Epistemologia Juridica (1179)
Epistemologia Juridica (1179)
Epistemologia Juridica (1179)
FACULTAD DE DERECHO
MAESTRÍA EN DERECHO PENAL DEL MERCOSUR – ORIENTACIÓN DERECHOS HUMANOS
METODOLOGIA DE LA INVESTIGACIÓN I
Introducción
Si bien me encuentro en una etapa de estudios avanzados, quisiera utilizar este trabajo
para poder ahondar en conceptos y definiciones que me son ajenos.
A lo largo de la cursada hemos visto autores como Immanuel Kant, John Locke, Karl
Popper o Thomas Khun y sus estudios sobre esta disciplina pero, utilizaré este trabajo
para definirla y encuadrarla.
Partamos de un concepto base…
La Epistemología en una rama de la filosofía que estudia la forma de construcción de
conocimiento. Busca el grado de certeza y probabilidad de un conocimiento en
específico, buscando la validación de aquél.
Evolución
En el siglo XVIII, la obra que mejor predice lo que será posteriormente la epistemología
es el Discurso preliminar a la Enciclopedia, de Jean le Rond D'Alembert. Escrito que, tras
la invitación de Denis Diderot, se publicó en 1751 al comienzo del primer volumen de la
Enciclopedia. Por su firmeza lógica constituye una síntesis de la concepción filosófica de
los enciclopedistas y de la fe racionalista del siglo XVIII. Reconociendo en Descartes al
fundador de la nueva metodología científica.
G.W. Leibniz (1646-1716) Después de diversos usos y su paso a caracteres latinos, usa
la expresión en su Introductio ad Encyclopaediam arcanam y la define como "ciencia de
lo que es y de la nada, del ente y del no ente, de las cosas y de sus modos, de la sustancia
y del accidente".
Emanuel Kant (174-1804) plantea una teoría del conocimiento que intenta acabar con
la polémica entre el Racionalismo y el Empirismo. El Racionalismo afirma que la razón,
al margen de la experiencia sensible puede llegar al conocimiento. El Empirismo, por su
parte, considera que el conocimiento se agota en nuestra experiencia, por lo que en su
máxima expresión llega al escepticismo total de David Hume.
Siglo XIX
Uno de los filósofos que marcó de manera trascendental la óptica y el discurso filosófico
en el siglo XIX y la manera dialéctica en el siglo XX fue Friedrich Hegel(1770 - 1831),.
Hegel asistió al seminario de Tubinga con el poeta épico Friedrich Hölderlin y el idealista
objetivo Schelling. Los tres estuvieron atentos al desarrollo de la Revolución francesa y
elaboraron una crítica de las filosofías idealistas de Immanuel Kant.
Así es que se concibe la ciencia como la investigación de las leyes que rigen los diversos
tipos de fenómenos, asumiendo la concepción positivista de ley como regularidad
empírica recurrente. Para los positivistas la ciencia produciría conocimientos válidos y
contrastables, siendo sus métodos y leyes poseedoras de un alto grado de abstracción
matemática propugnando sus conocimientos con carácter universal.
Siglo XX
En primer lugar, cabe destacar que el conocimiento científico no guarda relación cercana
con lo que es considerado sentido común, pues la distinción entre estos tipos de
conocimiento no es sólo de género. Hay profundas diferencias cualitativas que los
caracterizan como formas cognitivas que nada tienen en común.
Por lo tanto, el sentido común se caracteriza por una creencia en la capacidad del sujeto
en registrar los hechos tales como ellos son, no habiendo aporte del sujeto para con los
hechos.
Como resalta Marques Neto, el sentido común no tiene un “por qué” basada en una
sólida elaboración intelectual, pero en la opinión. El autor añade que el sentido común
es asistemático, no guardando relaciones más estrechas con otras formas de
conocimiento, siendo también eminentemente empírico, dado su línea práctica en el
sentido de que, no tiene mayor interés de construir teorías explicativas1.
De esta forma, el sentido común, propicio por el interés espontáneo del el saber
cotidiano, se limita, en el sentido de un mundo familiar cuyos límites serían una zona de
duda. A partir de esa la concepción de sentido común, muchos autores consideran el
conocimiento una actitud, una aspiración de buscar la verdad. Esta actitud parte del
reconocimiento de que el mundo familiar carece de explicación.
De ese punto de partida que irradia diversas formas de buscar la verdad, es decir, de
conocer, entre las que está la ciencia. Por otro lado, muchos autores critican el concepto
de sentido común, argumentando que parte desde el punto de vista científico.
Boaventura de los Santos observa que:
1
MARQUES NETO. op. cit., p. 46
común estuvo, pues, ligada al proyecto político
de ascensión de la burguesía, por lo que no
sorprende que, una vez ganado el poder, el
concepto filosófico de sentido común se ha
correspondido de forma desvalorizada como
significando un conocimiento superficial e
ilusorio. Es en contra dél que las ciencias
sociales nacen en el siglo XIX.”2
Para Bourdieu, "estos instrumentos hacen que corra un peligro permanente de error,
pues se arriesga a sustituir la doxología ingenua del sentido común por la doxología del
sentido común académico, que atribuye el nombre de ciencia a una simple trascripción
del discurso del sentido común”3.
Esas teorías, que quedan del sentido, se plasman en forma de dogmática jurídica,
profundizando el abismo entre la realidad social en que el Derecho pretende actuar y
las técnicas de actuación sobre esa realidad.
Se añade que la distinción entre las diferentes formas de saber está en reconocer los
límites entre lo conocido y lo desconocido, y la forma de aceptar el desconocido como
parte del proceso de conocimiento o como capaz de ser superado, alcanzándose,
definitivamente, la verdad. En ese punto, así como el conocimiento es una actitud, la
ignorancia también puede serlo, en la medida en que niega lo desconocido, o estanca el
proceso de conocimiento en un punto en que se atribuye como verdad irrefutable.
No es raro que se atribuya esta postura de opción por el desconocimiento como propia
del sentido común, pero también en la ciencia y en la filosofía es posible observar.
2
SANTOS, ed. Graal, 1989, p. 36-7.
3
BOURDIEU, op. cit., p. 44
de mediación entre el sujeto cognoscente y el objeto del conocimiento. El plan de la
realidad y el plan del conocimiento estarían tan juntos de manera que el objeto del
conocimiento no sería sólo la imagen del objeto, pero el objeto en sí, tenido como
totalmente preso al sujeto.
Asumiendo esa actitud, el sujeto entiende que no hay nada más que conocer y recurre
a creencias absolutas para justificar los fenómenos que observa. De este modo, el
dogmatismo se desvía de reflexiones epistemológicas, pues no observa el conocimiento
como problema.
El Positivismo y el Derecho:
Este modelo de racionalidad científica que niega el carácter racional a todas las formas
de conocimiento que no se guíen por sus principios
epistemológicos y por sus reglas metodológicas se extendió a las ciencias sociales
emergentes, siendo fundamental para la afirmación de esas disciplinas como ciencias y
reconocidas como tales.
Por lo tanto, para el positivismo jurídico, el objeto de la ciencia del Derecho es la norma.
Ahora bien, es importante tener en cuenta que la amplitud de la semántica de los textos
y sus posibles mutaciones no era tan difundida a la época del apogeo de la escuela de la
exégesis y del nacimiento del positivismo legal.
Conclusión:
Es sorprendente observar que estas teorías ejerzan aún una pequeña aplicación en la
práctica jurídica. Esto nos permite constatar cuán fuerte es la resistencia a superar el
modelo pasado de ciencia en el ámbito del Derecho, constituyéndose un sentido
comúnmente docto, refractario a los cambios.
Ellas son fruto superación del aislamiento del Derecho frente a las demás ciencias
sociales, buscando un diálogo multidisciplinario, que ha alcanzado una mayor
coherencia teórica al comprender factores sociales como esenciales para el concepto y
la validez del Derecho.
Sin embargo, estos enfoques teóricos todavía están lejos de la práctica, es decir, del
ejercicio del Derecho como técnica, todavía prevalece la perspectiva utilitaria que da al
Derecho cotidiano un aire de sentido común, sin embargo, un sentido con un pie en la
academia, travestido de la ciencia para conferirle aires de conocimiento superior.
No sirve conformar el conocimiento jurídico en una camisa de fuerza de una certeza fija,
inmutable y universal, si la realidad es vacilante y las verdades son subjetivamente
consensuadas.
Por otra parte, de nada sirve avanzar en las proposiciones teóricas que la epistemología
contemporánea trae al Derecho, si la práctica jurídica no las acompaña, prefiriendo
reproducir técnicas cuyas teorías que las fundamentan fueron, hace mucho, refutadas
o difícilmente puestas en jaque.
Se necesita adoptar el conocimiento como actitud para romper con los dogmas y los
enfoques científicos que - ante el marco de conocimiento que no las se consideran, a
menudo, no pasan de sentido común con el anillo de doctor.
Bibliografía:
5
BOURDIEU, op. cit., p. 49.
SANTOS, Boaventura de Souza. Introdução a uma ciência pós-moderna. Rio de
Janeiro: Graal, 1989, p. 36-7.
KELSEN, Hans. In: MACHADO, João Baptista (Trad.). Teoria Pura do Direito. São
Paulo: Martins Fontes, 2003.