FIGUERAS, M. Sobre La Literatura Fantástica
FIGUERAS, M. Sobre La Literatura Fantástica
FIGUERAS, M. Sobre La Literatura Fantástica
http://www.escritoresdelmundo.com/2015/07/sobre-la-literaturafantastica.html#more
Muchas gracias.
Sobre la literatura fantstica. Hiptesis, afirmaciones y sospechas, por
Marcelo Figueras
Hace una semana, una amiga me cont lo siguiente. Ocurri el da que fue a
colaborar con una actividad en el Espacio Memoria y Derechos Humanos,
donde antes funcionaba la ESMA. Al caer la noche, los empleados del lugar
empezaron a guardar sus cosas y comentaron que convena estar afuera antes
de las nueve, porque a esa hora "salan todos". Nadie dio explicaciones, pero a
mi amiga le qued claro que, cuando decan "todos", no se referan al resto de
los empleados. Ms bien hablaban, con naturalidad, de los espectros del lugar.
Mi amiga es escritora y, sospecho, me cont esto porque piensa utilizarlo
en su prxima novela, que ser me lo confes "una de terror". Y yo se los
cuento a ustedes porque creo que ese futuro libro, como otros pocos que
florecieron en este tiempo, representa un signo de salud.
Durante los ltimos cuarenta aos, la mayora de los escritores argentinos
hizo lo mismo que los empleados del Espacio Memoria y sali de la literatura
antes de que diesen las nueve. El imperativo era rajar antes de verse obligados
a acercarse a los espectros, a confrontarlos, a interrogarlos. Buena parte de la
crtica apoy esta huida, acuando un dictum: si el relato no trasciende la
burbuja del yo del escritor y se la hace difcil a los lectores, es bueno. Y las
grandes editoriales optaron por el laissez faire, porque vender autores
argentinos no constitua una prioridad. Para qu preocuparse, cuando sus
ganancias estaban aseguradas por los prximos Follett, Coelho y compaa?
animales y Watchmen (y
pesar
de
ser
................................................................................
Juan
Salvo
de El
eternauta.
Nuestra
pica
no
es
individualista
ni
aristocratizante sino comunitaria, porque aprendimos por las malas que aqu
nadie salva ni se salva solo. Por eso, a pesar de que est llena de personajes
que son hroes de profesin, los hroes esenciales de El Rey de los
Espinos vienen de los mrgenes de la sociedad, flores que alguien ech a
los containers de basura: Milo y sus amigos encuentran natural poner el pecho
porque, siendo jvenes y pobres en este pas, estn acostumbrados a arriesgar
el cuero a diario. CF. OYOLA
Espinos es mi modo de decir: aqu tambin podemos hacerlo. Y ms
todava: debemos hacerlo. Porque, aunque disfrutemos de relatos que nos
llegan desde lejos, necesitamos historias que canalicen nuestra sensibilidad,
nuestra experiencia, nuestra forma de entender el mundo. A m Tolkien me
encanta, pero hay cuestiones sobre mi circunstancia vital para las que El seor
de los anillos no ofrece pista alguna. Nuestra realidad ha sido y sigue siendo
tan demencial, que slo podemos metabolizarla mediante una literatura
fantstica propia.
Una de las escenas que ms quiero de El Rey de los Espinos pone
elementos originales de otras eras y lugares cascos vikingos, sables, arpones
balleneros a disposicin de la Murga de los Renegados que componen mis
hroes. Hablo de villeros con espadas, de bolivianos pobres con Winchesters,
de paraguayos indocumentados con picas. Me gusta porque expresa algo
esencial para m como escritor y lector, pero tambin como latinoamericano. Es
lcito tomar elementos de otros lados, en tanto nos sirvan, pero ojo: si no
permanecemos en la ESMA despus de las nueve estaremos fritos, porque
nunca se gana la batalla que no se da.
Marcelo Figueras
Buenos Aires, EdM, julio 2015