Criminología Orígenes Del Término
Criminología Orígenes Del Término
Criminología Orígenes Del Término
Capítulo 2:
Criminología. Definición
A continuación se expondrán una serie de definiciones de criminología.
Capítulo 3:
Criminología. Naturaleza
La criminología es una ciencia empírica e interdisciplinaria.
Como ciencia la criminología como cualquier otra ciencia social, aspira al logro
de cuatro niveles de conocimiento de ambiente creciente. El primer nivel es
descriptivo: pretende en primera instancia detallar las condiciones en que se
producen los comportamientos delictivos y las reacciones sociales frente a
ellos. El segundo propósito es explicativo, para cuyo logro ordena lógicamente
los hallazgos que describen la aparición de los fenómenos delincuencia y
reacción social y arbitra explicaciones o teorías que vinculan entre sí los
conocimientos obtenidos. La tercera aspiración es predictiva, con la finalidad de
pormenorizar bajo qué circunstancias se favorecerá o se dificultará el
comportamiento delictivo. Por último, la Criminología tiene una vertiente
aplicada, cuyo propósito es intervenir sobre los factores relacionados con la
delincuencia con la pretensión de reducir los comportamientos delictivos en la
sociedad. (Garrido et al, 1999, p.54)
Capítulo 4:
Criminología. El objeto de estudio
El objeto de estudio de la criminología va a girar en torno a cuatro
componentes a saber:
- El delito
- El delincuente
- La víctima
- El control social
El delito
El delincuente
La víctima
Es aquella persona física o moral que sufre un daño producido por una
conducta antisocial (y por lo tanto injusta) propia o ajena (esté tipificada o no),
aunque no sea el detentador del derecho vulnerado. (Rodríguez Manzanera,
1990, p.66).
El control social
Por control social debe entenderse a ciertos procesos sociales que recaban la
conformidad del individuo, sometiéndolo a pautas, modelos y requerimientos
del grupo; cohesión, disciplina, integración son, pues, términos que describen
el objetivo final que persigue el grupo, la sociedad, para asegurar su
continuidad frente al comportamiento individual irregular o desviado. (García-
Pablos de Molina, 1999, p.77).
Capítulo 5:
Criminología. Funciones y rol
Entre las funciones y roles que tiene la criminología se citan las siguientes:
El aporte de datos e información puede ser muy útil para guiar, inspirar y
auxiliar al legislador a estructurar una política criminal por medio de oportunas
reformas legales.
Capítulo 6:
Criminología. Clases
Entre las clases de criminología, se tienen las siguientes:
1) Criminología clásica: parte del estudio del delito como ente jurídico o
como acontecimiento factual y el delincuente como agente de peligrosidad o
sujeto responsable.
Capítulo 7:
Criminología. Las disciplinas que forman
parte de la criminología
Las disciplinas que forman parte de la criminología
Rodríguez Manzanera considera que la criminología se compone de las
siguientes disciplinas a saber:
Capítulo 8:
Criminología. Relación de la criminología
con otras disciplinas
La relación de la criminología con otras disciplinas
Con la criminalística
Capítulo 9:
Criminología. Sus postulados o tareas
La Criminologíacrítica y sus postulados o tareas
Postulados
Capítulo 10:
Criminología. Mètodo y técnicas de
investigación criminológica
Método y técnicas de investigación criminológica
Métodos cualitativos.
- Métodos cuantitativos.
En los primeros se tienen a los grupos de discusión, biografías, como técnicas
de producción primaria; o el llamado análisis estructural de textos, como
producción secundaria. En los segundos las encuestas sociales. (Canteras,
1991, p.112-113).
Capítulo 11:
Criminología. El papel del criminólogo
El papel del criminólogo
Los criminólogos deben adoptar una actitud de defensa social de manera que
sus aportes vengan a contribuir en forma significativa en la lucha contra la
criminalidad.
Capítulo 12:
Criminología. Literatura consultada
Literatura consultada
SISTEMA IBIS
HISTORIA DE LA CRIMINOLOGÍA
EFRAÍN MORA C.INTRODUCCIÓN
Antes de iniciar el estudio de nuestra materia, son indispensables algunas someras
observaciones relacionadas con el ser y su intelecto.A través de los siglos el hombre se
ha ido condicionando de acuerdo con las costumbres, vivencias y enseñanzas de cada
época en general, y de acuerdo con cada grupo social en particular. Una vez que en
nuestras mentes se van fijando experiencias o hechos, terminamos aceptándolos y muy
difícilmente podemos hacer abstracción de lo que es la realidad, pues el concepto de
existencia se va aferrando y trasmitiendo de generación en generación, a tal punto que
no puede aceptarse fácil mente cualquier cambio de mentalidad, por más que se nos
pretenda demostrar con factores o circunstancias renovadoras que tiendan a mostrarnos
una visión verdadera.La razón, por simplista que sea, es que el hombre tiende a ser
tradicionalista, conservador en sus creencias, y superar el arraigo de miles de años no es
tarea fácil; al fin y al cabo hemos soportado todo un proceso, cuya evolución ha sido
muy lenta si comparamos y tenemos en cuenta los millones de años que nos preceden.
¿Cómo poder cortar ese cordón umbilical que nos mantiene ligados a nuestro pasado,
cómo concebir que lo inculcado durante tanto tiempo podamos dejarlo de lado,
liberarnos de ese lastre y lanzarnos a conquistar las metas innovadoras y progresistas
que la ciencia ha ido descubriendo y revelando ante nosotros, sin que en lo profundo de
nuestro ser y particularmente de nuestra conciencia se nos vaya creando un conflicto
que debemos librar y conciliar a base de esfuerzo, de estudio y sobre todo de
objetividad?Nuestro punto de partida ha de ser el tratar por todos los medios de
despojarnos del arraigo conceptual y estar dispuestos a aceptar la crítica, el debate, la
controversia que, desde luego, no podrá enriquecer- se sino con la investigación, cuyo
aporte y renovados elementos de juicio nos permitirán tener una conciencia objetiva
para proyectarnos no solo a seguir conviviendo dentro de nuestro grupo social, sino a
contribuir a su perfeccionamiento y por ende al bienestar común.
El estudio de las huellas dactilares o el rastreo de las moléculas de ADN son métodos
clásicos en la tarea criminológica de rastrear individuos presentes en una escena de
crimen. Ambos son métodos con altísima efectividad y reconocidos internacionalmente,
y la investigación en dirección a perfeccionar sus técnicas ocurre a diario. De todos
modos, no son los únicos caminos que permiten rastrear individuos.
“Nuestros cuerpos están cubiertos de bacterias -dice Fierer-... Dejamos este rastro de
bacterias en todas partes a las que vamos, y la idea es utilizar este rastro para identificar
quién tocó un determinado objeto o superficie”. Considerando que las comunidades de
bacterias son únicas en cada individuo, se plantea la posibilidad de utilizarlas como
método de reconocimiento individual.