EL ROBLE, El Guayabo y Siqueros
EL ROBLE, El Guayabo y Siqueros
EL ROBLE, El Guayabo y Siqueros
Mazatln. Haba en el lugar varios robles (por cierto que el rbol bajo el cual se
construy la primera casa ya fue derrumbado). El doblemente abuelo proceda de
Malpica, Concordia.
Debido a la frondosidad de la sombra de los robles, se citaban en el lugar
los vendedores de bestias y ganado para hacer compra-venta de los mismos.
El sitio se fue poblando. Lleg una familia apellidada Canizales y en las
mrgenes del ro Presidio vivan varias familias desperdigadas. En Villa Unin se
registraron defunciones de personas que habitaron en esos lugares hasta 1860.
Poco a poco, muy poco, se formaba el conglomerado. Muchas personas
llegaban de los alrededores, principalmente de Concordia, como Victoria Paredes,
comerciante que se dedicaba a traer fayuca de Mazatln a El Roble. En este
puerto conoci a don Guillermo Haas, en la tienda antigua El nuevo mundo
(nuevo, ironas) y el seor fue a El Roble a comprar tierras y en 1901 fund el
ingenio azucarero.
Aqu se inici el arranque. De ser una mera aldea, pronto, El Roble se
convirti en comisara y Pablo Estrada, originario de Cacalotn, fue el primer
comisario y, modas antiguas, se paseaba muy respetable por las calles con la vara
de la justicia rozndole la frente. Se habla mal de l porque dicen que no usaba
bien la vara, es decir, la justicia. Lleg la familia Ibarra, los Zamudio de Tepuxta.
En 1910 lleg de Durango el primer profesor, Juan Arango (quiz pariente de
Pancho Villa) y despus Lupita Castao, Manuelita Len, uno apellidado Cinco
(terrorfico maestro a quien los alumnos le tenan pavor (cuando repetan la
numeracin, al llegar a cuatro se pasaban al seis porque al masto le mencionaba
que mencionaran su apellido) y Alfredo Mora.
En 1930, El Roble ya era sindicatura y Mercedes Ibarra fue el primer
sndico. En 1946, Fidel Reyes hijo fue nombrado, a la vez, primer juez Menor y
oficial del Registro Civil.
En 1960, el ingenio fue comprado por el entonces presidente municipal y
ahora gobernador del Estado, Antonio Toledo Corro, quien compr tambin lo que
se llam y se llama hasta ahora, la Hacienda, una hermosa vivienda ubicada en el
pueblo, cerca de la planta. La compra se la hizo a don Guillermo Haas, cuya
esposa ya haba construido el tempo del Sagrado Corazn, casi a un costado de
la hacienda.
Se introdujo la energa elctrica de las lneas que abastecen a Villa Unin.
En 1970 se abren pozos y se instala un tanque en una toma del poblado para
dotarlo de agua potable.
El Roble que fund en 1933. Una calle del poblado lleva su nombre y su
organizacin sindical es la seccin 16 del Sindicato de la Industria Azucarera.
Cuando era gobernador Manuel Pez se decret el fundo legal de El Roble.
Era el ao de 1935 y el 5 de marzo de 1938 se ampli de nuevo el ejido.
Haba paz y concordia, armona laboral, por un lado y lucha obrera por
mejorar las condiciones de trabajo en El Roble, contradiccin causante del
desarrollo, del crecimiento en el ingenio, sin embargo, su dueo, Guillermo Haas,
lo empez a desatender, enferm y quiso venderlo. Propuso a los trabajadores
que lo administraran a travs de una cooperativa pero no se pudo.
Al hacer su campaa para presidente municipal de Mazatln, Antonio
Toledo Corro supo de labios de los mismos campesinos del estado del ingenio y
opt por comprarlo. Lo hizo en 1960 y despus residi en el poblado, en una casa
cercana al ingenio llamada la Hacienda, la cual es an de su propiedad.
El ingenio se endeudaba. Financiera Azucarera reclamaba para el pago de
lo que se le adeudaba una produccin de 10 millones de kilos de azcar y
haciendo un mximo esfuerzo, slo se podan producir 8 millones.
La maquinaria no era capaz y faltaba agua. El ro Presidio no era suficiente,
ni el sistema de canales poda retener el agua suficiente como para alargar la
zafra por ms de cuatro meses.
Por falta de agua, el ingenio se
TOLEDO VIENE POR LA REVANCHA
Si la industria es la vida, deber sentirse, ahora al visitar la fbrica del
ingenio, que se est en un panten profanado. Las mquinas, poderosas aunque
hayan sido un ingenio de tercera, dejaron de funcionar y manos extraas se las
robaron, las desmantelaron hasta dejarlas en el primer grado de inservibilidad. Los
motores elctricos sufrieron el robo del cobre, la maquinaria qued inservible
porque le robaron el bronce. El saqueo ha sido brutal.
El Sindicato Nacional de la Industria Azucarera trat de evitarlo, pero no
pudo. Trat de evitarlo pidiendo a los extrabajadores del ingenio todava
sindicalizados, que cuidaran la maquinaria.
Juan Peinado, sndico de El Roble y uno de los 120 jubilados sindicalizados
que reciben una pensin quincenal de 2 mil 585 pesos, dijo que vigilan las 24
horas la fbrica, porque se tiene mucha confianza en que pronto volver a
trabajar. Los ayudan 30 extrabajadores ms que estn por jubilarse.
repleto de campesinos, pareca carnaval, y no era slo por el gusto de las carreras
de caballos, sino por la rivalidad existente entre El Pinto y La Reyna, entre La
Embocada y El Roble.
El Pinto no llegaba. Dos caballitos viejos iniciaron las carreras. Un hombre
semi tomado, con un abanico de billetes de 500 pesos en su mano, gritaba:
2,500 al Pinto!.
Ac llega. El Pinto estaba ah, entr dando salto suaves, seguido por una
nube de chiquillos que no desapareci hasta que el sol se ocult, cuando termin
la carrera.
Hubo una segunda carrera.
Se haba ingerido mucho alcohol. Un grupo musical que pareca conjunto
norteo, complaca a un grupo de personas, mientras una candidata a reina del
carnaval de Villa Unin peda cooperacin.
El Pinto era paseado por el taste, calentndose, invitando con su estampa a
apostar a su favor y no haba quien lo hiciera a la yegua.
Se midi el terreno en que haban de competir: 300 yardas.
Todo listo. All vienen! La yegua sali primero. Ramn, el chiquillo de once
aos, de Malpica, se durmi un poco al arrancn, ms el caballo aceleraba su
marcha ante los azotes y no slo alcanz a su rival, sino que la dej como a tres
cuerpos de distancia.
El dueo de la yegua no se colg, pero perdi cinco mil pesos. Todo mundo
apost.
Qued claro. El Pinto derrot de nuevo a La Reyna. Ha tomado fama entre
la rancherada de los pueblos que se ubican por las orillas del ro Presidio y en las
serranas de Concordia este caballo corriente, pero bonito, que no ha perdido
ninguna carrera.
El dueo de El Gitano tomaba nota, pues El Pinto se ha convertido en un
buen rival de su caballo.
Cualquier da ser el encuentro.
hermana poltica Mercedes Mondragn de Jimnez, Antonio Ruiz y tres hijos, don
Alberto Zaragoza Avellana y su esposa Luz Osuna con tres hijos, y los dos
misioneros apellidados Nez.
La Embocada era un estero formado por la desembocadura del arroyo y el
antiguo cruce del ro, el cual estaba atiborrado de caimanes. Cuatro aos
permanecieron en la Embocada y debido a que no encontraron minerales, razn
que los llev a establecerse ah, fundaron entonces el pueblo de Siqueiros el 19
de marzo de 1756, originalmente con el nombre de La Peitas.
DE SIQUEIROS A SIQUEROS
Por una corrupcin fnica, el apellido Siqueiros de los fundadores del
poblado se transform en Siqueros. Se afirma que los fundadores de este pueblo
tienen parentesco con el muralista David Alfaro Siqueiros.
Los primeros pobladores de La Peitas se establecieron en la capilla del
pueblo que an existe, junto a la vivienda de doa Ramona Ramrez.
Una noche, al reunirse todas las familias en una enramada construida en la
capilla (las familias, de siete haban crecido a 35), a una sugerencia de doa
Mercedes Mondragn y de acuerdo con todos los concurrentes, al pueblo se le
bautiz con el nombre de San Jos de Siqueiros, el primero por ser el nombre
del patrn del lugar, como lo es hasta la fecha, y el segundo en honor del fundador
don Pedro Siqueiros Nez.
LEAN, MS NO ESCRIBAN
Todos los habitantes de Siqueros, entre los adultos, saban leer y la
mayora conoca oficios. Llegaron a esta tierra con la ilusin de encontrar
minerales en los cerros. No los hubo y s una flora abundante de maderas
preciosas, buenas tierras para el cultivo y buena pesca, con el peligro de los
caimanes y las nutrias, que tambin abundaban. De los animales obtenan pieles
para la confeccin de ropa.
Haba tambin cabras silvestres. Domesticaron algunas y tenan su ganado
caprino en lo que hoy se conoce como Cerro de los Chivos, donde encontraron
una cueva con jeroglficos grabados en las rocas, entre los que destacan un
caimn bien representado (estudiosos de la arqueologa se llevaron no hace
mucho estos jeroglficos).
El 9 de noviembre de 1767 qued terminada la capilla dedicada a San Jos.
Aqu se enseaba catecismo y a leer, pero por razones que se desconocen no se
enseaba a escribir. Tambin se verificaban bautismos y matrimonios.
El pueblo empez a crecer hacia el oriente, rumbo a la Loma de los
Tanques. Vivan de la agricultura y la fruticultura.
Haban perdido la comunicacin con los pueblos de los que procedan
porque su arquitectura era autosuficiente y empezaron a explorar ro abajo. Frente
a lo que hoy es El Bajo, encontraron un poblado abandonado llamado San Juan.
Tena muy pocos pobladores con mucho amor al terruo, pues la mayora lo haba
Parece que slo se vive para contar la vida. Ahora contarn su historia,
tambin gracias a las buenas obras de don Jos Bulnes Rodrguez.
marzo de 1751 llegaron a San Juan de Jacobo, pasaron por El Carmen (Tepuxta)
y por Cantarrana de los Resquisios (El Recodo), hasta establecerse en un sitio
junto a un arroyo al que llamaron La Embocada en 1752.
Los minerales movan esta
peregrinacin y como no los encontraron
en La Embocada, que era un estero
donde desembocaba un arroyo y el
antiguo cauce del ro, por cierto
atiborrado de caimanes, marcharon
hacia lo que hoy es Siqueros y al que
originalmente llamaron Las Peitas.
Las siete familias se convirtieron
en treinta y cinco ya en Peitas, y en una
reunin acordaron llamarle San Jos de
Siqueros. Eran estas familias Juan Ruiz,
esposa del jefe de la expedicin;
Francisco Siqueros Nez y su esposa
Soledad Mondragn con dos hijos, su
hermana poltica Mercedes Mondragn
de Jimnez; Antonio Ruiz y Cortina con
su esposa Margarita y tres hijos; don
Alberto Zaragoza y Avellana y su esposa
Luz Osuna con tres hijos y dos
misioneros apellidados Nez.
No inventamos nada. Jos Bulnes
Rodrguez nos brind estos datos que extrajo de un libro que ya desapareci.
SIQUEROS EN SU FUNDACIN
Esa pequea cofrada saba leer y saba de oficios y si la tierra no les fue
prdiga para alimentarles su ansia de acumular riquezas con los metales, les
ofreci a cambio madres preciosas, buenas tierras para el cultivo y buena pesca,
animales de los que obtenan piel para la confeccin de ropa y tambin animales
peligrosos como las nutrias y los caimanes.
Haba tambin cabras silvestres. Domesticaron algunas y tuvieron ganado
caprino que pastoreaban en lo que se conoce como Cerro de los Chivos, donde
haba una cueva de jeroglficos que fueron sustrados por supuestos estudiosos de
nuestros ancestros.