundancia que se habían necesitado almacenes (véase Neh.
10:35-38; 12:44, 47; 13:4, 5, 12, 13).
(1:10) En Malaquías, Dios está extremadamente airado contra los sacerdotes. Les
dice que le gustaría que cesaran todo culto hipócrita. No se agradaba de los
sacerdotes, y no estaba dispuesto a aceptar de ellos ninguna ofrenda que no
significase nada.
(1:13) Este texto es muy interesante. KJV dice "lo descuartizado"; NIV, "lesionado";
NAS, NKJV y TLB prefieren "robado" o "hurtado"; y RSV dice "tomado por la fuerza".
Si era robado, entonces esto significa que, de alguna manera, los sacerdotes habían
tomado "más" que su parte legal. Puesto que las primicias, los primogénitos, y las
ofrendas iban a dar directamente a sus manos, los sacerdotes no podrían haber
robado estos artículos (Neh. 10:35-37b). Sin embargo, los sacerdotes habían
tomado la porción de los levitas del diezmo en el alfolí (Neh. 13:10-11).
(1:14) ¡Los que sólo leen la maldición de Malaquías 3:9 no se dan cuenta de que la
palabra maldición se había usado anteriormente cuatro (4) veces en Malaquías
para maldecir a los sacerdotes! Ds muy evidente que esta primera maldición de
Malaquías 1:14 se dirige a los sacerdotes, los ministros, del Antiguo Testamento. El
sacerdote "TIENE" animales aceptables para el sacrificio, recibidos de los diezmos y
las ofrendas. ¡Dios no los excusaba porque el pueblo no había entregado sus
diezmos adecuadamente! Aunque los sacerdotes no tenían que diezmar, se
esperaba que PROMETIERAN HACER ofrendas voluntarias de los diezmos y las
ofrendas que recibían. ¡Su pecado consistía en prometer darle a Dios lo mejor y
luego darle lo peor!
(2:1) A causa de esta vital relación con el resto de Malaquías, ¡este versículo se
convierte en la clave más importante para su significado! Por segunda vez, ¡Dios
claramente deja bien claro que se dirige específicamente a los sacerdotes! Puesto
que no hay ningún texto correspondiente en ninguna otra parte del libro de
Malaquías en el sentido de que Dios haya cambiado su auditorio primario, entonces
la conclusión es que Dios no cambió este auditorio durante el resto del libro. El
capítulo dos continúa la condenación de los SACERDOTES. Después de describir
algunos de sus pecados desde 1:6 hasta 1:14, Dios ahora describe su castigo.
(2:2) ¿Cuántos predicadores pasan por alto este texto cuando predican sobre la
maldición de 3:9? ¿Podría ser porque esta segunda, tercera, y cuarta ocurrencia de
MALDICIÓN en Malaquías (como la primera) se dirigen nuevamente a los ministros
mismos? Nada podría ser más claro que este texto.
Mal. 2:4 Y sabréis que yo OS envié este mandamiento, para que fuese mi PACTO CON
LEVÍ, ha dicho Jehová de los ejércitos.
Mal. 2:5 Mi PACTO con él fue de vida y de paz, las cuales cosas yo le di para que me
temiera; y tuvo temor de mí, y delante de mi nombre estuvo humillado.
Mal. 2:6 La ley de verdad estuvo en su boca, e iniquidad no fue hallada en sus labios;
en paz y en justicia anduvo ]el sacerdote levita] conmigo, y a muchos hizo apartar de
la iniquidad.
Mal. 2:7 Porque los labios del SACERDOTE han de guardar la sabiduría, y de su boca
el pueblo buscará la ley; porque MENSAJERO es de Jehová de los ejércitos.
Mal. 2:8 Mas vosotros [sacerdotes] os habéis apartado del camino; habéis hecho
tropezar a muchos en la ley; habéis corrompido el PACTO [sacerdotal] de Leví, dice
Jehová de los ejércitos.
Mal. 2:9 Por tanto, yo también os he hecho viles y bajos ante todo el pueblo, así como
vosotros no habéis guardado mis caminos, y en la ley hacéis acepción de personas.
Mal. 2:10 ¿No tenemos todos un mismo padre? ¿No nos ha creado un mismo Dios?
¿Por qué, pues, nos portamos deslealmente el uno contra el otro, profanando el
PACTO de nuestros padres?
(2:4-7) ¡No debemos olvidar estos versículos cuando leamos el capítulo 3, versículo
7, que es el contexto inmediato de los textos que hablan del diezmo de 3:8-10!). Si
bien es cierto que el pacto entero de Dios con todo Israel INCLUÍA su pacto
específico con los sacerdotes de la tribu de Leví, ¡EL ÚNICO PACTO ESPECÍFICO que
se menciona en el libro de Malaquías es el pacto de Dios con los SACERDOTES!
Estos versículos sobre el pacto de Dios con Leví nos recuerda que, cuando la nación
de Israel pecó, Dios hizo responsables en primer grado a los sacerdotes por no
llevar vidas justas delante de los israelitas y por no enseñar correctamente la
palabra de Dios, como lo habían hecho cuando la nación era joven.
Sin embargo, si Malaquías (como profeta) está hablando en nombre de todo Israel,
entonces "nosotros" significa la nación entera. Es razonable pensar que este texto
pertenece bien a 2:1-9 o bien a 2:11-12. Sin embargo, puesto que hasta ahora la
palabra pacto se ha usado en 2:5 y 2:8 para referirse limitadamente al pacto de
Dios específicamente con los sacerdotes, entonces no hay ninguna razón interna
para creer que Malaquías ha cambiado bruscamente al pacto general con todo
Israel.
En 2:10,el mensaje de Malaquías a los sacerdotes es: "Puesto que nosotros (los
sacerdotes y el resto de Judá) tenemos un solo Padre y un solo Creador, por lo
tanto, cuando nosotros (los sacerdotes) pecamos al violar nuestro pacto especial
con Leví, actuamos traidoramente con todos en la nación porque nuestro pacto es
parte del pacto de ellos". Esto nos trae a los pecados de Judá.
(2:11) Sobre 2:11 o 2:12, la mayoría de los comentaristas dice que Dios había
cambiado de hablar sólo a los sacerdotes a hablar a todo Judá. Las razones que se
dan para el cambio incluyen la mención de Judá y la condena por parte de Dios del
divorcio que todo Judá había cometido. Véase Esdras 9-10 y Nehemías 13.
(2:12) A menos que los sacerdotes y el resto de Judá abandonen a sus esposas
paganas y regresen a sus esposas israelitas, debían ser "cortados", se les debía
rehusar el acceso al ritual del culto en el templo, y debían ser considerados como
no israelitas.
Mal. 2:13 Y esta otra vez haréis cubrir el altar de Jehová de lágrimas, de llanto, y de
clamor; así que no miraré más a la ofrenda, para aceptarla con gusto de vuestra
mano.
Mal. 2:14 Mas diréis: ¿Por qué? Porque Jehová ha atestiguado entre ti y la mujer de tu
juventud, contra la cual has sido desleal, siendo ella tu compañera, y la mujer de tu
pacto.
Mal. 2:15 ¿No hizo él uno [marido y mujer] [¿estuvo el espíritu en esta unión?],
habiendo en él abundancia de espíritu? ¿Y por qué uno? Porque buscaba una
descendencia para Dios. Guardaos, pues, en vuestro espíritu, y no seáis desleales
para con la mujer de vuestra juventud. [Nota: Aquí hay dificultades en la
traducción].
Mal. 2:16 Porque Jehová Dios de Israel ha dicho que él aborrece el repudio, y al que
cubre de iniquidad su vestido, dijo Jehová de los ejércitos. Guardaos, pues, en vuestro
espíritu, y no seáis desleales.
Este texto tiene una fuerte relevancia para los sacerdotes porque ellos eran los
únicos que literalmente lloraban sobre el altar. El pueblo de Judá e Israel no tenía
acceso directo al altar y no podían literalmente "cubrir el altar de Jehová con
lágrimas". Según Nehemías, a Dios le desagradaban mucho más los sacerdotes que
el resto del pueblo por sus matrimonios con los paganos (Neh. 13:23-30).
Mal. 2:17 Habéis hecho cansar a Jehová con vuestras palabras. Y decís: ¿En qué le
hemos cansado? En que decís: Cualquiera que hace mal agrada a Jehová, y en los tales
se complace; o si no, ¿dónde está el Dios de justicia?
Mal. 3:1 He aquí, yo envío mi MENSAJERO [heb. Malaquías], el cual preparará el
camino delante de mí; y vendrá súbitamente a su templo el Señor a quien vosotros
buscáis, y el ángel del pacto, a quien deseáis vosotros. He aquí viene, ha dicho Jehová
de los ejércitos.
Mal. 3:2 ¿Y quién podrá soportar el tiempo de su venida? ¿o quién podrá estar en pie
cuando él se manifieste? Porque él es como fuego purificador, y como jabón de
lavadores.
Mal. 3:3 Y se sentará para afinar y limpiar la plata; porque LIMPIARÁ A LOS HIJOS DE
LEVÍ, Y LOS AFINARÁ como a oro y como a plata, y traerán a Jehová ofrenda en
justicia.
Mal. 3:4 Y será grata a Jehová la ofrenda de Judá y d Jerusalén, como en los días
pasados, y como en los días antiguos.
(2:17) Este texto, junto con el 2:13, debería ser suficiente evidencia de que Dios
nunca ha dejado de hablar directamente a los sacerdotes, y todavía no está
hablando a la gente en general. Este texto es meramente una repetición de las
burlas que los sacerdotes han estado lanzando a Dios durante todos los primeros
dos capítulos. La respuesta de Dios a la pregunta final: "¿Dónde está el Dios de
justicia?", está dirigida a los SACERDOTES en los versículos siguientes.
"Acuérdate de ellos, Dios mío, contra los que contaminan el sacerdocio, y el pacto del
sacerdocio y de los levitas [por medio de sus matrimonios con paganos]. Los limpié,
pues, de todo extranjero, y puse a los sacerdotes y levitas por sus grupos, a cada uno
en su servicio. Acuérdate de mí, Dios mío, para bien" (Neh.13:29-31).
Sin importar cuán ciertos sean los dos cumplimientos mencionados anteriormente,
el CONTEXTO histórico inmediato apunta bien a un sacerdote literal llamado
Malaquías, Esdras el sacerdote, o el gobernador mismo, que usa "Malaquías" como
seudónimo. Muchas profecías mesiánicas (si no todas) tienen un cumplimiento
histórico contextual mesiánico para la gente que vivía cuando se pronunció la
profecía.
Si Malaquías es una persona real (compárese con Hageo 1:3), todavía es vocero de
Dios y gobernador. Fueron un sacerdote (Esdras) y el gobernador (Nehemías)
quienes tuvieron el celo literal para limpiar literalmente el sacerdocio contaminado
y restaurar los sacerdotes a su pacto (Esdras 9-10; Neh. 13:8-13; 29-31). No
debemos pasar por alto el contexto histórico del libro de Malaquías en Nehemías.
(3:4) Es sólo después de que Dios haya "purificado a los hijos de Leví, y les haya
purgado como oro o plata, cuando pueden presentar al Señor una ofrenda en
justicia"; sólo entonces "será la ofrenda de Judá y de Jerusalén agradable al Señor".
Mal. 3:5 Y vendré a vosotros para JUICIO; y seré pronto testigo contra los
HECHICEROS y ADÚLTEROS, contra los que JURAN MENTIRA, y los que DEFRAUDAN
en su salario al JORNALERO, a la VIUDA y al HUÉRFANO, y los que hacen injusticia al
EXTRANJERO, no teniendo temor de mí, dice Jehová de los ejércitos.
Para que se entiendan correctamente, los textos sobre el diezmo en 3:8-10 deben
estar conectados con su contexto. Por lo tanto, para los fines de entender el diezmo
en Malaquías, ha sido necesaria toda la anterior discusión para clarificar el contexto
del capítulo 3, especialmente los versículos 5-7. Nuevamente, desde 1:6 hasa 4:6, el
contexto se dirige principalmente a los sacerdotes, no a la nación entera. El
"vosotros" de este versículo es una continuación del "vosotros" desde 2:17; 3:1, 2,
que son los "sacerdotes".
Por las siguientes razones, este autor cree que los que merecen ser juzgados en el
capítulo 3, versículo 5, son nuevamente los sacerdotes levitas, no la nación en
general.
Segunda, algunos de los que enseñan el diezmo insisten en que Malaquías estaba
describiendo la condición en Judá antes, o mucho después, de que Nehemías hiciera
cumplir el diezmo en los capítulos 10-13. ¡Esta suposición convierte a los
sacerdotes en VÍCTIMAS en vez de ladrones! Pero convertir a los sacerdotes en
víctimas es contrario al flujo del libro entero de Malaquías. Por ejemplo, no hay
ninguna indicación de que los sacerdotes son inocentes porque no tienen ofrendas
aceptables para traer a Dios. ¡Justamente sucede lo contrario! Dios dijo que ellos
habían retenido las ofrendas aceptables (1:14).
Tercera, no hay ninguna razón para creer que Nehemías sólo exigiría que este
diezmo obligatorio ocurriera una sola vez en el año. Conociendo a Nehemías,
tenemos que concluir que él continuó la práctica todos los años de allí en adelante.
Quinta, una omisión en la lista del versículo 5 puede proporcionar una buena razón
para concluir que este texto se dirige sólo a los sacerdotes levitas. En la ley, los
levitas son a menudo los primeros en la lista de Dios de personas que merecen el
diezmo porque no habían recibido herencia de tierras, servían a Dios a cambio del
sacerdocio de los primogénitos, que había sido abolido, y se suponía que se
identificaban con los más pobres de Israel.
Sexta, ¡hasta ahora, en Malaquías, los sacerdotes (no el pueblo) han recibido
terribles condenas de parte de Dios! Han sido hallados culpables de una amplia
gama de pecados, incluyendo una maldición por robo (1:6, 14). "Maldito sea el
engañador que en su manada tenga un macho, y prometa, y sacrifique a Jehová una
cosa corrupta". Nehemías 13:11 debe referirse primordialmente a los sacerdotes
que ministraban en el templo como los culpables de robar el diezmo a los levitas
(sólo las porciones de los levitas): "Entonces reprendí a los oficiales, y dije: ¿Por
qué está la casa de Dios abandonada?" - por los levitas hambrientos en el versículo
10.
Mal. 3:6 Porque yo Jehová no cambio; por eso, hijos de Jacob, no habéis sido
consumidos.
Mal. 3:7 Desde los días de vuestros padres os habéis apartado de mis ordenanzas, y
no las guardásteis. Volveos a mí, y yo me volveré a vosotros, ha dicho el Señor de los
ejércitos ...
Sin embargo, el contexto indica algo bien diferente. Puesto que Dios es justo y no
castigará al justo junto con el culpable, entonces juzgará los pecados de los
sacerdotes (3:1-4), y ya lo ha hecho en gran medida (2:1-17) maldiciéndoles cuatro
veces. Dios no cambia en relación con el juicio (2:17 a 3:4). Ha puesto la
responsabilidad final por los necesitados en manos de los sacerdotes (3:5) - y Dios
no cambiará ni liberará de sus responsabilidades a los sacerdotes culpables.
(3:7) ¡Es absolutamente deshonesto pasar por alto el contexto de los versículos 1-7
y comenzar a enseñar el diezmo desde el versículo 8! Nuevamente, pregunto:
"¿Está Dios hablando todavía a los sacerdotes, o a cambiado y ahora se dirige a la
nación entera en este versículo?" Aunque no encontramos una pista en la
frase "desde los días de vuestros padres ...", podemos concluir honestamente que
Dios está hablando a los israelitas y no a la iglesia.
La segunda frase: "... de mis ORDENANZAS, y no las guardásteis", proporciona una
pista sobre a quién está hablando Dios. ¿Ha leído usted alguna vez las palabras
exactas de laordenanza que establece el diezmo? Esta ordenanza es Números 18, el
capítulo que sirve de base para el diezmo. "Estatuto" y "ordenanza" ocurren cinco
veces en ese capítulo (vv. 8, 11, 19, 23).
¡Ya sea que Dios esté hablando sólo a los sacerdotes, o a la nación entera de Israel,
debería ser claro como el agua que los versículos 8-10 deben entenderse y
explicarse en el contexto de las ordenanzas o estatutos de la ley mosaica,
comenzando en el versículo 7! Las ordenanzas son las leyes de culto ceremonial
para los sacerdotes en el pacto antiguo. ¡El diezmo es una de estas 'ordenanzas' y no
es un 'mandamiento' moral!
¡NOTA! ¡Si usted COMIENZA su lectura en este capítulo (o este libro) en este
versículo, está perjudicando su propio conocimiento de la palabra de Dios, está
siendo deshonesto con el contexto de la palabra de Dios, y probablemente no
entenderá el significado de Malaquías 3:8-10! Ruego a usted que por favor se
detenga ahora, retroceda, y por lo menos lea el artículo entero hasta este punto
(preferiblemente 2 Crónicas 31 y Nehemías también).
Usted preguntará: "¿Dónde dice la Biblia que Dios está hablando sólo a los
sacerdotes?" Yo respondo: (1) Puesto que ES CLARO que Dios comenzó a hablar a
los sacerdotes en el 1:6, (2) enfáticamente continuó hablando a los sacerdotes en el
2:1, (3) debe todavía continuar hablándoles a ellos sobre sus altares en 2:13, (4) es
claro que todavía les está hablando desde 2:17 hasta el 3:4, ENTONCES (5) ¡Dios
todavía está dirigiéndose específicamente a los sacerdotes en el 3:8! Pregunto:
"¿Cuándo DEJÓ Dios de hablar a los sacerdotes? La carga de la prueba debe recaer
sobre los que dicen que Dios cambió súbitamente de auditorio, de los sacerdotes a
la gente.
Los que objetan dicen: "¡No, no no! ¡Todo eso es un error! ¡Los sacerdotes son
completamente inocentes! ¡El pueblo es culpable de no traer diezmos para los
sacerdotes! ¡El pueblo es culpable de robar a Dios!"
Yo contesto esta objeción preguntando: "¿Dónde encuentra usted esto entre
Malaquías 1:6 y 3:7?" Durante todo el libro de Malaquías, LOS SACERDOTES HAN
SIDO LOS VILLANOS, la parte culpable, los ladrones - y ahora, de repente, ustedes
dicen que ellos son la parte maltratada. ¡Cuán inconsistente se puede ser! Dios ya
ha MALDECIDO a los sacerdotes CUATRO VECES por robarle y por no traer lo que
ya poseían. Los sacerdotes no son las pobres víctimas inocentes que tantos
predicadores quieren que creamos. Los sacerdotes son los "ladrones" y los
"estafadores" que ya tienen los diezmos y ofrendas (desde Nehemías 10:38; 12:44,
47), no le están dando a Dios lo mejor y no están compartiendo con los levitas en
Nehemías 13:10 y los necesitados en Malaquías 3:5.
"¡Por fin", dirá el que enseña el diezmo, "usted tiene que admitir que AHORA, en
este versículo, Dios está hablando a la NACIÓN ENTERA y no a los sacerdotes!"
"Pero", objeta el que enseña el diezmo, "el versículo 9 dice claramente 'la nación
toda'".
Los sacerdotes ciertamente necesitaban una seria limpieza: "Y se sentará para
afinar y limpiar la plata; porque limpiará a los hijos de Leví, los afinará como a oro y
como a plata, y traerán a Jehová ofrenda en justicia" (3:3). ¿Por qué habría Dios de
cambiar tan de repente de maldecir a los sacerdotes a ayudarles en algunos
versículos más adelante (como dicen algunos)?
El nuevo pacto nos enseña que Jesucristo vino como el segundo Adán (Rom. 5:17-
19) y como Israel personificado (Mat. 2:15), para vivir la vida perfecta sin pecado y
obedecer cada una de las partes de la ley (Heb. 10:9). Por fe, su perfecta obediencia
se acredita al creyente (Rom. 3:24-26; 2 Cor. 5:21). En consecuencia, los cristianos
no están, y no pueden estar, bajo ninguna maldición bien del pacto antiguo o el
nuevo pacto porque los cristianos tienen la perfecta vida sin pecado de Cristo en
lugar de su obediencia a Dios. Como apunta tan bien mi buen amigo Jonathan
Kithcart: "¿Por qué moriría Cristo para redimirnos de la maldición de la ley, y luego
daría la vuelta y nos pondría otra vez bajo esa misma maldición? ¡Eso es una locura,
hombre!" (55) (citado en Gálatas 3:10).
.
Esta maldición era la maldición del pacto antiguo. Repito, ¡la maldición de
Malaquías 3:9 era la maldición del pacto antiguo! La nación había prometido a Dios
que obedecería completamente todas y cada una de las partes de la ley entera, o de
lo contrario quedaría bajo maldición. El auditorio de Malaquías, en Nehemías
10:28-29, renovó sus votos del pacto antiguo y, nuevamente, pidió a Dios que le
pusiera bajo maldición si dejaba de cumplir con cada una de las partes de la ley.
En relación con los versículos 8-10, el muy estimado J. Vernon McGee escribió: "Por
gracia, Dios quiere que usted dé en la medida en que pueda dar. Para algunas
personas, eso sería menos que el diezmo. Y yo soy de la opinión que muchos
miembros de esta sociedad acaudalada deberían estar dando más a Dios" (p. 84).
"Quiero recordarles nuevamente que nosotros no estamos bajo el sistema del
diezmo en la actualidad. Hay muchos creyentes humildes con muy pocos ingresos
para los cuales dar el diezmo sería demasiado" (p. 85). "En la actualidad, no existe
tal cosa como 'dar para el alfolí'. Ésa no es la manera en que damos porque lo que
Israel daba era en forma de productos" (p. 86) (56).
Un comentario final sobre la maldición de Malaquías 3:9. Sólo hay tres textos en los
cuales el mismo Jesús mencionó el diezmo. Y, créanlo o no, en realidad Jesús
maldijo (pronunció ayes) a los DIEZMADORES porque el resto de sus vidas era
hipocresía. ¡Esto prueba que no hay tal cosa como bendiciones automáticas para los
diezmadores! Véanse Mateo 23:23 y Lucas 11:42; 18:12.
Mal. 3:10 Traed todos los diezmos al alfolí y haya ALIMENTO en mi casa; y probadme
ahora en esto, dice Jehová de los ejércitos, si no os abriré las ventanas de los cielos, y
derramaré sobre vosotros bendición hasta que sobreabunde.
¿Qué significa "traed todos los diezmos al alfolí"? Durante más de cuarenta años, he
tenido la impresión de que hay algo erróneo en la interpretación de este versículo,
pero no había podido "poner el dedo en la llaga". Aunque, a primera vista, el
predicador superficial, el estudiante, o el laico crean que este versículo se explica
por sí solo, la verdad es que está muy lejos de hacerlo. Uno tiene que entender el
contexto bíblico inspirado tanto de Malaquías como de Nehemías para entender a
Malaquías 3:10.
La verdad es que, fuera de este solo versículo, Dios JAMÁS mandó a nadie que
trajera TODOS los diezmos al alfolí de Jerusalén. Es necesario decir esto
nuevamente. "Fuera de este solo versículo, Dios JAMÁS mandó a nadie que trajera
TODOS los diezmos al alfolí de Jerusalén". ¡De hecho, sucede lo contrario! Considere
cuidadosamente las siguientes instrucciones de la palabra de Dios.
En realidad, el pacto antiguo exigía tres diezmos diferentes, y sólo se mandaba que
se llevara al alfolí una pequeña parte. En consecuencia, con relación a Malaquías
3:10, hay algo gravemente erróneo en la explicación de los que enseñan el diezmo.
EL PRIMER DIEZMO, para los sirvientes levitas de los sacerdotes, NO debía ser
llevado al alfolí del templo. "Y he aquí yo he dado a los hijos de Leví TODOS LOS
DIEZMOS en Israel por heredad, por su ministerio, por cuanto ellos sirven en el
ministerio del tabernáculo de reunión" (Núm. 18:21). "Y [los levitas] estaban en las
ciudades de los sacerdotes, para dar con fidelidad a sus hermanos sus porciones
conforme a sus grupos, así al mayor como al menor" (2 Crón. 31:15). "Del mismo
modo para los hijos de Aarón, sacerdotes, que estaban en los suburbios de sus
ciudades, por todas las ciudades, los varones nombrados tenían cargo de dar sus
porciones a todos los varones de entre los sacerdotes, y a todo el linaje de los levitas"
(2 Crón. 31:19). "Y [traerán] el DIEZMO de nuestra tierra para los levitas; y que los
levitas recibirían los DIEZMOS EN TODAS LAS CIUDADES [NKJV: comunidades
agrícolas; NAS y RSV: aldeas rurales] (Neh. 10:27b).
Dios mandó que Israel trajera TODO el primer diezmo para los levitas (no para los
sacerdotes) donde ellos vivían en sus ciudades levitas - y Jerusalén no era una
ciudad leviita (véase Josué 21:9-19). Los levitas NO vivían permanentemente cerca
del templo en Jerusalén. Todos los cuatro textos anteriores dejan absolutamente
claro que los levitas recibían el diezmo ENTERO, TODO el diezmo, en sus ciudades -
y no los sacerdotes en el templo. Después de que los levitas recibían el diezmo,
tanto los sacerdotes como los levitas consumían la mayor parte de él fuera de
Jerusalén.
¿Qué HACÍAN la mayor parte del tiempo estos levitas que recibían el diezmo?
Mientras estaban en el templo, los levitas eran ayudantes de los sacerdotes,
guardias, cantores, y constructores y artesanos de todas clases. Los que estaban
fuera del templo era criadores de animales (Núm. 35:2), maestros, políticos y
jueces, y evidentemente afinaban sus habilidades como artesanos y supervisores de
artesanos. En 1 Crónicas 23:2-4 encontramos que, del total de 38,000, 24,000 eran
constructores y artesanos, y 6,000 eran jueces civiles y supervisores. ¡Éstos, sí,
éstos, recibían la TOTALIDAD del diezmo! ¡Ninguno ministraba como sacerdote!
¡Sorprendente en verdad!
Además, los hechos sobre las ciudades levitas y el programa de trabajo de 1 semana
de cada 24 (24 turnos) en el templo significaba que el 95% del diezmo permanecía
donde permanecía el 95% de los sacerdotes y levitas. Por lo tanto, Números 18:21;
2 Crónicas 31:15-19; y Nehemías 10:37-38 señalan claramente que es imposible
que Malaquías 3:10 se refiera a la TOTALIDAD del diezmo, incluyendo el que
pertenecía a los levitas.
El SEGUNDO DIEZMO, el diezmo de las fiestas, NO debía ser traído para ser
guardado en el alfolí del templo. Deuteronomio 12:17-18 "Ni comerás en tus
poblaciones el diezmo ... sino que delante de Jehová tu Dios lo COMERÁS, EN EL
LUGAR que Jehová tu Dios hubiere escogido, tú, tu hijo, tu hija, tu siervi, tu sierva, y el
levita que habita en tus poblaciones; te alegrarás ...". Usted puede leer acerca de este
diezmo en Deuteronomio 12, versículos 6-19 y en Deuteronomio 14, especialmente
el versículo 23. Este diezmo de la festividad era traído al lugar", es decir,
"Jerusalén", a una de tres celebraciones religiosas nacionales que eran compartidas
por TODOS. Puesto que el diezmo era siempre en alimento, era consumido por
todos en las calles mientras Israel celebraba. Por lo tanto, el segundo diezmo
tampoco era llevado a los almacenes del templo.
¿Confundido? ¿Cuántas veces ha oído usted a los predicadores señalar estos tres
textos mientras predica sobre Malaquías 3:10? Malaquías 3:10 no es tan evidente
por sí mismo ahora, ¿verdad? Claramente, "TODO" el diezmo NUNCA era traído al
"ALMACÉN". Por lo tanto, puesto que esto no sucedía nunca, entonces, ¿cómo
puede la iglesia usarlo como su principal ejemplo de "diezmar para el alfolí"????
Ahora hagamos que todo este enredo tenga algún sentido. El verdadero significado
de Malaquías 3:10 queda revelado por lo que Dios mandó realmente que fuese
traído al alfolí de Jerusalén. En relación con los diezmos en alimento, descubriremos
que el alfolí de Jerusalén era sólo el lugar en que se guardaba el alimento usado para
alimentar a los sacerdotes y levitas que se turnaban entrando y saliendo del templo
cada semana para sus ministerios semanales.
Si usted realmente quiere saber exactamente lo que Malaquías 3:10 quiere decir
cuando dice "traed todos los diezmos al alfolí", lea y estudie cuidadosamente los
siguientes tres juegos de textos, Números 18:9-32; Nehemías 10:35-38; 12:44, 47; y
2 Crónicas 31:15-19.
Primero, Nehemías 10:35 (que amplía Números 18:12-13) manda al "pueblo" que
traiga las "primicias" de la cosecha "a la CASA de Jehová cada año".
Segundo, Nehemías 10:36 (que amplía Números 18:15-18) manda que el "pueblo"
traiga los "primogénitos" de todos los animales limpios a "la CASA de nuestro Dios"
"a los sacerdotes".
Tercero, Nehemías 10:37a manda al "pueblo" que traiga las "primicias" y lo mejor
de la masa, los árboles frutales, el vino y el aceite nuevos a "las cámaras de la CASA
de nuestro Dios" "a los sacerdotes".
Quinto, Nehemías 10:38 (que expande Números 18:26) manda que los "levitas
(junto con los sacerdotes) traigan "el diezmo del diezmo", es decir, el "diezmo del
diezmo" de las ciudades levitas) "a la CASA de nuestro Dios, a las cámaras del
ALMACÉN", o casa del tesoro. "Y el sacerdote hijo de Aarón con los levitas, cuando
los levitas recibiesen el diezmo; y que los levitas llevarían el DIEZMO DEL DIEZMO a
la casa de nuestro Dios, a las cámaras de la casa del tesoro". ¡Nótese que al "pueblo"
normalmente NO se le mandaba "traer" ninguna parte del diezmo directamente al
templo porque los levitas y los sacerdotes era responsables de hacer eso!
Al comparar todos estos textos, es claro que al "pueblo" se le mandó traer el diezmo
a las ciudades levitas (no al depósito del templo) y que a los levitas y sacerdotes se
les mandó traer al templo la porción pequeña del diezmo para los sacerdotes. Por
lo tanto, ¿cómo puede Malaquías estar dirigido a todo el pueblo?
Nehemías 12:44 explica que era necesario traer alimento (de los diezmos) para los
sacerdotes y levitas que estaban de turno ministrando. Debían llevar "sólo las
porciones legales" al alfolí del templo. Cuando Nehemías 12:47 dice: "todo Israel en
días de Zorobabel y en días de Nehemías daba alimentos a los cantores y a los
porteros, cada cosa en su día", se refiere nuevamente sólo a la "porción" diaria que
se llevaba de las ciudades levitas al alfolí para hacer provisión para los que
ministraban (véase también 2 Crón. 31:16). Esta "porción" era del diezmo entero
de los levitas y del décimo del diezmo de los sacerdotes. Sin embargo (y esto es
importante), ¡el resto de los diezmos se guardaba en las ciudades levitas, donde
vivía la mayoría de los sacerdotes y levitas! Nuevamente, no tiene ningún sentido
poner ALIMENTO en un lugar mientras la GENTE vivía en otro lugar (véase 2
Crónicas 31:15-19).
¿Cómo comían los sacerdotes de un décimo del diezmo cuando los levitas comían
del diezmo entero? Nuevamente, la respuesta se encuentra en Números 18 y
Nehemías 10:35-38. Por lo menos una vez al año, cada familia traía primicias y
primogénitos A LOS SACERDOTES - ¡pero no a los levitas! El sentido común indica
que cada uno traía consigo su propia porción de alimento-diezmo de su ciudad de
origen.
"Bueno", preguntará usted, "si la TOTALIDAD iba a parar a manos de los levitas en
sus ciudades y no iba para el alfolí del templo en Jerusalén, entonces, ¿qué significa
Malaquías 3:10?"
Puesto que Malaquías 3:6-7 ya nos ha recordado que Dios no cambia con respecto a
su relación de pacto con Israel, entonces debemos concluir que Dios no cambió la
ordenanza del diezmo que se encuentra en Números 18:21-24 mientras el pacto
antiguo estuviese en vigor.
La única conclusión lógica que queda es consistente con la evidencia de que Dios
todavía está hablando solamente con los sacerdotes desde el 1:6 y, especialmente,
el 2:1:"Ahora, pues, oh sacerdotes, para vosotros es este mandamiento". Los
sacerdotes habían ayudado a los levitas a recoger los diezmos según Nehemías
10:38 y después habían procedido a "traer el diezmo del diezmo a la casa de nuestro
Dios, a las cámaras, a la casa del tesoro", no todos a la vez, sino sólo "cada día" o,
"según era necesario", para aquellos a los que les tocaba ministrar o "servir".
¿Qué sucedía con los diezmos después de que habían sido "traídos" en Nehemías
12:47? Habían sido llevados del templo (robados) por el Sumo Sacerdote (¿y otros
sacerdotes?) (Neh. 13:7-10) y tuvieron que ser reemplazados (Neh. 13:11-12) para
que los levitas pudieran nuevamente ayudar a los sacerdotes (Neh. 13:11). Si
Nehemías 13 es el contexto de Malaquías 3, ¡entonces los sacerdotes habían robado
la porción de los diezmos que pertenecía a los levitas!
Ya sea que Nehemías 13 es el contexto o no, "traer el diezmo del diezmo al alfolí" se
le ordenó, no al pueblo, sino a los levitas y sacerdotes de Nehemías 10:38. Por lo
tanto, "traed todos los diezmos al alfolí" sólo está dirigido a los levitas y sacerdotes
(o sacerdotes deshonestos) y sólo se refiere a las porciones diarias para los que
servían en el templo. La vasta mayoría de los diezmos DEBÍA permanecer en las
ciudades sacerdotales y levitas, donde permanecía la mayor parte de los sacerdotes
y levitas.
Los cristianos que enseñan el diezmo no pueden aceptar esta conclusión. Aceptar
este hecho sería reconocer que, excepto por aquel único turno que ministraba
activamente, el 90% de la porción de los levitas, TODO el diezmo de las fiestas, y
TODO el diezmo de los pobres debía permanecer fuera del alfolí. Aun peor para los
maestros del diezmo sería reconocer que el grueso de estos diezmos permanecía en
las ciudades levitas, donde la mayoría de los levitas y sacerdotes vivían
permanentemente con sus familias.
Aunque el diezmo fuese correcto en el nuevo pacto (que no lo es), el verdadero
significado de Malaquías 3:10 prohibe que se use para ordenar a miembros de
iglesia regulares traer TODOS sus diezmos al llamado "alfolí" de la iglesia. En
consecuencia, PUESTO que Malaquías 3:10 no significa que Israel debía traer la
TOTALIDAD del diezmo al alfolí, ENTONCES los predicadores no deben citarlo en el
sentido de que los cristianos también deben traer la TOTALIDAD del diezmo a la
iglesia.
Los cristianos que enseñan el diezmo hablan mucho del "alfolí" de la iglesia. Para
justificar esto, juegan con el verbo griego thesaurizo, que se ha traducido como
"almacenar", de 1 Corintios 16:2, para manipular el texto griego. La frase es
literalmente "por sí mismo, poner, almacenando". El texto no llama a la iglesia un
"alfolí" o almacén; meramente le dice al contribuyente lo que debe hacer con el
regalo. Muchos comentaristas hasta dicen que significa "almacenar en casa", sin
ninguna relación con un edificio de iglesia (que, dicho sea de paso, no existía
cuando Pablo escribió 1 Corintios) o apoyo pastoral.
Usted no hallará a los que enseñan el diezmo usando 2 Corintios 12:14 como
ejemplo del "alfolí" de la iglesia. Pero Pablo usó el mismo verbo griego, thesaurizo,
cuando dijo que "los hijos no deben atesorar para los padres, sino los padres para
los hijos". Por lo menos, por lo que concernía a Pablo, les dijo a los corintios que él,
el obrero del evangelio, debía trabajar para proveer para las necesidades de los
pobres de la iglesia. Repitió este pensamiento en Hechos 20:35.
Por las siguientes razones, una apropiada explicación del contexto de Malaquías no
convierte su alfolí en "el alfolí de la iglesia":
Dos: Mientras los alfolíes del Antiguo Testamento se consideraban propiedad del
estado religioso, la mayoría de las iglesias del nuevo pacto no lo son.
Tres: Mientras los alfolíes del Antiguo Testamento recibían ayuda política para
recoger sus diezmos, la mayoría de las iglesias del nuevo pacto no la reciben.
Siete: Mientras los alfolíes del Antiguo Testamento fomentaban los sacrificios
sacerdotales de auerdo con la ley, los líderes de las iglesias del nuevo pacto son
posiciones nuevas bajo nuevos principios.
Ocho: Mientras la mayor parte del alfolí del Antiguo Testamento era para las
porciones de los sacerdotes, consistentes de primicias, primogénitos, impuestos del
templo, y ofrendas de voto, este patrón no es seguido por las iglesias del nuevo
pacto.
Nueve: Mientras los diezmos del pacto antiguo era un fondo separado formado por
ofrendas voluntarias para edificios y mantenimiento, muchas iglesias del nuevo
pacto colocan todas sus necesidades en un programa total y eliminan
correctamente el principio del diezmo del pacto antiguo.
Diez: Puesto que los judíos ortodoxos no manejan dinero ni recogen ofrendas en su
sábado, es dudoso que los primeros cristianos judíos hayan cambiado esta
tradición manejando dinero en una iglesia. Sin embargo, los cristianos recogen la
mayor parte de su dinero en su día santo.
Once: Mientras que el templo del Antiguo Testamento, como los paganos, se
convirtió en un alfolí bancario ilegítimo (tesorería), la iglesia del nuevo pacto no
debe ser usada como un alfolí bancario comercial, o tesorería.
¡Dios también puso a prueba el carácter justo de sus hijos en el Antiguo Testamento
por la manera en que ellos trataban a los pobres! Le pregunto a usted: Si la iglesia
del nuevo pacto responde positivamente al probar a Dios, ¿se usa el tesoro
recolectado de la MISMA manera que Dios decretó para su uso en el pacto antiguo?
¿O conserva la mayor parte del dinero para pagar sus propios salarios? ¿O le dice la
iglesia típica a la congregación que "pruebe a Dios" diezmando y LUEGO "reprende
a Dios" al no tener misericordia de los pobres (Prov. 14:31)? ¿Queda la profesión
de la iglesia de "conocer realmente a Dios" demostrada al "juzgar la causa del
pobre" (Jer. 22:16)? ¿Están demasiadas iglesias, exactamente como Sodoma, llenas
de abundancia, pero no ayudan a los pobres (Eze. 16:49)? Después de probar a Dios
y recibir abundancia de tesoros, se esperaba que Israel tuviera cuidado de los
pobres de Malaquías 3:5. ¿Está su iglesia a la altura de esta "prueba" (Zac. 7:9-10)?
Los cristianos no son "probados" por la obediencia a la ley mosaica. Al contrario. En
Hechos 15:10, Pedro llama "tentar a Dios" tratar de poner a los gentiles bajo la ley.
Las cartas llamaron a esta acción "subvertir el evangelio" en Hechos 15:24.
Uno podría preguntarse: "Si Dios está hablando sólo a los sacerdotes que no podían
poseer ni heredar tierra de modo permanente, entonces, ¿por qué les promete
cosechas abundantes si traen el diezmo del diezmo al alfolí?"
Mal. 3:13 Vuestras palabras contra mí han sido violentas, dice Jehová. Y dijísteis:
¿Qué hemos hablado contra ti?
Mal. 3:13 Habéis dicho: Por demás es servir a Dios. ¿Qué aprovecha que guardemos
su ley, y que andemos afligidos en presencia de Jehová de los ejércitos?
Mal. 3:15 Decimos, pues, ahora: Bienaventurados son los soberbios, y los que hacen
impiedad no sólo son prosperados, sino que tentaron a Dios y escaparon.
Lea 1:6-14 una vez más; 3:13 suena como una reafirmación de 1:6-10 - los
sacerdotes habían despreciado el nombre de Dios con arrogancia al conservar para
sí los mejores animales de sacrificio (de los diezmos o los primogénitos) y al
ofrecerle los robados, los lisiados o enfermos. El versículo 14 es similar a la vanidad
del 1:12 y el reproche del 3:7. El versículo 15 imita al 2:7-8. Nuevamente, porque
los sacerdotes no habían cumplido sus obligaciones, todo Israel había seguido su
ejemplo.
Mal. 4:1 Porque he aquí viene el día ardiente como un horno, y todos los soberbios y
todos los que hace maldad serán estopa; aquel día que vendrá los abrasará, ha dicho
Jehová de los ejércitos, y no les dejará ni raíz ni rama.
Mal. 4:4 Acordaos de la ley de Moisés mi siervo, al cual encargué en Horeb
ordenanzas y leyes para todo Israel.
Mal. 4:5 He aquí yo os envío al profeta Elías, antes que venga el día de Jehová, grande
y terrible.
Mal. 4:6 Él hará volver el corazón de los padres hacia los hijos, y el corazón de los
hijos hacia los padres, no sea que yo venga y hiera la tierra con maldición.
(4:1) Esto se refiere nuevamente al castigo de los sacerdotes malvados del 3:2,
"quién podrá soportar el tiempo de su venida? ¿o quién podrá estar en pie cuando
él se manifieste? Porque él es como fuego purificador, y como jabón de lavadores".
(4:4) Este texto es un último recordatorio de que todo en el libro de Malaquías está
en el contexto de la ley del pacto antiguo, que ha sido declarada sin vigencia.
(4:6) El libro de Malaquías termina sin ninguna indicación de que Dios haya dejado
jamás de hablar directamente a los sacerdotes desde el 2:1. "Y ahora, oh sacerdotes,
este mandamiento es para vosotros". Para ser honesto con su interpretación de la
palabra de Dios, los predicadores cristianos deben dejar de engañar a los miembros
de iglesia menos informados y cesar de hacerles pensar que Malaquías 3:8-10
significa exactamente lo contrario de lo que realmente se enseñó.
Si uno quiere realmente hacer una correlación con la actualidad, entonces los
predicadores, antibíblicamente, han tomado el lugar de los deshonestos sacerdotes
de Malaquías. Por medio de sus acciones, están ocultando la doctrina del sacerdocio
de todos los creyentes para poder recoger diezmos. Hacen a un lado por completo
la definición bíblica de "diezmos". Piden que todos los diezmos sean traídos a la
iglesia, pasando por alto a Nehemías 10:37b. No ponen a disposición de los pobres
el mayor porcentaje del diezmo, como enseña la Biblia. Y nos preguntamos por qué
el Antiguo Testamento termina con la palabra "maldición".
(55) Jonathan Kithcart, mi buen amigo, es autor de Did the Apostle Paul Teach
Tithing to the Church? [Enseñó el apóstol Pablo el diezmo a la iglesia?], un desafío -
no contestado - dirigido a bien conocidos evangelistas para entrar en un diálogo
sobre el diezmo.
(56) Malachi, Through the Bible Commentary Series, J. Vernon McGee, Malachi 3:8-
10, Thomas Nelson Publishers, 1991.
Capítulo 14
Mateo 23:23; Lucas 11:41-42
Jesús respaldó el diezmo bajo la ley mosaica
Mat. 23:23 ¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! porque diezmáis la menta
y el eneldo y el comino y dejáis lo más importante de la ley: la justicia, la misericordia
y la fe. Esto era necesario hacer, sin dejar de hacer aquello.
Lucas 11:42 Mas ¡ay de vosotros, fariseos! que diezmáis la menta, y la ruda, y toda
hortaliza, y pasáis por alto la justicia y el amor de Dios. Esto os era necesario hacer,
sin dejar aquello.
Aunque ocurren antes del Calvario, Mateo 23:23 y Lucas 11:42 son los únicos
textos del "Nuevo Testamento" disponibles para los que enseñan el diezmo. En
apoyo del diezmo, Eklund reconoce: "El Nuevo Testamento no reconoce la práctica
de diezmar de Jesús. Sin embargo, sí leemos acerca de las muchas acusaciones
contra él por parte de los fariseos ... Si Jesús hubiese sido culpable de descuidar el
diezmo, obviamente las acusaciones se habrían hecho públicamente ... Jesús podría
haber declarado inválido el diezmo. En realidad, esto habría fortalecido su condena
contra los fariseos. Pero él dejó bien claro que todavía se esperaba el diezmo ..."
(57). Otro autor a favor del diezmo escribe: "¿Qué les dice usted a la gente cuando
las personas dicen que el diezmo ocurre sólo en el Antiguo Testamento? Bien, ¡no
han leído la Biblia! Necesitan leer [y cita Mat. 23:23]" (58).
Aunque personas no inspiradas designaron a los cuatro evangelios como libros del
"Nuevo Testamento", la mayoría de los cristianos pensantes saben que, en realidad,
el Nuevo Pacto no comenzó sino en el momento mismo en que Jesús murió en el
Calvario. La sangre de Cristo, la sangre del Nuevo Pacto, o testamento, selló y
ratificó el Nuevo Pacto y puso fin al pacto antiguo o ley mosaica una vez y para
siempre. Cuando Jesús exclamó "Consumado es", el velo del templo de Jerusalén se
rasgó de arriba abajo, exponiendo lo que había sido el Lugar Santísimo a la vista de
todos los que miraban. En ese mismo momento, en la mente de Dios, la totalidad
del sistema de sacrificios, con sus leyes, su sacerdocio, y sus ordenanzas dejó de
tener relevancia (Heb. 9:24-26). Por esta razón, Mateo 23 y Lucas 11 son eventos
en el contexto del pacto antiguo, no del nuevo. Estos pasajes no pueden
apropiadamente llamarse ejemplos del nuevo pacto.
Lucas 11:41 Pero dad limosna [caridad: NAS; a los pobres: NIV] de lo que tenéis, y
entonces todo os será limpio.
1. En Lucas 11:41, la verdadera pureza de conciencia se adquiere dando
voluntariamente a los pobres, en contraste con dar porque lo ordena la ley.
Gál. 4:4-5 Pero cuando vino el cumplimiento del tiempo, Dios envió a su Hijo, nacido
de mujer y nacido bajo la ley, para que redimiese a los que estaban bajo la ley, a fin
de que recibiésemos la adopción de hijos.
2. Jesús NACIÓ mientras se requería plena obediencia de los judíos a la ley mosaica.
Jesús VIVIÓ mientras se requería plena obediencia a la ley mosaica. ¡Y Jesús MURIÓ
mientras todavía se requería plena obediencia de los judíos a la ley mosaica! El
contexto del tiempo de Mateo 23:23 es puramente ley y no es parte del nuevo pacto
de gracia de la iglesia.
Mat. 23:1-2 Entonces habló Jesús a la gente y a sus discípulos, diciendo: En la cátedra
de Moisés se sientan los escribas y los fariseos.
3. Jesús hablaba a los discípulos de los pecados y los ayes (las maldiciones) que él
estaba pronunciando contra los fariseos (que sí diezmaban). No se estaba
dirigiendo a la iglesia bajo el nuevo pacto. Los versículos 1 al 3 son cruciales para
entender correctamente el versículo 23.
Mat. 23:2-3 En la cátedra de Moisés se sientan los escribas y los fariseos. Así que,
todo lo que os digan que guardéis, guardadlo y hacedlo ...
4. Jesús condenaba a los escribas y fariseos a causa de su encumbrada posición
como intérpretes de la ley. Nótese que los sacerdotes no aparecen por ninguna
parte. Este es el contexto de los versículos 2-12 antes de que comiencen las ayes
contra ellos. Jesús hablaba A sus discípulos SOBRE la deshonestidad de los
intérpretes de la ley mosaica. Jesús no estaba discutiendo cuestiones relacionadas
con la iglesia del nuevo pacto. Jesús los estaba "abatiendo" o "humillando" con los 8
ayes de los versículos 12-36.
6. "Hipócritas":
Los escribas y fariseos (los predicadores del tiempo de Jesús) eran los hipócritas -
los discípulos de Jesús. Los escribas y fariseos eran los que habían exagerado la ley
y la habían convertido en una carga. ¡Y eran ellos los que rehusaban obedecer las
mismas leyes que ellos exageraban! ¡Jesús no estaba disciplinando a sus discípulos!
Sin embargo, aunque citan este mismo texto en un intento de probar que Jesús
enseñaba el diezmo a la iglesia, probablemente no hay ninguna iglesia de la tierra
que realmente le diga a sus miembros que diezmen literalmente las especias de
jardín.
Es increíble cómo la mayoría de los cristianos que enseñan el diezmo citan este
versículo y omiten el contexto "de la ley". Dicen que Jesús enseñó el diezmo en un
contexto post-ley del nuevo pacto y omiten el contexto histórico del versículo, el
capítulo y el pacto.
Si se supone que este versículo debe ser interpretado como una orden de Jesús
para que los cristianos diezmen dinero (que el texto no afirma con claridad),
entonces debe ser interpretado como una orden de Jesús para que la iglesia diezme
especias de jardín ded acuerdo con la ley (que el texto sí afirma con claridad). Sin
embargo, aproximadamente 1600 años después de que el diezmo fuese limitado
primero a sólo productos alimenticios, este versículo todavía limita el diezmo a
productos alimenticios en los días de Jesús. La ley no había cambiado (Lev. 27:30-
34). ¡En consecuencia, contrariamente a nuestra definición contemporánea, los
diezmos pueden provenir de granos de trigo, pero no de granos de oro!
El New Unger´s Bible Dictionary dice: "El Mishnah incluye todo lo comestible, todo
lo que estaba almacenado o brotaba de la tierra. Ya en tiempos de Jesús, los fariseos
[no Dios] hicieron que la ley incluyera las más insignificantes plantas de cocina,
como la menta y el comino" (61).
The New Bible Dictionary concuerda: "A estas leyes comparativamente simples del
Pentateuco, que gobernaban el diezmo, [los fariseos] añadieron una cantidad de
minucias que convirtieron un hermoso principio bíblico en una gravosa carga.
Estas complejas adiciones están registradas en la literatura míshnica y talmúdica.
Esta desafortunada tendencia en Israel contribuyó sin duda a la convicción de que
la aceptación de Dios podía merecerse por medio de observancias rituales como el
diezmo (Lucas 11:42) sin someterse a la ley moral de justicia, misericordia y fe
(Mat. 23:23)". Como Unger, este diccionario concluye diciendo: "La referencia en el
Nuevo Testamento al diezmo de la menta, el eneldo, y el comino (Mat. 23:23; Lucas
11:42) ilustra una extensión talmúdica de la ley mosaica, asegurando que 'todo lo
que es comestible ... y brota de la tierra' debe diezmarse" (62).
Mateo 5:2-24 Por tanto, si [tú, judío] traes tu ofrenda al altar, y allí te acuerdas de
que tu hermano tiene algo contra ti, deja allí tu ofrenda delante del altar, y anda,
reconcíliate primero con tu hermano, y entoncs ven y presenta tu ofrenda.
Mateo 8:4 "Entonces Jesús le dijo: Mira, no lo digas a nadie; sino vé, muéstrate al
sacerdote, y presenta la ofrenda que ordenó Moisés, para testimonio a ellos".
10. Jesús sólo ordenó a los judíos que observaran la ley de Moisés y se presentaran
ante los sacerdotes. Si los que enseñan el diezmo van a usar a Mateo 23:23 para
hacer cumplir la práctica del diezmo en la iglesia, entonces 5:23, 24 y 8:4 deben
usarse también para continuar los sacrificios en el templo. Todos los tres conceptos
son pura ley mosaica.
11. Jesús no podía ordenar a los no judíos que se presentaran ante los sacerdotes
después de haber sido sanados, ni traer sacrificios al templo, ni diezmar. ¿Por qué?
¡Porque no podía hacerlo y todavía observar la ley! Los gentiles no estaban
gobernados por la ley mosaica, y la ley no permitía que los judíos no prosélitos
fuesen circuncidados ni diezmasen. ¡Los diezmos no habrían sido aceptados
aunque los cristianos gentiles hubiesen tratado de traerlos! ¡Para ser legítimos, los
diezmos sólo debían provenir de israelitas en toda regla y sólo desde dentro de
Israel! Por consiguiente, Mateo 23:23 no tiene ninguna relevancia para los
cristianos gentiles ni para la iglesia.
12. Es fácil demostrar que TODOS los ayes en Mateo capítulo 23 están dirigidos
contra los escribas y fariseos. Pero los que enseñan el diezmo en la actualidad
quieren pasar por alto cada una de las palabras de cada uno de los ayes dirigidos
contra los fariseos y recargar a la iglesia con los diezmos de Mateo 23:23. Esta es
hermenéutica muy pobre. ¡El VOSOTROS de Mateo 23:23 no es la iglesia!
13. En agudo contraste con la maldición de Malaquías 3:9 contra los sacerdotes
hebreos que habían robado los diezmos que habían prometido dar a Dios (1:14),
las únicas tres veces que Jesús mencionó el diezmo fue cuando MALDIJO A LOS
DIEZMADORES!!! ¡Aun bajo la ley, si la vida de una persona no fuera correcta
delante de Dios, el diezmo no le serviría de nada! Compárese con Mat. 23:23; Lucas
11:42; Lucas 18:12.
14. Cuando Eklund escribió: "Si Jesús hubiese sido culpable de descuidar el diezmo,
es obvio que las acusaciones se habrían hecho en público", reveló su errónea
interpretación de la definición del diezmo, como se explicó a fondo en el capítulo
uno. Los fariseos no acusaron a Jesús de no diezmar porque hubiese estado
diezmando; en lugar de eso, no le acusaron porque no le correspondía
diezmar. Jesús y sus discípulos no estaban obligados a diezmar porque eran pobres.
El incidente de la rebusca registrado tres veces (Mat. 12:1-12; Mar. 2:23-24, y Lucas
6:1-2) es importante. Si un diezmo hubiese sido requerido de todas las personas y
de todas las clases de alimentos cosechados, entonces podríamos haber esperado
que los fariseos acusaran a Jesús y a sus discípulos de no diezmar el grano que
acababan de recoger y comer. La ausencia de semejante acusación demuestra que
esa ley no se aplicaba a los pobres que cosechaban rebuscas. Compárese con
Levítico 19:10.
Capítulo 15
Lucas 18:12
El alarde del fariseo sobre el diezmo
El fariseo que se consideraba justo
Lucas 18:9 A unos que confiaban en sí mismos como justos, y menospreciaban a los
otros, dijo también esta parábola:
Lucas 18:10 Dos hombres subieron al templo a orar: uno era fariseo, y el otro
publicano [recaudador de impuestos].
Lucas 18:11 El fariseo, puesto en pie, oraba consigo mismo de esta manera: Dios, te
doy gracias porque no soy como los otros hombres, ladrones, injustos, adúlteros, ni
aun como este publicano;
Lucas 18:12 ayuno dos veces a la semana, doy diezmos de todo lo que gano.
Lucas 18:13 Mas el publicano, estando lejos, no quería ni aun alzar los ojos al cielo,
sino que se golpeaba el pecho, diciendo: Dios, ten misericordia de mí, pecador.
Lucas 18:14 Os digo que éste descendió a su casa justificado antes que el otro;
porque cualquiera que se enaltece, será humillado; y el que se humilla, será
enaltecido.
En los cuatro evangelios, cuando uno combina Mateo 23:23 con Lucas 11:42, la
palabra "diezmo/décimo" aparece sólo dos veces - en ambas ocasiones como parte
de una condenación dirigida a los fariseos QUE DIEZMABAN, por la hipocresía de
ellos. El fariseo de Lucas 18 se creía más justo y, por lo tanto, despreciaba a los
demás (v. 9). Cuando dijo: "No soy como los otros hombres, extorsionistas,
adúlteros, ni siquiera como este publicano", estaba alardeando de su propia justicia
por medio del ayuno y el diezmo (v. 11).
Excepto por su condena contra los fariseos, los evangelios, inspirados por el
Espíritu Santo, no registran ningún caso en que Jesús mencionase el diezmo.
Marcos y Juan ni siquiera usan la palabra.
Lucas 18:18 Un hombre principal le preguntó, diciendo: Maestro bueno, ¿qué haré
para heredar la vida eterna?
Lucas 18:20 Los mandamientos sabes: No adulterarás, no matarás, no hurtarás, no
dirás falso testimonio, honra a tu padre y a tu madre.
Lucas 18:21 El dijo: Todo esto lo he guardado desde mi juventud.
Lucas 18:22 Jesús, oyendo esto, le dijo: Aún te falta una cosa: vende todo lo que
tienes y dalo a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo: y ven, sígueme.
Lucas 18:23 Entonces él, oyendo esto, se puso muy triste, porque era muy rico.
Cada vez que se trataba de los ricos, Jesús se mostraba más preocupado por la
manera en que trataban a los pobres que por sus diezmos. Jesús le dijo al joven
rico: "Vende todo lo que tienes y dalo a los pobres". Este dicho de Jesús era citado
muy a menudo y su consejo era tomado literalmente por muchos líderes de la
iglesia primitiva durante los primeros tres siglos porque no deseaban ningún
salario que contradijera sus estilos de vida ascéticos. Nótese que Jesús no
dijo: "Vende todo lo que tienes, da diezmos a los sacerdotes, y da el resto a los
pobres". ¿Por qué no? ¿Qué sucedió con el diezmo? Muchos hoy día esperarían que
Jesús dijera: "Dalo a la iglesia". Sin embargo, más bien que promocionar el diezmo,
Jesús le dijo al joven rico que diera TODO, no al templo, sino a los pobres. Para el
joven rico, cuyo dios era el dinero, Jesús le pedía todo.
"Da a los pobres la mitad de lo que tienes".
Lucas 19:2 Y sucedió que había un varón llamado Zaqueo, que era jefe de los
publicanos, y rico.
Lucas 19:8 Entonces Zaqueo, puesto en pie, dijo al Señor: Señor, la mitad de mis
bienes doy a los pobres; y si en algo he defraudado a alguno, se lo devuelvo
cuadruplicado.
Lucas 19:9 Jesús le dijo: Hoy ha venido la salvación a esta casa; por cuanto él también
es hijo de Abraham.
En esta historia de Zaqueo se encuentra un relato muy similar al del joven rico.
Zaqueo prometió voluntariamente a Jesús: "Señor, la mitad de mis bienes doy a los
pobres; y si en algo he defraudado a alguno, se lo devuelvo cuadruplicado". Nótese
nuevamente la ausencia del diezmo. La mitad de su considerable riqueza fue
prometida directamente A LOS POBRES, no al templo [ni a la iglesia].
"Porque si primero hay la voluntad dispuesta, será acepta según lo que uno tiene, no
según lo que no tiene. Porque no digo esto para que haya para otros holgura, y para
vosotros estrechez, sino para que en este tiempo, con igualdad, la abundancia
vuestra supla la escasez de ellos, para que también la abundancia de ellos supla la
necesidad vuestra, para que haya igualdad" (2 Cor. 8:12-14).
Estos versículos se citan a menudo en este libro porque tocan el corazón mismo de
los principios de dar en el nuevo pacto. ¡Los ricos son más responsables ante Dios
por su dinero que los pobres! Dios les ha bendecido con talento para hacer dinero y
espera que ellos usen esa habilidad para Él. Sin embargo, uno no puede comprar el
favor de Dios. A diferencia del joven rico, Zaqueo no tenía un problema de dinero
como su dios. Por esa razón, Jesús le permitió que conservara por lo menos la otra
mitad de su riqueza. Dios bendice a ciertas personas que saben manejar la riqueza
apropiadamente. Observamos esto en Zaqueo, Nicodemo, y José de Arimatea. La
iglesia siempre necesita de los ricos fondos proporcionados por Dios para ayudar a
financiar su obra misionera.
Hechos 15 y 21
Transigencia y confusión
¡Pablo estaba en lo cierto! ¡La iglesia de Jerusalén, dirigida por Santiago y Pedro,
estaba errada! La transigencia que Santiago (y la iglesia) declararon causó una
división en la iglesia primitiva, lo cual finalmente condujo a la muerte, aunque
siglos más tarde, de esta particular iglesia judeo-cristiana legalista, que pronto
rechazó a Pablo y a todos sus escritos.
Hechos 15:1 Entonces algunos que venían de Judea enseñaban a los hermanos: Si no
os circuncidáis conforme al rito de Moisés, no podéis ser salvos.
Hechos 15:2 Como Pablo y Bernabé tuviesen una discusión y contienda no pequeña
con ellos, se dispuso que subiesen Pablo y Bernabé a Jerusalén, y algunos otros de
ellos, a los apóstoles y ancianos, para tratar esta cuestión.
Después de que una acalorada discusión sobre el lugar de la ley mosaica en la
doctrina cristiana no produjo ningún acuerdo satisfactorio, Pablo y Bernabé fueron
presionados para que continuaran la discusión en la iglesia de Jerusalén.
Hechos 15:5 Pero algunos de la secta de los fariseos, que habían creído, se levantaron
diciendo: Es necesario circuncidarlos, y mandarles que guarden la ley de Moisés.
Hechos 15:6 Y se reunieron los apóstoles y los ancianos para conocer de este asunto.
Hechos 15:7 Y después de mucha discusión, Pedro se levantó y les dijo: Varones
hermanos, vosotros sabéis cómo ya hace algún tiempo que Dios escogió que los
gentiles oyesen por mi boca la palabra del evangelio y creyesen.
Hechos 15:8 Y Dios, que conoce los corazones, les dio testimonio, dándoles el
Espíritu Santo lo mismo que a nosotros.
Hechos 15:9 Y ninguna diferencia hizo entre nosotros y ellos, purificando por la fe
sus corazones.
Hechos 15:10 Ahora, pues, ¿por qué tentáis a Dios, poniendo sobre la cerviz de los
discípulos un yugo que ni nuestros padres ni nosotros hemos podido llevar?
Hechos 15:11 Antes creemos que por la gracia del Señor Jesús seremos salvos, de
igual modo que ellos.
Luego, por si acaso alguien creía que Dios no bendeciría a los gentiles que no se
hubiesen comprometido a guardar la ley mosaica, Pablo contó muchas y grandes
experiencias de las bendiciones de Dios sobre los gentiles incircuncisos.
Hechos 15:19 Por lo cual yo juzgo que no se inquiete a los gentiles que se convierten
a Dios.
Hechos 15:20 Sino que se les escriba que se aparten de las contaminaciones de los
ídolos, de fornicación, de ahogado y de sangre.
Hechos 15:21 Porque Moisés, desde tiempos antiguos, tiene en cada ciudad quien lo
predique en las sinagogas, donde es leído cada día de reposo.
Después de recordarles a los cristianos judíos que la Biblia había profetizado que
los gentiles serían parte del pueblo de Dios (vv. 13-18), Santiago (el líder de la
iglesia) declaró que los cristianos judíos "no debían inquietar" a los cristianos
gentiles esperando que obedecieran la ley mosaica. ¡ESTO ES EXTREMADAMENTE
IMPORTANTE! Aunque estos cristianos judíos NO entendían que ellos tampoco
estaban sujetos a la observancia de la ley, SÍ habían llegado a la conclusión correcta
de que los cristianos gentiles NO estaban obligados a guardar ninguna parte de ella!
Amigos, ¡ESTO INCLUYE EL DIEZMO! Si estos cristianos judíos diezmaban (y creo
que sí lo hacían), diezmaban PARA EL TEMPLO porque todavía se consideraban,
incorrectamente, obligados a guardar toda la ley.
Esta decisión era una transigencia divisionista y peligrosa. Mantenía a los cristianos
judíos bajo la ley al mezclar la ley y la gracia, mientras mantenía a los cristianos
gentiles fuera de la ley sin mezclar la ley y la gracia. Cuando los predicadores
declaran con Pablo en Romanos 3:21 y 22 que la justicia de Dios se ha revelado por
medio de la fe "aparte de la ley" y luego añaden artículos anteriores de la ley
(¡como el diezmo!), ¡son estos predicadores los que causan división en la iglesia!
Hechos 15:22 Entonces pareció bien a los apóstoles y a los ancianos, con toda la
iglesia, elegir de entre ellos varones y enviarlos a Antioquía con Pablo y Bernabé: A
Judas, que tenía por sobrenombre Barsabás, y a Silas, a varones principales entre los
hermanos;
Hechos 15:23-26 y escribir por conducto de ellos: Los apóstoles y los ancianos y los
hermanos, a los hermanos de entre los gentiles que están en Antioquía, en Siria y en
Cilicia, salud: "Por cuanto hemos oído que algunos que han salido de nosotros, a los
cuales no dimos orden, os han inquietado con palabras, PERTURBANDO VUESTRAS
ALMAS, MANDANDO circuncidaros y GUARDAR LA LEY, nos ha parecido bien,
habiendo llegado a un acuerdo, elegir varones y enviarlos a vosotros con nuestros
amados Bernabé y Pablo, hombres que han expuesto su vida por el nombre de
nuestro Señor Jesucristo.
¡Más claro no puede ser! Los apóstoles, ancianos, y el cuerpo de la iglesia "no han
dado la orden" de que los cristianos gentiles "debían guardar la ley". Esperar que
no judíos guardaran la ley era comparable a "perturbar las almas". Hasta lo
pusieron por escrito para que Pablo pudiese mostrarlo a las iglesias que visitaba.
Esta era una decisión 100%, ¡"habiendo llegado a un acuerdo" entre todos los
presentes en el primer concilio de iglesia registrado! Pero las iglesias del siglo 21
han invertido esta carta y están mandando más y más a los miembros de iglesia que
"guarden la ley", ¡diezmando por lo menos!
Hechos 15:27-29 "Así que enviamos a Judas y a Silas, los cuales también de palabra
os harán saber lo mismo. Porque ha parecido bien al Espíritu Santo, y a nosotros, no
imponeros ninguna carga más que estas cosas necesarias: que os abstengáis de lo
sacrificado a ídolos, de sangre, de ahogado y de fornicación; de las cuales cosas, si os
guardáreis, bien haréis. Pasadlo bien".
Hechos 15:30-32 Así, pues, los que fueron enviados descendieron a Antioquía, y
reuniendo a la congregación, entregaron la carta; habiendo leído la cual, se
regocijaron por la consolación. Y Judas y Silas, como ellos también eran profetas,
consolaron y confirmaron a los hermanos con abundancia de palabras.
Cuando los cristianos gentiles oyeron decir que no se esperaba que llevasen la
carga de la observancia de la ley mosaica, "se regocijaron por la consolación" que la
noticia traía. Sin embargo, en la actualidad no se les permite a los creyentes
regocijarse cuando se les habla de la maldición de la ley en Malaquías 3:8-10.
Finalmente, en sus oficios de profetas, esta verdad de "ninguna carga más" fue
confirmada por Dios por medio de Judas y Silas. ¡Qué más clara enseñanza
necesitamos de la Palabra de Dios!
Hechos 21:17 Cuando llegamos a Jerusalén, los hermanos nos recibieron con gozo.
Hechos 21:18-19 Y al día siguiente, Pablo entró con nosotros a ver a Jacobo, y se
hallaban reunidos todos los ancianos; a los cuales, después de haberles saludado, les
contó una por una las cosas que Dios había hecho entre los gentiles por su
ministerio.
A los líderes de la iglesia no les preocupaba lo que Pablo les había estado diciendo a
los cristianos gentiles acerca de la ley. Creían que Pablo deliberadamente les había
dicho a los cristianos judíos que ellos tampoco estaban obligados ya a vivir en
obediencia a la ley. Pablo no pudo animarse a enseñar la transigencia divisionista
alcanzada en Hechos 15. Puesto que es bastante bueno para los gentiles ser
liberado de la ley por medio de la fe, entonces debe ser bastante bueno para los
judíos también. Para Pablo, la espontánea obediencia de "la ley del espíritu de vida
en Cristo Jesús", "porque el amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones
por el Espíritu Santo", era más que suficiente para la nueva creación en Cristo
(Rom. 8:2; 5:5).
Hechos 21:23-25 Haz, pues, esto que te decimos: Hay entre nosotros cuatro hombres
que tienen obligación de cumplir voto. Tómalos contigo, purifícate con ellos [en el
templo], y paga sus gastos [del templo] para que se rasuren la cabeza; y todos
comprenderán que no hay nada de lo que se les informó acerca de ti, sino que tú
también andas ordenadamente, guardando la ley. Pero en cuanto a los gentiles que
han creído, nosotros les hemos escrito determinando que no guarden nada de esto;
solamente que se abstengan de lo sacrificado a los ídolos, de sangre, de ahogado, y de
fornicación.
Esta era una iglesia legalista, divisionista, transadora, que sólo había entendido el
evangelio a medias. Por lo menos, entendieron que los cristianos gentiles nunca
estuvieron obligados a observar la ley mosaica (incluyendo el entregar diezmos).
Aunque esta misma iglesia daba ofrendas voluntarias con sacrificio y fanatismo en
Hechos 2:44-46, treinta (30) años más tarde todavía daba principalmente para
sostener el sistema del templo judío y no era posible que estuviese enseñando el
diezmo a la iglesia. Hechos 2:44-46 no es un ejemplo de diezmar porque ellos
todavía adoraban a Dios en el templo. Esto no habría sido permitido si hubiesen
dejado de sostener el templo financieramente. Todavía eran judíos primero en ese
momento.
Hechos 21:26-29 Entonces Pablo tomó consigo a aquellos hombres, y al día siguiente,
habiéndose purificado con ellos, entró en el templo para anunciar el cumplimiento de
los días de la purificación, cuando había de presentarse la ofrenda por cada uno de
ellos. Pero, cuando estaban por cumplirse los siete días, unos judíos de Asia, al verle
en el templo, alborotaron a toda la multitud y le echaron mano, dando voces:
¡Varones israelitas, ayudad! Este es el hombre que por todas partes enseña a todos
contra el pueblo, la ley y este lugar; y además de esto, ha metido a griegos en el
templo, y ha profanado este santo lugar. (Porque antes habían visto con él en la
ciudad a Trófimo, de Éfeso, a quien pensaban que Pablo había metido en el templo).
En 1 Corintios 9:20, Pablo había escrito: "Me he hecho a los judíos como judío, para
ganar a los judíos; a los que están sujetos a la ley (aunque yo no esté sujeto a la ley)
como sujeto a la ley, para ganar a los que están sujetos a la ley".
Desafortunadamente, cuando uno intenta "ser todas las cosas para todas las
personas", podría parecerles a los demás que, por lo menos, uno no es "nada para
nadie" al participar en todos los lados del problema. Pablo había enseñado la
verdad y dejado que los creyentes judíos arribaran a sus propias conclusiones.
Ahora su propio estilo de vida relativo a esos asuntos (al menos para los demás) le
llevó de vuelta a hacer un sacrificio en el templo para apaciguar a los líderes
divisionistas de la iglesia. (¿De qué otro modo podemos explicar honestamente el
versículo 26?) Cuando los judíos (que no eran cristianos) le reconocieron, las
acusaciones se amontonaron rápidamente.
RESUMEN: El apóstol Pablo casi fue muerto a golpes fuera del templo de Jerusalén.
Fue arrestado, enviado a la cárcel, y más tarde a Roma - todo porque la iglesia de
Jerusalén, la mayoría de cuyos miembros eran cristianos judíos, le había
ORDENADO entrar al templo, ofrecer sacrificios, y continuar observando toda la ley
mosaica. Hoy día, casi veinte siglos después, hay iglesias y denominaciones
cristianas que nuevamente están ORDENANDO a los miembros de iglesia que
observen esa misma ley mosaica. Ya sea que esto tome la forma de sabadismo,
alimentos impuros, festividades eclesiásticas obligatorias, o diezmos - todavía es
erróneo y divisionista.
Capítulo 17
Hebreos 8
2 Corintios 3
Un pacto nuevo y mejor
Los teólogos Gordon Fee y Douglas Stuart escribieron en su libro de texto para
seminarios: "El Antiguo Testamento no es nuestro testamento. El Antiguo
Testamento representa un pacto antiguo, que ya no estamos obligados a guardar.
En consecuencia, apenas podemos comenzar suponiendo que el pacto antiguo
debería ser obligatorio para nosotros. En realidad, tenemos que suponer que
ninguna de sus estipulaciones (leyes) son obligatorias para nosotros a menos que
hayan sido renovadas en el nuevo pacto. Es decir, a menos que una ley del Antiguo
Testamento sea de alguna manera replanteada o reforzada en el Nuevo
Testamento, ya no es directamente obligatoria para el pueblo de Dios (comp. Rom.
6:14-15"). (63).
¡Dios hizo eso! El cambio radical necesario ocurrió en el Calvario. ¡En Cristo, Dios
puso fin, abolió, y anuló el pacto antiguo y cada ley, mandamiento, ordenanza,
juicio, y precepto dado por medio de Moisés en el Monte Sinaí! Puesto que cada
tipo, símbolo, y cada sombra fue cumplida perfectamente en Cristo Jesús, la
"justicia" revelada anteriormente en la ley AHORA ha sido revelada en Cristo Jesús
(Rom. 3:19-20 comp. 3:21-22). Nuevamente, la "justicia" que la ley exigía se
cumplió en Cristo. Luego, Dios tomó lo MEJOR de ese pacto antiguo, y lo
REPLANTEÓ en el contexto de Jesucristo y el Calvario. Sin embargo, el
"replanteamiento" no fue en la forma de "no harás". En su lugar, fue en la forma de
privilegios de lo que "harán las nuevas creaciones en Cristo Jesús". Lo mejor incluía
especialmente los principios morales de Dios de amor, justicia, misericordia, y fe
(Lucas 11:42; Mat. 23:23).
Cuando abrimos nuestras Biblias, primero tenemos que pedirle a Dios que guíe
nuestro entendimiento de su palabra. Luego, tenemos que ajustarnos mentalmente
a la posición del texto que estamos a punto de leer. ¿Es esto pacto antiguo o nuevo
pacto? ¿Es esto ley mosaica u otra revelación del pacto antiguo? ¿Es
esto antes o después del Calvario? Si el texto es antes del Calvario, ¿expresa una
enseñanza temporal de kindergarten, una "sombra", que terminó en el Calvario, o
contiene un principio eterno que precedió a la creación y fue replanteado después
del Calvario para la iglesia del nuevo pacto?
Heb. 8:6 Pero ahora tanto mejor ministerio es el suyo, cuanto es mediador de un
mejor pacto, establecido sobre mejores promesas.
Ya sea que discutamos el diezmo o asuntos mucho más importantes, el nuevo pacto
no es simplemente un pacto antiguo "enmendado" - es realmente un "NUEVO"
pacto, un "ministerio más excelente", un "mejor pacto", y está "establecido sobre
mejores promesas". No logro entender por qué esta sencilla verdad es tan difícil de
comprender. Esto significa que el don de la gracia es un ministerio más excelente,
que el don de la gracia es parte de un mejor pacto, y que el don de la gracia está
establecido sobre mejores promesas. A Dios no le pareció bien reafirmar el diezmo
en los documentos del nuevo pacto.
Heb. 8:7 Porque si aquel primero hubiera sido sin defecto, ciertamente no se habría
procurado lugar para el segundo.
Heb. 8:8 Porque, reprendiéndolos, dice: He aquí vienen días, dice el Señor, en que
estableceré con la casa de Israel y la casa de Judá un nuevo pacto.
El "primer pacto" era la TOTALIDAD de la ley como fue dada a Moisés desde el
Monte Sinaí. Sin embargo, sucedía algo erróneo con el pueblo del pacto antiguo.
Todo Israel había prometido: "Todo lo que Jehová ha hablado, eso haremos" (Éxodo
19:8). Todo los israelitas habían dicho "Amén" doce veces al leérseles las doce
maldiciones (Deut. 27:15-26). Pablo escribió: "Y la ley no es de fe, sino que dice: 'El
que hiciere estas cosas, vivirá por ellas'. Cristo nos redimió de la maldición de la
ley, hecho por nosotros maldición" (Gál. 3:12,13). Al fracasar Israel en la
observancia de la ley por su propio esfuerzo, cayó bajo la maldición de Dios.
Mientras estuvo bajo la maldición de Dios, su única salvación consistía en poner su
fe en la misericordia de Dios, que abriría la puerta de la verdad para que Israel
viera a Cristo Jesús.
¡"Y la ley no es de fe" incluye el diezmo! El diezmo era una ordenanza obligatoria. En
realidad, ¡actuaba como LA ordenanza en que se fundamentaba toda la ley del pacto
antiguo! El diezmo era la provisión de la ley que sostenía, y así hacía posible,
la existencia misma del sacerdocio levítico por medio del cual Dios administraba el
resto de la ley, sus sacrificios, y todas las otras ordenanzas y juicios (Números 3 y
18).
Heb. 8:9 No como el pacto que hice con sus padres el día en que los tomé de la mano
para sacarlos de la tierra de Egipto; porque ellos no permanecieron en mi pacto, y yo
me desentendí de ellos, dice el Señor.
El nuevo pacto es claramente diferente porque no es "como el pacto que hice con
sus padres". Esto no es hablar en jerigonza. ¡Quiere decir exactamente lo que dice!
La ley afirmaba: "Maldito el que no confirmare las palabras de esta ley para
hacerlas" (Deut. 27:26, Gál. 3:10). Cuando un Israelita de pleno derecho dejaba de
diezmar, ese israelita quedaba la maldición del pacto antiguo (Mal. 3:9). Sin
embargo, el cristiano no puede estar bajo la maldición de la ley del pacto antiguo.
Cuando Pablo dijo: "Cristo NOS redimió de la maldición de la ley" (Gál, 3:13), se
refería a los otros cristianos judíos que una vz habían estado bajo esa maldición.
Heb. 8:10 Por lo cual, éste es el pacto que haré con la casa de Israel después de
aquellos días, dice el Señor: Pondré mis leyes en la mente de ellos, y sobre su corazón
las escribiré; y seré a ellos por Dios, y ellos me serán a mí por pueblo.
Heb. 8:11 Y ninguno enseñará a su prójimo, ni ninguno a su hermano, dieiendo:
Conoce al Señor; porque todos me conocerán, desde el menor hasta el mayor de
ellos.
Heb. 8:12 Porque tendré misericordia de sus injusticias, y nunca más me acordaré de
sus pecados y de sus iniquidades.
Dios dijo: "Pondré mis leyes en la mente de ellos, y en su corazón las escribiré". Las
leyes del nuevo pacto de Dios son leyes morales eternas que reflejan su carácter.
Las leyes eternas son claramente obvias en la mente y el corazón de todo
verdadero creyente. Aunque puede que el aspecto de "dar" del diezmo sea eterno,
el "diez por ciento" es claramente cúltico y no ha sido revelado por el Espíritu Santo
como un principio eterno después del Calvario. Las leyes morales de Dios no son de
la naturaleza del diezmo, el cual requiere que una persona persuada a otra persona
en relación con lo que ya no está obviamente "en la mente y el corazón". Para
reiterar el punto, mientras que el "dar" puede ser moral, o natural, el "diez por
ciento" es claramente cúltico y ya no es evidente en la mente.
Estos textos también dan a entender que el nuevo pacto será un sacerdocio de los
creyentes, más bien que una jerarquía de ministros sostenidos por diezmos y que
enseñan a los demás.
Heb. 8:13 Al decir: Nuevo pacto, ha dado por viejo al primero; y lo que se da por viejo
y se envejece, está próximo a desaparecer.
Hace dos mil años, se escribió que las leyes del pacto antiguo ya eran "decadentes y
estaban envejeciendo" (NAS), eran "obsoletas y viejas" (NIV); eran "anticuadas"
(TLB). Gálatas 4:31 dice que el pacto antiguo había sido "echado fuera". La palabra
de Dios es clara sobre este tema.
2 Cor. 3:6 El cual asimismo nos hizo ministros competentes de un nuevo pacto, no de
la letra, sino del espíritu; porque la letra mata, pero el espíritu da vida.
Pablo y todos los otros cristianos son "ministros" del "nuevo testamento". No
somos llamados a enseñar o ministrar doctrinas del pacto antiguo. Predicar la
"letra" del pacto antiguoi "mata", pero predicar el "espíritu" del nuevo pacto "da
vida". Sin embargo, en la actualidad hay religiones tanto cristianas como no
cristianas que están tan encerrados en la misma "exactitud de la letra" de las
antiguas creencias legales como los fariseos del siglo primero. No han
experimentado ningún gran reavivamiento, y carecen de la confianza de la
verdadera libertad espiritual. Pero Romanos 8:2 dice: "Porque la ley del Espíritu de
vida en Cristo Jesús me ha librado de la ley del pecado y de la muerte". El versículo
4 añade: "Para que la justicia de la ley se cumpliese en nosotros, que no andamos
según la carne, sino según el Espíritu". Hay tanto más que ganar cuando se
abandona la letra de la ley del pacto antiguo y al poder del Espíritu Santo en el
nuevo pacto se le permite obrar en nuestras vidas y en nuestras iglesias.
Tontamente, estamos perdiendo la plenitud de la bendición del nuevo pacto al
enseñar el diezmo (o cualquier otra doctrina cúltica que es puramente del pacto
antiguo).
2 Cor. 3:7 Y si el ministerio de muerte grabado con letras en piedras fue glorioso,
tanto que los hijos de Israel no pudieron fijar la vista en el rostro de Moisés a causa
de la gloria de su rostro, la cual había de perecer,
2 Cor. 3:8 ¿cómo no será más bien con gloria el ministerio del espíritu?
2 Cor. 3:9 Porque, si el ministerio de condenación fue con gloria, mucho
más abundará en gloria el ministerio de justificación.
2 Cor. 3:10 Porque aun lo que fue glorioso, NO ES GLORIOSO en este respecto, en
comparación con la gloria más eminente [que supera].
2 Cor. 3:11 Porque, si lo que perece tuvo gloria, mucho más glorioso será lo que
permanece.
2 Cor. 3:14 Pero el entendimiento de ellos se embotó; porque, hasta el día de hoy,
cuando leen el antiguo pacto, les queda el mismo velo no descubierto, el cual es
quitado por Cristo.
El diezmar por parte de los cristianos cae en la trampa descrita en el versículo 14.
Para enseñar el diezmo, uno sólo puede regresar a los textos de antes del Calvario,
como Génesis 14, Levítico 27, Malaquías 3 y Mateo 23. Por esta razón, el defensor
del diezmo todavía permanece en terreno del pacto antiguo y antes del Calvario y
no ve los cambios producidos por la contemplación de Cristo. "Cuando leen el pacto
antiguo, les queda el mismo velo no descubierto".
Puesto que Hebreos 7 enseña que "el mandamiento para recibir diezmos de la
gente de acuerdo con la ley" fue "anulado" cuando cambió el sacerdocio, entonces
el velo debería haber sido quitado por la verdad del sumo sacerdocio de Cristo y el
sacerdocio de todos los creyentes (Heb. 7:5, 12, 18).
2 Cor. 3:16 Pero cuando [las personas] se conviertan al Señor, el velo se quitará.
2 Cor. 3:18 Por tanto, nosotros todos, mirando a cara descubierta como en un
espejo la gloria del Señor, somos transformados de gloria en gloria en la misma
imagen, como por el Espíritu del Señor.
La iglesia cristiana tiene que aprender a confiar en los principios de gracia y fe del
nuevo pacto para prosperar y agradar a Dios. El diezmo revela una desconfianza de
los mejores principios y una reversión a la dependencia en principios anticuados.
Aunque las estaciones de televisión cristianas por satélite gastan una enorme
cantidad de tiempo-aire solicitando diezmos, la vasta mayoría de la gente cambia
de canal para no escucharlas. Demasiadas almas perdidas permanecen lejos de la
iglesia a causa de su reputación como pedigüeña de dinero y porque las
necesidades espirituales de esas almas no son satisfechas.
(63) Gordon Fee and Douglas Stuart, How to Read the Bible for All It´s
Worth (Grand Rapids: Zondervan, 1980), 137.
(64) Unger´s, s.v. "New Testament".
Capítulo 18
Los cristianos no están bajo la jurisdicción de ningún código bíblico legal que les
diga lo deben hacer en cualquier área de la vida. Sin embargo, aunque muchos
predicadores estarán de acuerdo con estas palabras en seguida, muchos
discreparán y asumirán una posición diferente cuando el tema que se discute es el
diezmo. Simplemente, no entienden los principios de la "ley de Cristo" y la nueva
creación, que conducen a dar espontáneamente de todo corazón, y enteramente
aparte de la ley.
Uno: La ley está en contraste con la gracia. Bajo la gracia, Dios confiere la justicia
que Él exigía bajo la ley (Éxodo 19:5; Juan 1:17; Rom. 3:21; 10:3-10; 1 Cor. 1:30).
Tres: Ante la ley, el mundo entero es culpable, y por lo tanto, la ley es, por
necesidad, un minsterio de condenación, muerte, y maldición divina (Rom. 3:19; 2
Cor. 3:7-9; Gál. 3:10).
Cinco: La ley ni justifica al pecador ni santifica al creyente (Gál. 2:16; 3:2-3, 11-12).
Como parte de la ley mosaica, el diezmo es ahora una doctrina sin espíritu y sin
reavivamiento. Diezmar convierte a un buen cristiano en un legalista temeroso que
tiene miedo de la ira y la maldición de Dios si él/ella no "paga". Aleja a muchos de la
iglesia porque son demasiado pobres para dar el diez por ciento de sus ingresos
brutos. Además, impide que miembros pobres y aptos ocupen puestos de liderazgo
en la iglesia. Por otra parte, las iglesias que predican los principios evangélicos de
dar por gracia prosperan financieramente bajo la libertad del evangelio.
Los siguientes son extractos sobre la ley de un excelente libro escrito por Theodore
Epp, Moses, Volume III, Great Leader and Lawgiver. Epp fue el fundador del
programa de radio Back to the Bible. (Los textos entre las citas han sido omitidos).
"En estos textos (Gál. 5:18; Rom. 6:14-15), es claro que la ley mosaica, como ley, no
contribuye absolutamente con nada a alcanzar la justificación. Por el contrario, el
estar libres de la esclavitud de la ley hace posible que el Espíritu Santo opere
efectivamente en el creyente".
"Así, pues, la evidencia en la Escritura es que el cristiano no está bajo la ley
mosaica. Todo esto ha sido alcanzado porque Cristo cumplió cada una de las
demandas tanto de la ley moral como de la ley ceremonial".
"El cristiano no está bajo la ley mosaica en ningún sentido. Pero la ley entera es
parte esencial de las Escrituras, y como tal es útil para los creyentes de todas las
edades".
"Pero, aunque debemos sacar provecho de todas las Escrituras por cuanto
aprendemos valiosas lecciones de ellas, no todos los pasajes de las Escrituras se
escribieron específicamente para nosotros".
"El modelo de vida del cristiano no es la ley. Si el cristiano no está bajo la ley, ¿cuál
es su modelo de vida? Básicamente, el modelo para un cristiano es hacer la
voluntad de Dios por la gracia capacitadora proporcionada en Cristo Jesús nuestro
Señor por medio del Espíritu Santo".
"La fórmula correcta para llegar a conocer a Cristo como creyente está presentada
en Romanos 8:1-4. Esta es una referencia a la ley de Moisés, que reveló lo terrible
del pecado, hizo del pecado una transgresión, y pronunció una sentencia de muerte
como pena por el pecado". ... Ahora que tenemos a Cristo Jesús como Salvador,
tenemos un nuevo principio de vida - 'la ley del Espíritu de vida en Cristo Jesús'.
Puesto que Dios ha puesto en operación un nuevo principio en el creyente, éste está
capacitado para vivir una vida de victoria. Por lo tanto, aunque el creyente es
liberado de la ley mosaica, la justicia de esa ley queda realmente cumplida en él por
medio de Cristo (8:4)".
"A los creyentes se les ordena 'cumplir la ley de Cristo'. 'Llevar la cargas los unos de
los otros' indica la naturaleza de la ley de Cristo. La ley de Cristo es realmente la ley
del amor".
"Así, pues, aunque una persona en esta época no está atada a la ley de Moisés, hay
mandamientos definidos de Dios que están en vigencia en la actualidad ... 'para que
creamos en el nombre de su Hijo Jesucristo, y nos amemos los unos a los otros'.
Esta ley de amor no es nueva en sí misma porque estaba en el corazón de la ley del
sistema del Antiguo Testamento ... pero ... amar como Cristo amó es un nuevo
principio" (66).
Para resumir mi interpretación de Epp, si el diezmo, tomado sólo de la ley, no
contribuye ni a la justificación ni a la santificación, ¡entonces no tiene
absolutamente ningún beneficio en la vida cristiana! Es sólo cuando el creyente es
liberado de las obligaciones de la ley que han sido dadas en mandamientos (el diez
por ciento exacto) cuando el Espíritu Santo puede obrar efectivamente. Si amamos
como Cristo amó, y damos como Cristo dio, debe ser totalmente innecesario
mencionar el diezmo. El diezmo se basaba en el mandamiento de Dios de sostener a
los levitas por su servicio a cambio de la herencia de propiedades. El diezmo no
estaba basado en ningún ejemplo amoroso que las otras tribus querían demostrar
para los levitas. En realidad, la historia revela que los sacerdotes levíticos a menudo
eran despreciados. Los diezmos nunca fueron usados como fondos misioneros para
convertir a los no israelitas.
Dice Scofield: "La nueva 'ley' de Cristo es el amor divino, (1) implantado en el
corazón renovado por el Espíritu Santo (Rom. 5:5; Heb. 10:16), (2) y que fluye en la
energía del Espíritu, (3) sin ser forzado, espontáneamente, hacia los objetos del
amor divino (2 Cor. 5:14-20; 1 Tes. 2:7-8; (4) la ley de libertad (Sant. 1:25; 2:12),
(5) en contraste con la ley externa de Moisés: a) la ley de Moisés exige amor (Lev.
19:18; Deut. 6:5; Lucas 10:27); b) la 'ley' de Cristo "ES" amor (Rom. 5:5; 1 Juan 4:7;
19-20), c) y así, toma el lugar del amor externo al cumplirla (Rom. 13:10; Gál. 5:14),
d) la ley escrita en el corazón bajo el nuevo pacto (Heb. 8:8)" (67).
Dice Unger: "(1) Esta categoría incluye las doctrinas y los preceptos de la gracia,
dirigidos en esta época al hijo de Dios redimido. Debe observarse cuidadosamente
que el cristiano no está bajo la ley. (2) La gracia le ha impartido todos los méritos
que podría necesitar jamás (Juan 1:16; Rom. 5:1; Col. 2:9-10). (3) Estar
"emparentado" con Cristo (1 Cor. 9:20-21) no significa que el cristiano es sin ley.
(4) Pero sí significa que, como redimido por gracia, tiene el deber, o más bien el
gracioso privilegio, de no hacer lo que desagrada a Dios y llevar a cabo plenamente
todo lo que le agrada a Él basándose en la manifestación de gratitud
espontánea por la salvación que ha recibido por gracia" (68).
¡Es ilógico enseñar el diezmo cuando una ley o un principio mejor ha reemplazado
la legalista ley mosaica - esto es, el AMOR! No hay ningún "No harás esto", sino la
respuesta fluida, espontánea de la FE viva. Esto es porque el verdadero creyente
está lleno del Espíritu Santo. ¡Como todo lo demás en la vida del creyente, dar es
una pura respuesta de fe, no de ley!
La ley "sombra" del pacto antiguo dice: "En mi corazón he guardado tus dichos,
para no pecar contra ti" (Sal. 119:11), y "Lámpara es a mis pies tu palabra, y
lumbrera a mi camino" (Sal. 119:105). En el pacto antiguo, la Palabra de Dios, o ley
mosaica, representaba su modelo de justicia, es decir, su modelo de juicio. Su
Palabra representaba su carácter perfecto y su sabiduría perfecta. Esa Palabra
estaba relacionada más estrechamente con la ley mosaica en todos sus
mandamientos, estatutos, y juicios.
Sin embargo, la "substancia" del nuevo pacto revela que la "Palabra" es en realidad
"Jesucristo", ¡no la ley mosaica! "En el principio era la Palabra, y la Palabra era con
Dios, y la Palabra era Dios" (Juan 1:1). "Porque en él habita corporalmente toda la
plenitud de la Deidad" (Col. 2:9). "En estos últimos días [Dios] nos ha hablado por
el Hijo, a quien designó heredero de todas las cosas, por el cual también hizo los
mundos" (Heb. 1:2). ¡Jesucristo, la Palabra viva, no la ley mosaica, está ahora oculta
en el corazón del creyente (Gál. 2:20; Col. 1:28)! Cristo, no la ley, es ahora la
lámpara del creyente (Juan 1:9). La mayor gloria de la "ley de amor" de Dios en la
persona del inmanente Espíritu Santo, ha superado la ley escrita (Heb. 8:8-13; 2
Cor. 3:3-6; Juan 16:13-15). ¡Cristo es ahora el modelo de juicio de Dios! Esto
significa que el juicio de plataforma del creyente ahora es determinado, no por la
manera en que respondemos a la ley, sino por la manera en que respondemos a
Jesucristo (Juan 16:8-9; 2 Cor. 3:18; Heb. 9:26-28). La ley mosaica, buena como era,
sólo servía como verdad sombra en comparación con Jesucristo (Heb. 8:5; 10:1;
Col. 2:17). La revelación de Dios en Cristo era la totalidad de la revelación de Dios
sobre sí mismo para el hombre. En consecuencia, sólo leyendo la ley del pacto
antiguo con la visión del nuevo pacto puede uno entenderlo correctamente (2 Cor.
3:13-14). Lo que Dios quiere que el hombre del nuevo pacto sepa, ahora lo revela
en y por medio de Jesucristo (Heb. 1:1-2).
Mateo 5:17-19
Mat. 5:17-19 No penséis que he venido para abrogar la ley o los profetas; no he
venido para abrogar, sino para cumplir. Porque de cierto os digo que, hasta que
pasen el cielo y la tierra, ni una jota ni una tilde pasará de la ley; hasta que todo se
haya cumplido. De manera que cualquiera que quebrante uno de estos
mandamientos muy pequeños, y así enseñe a los hombres, muy pequeño será
llamado en el reino de los cielos; mas cualquiera que que los haga y los enseñe, éste
será llamado grande en el reino de los cielos.
Estos textos son citados a menudo por los que quieren probar que todavía estamos
obligados a observar la ley mosaica - ¡por lo menos en cuanto al diezmo! Sin
embargo, si este texto prueba que el diezmo existe todavía, ¡entonces prueba
DEMASIADO! Por las citas y los ejemplos del resto del capítulo, Jesús se refiere a
TODA LA LEY y no solamente a las partes llamadas "morales" de ella. Si esta cita
significa que cualquer parte de la ley todavía está en vigencia, entonces debe
significar que TODA la ley todavía está en pleno vigor. Pero, que yo sepa, ningún
cristiano (ni ningún judío tampoco) en la actualidad pretende estar viviendo bajo la
totalidad de la ley mosaica.
Segundo, después de declarar: "Hasta que pasen el cielo y la tierra, ni una jota ni una
tilde pasarán, hasta que todo se haya cumplido", Jesús declaró que su propia
interpretación de la ley era el modelo mayor. "Oísteis que fue dicho (en la ley), pero
yo os digo" ocurre en los versículos 21-22, 27-28; 31-32; 33-34; 38-39; 43-44 como
la nueva y mayor voluntad revelada de Dios. Las declaraciones de Jesús en Juan
14:6 y 16:8-9 son claramente declaraciones cumplidoras de la ley y cambiadoras de
la ley: "Yo soy el camino, la verdad, y la vida. Nadie viene al Padre sino por mí". "Y
cuando venga [el Espíritu Santo], él convencerá al mundo de pecado, de justicia y
de juicio. De pecado, por cuanto no creen en mí".
Los evangelios hacen lo imposible para mostrarnos que Jesús muy rápidamente
estaba "cumpliendo" la ley en todo lo que hacía: Mateo solo usa la palabra
"cumplido" muy a menudo: el nacimiento virginal (1:22); la salida de Egipto (2:15);
Raquel que llora (2:17); fue llamado nazareno (2:23); la gran luz de los gentiles
(4:14); llevar nuestros dolores (8:17); el Espíritu de Dios en él (12:17); Israel ciego
(13:14); enseñar en parábolas (13:35); entrada triunfal (21:4); cumplir profecías
(26:54, 56); 30 piezas de plata (27:9); suertes sobre sus ropas (27:35).
Cuando Romanos 8:4 dice que "la justicia de la ley se cumpliese en nosotros", se
cumplen los requisitos de Mateo 5:17-19. Cuando Romanos 10:4 dice que "Cristo es
el fin de la ley, para justicia", se ha alcanzado la meta de Mateo 5:17-19. Cuando
Romanos 7:4 dice que "vosotros también habéis muerto a la ley por el cuerpo de
Cristo", la ley ya no tiene más jurisdicción sobre el creyente.
Tercero, Jesús cumplió totalmente la ley. Tuvo éxito donde Adán fracasó (Rom.
5.17-19). Más importante, vino como Israel (el que prevalece con Dios)
personificado, obedeció perfectamente las justas demandas de la ley, y murió como
el perfecto sacrificio sin pecado de la ley, que puso fin a la necesidad de guardar
ofreciendo sacrificios (Heb. 9:26-28; 10:1-3, 7-10).
Capítulo 19
Hebreos 7
El sumo sacerdocio de Cristo
abolió el diezmo
La carta a los Hebreos fue escrita para preparar a los cristianos judíos de Jerusalén
para el severo choque cultural religioso que se aproximaba. Poco después de que se
escribió la carta, en el año 70 D. C., un ejército romano al mando de Tito destruyó la
ciudad. El templo fue destruido y cesaron sus sacrificios. No se les permitió a los
judíos entrar en las ruinas y reconstruir. En consecuencia, no se les permitió al
sumo sacerdote y a otros sacerdotes llevar a cabo ningún servicio de sacrificio.
En relación con el diezmo, casi 40 años después del Calvario, no hay ninguna razón
legítima para creer que los cristianos judíos hubiesen dejado jamás de entregar
diezmos AL SISTEMA DEL TEMPLO. En realidad, la historia registra que estos
cristianos judíos continuaron observando los días de fiesta, las fiestas, y los ritos, y
continuaron rindiendo honor al sumo sacerdote. Gálatas 4:10 revela lo que ellos le
habían enseñado a esa iglesia. Por lo tanto, también es lógico suponer que ellos,
como judíos obedientes, también se sentían obligados a continuar diezmando, ¡no
para la iglesia, sino para el sistema levítico!
Para romper este vínculo, los cristianos judíos debían dejar de asistir al templo
para celebrar los días de fiesta, los votos y los sacrificios. También, debían dejar
inmediatamente de aceptar el sumo sacerdocio levítico como legítimo y dejar de
traer diezmos para sostener el sistema. La cuidadosa redacción de la carta a los
Hebreos era necesaria a causa de la inmadura teología de los cristianos judíos.
Nuevamente, puesto que ellos todavía aceptaban la legitimidad del templo y el
sacerdocio judíos, también debían continuar trayendo los diezmos que mandaba la
ley. Por esta razón, el diezmo juega un papel importante en el desmantelamiento
del sacerdocio judío en Herbreos, capítulo 7.
7:1 Porque este Melquisedec, rey de Salem, sacerdote del Dios Altísimo, que salió a
recibir a Abraham que volvía de la derrota de los reyes, y le bendijo.
Como se detalla en la discusión sobre Génesis 14, "el Dios Altísimo" (El Elyon y su
equivalente arameo) era un título común no hebreo de uno de los "dioses" que
ocupaban los lugares altos. La revelación más importante de Génesis 14 es que el
concepto cananeo de "Dios Altísimo" era, en realidad, el "SEÑOR (Yahvé) el Dios
Altísimo". Quizás el escritor de Hebreos fue inspirado para que usara la versión
gentil del título (más bien que el de Abraham) para fortalecer el argumento de que
Dios, y el real sumo sacerdocio de Cristo, no son exclusivamente hebreos, lo cual
requería a "Yahvé" como capacitador. Muchos no ven esta diferencia cuando
discuten el diezmo de Génesis 14.
7:2 A quien asimismo dio Abraham los diezmos de todo; cuyo nombre significa
primeramente Rey de justicia, y también Rey de Salem, esto es, Rey de paz.
Después de rescatar a Lot y recobrar los bienes robados de la región alrededor de
Sodoma, Abraham dio a Melquisedec la décima parte del botín de guerra (también
el versículo 5).
Abraham dió la décima parte "de todo" a Melquisedec. El versículo 4 limita esto a
los "despojos de guerra". En realidad, según Génesis 14, Abraham no se quedó
absolutamente con nada de estos despojos de guerra. Excepto por lo que había
consumido su ejército personal, el resto fue devuelto libremente a sus dueños en
Sodoma y Gomorra por medio del rey de Sodoma. Dios había bendecido a Abraham,
así que no requería nada más. Tampoco quería dar al rey de Sodoma ninguna
oportunidad de ufanarse de que había enriquecido a Abraham.
7:3 Sin padre, sin madre, sin genealogía; que ni tiene principio de días, ni fin de vida,
sino hecho semejante al Hijo de Dios, permanece sacerdote para siempre
[perpetuamente].
Melquisedec era "sin padre, sin madre, sin genealogía". Históricamente, estos
hechos le descalificaban como sacerdote hebreo. Además, en el mundo antiguo, este
término podría significar meramente que los padres eran "oscuros", que "no eran
importantes", o que eran hasta "esclavos". Para un israelita, alguien que solicitaba
servir como sacerdote y tenía padres gentiles o una esposa gentil era considerado
como "sin padre y sin madre". Tanto Esdras 2:61-62 y Nehemías 7:63-64 informan
que algunos de los que aseguraban ser sacerdotes no eran "considerados por
genealogía" porque se habían "contaminado" y estaban "exluidos del sacerdocio".
Ningún registro identifica al padre de Melquisedec, ni a su madre, ni a sus
antepasados. A causa de esta falta de genealogía, los israelitas jamás habrían
aceptado al Melquisedec histórico ni como rey ni como sacerdote.
7:4 Considerad, pues, cuán grande era éste, a quien aun Abraham el patriarca dio
diezmos del botín.
¡Es importante observar que el "diezmo" es una parte vital de toda evidencia usada!
Melquisedec era mayor que los sacerdotes levíticos porque Abraham le dio "el
diezmo de lo mejor del botín". Mientras el diezmo de Abraham antes de la ley era la
primera mención del diezmo antes de que comenzara la ley, este capítulo de
Hebreos es la única mención del diezmo después de que la ley terminó en el
Calvario.
7:5 Ciertamente los que de entre los hijos de Leví reciben el sacerdocio, tienen
mandamiento de tomar del pueblo los diezmos según la ley, es decir, de sus
hermanos, aunque éstos también hayan salido de los lomos de Abraham.
Este es un versículo crucial para entender el resto del capítulo, porque las
conclusiones a las que se llega en 7:12 y 7:18 afectan esta ordenanza fundamental.
"Los hijos de Leví" recuerda a los lectores que los sacerdotes levitas debían mucho
de su existencia y autoridad a su privilegio de recibir diezmos. ¡El escritor de
Hebreos recuerda primero a sus lectores dónde se originó la autoridad del
sacerdocio levítico, antes de demostrar que la autoridad de Cristo es mayor y
reemplaza la anterior!
"Según la ley" establece la relación entre el "diezmo" y la ley mosaica. Mientras que,
en Hebreos, ni la palabra "diezmo" ni la palabra "ley" ocurren antes del capítulo 7,
en este capítulo "diezmo" ocurre siete veces (vv. 2, 4, 5, 6, 8 y 9), y "ley" ocurre
siete veces (vv. 5, 11, 12, 16, 19 y 28). ¡El diezmo no ocurre en ninguna otra parte
del Nuevo Testamento después del Calvario! Un propósito principal de este
capítulo de Hebreos es demostrar el cambio del sistema legal que estableció el
sacerdocio levítico.
Hasta en nuestra sociedad, cualquier ley que crea un puesto de trabajo tiene que
incluir primero la "provisión", es decir, la fuente de ingresos para pagar a esa
persona por los servicios prestados. Por consiguiente, la "provisión" es el corazón
mismo, el fundamento, y la capacitadora de la persona en el puesto que la ley está
creando. Nuevamente, Números 18 es la "silla" o la "ordenanza de la provisión" de
la ley mosaica que estableció el sacerdocio levítico y todo su sostenimiento,
incluyendo el diezmo. La conexión explica por qué se menciona el diezmo tan a
menudo en Hebreos, capítulo 7. Esta "ordenanza" o este "estatuto" del diezmo, que
proveía el sostenimiento de los levitas, había abolido la tradición de siglos que
había designado al varón cabeza de la familia como sacerdote familiar. La
ordenanza del diezmo obligaba a Israel a sostener el sistema levítico por medio de
diezmos y ofrendas. Además, aplicaba la pena de muerte a cualquier persona que
tratase de "acercarse" a adorar a Dios directamente.
7:6 Pero aquel cuya genealogía no es contada de entre ellos tomó de Abraham
los diezmos, y bendijo al que tenía las promesas.
7:7 Y sin discusión alguna, el menor es bendecido por el mayor.
La segunda evidencia de que Melquisedec era superior a Abraham y a la ley mosaica
es que Melquisedec recibió diezmos de Abraham y le bendijo. Usando lógica hebrea
aceptada, el escritor de Hebreos declara que, puesto que el Melquisedec histórico
recibió diezmos de Abraham, tal recepción prueba que el Melquizedec típico
(Cristo) era mayor que Abraham.
7:8 Y aquí ciertamente reciben los diezmos hombres mortales; pero allí, uno de quien
se da testimonio de que vive.
La tercera evidencia de que Melquisedec era mayor que Abraham y la ley mosaica es
que Melquisedec recibió diezmos siendo eterno, pero los levitas reciben diezmos y
mueren. Melquisedec era mayor que Leví porque Leví es mortal, mientras que el
Melquisedec típico es eterno y todavía vive. Los "mortales" son los del sacerdocio
levítico. Típicamente, Melquisedec es eterno y no tiene principio. Mientras que el
relato de Génesis no dice nada sobre la falta de genealogía o los atributos eternos
de Melquisedec, Salmos 110 "dio testimonio" de que vive. El Melquisedec del Salmo
110:4 es claramente el "Mesías".
7:9 Y por decirlo así, en Abraham pagó el diezmo también Leví, que recibe
los diezmos.
7:10 Porque aún estaba en los lomos de su padre cuando Melquisedec le salió al
encuentro.
7:11 Si, pues, la perfección fuera por el sacerdocio levítico (porque bajo él recibió el
pueblo la ley), ¿qué necesidad habría aún de que se levantase otro sacerdote, según
el orden de Melquisedec, y que no fuese llamado según el orden de Aarón?
"Si, pues, la perfección fuera" (o hubiera podido obtenerse) por medio del
sacerdocio levítico, da a entender que algo estaba faltando. ¡El problema era
que nada, absolutamente nada, en el sistema de leyes que establecieron el
sacerdocio de ellos, o que resultó del ministerio de su sacerdocio, había podido
producir la perfección requerida por Dios! ¡Esto incluía el diezmo! Todo el
sostenimiento financiero del mundo no puede producir, y no producirá, un
sacerdocio moral (clero). Por consiguiente, había necesidad de otro sacerdocio, uno
mejor.
Puesto que todas las cuatro "evidencias" en los versículos 4-10 tenían que ver con
el diezmo, es lógico llegar a la conclusión de que la "ley" que se discute en el
versículo 11 también debe incluir la ley del diezmo de Números 18. Esto es
especialmente cierto puesto que el primer uso tanto de "ley" como "mandamiento"
en Hebreos se refiere al diezmo. En el versículo 5, el diezmo fue seleccionado de la
ley entera porque permitía mejor que existiera el sistema levítico. El sistema
levítico, como las organizaciones humanas, comenzó con los medios para
sostenerlo.
"Orden de Melquisedec". El escritor de Hebreos regresa nuevamente a Salmos 110
para discutir las consecuencias de entender y aplicar el sumo sacerdocio mesiánico
de Cristo al orden de Melquisedec (en vez de al orden de la ordenanza levítica).
7:12 Porque cambiado el sacerdocio, necesario es que haya también cambio de ley.
En el instante en que Cristo murió, "el sacerdocio [levítico]" fue cambiado al ser
abolido. El velo del templo se rasgó y la sangre del cordero pascual fue
reemplazada por la sangre de Cristo. ¡El resultado cambió la historia del mundo! El
sumo sacerdocio de Aarón fue reemplazado por el sumo sacerdocio de Melquisedec
de Jesucristo y el sacerdocio regular de los otros sacerdotes fue reemplazado por la
doctrina del nuevo pacto del "sacerdocio de todos los creyentes". (Véase 1 Pedro.
2:5, 9; Apoc. 1:6; 5:9).
¿Exactamente qué fue "cambiado"? ¡La ley, u ordenanza, que había establecido el
sacerdocio levítico - especialmente la principal ley del diezmo! Ni el cambio en el
sumo sacerdocio ni el cambio en el sacerdocio regular se enseñaban en la ley
mosaica. El "o principio" que ahora establece el oficio de Jesucristo (y también el de
los sacerdotes-creyentes) no se deriva de ninguna clase de ley escrita en absoluto, y
¡esto incluye el diezmo! En lugar de eso, los principios de gracia y fe están
enlazados con la naturaleza eterna de Dios, que superan a la ley.
Cualquier cambio en el sacerdocio mismo haría necesarios cambios en todas las
leyes que gobiernan que gobiernan y sostienen el sacerdocio, especialmente el
diezmo.
7:13 Y aquél de quien se dice esto, es de otra tribu, de la cual nadie sirvió al altar.
7:14 Porque manifiesto es que nuestro Señor vino de la tribu de Judá, de la cual
nada habló Moisés tocante al sacerdocio.
Con la frase "Y aquel a quien se dice esto", el escritor de Hebreos comienza a reunir
todas las evidencias y conclusiones en la persona de Jesucristo. ¡Este "cambio de
ley" no era menor, sino catastrófico para la totalidad del sistema levítico! Jesús era
de la tribu de Judá, a cuyos miembros les estaba prohibido por ley ejercer el oficio
de sacerdotes.Finalmente, el autor deja claro que él estaba hablando de Jesucristo,
NO del Melquisedec histórico.
"Nada habló Moisés" sobre un cambio de sacerdocio de Leví a otra tribu. Aunque
grandes porciones de Éxodo, Levítico, Números, y Deuteronomio describen la
estructura de sostenimiento financiero, la autoridad, y los deberes de Leví, no se
dice absolutamente nada en la ley sobre cómo un sacerdocio de Judá debía ser
sostenido financieramente y cómo debía servir! Las razones son, primera, que el
sacerdocio de Cristo es completamente nuevo y está más allá de la ley. Segunda, no
se requiere el diezmo para sostener un "sacerdocio de todos los creyentes". Y
tercera, la estructura de pastores-maestros, evangelistas, y diáconos es extraña al
sistema del nuevo pacto. En consecuencia, por lógica y por extensión en relación
con el diezmo, ¡tampoco puede nada en la ley ser usado legítimamente para
dictaminar cómo debería funcionar la estructura del nuevo pacto! La idea de dar
por gracia es aun superior a la idea básica del pacto antiguo sobre las ofrendas
voluntarias.
3. Melquisedec adoraba a El Elyon, el muy común título del Baal pagano. Israel
no adoró a Dios usando este nombre sino hasta 1000 años más tarde -
después de que el rey David capturó a Jerusalén de manos de los jebuseos.
1. Jesús recibió diezmos como prueba de que era superior a Abraham; [Puesto
que Jesús era también la simiente de Abraham, ¿prueba eso que Melquisedec
era mayor que Jesús? ¡Por supuesto que no!
Otras consideraciones:
6. Mientras que el Melquisedec histórico era sólo "hecho a semejanza del Hijo
de Dios", el típico, Jesús, ERA el Hijo de Dios.
Quizás el escritor de Hebreos fue inspirado para que usara la versíón gentil del
título "El Elyon", más bien que el de "Señor El Elyon" de Abraham para reforzar el
argumento de que Dios, y el real sumo sacerdocio de Cristo, no son exclusivamente
hebreos, lo cual requeriría a "Yahvé" como calificador.
He señalado que la palabra diezmo podría referirse, primero, a 1/10, o el 10%, del
botín pagano de Sodoma y Gomorra; segundo, a la ordenanza en la ley sobre el
botín de guerra de 1/1000 (.1%), que Leví debía entregar a los sacerdotes
aarónicos. Por consiguiente, la cantidad del diezmo es irrelevante en la discusión de
Hebreos 7.
Mientras que era "evidente" que Moisés no dijo nada en la ley sobre un sacerdote
de Judá, es "mucho más evidente" que Moisés no dijo nada en la ley acerca de un
sacerdocio a semejanza del de Melquisedec, que era (puede usted creerlo) gentil!
Aunque ya sería bien difícil tratar de explicar el sostenimiento financiero de un
sacerdocio israelita de Judá según la ley mosaica, sería imposible tratar de explicar
el sostenimiento de un sacerdocio gentil cuyas raíces están fuera de la herencia de
Israel, por ejemplo, el de Melquisedec. Este grave problema puede resolverse
solamente deshaciéndonos de la totalidad de la ley mosaica, o por lo menos, de la
parte de la ley que se relaciona con el establecimiento del sacerdocio.
Los principios de sostenimiento por gracia, motivados por el amor a Dios, superan
los obligados principios legalistas de sostenimiento, como el diezmo. Cristo es el
sumo sacerdote de la iglesia, lo que significa de cada creyente. Ahora bien, cada
creyente es personalmente un sacerdote - no al dar diezmos a otros sacerdotes,
sino como sacerdote él mismo, al ofrecer sacrificios de alabanza y acción de gracias.
Cristo es la cabeza, y el sacerdocio de los creyentes es su cuerpo. Esto significa que
su "poder" fluye hacia nosotros y se convierte en nuestro poder. Por consiguiente,
¡la iglesia no necesita usar el débil poder legal del diezmo de la ley mosaica para
alcanzar sus metas; tiene el "indestructible" poder vital eterno de la gracia y la fe de
Jesucristo!
7:17 Pues se da testimonio de él: Tú eres sacerdote para siempre, según el orden de
Melquisedec.
"Queda, pues" (griego: men ... de ... construcción) Dios quitó algo que había existido
desde el tiempo de Moisés. Quitó las ordenanzas del sistema levítico para
establecer el superior y eterno sacerdocio de Jesucristo.
¡Es totalmente ilógico enseñar que 7:18 abolió todas las ordenanzas pertenecientes
al sacerdocio levítico exceptuando el diezmo! En realidad, al abolir primero el
diezmo (su principal medio de sostenimiento), el sacerdocio terminaría. El efecto
dominó de la abolición del diezmo echa por tierra cada una de las otras autoridades
y funciones de los sacerdotes levíticos. Esta es exactamente la razón de que el
diezmo desempeñe un papel tan importante en Hebreos 7.
William Barclay:
Albert Barnes:
Pero el significado es que, puesto que gran número de leyes - que constituían un
código de considerable extensión e importancia - fue dado para regular el
sacerdocio, y en referencia a los ritos de la religión, que debían observar o
supervisar, se seguía que, cuando su posición era superada por "uno de un orden
enteramente diferente", la ley que había los había regulado desaparecía también, o
dejaba de ser obligatoria (72).
Adam Clarke:
Los sacrificios debían ser provistos por el pueblo por medio de diezmos llevados a
los sacerdotes. Una interesante comparación está implícita entre los levitas y el
Hijo. Mientras que los levitas son dependientes del dar obediente de los
israelitas, el Hijo no es dependiente de ningún recurso humano. Este es un factor
más de superioridad del Hijo sobre los sacerdotes levitas. (74)
Mathew Henry:
Esto presupone una transferencia del sacerdocio; esto conlleva un cambio también
de la ley, que está unido inseparablemente al sacerdocio: ambos permanecen de pie o
caen juntos. Y, como el sacerdocio levítico y la ley son inseparables, la ley también
es abrogada (76).
(75).
A. M. Stibbs:
Además, el sacerdocio era tan fundamental para el pacto antiguo entre Dios y su
pueblo (la relación entera estaba constituida en dependencia de su ministerio),
que cualquier cambio en el orden del sacerdocio debía por necesidad llevar implícito
e involucrar un cambio en la constitución entera; es decir, llevaba implícito nada
menos que un pacto acompañante nuevo y ciertamente mejor (77).
Es también extraño que muchos teólogos puedan estar de acuerdo en que Hebreos
7:18 se refiere a todas las ordenanzas que se relacionan con el sacerdocio levítico, y
luego resuciten el diezmo como una doctrina "fuerte", "beneficiosa" y "necesaria"
del nuevo pacto.
Uno: El diezmo, junto con todas las otras ordenanzas levíticas, no había podido
producir en los creyentes la perfección y la madurez espiritual que Dios requería
(7:11, 19; 9:9, 11; 10:1).
Cinco: Los diezmos limitaban el sacerdocio. Sólo una parte de una familia de cada
tribu podía "acercarse" a la presencia de Dios - la casa de Aarón. A los levitas y a los
sacerdotes no se les instaba a establecer puestos avanzados para el evangelismo de
otras naciones. En la actualidad, demasiadas iglesias pasan por alto la clara
implicación del versículo 18. En la práctica, reemplazan la recepción de diezmos
por parte del sacerdocio levítico, no con el sacerdocio de los creyentes, sino con los
pastores-maestros que reciben diezmos. Demasiada gente pasa por alto los
principios de dar por gracia del nuevo pacto e insisten en que a los pastores se les
pague un diezmo de acuerdo con el mandamiento de la ley mosaica. Luego, los
pastores se quedan con más del diez por ciento del diezmo total, y también poseen
y heredan propiedades - todo esto contrario a la ley misma. Al hacerlo, tanto las
iglesias como los patores "hacen a un lado" los mejores principios de dar por gracia,
basándose en el "poder indestructible" de Dios, y regresan a los "débiles" e
"ineficaces" principios del diezmo.
Ocho: No es accidente que los únicos tres usos de las palabras "diezmo" y "diezmos"
que aparecen en los evangelios registren la hipocresía y el fracaso de los judíos
legalistas que presumían de su exactitud en la entrega de los diezmos. En
realidad, Jesús maldijo a los diezmadores por su hipocresía.
Nueve: Hasta en la iglesia, diezmar hace más mal que bien. Primero, los dirigentes
de la iglesia tienden a ser ricos diezmadores, mientras que los mejores dirigentes
espirituales que no pueden dar tanto a causa de enfermedad en la familia y otras
pérdidas legítimas son dejados fuera de los puestos de liderazgo. La Biblia no
enseña que los financieramente competentes son también los mejores líderes
espirituales. La Biblia tampoco enseña que la incapacidad para dar inhabilita a una
persona para ocupar un puesto en la iglesia. No hay justificación para añadir a la
Biblia la exigencia de que los oficiales de la iglesia deban dar el diez por ciento de
sus ingresos. Excluir a los menos afortunados financieramente priva a la iglesia de
los dones y capacidades de liderazgo que han sido provistos por Dios. La
consiguiente dirigencia desbalanceada es espiritualmente débil.
Diez: Además, diezmar hace más mal que bien a la iglesia cuando su abuso del
diezmo afecta negativamente la reputación pública de la iglesia. Francamente, la
estricta predicación legalista del diezmo ha dado a muchas iglesias una mala
reputación y un débil testimonio.
Once: La razón más importante por la cual el diezmo hace más mal que bien se
relaciona con el evangelio. Enseñar el diezmo para satisfacer las necesidades
financieras en realidad le roba a la iglesia la bendición de Dios que estaría
disponible si la iglesia hubiese usado los principios del nuevo pacto que han sido
aprobados por Dios. Los pastores y las iglesias que enseñan el diezmo jamás
experimentarán el éxito mayor del cual disfrutarían de la mano de Dios cuando
reemplacen los sermones sobre el diezmo con sermones sobre la ganancia de
almas. El éxito de la iglesia del nuevo pacto prueba que los pobres, las mujeres, los
niños y los esclavos del siglo primero estaban motivados por el deseo de ver almas
ganadas para el Señor. Su dar era motivado por el amor, no por la ley.
Trece: Puesto que el diezmo está incluido dentro del ámbito de Hebreos 7:18,
tenemos que llegar a la conclusión de que enseñar el diezmo equivale a enseñar
una doctrina espiritualmente "débil", "inútil", y "sin provecho".
7:19 (Pues nada perfeccionó la ley), y de la introducción a una mejor esperanza, por
la cual nos acercamos a Dios.
7:25 Por lo cual puede también salvar perpetuamente a los que por él se acercan a
Dios, viviendo siempre para interceder por ellos.
"Nada perfeccionó la ley". Es claro que ni un sacrificio perfecto, ni una comunión
perfecta, ni un sistema perfecto de dar se llevaron a cabo bajo los términos de la ley
mosaica, o pacto antiguo.
"Acercarse" (también 7:25) es otra referencia directa a la ley original del diezmo en
Números 18 que usa terminología similar cuatro veces (vv. 3, 4, 7, y 22). El término
hebreo (Strong´s O. T. 7126) es común y puede significar "aproximarse, acercarse,
o presentar como ofrenda". La abolición del sacerdocio levítico, con sus
prohibiciones sobre "acercarse" a Dios, preparó nuevamente el camino para el
sacerdocio de todos los creyentes. Antes del Calvario, sólo los sacerdotes levitas
podían "acercarse" a Dios; ¡el castigo por la desobediencia era la muerte! Ahora
cada creyente-sacerdote "se acerca confiadamente al trono de la gracia" (4:16). Nos
"acercamos" a causa de nuestra "esperanza mejor". Dios nos salva para siempre
porque nos "acercamos" como creyentes-sacerdotes (7:25). Nos acercamos, no con
un diezmo y un verdadero cordero sacrificial, sino con la sangre de Cristo Jesús y
una vida de entrega victoriosa. Por medio de la sangre de Cristo, nos "acercamos"
en plena certeza de fe, teniendo una limpia conciencia (10:22).
7:28 Porque la ley constituye sumos sacerdotes a débiles hombres; pero la palabra
del juramento, posterior a la ley, constituyó sumo sacerdote al Hijo, hecho perfecto
para siempre.
"Juró el Señor y no se arrepentirá" es una cita de Salmos 110:4 una vez más. Sin
embargo, por primera vez se incluye la primera parte del texto y se omite la última
parte. Esto hace énfasis en que Dios no tiene ninguna intención de regresar jamás a
las ordenanzas del sacerdocio levítico ni ninguna parte de ellas para tener éxito.
Sus promesas a Cristo son para siempre.
Dos: El diezmo se usa en cada uno de las cuatro evidencias para demostrar que el
sacerdocio de Cristo es superior al de la ley mosaica (7:4-10).
Tres: Los métodos del pacto antiguo para adorar a Dios, por medio de diezmos,
ofrendas, sacrificios y sacerdotes levitas, fracasó (7:11).
Seis: Puesto que Cristo procedía de Judá, es evidente que nada en la ley que se
relacionase con el sacerdocio levítico (incluyendo el diezmo) podría ser trasladado
al nuevo sacerdocio de Cristo (7:13-14).
Diez: El hombre puede ser perfecto espiritualmente sólo aplicando los principios de
la esperanza mejor (7:19.
Once: Puesto que el sacerdocio levítico ha sido reemplazado por el sumo sacerdocio
de Cristo y el sacerdocio de todos los creyentes, esto significa que todos los
creyentes, como sacerdotes que no requieren diezmos, pueden acercarse a Dios en
adoración (7:19).
Doce: El éxito del sacerdocio de Cristo y su iglesia es tan seguro como el juramento
que Dios le hizo (7:20-27).
(70) Williston Walker, A History of the Christian Church, 3rd. ed., (Charles
Scribner´s Sons: New York, 1970), 22.
(71) William Barclay, Daily Study Bible Series: The Letter to the
Hebrews (Philadelphia: Westminster, 1976), s.v. "Heb. 7:5-19".
(72) Barnes, s.v. "Heb. 7:12-18".
(73) Clarke´s, s.v. "Heb. 7:18".
(74) Louis H. Evans, Jr., The Communicator´s Commentary: Hebrews (Waco: Word,
1985), s.v. "Heb. 7:18".
(75) Henry, s.v. "Heb. 7:18".
(76) Jamieson, s.v. "Heb. 7:18".
(77) New Bible Comm., s.v. "Heb. 7:18".
(78) Thayer´s, s.v. "athetheesis".
Capítulo 20
Efesios 2:14-16:
Colosenses 2:13-17
Núm. 18:23 Mas los levitas harán el servicio del tabernáculo de reunión, y ellos
llevarán su iniquidad; estatuto [ordenanza] perpetuo para vuestros descendientes; y
no poseerán heredad entre los hijos de Israel.
Núm. 18:24 Porque a los levitas he dado por heredad los diezmos de los hijos de
Israel, que ofrecerán a Jehová en ofrenda; por lo cual les he dicho: Entre los hijos de
Israel no poseerán heredad.
Mal. 3:7 Desde los días de vuestros padres os habéis apartado de mis leyes, y no las
guardásteis. ...
Efe. 2:12 En aquel tiempo estábais sin Cristo, alejados de la ciudadanía de Israel y
ajenos a los pactos de la promesa, sin esperanza y sin Dios en el mundo.
Efe. 2:13 Pero ahora en Cristo Jesús, vosotros que en otro tiempo estábais lejos,
habéis sido hechos cercanos por la sangre de Cristo.
Efe. 2:14 Porque él es nuestra paz, que de ambos pueblos hizo uno, derribando la
pared intermedia de separación,
Efe. 2:15 aboliendo en su carne las enemistades, la ley de los mandamientos
expresados en ordenanzas, para crear en sí mismo de los dos un solo y nuevo
hombre, haciendo la paz,
Efe. 2:16 y mediante la cruz reconciliar con Dios a ambos en un solo cuerpo, matando
en ella las enemistades.
Dos: La sangre de Cristo los acercó (v. 13). Como creyentes-sacerdotes, podían
"acercarse" y aproximarse a Dios directamente.
Cuatro: Sin embargo, no hizo de nosotros uno obligando a los gentiles a observar
las ordenanzas de la ley (v. 14).
Cinco: En vez de eso, hizo de nosotros uno derribando la pared que separaba los
dos grupos de creyentes (v. 14).
Seis: La pared que nos separaba era "la ley de los mandamientos expresados en
ordenanzas" (v. 15).
Siete: Nuevamente, Cristo destruyó la enemistad que nos separaba (v. 16).
El templo judío tenía una serie de paredes que subdividían a su pueblo y creaban
desigualdades y diferencias culturales. La primera pared distinguía entre el sumo
sacerdote y otros sacerdotes; la segunda pared separaba a los sacerdotes de los
levitas; una tercera pared separaba a los levitas de otros hebreos; una cuarta pared
separaba a los hebreos varones de las mujeres hebreas, y una quinta pared
separaba a todos los hebreos de los gentiles. Un prominente aviso de advertencia
prometía la muerte para cualquier gentil que se atreviera a pasar más allá de esta
pared a los confines del templo para adorar a Yahvé.
Las "ordenanzas" de la ley definían por lo menos las dos más importantes de estas
paredes; la disposición del templo de Salomón establecía otras paredes; y la ley
misma hasta servía como separación (Marcos 12:1; Neh. 9:13; Eze. 20:11-12).
Varias ordenanzas restringían el culto a las mujeres, los enfermos, personas a las
que les faltaba alguna parte del cuerpo, personas de genealogías mixtas, personas
contaminadas ceremonialmente, y muchas más que eran excluidas del culto y la
aceptación plenos.
El diezmo era una de las muchas ordenanzas que establecían una marcada
distinción entre hebreos y gentiles y que, por necesidad, debían ser abolidas si la
iglesia iba a estar unida en un organismo espiritual. Los diezmos eran alimento sólo
para ser recibido de propietarios de tierras y criadores de ganado dentro de la
sagrada tierra de Israel. Las ordenanzas definían la vida diaria de cada uno de los
hebreos, y las ordenanzas definían todo lo que el sacerdote era y hacía.
¡Bajo las ordenanzas, los gentiles no eran aptos para ser diezmadores! Bajo el pacto
antiguo, los gentiles no podrían jamás ser considerados como pueblo de Dios; no
podían heredar la tierra de Dios y, por eso, no tenían tierra santa de la cual entregar
diezmos. Hasta los gentiles que habían sido circuncidados como prosélitos eran
considerados siempre "a la puerta", más bien que judíos de pleno derecho. Un
diezmo de un prosélito no podía entrar al templo. Un sacerdote judío no debía
jamás aceptar un supuesto "diezmo" de una persona que no era judía ni procedía
de un territorio considerado como contaminado y pagano. En consecuencia, el
diezmo debía estar incluido entre las ordenanzas que eran paredes entre judíos y
gentiles.
Colosenses discute una herejía semejante a la de los gnósticos, una herejía que
combinaba algunas prácticas paganas con restricciones que ya existían bajo la ley
mosaica del pacto antiguo. Falsos maestros cristiano-judíos (y posiblemente otros)
intentaban forzar esas prácticas sobre los cristianos gentiles. Esto pervertía el
evangelio.
Uno: Al cristiano que ha sido re-creado en Cristo Jesús le han sido perdonados
todos los pecados (v. 13).
Dos: El perdón de Dios incluía "anular el acta de los decretos que había contra
nosotros, que nos era contraria". La NAS dice: "habiendo cancelado el certificado de
la deuda que consistía de los decretos que había contra nosotros". La NIV dice:
"habiendo cancelado el código escrito, con sus reglamentos, que había contra
nosotros, que nos era contrario". La RSV dice: "habiendo cancelado la obligación
que se nos oponía con sus demandas legales" (v. 14).
Cinco: Como resultado de las acciones de Cristo, no debemos juzgarnos los unos a
los otros, específicamente en relación con las ordenanzas sobre alimentos impuros
y días de fiesta (v. 16).
Seis: Estas ordenanzas eran sólo meras sombras imperfectas y temporales de cosas
futuras (v. 17) (Heb. 10:1).
Siete: La realidad y la substancia de las cosas a las cuales apuntaban las ordenanzas
es Jesucristo (v. 17).
Aunque es verdad que las desconocidas herejías semejantes a las de los gnósticos
contribuyeron a los problemas de la iglesia de Colosas, es igualmente claro que
también estaba involucrada alguna mezcla judía de principios de la ley mosaica con
principios de gracia. Muy probablemente, los cristianos judíos y los cristianos
gentiles se acusaban mutuamente de violar las tradicionales leyes alimentarias y
días de fiesta de la otra parte. Tenemos que recordar que cada cultura tenía su
propia serie de ordenanzas, y no sólo los judíos.
Este problema atormentaba a la iglesia primitiva porque ésta no había decidido qué
hacer con todas las ordenanzas de la ley mosaica desde el Calvario. Este problema
es enfrentado en Hechos 10, 15, 21, Romanos 14, I Corintios 8, Gálatas 2-4, Efesios
2, Colosenses 2, y todo el libro de Hebreos. Nuevamente, es importante observar el
doble discurso y la confusión sobre las ordenanzas legales que existían en Jerusalén
por lo menos treinta años después del Calvario. Véase el capítulo sobre Hechos 15 y
21.
Por las siguientes razones, los diezmos deben ser incluidos en la lista de las
ordenanzas abolidas en Colosenses.
Dos: El segundo "diezmo de las fiestas" era esencial para las ofrendas de alimentos
y bebidas en las "fiestas" del versículo 16. No habría ofrendas de alimentos y
bebidas sin los diezmos.
Tres: Del mismo modo en que la circuncisión estaba incluida en Colosenses 2:8-11,
TODAS las ordenanzas están incluidas en las "sombras" del versículo 17 y Hebreos
10:1.
Cuatro: La teología dispensacional enseña que la ley mosaica, el pacto antiguo, los
mandamientos, las ordenanzas, y los juicios son todos parte de UNA SOLA e
endivisible revelación que pertenecía al Israel del pacto antiguo. Sólo las
leyes repetidas en los principios y la redacción del nuevo pacto han sido
trasladadas a la iglesia cristiana.
Cinco: Puesto que ninguna de las ordenanzas, incluyendo el diezmo, podía ser
guardada perfectamente, esto resultaba en los "decretos y ordenanzas que nos eran
contrarias". Este era un abierto reconocimiento de culpa descrita por la propia
mano. Nadie (excepto Cristo) podría obedecer, ni espiritual ni físicamente, cada
una de las leyes relativas a los sacrificios, cada una de las ordenanzas alimentarias,
cada una de las ordenanzas relativas a los días de fiesta, ni cada una de las mínimas
ordenanzas relativas a dar. Todas las otras ordenanzas eran sólo "sombras de lo
que habría de venir" (2:17; Heb. 8:5; 10:1).
Resumen:
Efesios 2:15 dice que Cristo "abolió" las ordenanzas. Colosenses 2:14 dice que él
"anuló" o "quitó" las ordenanzas. Puesto que el diezmo era la ordenanza
fundamental que hacía posible las operaciones prácticas diarias del servicio del
santuario y sus fiestas, debe ser incluido en la parte de la vida religiosa de Israel a
la que Cristo le puso fin. Este es un principio lógico de interpretación. Ya sea que
uno entienda que las ordenanzas abolidas incluyen toda la ley mosaica o sólo una
parte de ella, la abolición de la parte ceremonial o cúltica de ella hace difícil de
explicar el diezmo en el nuevo pacto.
Capítulo 21
La doctrina del nuevo pacto del sacerdocio de los creyentes" es otra importante
doctrina que abolió las prácticas del diezmo. Para probar esta afirmación, es
necesario volver sobre la historia del concepto de sacerdocio. Cada una de las citas
en cursiva ha sido tomada de las notas de la New Scofield Reference Bible sobre 1
Pedro 2:9.
"Antes de que diera la ley, el cabeza de familia era el sacerdote de la familia (Gén.
8:20; 26:25; 31:54".
"Cuando la ley fue propuesta, la promesa de una obediencia perfecta era que
Israel debía ser para Dios un 'reino de sacerdotes' (Éxodo 19:6); pero Israel violó la
ley, y Dios limitó el oficio de sacerdote a la familia aarónica, designando la tribu de
Leví para que ministrase para Israel, constituyendo así el sacerdocio típico (Éxodo
28:1)".
En otras palabras, el sacerdocio levítico, como la totalidad del pacto antiguo, nunca
fue el propósito final de Dios para Israel. Aun antes de que se dieran los Diez
Mandamientos, las ordenanzas y los juicios de la ley, Dios había declarado su deseo
último de que Israel fuese un "reino de sacerdotes" (Éxodo 19:5, 6).
Sin embargo, en vez de progresar del sacerdocio del cabeza de familia al sacerdocio
de cada creyente, Israel demostró que era indigno y perdió el sacerdocio universal
que Dios había tenido en mente originalmente. El sacerdocio levítico era en
realidad una digresión a causa del pecado de Israel al adorar ídolos mientras
Moisés estaba fuera recibiendo los Diez Mandamientos. Esta triste historia se
encuentra en Éxodo 32. El resultado del pecado de Israel fue el limitado sacerdocio
levítico, con su decreto de muerte contra cualquier persona que se atreviera a
"acercarse" para ofrecer sacrificios a Dios directamente.
"Di a los hijos de Israel que tomen para mí ofrenda; de todo varón que la diere de su
voluntad, de corazón, tomaréis mi ofrenda" (Éxodo 25:2). "Y tomarás de los hijos de
Israel el dinero de las expiaciones, y lo darás para el servicio del tabernáculo de
reunión" (Éxodo 30:16).
¿Qué habría sucedido si Israel no hubiese pecado al fabricar y adorar los becerros
de oro? La secuencia de eventos no es difícil de imaginar.
Dos: Si todos hubiesen sido sacerdotes, entonces todos habrían heredado la tierra
por partes iguales. Los diezmos no habrían reemplazado la herencia de la tierra.
Tres: Puesto que habría habido millones de sacerdotes para ayudar a Aarón y su
familia, nadie habría estado fuera de su casa el tiempo suficiente para necesitar que
se le sostuviera por medio de los diezmos.
Cinco: Los deberes de siervos desempeñados por los levitas que no eran sacerdotes
habrían sido compartidos por todos los sacerdotes de todo el pueblo.
Seis: Las ofrendas voluntarias y el siclo del santuario habrían proporcionado fondos
suficientes. Este era el plan de Dios antes de que los levitas fueran escogidos para
tomar el lugar de todos sus hermanos (especulación mía).
"En la era de la iglesia, todos los cristianos son incondicionalmente constituidos
miembros del 'reino de sacerdotes' (1 Pedro 2:9; Apoc. 1:6), la distinción que Israel
fracasó en alcanzar por medio de las obras. En consecuencia, el sacerdocio del
cristiano es un derecho de primogenitura, del mismo modo que cada uno de los
descendientes de Aarón nacía al sacerdocio (Heb. 5:1)".
"El principal privilegio de un sacerdote es tener acceso a Dios. Bajo la ley, sólo el
sumo sacerdote podía entrar al 'Lugar Santísimo' y eso sólo una vez al año (Heb.
9:7); pero, cuando Cristo murió, el velo, un tipo del cuerpo humano de Cristo (Heb.
10:20), se rasgó, de modo que ahora los creyentes-sacerdotes, junto con Cristo el
Sumo Sacerdote, tienen acceso a Dios en el Lugar Santísimo (Heb. 10:19-22). El
Sumo Sacerdote está allí corporalmente (Heb. 4:14-16; 9:24; 10:19-22)".
¡El creyente-sacerdote está en el corazón del Nuevo Pacto! En vez de que los
sacerdotes sean responsables de enseñar la ley mosaica, cada creyente es
responsable por buscar espiritualmente la voluntad de Dios. Cada función llevada a
cabo por el sacerdote del pacto antiguo que recibía diezmos es llevada a cabo AHORA
por cada creyente sacerdote. Nuevamente, ¡el creyente-sacerdote, NO el pastor-
maestro, tomó el lugar del sacerdote del pacto antiguo! Lo que esta verdad le hace a
la ordenanza del diezmo en la ley mosaica debería explicarse por sí solo.
El pastor-maestro del nuevo pacto tiene más en común con el profeta y, más tarde,
con el rabino, que su sacerdote. Muchos profetas del pacto antiguo no eran levitas.
Ministraban por fe, dependiendo de las provisiones de Dios y sus propias manos en
un oficio. Por consiguiente, es erróneo actuar como si el pastor del nuevo pacto
hubiese reanudado actividades en el punto en que el sacerdote del pacto antiguo
cesó y, por lo tanto, tuviese derecho al "diezmo" del sacerdote.
Hay que hacer un importante comentario final sobre la doctrina del sacerdocio de
los creyentes. Los padres de la iglesia primitiva y los historiadores de la iglesia dan
amplia evidencia de que no hubo ninguna distinción entre el laicato y el clero
durante casi doscientos años. Cuando esta falta de distinción se perdió, cuando el
clero evolucionó hacia una jerarquía superior, cuando el obispo local se transformó
en un "sacerdote-obispo", cuando la doctrina del sacerdocio de los creyentes fue
hecha a un lado, comenzó a surgir en la historia de la iglesia un clero pagado, de
tiempo completo, lo cual preparó el camino para que el diezmo volviera a entrar
mucho más tarde en apoyo de un exclusivo "sacerdocio" antibíblico en la iglesia.
Desafortunadamente, aun la mayoría de las iglesias protestantes tratan a
sus predicadores y pastores como "sacerdotes" al esperar que ellos lleven a cabo la
mayoría de las funciones sacerdotales en nombre de los laicos.
Capítulo 22
I Corintios 9:1-19
Pablo rehusó ejercer su
"derecho" a ser sostenido
Esta carta fue escrita cerca de mediados del siglo primero, entre 20 y 30 años
después del Calvario. Mientras las sinagogas judías permitieron a los cristianos
tener culto con ellos en sus días de reposo sabáticos, las autoridades romanas les
consideraban meramente como una rama del judaísmo. Sin embargo, los cristianos
que rehusaran ser conectados con el judaísmo eran considerados una religión no
autorizada (ilegal), por lo general no fueron cazados y perseguidos sino hasta que
el cristianismo se convirtió en una religión ilegal alrededor del año 80 D. C.
Aproximadamente hasta el año 260 D. C., la mayoría de los lugares de reunión
fueron hogares, lugares abandonados, catacumbas, o cavernas - dondequiera que se
pudieran reunir sin ser descubiertos por el Imperio Romano, que buscaba
constantemente a los culpables de complotarse para derribarlo.
La Lion Enciclopedia of the Bible: "Es improbable que alguna forma de gremio se
formase bastante temprano, especialmente en las ciudades, donde las diferentes
ocupaciones parecen haber tenido sus calles especiales. La Biblia mencionla calle
de los carpinteros, la de los porteros, la de los orfebres, y la de los perfumeros". ...
"En los tiempos del Nuevo Testamento, eran bien conocidos los gremios de
comerciantes en el Imperio Romano. Pero debían tener una licencia para que el
gobierno pudiese estar seguro de que no eran simplemente un disfraz para
actividades políticas indeseables" (81).
¿Qué tiene que ver esta discusión con el diezmo? ¡Mucho! Primero, la Escritura no
registra ningunos diezmos después del Calvario para sostener un clero de tiempo
completo.Segundo, si hubiese existido tal sostenimiento a tiempo completo, las
autoridades romanas habrían arrestado a estas personas por practicar una religión
sin licencia (ilegal). De hecho, muchos fueron arrestados y ejecutados después del
año 80 D. C. por practicar una religión ilegal y por defender la fe. Tercero, aunque
Cipriano (año 250 D. C.) usó libremente la palabra "diezmo" y defendió el diezmo
sin éxito, lo hizo como fuerte discípulo de Tertuliano, el gran asceta. Cipriano había
renunciado a sus posesiones mundanas cuando se había bautizado, y era
extremadamente estricto sobre compartir todos los diezmos y las ofrendas con los
pobres. Cuarto, ninguno de los padres de la iglesia dice que el diezmo exacto se usó
para sostener un ministerio de tiempo completo. Quinto, el diezmo no se impuso
obligatoriamente como ley de la iglesia durante más de 700 años después del
Calvario. Hasta Cipriano dijo también que los obispos recibían emolumentos según
su dignidad y mérito.
1 Tes. 2:9 Porque os acordáis, hermanos, de nuestro trabajo y fatiga;
cómo trabajando de noche y de día, para no ser gravosos a ninguno de vosotros, os
predicamos el evangelio de Dios.
2 Tes. 3:8 Ni comimos de balde el pan de nadie, sino que trabajamos con afán y fatiga
día y noche, para no ser gravosos a ninguno de vosotros.
Hechos 20:34 Antes vosotros sabéis que para lo que me ha sido necesario a mí y a los
que están conmigo, estas manos me han servido.
9:1 ¿No soy apóstol? ¿No soy libre? ¿No he visto a Jesús el Señor nuestro? ¿No sois
vosotros mi obra en el Señor?
9:2 Si para otros no soy apóstol, para vosotros ciertamente lo soy; porque el sello de
mi apostolado sois vosotros en el Señor.
Parece que Pablo estaba respondiendo a falsas acusaciones de que quería recibir
suficiente sostenimiento para dejar de trabajar para ganarse la vida y vivir
mayormente de la iglesia para su sostenimiento. Es evidente que algunos de los
apóstoles de la iglesia de Jerusalén habían recibido algún sostenimiento por sus
esfuerzos en la misión. En los versículos 3-6, Pablo estaba meramente afirmando
(no pidiendo) su privilegio igual, o su derecho, del mismo modo que los demás
tenían sus derechos (que él habría rehusado).
9:7 ¿Quién fue jamás soldado a sus propias expensas? ¿Quién planta viña y no come
de su fruto? ¿O quién apacienta el rebaño y no toma de la leche del rebaño?
9:8 ¿Digo esto sólo como hombre? ¿No dice esto también la ley?
9:9 Porque en la ley de Moisés está escrito: No pondrás bozal al buey que trilla [Deut.
25:4]. ¿Tiene Dios cuidado de los bueyes,
9:10 o lo dice enteramente por nosotros? Pues por nosotros se escribió; porque con
esperanza debe arar el que ara, y el que trilla, con esperanza de recibir del fruto.
9:11 Si nosotros sembramos entre vosotros lo espiritual, ¿es gran cosa si segáremos
de vosotros lo material?
En los versículos 7 al 13, Pablo argumenta que las vocaciones compensan a sus
obreros a través de principios que gobiernan esa particular vocación. El soldado
recibe un pequeño salario y recibe los despojos de la guerra. El viñador come de las
uvas que cultiva. El criador de rebaños bebe leche de su rebaño. Al buey que trilla
grano se le permite comer del grano mientras trilla.
9:12 Si otros participan de este derecho sobre vosotros, ¿cuánto más nosotros? PERO
no hemos usado de este derecho, sino que lo soportamos todo, por no poner ningún
obstáculo al evangelio de Cristo.
9:13 ¿No sabéis que los que trabajan en las cosas sagradas comen del templo, y que
los que sirven al altar, del altar participan?
Hoy día, aunque muchos obreros evangélicos desean seguir el ejemplo de Pablo en
la ganancia de almas, pocos desean seguir su ejemplo de sacrificarse por amor al
evangelio. Sin deberle nada a nadie, y sin estar obligado con nadie (excepto a
predicar el evangelio), Pablo no tenía ninguna intención de enseñar el diezmo ¡ni
para sí mismo ni para los demás! Simplemente, no consideraba el diezmo como
parte del plan de redención y libertad del nuevo pacto de Dios. Además, no
debemos olvidar que, en la época en que se escribió esta carta, los cristianos judíos
de Jerusalén todavía eran devotos fanáticos de la ley mosaica y que, por
consiguiente, todavía llevaban sus diezmos al templo, de acuerdo con Hechos
21:20.
Hay varios voceros importantes del diezmo, que usan 1 Corintios 9:13, 14 como su
argumento más fuerte a favor del diezmo cristiano. Estas personas pasan por alto la
conexión entre el 9:7 hasta el 9:14 y en su lugar enfocan su atención en los
versículos 13 y 14. La palabra clave en su argumento es la primera palabra griega
del versículo, que significa "de la misma manera".
Es más erróneo que correcto decir: "Era el diezmo lo que sostenía a los siervos de
Dios en la dispensación del Antiguo Testamento", porque los sacerdotes recibían la
mayor parte de su sostenimiento de cosas diferentes del diezmo - cosas como
ofrendas voluntarias, ofrendas de voto y sacrificios (Números 18:1-19). Los
sacerdotes sólo recibían un décimo de la totalidad del diezmo levítico (Núm. 18:25-
28; Neh. 10:37-38). Como se señaló anteriormente, los modernos equivalentes
"levitas" en las iglesias cristianas no son ministros y a menudo no se les paga. Es
también erróneo considerar a los predicadores del nuevo pacto como reemplazos
de los sacerdotes del pacto antiguo.
Adoptar los principios de dar del Antiguo Testamento "de la misma manera"
obligaría a la iglesia a copiar también todos los otros principios levíticos de
sostenimiento sacerdotal que se encuentran en el Antiguo Testamento. Esta lógica
prohibiría el sostenimiento misionero y requeriría que las iglesias abolieran la
doctrina del sacerdocio de los creyentes y ejecutaran a los que tratasen de adorar a
Dios directamente.
El versículo clave.
9:14 Así también ordenó el Señor a los que anuncian elevangelio, que vivan del
evangelio.
Este texto es citado por los obreros evangélicos más que cualquier otro texto para
probar que ellos merecen ser sostenidos "a tiempo completo" por su ministerio.
Puesto que varias personas que han leído la primera edición de este libro han
llegado a la errónea conclusión de que yo me opongo al sostenimiento de los
obreros evangélicos de tiempo completo, debo afirmar cuidadosamente mi
interpretación de la Escritura. Mi queja es contra los que tuercen la Escritura y
enseñan que todos los ministros deben ser de tiempo completo porque la Biblia lo
enseña. Mis capítulos anteriores sobre 1 Crónicas 23-26, 2 Crónicas 31, Nehemías
10-13 y mis discusiones sobre las ciudades levitas en Josué 21 me han convencido
de que ni sacerdotes ni levitas trabajaron jamás como ministros de "tiempo
completo". La historia bíblica, rabínica, y secular confirma el hecho de que muchos
sacerdotes, levitas, y rabinos se sostenían por medio de varios oficios, varias artes y
varios puestos políticos tanto dentro como fuera de los sucesos de la palabra de
Dios.
¡Sorpresa! La Biblia NO dice que no se suponía que los sacerdotes y los levitas no
trabajasen fuera del templo. La Biblia SÍ dice que los diezmos y las ofrendas que
ellos recibían por trabajo que llevaban a cabo en el templo era en lugar de la
herencia de la tierra (Núm. 18:20-24)! Hay una enorme diferencia. Si a los
sacerdotes y los levitas sólo se les permitía desempeñar trabajos religiosos a
tiempo completo, entonces el rey David cometió un terrible error en 1 Crónicas
23:4. Eso también les convertiría en poco más que gorrones que sólo trabajaban
una semana de cada veinticuatro. Así como los que sí tenían herencia de la tierra
también podían trabajar en otras ocupaciones, así también los sacerdotes y levitas
que NO tenían herencia de la tierra podían trabajar en otras ocupaciones. La
diferencia es "herencia de la tierra", no "ministerio de tiempo completo". ¿Quiénes
cree usted que conducían los animales diezmados? ¿Dónde cree usted que
obtuvieron las habilidades para mantener y supervisar el mantenimiento del
templo? ¿Cómo es que actuaban justificadamente como jueces civiles y operaban el
mercado del templo y administraban las mesas de cambio de dinero?
Mucho antes del tiempo de Jesús, los sacerdotes y los levitas se habían distanciado
de los judíos promedios por razones políticas, riquezas, ritos, y puro esnobismo.
Vemos esto mejor en las parábola de Jesús sobre el buen samaritano.
Los que enseñan que 1 Corintios 9:14 ordena un ministerio de tiempo completo
pasan por alto completamente el mayor principio evangélico que se encuentra en
los versículos 12 y 15. El versículo 14 sugiere preguntas que necesitan ser
respondidas adecuadamente antes de decidir finalmente su correcta aplicación.
¿Cuál es el origen de esta cita? Puesto que el versículo 14 no tiene paralelo definido
en la Escritura, es imposible cualquier clara aplicación. Las referencias cruzadas en
muchas Biblias, tomadas de Treasury of Scripture Knowledge, envían al lector a
Mateo 10:10 y Lucas 10:7, que termina en que Jesús dice: "porqu el obrero es digno
de su salario" (83). Muchas otras obras de referencia también concuerdan en que
este versículo probablemente alude a Mateo 10 y Lucas 10. Por ejemplo, ésta es
también la referencia cruzada en el Adam Clarke´s Comentary; Barne´s Notes;
Jamieson, Fausset, and Brown Commentary, Robertson´s Word Studies, y el
Wycliffe Bible Commentary.
Por lo menos, mientras los discípulos y los setenta servían con Jesús, sus vidas eran
exactamente como se las describe en Mateo 10 y Lucas 10. Como los bueyes que
trillan el grano y los sacerdotes y levitas que servían durante su semana en el
templo, sobrevivían con los regalos de otros. Éste era un modelo aun más bajo que
el que Pablo siguió durante sus años de servicio misionero. El diezmo claramente
no entra en este cuadro para el sostenimiento de evangelistas a tiempo completo.
¿Qué se quiso decir con la frase "los que predican el evangelio deben vivir del
evangelio"? Cuando esta frase se toma fuera de contexto, se aplica como texto de
prueba para el sostenimiento obligatorio a tiempo completo de los obreros
evangélicos. Sin embargo, la frase es obviamente la conclusión de las frases
inmediatamente precedentes. En consecuencia, si las frases precedentes realmente
se refieren a Mateo 10 y a Lucas 10, es imposible que se usen para defender el
diezmo.
La frase "los que predican el evangelio deben vivir del evangelio" se traduce como
"ganarse la vida con el evangelio" (NAS); "recibir su modo de vida del evangelio"
(NVI); "por el evangelio" (RSV); y "deben rcibir su sustento" (Phillip's). La
expresión griega es literalmente ho kurios (el
Señor) dieetaxen (ordenado) tois (los que) to (los que predican el evangelio) ek
tou euangelliou (del evangelio) zeen (vivir)". Muchas traducciones de la palabra
griega "zoee" dan la impresión de que esta palabra se refiere exclusivamente a una
ocupación de tiempo completo, lo cual está muy lejos de ser su verdadero
significado. Esta palabra griega clave es gramaticalmente un verbo en el modo
infinitivo, tiempo presente, voz activa. "Zoee" (Strong´s 2198) ocurre más de 140
veces en el Nuevo Testamento y se traduce muy a menudo como los verbos "vivir" y
"estar vivo", el sustantivo "vida", y el participio "viviendo". "Zoee" significa muy a
menudo la "vida" misma, lo opuesto a "muerte". (Compárese con 1 Cor. 7:39; 15:45;
2 Cor. 1:8; 3:3; 4:11; 5:15; 6:9, 16; 13:4). Al investigar los más de 140 usos de esta
palabra en la Escritura, no se justifica insistir en que la palabra debe interpretarse
solamente en este texto como equivalente a "sustento", "ocupación" "profesión"
"oficio", "artes", "labor" o "trabajo" (84).
Como hecho bíblico, zoee está lejos de ser la mejor palabra para "sustento". Si Pablo
hubiera tenido el propósito de transmitir incuestionablemente la idea de "sustento"
u "ocupación", tenía muchas palabras mejores de las cuales escoger. Bios (Strong´s
979) ocurre 11 veces y significa "sustento" en Lucas 15:12. El
verbo ergazomai (Strong´s 2038) ocurre 37 veces y es la clase de trabajo que Jesús
y el Padre llevan a cabo en Juan 5:17. Ergasia (Strong´s 2039) ocurre 6 veces y
significa "arte" u "ocupación" en Hechos 19:15.Ergates (Strong´s 2040) ocurre 17
veces y se traduce como "obreros" y "trabajadores" en el texto sobre el oficio de
fabricar tiendas en Hechos 18:3. Meros (Strong´s 3313) significa "arte" en Hechos
19:27. El punto es que varias de estas palabras griegas transmiten mucho mejor la
idea de una profesión, un oficio, o un arte a tiempo completo, con el cual ganarse la
vida. "La vida", por lo menos en 1 Corintios 9:14, se refiere mejor a los principios
evangélicos de gracia y fe, más bien que a una ocupación o estilo de vida.
"Evangelio" es la palabra más importante en 9:14, no "vivir". Los que predican los
principios del "evangelio" deben depender de los principios del "evangelios" para
sostenerse. ¡"Del evangelio" significa "por fe", pero no por la ley! Esta es otra razón
más para excluir el diezmo por la ley de la fórmula para sostener a los obreros
evangélicos. ¡Ellos no son "obreros de la ley", sino "obreros del evangelio"! El
evangelio, no la ley, es "ek pisteoos eis pistin", es decir, viene "por fe" y regresa
"para fe" (Rom. 1:17). ¡El evangelio no contiene ninguna parte de la ley! Es
puramente de fe de principio a fin. Pero es asombroso cómo muchas iglesias
"evangélicas" insisten correctamente en basar todas las doctrinas evangélicas del
nuevo pacto en textos post-Calvario - excepto el diezmo. Sin embargo, Dios no dijo
que "todo en el evangelio es de fe para fe" - excepto el diezmo". Los discípulos en
Mateo 10 y los setenta en Lucas 10 no dependían del diezmo y los principios de la
ley para su sostenimiento mientras ministraban para Jesús. En lugar de eso,
dependían enteramente de los principios del evangelio y las ofrendas voluntarias.
Mientras mejor servían al pueblo de Dios, mejor respondía el pueblo de Dios por
amor y aprecio a ellos.
Hay dos razones para cuestionar las tres conclusiones anteriores. Primera, si Mateo
10 y Lucas 10 constituyen un inmutable pacto "ordenado" y la "ley" "ordenada" u
"ordenanza" para obreros evangélicos, entonces a los obreros evangélicos del
nuevo pacto se les ordena vivir día tras día como pobres, en total dependencia de la
caridad de los que sirven en obediencia a los principios del evangelio (no de la ley).
Los 12 y los 70 eran todos judíos. La tradición judía citada en otra parte y tomada
del Didache y otras fuentes en este libro indica que a los evangelistas sólo se les
permitía depender de la caridad durante dos o tres días en cada lugar antes de
seguir su camino o establecerse en un oficio.
Para Pablo, la discusión anterior sobre el "derecho" a que se le pagara por servir a
Cristo, incluyendo el versículo 14, está totalmente fuera de razón para su
compulsión y motivación. Después de argumentar y probar que tenía "derecho" a
que se le pagara si deseaba insistir en tal "derecho", ¡Pablo declinó ejercer ese
derecho! Pablo tenía muchos acusadores en Corinto. Probar su posición era más
importante que el "contenido" del argumento.
¿Por qué rehusó Pablo el salario? Además de los tres puntos presentados en el
versículo 12: Cuarto, de acuerdo con su cultura y tradición como judío, esperaba
que todos los hombres aprendieran un oficio y fueran autosuficientes. Quinto,
quería servir y proveer para otros - no que otros le sirvieran y proveyeran para él
(9:19). Por encima de todo lo demás, Pablo quería ser un ganador de almas más
efectivo. Quedar libre de pedir un salario a los demás "para ganar a más personas"
era la motivación de Pablo (9:19). Cualquiera fuese el sacrificio o esfuerzo
necesario para ganar a otros para Cristo, aun rehusar a su derecho a recibir un
salario, Pablo estaba preparado para hacer ese sacrificio o esfuerzo (9:20-27).
En este punto, vale la pena leer la Living Bible: "Y esto [rehusar a ser sostenido]
tiene una verdadera ventaja; no estoy obligado a obedecer a nadie sólo porque pagan
mi salario; pero, libre y gustosamente, me he hecho siervo de cualquiera y de todos
para poder ganarlos para Cristo". Aunque tengamos muchas menos iglesias grandes,
tendríamos muchos más millares de iglesias más pequeñas.
Luc. 10:4 No llevéis bolsa, ni alforja, ni calzado; y a nadie saludéis por el camino.
Luc. 10:5 En cualquier casa donde entréis, primeramente decid: Paz sea a esta casa.
Luc. 10:6 Y si hubiere allí algún hijo de paz, vuestra paz resposará sobre él; y si no, se
volverá a vosotros.
Luc. 10:7 Y posad en aquella misma casa, comiendo y bebiendo lo que os den;
porque el obrero es digno de su salario [recompensa] [griego: misthos]. No os paséis
de casa en casa.
Este libro de texto de los Bautistas del Sur dice: "Los líderes [antes del año 100 D.
C.] por lo general trabajaban con las manos para suplir sus necesidades
materiales. No había ninguna distinción artificial entre el clero y el laicato". Y
añadía más tarde: "Los primeros obispos o presbíteros se ocupaban de labores
seculares para ganarse la vida, y desempeñaban los deberes de su puesto en la
iglesia cuando no estaban trabajando" (89).
El Códice de la Ley Judía dice que un sabio pobre que estudia la ley debe
establecerse en un negocio y se le debe dar un tratamiento superior para
asegurarse de que tenga éxito. "Aunque un sabio honorable empobrezca, debe
encontrar alguna ocupación, aunque sea de menor importancia, antes que
depender de los hombres" (90).
Este libro de texto de los Bautistas del Sur dice: "Entre los judíos, la vida
profesional era limitada. La única profesión ampliamente difundida era la de
rabino, si es que podía llamarse profesión, porque la mayoría de los rabinos
ejercían algún oficio o ocupación secular para ganarse la vida, mientras dedicaban
todo el tiempo posible al estudio y la enseñanza de la ley. ... Se esperaba que todo
muchacho judío aprendiera algún oficio. La tradición rabínica declaraba que 'todo
el que no enseña un oficio a su hijo es como si lo hubiese criado para que fuese
ladrón'" (p. 149).
"El uso prevaleciente de tiendas [por los viajeros] hacía del oficio de fabricar
tiendas una ocupación lucrativa. El que perteneciera al mismo gremio, culto
religioso, o que tuviese cualquier otra relación personal con cualquier residente de
la localidad casi siempre podía encontrar una bienvenida más o menos genuina en
un hogar privado. ...Ésta era la manera prevaleciente en que los primeros
misioneros cristianos eran provistos, aunque probablemente el alojamiento y la
comida para ellos eran sin costo (comp. 2 Juan 10-11; 3 Juan 5-8)" (p. 221) (91).
Dana hace otra curiosa afirmación en la página 127: "Los sacerdotes rara vez
entraban en contacto con el pueblo". Si esto es cierto, entonces, ¿qué hacían cuando
estaban entre los 23 o 24 grupos que NO ministraban en el templo durante una
semana cada vez?
"Y este mismo amor al trabajo honesto, el mismo el mismo espíritu de varonil
independencia, el mismo horror a traficar con la ley, y a usarla como 'corona o
como espada', era ciertamente característico de los mejores rabinos" (p. 172).
"Al principio, los estipendios del clero se pagaban con las ofrendas durante la cena
del Señor. En la fiesta de amor que la precedía, cada creyente, según su capacidad,
ofrecía un regalo; y cuando el gasto de la mesa había sido sufragado, el obispo
apartaba una porción para sí mismo, los prebíteros, y los diáconos; y con el resto
ayudaba a las viudas, las huérfanos, los confesores, y los pobres (Tertuliano, m.
220), 'Apología', 1 Cor. 3:9). Repetimos, el estipendio era en proporción a la
dignidad y los méritos de los obispos, los presbíteros, y los diáconos (Cipriano,D. C.
250, c. iv. ep. 6)". (94)
[Hechos 18:1-4] "Era costumbre que los rabinos judíos no recibieran paga por sus
enseñanzas, y por lo tanto, Pablo, que había sido criado como rabino, había
aprendido el oficio de fabricar tiendas. El apóstol no inició en seguida la
evangelización de Corinto, sino que se unió a Aquila y a Priscilla en la práctica de su
oficio durante la semana. Dedicaba los sábados a predicar en las sinagogas" (95).
[Hechos 20:34] "Pablo les recordó a los efesios su costumbre de fabricar tiendas, no
sólo para sostenerse, sino para suplir las necesidades de otros que estaban con él.
Citaba un dicho del Señor, que no está registrado en ninguno de los evangelios,
sobre las bendiciones del dar. ... El principal objetivo de dar en la iglesia primitiva
era proveer para las necesidades de los hermanos pobres, no sostener la
predicación del evangelio, como sucede en la actualidad".
Lenski, R. H. C., La Interpretación del Evangelio de Mateo
"Aunque todos los apóstoles era judíos originalmente, criados en la práctica del
diezmo, ninguno de ellos dijo ni una sola palabra para intimar siquiera que, en el
nuevo pacto, los cristianos podrían encontrar un método útil para contribuir a la
obra de la iglesia. Esta fuerte negativa está reforzada inmensamente por el método
totalmente diferente sugerido por Pablo cuando invitó a las iglesias a hacer una
gran ofrenda, 1 Cor. 16:1, etc; 2 Cor. 8:4, etc.
[Hechos 18:3] "Se consideraba correcto que un rabino practicara una ocupación
manual, para no ganar dinero con su enseñanza sagrada".
[1 Tes. 2:9] "Su política [trabajar día y noche] no sólo reflejaba el deseo de ser
financieramente independiente de aquellos entre los cuales ministraban, sino que
también los distinguía de los traficantes religiosos comunes en su tiempo, y daba un
buen ejemplo a los conversos".
[2 Cor. 11:8] "Pablo está indicando realmente que no recibía ningún salario en
absoluto por predicar el evangelio. Si lo que otras iglesias le daban para su
sostenimiento no se consideraba 'ganancia', entonces, de hecho, les 'robó', puesto
que el servicio prestado no era a ellos, sino para los corintios" (97).
"Con la exaltación del clero [a finales del siglo tercero], apareció la tendencia a
separar a sus miembros de la actividades seculares, y hasta de las relaciones
sociales ... Obtenían su sostenimiento de la tesorería de la iglesia, que era
alimentada por contribuciones voluntarias y recaudaciones semanales el día del
Señor. Después del siglo tercero, se les prohibió ocuparse de negocios seculares, y
hasta aceptar cualquier cargo" (p. 128).
"La base sobre la cual estas particulares virtudes se impulsaban tan fuertemente
puede entenderse fácilmente. La propiedad, que está tan estrechamente aliada con
el egoísmo del hombre y le ata a la tierra, y las relaciones sexuales - éstas se
presentan como los obstáculos más firmes contra la perfección, en la sólo Dios es
nuestra posesión, y sólo Cristo es nuestro amor y deleite" (p. 395). "Los ebionitas
[judeocristianos] hacían de la pobreza la condición para la salvación". (Hasta el
sustantivo "ebionita" es la palabra hebrea para "pobre".
(81) Pat Alexander, ed., Lion Encyclopedia of the Bible,Orig. Eerdman´s Family
Encyclopedia of the Bible, 1978, 3rd ed. (Batavia: Lion Publishing, 1987), 218.
(82) Temple, Edersheim, 102-103.
(83) Jerome Smith, Treasury of Scripture Knowledge, CD-ROM (Seattle: Biblesoft,
1999), s.v. "1 Cor. 9:14".
(84) Strong´s , s.v. "zoee, N.T. 2198".
(85) Barnes, s.v. "1 Cor. 9:14".
(86) Robertson´s, s.v. "1 Cor. 9:14".
(87) Jamieson, s.v. "1 Cor. 9:14".
(88) Wycliffe Comm., s.v. "Matt. 10:8-9".
(89) Robert A. Baker, A Summary of Christian History (Nashville: Broadman,
1995), 11, 43.
(90) Code, 1-114.
(91) H. E. Dana, The New Testament World, 3rd. ed., rev. (Nashville: Broadman,
1937), 149, 217, 221.
(92) Henry Bettenson, ed., Documents of the Christian Church, 2nd. ed. (New York:
Oxford UP, 1963), "Didache", o "Teaching of the Twelve", 64-65.
(93) Edersheim, Sketches, 169, 172, 173.
(94) Jamieson, s.v. "1 Cor. 9:14".
(95) Wycliffe Comm., s.v. "Acts 20:34" and "Acts 18:1-4".
(96) Lion, 218.
(97) New Bible Comm., s.v. "Acts 18:1-4", 2 Tes. 2:9", y "2 Cor. 11:8".
(98) Schaff, 118, 128, 391, 392, 393, 395, 396.
Capítulo 23
1 Corintios 16
Dar para los santos
Primera Corintios 16:1-3 es citado casi tan a menudo como el 9:14 para demostrar
que los cristianos deben sostener su iglesia por medio de los diezmos y las
ofrendas. Pero el contexto de estos versículos no contiene ni una sola palabra sobre
el diezmo, dinero para "sostener" la iglesia local, pagar salarios, o sostener una
organización.
16:1 En cuanto a la ofrenda para los santos, haced vosotros también de la manera
que ordené en las iglesias de Galacia.
"En cuanto a". "En cuanto a" significa que Pablo está cambiando a otro problema
que la iglesia de Corinto estaba confrontando. Anteriormente, había tratado un
problema diferente en casi cada uno de los capítulos. Por consiguiente, no es de
sorprenderse que los corintios también tuvieran problemas relativos a las ofrendas
voluntarias para los necesitados. Los que arguyen que el diezmo no se menciona en
el Nuevo Testamento porque no era un problema simplemente subestiman los
problemas de las iglesias. Es muy improbable que existieran los problemas que
Pablo trataba en cada capítulo si la iglesia hubiese sido tan fiel en dar como supone
el argumento del silencio.
"Concerniente a la ofrenda para los santos". Los "santos" son específicamente los
necesitados de "Jerusalén" (v. 3). La hambruna era una ocurrencia común en
Palestina durante toda la historia bíblica. Hechos 11:27-30 cuenta de una "gran
hambruna en todo el mundo, que ocurrió en los días de Claudio César",
aproximadamente en el año 47 D. C. Las congregaciones cristianas decidieron
ayudar a los que habían sido más afectados por esta hambruna en Judea. Hechos
11:29-30 dice: "Entonces los discípulos, cada unoconforme a lo que tenía,
determinaron enviar socorro a los hermanos que habitaban en Judea; lo cual en
efecto hicieron, enviándolo a los ancianos por mano de Bernabé y de Saulo". Hechos
12:25 registra que Bernabé y Saulo entregaron esta primera colecta
personalmente.
Probablemente, Pablo llevó ayuda para los afectados por la hambruna en varios
viajes de vuelta a Jerusalén. En Romanos 15:25-26, escribió: "Mas ahora voy a
Jerusalén para ministrar a los santos. Porque Macedonia y Acaya [Corinto] tuvieron
a bien hacer una ofrenda para los pobres que hay entre los santos que están en
Jerusalén". Gálatas 2:9-10 menciona una colecta: "Y reconociendo la gracia que me
había sido dada, Jacobo, Cefas, y Juan, que eran considerados como columnas, nos
dieron a mí y a Bernabé la diestra en señal de compañerismo, para que nosotros
fuésemos a los gentiles, y ellos a la circuncisión. Solamente nos pidieron que nos
acordásemos de los pobres; lo cual también procuré con diligencia hacer".
"La colecta (tees logeias)". Los lectores de Pablo sabían exactamente a qué se
refereía al hablar de "la colecta", así que no era necesario que les explicara (2 Cor.
9:1). Sin embargo, casi 2000 años más tarde, el versículo 2 a menudo es separado
de su contexto en los versículos 1 y 3. En consecuencia, las necesidades de los
pobres han sido opacadas por las necesidades de la iglesia local. Tal cosa es
contraria a las prioridades de los pactos antiguo y nuevo.
Uno: Pablo nunca usó ninguna palabra para "dinero" al describir la "colecta". En
realidad, ¡os escritos de Pablo nunca se refieren a "dinero" o a "plata" en un sentido
positivo! Excepto por la cita de Lucas de Pablo en Hechos 20:33, ¡sus cartas ni
siquiera contienen la palabra básica misma! 1 Timoteo 3:3 usa la
palabra aphilarguros, "sin codicia" y 1 Timoteo 6:10
usa philarguros (codicia). ¡Pablo tampoco usó jamás ninguno de los términos con
que se designaba el dinero! Uno tiene que llegar a la conclusión de que Pablo sentía
una fuerte aversión al dinero. [Véase argurion (Strong´s
694), aphilarguros (866), kerma (2772), nomisma (3546), philarguria (5365), chal
kos (5475), y chrema (5536). Pablo jamás usó ninguna de las palabras específicas
para dinero. Véase leptonkodrantes (3015);
(2835); assarion (787); drachma (1406); mina (3414); talanton (5007).
Cuatro: Aun hoy día, los judíos religiosos no manejan ni recogen dinero en sábado.
Los primeros cristianos que reconocieron el domingo como día santo podrían
haber sentido una renuencia similar.
16:2 Cada primer día de la semana, cada uno de vosotros ponga aparte algo, según
haya prosperado, guardándolo, para que cuando yo llegue no se recojan entonces
ofrendas.
"Ponga aparte" (para heautoo tithetoo); literalmente "por sí mismo poner". Esta
frase no tiene una traducción que no haya sido puesta en duda. La NAS dice "poner
aparte y guardar"; la NIV dice "poner aparte una suma de dinero"; y la RSV dice
"poner aparte algo". "Por sí" ha sido entendido de varias maneras como "por sí
mismo" o "personalmente". Sin embargo, cualquier interpretación es irrelevante
porque el sostenimiento de la iglesia local no está incluido en el contexto original.
No hay ninguna razón obligatoria para suponer que aquí se quiere decir culto en
grupo, más bien que una acción personal. En su lugar, los creyentes están siendo
instruidos para que hagan de la provisión para los pobres su prioridad principal
para su agenda de la semana. Cualquier cosa que deba ser "puesta aparte" podría
ser muy pesada o muy liviana.
"Guardándolo", thee-sau-ri-zoon es un participio activo presente del
verbo thesaurizo (Strong´s 2343), que simplemente significa "almacenar". El
participio se traduce "guardado"en la KJV, "y guardarlo" en la NIV, y "guardarlo" en
la RSV. Su forma sustantiva es thesauros (Strong´s 234). El sustantivo ocurre once
(11) veces en el Nuevo Testamento, pero sólo tres veces fuera de los evangelios.
Estos son los "dones" de los sabios (Mat. 2:1); los tesoros del corazón (Mat. 12:35;
6:19, 21; Lucas 6:45); los tesoros en el cielo (Mat. 6:20; 19:21; Mar. 10:21; Luc.
12:33); y toda la sabiduría y el conocimiento de Cristo (2 Cor. 4:7; Col. 2:3). En sus
ocho ocurrencias en el Nuevo Testamento, la forma verbal se refiere a "hacer
tesoros en la tierra" (Mat. 6:19; "hacer tesoros en el cielo" (Mat. 6:20); "hacer
tesoros para sí" (Luc. 12:21); "atesorar ira" (Rom. 2:5); "atesorar los padres para
los hijos" (2 Cor. 12:14); "acumular tesoros pàra los días postreros" (Sant. 5:3), y
"los cielos y la tierra están reservados para el fuego del día del juicio" (2 Ped. 3:7).
El punto importante de este estudio de palabras es que, aunque las dos formas de la
palabra usadas en 16:2 se traducen generalmente como "tesoro" en la KJV, a
menudo NO son dinero. Pero algunos eruditos declaran tercamente que
aquí thesauros se refiere solamente a la iglesia como tesorería, o almacén para
dinero. Llegan a esta conclusión, no por el contexto o por principios de
interpretación aceptados, sino por prácticas BANCARIAS paganas en las cuales el
templo era un lugar de depósito seguro y protegido contra robos. Existe en los
comentarios una amplia gama de interpretaciones. Por ejemplo:
Matthew Henry Commentary: "La manera en que habría de hacerse la colecta: Cada
uno debía apartar y guardar (v. 2), tener consigo un tesoro, o un fondo, para este
propósito. Esto significa que debía apartar lo que pudiera de vez en cuando, y por
este medio acumular una suma de dinero para este propósito caritativo ... Algunos
de los padres griegos observan correctamente aquí que este consejo se dio por
consideración a los más pobres de entre ellos. Debían guardar cada semana,
y no llevarlo a la tesorería común, para que de ese modo su contribución no fuera
difícil para ellos, y sin embargo aumentar el fondo para el socorro de sus
hermanos" (100).
The New Bible Commentary: "Poner aparte en su casa una suma proporcional a lo
que ha recibido, o llevarla a la tesorería central de la iglesia" (101).
Los templos paganos griegos eran "tesorerías" seguras donde los paganos
guardaban sus artículos de valor, pero no los daban a los dioses. Además, algunos
creen que el templo judío puede haber sido usado como banco en años posteriores.
La idea detrás de usar los templos como tesorerías o bancos era que los dioses se
vengarían de cualquiera que robase en los templos. La iglesia no debe en modo
alguno ser usada como depósito temporal, o banco, para que Dios proteja nuestros
dineros de modo que podamos retirarlos más tarde para nuestro uso personal.
[Pero algunas iglesias venden bonos]. Aunque ni uno ni otro concepto es del nuevo
pacto, llamar a la iglesia "depósito-tesorería" atribuye a thesauros una connotación
más pagana griega que una connotación de almacén del Antiguo Testamento.
Véanse comentarios sobre Malaquías 3:10.
Mat. 27:6 Los principales sacerdotes, tomando las piezas de plata, dijeron: No es
lícito echarlas en el tesoro de las ofrendas [corban: 2878], porque es precio de
sangre.
Mar. 12:41 Estando Jesús sentado delante del arca de la ofrenda [gazophulakion:
1049], miraba cómo el pueblo echaba dinero en el arca. ...
Juan 8:20 Estas palabras habló Jesús en el lugar de las ofrendas [gazophulakion:
1049], enseñando en el templo. ...
2 Cor. 12:14 He aquí, por tercera vez estoy preparado para ir a vosotros; y no os seré
gravoso, porque no busco lo vuestro, sino a vosotros, pues no deben atesorar [thee-
sau-ri-zein] los hijos para los padres, sino los padres para los hijos.
2 Cor. 12:15 Y yo con el mayor placer gastaré lo mío, y aun yo mismo me gastaré del
todo por amor de vuestras almas, aunque amándoos más, sea amado menos.
En tres viajes a Corinto, Pablo rehusó absolutamente toda ayuda de aquella gran
congregación. En 2 Corintios 12:14-15, "poner aparte" significa que, en lugar de
recibir de la iglesia, ¡Pablo estaba dispuesto a gastar todo lo que tenía en los
miembros de la iglesia - dinero, riqueza, y vitalidad! Con ironía, Pablo dijo que en su
aproximación a los corintios había sido "astuto", y "os prendí por engaño". Quería
decir que, al rehusar "hacer ganancia" con ellos aceptando salarios (la palabra
griega significa raciones diarias) (12:17-18), había desarmado a sus acusadores
(12:20). De la misma manera, es obvio que Pablo no tenía el propósito de que la
misma frase "poner aparte" en 1 Corintios 16 incluyera ningún sostenimiento
pastoral.
"Poner aparte una suma de dinero" (NVI). ¿Por qué dice la NVI "poner aparte una
suma de dinero" en lugar de "poner aparte"? ¡"Dinero" es una paráfrasis pobre, más
bien que una traducción! ¡Ciertamente Pablo, que era muy educado y estaba
inspirado por el Espíritu Santo, conocía todas las palabras comunes para "dinero" y
habría usado una de ellas si en verdad hubiese querido decir dinero! Véase la
discusión anterior bajo el subtítulo "colecta". ¡Mientras argurion, la palabra más
común para "dinero", ocurre veintiuna veces en el Nuevo Testamento, Pablo no usó
ninguno de los términos para "dinero" en este texto!
"Según Dios le haya prosperado" (KJV); "según haya prosperado" (NAS, NKJV); "de
acuerdo con sus ingresos" (NVI); (ho ti ean euodootai), literalmente, "lo que pueda
haber ganado".
Deut. 15:11 Porque no faltarán menesterosos en medio de la tierra; por eso yo te
mando, diciendo: Abrirás tu mano a tu hermano, al pobre y al menesteroso de tu
tierra.
Hechos 11:29 Entonces los discípulos, conforme a lo que tenían, determinaron enviar
socorro a los hermanos que estaban en Judea.
2 Cor. 8:12-14 Porque, si primero hay la voluntad dispuesta, será acepta según lo que
uno tiene, no según lo que no tiene. Porque no digo esto para que haya para otros
holgura y para vosotros estrechez, sino para que en este tiempo, con igualdad, la
abundancia vuestra supla la escasez de ellos, para que también la abundancia de
ellos supla la necesidad vuestra, para que haya igualdad. 2 Cor. 9:7 Cada uno dé como
propuso en su corazón: no con tristeza, ni por necesidad, porque Dios ama al dador
alegre.
Esta simple frase: "Según Dios le haya prosperado", incluye la partícula condicional
griega ean, que significa "en caso de que", y sugiere incertidumbre. La
palabra euodontaisignifica literalmente "buen viaje" y se refiere a los que la vida los
ha tratado bien. En consecuencia, toda persona debería guardar para dar a los
pobres hasta donde hayan sido bendecidos en la vida.
1001 Cosas que Usted Siempre Quiso Saber sobre la Biblia, J. Stephen Lang, "el
nuevo pacto insta a dar en proporción con el ingreso de uno. Se esperaba que los
cristianos ricos dieran generosamente para ayudar al hermano en la fe menos
afortunado" (104).
El Libro Completo de Respuestas Bíblicas, Ron Rhodes: "Yo no creo que los
cristianos hoy día estén bajo el sistema del diezmo del diez por ciento. No estamos
obligados a entregar un porcentaje como diezmo en absoluto. No hay un solo
versículo en el Nuevo Testamento en que Dios especifique que debemos dar a la
iglesia el diez por ciento de nuestros ingresos. ... Hemos de dar según podamos.
Para algunos, esto significará menos del diez por ciento, pero para otros, a los
cuales Dios ha bendecido materialmente, esto significará mucho más que el diez
por ciento" (105).
En Hechos 3:6, Pedro dice: "No tengo plata ni oro, pero lo que tengo te doy; en el
nombre de Jesucristo, levántate y anda". Han pasado los días en que la mayor parte
del clero puede decir con Pedro: "No tengo plata ni oro". También, los miembros
del clero ya no pueden decir: "En el nombre de Jesucristo, levántate y anda". Ya
pasó el tiempo en que la iglesia regresó a las actitudes básicas del nuevo pacto
hacia los pobres. La actitud de la iglesia primitiva hacia el dar y hacia los pobres es
drásticamente diferente del concepto moderno. ¡Las piroridades se han invertido!
Demasiado a menudo, la parte del león de las contribuciones se usan para pagar
gastos innecesarios de edificios y altos salarios, mientras los pobres son ignorados.
Y demasiado a menudo, las primeras planas de los periódicos revelan escándalos
financieros de las iglesias antes que las obras de caridad en favor de los pobres.
¡Es imposible que el dar por obligación produzca el nivel de dadivosidad causado
espontáneamente por el Espíritu Santo cuando el evangelio se predica con poder y
autoridad! Cuando Pedro y Juan fueron "llenos del Espíritu Santo y comenzaron a
hablar con denuedo la palabra de Dios, y la congregación era de un corazón y un
alma", dieron y compartieron todo, "porque no había ni una sola persona
necesitada entre ellos (Hechos 4:31-34)". Pero Pedro no predicó el diezmo aquí, ni
en ninguna otra parte de los registros del Nuevo Testamento; ¡predicó el evangelio
de Jesucristo!
16:3 Y cuando haya llegado, a quienes hubiereis designado por carta, a éstos enviaré
para que lleven vuestro donativo a Jerusalén.
Repetimos. El contexto de hambre de las "colectas" significa más probablemente
que las contribuciones consistían de "alimentos", no de dinero. La "preservación"
de alimentos era una preocupación mayor para las iglesias que contribuían que el
robo. A cada iglesia se le pedía que enviara a varias personas junto con las
"colectas". Tito y otro "hermano" se ofrecieron para ayudar en la colecta (2 Cor.
8:16-18). Este "hermano" anónimo había sido escogido por las iglesias para que
viajara con ellos (8:19).
Lo más probable es que cada iglesia enviara representantes para varios propósitos.
Primero, Para aseguarse de que los suministros de alimentos permaneciesen
herméticamente guardados y seguros a bordo del barco. Segundo, cada uno
protegía sus propios suministros contra el robo en general. Tercero, los conversos
gentiles se convirtieron en ejemplos de la obra de Pablo entre los gentiles cuando
llegó a Jerusalén. Además, puede que haya habido alguna desconfianza entre las
iglesias de Macedonia y la iglesia de Corinto (2 Cor. 8:20-24).
Capítulo 24
1 Timoteo 5:17-20
Dignos de doble honor
1 Tim. 5:17 Los ancianos que gobiernan bien, sean tenidos por dignos de doble
honor, mayormente los que trabajan en predicar y enseñar.
1 Tim. 5:18 Pues la Escritura dice: No pondrás bozal al buey que trilla; y: Digno es el
obrero de su salario.
1 Tim. 5:19 Contra un anciano no admitas acusación sino con dos o tres testigos.
1 Tim. 5:20 A los que persisten en pecar, repréndelos delante de todos, para que los
demás también teman.
Los versículos 17 y 18 han sido citados por muchos comentaristas como textos en
la palabra de Dios que discuten la paga para obreros del evangelio. La
interpretación correcta, afirman, es "dignos de doble paga", o "doble salario". Sin
embargo, este autor discrepa enérgicamente con esta conclusión por las siguientes
razones:
Una: Los eruditos griegos que tradujeron las versiones más respetadas rehusaron
traducir "doble honor" como "doble paga". Aunque la palabra griega puede
significar "precio", las mejores traducciones de la Biblia dicen "honor". Por ejemplo,
"honor" se encuentra en la KJV, la NAS, la NIV, la RSV, la NKJV, y la versión New
American de la Iglesia Católica Romana. Las versiones parafraseadas se toman más
libertades; Phillips dice "dignos de respeto y un salario adecuado"; The Living Bible
dice "debe pagárseles bien y deben ser muy apreciados"; The Amplified Bible dice
"doblemente dignos de honor [y de un adecuado sostenimiento financiero]".
Nuevamente, es extraño que, aunque muchos eruditos del idioma griego aseguran
en su otra literatura escrita que el pasaje quiere decir "paga", todavía rehusan
comprometerse con esta palabra en las traducciones de buena reputación en las
cuales son co-traductores. Se dan cuenta plenamente de que, enel contxto, "honor"
es la traducción correcta.
La secuencia del honor disciplinario comienza con "No reprendas al anciano" (v. 1)
y termina con "reprende delante de todos al anciano que ha pecado" (v. 20). El
"anciano" del versículo 1 es probablemente un miembro de iglesia de mayor edad
al que se le debe honor a causa de su edad y su experiencia. Después de discutir la
cautelosa acción de reprender a otros miembros de iglesia (vv. 1-2) y las reglas
especiales para honrar a las viudas (vv. 3-16), el escritor ahora se ocupa de la
reprensión, necesaria pero desagradable, de los líderes espirituales de la iglesia
(vv. 19-20). Primero, sin embargo, recuerda a todos la posición doblemente
honorable de la persona que está a punto de comentar (vv. 17-18). Aunque un
dirigente ordinario (persona de mayor edad) se le debe solamente "honor", una
persona de mayor edad que dirige en la palabra de Dios es digna de "doble honor" -
el primer honor a causa de su edad y el segundo, o doble honor, a causa de su
ministerio en la Palabra.
Para expresar nuevamente la anterior conclusión, puest que todos los miembros de
iglesia son personas "honorables" (1 Cor. 12:23-24), todos son dignos de una
reprimenda honorable y cautelosa. Las personas de mayor edad han de ser
reprendidas con un honor que respeta su edad y su experiencia. Sin embargo, las
personas de mayor edad que tienen autoridad y que enseñan son dignas de doble
"honor", es decir, de un "reprensión doblemente cautelosa". ¡Este es el contexto, no
el salario! Debido a que los ancianos son dignos de doble honor, los que desean
reprenderlos deben ser "doblemente" cuidadosos y no deben reprenderlos
personalmente sino en presencia de dos o tres testigos (v. 19). Los ancianos que
continúan en su pecado deben ser reprendidos delante de toda la iglesia (v. 20).
Parece que, al reprender a líderes de la iglesia, se omite la etapa del cara a cara.
Compárense y contrástense estos principios con los de Mateo 18:15-17.
Tres: Si con el "honor" del versículo 17 se hubiera querido decir "el sueldo" o el
"salario", entonces el escritor inspirado ciertamente habría usado una palabra
mejor que "honor",timees. Véase la discusión sobre "vivo", zoee, en 1 Corintios
9:14.
Siete: ¿Por qué le diría Pablo a la iglesia que le diera a Timoteo un doble salario
cuando él mismo había rehusado recibir cualquier salario en absoluto (1 Cor. 9:12,
15; Hechos 20:33-35)? ¿No estaba su compañero Timoteo, incluido en el mandato:
"En todo os he enseñado que, trabajando así, se debe ayudar a los necesitados, y
recordar las palabras del Señor Jesús, que dijo: Más bienaventurado es dar que
recibir" (Hechos 20:35)?
Ocho: ¿Por qué se dieron los dos ejemplos de 5:18? Debemos recordar que el
contexto en Timoteo se relaciona con la disciplina, mientras que el contexto de 1
Corintios 9 se relaciona con ser digno del honor de recibir algún sostenimiento
(que él rehusó). En 5:18, el buey está siendo honrado mientras trilla el grano. ¡El
énfasis aquí es en el hecho de que ESTÁ siendo honrado, no CÓMO! Se incluyen las
citas para recordarle a la iglesia el HONOR del anciano que estaba a punto de ser
disciplinado.
Además, aunque Pablo concluye en 1 Corintios 9:12 y 9:15 que él y otros tenían
ciertos "derechos" legítimos a ser compensados por su trabajo en el ministerio, ¡no
dice en absoluto que se refiere a doble salario! ¡Eso habría sido lo último que Pablo
habría dicho sobre salarios! Recordemos que, aunque en 1 Corintios 11:8 Pablo
admite haber recibido algún "salario" (opsonion; Strong´s 3800), esta palabra
griega significa meramente "una ración de soldado", o una porción diaria para las
necesidades básicas de la vida mientras reanudaba su oficio como fabricante de
tiendas.
Diez: Si Pablo hubiese querido decir "doble paga" en 1 Timoteo 5:17, entonces,¿por
qué citó referencias a pobres que no tenían ni habían acumulado nada? ¿Cómo
puede uno referirse a pobres que no tienen ni un centavo para probar que uno debe
recibir salario doble?
Once: 1 Tim. 6:1 "Todos los que están bajo el yugo de esclavitud, tengan a sus amos
por dignos de todo honor, para que no sea blasfemado el nombre de Dios y la
doctrina". Si "digno de doblehonor" en 5:17 significa "digno de doble paga",
entonces, ¿qué significa "digno de todo honor" sólo nueve versículos más adelante
en 6:1? ¡Ciertamente Pablo no está diciendo que un esclavo cristiano debe dar a su
amo TODO el dinero que acumula! Por eso, el contexto y el uso de una palabra en 1
Timoteo no apoya la traducción de "doble paga".
Doce: 1 Tim. 6:5 "... [los que están] privados de la verdad, que toman la piedad como
fuente de ganancia; apártate de los tales". A Timoteo se le dice que se "aparte" de los
que piensan que la religión, o la piedad, es un medio de hacer ganancias (6:3-5).
¡Esta es una orden extraña para ser seguida de "digno de doble salario"!
Catorce: 1 Tim. 6:9-11 "Porque los que quieren enriquecerse caen en tentación y
lazo, y en muchas codicias necias y dañosas, que hunden a los hombres en
destrucción y perdición; porque raíz de todos los males es el amor al dinero [la
codicia], el cual, codiciando algunos, se extraviarion de la fe, y fueron traspasados de
muchos dolores. Mas tú, oh hombre de Dios, huye de estas cosas, y sigue la justicia, la
piedad, la fe, el amor, la paciencia, la mansedumbre". Pablo advirtió a Timoteo
contra el acumular riqueza. Pero, en la actualidad, muchos ministros de iglesias
ricas son muy ricos ellos mismos.
Quince: 1 Tim. 6:12, 14 "Pelea la buena batalla de la fe ... Que guardes el
mandamiento sin mácula ni reprensión, hasta la aparición de nuestro Señor
Jesucristo". Pablo insta a Timoteo a "pelear la buena batalla de la fe" y ser
"irreprensible". Por el contexto, esta "pelea" incluye por lo menos la advertencia:
"No te dejes arrebatar por cuestiones de dinero y el deseo de riquezas".
Desafortunadamente, demasiado a menudo los ministros necesitan ser reprendidos
por cuestiones de dinero.
Dieciséis: 1 Tim. 6:17-19 "A los ricos de este siglo manda que no sean altivos, ni
pongan la esperanza en las riquezas, las cuales son inciertas, sino en el Dios vivo, que
nos da todas las cosas en abundancia para que las disfrutemos. Que hagan bien, que
sean ricos en buenas obras, dadivosos, generosos". Al decir "los ricos de este siglo"
dice "ellos", no "nosotros" o los ministros del evangelio.
Dieciocho: 1 Tim. 6:19 "Atesorando para sí buen fundamento para lo por venir, que
echen mano de la vida eterna". El ministro del evangelio "acumula" o "atesora", no
riquezas mundanas, sino "un buen fundamento para lo por venir. ¡Este es el
mismo thesaurizoon discutido en 1 Corintios 16:2!
1 Timoteo 5.17, 18 no enseña que un ministro debe recibir doble salario por sus
servicios. Puesto que Timoteo estaba entre "los que están conmigo" en Hechos
20:31-35, fue testigo presencial de cómo trabajó Pablo día y noche durante tres
años fabricando tiendas mientras no le pedía dinero a la iglesia de Éfeso para
comer. Pablo concluyó su sermón de despedida diciéndole a sus colaboradores,
incluyendo a Timoteo, que siguieran su ejemplo y trabajaran para ayudar a los
necesitados de la iglesia (Hechos 20:35).
¡Es imposible concluir que Pablo ahora le esté pidiendo a la iglesia que le pague a
Timoteo un doble salario! Afirmar que Pablo quería que Timoteo y los líderes de la
iglesia recibieran "doble salario" contradice sus convicciones sobre predicar el
evangelio. En 1 Corintios 9:12, Pablo rehusa un "derecho a recibir compensación"
por no poner ningún obstáculo al evangelio de Cristo. En 9:15, Pablo dice que, no
sólo no había aceptado sostenimiento, sino que no se proponía comenzar a
aceptarlo; en realidad, "prefería morir" que permitir que nadie le impidiera
vanagloriarse de haber predicado sin paga. ¿Por qué esperaría Pablo que Timoteo
actuara de manera diferente,y no siguiera su propio ejemplo?
Capítulo 25
Objeciones misceláneas
Objeción: El libro de Hechos demuestra que todos los cristianos primitivos daban
mucho más que el diezmo y dieron ejemplo para que otros lo siguieran.
Hechos 2:44-46 "Todos los que habían creído estaban unánimes juntos, y tenían en
común todas las cosas; y vendían sus propiedades y sus bienes, y lo repartían a todos
según la necesidad de cada uno. Y perseverando unánimes cada día en el templo, y
partiendo el pan en las casas, comían juntos con alegría y sencillez de corazón".
Cuatro: Estos eventos no tienen absolutamente nada que ver con las leyes del
diezmo, porque la mayoría de los cristianos judíos alrededor de Jerusalén nunca
dejaron de diezmar para el sistema (Hechos 15 y 21).
Cinco: No hay ninguna razón para creer que los pobres tenían algo con qué
contribuir. Los ricos obedecían los principios del evangelio y daban de acuerdo con
su capacidad.
Seis: Es muy dudoso que muchos de los que abogan por este punto de vista hayan
seguido el mismo ejemplo de los así llamados más-que-diezmadores, vendiendo
todas sus propiedades y teniendo todas las cosas en común.
Nota: Este capítulo debe ser leído en el contexto de mi capítulo 16 sobre Hechos 15
y 21.
En la misma cinta de audio que se menciona arriba, Charles Stanley dice también
que todas las iglesias primitivas del siglo primero D.C. aceptaban y practicaban el
diezmo. Naturalmente, esto incluiría también a los cristianos gentiles, así como a
los cristianos judíos. Su lógico es que, puesto que ningún escritor del Nuevo
Testamento acusó a ningún individuo ni a ninguna iglesia de no diezmar, esto
prueba que todos diezmaban. En consecuencia, puesto que todos diezmaban
(afirma la suposición) no había ninguna necesidad de tratar con un problema que
no existía. De aquí que el silencio, o la ausencia de argumento, prueba que el
diezmo se observaba fielmente. En otras palabras, "ningún texto" significa "texto".
Esta posición también supone que los cristianos judíos cambiaron de los diezmos
para los sacerdotes del templo a los diezmos para la iglesia, y que los cristianos
gentiles aceptaron esta ordenanza de la ley mosaica al tiempo que rechazaron el
resto de las ordenanzas como no parte del nuevo pacto. Al tiempo que
malentendieron partes del evangelio, dicen, los primeros cristianos diezmaban
fielmente para sostener a los pastores y misioneros de la iglesia.
Este argumento del silencio debe ser rechazado por las siguientes razones:
Una: Los historiadores (y probablemente los teólogos) cristianos de la mayoría de
las denominaciones normalmente rechazan esta clase de argumento.
Tres: Si el diezmo fuera realmente una genuina doctrina del nuevo pacto, entonces
tiene que ser la única doctrina "silenciosa" NO sustentada por un solo texto post-
Calvario. Esto es embarazoso porque la mayoría de los conservadores que abogan
por el diezmo también insisten en que toda doctrina debe proceder del Nuevo
Testamento post-Calvario.
Cinco: En realidad, no había ningún "silencio" de parte de los cristianos judíos. Por
Hechos 15 y 21, todo el libro de Romanos, todo el de Gálatas, todo el de Hebreos, y
la mayoría de los historiadores de la iglesia, es concluyente que muchos (si no la
mayoría) de los cristianos judíos simplemente habían añadido el cristianismo al
judaísmo. Los de Israel habían continuado su culto regular en el templo y lo
sostenían financieramente, incluyendo con los diezmos. Es muy obvio que muchos
cristianos judíos querían que todos los cristianos gentiles se circuncidaran,
guardaran toda la ley, y diezmaran para el templo (Hechos 15:1-5; Gál. 2:4).
Seis: Los cristianos judíos que diezmaban entregaban sus diezmos, no a la iglesia,
sino al templo porque todavía se consideraban judíos primero y obligados a
guardar toda la ley mosaica. Compárese con Hechos 15; 21:21-24; 28:17.
Simplemente, no hay otro modo de explicar Hechos 21:21-24, como no sea
admitiendo que esta iglesia, aproximadamente 30 años después del Calvario,
todavía era totalmente obediente a la ley mosaica y al templo.
Siete: Tampoco había ningún "silencio" acerca de los cristianos gentiles. La iglesia
judía en Jerusalén les excluía específicamente de la necesidad de guardar ninguna
parte de la ley mosaica, incluyendo el diezmo. Compárese con Hechos 15:19-30;
21:19-25.
Ocho: Algunos en Israel habían sido reprendidos por Dios por no diezmar bajo la
ley. Ciertamente, Dios habría reprendido a la iglesia por el mismo pecado si la
iglesia hubiese cometido una violación. Pero, aunque que Pablo, Pedro, Juan,
Santiago y Judas corrigen la iglesia por una amplia variedad de pecados, incluyendo
el no dar ofrendas para los pobres, nunca la corrigen por no diezmar. Esto es
inconcebible si el diezmo fuese una doctrina legítima. Es especialmente
inconcebible que la iglesia de Corinto fuese culpable de tantos otros pecados, pero
continuase diezmando.
Once: Según 1 Corintios 9:15-19, Pablo habría rehusado los diezmos, o cualquier
oferta de sostenimiento a tiempo completo para predicar plenamente el evangelio
sin estorbo. Tampoco era la acción de Pablo desobediencia al mandamiento de
Cristo en 9:14. En Hechos 20:26-35, al fin de los muchos años de servicio misionero
de Pablo, todavía rehusaba un salario y trabajaba para ganarse la vida. Además,
instaba a otros predicadores a seguir su ejemplo.
Doce: La afirmación de que el diezmo "no era un problema" pasa por alto el severo
"problema" de las ordenanzas de la ley mosaica que se hallan de manera
prominente en Hechos, Romanos, Gálatas, Efesios, Colosenses y Hebreos. ¡La ley
mosaica era un problema! Puesto que el diezmo era tan fácil de calcular, era hecho
cumplir particularmente en la Mishnah. Los cristianos judíos legalistas trataron de
imponer la ley mosaica en la iglesia. La Escritura registra que la observancia del
sábado, la circuncisión, la observancia de las fiestas, y las leyes alimentarias
estaban incluidas en las prácticas de la ley que trataron de imponer en la iglesia. Si
el diezmo no hubiera sido visto como algo a lo cual tenían derecho solamente los
levitas y los sacerdotes aarónicos, entonces todo cristiano judío que había sido
fariseo ciertamente habría tratado de imponer alguna clase de diezmo en la iglesia
también. El hecho mismo de que los judaizantes no trataran de imponerlo en la
iglesia junto con estas otras leyes es un fuerte argumento contrala práctica del
diezmo en la iglesia primitiva.
Trece: Un "argumento del silencio" encaja mucho mejor en la afirmación de que el
diezmo no se enseña para el creyente del nuevo pacto. Aparte de Hebreos 7, que
concluye que el diezmo fue abolido junto con todas las otras ordenanzas
sacerdotales, la palabra no aparece ni una sola vez en los escritos inspirados
después del Calvario.
Catorce: El argumento del "silencio" pasa por alto el hecho de que Pablo y los
líderes de la iglesia primitiva judía venían de una tradición que les prohibía
abandonar un oficio y esperar ser sostenidos por los demás. Se necesitarían siglos
para que esta tradición fuera borrada por la escalada del clero por encima del
laicato y la eliminación de la doctrina de l sacerdocio de los creyentes.
Permítaseme una sátira usando la Living Bible como guía para Gálatas 3:1-5:
Gál. 3:1 ¡Oh predicadores tontos! ¿Quién los ha encantado para que no obedezcan
toda la verdad sobre el diezmo y las ordenanzas de la ley mosaica que han sido
abolidas, borradas, y anuladas? El significado de la crucifixión les fue presentado
claramente delante de sus ojos. ¿Qué creen que fue clavado a la cruz con él en la
crucifixión? ¿Qué creen que sucedió con las ordenanzas de la ley cuando el velo se
rasgó'
Gál. 3:2 Quiero que me contesten una sola pregunta seria. ¿Fueron llenos del
Espíritu a causa de su obediencia a la ley de Moisés o a causa de su fe? ¿No debe
aplicarse esta lógica a TODAS las leyes no repetidas bajo los principios de la fe?
Gál. 3:3 La lógica de ustedes es tonta. (Están completamente locos: The Living
Bible). Comenzaron su experiencia cristiana recibiendo el Espíritu por fe.
¡Necesitaban el Espíritu porque la ley jamás les dio vida espiritual en ningún
sentido! ¿Cómo es posible que regresen a la ley y traten de alcanzar la madurez
espiritual por medio de las obras de la ley? ¿Cómo puede la iglesia enseñar la
salvación por gracia por medio de la fe, y luego enseñar el éxito financiero
volviendo a aplicar la inútil ley mosaica del diezmo?
Gál. 3:4 Si ésta es su lógica, ¡entonces han malgastado su tiempo! Están descartando
cada uno de los principios que han aprendido sobre el evangelio. La ley no es de fe.
Gál. 3:5 Dios hará milagros, financieros y de otra naturaleza, sólo "cuando crean en
Cristo y confíen plenamente en Él".
Objeción: Puesto que los modelos del nuevo pacto son superiores a los modelos del
pacto antiguo, el diezmo es el punto de partida "mínimo".
Una: Este es otro argumento del silencio que trata de evitar el gran dilema de que
no hay ningún texto específico post-Calvario/post-ley que ordene diezmar a los
cristianos del nuevo pacto.
Tres: La errónea suposición es que TODOS los israelitas bajo la ley mosaica estaban
obligados a diezmar y comenzaban en el diez por ciento. En realidad, sólo los
propietarios de tierras y los criadores de animales estaban obligados a diezmar y
comenzar en el diez por ciento. En realidad, el diezmo era una ordenanza exclusiva,
la cual imponía cargas sobre los propietarios de tierras, mientras que no afectaba a
las ocupaciones de cientos de comerciantes y artesanos, que sólo daban ofrendas
voluntarias. Esta es exactamente la razón de por qué muchos judíos dejaron de
cultivar la tierra y se hicieron banqueros y comerciantes durante la Edad Media.
Cuatro: El error de esta suposición revela por qué muchos principios del dar en el
nuevo pacto son en realidad superiores al diezmo del pacto antiguo. Una vez que el
diezmo de la tierra había sido entregado por el propietario, todos los que vivían en
esa propiedad y eran sostenidos por ella no estaban obligados a dar nada. Los
siervos contratados ya estaban cubiertos por el diezmo del propietario.
El más alto principio de igualdad del nuevo pacto espera que TODOS los creyentes
den espontáneamente ofrendas voluntarias porque tienen una nueva naturaleza y
quieren dar por encima de lo que darían normalmente. Aunque todos dan
espontáneamente con un corazón dispuesto, el "por encima del diez por ciento" de
los ricos más que contrapesaría el "menos del diez por ciento" de los pobres (2 Cor.
8:12-15).
!
El principio de "igualdad en el dar" es un modelo superior del dar por gracia. No
funciona bajo el principio de la ley. Tampoco avergüenza ni maldice a los pobres
por no poder entregar el mínimo del diez por ciento. La "igualdad en el dar" no
estimula a los pobres a permanecer alejados del culto para evitar ser espectáculo
por no dar tanto. Por el contrario, dar en el nuevo pacto permite que los pobres
tengan algún grado de respeto propio al saber que dieron todo lo que podían sin
privar a sus familias del alimento y abrigo esenciales (nuevamente 2 Cor. 8:12-15).
Cinco: El nuevo pacto reemplaza el diezmo de la ley mosaica con muchos principios
generales que van desde cero por ciento a cien por ciento. Aunque en realidad
puede que den menos del diez por ciento, hasta los pobres son felicitados por dar
por encima y más allá de su capacidad (2 Cor. 8:2-3). ¡"Capacidad", no "obligación"
es el principio de funcionamiento del nuevo pacto! A esto podemos añadir "amor" y
"el deseo de que se salven almas" - ninguno de los cuales eran motivaciones
requeridas para diezmar bajo la ley.
Eklund objeta:"El diezmo no era una forma de impuesto. Bajo la autoridad de los
reyes, los judíos del pacto antiguo pagaban impuestos además del diezmo (1 Sam.
17:25; 2 Reyes 23:35; Esdras 4:13, 20; Neh. 5:4). Antes de la monarquía, no había
necesidad de impuestos. Israel funcionaba como una teocracia y no había ningún
gobierno que sostener" (108).
El argumento de que los diezmos no eran una forma de impuesto porque "Israel
funcionaba como una teocracia y no había ningún gobierno que sostener" es
contrario tanto al sentido común como a la mayoría de las autoridades
eclesiásticas. Un capítulo anterior de este libro sobre "Reyes, diezmos, e impuestos"
contesta esta objeción.
Conclusión
Hasta ahora, este libro ha completado un exhaustivo estudio de todos y cada uno de
los textos sobre el diezmo en la Biblia. Todo cristiano puede, y debería, tomarse
unos minutos para comprobar la doctrina personalmente. Si es necesario, lea los
textos en varias versiones. Haga como los bereanos, y no acepte nada basándose en
lo que alguien más dice. Los bereanos "escudriñaban las Escrituras diariamente,
para ver si estas cosas eran así" porque eran "más nobles ... en que recibieron la
palabra con toda solicitud" (Hechos 17:11).
Capítulo 26
Lewis Sperry Chafer, fundador del Dallas Theological Seminary, autor de la obra en
ocho tomos Systematic Theology, y vocero principal del cristianismo conservador,
escribió un excelente artículo para discutir el dar en el nuevo pacto en su
libro Major Bible Themes. Ese artículo se reimprime en su totalidad con permiso.
Sperry es lectura obligada en muchas escuelas conservadoras sobre teología.
Major Bible Themes por Lewis Sperry Chafer, Revisado por John Walvoord.
El dar cristiano bajo la gracia, como está ilustrado en la experiencia de los santos en
Corinto, está resumido en 2 Corintios 8:1-9:15. En este pasaje, descubrimos:
Uno: Cristo era su modelo. El hecho de que Cristo se diera a sí mismo (2 Cor. 8:9) es
el modelo de todo dar bajo la gracia. Él no dio un décimo; lo dio TODO.
Dos: Su dar ocurrió aunque estaban en gran pobreza. Se emplea una notable
combinación de frases para describir lo que los corintios experimentaron en su dar
(2 Cor. 8:2): "en gran prueba de aflicción", "la abundancia de su gozo", "abundó su
gran pobreza", "las riquezas de su liberalidad". De la misma manera, en relación
con la liberalidad a pesar de su gran pobreza, debe recordarse que "la ofrenda de la
viuda" (Lucas 1:1-4), que mereció la alabanza del Señor Jesús, no era parte, sino
"todo lo que ella tenía".
Tres: Su dar no era por mandamiento [1 Cor. 8:8], ni por necesidad [2 Cor. 9:7].
Bajo la ley, se ordenaba entregar un décimo y su pago era una necesidad; bajo la
gracia, Dios no está buscando el dar, sino una expresión de devoción de parte del
dador. Bajo la gracia, no se impone ninguna ley y no se estipula que se dé ninguna
proporción, y, aunque es verdad que Dios obra en el corazón rendido tanto el
querer como el hacer por su buena voluntad (Fil. 2:13), encuentra placer sólo en el
dar con alegría, o más literalmente, "sonriendo" (2 Cor. 9:7).
Si existiera una ley que estipulase la cantidad que debe darse, sin duda hay quienes
tratarían de cumplirla, aun contra sus propios deseos. Así, darían "de mala gana" y
"por necesidad" (2 Cor. 9:7). Si se puede decir que, para sostener la obra del
evangelio, debemos tener dinero dado ya sea de buena gana o no, también se puede
decir que no es la cantidad que se da, sino más bien la bendición divina sobre el don
lo que lleva a cabo el fin deseado.
Cristo alimentó a cinco mil personas con cinco panes y dos peces. Hay abundante
evidencia para demostrar que dondequiera los hijos de Dios han cumplido su
privilegio de dar bajo la gracia, su liberalidad ha resultado en "toda suficiencia en
todas las cosas" que ha hecho que ellos "abunden" para toda buena obra", porque
Dios puede hacer que aun la gracia de dar "abunde" en cada creyente (2 Cor. 9:8).
Cuatro: Primero que todo, los primeros cristianos se daban ellos mismos. El dar
aceptable es precedido por darse uno mismo completamente (2 Cor. 8:5). Esto
indica la importante verdad de que dar bajo la gracia, como dar bajo la ley, está
limitado a cierta clase de personas. El diezmo nunca fue impuesto por Dios a nadie
más que a la nación de Israel (Lev. 27:34; Núm. 18:23-24; Mal. 3:7-10). Así, el dar
cristiano está limitado a los creyentes y es más aceptable cuando lo practican los
creyentes que han rendido sus vidas a Dios.
Cinco: Los cristianos de la iglesia primitiva también daban sistemáticamente. Como
el diezmo, hay una sistemática regularidad indicada en dar bajo la gracia. "El
primer día de la semana, cada uno ponga aparte algo, según haya prosperado" (1
Cor. 16:2). Este mandato se dirige a "cada uno" (cada cristiano) y así, no excusa a
nadie; y se ha de dar de lo que ya se ha "acumulado".
Seis: Dios sustenta al dador. Dios sustentará el dar por gracia con ilimitados
recursos temporales (2 Cor. 9:8-10; Luc. 6:38). En relación con esto, puede verse
que los que dan hasta un décimo por lo general prosperan en las cosas temporales,
pero, puesto que el creyente no ha de tener ninguna relación con la ley (Gál. 5:1), es
evidente que esta prosperidad es el cumplimiento de la promesa bajo la gracia, más
bien que el cumplimiento de de promesas bajo la ley. Así, ninguna bendición
depende de un diezmo exacto.
Siete: Las verdaderas riquezas vienen de Dios. Los cristianos corintios fueron
enriquecidos con riquezas celestiales. Hay tal cosa como ser rico en bienes de este
mundo y sin embargo no rico hacia Dios (Lucas 12:21). A todos los tales se les
invita a comprar de Él ese oro que ha sido probado en fuego (Apoc. 3:18). Por
medio de la pobreza absoluta de Cristo en su muerte, todos podemos ser ricos (2
Cor. 8:9). Es posible ser rico en fe (Sant. 2:5) y rico en buenas obras (1 Tim. 6:18);
pero en Cristo Jesús el creyente recibe "las riquezas de su gracia" (Efe. 1:7), y "lass
riquezas de su gloria" (Efe. 3:16) (112).
(112) Lewis Sperry Chafer, Major Bible Themes, Revised, John Walvoord (Grand
Rapids: Academic Books, 1974 ed.), 253-255.
Capítulo 27
2 Corintios 8 y 9
Un bosquejo de sermón usando
principios de gracia en el dar
Cada uno dé como propuso en su corazón: no con tristeza, ni por necesidad, porque
Dios ama al dador alegre (2 Cor. 9:7).
Obviamente, las necesidades financieras de la joven iglesia del nuevo pacto eran
muy grandes. Mientras menos tiempo tuvieran que pasar en en su oficio para
ganarse la vida, más tiempo podían pasar difundiendo el evangelio. Aquellas
asambleas participaban activamente en la tarea más importante que jamás se le
asignara a la humanidad - la difusión del evangelio de Jesucristo. Aunque los
misioneros sí necesitaban ayuda financiera, hay que recordar que esto era
principalmente porque escogieron ser pobres y merecían la ayuda.
Ningún otro capítulo de la Biblia usa la palabra "gracia" más a menudo que 2
Corintios, capítulo 8! Thayer define "gracia" como "lo que proporciona gozo, placer,
deleite, dulzura, encanto, y belleza" (113). ¡Qué abundante palabra para que Dios la
aplique al dar! Por ejemplo, los que dan para la obra de Dios reciben en realidad de
la gracia de Dios. Dios nos da gracia para dar, y luego Dios nos da más gracia
cuando damos.
Todos los textos anteriores describen la relación de los cristianos con la gracia y el
dar. Es una gracia de Dios y se basa en el ejemplo de Cristo. En contraste con la ley
que ordenaba dar, el dar del nuevo pacto es gracia de principio a fin. Es una acción
que comparte. Regresa al dador porque nadie puede dar más que Dios.
DOS: Darse a Dios primero.
Puesto que un incrédulo no está motivado para dar, usted primero debe aceptar a
Jesucristo como su Señor y Salvador personal. "A sí mismos se dieron
primeramente al Señor" (8:5). Mientras uno no ingrese a la familia de Dios por
medio de la conversión, todavía está bajo condenación y la gracia no puede
gobernar su vida.
"Porque ya conocéis la gracia de nuestro Señor Jesucristo, que por amor a vosotros
se hizo pobre, siendo rico, para que vosotros con su pobreza fueseis enriquecidos"
(8:9). "¡Gracias a Dios por su don inefable!" (9:15).
Los cristianos que se rinden a la voluntad de Dios, apresurándose a conocer la
palabra de Dios, y están llenos del Espíritu Santo, están siendo cambiados día tras
día para seguir el ejemplo de Cristo. Este ejemplo incluye todas y cada una de las
partes de sus vidas, incluyendo el dar.
"Para probar la sinceridad de vuestro amor" (v. 8). Pablo les recordó que, en el
pasado, ellos fueron los primeros en "querer dar y en hacerlo" (v. 10). "Si primero
hay una voluntad dispuesta" (v. 12) subraya nuevamente el deseo. Este principio se
repite en el capítulo 9, versículo 7, "como propuso en su corazón". Un creyente que
está en la voluntad de Dios tendrá naturalmente ese deseo sincero de dar.
Bajo la ley, un sincero deseo era el motivo de las ofrendas voluntarias, pero no
importaba concerniente a los diezmos. Dios ordenaba un diezmo y esperaba
recibirlo, hubiese sido dado con un deseo sincero o no. Los levitas y los sacerdotes
todavía no tenían herencia y todavía merecían sus porciones bajo las condiciones
del pacto antiguo.
Scofield escribió acerca de 2 Corintios 8 y 9: "En contraste con la ley, que imponía el
dar como un requisito divino, el dar cristiano es voluntario, y una prueba de
sinceridad y amor" (114). Chafer concuerda: "El principio de gracia contrasta con el
sistema legal de diezmo en el Antiguo Testamento. ... El diezmo ha sido
reemplazado por un nuevo sistema de dar, que está adaptado a las enseñanzas de la
gracia. ... Bajo la gracia, Dios no busca el don, sino una expresión de devoción por
parte del dador. Bajo la gracia, no se impone ninguna ley, y no se estipula ninguna
proporción" (115).
Bajo el nuevo pacto, el cristiano obedece a Dios porque tiene una nueva naturaleza,
es una nueva creación, y el Espíritu Santo es su maestro. "Al decir: 'Nuevo pacto', ha
dado por viejo al primero; y lo que se da por viejo y se envejece, está próximo a
desaparecer" (Heb. 8:13). El "mandamiento" de dar ahora ha sido reemplazado por
el "sincero deseo" de una nueva creación. El cristiano da espontáneamente porque
el deseo de dar es parte de la nueva creación.
SIETE: Dar hasta donde se pueda, o aun más allá de nuestra capacidad.
"Pues doy testimonio de que con agrado han dado conforme a sus fuerzas" (8:3).
"Ahora, pues, llevad también a cabo el hacerlo ....así también lo estéis en cumplir
conforme a lo que tengáis" (8:11). "... será acepta según lo que uno tiene, no según lo
que no tiene" (8:12). "Cada uno de vosotros ponga aparte algo, según haya
prosperado" (1 Cor. 16:2).
2 Cor. 8:13 Porque no digo esto para que haya para otros holgura, y para vosotros
estrechez,
2 Cor. 8:14 sino para que en este tiempo, con igualdad, la abundancia vuestra supla la
escasez de ellos, para que también la abundancia de ellos supla la necesidad vuestra,
para que haya igualdad. 1 Tim. 6:17 A los ricos de este siglo manda que no sean
altivos, ni pongan la esperanza en las riquezas, las cuales son inciertas, sino en el
Dios vivo, que nos da todas las cosas en abundancia para que las disfrutemos.
1 Tim. 6:18 Que hagan bien, que sean ricos en buenas obras, dadivosos, generosos.
Mientras que otros simplemente son incapaces de dar mucho en absoluto, algunos
pueden dar mucho más que el diez por ciento del pacto antiguo. Las circunstancias
son diferentes de una familia a otra. Dios entiende. No olvidemos el dicho: "Lo poco
es mucho si Dios está en ello". Dios puede hacer más con las dos blancas de la viuda
o la semilla de mostaza dados sinceramente que con millones dados para comprar
su favor.
El principio de gracia de "dar en igualdad" se refiere a dar hasta donde se pueda.
Esto no significa que todo el mundo ha de dar el mismo porcentaje. Significa que los
que son prósperos deberían dar mucho más - hasta que realmente noten una
arruga en su chequera - "¡Dar hasta que les duela!". Cuando los que son prósperos
dan más, y los que son pobres dan menos (pero todavía dan hasta donde pueden),
los resultados son una "igualdad" según lo que cada uno puede dar.
Los principios de dar por gracia del nuevo pacto son justos; no han sido
establecidos al mismo nivel legalista para todo el mundo. Mientras algunas familias
tienen buenos ingresos y pocas cuentas por pagar, otras tienen bajos ingresos y
muchas cuentas por pagar. Ejemplo uno: A una familia que da el diez por ciento de
$200,000 le quedaría mucho más que a una familia del mismo tamaño que diera el
diez por ciento de $20,000. Bajo las modernas definiciones de "diezmo", esta es una
injusta carga legalista. Ejemplo dos: Si cada una de dos familias ganara $40,000 y
sólo una de ellas tuviera alojamiento gratuito, gastos pagados, y seguro, ¡deberían
dar ambas la misma cantidad? Lo que sería una carga dar para una, la otra no la
sentiría. Ejemplo tres: Si dos familias tuviesen el mismo ingreso y una de ellas
tuviese agobiantes cuentas médicas, ¿espera Dios que ambas den la misma
cantidad? Bajo los principios de gracia, la respuesta es "no". ¡Pero la ley de los
diezmos no hacía excepciones para los propietarios de tierras y no requería que los
no propietarios de tierras y los artesanos diezmaran en absoluto! Estos ejemplos
ilustran por qué los principios de gracia son superiores al diezmo. El diezmo nunca
fue el principio "superior" que producía la mayor parte de los ingresos en el
Antiguo Testamento.
No sólo dieron hasta donde pudieron, es decir, todo lo que podían, sino que dieron
"más allá de su capacidad", es decir, se privaron de algunas elementos básicos
durante un tiempo (8:3). "Pidiéndonos con muchos ruegos que les concediésemos
el privilegio de participar en este servicio para los santos" (8:4). ¡Esto es
verdaderamente dar según el nuevo pacto en su mejor expresión!
¿Qué más podría pedir un pastor a su iglesia cuando se necesita dinero? La iglesia
estaba realmente "rogando" (NAS) a Pablo que les permitiese dar más allá de lo que
les permitían sus medios! "Por tanto, como en todo abundáis, en fe, en palabra, en
ciencia, en toda solicitud, y en vuestro amor para con nosotros, abundad también
en esta gracia [de dar]" (8:7). Dar es el resultado normal del crecimiento
espiritual. El cristiano alimentado con el alimento espiritual correcto crece
espiritualmente y da de acuerdo con su nueva naturaleza.
"Y poderoso es Dios para hacer que abunde en vosotros toda gracia, a fin de que,
teniendo siempre en todas las cosas todo lo suficiente, abundéis para toda buena
obra" (9:8). Dios también es "el que da semilla al que siembra, y pan al que come, y
proveerá y multiplicará vuestra sementera, y aumentará los frutos de vuestra
justicia, para que estéis enriquecidos en todo para toda liberalidad, la cual produce
por medio de nosotros acción de gracias a Dios" (9:10-11).
Cuando damos para la obra de Dios, él promete suplir nuestra "suficiencia". Esto
significa que él nos "suplirá" todo lo que "necesitamos", en comparación con lo que
"queremos". El propósito de esta suficiencia es que entonces nosotros, a nuestra
vez, "abundemos en toda buena obra", es decir, continuemos haciendo la obra de
Dios con esa suficiencia.
Fil. 4:15 "Y sabéis también vosotros, oh filipenses, que al principio de la predicación
del evangelio, cuando partí de Macedonia, ninguna iglesia participó conmigo en
razón de dar y recibir, sino vosotros solos.
Fil. 4:19 Mi Dios, pues, suplirá todo lo que os falta conforme a sus riquezas en gloria
en Cristo Jesús.
Dar es un círculo: Dios da primero, luego nosotros damos, después Dios da más, así
que nosotros damos más. Las bendiciones espirituales dejan de fluir hacia nosotros
cuando dejamos de ser bendiciones espirituales para los demás. Puesto que no
podemos dar más que Dios, el círculo debe seguir expandiéndose para incluir a
más y más personas! Nuestras necesidades (no las cosas que queremos) serán
suplidas aquí en la tierra y los que dan acumularán bendiciones espirituales tanto
aquí como en el cielo. Dios continuará enriqueciendo al creyente por toda la
eternidad con él en el cielo.
"... pues por la experiencia de esta ministración glorifican a Dios por la obediencia
que profesáis al evangelio de Cristo, y por la liberalidad de vuestra contribución
para ellos y para todos" (9:13). El círculo regresa a su principio a la gracia de Dios y
el evangelio. El texto NO dice "la obediencia que acompaña vuestra predicación y la
práctica del diezmo". Una iglesia que obedece los principios de gracia de dar será
bendecida. Cuando Cristo es predicado (que es el gran don de Dios para nosotros),
nos damos a nosotros mismos, y luego seguimos dando al sentir la carga de las
almas perdidas. Nuevamente, ¡predicar a Cristo hace crecer la iglesia! Predicar el
diezmo es predicar un "inútil" principio del pacto antiguo que ha sido abolido (Heb.
7:5), 12, 18). Mientras que las iglesias que predican el diezmo regularmente sin
predicar a Cristo no crecerán, las iglesias que predican a Cristo regularmente sin
diezmar crecerán. ¡Es así de simple!
Hechos 20:16-35
Un sermón ignorado y
un ejemplo para los predicadores
Pablo quería que los demás siguieran su ejemplo de no recibir diezmos ni ningún
otro sostenimiento como pago por el ministerio del evangelio. Si esta es una
conclusión correcta de Hechos, capítulo 20, entonces la afimación de Pablo en 1
Corintios 9:16-19 no puede interpretarse como una excepción a la regla general.
Personalmente, por lo menos, Pablo prefería que este principio de "libertad" fuese
el principio superior, que es más importante que el principio de "derechos".
Este es un tema incómodo, por decir lo menos. Todo serio estudiante bíblico a su
debido tiempo encontrará enseñanzas en la palabra de Dios que al principio él o
ella encontrarán difíciles de aceptar. La respuesta a mi pregunta: "¿Deben aceptar
los predicadores salario a tiempo completo?" resultaba alarmante para alguien que
ha recibido sostenimiento a tiempo completo. La respuesta me impresionó, y
debería sacudir los fundamentos mismos del sistema de la iglesia moderna. Una
cosa era poner en duda si el diezmo era el principio del nuevo pacto para sostener
el ministerio del evangelio. Sin embargo, a su debido tiempo, mis estudios me
llevaron a 1 Corintios 9 y a los "derechos" de los ministros del evangelio a recibir
sostenimiento financiero. Luego, la búsqueda de referencias cruzadas y
comentarios me llevó a Hechos 13:1-3; 18:1-4; 20:16-35; 2 Cor. 11:7-9; 2 Cor.
12:13-15; Fil. 4:15-19; 1 Tes. 2:9-10; y 2 Tes. 3:6-15. Aunque yo había leído estos
textos muchas veces durante más de 40 años como cristiano, nunca los había
"puesto juntos" para ver el cuadro completo. A continuación, van mis conclusiones:
20:16 Porque Pablo se había propuesto pasar de largo a Éfeso, para no detenerse en
Asia, pues se apresuraba por estar el día de Pentecostés, si le fuese posible, en
Jerusalén.
20:17 Enviando, pues, desde Mileto a Éfeso, hizo llamar a los ancianos de la iglesia.
Pablo quería llegar a Jerusalén antes de Pentecostés y no tenía tiempo para esperar
otro barco. Había mandado mensaje por adelantado para que los ancianos del área
alrededor de Éfeso vinieran y se encontraran con él en Mileto, sobre la costa
occidental de Éfeso. Estos textos contienen un sermón especialmente para los
líderes de las iglesias, ¡los ancianos! Los "ancianos" son también llamados
"supervisores"; son los pastores del "rebaño", la iglesia de Dios (20:28), los
pastores de las varias iglesias en y alrededor de Éfeso. Todo lo que Pablo tenía que
decir sobre los falsos maestros que se aprovechaban del rebaño y sobre la ética de
la obra relacionado específicamente con ellos.
20:18 Cuando vinieron a él, les dijo: Vosotros sabéis cómo me he comportado entre
vosotros todo el tiempo, desde el primer día que entré en Asia ...
20:20 Y cómo nada que fuese útil he rehuido de anunciaros y enseñaros
públicamente y por las casas.
Aun antes de presentar el problema que pesaba sobre él, Pablo ofreció su propio
ejemplo como solución. Ellos habían observado su comportamiento y su estilo de
vida por tres años en todo tiempo (v. 18); le habían visto declarar el evangelio
completo en público (vv. 20, 27), sabían cómo había tratado a todos con justicia
(vv. 26, 31);y sabían que él había sido ejemplo para ellos en todo lo que había
hecho (vv. 20, 35). Lo mejor que había podido, Pablo había seguido el ejemplo de
Cristo. En consecuencia, les pedía a sus suplentes que siguieran su ejemplo.
20:22,23,25 Ahora, he aquí, ligado yo en espíritu, voy a Jerusalén, sin saber lo que
allá me ha de acontecer; salvo que el Espíritu Santo por todas las ciudades me da
testimonio, diciendo que me esperan prisiones y tribulaciones. Y ahora, he aquí, yo sé
que ninguno de todos vosotros, entre quienes he pasado predicando el reino de Dios,
verá más mi rostro.
Pablo creía plenamente que ésta sería su última despedida de los líderes de las
muchas iglesias-hogares que él había iniciado. Estaba convencido por el Espíritu
Santo de que éste sería su último viaje misionero. Siendo un sermón de despedida,
ciertamente les diría las cosas más importantes que tenía en mente para
salvaguardar la iglesia en el futuro sin él. Primero debían darse cuenta de que el
evangelio de la gracia de Dios es de lo más solemne; no ha de ser tratado
ligeramente. Pablo había aceptado la posibilidad del martirio, si era necesario, para
preservar la integridad del evangelio y para dar cumplimiento a su llamado (v. 24).
20:28 Por tanto, mirad por vosotros, y por todo el rebaño ...
20:29-31 Porque yo sé que, después de mi partida, entrarán en medio de vosotros
lobos rapaces, que no perdonarán al rebaño. Y de vosotros mismos se levantarán
hombres que hablarán cosas perversas para arrastrar tras de sí a los discípulos. Por
tanto, velad, acordándoos que por tres años, de noche y de día, no he cesado de
amonestar con lágrimas a cada uno.
La primera preocupación de Pablo era que se levantarían falsos maestros con falsas
doctrinas de fuera y desde adentro de la iglesia después de que él se hubiese ido.
Por pasadas experiencias, sabía que otros le seguirían y predicarían un evangelio
"diferente" (Gál. 1:6-7). "Mirad", dijo, porque vendrían "lobos rapaces" de fuera de
Éfeso y "hombres que hablarían cosas perversas" dentro de la iglesia, que no
perdonarían el rebaño y arastrarían tras de sí a los discípulos (vv. 28-30).
¡Qué gran lástima! ¡Los cuatro últimos versículos del sermón de despedida de Pablo
tienen que ver con el dinero que iba en la dirección errónea! Ciertamente, Pablo
habría preferido terminar su carrera en Éfeso con una nota mejor. Quizás temía que
los lobos rapaces que acababa de mencionar pervirtieran el evangelio que él
predicaba, entrando y esquilmarían el rebaño. Debe haber alguna conexión entre
aquéllos contra los cuales Pablo advertía y la dirección del flujo de dinero.
20:35 En todo os he enseñado que, trabajando así, se debe ayudar a los necesitados, y
recordar las palabras del Señor Jesús, que dijo: Más bienaventurado es dar que
recibir.
¡A Pablo le preocupaba que estuviese fluyendo demasiado dinero en la dirección
errónea en la iglesia! Usando su propia vida como ejemplo para que lo siguieran
otros, dijo "trabajando así, se debe ayudar a los necesitados". La palabra griega para
"trabajo" significa trabajo duro, con esfuerzo. Por eso, el apóstol Pablo, en sus
últimas palabras registradas dirigidas a un numeroso grupo de ancianos de iglesia
al extremo mismo de su carrera misionera, les dijo que siguieran su ejemplo, que
trabajaran duro, y ayudaran a los pobres. Robertson dice que "sostenimiento" o
"ayuda" están en la voz media y significa hacerlo "personalmente" (118).
Es imposible concluir de este capítulo que Pablo quería que los diezmos, las
ofrendas, o cualquier otro artículo le proveyera un sostenimiento regular. Además,
es claro que Pablo prefería que otros ancianos y obreros del evangelio siguieran su
ejemplo. Pablo prefería el "alto" principio de "libertad" en el evangelio por encima
del "bajo" principio del "privilegio" del evangelio.
Hechos 18:3 Y como era del mismo oficio, se quedó con ellos, y trabajaban juntos,
pues el oficio de ellos [en griego technee] era hacer tiendas.
Pablo insistía en trabajar para ganarse la vida. El apóstol era fariseo de la tribu de
Benjamín (Hech. 23:6; 26:5; Fil. 3:5). Era maestro de la ley de Moisés, instruido a
los pies de Gamaliel (Hech. 22:3), y, por lo tanto, rabino por derecho propio; sin
embargo, se ganaba la vida haciendo tiendas.
Wycliffe Bible Commentary: "Era costumbre que los rabinos no recibieran ninguna
paga por su enseñanza, y por consiguiente, Pablo, que había sido criado como
rabino, había aprendido el oficio de hacer tiendas. El apóstol no se embarcó en
seguida en la evangelización de Corinto, sino que se unió a Aquila y Priscilla en la
práctica de su oficio durante la semana. Los sábados los dedicaba a predicar en las
sinagogas (Hech. 18:1-4)" (119).
New Bible Commentary: "Se esperaba que hasta los rabinos se ganaran la vida
mediante el trabajo manual y que no hicieran de la enseñanza de la ley un medio
para hacer dinero; por eso Pablo se mantenía por medio del trabajo con
cuero" (120).
Hechos 18:5 Y cuando Silas y Timoteo vinieron a Macedonia, Pablo estaba entregado
por entero a la predicación de la palabra, testificando a los judíos que Jesús era el
Cristo.
¡Pocos cristianos se dan cuenta de que Pablo no se ganaba la vida predicando!
Hechos 18:1-4 ocurrió durante el segundo viaje misionero; ¡pero Pablo todavía
tenía un trabajo secular con el cual se ganaba la vida! Trabajaba en su oficio seis
días a la semana y predicaba por lo menos un día. Aunque, en la mayoría de las
versiones, Hechos 18:5 se traduce para dar la impresión de que Pablo dejó de
trabajar por un tiempo y predicó a tiempo completo, éstas son sólo adivinanzas
sobre lo que significa "apremiado" en el contexto. Creo que la traducción de King
James es mejor aquí. La palabra griega es sun-eicheto (Strong´s 4912) que también
puede significar "obligar", o "preocupar". Habiendo estado "deprimido" desde el
comienzo en Atenas, Pablo se regocijó por las buenas nuevas tanto de Silas como de
Timoteo. Ciertamente, Pablo fue "tomado" por un nuevo impulso de testificar para
Cristo. Sin embargo, no hay ninguna razón compulsiva ni en el contexto de las
convicciones de Pablo ni en las variadas definiciones de "compelido" para exigir
que el texto pruebe que Pablo trabajó jamás largos períodos a tiempo completo
como obrero del evangelio. (Véase sun-eicheto, Strong´s 4912).
The New Bible Commentary dice: "Este proceder [trabajar día y noche] no sólo
reflejaba el deseo de ser financieramente independiente de aquellos entre los
cuales ministraba, sino que también les apartaba de los ordinarios traficantes
religiosos de su tiempo, y daba un buen ejemplo a los conversos" (121). ¡Qué
asombrosa declaración!
Puesto que Pablo había dicho antes cómo trabajaba día y noche (1 Tes. 2:9-10), es
razonable concluir entonces que la afirmación repetida en su segunda carta se
aplica especialmente, aunque no exclusivamente, a los obreros del evangelio que
habían dejado de trabajar manualmente para ganarse la vida (3:8 arriba). El
consejo de Pablo de "apartarse de todo hermano que ande desordenadamente" en
3:6 es fuerte, especialmente si se refiere a predicadores. Esto es porque debían
seguir el ejemplo de él (3:7). Ninguno de los compañeros de viaje de Pablo comía
nada gratis; trabajaban duro día y noche para evitar deberle ningún favor a nadie
(3:8). Hacían esto, no porque no tuviesen ningún legítimo derecho al
sostenimiento, sino para ser ejemplo de libertad cristiana para que otros lo
siguieran (3:9). En realidad, Pablo mandó que nadie comiese si el tal era perezoso y
no trabajaba (3:10). Personalmente, consideraba que los que rehusaban trabajar
para vivir desordenadamente y ocuparse de las cosas ajenas debían ser evitados
(3:11-13). Por supuesto, el diezmo es completamente ajeno a estas discusiones.
Pablo se enorgullecía de no ser una carga para las iglesias pidiendo dinero.
Pablo se enorgullecía a menudo de que no pedía dinero y de que no era una carga
para las iglesias. En consecuencia, tenía mucha mayor libertad para predicar el
evangelio con plena convicción.
2 Cor. 11:7 ¿Pequé yo humillándome a mí mismo para que vosotros fueseis
enaltecidos, por cuanto os he predicado el evangelio de Dios de balde?
2 Cor. 11:8 He despojado a otras iglesias [de sus raciones diarias], recibiendo salario
para serviros a vosotros.
2 Cor. 11:9 Y cuando estaba entre vosotros y tuve necesidad, a ninguno fui carga,
pues lo que me faltaba, lo suplieron los hermanos que vinieron de Macedonia, y en
todo me guardé y me guardaré de seros gravoso.
2 Cor. 11:10 Por la verdad de Cristo que está en mí, que no se me impedirá esta mi
gloria en las regiones de Acaya.
2 Cor. 11:11 ¿Por qué? ¿Porque no os amo? Dios lo sabe.
2 Cor. 11:12 Mas lo que hago, lo haré aún, para quitar la ocasión a aquellos que la
desean, a fin de que en aquello en que se glorían, sean hallados semejantes a
nosotros.
2 Cor. 11:13 Porque éstos son falsos apóstoles, obreros fraudulentos, que se
disfrazan como apóstoles de Cristo.
2 Cor. 12:13 Porque, ¿en qué habéis sido menos que las otras iglesias, sino en que yo
mismo no os he sido carga? ¡Perdonadme este agravio!
2 Cor. 12:14 He aquí, por tercera vez estoy preparado para ir a vosotros; y no os seré
gravoso, porque no busco lo vuestro, sino a vosotros, pues no deben atesorar los
hijos para los padres, sino los padres para los hijos.
En sus comentarios sobre 2 Corintios 11:8, el New Bible Commentary dice: "En
realidad, Pablo está indicando que él no recibía ningún salario en absoluto por
predicar el evangelio. Si lo que otras iglesias le daban para su sostenimiento debía
considerarse como 'ganancia', entonces él, de hecho, les había 'robado', pues el
servicio no era para ellos sino para los corintios" (122). Además, la palabra griega
para "salario", opsoonion, significa "raciones diarias" y es lo que se les
proporcionaba a los soldados romanos. Por una verdadera distorsión de la lógica
moderna, antes que recibir sostenimiento de los corintios, como padre espiritual,
Pablo sentía que era su obligación cuidar de las necesidades de ellos, más bien que
obligación de ellos cuidar de las necesidades de él ( Cor. 12:14; Hechos 20:35).
Sant. 1:27 La religión pura y sin mácula delante de Dios el Padre es ésta: Visitar a los
huérfanos y a las viudas en sus tribulaciones, y guardarse sin mancha en el mundo.
La historia primitiva revela que las donaciones en la iglesia fluían desde los que
más tenían hacia los que menos tenían. Sin embargo, en la actualidad, las enormes
catedrales, las casas, los autos, y las ropas lujosas del clero hacen mofa de las
palabras de Jesús. Pedro era pobre y compartía lo que tenía con los que eran más
pobres que él (Hechos 3:6). Una prueba del gran poder de la resurrección era que
la iglesia primitiva era plenamente capaz de cuidar de sus propios necesitados.
Conclusión
¡Sólo porque uno tenga "derecho" a actuar de cierta manera no hace que ese
"derecho" sea una necesidad! Cristo tenía "derecho" a defenderse de los que lo
acusaban falsamente, pero a menudo rehusaba usarlo. Tenemos "derecho" a tomar
el estacionamiento más cercano y obligar al anciano a caminar más lejos, pero eso
no significa que tenemos que hacerlo. Pablo quería que los demás siguieran su
ejemplo y se renunciaran a sus "derechos" por amor a la libertad de predicar el
evangelio con todo su poder. Repetimos; es una vergüenza que un comentario
bíblico conservador tenga que admitir que: "El objetivo principal de dar en la
iglesia primitiva era proveer para las necesidades de los hermanos pobres, antes
que sostener la predicación del evangelio, como sucede en la actualidad" (123).
Las "iglesias" de Pablo (más bien las "asambleas de creyentes") se reunían en los
hogares, no en fastuosos edificios. En vez de ir "de casa en casa" para tener culto,
como hizo Pablo en Hechos 20:20, en la actualidad la vasta mayoría del dinero dado
por los creyentes se usa para pagar edificios y salarios, más bien que para ayudar a
los pobres. Para la mayoría de los creyentes, la palabra "iglesia" evoca la idea de un
edificio, más bien que la de una asamblea de creyentes. (Sobre las casas, véase
Hechos 2:46; 5:42; 20:20;Rom. 16:5; 2 Tim. 3:6; Tit. 1:11).
Lo que esta conclusión del nuevo pacto hace al diezmo es evidente. La verdad es un
cambio radical de la tradición y la vida bajo los principios de la ley mosaica. Las
últimas cartas de Pablo fueron escritas entre 30-35 años después del Calvario. Pero
no se dice ni una sola palabra acerca del diezmo. Mientras discutía específicamente
la "cuestión de dar y recibir", llamó a los dones "olor fragante y sacrificio aceptable"
y, nuevamente, no se mencionan los diezmos. Por otra parte, Pablo parecía
preocupado por la codicia, la avaricia, y el amor al dinero cuando escribió a
Timoteo. Puesto que tal problema definidamente existía, Pablo trató el problema de
los ancianos y diáconos con relación a cuestiones de dinero.
Capítulo 29
Durante muchos siglos, la "iglesia" estuvo muy lejos de ser un sistema unificado.
Centros del cristianismo que competían entre sí surgieron en Roma, Éfeso,
Antioquia de Siria, Jerusalén, Cesárea, y Norte de África. Después de que
comenzaron las invasiones bárbaras del siglo cuarto, el Imperio Romano trasladó
su capital a la ciudad de Constantinopla, donde Constantino, durante muchos años,
protegió y ayudó a la iglesia de Constantinopla como la iglesia más rica e
influyente.
Más tarde, después de que los judíos fueron expulsados de la tierra de Israel, las
leyes judías fueron modificadas por lo que concernía al diezmo. A la pregunta:
"¿Con cuánto debe contribuir un hombre a la caridad?", la respuesta que se daba en
el Código de Leyes Judías incluía "diezmos", que se habían convertido en poco más
que limosnas. El primer año requería un diezmo de su capital; después, debía
dizmar las ganancias netas. En su lugar, podía escoger dar un quinto de su capital
cada año, pero nunca más de un quinto. "El dinero del diezmo (puesto aparte para
la caridad) no debe ser usado para ningún otro acto religioso, como comprar velas
para la sinagoga, sino que debe dársele a los pobres". Sin embargo, había
excepciones a esta regla. Los diezmos podían usarse para la circuncisión, o para
dotes para parejas pobres que deseaban casarse, y establecer esas parejas en un
oficio seguro (p. 1-112).
Además, los más pobres todavía no estaban obligados a diezmar, ni a dar para la
caridad, "sino que el que apenas tiene lo suficiente para sus propias necesidades no
está obligado a dar para la caridad, porque su propio sostenimiento es prioritario
por encima del de los demás" (p. 1-111) (126).
Desde la destrucción de Jerusalén hasta el fin del siglo cuarto, los "nazarenos" eran
identificados con un pequeño grupo de cristianos judíos que se sentían obligados
por la ley de Moisés, pero no rehusaban la compañía de los cristianos gentiles.
Aunque más tarde se dividieron en fariseos ebionitas, ebionitas esenios, y
elkaisitas, también consideraban a Pablo un falso maestro y a su debido tiempo se
encontraron fuera de la iglesia reconocida. Estos cristianos judíos nunca dejaron de
enseñar que la estricta obediencia a la ley mosaica era necesaria para la salvación.
Por eso, para muchos cristianos judíos, el diezmo nunca abandonó el ambiente
espiritual de la ley mosaica (127, 128).
Es muy fácil demostrar por medio de la Escritura que ninguno de los padres
apostólicos post-Calvario del siglo primero, como Pablo, Pedro, Juan, Santiago,
Judas y Lucas, enseñaron el diezmo. Varios capítulos de este libro demuestran que
en la Escritura no existe ninguna enseñanza del diezmo después del Calvario.
Los líderes de la iglesia de segunda y tercera generación (c. 100-200 A. D.) estaban
casi completamente dedicados a llevar un estilo de vida asceta (de autonegación) o
semi-asceta, predicar el evangelio, defender el evangelio, y ayudar a los pobres y los
necesitados. ¡Investigue esto usted mismo! Se abstenían de los placeres mundanos
y se enorgullecían de hacerlo. Construir costosos lugares de culto y acumular
independencia financiera eran completamente ajenos a su estilo de vida. Tomaron
literalmente las palabras de Jesús de Mateo 19:21: "Si quieres ser perfecto, ve,
vende todo lo que tienes, y dalo a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo; y ven, y
sígueme", y las palabras de Pablo a los ancianos en Hechos 20:35: "En todo os he
enseñado que, trabajando así, se debe ayudar a los necesitados, y recordar las
palabras del Señor Jesús, que dijo: Más bienaventurado es dar que recibir".
Los padres de la iglesia de primera generación escribían muy a menudo que la cena
del Señor era la ocasión para hacer ofrendas para los necesitados. Dar limosnas se
consideraba mejor que ayunar y orar. ¡Sin embargo, el diezmo no estaba
incluido! La presencia verificable de ofrendas voluntarias en sus escritos, junto con
la ausencia verificable del diezmo en sus escritos presenta un verdadero dilema
para los que sostienen el diezmo e insisten en que fue una doctrina válida de la
iglesia desde el mismo comienzo. ¡Obtenga una copia de de la obra en diez
tomos Ante-Nicean Fathers y aclare este punto! Los que enseñan el diezmo no citan
a los líderes de la primera iglesia para validar su posición doctrinal.
Robert Baker (Bautistas del Sur) escribió: "Los líderes [antes del año 100 D. C.] por
lo general trabajaban con las manos para suplir sus necesidades. No había ninguna
distinción artificial entre el clero y el laicato". Más tarde añadió: "Los primeros
obispos y presbíteros se ocupaban de labores seculares para ganarse la vida y
desempeñaban los deberes de sus puestos en la iglesia cuando no estaban
trabajando" (129).
"Hacia el fin del siglo primero, tuvo lugar un cambio. Una falta general de confianza
en los dones especiales del Espíritu, un deseo de orden más específico, y una
apremiante demanda de una apropiada salvaguarda contra las herejías resultaron
en una transferencia gradual de la predicación, la enseñanza, y la administración de
los sacramentos de los 'hombres con dones' a los ancianos locales. ...".
"Durante los siglos segundo y tercero, tuvo lugar otro cambio importante. En lugar
del gobierno de un grupo de ancianos, las iglesias locales estaban encabezadas por
oficiales solos, para los cuales estaba reservado exclusivamente el nombre de
'obispo'. ... La elección del obispo se convirtió en una ordenanza legal y sólo el
obispo tenía derecho a predicar, enseñar, y administrar los sacramentos ... " (131).
Aunque hubo muchos padres de la iglesia primitiva pre-niceana (antes del año 325
D. C.) cuyos escritos existen todavía, hasta Cipriano, no escribieron en absoluto
sobre ninguna forma sugerida de diezmo obligatorio. Estos padres incluyen a
Clemente de Roma, Matetes, Policarpo, Ignacio, Bernabé, Papias, Justino, el pastor
de Hermas, Tatiano, Teófilo de Antioquia, Atenágoras, Clemente de Alejandría,
Tertuliano, Minucio Félix, Comodiano, Orígenes, Hipólito, Cayo, y Novacio.
Justino Mártir (c. 150), (del área de Samaria), escribió: "Y que los ricos de entre
vosotros ayuden a los necesitados ... cuando termina nuestra oración, se trae pan,
vino y agua, y de la misma manera, el presidente ofrece oraciones y acción de
gracias, según su capacidad, y el pueblo asiente diciendo Amén; y hay una
distribución a cada uno, y una participación de eso por lo cual se han dado gracias,
y a los que están ausentes se les envía una porción con los diáconos. Y los que son
acaudalados, y están dispuestos, dan cada cual lo que le parece mejor; y lo que se
recoge se desposita en manos del presidente, que socorre a los huérfanos y a las
viudas y a los que, a causa de enfermedad o por cualquier otra razón, están en
necesidad, y también los que están en cadenas y los extranjeros que habitan entre
nosotros" (Primera Apología, cap. 67). De acuerdo con la Escritura del siglo
primero, los "presidentes" o líderes de iglesia sólo son administradores capaces, no
necesariamente pastores ni instructores de la Palabra.
Los escritos de Justino sólo usan la palabra "diezmo" cuatro veces: dos de Mateo
23:23 para señalar que los judíos no gustaban de Cristo, y dos de Génesis 14:20
mientras probaba que Melquisedec no requirió la circuncisión (Diálogo con Trifón,
cap. 17, 19, 33, 112).
El Didache, o Enseñanza de los Doce (150-200?) fue descubierto a finales del siglo
diecinueve en el monasterio judío del Santo Sepulcro en Constantinopla. No se sabe
si es auténtica, representa la norma, o si es de una ramificación aberrante. Parece
ser un documento judeocristiano aproximadamente de mediados del siglo segundo,
y tiene algunas interesantes ideas sbre cómo eran sostenidos los profetas y los
líderes de la iglesia.
Párrafo XI: ... "Ahora, concerniente a los apóstoles y los profetas según la enseñanza
del evangelio, así haced; y que cada apóstol que viene a vosotros sea recibido como
al Señor; y no se quedará sino un día, si es necesario, al día siguiente también; pero
si se queda tres días, es un falso profeta. Cuando el apóstol sale, que no lleve nada
sino pan, hasta que llegue a su alojamiento; si pide dinero, es un falso profeta. ...
Pero cualquiera que diga en espíritu: 'Dadme dinero, u otra cosa', no lo escuchen;
pero si pide para otros que están en necesidad, que nadie le juzgue".
El párrafo XII puede (o no puede) referirse sólo a viajeros ordinarios. Su ubicación
entre los párrafos 11 y 13 debe ser considerada. "Que todo el que 'viene en el
nombre del Señor' sea recibido" y probado. ... "Si desea morar con vosotros, si es
artesano, permítanle que trabaje y coma. Si no tiene oficio, usen su sentido común
para proveer para que viva con ustedes como cristiano, sin ociosidad. Si no está
dispuesto a hacerlo, es un 'cristero'. Tengan cuidado de los tales".
Párrafo XIII: "Pero todo buen profeta que desea morar con vosotros es 'digno de su
comida'. De la misma manera, un verdadero maestro es también, como el obrero,
'digno de su comida'. Por lo tanto, tomaréis y daréis a los profetas todas
las primicias del lagar y la trilladora, de los bueyes y las ovejas. Porque los profetas
son vuestros sumos sacerdotes. Si no tenéis profeta, daréis las primicias a los
pobres. ...".
Párrafo XV: "Elegid, pues, de entre vosotros obispos y diáconos dignos del Señor,
hombres que sean amables, pero no codiciosos, hombres verdaderos y aprobados;
porque ellos también ministran para vosotros el ministerio de los profetas y
líderes" (133).
Aunque muchos maestros del diezmo citan los párrafos XIII y XV para probar que la
iglesia primitiva enseñaba el diezmo, y convenientemente pasan por alto los
párrafos XI y y XII, ¡engañan tremendamente al hacer esto! Los párrafos XI y XII
dejan bien claro que los párrafos XIII y XV no pueden ser estirados para enseñar el
diezmo. La palabra diezmo ni siquiera aparece. Además, cuando la iglesia
finalmente trató de enseñar el diezmo, no entregó el diezmo entero a los diáconos
como lo requeriría el párrafo XV si ellos fuesen los levitas. Quizás este documento
no autorizado ha sido ubicado a mediados del siglo segundo a causa de alguna
elevación de obispos, pero antes de la autoridad impuesta sobre ellos por Cipriano.
Notablemente, sin embargo, las primicias encajan sólo en la descripción de
artículos alimenticios de Números 18 y no son lo mismo que los diezmos. Además,
parece que aun éstos no serían sostenidos completamente por la iglesia si fuesen
pequeños, pero se les exigiría que conservaran un oficio. Es interesante notar que el
párrafo XIII dice que, si no hay profeta en la iglesia, se deben dar las primicias a los
pobres.
"Que el obispo considere tal alimento y abrigo suficientes para suplir la necesidad y
la decencia. Que no use los bienes del Señor como los de otros, sino
moderadamente; 'porque el obrero es digno de su salario'. Que no sea opíparo en la
dieta, ni amigo de la ociosidad, sino que se contente con lo necesario para su
sostenimiento".
"Sobre las primicias y los diezmos, y de qué manera el obispo mismo participa de
ellos, o los distribuye a los demás".
XXV. Que use esos diezmos y esas primicias, que se dan de acuerdo con el
mandamiento de Dios, como hombre de Dios; y que también dispense
correctamente las ofrendas voluntarias que se traen para los pobres, los huérfanos,
las viudas, los afligidos, y los extranjeros en dificultades, como teniendo a Dios
como examinador de sus cuentas y que les han dado la disposición. Distribuyan a
todos los que tienen escasez en justicia, y que ustedes mismos usen las cosas que
pertenecen al Señor, pero que no abusen de ellos, comiendo de ellos, pero sin
comerse todo ellos mismos: comuníquense con los que están en necesidad, y por lo
tanto aparezcan intachables delante de Dios. Porque si ustedes consumen todo
ustedes mismos, serán reprendidos por Dios. ...".
"Porque los que atienden la iglesia deben ser mantenidos por la iglesia, siendo
sacerdotes, levitas, presidentes, y ministros de Dios; como está escrito en el libro de
Números concerniente a los sacerdotes. ...".
"Lo que entonces eran primicias, diezmos, ofrendas y regalos ahora son oblaciones,
que son presentadas por obispos santos al Señor Dios, por medio de Jesucristo, que
murió por ellos. Porque éstos son vuestros sumos sacerdotes, así como los
presbíteros son vuestros sacerdotes, y vuestros actuales diáconos son vuestros
levitas; así también como lo son vuestros lectores, cantores, diaconisas, viudas,
vírgenes, y huérfanos: pero el que está por encima de todos ellos es el Sumo
Sacerdote".
[Mis comentarios sobre las Constituciones de los Apóstoles. Aunque se intenta usar
el lenguaje de la ley del Antiguo Testamento, son evidentes varias diferencias.
Primera, ahora el sumo sacerdote, no los levitas, recibe los diezmos directamente.
Segunda, el obispo debe conservar un nivel mínimo de sostenimiento de lo que
recibe en diezmos y ofrendas. Tercera, el obispo es directamente responsable de
redistribuir tanto los diezmos como las ofrendas a los necesitados. Cuarta, el nuevo
sistema de castas sacerdotales no se refiere al diezmo de Abraham a Melquisedec
en Génesis 14 para una justificación antes de la ley, ni a "Santo es al Señor" en
Levítico 27:30 como principio eterno. Claramente, la justificación para reintroducir
el diezmo en esta particular iglesia primitiva, aunque fuese una ofrenda voluntaria,
no era resultado del abandono de la doctrina del sacerdocio del creyente y la
elevación de la posición de sacerdote y sumo sacerdote. Por consiguiente, es fácil
entender por qué los modernos maestros protestantes del diezmo no apelan a este
documento para validar el diezmo como una doctrina legítima. Finalmente, aun
este documento fue rechazado por la iglesia Católica Romana, porque el diezmo no
se convirtió en ley de la iglesia sino hasta finales del siglo sexto].
El diezmo no puede ser sostenido por una doctrina válida que se encuentre en la
historia bíblica post-bíblica inicial por las siguientes razones, que están apoyadas
por muchas autoridades de reputación en este capítulo y en otras partes de este
libro:
Una: Es cierto que los cristianos judíos de Palestina continuaron enviando diezmos
al templo como parte de su obediencia a la ley (Hechos 15 y 21) por lo menos hasta
el año 70 D. C. La historia post-bíblica prueba que la mayor parte de estos cristianos
judíos nunca abandonaron la ley mosaica, rehusaron la plena comunidad con los
cristianos gentiles, rechazaron a Pablo, más tarde se dividieron en facciones, y
desaparecieron cerca del final del siglo cuarto.
Dos: Como Pablo, los cristianos judíos, que habían sido adiestrados en las estrictas
tradiciones de la ley mosaica, jamás habrían aceptado el sostenimiento a tiempo
completo por enseñar los sagrados escritos del Antiguo Testamento concerniente a
Cristo.
Tres: Los cristianos judíos consideraban el diezmo puramente como ley, que ellos
ordenaron específicamente a los cristianos gentiles que no obedecieran (Hechos 15
y 21).
Cuatro: A los cristianos judíos se les enseñaba a ganarse la vida con un oficio y no
depender de la caridad. Los sabios tanto judíos como cristianos eran sostenidos por
las comunidades al sostener sus oficios.
Cinco: Las artes seculares y los oficios de muchos rabinos y líderes posteriores de la
iglesia están registradas en la historia. Muchos historiadores de la iglesia comentan
el hecho de que los primeros líderes de la iglesia se sostenían con un oficio (más
bien que con los diezmos). Esto está documentado por numerosas notas de pie de
página, especialmente el capítulo sobre 1 Corintios 9, Hechos 20, y este capítulo.
Seis: Desde temprano, la iglesia era considerada "sin licencia" (¿o ilegal?)" y fue
considerada como "fuera de la ley" aproximadamente desde el año 80 D. C. Los
romanos requerían que todos los ciudadanos registraran su medio de ganarse la
vida y presentaran prueba de su sostenimiento. Durante por lo menos los primeros
doscientos años y más después del Calvario, cualquiera que afirmase ser un obrero
del evangelio a tiempo completo habría sido arrestado como insurrecionista que no
tenía medios evidentes de sostenimiento, tal como un oficio.
Siete: Puesto que los cristianos eran muertos esporádicamente por turbas y por el
gobierno durante gran parte de los primeros tres siglos, parece improbable que los
primeros lideres revelaran abiertamente (al no tener un oficio obvio) que eran
líderes de iglesia a tiempo completo.
Ocho: Cuando se escribió el Nuevo Testamento, muy pocas iglesias, si es que había
alguna, estaban organizadas en un sistema de gobierno por obispos que requiriera
o sostuviera un ministro a tiempo completo. Las iglesias eran demasiado
primitivas, demasiado pequeñas, demasiado pobres, y a menudo tenían que
ocultarse de las autoridades para reunirse. Los edificios de iglesia no existían
porque no habrían sido toleradas sino hasta el año 200 D. C. y no florecieron sino
hasta después del año 260 D. C. antes de ser destruidas nuevamente en el año 303
(134). La persecución variaba ampliamente alrededor del Imperio Romano.
Nueve: Durante varios siglos, las iglesias primitivas no distinguieron entre "clero" y
"laicato". Miembros laicos de talento predicaban y desempeñaban otras funciones
que más tarde fueron restringidas al clero ordenado y de tiempo completo. Por
ejemplo, un "administrador" talentoso puede haber estado encargado mientras
otra persona de talento "predicaba" y otra persona de talento "enseñaba" la
Palabra. Este hecho excluía el dar diezmos cuando numerosos laicos ejercían sus
dones espirituales.
Diez: Es muy probable que hasta los esclavos desempeñasen papeles de liderazgo
como ancianos y obispos en la iglesia primitiva. El notable erudito F. F. Bruce dice
que "Pío, obispo de la iglesia de Roma hacia mediados del siglo segundo, si no era
esclavo él mismo, era en todo caso hermano de un esclavo, y Calixto, obispo de la
misma iglesia en la primera parte del siglo tercero, era un ex-esclavo" (135).
¡Ciertamente, los esclavos no aceptarían diezmos para su sostenimiento!
La iglesia de los primeros siglos usaba el dinero de manera muy diferente ded la
manera en que lo usa la iglesia de hoy. Williston Walker informa que, en el año 251
D. c., la iglesia de Roma bajo el obispo Grainelio tenía una membresía de
aproximadamente 30,000 miembros y sostenía más de 1,500 dependientes. ¡Esto
equivale a un dependiente por cada 20 miembros! (136). Aunque Cipriano trató de
hacer cumplir su idea de que los obreros de la iglesia no debían tener acitividades
seculares, Walker comenta: "Para mediados del siglo tercero, se esperaba que el
clero superior dedicara todo su tiempo a la obra del ministerio, pero hasta los
obispos a veces compartían ocupaciones seculares, no siempre de naturaleza
encomiable. El clero inferior todavía podía ocuparse en el comercio" (137).
Puede que sea o puede que no sea digno de notarse que Schaff no menciona los
"edificios" de iglesia sino hasta que cesó la persecución entre el 206-303. No está
claro hasta qué punto existían los edificios de iglesia antes de esta época. En tanto
que los cristianos eran culpados por casi todos los desastres como hambrunas,
terremotos, inundaciones, derrotas militares, e invasiones de los bárbaros, la
población pagana muy a menudo castigaba a la iglesia como víctima propiciatoria y
rápidamente habría destruido estructuras muy visibles y accesibles asociadas con
la iglesia.
Siglos más tarde, la iglesia adquirió riquezas en forma de tierras. Al principio, los
terratenientes ricos donaban tierras a la iglesia para parroquias, pero reteniendo el
privilegio de nombrar los obispos y conservar las ganancias y los diezmos de la
tierra en sus propias manos seculares. Por consiguiente, el diezmo pronto se
convirtió en fuente de abuso. Con el tiempo, sin embargo, la iglesia adquirió
suficiente autoridad secular para recuperar nuevamente el nombramiento de sus
propios sacerdotes y obispos, junto con la conservación de los diezmos en la
iglesia. Pronto, la iglesia fue dueña desde la mitad hasta un cuarto de la tierra en
muchos países europeos y puso en vigor los diezmos de los que alquilaban sus
tierras.
¡Por lo general, los historiadores concuerdan en que no fue sino hasta el año 567 D.
C., quinientos treinta y siete (537) años después del Calvario, cuando apareció en la
historia elprimer intento sustancial de la iglesia de hacer cumplir el diezmo bajo su
propia autoridad! El Concilio de Tours en 567 y el Concilio de Macon en 585
emitieron decretos eclesiásticos regionales a favor del diezmo y para excomulgar a
los que no diezmaban, pero no recibieron autoridad del rey para hacer cumplir la
colecta por medio de decretos civiles. Es significativo que el diezmo no surgió
históricamente sino hasta que la iglesia se volvió poderosa en el ámbito secular.
Aun en esta fecha tardía, los diezmos todavía consistían sólo de alimentos. Con el
tiempo, la Iglesia Romana hasta rehusó administrar los últimos ritos si no se le
concedían tierras o riquezas en los testamentos.
Durante varios siglos, el derecho a recoger diezmos agrícolas iba y venía entre la
iglesia y la autoridad secular, dependiendo de cuál era la autoridad más fuerte. Para
fortalecer y purificar la iglesia, el papa Inocente III (1198-1216) ordenó que los
diezmos para el sostenimiento de la iglesia tuviesen precedencia sobre todos los
demás impuestos, excluyó toda interferencia de los laicos en los asuntos de la
iglesia, y prohibió que una sola persona derivara su ingreso de más de un puesto en
la iglesia. El teólogo Tomás de Aquinodefendió el diezmo afirmando: "Durante la
época de la Nueva Ley, la autoridad de la iglesia ha dispuesto el pago de diezmos"
(Summa Theologica, Tomo 3, Segunda Parte de la Segunda Parte). NO usó Génesis 14
y Melquisedec para sustentar su argumento.
No mucho después de que la Biblia fue traducida al idioma del hombre común, Otto
Brumfels proclamó en 1524 que el Nuevo Testamento no enseña el diezmo. Más
tarde en ese siglo, el papa Gregorio VII, en un esfuerzo para controlar la posesión
secular de diezmos, una vez más declaró fuera de la ley la posesión de diezmos por
parte de los laicos.
Siguieron otras revueltas contra el diezmo. Entre 1836 y 1850, el diezmo fue
mayormente abolido en Inglaterra. Más tarde, fue cambiado por un alquiler que se
debía pagar al contado. En 1868, como resultado de la agitación que comenzó por
lo menos ya en la década de 1830 y que fue impulsada por los Disidentes, el pago
obligatorio de los diezmos parroquiales locales para al sostenimiento de la iglesia
fue abolido y se volvió puramente voluntario. Sin mbargo, los cargos finales del
alquiler del diezmo no fueron abolidos sino hasta 1936 en Inglaterra.
En Canadá, todavía en 1868, el Cuarto Concilio de Quebec declaró que el diezmo era
obligatorio. Durante un tiempo, los diezmos hasta fueron hechos obligatorios en los
territorios franceses del Nuevo Mundo hasta que el territorio fue vendido en la
Compra de Luisiana. En 1871, los diezmos fueron abolidos en Irlanda. En 1887,
terminaron en Italia. En Alemania Occidental, los residentes deben renunciar
formalmente a la membresía de la iglesia para evitar el impuesto obligatorio de la
iglesia. En otros lugares, la Iglesia Ortodoxa Oriental nunca ha aceptado el diezmo y
sus miembros nunca lo han practicado. La Iglesia Católica Romana todavía
prescribe los diezmos en países donde son sancionados por ley, y algunos cuerpos
protestantes todavía consideran los diezmos obligatorios.
Pertinente para este libro, el modelo bíblico del diezmo se ajusta mejor a una
economía de iglesia del estado similar a la teocracia de Israel. La historia revela que
el diezmo se convirtió en una doctrina "cristiana" sólo después de que la Iglesia
Católica Romana estrechó manos con las fuerzas seculares y políticas. Sin embargo,
del mismo modo que el diezmo era una ordenanza inútil que nunca produjo
crecimiento espiritual en el Israel nacional bajo el pacto antiguo, así también el
diezmo nunca condujo al crecimiento espiritual cuando fue usado por los cristianos
y a su debido tiempo fue obligado a retirarse una segunda vez por las iglesias
estatales.
Capítulo 30
PRINCIPIO #1: Sólo los pastores (ancianos, obispos) pueden fungir como
sacerdotes y ministrar en todos los aspectos de la reconciliación espiritual.
Reemplazar 1 Pedro 2:9, 10; Apoc. 1:6 y 5:10 con Números 18:1, 5 y 3:12.
PRINCIPIO #2: Los diezmos deben ser entregados sólo a una familia en la asamblea
que pueda desempeñar todos los deberes asociados con el culto y la construcción y
el mantenimiento del edificio de culto (Números 18:1-4).
PRINCIPIO #3: Sólo el patriarca de esta familia y sus hijos pueden mediar a favor
de la congregación como familia sacerdotal. Ellos son los únicos cuya presencia es
permitida dentro del edificio mismo de culto. También, son los únicos a los que se
les permite acercarse a Dios y pedir perdón en nombre de la congregación.
Núm. 18:1 Jehová dijo a Aarón: Tú y tus hijos, y la casa de tu padre contigo, llevaréís
el pecado del santuario; tú y tus hijos contigo serviréis delante del tabernáculo de
reunión.
PRINCIPIO #4: ¡Importante! El primer diezmo completo debe ser entregado sólo a
los siervos levitas, hermanos de los líderes. ¡Este principio siempre es pasado por
alto!
Núm. 18:21 Y he aquí yo he dado a los hijos de Leví todos los diezmos en Israel por
heredad, por su ministerio, por cuanto ellos sirven en el ministerio del tabernáculo
de reunión. [no los sacerdotes].
Núm. 18:22 Y no se acercarán más los hijos de Israel al tabernáculo de reunión, para
que no lleven pecado por el cual mueran.
Núm. 18:23 Mas los levitas [no los sacerdotes] harán el servicio [no sacerdotal] del
tabernáculo de reunión, y ellos llevarán su iniquidad; estatuto perpetuo para
vuestros descendientes; y no poseerán heredad entre los hijos de Israel.
PRINCIPIO #5: La congregación debe permitir que los levitas (tanto siervos como
sacerdotes) vivan en tierras proporcionadas gratis para siempre pero que continúa
siendo propiedad de los miembros regulares.
Núm. 35:2 Manda a los hijos de Israel que den a los levitas, de la posesión de su
herdad, ciudades en que habiten; también daréis a los levitas los ejidos de esas
ciudades alrededor de ellas.
Núm. 35:3 Y tendrán ellos las ciudades para habitar, y los ejidos de ellas serán para
sus animales, para sus ganados y para todas sus bestias.
PRINCIPIO #6: La totalidad del diezmo, que pertenece a los siervos levitas, se debe
llevar, no al edificio de culto, sino a las ciudades levitas, donde todos los levitas
deben vivir la mayor parte del tiempo en sus granjas con sus rebaños. (Núm. 35;
Josué 20, 21).
Neh. 10:37 ... y el diezmo de nuestra tierra para los levitas; y que los levitas recibirían
las décimas de nuestras labores en todas las ciudades.
Neh. 10:38 Y que estaría el sacerdote hijo de Aarón con los levitas, cuando los levitas
recibiesen el diezmo ...
PRINCIPIO #7: Los siervos levitas que reciben todo el diezmo no deben ministrar
como pastores (ancianos, obispos, sacerdotes) y no deben entrar al edificio de
culto. Los siervos levitas que reciben los diezmos sólo deben fungir como tejedores
de tela (Núm. 3:25, 26), constructores de artículos caseros para interiores (Núm.
3:31), constructores de postes de tiendas y fabricantes de equipos exteriores de
cocina (Núm. 3:36), soldados (1 Crón. 12:26), constructores y artesanos (1 Crón.
23:4), supervisores y jueces (23:4), guardas y porteros (23:5), miembros del coro y
músicos (23:5), panaderos (23:29) y empleados políticos (26:29-32).
Núm. 18:2 Y a tus hermanos también, la tribu de Leví, la tribu de tu padre, haz que se
acerquen a tí y se junten contigo, y te servirán; y tú y tus hijos contigo serviréis
delante del tabernáculo del testimonio.
PRINCIPIO #8: Sólo los pastores (ancianos, obispos, sacerdotes) pueden entrar al
edificio de culto. Todos los demás, incluyendo a los siervos levitas que reciben la
totalidad del diezmo, deben ser ejecutados si intentan adorar a Dios directamente.
Núm. 18:3 Y [los levitas] guardarán todo lo que tú ordenes, y el cargo de todo el
tabernáculo; mas no se acercarán a los utensilios santos ni al altar, para que no
mueran ellos y vosotros.
Núm. 18:4 [Los levitas] se juntarán, pues, contigo, y tendrán el cargo del tabernáculo
reunión en todo el servicio del tabernáculo; ningún extraño se ha de acercar a
vosotros.
Núm. 18:7 Mas tú y tus hijos contigo guardaréis vuestro sacerdocio en todo lo
relacionado con el altar, y del velo adentro, ministraréis. Yo os he dado en don el
servicio de vuestro sacerdocio; y elextraño que se acercare, morirá.
Núm. 18:22 Y no se acercarán más los hijos de Israel al tabernáculo de reunión, para
que no lleven pecado por el cual mueran.
PRINCIPIO #8: Los pastores (ancianos, obispos, sacerdotes) deben comer sus
porciones de las ofrendas dentro del edificio de culto (Núm. 18:8-18). Deben comer
las primicias de animales puros y las ofrendas de las primicias dentro del edificio
de culto (Neh. 10:25-37). Éstas no pueden ser llevadas a casa ni compartirlas con
sus familias. Los diezmos no es lo mismo que las primicias.
Neh. 10:35 Y que cada año traeríamos a la casa de Jehová las primicias de nuestra
tierra, y las primicias del fruto de todo árbol.
Neh. 10:36 Asimismo los primogénitos de nuestros hijos y nuestros ganados, como
está escrito en la ley; y que traeríamos los primogénitos de nuestras vacas y de
nuestras ovejas a la casa de nuestro Dios, a los sacerdotes que ministran en la casa de
nuestro Dios;
Neh. 10:37 y que traeríamos también las primicias de nuestras masas, y nuestras
ofrendas, y del fruto de todo árbol, y del vino y del aceite, para los sacerdotes, a las
cámaras de la casa de nuestro Dios ...
PRINCIPIO #10: Los siervos levitas que ayudan a los líderes no pueden poseer ni
heredar tierras.
Núm. 18:23 Mas los levitas harán el servicio del tabernáculo de reunión, y ellos
llevarán su iniquidad; estatuto perpetuo será para vuestros descendientes; y no
poseerán heredad entre los hijos de Israel.
PRINCIPIO #11: Cuando el diezmo se pague a la clase de siervos levitas, éstos sólo
deben dar a los pastores (ancianos, obispos, sacerdotes) un décimo del diezmo que
reciben. Este décimo del diezmo no puede ser usado para ningún otro propósito.
(Esto es un principio pasado por alto en la actualidad).
Núm. 18:26 Así hablarás a los levitas, y les dirás: Cuando toméis de los hijos de Israel
los diezmos que os he dado de ellos por vuestra heredad, vosotros presentaréis de
ellos en ofrenda mecida a Jehová el diezmo de los diezmos.
Núm. 18:27 Y se os contará vuestra ofrenda como grano de la era, y como producto
del lagar.
Núm. 18:28 Así ofreceréis también vosotros ofrenda a Jehová de todos vuestros
diezmos que recibáis de los hijos de Israel; y daréis de ellos la ofrenda de Jehová al
sacerdote Aarón.
Neh. 10:38 Y que estaría el sacerdote hijo de Aarón con los levitas; cuando los levitas
recibiesen el diezmo; y que los levitas llevarían el diezmo del diezmo a la casa de
nuestro Dios, a las cámaras de la casa del tesoro.
PRINCIPIO #12: A cambio de recibir su décimo del diezmo, los pastores (ancianos,
obispos, sacerdotes) no pueden poseer ni heredar tierras. Tengan cuidado de no
pasar por alto este principio.
Núm. 18:20 Y Jehová dijo a Aarón: De la tierra de ellos no tendrás heredad, ni entre
ellos tendrás parte. Yo soy tu parte y tu heredad en medio de los hijos de Israel.
PRINCIPIO #14: Los sacerdotes pueden comer el diezmo en cualquier parte (18:31,
32), pero deben comer las primicias y las ofrendas sólo dentro del edificio de culto.
Núm. 18:31 Y lo comeréis en cualquer lugar, vosotros y vuestras familias; pues es
vuestra remuneración por vuestro ministerio en el tabernáculo de reunión.
Núm.18:32 Y no llevaréis pecado por ello, cuando hubiereis ofrecido la mejor parte
de él; y no contaminaréis las cosas santas de los hijos de Israel, y no moriréis.
PRINCIPIO #15: Normalmente, tanto los pastores como sus siervos levitas
trabajarán en el centro de culto una semana de cada veinticuatro.
1 Crón. capítulos 24-26; 28:13, 21; 2 Crón. 8:14; 23:8; 31:2, 15-19; 35:4, 5, 10;
Esdras 6:18; Neh. 11:19, 30; 12:24; 13:9, 10; Luc. 1:5.
PRINCIPIO #16: Todos los costos del edificio de culto y su mantenimiento deben ser
pagados con impuestos individuales y ofrendas voluntarias, no con los diezmos. Los
diezmos sólo pueden ser usados para sostener a los levitas y a los sacerdotes.
Éx. 30:13-15; 35:2, 3, 21, 22; Núm. 3:47-50; 1 Crón. 28.
PRINCIPIO #20: Los diezmos no deben ser usados para el evangelismo de personas
que no son miembros de iglesia. Éx. 23:32; 34:12, 15; Deut. 7:2.
PRINCIPIO #21: Hay que llevar un segundo diezmo a la ciudad en que están
situadas las oficinas principales de la iglesia. Este segundo diezmo debe ser
consumido por los adoradores en las calles durante celebraciones. Si la distancia a
la que hay que viajar es muy grande, este diezmo debe ser convertido en cerveza
fermentada y vino alcohólico para ser consumidos durante el calendario de la
celebración de la iglesia. No es para pagar salarios. Deuteronomio 12:28, 29; 14:22-
26.
PRINCIPIO #22: Cada tercer año, se debe tener disponible, en los hogares de
miembros de iglesia, un tercer diezmo, destinado a los pobres, para alimentar a los
pobres, que incluyen a los levitas y sacerdotes. Este diezmo del tercer año no es
para salarios. Deuteronomio 14: 28, 29; 26:12, 13.
PRINCIPIO #23: Cada séptimo año y cada quincuagésimo (50) año, no se deben
llevar para los levitas diezmos en alimento procedentes de los campos.
Éx. 23:11; Lev. 25:4, 11.
PRINCIPIO #23: Los pastores (ancianos, obispos), que fungen como sacerdotes y
que ministran todos los aspectos de la reconciliación espiritual en la iglesia, deben
ser plenamente responsables por los fracasos de la iglesia. Como tales, las
maldiciones de Malaquías están dirigidas directamente a ellos si de alguna manera
abusan de los diezmos. (Véase Malaquías 1:6 a 3:5).
Mal. 1:6 ¿Dónde está mi temor? dice Jehová de los ejércitos a vosotros, oh sacerdotes,
que menospreciáis mi nombre. Y decís: ¿En qué hemos menospreciado tu nombre?
Mal. 1:14 Maldito el que engaña, el que, teniendo machos en su rebaño, promete, y
sacrifica a Jehová lo dañado. Porque yo soy Gran Rey, dice Jehová de los ejércitos, y
mi nombre es temible entre las naciones. Mal. 2:1 Ahora, pues, oh sacerdotes, para
vosotros es este mandamiento.
Mal. 2:2 Si no oyereis, y si no decidís de corazón dar gloria a mi nombre, ha dicho
Jehová de los ejércitos, enviaré maldición sobre vosotros, y maldeciré vuestras
bendiciones; y aun las he maldecido, porque no os habéis decidido de corazón.
Mal. 3:3 Y se sentará para limpiar y afinar la plata; porque limpiará a los hijos de
Leví, los afinará como a oro y como a plata, y traerán a Jehová ofrenda de justicia.
PRINCIPIO #24: Las especias de jardín deben ser pesadas y contadas
cuidadosamente para asegurarse de que los diezmos se paguen correctamente.
Mateo 23:23; Lucas 21:42 (pase por alto Mat. 23:2, 3; Lucas 21:41).
Cualquier persona que haya leído la introducción de The Baptist Faith and
Message verá en el Position Paper un forzamiento de la conciencia que es contrario
a la naturaleza misma de las iglesias bautistas. Aunque ha habido muchas
declaraciones de bautistas desde la primera en 1644, ¡se necesitaron más de 300
años para que por lo menos aparecieran por primera vez textos como Génesis
14:20, Levítico 27:30-32 y Malaquías 3:9-10, como lo hicieron en The Baptist Faith
and Message de 1963! ¡La Faith anterior, la de 1925, no incluyó ningún texto sobre
el diezmo! Pregunto nuevamente: "¿Por qué?" Aunque los folletos sobre el diezmo
son mayoría en los estantes de literatura de la mayoría de las iglesias Bautistas del
Sur, ¡la palabra diezmo todavía no aparece en la revisión de 1998 de Faith and
Message! ¿Por qué? Sin embargo, una búsqueda en Internet sobre el sitio S. B. C.
produce artículos sobre algunas de sus iglesias que ya exigen que sus miembros
"diezmen".
He tratado, sin éxito, de entablar un diálogo sobre el diezmo con cualquier líder S.
B. C. Como dije antes, sospecho que hechos similares están ocurriendo actualmente
en demasiadas iglesias conservadoras en la actualidad. Sé que otros grupos
bautistas han adoptado fuertes posiciones a favor del diezmo y sé personalmente
que las Asambleas de Dios, la Iglesia de Dios, y muchas iglesias pentecostales están
siendo cuestionadas por miembros sinceros que buscan un diálogo. ¿Por qué, por
qué, por qué temen los cristianos salir al descubierto y discutir este asunto?
Segundo, el diezmo original para los ayudantes de los sacerdotes levitas nunca fue
lo "mejor" ni lo "primero" - era el "décimo" (Lev. 27:30-32). Sólo los levitas daban
lo "mejor" de su diezmo del diezmo (Núm. 18:25-28).
Cuarto, nuevamente, puesto que el diezmo nunca fue el mínimo punto "inicial" en el
dar del pacto antiguo, no debe serlo en el nuevo pacto.
Sexto, la definición misma de diezmo para que incluya ingresos que no consisten de
alimentos no es bíblica.
Capítulo 31
1 Cor. 1:18 Porque la palabra de la cruz es locura a los que se pierden; pero a los que
se salvan, esto es, a nosotros, es poder de Dios.
2 Cor. 3:18 Por tanto, nosotros todos, mirando a cara descubierta como en un espejo
la gloria del Señor, somos transformados de gloria en gloria en la misma imagen,
como por el Espíritu del Señor.
"Estoy maravillado de que tan pronto os hayáis alejado del que os llamó por la gracia
de Cristo, para seguir un evangelio diferente. No que haya otro, sino que hay algunos
que os perturban y quieren pervertir el evangelio de Cristo" (Gál. 1:6-7). Por Gálatas,
capítulos 2-4, es claro que estas "distorsiones" eran adiciones de la antigua ley al
evangelio predicado por Pablo.
Una iglesia muerta o moribunda no puede ser revivida predicándole la ley, sea ésta
la ley del diezmo o la de los Diez Mandamientos, con sus "no harás". ¡El mensaje de
reavivamiento DEBE ser el Cristo del Calvario! En comparación con el poder del
Espíritu y el evangelio, la ley ha perdido completamente toda su gloria y su poder
(2 Cor. 3:10). El reavivamiento permanente y la mayor dadivosidad sólo ocurrirán
cuando el pastor y su iglesia escuchen y respondan al evangelio y a todo lo que él
diga sobre el amor de Cristo. "El evangelio es poder de Dios" y el evangelio revela la
justicia de Dios "por fe y para fe"; "no por fe para la ley"; ni "por fe y la ley para fe y
la ley". Pablo era sostenido sólo por fe, confiando en la capacidad de Dios para
hacer provisión para él.
Cuando los filipenses vieron la necesidad de Pablo, le enviaron ayuda una y otra vez
(Fil. 4:16). Cuando Cristo es predicado, los creyentes verán las "necesidades" de un
mundo perdido sin Cristo. También verán y tratarán de satisfacer las necesidades
de los obreros del evangelio y de otros creyentes. Inspirado por el Espíritu Santo,
Pablo dijo a los filipenses: "Mi Dios, pues, suplirá todo lo que os falta conforme a sus
riquezas en gloria en Cristo Jesús" (Fil. 4:19). Esta es una promesa condicional, pero
segura, sólopara los que ven la necesidad del pueblo de Dios y responden dando
por amor creado por el evangelio.
De acuerdo con el nuevo pacto, las riquezas espirituales eternas, no las riquezas
físicas, fluyen de un conocimiento y del amor de Dios en Cristo. Cuando la Escritura
es comparada con la Escritura, la "riqueza al ciento por uno" no es dinero. Moisés
dejó su dinero y estimó "el vituperio de Cristo como mayores riquezas que los
tesoros de Egipto" (Heb. 11:26). Dios abunda en esas riquezas para todos los que le
invocan (Rom. 10:12). Pablo le dice al verdadero creyente: "Ya estáis saciados, ya
estáis ricos" (1 Cor. 4:8). Ls riquezas de la gracia de Dios vienen, no como dinero,
sino en la certeza de la "redención por medio de su sangre, el perdón de pecados,
según las riquezas de su gracia" (Efe. 1:7). La misericordia, la bondad, el amor
fluyen de la riqueza de Dios hasta el creyente por toda la eternidad (Efe. 2:4, 7;
3:16). Este era el mensaje de las riquezas predicado por Cristo (Rom. 3:8; Col.
1:27).
Colosenses 2:2 describe a la iglesia y al creyente como que están "unidos en amor,
hasta alcanzar todas las riquezas de pleno entendimiento, a fin de conocer el misterio
de Dios el Padre, y el de Cristo". Una sociedad libre y democrática dará más (y
producirá más) que una sociedad de trabajos forzados. El apóstol Pablo no recibió
ni diezmos ni ningún otro sostenimiento a tiempo completo. Usó su libertad en el
evangelio para rehusar salario, pero fue quizás el más exitoso constructor de
iglesias y evangelista de la historia. De la misma manera, la iglesia cristiana, con su
libertad en Cristo, dará más y servirá más que el Israel del pacto antiguo.
Dios salva, bendice, y llena al creyente con su Espíritu Santo solamente a causa de
la fe del creyente en Cristo Jesús. Habiéndolo hecho así, continúa usando los
principios de la gracia, no de la ley, para suplir las necesidades de su iglesia (2 Cor.
8:1-15; 9:6-8; 1 Cor. 16:1-2; Gál. 3:1-5).
Cuando Cristo es predicado, toda doctrina debe estar a la luz de su relación con él.
Un cristiano no obedece a Dios para complacerlo. En vez de eso, un cristiano
obedece a Diosporque ha sido salvado, porque su naturaleza ha sido cambiada,
porque estudia para conocer la voluntad de Dios, y porque se ha rendido al Espíritu
Santo. Los creyentes que están siendo transformados a la semejanza de Cristo al
aprender la sana doctrina desean dar como Cristo dio. Con una responsabilidad por
las almas perdidas, responden dando por un sincero deseo y lo mejor que pueden.
Dan sus vidas, su tiempo, y su dinero.