El Fiscal
El Fiscal
El Fiscal
1. DEFINICION:
Del latn fiscalis, fiscal es un adjetivo que hace referencia a lo vinculado al fisco
(el tesoro pblico o el grupo de las entidades pblicas dedicadas a recaudar
impuestos). El fiscal, por lo tanto, puede ser el ministro que se dedica a cuidar e
impulsar los asuntos de inters para el fisco.
El fiscal tambin es el sujeto que acta como representante del ministerio pblico
en un tribunal. Cabe destacar que el Ministerio Pblico (tambin conocido como
Procuradura General o Fiscala General, segn el pas) es una institucin estatal
que representa los intereses de la comunidad a travs de la investigacin de
delitos y del resguardo de los testigos y las vctimas.
En el proceso penal la actuacin del Ministerio Fiscal tendr lugar con sujecin
a la Constitucin y dems normas del Ordenamiento jurdico, dictaminando,
informando y ejercitando, en su caso, las acciones procedentes, u oponindose
a las indebidamente actuadas en la medida y forma en que las Leyes lo
establezcan. En este sentido, la actuacin ordinaria del Fiscal en el proceso
penal consistir en el ejercicio de la accin pblica formulando acusacin y
solicitando la imposicin de penas al acusado. Ahora bien, esta funcin debe
estar presidida por los principios de su actuacin que son los de defensa de la
legalidad y los derechos de los ciudadanos entre los que se encuentran tanto
los ofendidos por el delito, como los imputados y acusados en un proceso
penal.[3]
En este proceso se tienen en cuenta las garantas que el Estado reconoce frente a
los ciudadanos de un determinado distrito. Por tanto, para conseguir las pruebas
incriminatorias y realizar toda la investigacin del caso, el fiscal no slo debe ser
conocedor de los mismos, sino que deber respetar con rigidez los derechos de
las personas a las que tome declaracin, as como tambin realizar de forma
limpia la adquisicin de las pruebas.
ste es uno de los principios fundamentales, el cual no debe obviarse, aun si para
encontrar la verdad hiciera falta pasar por alto alguno de lo estipulado por las
leyes. Cabe mencionar tambin que aquellas pruebas que hayan sido tomadas
fuera de lo dispuesto por la Constitucin, aun si fueran reveladoras, no sern
vlidas en dicho juicio.
As, cuando un fiscal toma una decisin desarrolla su propia filosofa acorde con
su forma de vida y su pasado histrico. Por eso el fiscal debe ser conciente de que
ante un conflicto de intereses no existe una nica solucin justa sino diversas
soluciones todas igualmente vlidas. De all que el fiscal del cambio debe tener
una definida concepcin del Derecho, y eso en un proceso de reforma, es un gran
activo fiscal. En efecto, entiendo que el Derecho no es una ciencia exacta como
las matemticas, es creacin normativa, con nutrientes de discrecionalidad
objetiva y relativa. Objetiva porque las decisiones deben adoptarse teniendo en
cuenta los valores sociales de la comunidad y no sobre la base de los valores
personales del fiscal. Discrecionalidad relativa porque el fiscal no puede hacer con
sus decisiones o con sus interpretaciones de la norma lo que quiera sin considerar
los lmites de la justicia. Actuar as sera caer en un imperialismo decisional o
interpretativo.
Ante esto, el nuevo sistema necesita de Fiscales con liderazgo. Para esto
debemos tener en cuenta que el lder no es el que dice yo soy el que manda, no
es el arrogante e inflexible en el control del personal, no es el que satisface sus
necesidades sin importarle el otro, que obliga con don de autoridad y se impone
con la fuerza hacia los dems. Lder no es el fuego imponente, que trasmite
miedo, tampoco es el manipulador que cree que su Despacho es la perfeccin de
las fiscalas. Lder es el hombre honrado, transparente, sencillo, capaz,
responsable, tico y valiente que no obliga sino persuade haciendo entender que
su poltica es estratgicamente adecuada para salir adelante desde una visin
comn.
Para liderar con efectividad el fiscal requiere cuotas potenciales de poder porque
la capacidad de influir en los dems a veces se ve mermada por la resistencia
pesimista y esttica de otros. El poder de autoridad, de fuente institucional,
comprende el derecho de pedir coercitivamente a los dems que se cumplan las
disposiciones, lo que dice relacin con que el Ministerio Pblico es un rgano
jerrquicamente organizado; luego tenemos los poderes de fuente personal como
el poder referente que sugiere un fiscal carismtico y dinmico que inspire respeto
por su credibilidad, y el poder de pericia que implica capacidad y experiencia del
fiscal que trasluce legitimidad profesional.
En este sentido, para adoptar una poltica pblica de gestin por objetivos se
tienen que dejar de lado los formalismos, los ritos burocrticos y las
subjetividades, que no se condicen con los criterios modernos de gestin. As, el
fiscal debe identificar cules son los objetivos de la organizacin y en base a ello
determinar, conjuntamente con sus subordinados, los objetivos de su Despacho
fiscal, evaluando peridicamente y al final del periodo, los resultados que se van
alcanzando y los alcanzados, respectivamente.