Desmontando La Siciliana - Jesus de La Villa
Desmontando La Siciliana - Jesus de La Villa
Desmontando La Siciliana - Jesus de La Villa
la Siciliana
Jess De la Villa
lndice General
Introduccin
9
16
20
28
31
39
61
68
81
1 32
1 40
1 43
1 S3
1 61
1 82
202
210
21S
243
274
302
ndice de variantes
332
Introduccin
Introduccin
Introduccin
rizarse con las ideas tcticas, las trasposiciones, y los planes estratgicos que se
producen de forma ms frecuente.
Cada defensa tiene su captulo, aunque algunas de ellas tienen mucho menos
material. En mi opinin, los sistemas de preparacin y de competicin actuales
(estoy pensando ahora sobre todo en los torneos abiertos y de ajedrez activo) obli
gan a un conocimiento preciso de determinadas refutaciones y favorecen el uso de
variantes sorpresa, habiendo muchas de estas, que a pesar de su debilidad terica,
crean complicaciones casi insuperables en la partida viva.
Adems mi intencin ha sido, que el lector tenga un repertorio completo y por
lo tanto responder con claridad a la pregunta de que jugada hacer en todas las posi
ciones posibles.
Al principio y al final de cada captulo, presentamos unas breves secciones, que
pueden faci litar el estudio del material, aunque no son en rigor necesarias para el
jugador experimentado.
Comienzan con el ttulo del captulo y con el diagrama que refleja la posicin
inicial a estudiar. Las estrellas son una valoracin algo subjetiva, que puede orien
tar a los menos expertos, sobre la importancia de la variante en cuestin, y a los
ms, sobre el respeto que el autor siente por cada variante. Tratan de evaluar, la
fuerza terica, la importancia histrica, la frecuencia de uso y las virtudes prcti
cas de una variante determinada y por supuesto cada jugador podra tener su pro
pia valoracin. En mi opinin hay muchas variantes infravaloradas en la Siciliana
(y unas pocas sobrevaloradas) y mi impresin al llevar adelante este trabajo ha sido
que casi cualquiera de ellas se puede jugar y crean problemas a las blancas, si estas
se proponen sacar ventaja.
La introduccin intenta orientar sobre los motivos de la variante elegida y su
relacin con otras variantes.
La historia es un pequeo homenaje a aquellos que han hecho ms por el
desarrollo de la variante, pero por cuestiones obvias de espacio, no puede conver
tirse en una investigacin profunda sobre el tema. Creo obligado hacer referencia
aqu al autntico padre de la Defensa Siciliana, Louis Paulsen ( 1 833-9 1 ) nacido en
Alemania y formado como jugador de ajedrez en los Estados Unidos. Paulsen
investig la mayora de las variantes importantes y comprendi el sentido de
contraataque que anida en esta Defensa. Es un resultado del flujo azaroso de los
acontecimientos que la Siciliana no lleve su nombre.
Introduccin
CAPITULO
10
Pa rtida 1 . 0 1
Santos-Jones
Correspondencia 1 981
l.e4 eS 2.fJfJ ff6
Tras 2 ... g6 3.d4 (D) y ahora:
11
12
...
13
4 ... cxd4
4.d4! ?
Y a hemos dicho que renunciamos a
extendernos en la refutacin oficial que
comienza con: 4.fJc3 e6 5.fJxd5 exd5
6.d4 fJc6 7.dxc5 t;!2xc5. Sin embargo
ofrecemos una lnea alternativa, para
los amantes de las posiciones con pen
aislado o sencillamente para los que se
conforman con una sana y mnima
ventaja posicional. 8.t;!2d3 ! ? (8.xd5 d6!
9.exd6 b6 oc como he sealado antes,
no veo claro como se refuta) 8 ... d6
(casi necesaria; 8 ... 0-0? 9.t;!2xh7+ ! )
9.exd6 0-0 1 0.0-0 xd6 l l .c3 ! .
Aumentar e l control sobre d 4 n o slo e s
l o ms natural sino tambin lo que ha
dado mejores resultados hasta ahora:
A) l l ...t;!2g4? 1 2 .t;!2xh7+ ! .
B ) l l . . .h 6 y ahora s i 1 2.t;!2c2 ( 1 2.e 1
t;!2g4; 1 2.a4 d4 ! ) 1 2 ...t;!2g4 1 3 .d3;!;.
C) l l ... e8 1 2 .a4 ! ? Una jugada
que prepara el paso de la dama al flan
co de rey, impide t;!2g4 y d4, y apoya
t;!2f4. Si las negras no presentan una res-
7.e4 d6
7. .. f5 Deja a las negras en una
posicin muy apretada. 8.e2 ! fJde7
9.fJc3 a6 1 O.h4 ( 1 O.t;!2g5 ! ? ) 1 O . . . b5
l l .t;!2b3;!;; Tal-Zaitsev, Chigorin mem
1 977.
8.exd6
Un intento interesante es 8.0-0
dxe5 9.fJxe5 ff6 (9 ... t;!2d6 1 0.fuc6;!;)
1 O.fJxc6 c7 (Timoschenko-Garca
14
...
1 5 .xc4
b4
1 6.e2
t;!2e7?!
( 1 6 ... xb2 !?) 1 7.fJd4 e5?! 1 8 .fJd5+
Jansa-Regan, Budapest 1 978.
ll... h6 Es una jugada muy natural
que no tiene antecedentes y que puede
ser un buen argumento a favor del
orden 1 O.fJc3 a6 l l .t;!2g5.
12.fJc3 a6 13.:11fdl !
E l detalle de colocar esta torre se
ver en el comentario a la jugada 1 5 .
13 ... c7 14.fJe4!?
Un intento muy concreto de crear
problemas, tanto ms serio cuanto que
ha tenido xito en una partida moderna
por correo.
14 b5
...
15
...
en d5 .
18.ftacl
2t ... h6
Luis Santos premia a esta jugada
con dos admiraciones y la continuacin
de la partida le da la razn, pero si no
logramos entender el motivo del todo
nos podemos conformar con 1 8.cxb5
axb5 1 9.t;!2xb5, ganando un pen por
una compensacin bastante escasa.
1 8 b4?!
Estadstica:
Las variantes 2 ... h6 y 2... c7 cuentan con muy pocas partidas. Por su parte 2 ...fJf6
con mas de 4000 partidas da un "normal" 56% a las blancas. La variante pro
puesta a partir de 4.d4 supera ligeramente estos resultados con un 59%.
Esquema Resumen: t .e4 e S 2.fJf3
- 2 ... g6 Traspone a los captulos 6 o 1 8
- 2 ...h 6 Con e l tratamiento Alapin 3.c3, resulta inofensiva ;t
- 2 ... c7 Las blancas pueden elegir entre el tratamiento Alapin o trasponer a la
Taimanov con 3.fJc3
- 2 ... ff6 3.e5 fJd5 4.d4 ! ? Asegura una ligera ventaja posicional ;t
CAPTULO
1 .e4 eS 2.tl)f3 b6
Valoracin **
Historia
Se trata de una variante relativa
mente "moderna". No existen precur
sores ni verdaderos especialistas. Tal
vez fue introducida por varios jugado
res georgianos (Alexandria) y relativa
mente popularizada por Psakhis en los
aos 80.
Ideas
Pa rtida 2 . 0 1
Panchenko - Psakhis,L
Vilnius 19 78
5 ...d6
La principal idea es cas1 s1empre
sacar al rival de la teora y llegar a una
posicin siciliana ms o menos tpica.
2 . b6
17
..
2 b6
18
...
6.5!
U na jugada muy molesta que
dificulta el desarrollo li bre de las
negras.
8 e2 bS 9 t;!2d5 eS
.
1 0.0-0
[ I O . . . b4
1 1 e6?! (D)
.
Un sacrificio de consecuencias
imposibles de calcular en una partida,
2. b6
19
..
Estadstica:
Sobre una base de 600 partidas las negras obtienen en la variante 2 ... b6 un
mediocre 4 1 % de los puntos. La estadstica sobre nuestra recomendacin es dif
cil de hacer globalmente puesto que proponemos una jugada diferente contra
cada alternativa de las negras, pero una estadstica conjunta de un archivo con
solo las variantes recomendadas da un resultado del 6 7%.
Esquema Resumen: l .e4 eS 2.f3 b6 3.d4 ed4 4.4 t;!2b7 s.3
5 ... e6 6.b5 Las negras estn al borde del desastre
5 ...6 6.t;!2f4 Las negras tienen muchos problemas
5 ... a6 6.t;!2g5 Las negras tienen problemas para completar el desarrollo.
5 ... d6 6.t;!2g5 Lo mismo que en la linea anterior.
5 ... g6 6.t;!2e3 Las blancas montan un esquema Rauzer en buenas condiciones.
CA PTULO
Valoracin
**
Historia
Como muchas otras ideas en las
aperturas el precursor de esta fue el
Gran
Maestro
polaco
Saviely
Tartakover que la estren en su match
con Reti en 1 920, pero probablemente
Tartakover no haba descubierto las
ideas bsicas. Fue el jugador Belga
Alberic O'Kelly el que la analiz y la
comenz a practicar en los aos 50.
Gracias al efecto sorpresa y a la efica
cia de su idea bsica (que comentamos
ms adelante) la variante logr buenos
resultados durante algn tiempo e
2 . a6 Variallfe O'Kelf.v
..
Pa rtida 3 . 0 1
Borkowski,F - Nazarov,A
Katowice op 1 990
3 d6
21
22
2 . a6 Variante O'Kelv
.
4.d4 t;!2g4 ( D)
6.gxt3! dxcS
Intentando hacerse fuerte sobre las
casillas negras, especialmente d4. La
alternativa no es mejor. 6 ... aS 7.3 !
dxcS (7 ... xcS 8.t;!2e3 aS 9.b3)
8.b3 ! 7 9.xb7 l:!b8 I O.c6 e6
l l .a4 Antonio-Tu Hoang Thai,
Vung Tau 2000. La compensacin por
el pen es casi i nexistente.
Lo ms interesante. Mucho ms
pasivo es 4 ... 7 S.3 e6 6.t;!2e2 7
7.0-0 g6 8.t;!2e3 t;!2e7 9.d2 0-0
1 OJad 1 Las blancas tienen ms
espacio y desarrollo pero la posicin
negra es slida y no es fcil concretar.
1 0... b6 l l .b3 c7 1 2.wh l t;!2b7 1 3 .dS es
14.g 1 ;t;
Timmermans-Frankli n,
Londres 1 997. 4... cxd4 S.xd4 f6
6.3 c6 normalmente acabara traspo
niendo a la variante de la Inglesa cita
da en el comentario anterior.
S.dx cs t;!2xt3
2 a6 Variante O'Kelv
...
Partida 3.02
Kondali - Letic
23
24
25
6.W e5
7. f5 d5
26
2 . a6 Variante O'Kelv
..
1 5.i!xb7 h4
Lo ms frecuente. Para los amantes
de la tranquilidad ofrecemos una
variante ms posicional cuyo nico
defecto es la existencia de alfiles de
diferente color. 1 O.g5 ! ? e7 l l .xf6
xf6 1 2 .d3 d7 1 3 .h5;l;.
to ...xd5 t t . b4
Sin esta presin sobre c3 sera
27
1 8 1\!Jg4
Estadstica:
Sobre una base de 5400 partidas las negras obtienen en la variante O' Kelly el
47% de los puntos. En la variante 3.c4 elegida como repertorio en nuestro libro
el porcentaje de las negras es bastante peor, el 39%.
Esquema Resumen: l.e4 eS 2.flf3 a6 3.c4
- 3 ... g6?! Dudosa. Maroczy agobiante
- 3 ... b6 Lgica. Erizo resistente ;!;
- 3 ... e6 4.flc3! Una Paulsen algo peor ;!;
- 3 ... d6 4.d4 fld7 Mucho espacio para las blancas ;!;
- 3 ... d6 4.d4 t;!2g4 5.dc5 Incisiva, pero floja
CAPITULO 4
1 .e4 eS 2.ttlf3 ttlc6 3.d4 cd4 4.ttld4 d5
jugadas
Valoracin *
Partida 4 . 0 1
Korchnoi, V - Reshko,A
Leningrado 1 951
otras
S.exdS!
Los finales resultantes de: S.xc6
bxc6 6.exd5 xd5 7.3 o bien; S.t;!2bS
dxe4 6.c6 xd l + 7.wxd l a6 8.t;!2a4
(8.ru4+ axb5 9.b5 t;!2g4+ l O.we l O
O-O es incluso ms prometedor para las
negras) 8 ...t;!2d7 9.3 t;!2xc6 l O.t;!2xc6+
bxc6 l l .e4 son prcticamente nada,
como se han encargado de descubrir
muchos seguidores de recetas tericas,
para su frustracin.
29
30
CAPITULO 5
1 .e4 eS 2 .tl)f3 tl)c6 3.d4 cd4 4.tl)d4 VMb6
Varios rdenes de jugadas
Valoracin ***
Historia
U na vez ms el precursor de esta
idea fue el padre de la Defensa
Siciliana, Luis Paulsen, pero luego
qued olvidada hasta la dcada de 1 960
cuando varios jugadores soviticos,
como Stein, Suetin, Gufeld empezaron
a fijarse en ella y la usaron de manera
ocasional. Despus vino la etapa
Armenia cuando Akopian, Anastasian
y otros jugadores de esa nacionalidad
hicieron de 4 ... b6 su principal caballo
de batalla. Actualmente su popularidad
ha disminuido sin que se pueda argu-
32
Pa rtida 5 . 0 1
Topalov,V - Morozevich,A
Dortmund 2001
33
7../iJ.e7
Cuando se conoce la idea blanca (lo
que suele ocurrir la segunda vez que te
juegan la variante) la tentacin de
impedirla con la inmediata retirada de
la dama a c7 es casi irresistible, pero
tambin existen otras alternativas:
7 c7 (impide \.W4) 8.gS. Que
esta jugada no se haya empleado an da
una idea del terreno virgen que pisa
mos. Se puede tambin intentar 8.e3 y
jugar un desarrollo similar al del ataque
ingls que tampoco se ha ensayado.
A) 8 ... a6 da ms opciones a las
blancas pero debe trasponer 9.f4!
(9.xf6 gxf6 1 O.hS la dama blanca
esta muy bien situada aqu en estas
estructuras pero... 1 O ... d6! 1 1 .0-0-0
eSoo) 9...e7 trasponiendo (tras 9...d6
1 O.c.tixf6! y ahora si 1 O ... gxf6 l l .hS;!;
con idea de fS-fxe6 ).
8) 8 ... d6 9.f4 Tambin debera
trasponer.
8.f4! o-o
Tratar de impedir eS puede ser peor:
34
8... e5 y ahora:
A) 9.e3 Y!ld8 1 O.g4 ( 1 O.e2;!;)
I O ... d6 1 U!gl h6 no es del todo claro.
B) 9.g5 ! d6 1 O.xf6 xf6
( 1 O ... gxf6 es demasiado fea) l l .Y!Ixd6
e6 1 2.Y!/c5 ! y la compensacin no
parece suficiente.
13.Y!Id3!
Forzando el paso al final que no
slo no es del gusto de Morozevich,
sino que es muy precario para las
negras con menos espacio y un caballo
mal colocado en g6.
2 1 ...e5 22.c4;!;
Aprovechando de inmediato la
debilidad creada en la diagonal a2-g8.
Otra forma de hacerlo era 22.bl !?.
hS?!
26.\!;>b l
imprescindible]
[Demasiado activo. 26 ... t;!2g4 27.t;!2a6
xe4 28 .t;!2d3 ee8 29.Hg l t;!2e6 30.t;!2b5
;!;; 26 ... dxc5 2H:Jxc5;!;] 27.Hc l t;!2b7
28.t;!2c4 [28 .g3 ! h4 29.f5] 28...Hxe4
29.t;!2dS 7! [29 .. .ee8 30.cxd6 d8
3 l .d7 ] 30.t;!2xti+ [30.t;!2xe4 t;!2xe4+
3 l .wa2 ] 30 ... \!;>xfi 31 .cxd6 dS
32.cS 3+? [32 . . . Hxe2 33 .Hxe2
t;!2xd6 34.Hd 1 ] 33.bxc3 bxc3 34.Hxc3
Hb4+ 3S.wa2 t;!2e4 36.wa3 as 37.7!
H8b7 38.xf8 t -o
Partida 5 . 02
Votava,J - Voloshin,L
35
6.t;!2e3 ! \Wxb2
La continuacin por principio, pero
tambin casi la nica en vista de las
siguientes variantes: 6 ... g4 7.d5
e3 8.fxe3 ! (se ha jugado mucho
8.xb6 llevando a posiciones de doble
fi lo, aunque sin necesidad porque
8.fxe3 da una gran ventaja) 8 ...\Wa5+
(8 ...\Wd8 9.b5-r) 9.b4 ! xb4 1 0.b3 !
c2+ l l .wt2-r. Las blancas ganan
como m nimo una pieza. 6 ... xd4
7.t;!2xd4 \Wa5 8.e5 d5 9.t;!2c4 b6
l O.t;!2b3.
36
10 ...\!lxe7! 1 1 .4 l!ld8
l l ... e5 ! 1 2.b5+ l!lb8 favorece a las
negras.
37
I O.o-o-0 d6
Seguramente es mejor 1 O . . d5 ! .
Ahora las blancas pueden elegir entre
dejar a su rival con un pen aislado, en
cuyo caso est muy activo, y tomar
espacio con l l .e5, pero en ambos casos
las negras lo han hecho bien:
A) l l .exd5 xd5 1 2.xd5 exd5
1 3.c3 e6 1 4.Y!If3 !:ac8= Motylev
Polgar, Ohrid 2002.
B ) l l .e5 7 1 2.f4 a6 1 3.Y!Ih5 f5
1 4.d3 d4oo Mulgyar-Yennolinsky
USA 2002.
.
25.hxg6!!
xh3
[25 . . . xc2+
26.Y!Ixc2! xc2 27.e6+ wf8 28.llh8#]
26.!:xh3 [26.Y!Ih5 !] 26...g5 27.4 4
28.bc5 1 0
-
38
Estadstica:
Sobre una base de 3200 partidas las negras obtienen e n la variante Y!lb6 un exce
lente 50% de los puntos. En la variante 6.a3 recomendada la estadstica no es
relevante al basarse sobre 1 20 partidas con un resultado del 57%. La variante
6. e2 sobre 1 00 partidas obtiene un 61 %.
Esquema Resumen: l .e4 eS 2.0 ft6 3.d4 cxd4 4.xd4 Y!lb6 s.b3
- 5 ... e6 6.3 t;!2b4 7.t;!2d2 6 8.Y!Ie2 Queda mucho para la investigacin ;t
- 5 ... e6 6.3 t;!2b4 7.t;!2d2 f6 8.t;!2d3 Una idea nueva interesante ;t
CAPITULO
40
Pa rtida 6.01
De la Villa - Ponomariov
Guardamar 1 99 7
s ...f6?! (D)
6 bxc6
7.e5 8
Como ya hemos sealado existe la
variante 7 ...S!? pero no vamos a
profundizar en ella porque puede evi
tarse jugando 6.c4.
41
9 ... a5 1 0.0
Aqu tambin es posible jugar la
continuacin 1 0.0-0 (}JxeS l l .(jJxeS
xeS 1 2 J::1e 1 g7 pero las negras
pueden ofrecer una tenaz resistencia
con su pen de ventaja. La jugada de la
partida les deja muy pocas opciones.
42
l l .xf7+!
Naturalmente las blancas no
queran entregar un pen. Con esta
sencilla maniobra consiguen una con
siderable iniciativa y el juego de las
negras carece de perspectivas.
16 ...b6 17.g4!
Era razonable mantener la presin
con 1 7.h4 ! ? con una clara ventaja.
13 ... d5
Una jugada con virtudes prcticas.
Las negras admiten su mala posicin
pero tratan de poner una barrera por las
casillas blancas y reducen todo su
contrajuego a la columna "b". La ven
taja blanca no est en duda.
13 ...g5! ? es un intento de cambiar el
signo de los acontecimientos y lleva a
posiciones menos definidas pero las
blancas no pueden quejarse. 1 4.xg5
( 1 4.c4+ Wg7 1 5 .f4 ! ? con ataque)
14 .. .!:tg8 1 5 .e3 !:txg2 1 6.0-0-0;
13 ... d6? 1 4 .xf6 exf6 1 5 .0-0-0+-;
13 ...Hf8 14.o-O-O wg8 1 5 .Hhe l .
14.o--.-0 5 1 5.f3!
Mejor que ganar calidad por medio
de 1 5.g4 xg4 1 6.xh8 !:txh8 con algn
contrajuego.
1 5 ... h5 16.Hhel
26...gt+ 27.wb2 wd7 28.e5?!
Ahora la opcin de ganar calidad es
43
6 4:lf6
.
..
Pa rtida 6 . 02
Tukmakov,V - Kaplan,l
Madrid 1 973
7Jk4 d6
44
8.0 b6?!
Una continuacin ambiciosa, ctual
mente en desuso, que prcticamente
obliga a las blancas a entregar un pen.
Es la nica que da cierta independencia
a la lnea 7 ... d6.
8 o--o Traspone al Dragn normal.
8. !.tid7 Otra jugada que tambin
9.f5 !
Las blancas estn obligadas a entrar
en las complicaciones. Se ha intentado
simplificar la tarea con 9.!.tib5 pero no
se obtiene nada despus de 9... c7=.
Se ha recomendado y jugado
l l .Wd2! ? pero la jugada de la partida es
mucho ms natural y mejor.
l l . flxdS 12.xd5
45
14... h5
14... h6 Parece la nica alternativa
lgica, porque permitir la instalacin
del alfil blanco en h6 resultara muy
molesto. 1 5Jb 1 f6 1 6Jb3 a5 1 7 .b2
(b7 es una amenaza) 1 7 ... c7 1 8 .f4
l:fu8 1 9.e5 dxe5 20.xc6 xc6 2 l .fxe5
la compensacin blanca vale ms que
un pen. 2 l ...f8 ( 2 l ...f5 22.e6+ l!lg8
23 .e5 a8 24.d4 h7 25.xf5 ! -r)
22.exf6+ exf6 23 .c3 e8 24.c7+ d7
25 .xa7 c8 26.xb7 (26.xb7 !)
26 ... xc7 27.xc7 f7 (Gulko
Steinberg, USSR 1 967) y ahora con
28.c3 ! las blancas mantendran una
cierta ventaja.
I S.bl as
46
16 e6?
..
2 l .exdS
2 l .e5 f5 22.l1t2 seguido de l1fb2 es
una alternativa que deja a las negras sin
contrajuego.
8.0-0!
Necesaria
ples "trucos".
y las blancas
flxe4 9.flxe4
47
...
..
I O a6
..
9.b3 c7
L a retirada d e la dama a esta casilla
permite un tema, entre tctico y
estratgico, que dificulta notablemente
el desarrollo de las negras. Claro que la
retirada a d8 habra regalado un tiempo
a las blancas y a otros lugares no es
posible ir. 9 b4 da un buen resultado
segn mi base de datos, pero yo no me
fiara. 1 O.d3 d6 l l .f4; 9 d8
1 0.g5 a6 ( I O ... d6 I I .!!e l ;!;) l l .a4 b4
1 2 .e2 d6 1 3 .d2 b6 1 4.a5; Lupo
Ceterski, cr. 1 998. 9 h5 1 O.e2+-.
.
..
I O.gS! (D)
Esta jugada es la clave del tema
48
ro
l l .e2 e6! ?
13.a3
Elimina radicalmente el salto del
caballo blanco, pero hace otras conce
siones, sobre todo la debilidad de la
casilla d6, que las blancas van a explo
tar. En caso de l l ... bS la retirada pre
via del alfil ha habilitado a las blancas
para jugar 1 2 .a4! con gran efecto
1 2 ... b4 1 H X15 e5 es casi obligado
entrar en las complicaciones ( 1 3 ...xd5
1 4.exd5 e5
1 5 .d2; 1 3 ... d8
1 4.xf6) 1 4.f4! xe4 1 5 .f3 c4
1 6.g3 a5 1 7.b6 ( 1 7.e7+! es una
alternativa segura si se percibe como
poco clara la ganancia de calidad;
1 7 ...1Yh8 1 8J:!e l ) 1 7 ... a6 1 8.xa8
xa8 1 9.l::[e 1 d5 20.h4;1;; Arizmendi
Braga, Mislata op 2000.
l l ... h6?! Tampoco es una solucin
ya que el enroque negro queda dema
siado expuesto. 1 2 .e3 b5 1 3 .d2 1Yh7
( 1 3 ... b4 14.5 e5 1 5 .xf6) 1 4.a4
b4 1 5 .5 d5 1 6.exd5 5 1 7 .c5 d6
1 8 .xb4.
12.d2!
Previniendo el rpido avance d5
que podra liberar las piezas negras "de
golpe". 1 2 .a4? ! d5 ! 1 3 .xf6 x f6
1 4.exd5 c3 ! 1 5 .bxc3 exd5=.
1 2 ... b5
Ahora por el contrario 1 2 ... d5 se
encuentra con 1 3 .f6 f6 1 4.exd5
xc3 1 5 .xc3 con ventaja debido a la
13..Jb8 14J'!fdl
Las negras intentan obtener algn
contrajuego, an a riesgo de debilitar su
posicin. Es una decisin lgica, en
vista de lo problemtico que resulta
hacer cualquier cosa.
16 e5 1 7.g5! d6
.
1 8.a5 e6 19.b3
Preparando el uso de la casilla c4.
49
Partida 6.04
Jaracz,P Agdestein,S
-
9.o-o!
Esta es mi recomendacin. Es cier
to que ahora las blancas renuncian a su
plan ms frecuente, basado en el 0-00, pero lo radical de la jugada 9... a5 lo
justitica con creces.
50
9 ... d6
Al principio la jugada preferida era
9... a4 pero luego las negras fueron
comprobando lo desagradable de la
posicin resultante por culpa de los
huecos creados en la columna b.
Actualmente la jugada de la partida es
la ms popular, pero en mi opinin las
debi lidades en b6 y b5 no estn sufi
cientemente justificadas. Veamos:
9 ... a4 1 O.a4 e4 l l .b5 ! (la
debilidad de las casillas b5 y b6 queda
al descubierto) con varias opciones:
A) l l ...d6 1 2 .t;!2b6 d7 1 3 J!e l ! f5
1 4.7 !!xa4 1 5 .t;!2xa4 t;!2xb2 1 6.g4 !
(previamente recomendada por NataO
1 6 ... e5 1 7.!!bl t;!2c3 (Kosmo-Hume,
Espoo 2000) y ahora 1 8 .f4 ! xf4
1 9.5 e5 20.!!xe4 xe4 2 l .c3.
B) Se ha recomendado el sacrificio
de calidad tras l l ... !!xa4, pero en mi
opinin no es suficiente. 1 2.t;!2xa4 t;!2xb2
1 3 .!!b l t;!2g7 1 4. f3 a5 1 5 .t;!2b3 3
1 6.xc3 xc3 1 7.e l ; Bologan-Katz,
Bastia op 1 998.
C) l l ...!!a6 1 2.c4! (impidiendo d5)
1 2 ... d6 1 3 .e2 f6 1 4.h3 ! y ahora
impidiendo g4. Las piezas blancas
van tomando posiciones centrales y las
negras estn obligadas a una posicin
ms pasiva. 1 4 ... t;!2e6 1 5 .!!ad l b8
1 6.b6! !!d8 ( 1 6 ... 7 1 7.d7 t;!2xd7
1 8.c5) 1 7 .5 ! Nataf-Balduan, Biel
1 999.
l l .gS
l l .t;!2d2, o incluso l l .t;!2c 1 son alter
nativas de valor similar, poco explora
das por lo moderno de la variante.
l l ... h6 1 2.t;!2d2
1 2 .t;!2h4 g5 1 3 .t;!2g3 Tambin es
prometedor, aunque las negras tienen
tantos huecos que es dificil ocuparlos
todos.
t 2 wh7 t3.h3
13 ...ge5 14.a4
Las blancas evitan los cambios de
piezas que aliviaran la posicin negra
y ocupan de inmediato uno de los
51
14... f5?!
Esto debilita ostensiblemente la
posicin y deja la batalla terica apla
zada para posteriores
partidas.
14 ... 7!? es el plan lgico. En este
caso las blancas pueden jugar 1 5 .c4
para reciclar el a l fil ( 1 5 .e3 5
1 6.c4;;1;;, para contestar a f5 con c5,
parece mejor) 1 5 . . .b6 1 6.e2 f5
1 7.exf5oo pero las piezas negras son
entonces muy activas.
22.f4
22.h4! es el tratamiento ms lgico
para luego jugar f4 expulsando el
caballo que es la nica pieza negra que
sostiene la posicin. 22.Had 1 !?.
42.Ha8+-]
52
8 ... a5
Un intento ms preciso de evitar el
0-0-0 del blanco, aplicado una vez que
el caballo no puede retirarse a b3
ganando tiempo. Es una lnea bastante
popular que suele conseguir el objetivo
53
9.f3! (D)
9...d5
Las negras pueden buscar un rpido
dS o aceptar la trasposicin al captulo
54
Pa rtida 6.06
Topalov,V - Tiviakov,S
55
56
l l .t;!2xd4 bS (D)
1 2... a5
12.h4
Esta es la jugada principal y mi
recomendacin. Sin embargo hay una
alternativa que me parece interesante,
para usar dependiendo del estilo propio
o del rival. Admito que no da casi nada,
13.a4 bxa4
1 3 ... b4 No es tan mala como puede
parecer por su escasa aparicin en la
prctica. 1 4.fld5 flxd5 1 5 .t;!2xd5 );tc8
1 6.t;!2xg7 ! ( 1 6.h5 );txc2ao) 1 6 . . . wxg7
1 7.h5;t y las negras tienen que elegir
entre la fea 8 o dejar a la dama
blanca entrar en h6.
14.xa4 eS
Esta es la antigua lnea principal.
Tras la partida del texto, el inters ha
cambiado a 14 ...e6 pero en mi opinin
las blancas tienen muchas opciones
interesantes aqu. 1 5 .b6 (el cambio en
e6 seguido del o--o no ha dado los
resultados deseados y adems en ese
caso las blancas pueden abominar de su
pen en h4. Con todo deseo "recordar"
una idea ya recomendada, que no ha
tenido confirmacin prctica: 1 5 .e6
fxe6 1 6.0-0 i!b8 1 7 .b3! ?;!; esta es la
jugada, con la intencin de seguir con
b2-c4. Me parece que las negras
tienen todava que demostrar que estn
bien aqu) 1 5 ... i!a6 ( 1 5 ... i!b8 parece
ms activa, pero gasta ms tiempos y
ha dado peores resultados: 1 6.d5
xd5 1 7.exd5 i!bS 1 8.i!a4 c7 1 9.h5
i!a8 20.hxg6 hxg6 2 l .g4 con peligrosa
iniciativa. Hort-Forintos, Atenas 1 969)
1 6.d5 xd5 1 7 .exd5 c7 Hasta ahora
nadie ha jugado ni se ha preguntado por
ninguna otra jugada.
Es tan evidente que c7 es nica?
No lo creo, las negras han seguido el
carro de los buenos resultados, que en
mi opinin, de acuerdo con Rogozenko
no se corresponden con la posicin. El
pen de a5 es dbil y las blancas pue
den tambin crear amenazas en el lado
del rey y pasar su torre por la cuarta. Mi
evaluacin es de ligera ventaja, aunque
si no se es enrgico, un final de alfil
malo contra caballo les amenaza.
1 8 .i!a4 Natural y til (merece la pena
citar una oscura partida por correspon
dencia: 1 8.g4 e5? ! 1 9.dxe6 i!e8 20.\Yd 1
fxe6 2 l .h5 1Yf7 22 .hxg6+ hxg6
57
58
1 9.xb4
1 7 b4?!
22 fJh5?!
23.Hc l !
Aprovechando e 1 defecto del
prematuro cambio de alfil en b3 .
Podemos decir que la batalla terica ha
finalizado a favor de las blancas y la
mejor confirmacin es que nadie ha
repetido hasta aqu con las negras.
23 ...f5
Tiviakov analiza varias alternativas,
pero todo se resuelve siempre con las
entradas en sptima o en octava de las
torres blancas, la ocupacin de la
casilla d5 y el cambio oportuno del alfil
por el caballo negro. Las variantes
siguientes son simples: 23 ... Hb7 24.Hc8
Hxc8 25 .c8; 23 ...f4 24.t;!2xf4 exf4
(24 ...Hxb6 25 .t;!2e3) 25.5; 23 ... t;!2f6
24.Hc7 h4 25 .Haa7.
59
Estadstica:
Es dificil hacer una estadstica en variantes que trasponen constantemente a otras.
El criterio que he seguido es seleccionar todas las partidas que llegan a la posi
cin del diagrama bsico de este captulo, aunque luego traspongan al Dragn
Clsico. Con ese criterio, sobre 28.000 partidas las blancas hacen el 52% de los
puntos lo cual es una estadstica muy razonable para las negras . La variante que
recomendamos con 5.3 y 6.t;!2e3 da un 53% para las blancas, a pesar de su
buena reputacin terica lo cual da una idea de lo fcil que es llevar adelante el
60
CAPTULO
Historia
El verdadero pionero de la jugada
4 ... eS fue La Bourdonnais que la jug 3
veces en sus famosos matches con Mac
Donell. Claro que Mac Donell respon
da 5.c6 y las partidas no han sido
estudiadas por su inters terico, sin
embargo una de las 3 partidas es la
inmortal de La Bourdonnais en la cual
coloca tres peones ligados en sptima.
Posteriormente Lowenthal la anali
z y le dio su nombre aunque sus
resultados con Morphy son peores que
los de La Bourdonnais. Pero la lnea
Pa rtida 7 . 0 1
Liberzon - Franzoni
Bie/ 1 980
t .e4 eS 2.flf3 flc6 3.d4 cxd4 4.flxd4 eS
S.flbS a6 6.fld6+ xd6 7.xd6 f6 (D)
62
8.\Wdt !
La jugada casi universalmente
empleada. Las alternativas son bastan
te estrafalarias:
7 f5?! Una jugada increible que
parece haber sido experimentada por
correspondecia en partidas de Cordovil
y Kondrak. Las blancas deben tener
muchas continuaciones agradables.
8.3 f6 9.\Wd l ge7 I O.t;!2c4 b5
1 1 .5 ( l l .t;!2b3;j;) l l ...d6 ( l l ... g6
1 2.0-0 bxc4 1 3 .c7+ Wd8 1 4 .xa8
fxe4 1 5 .b6) 1 2 .t;!2b3 ( 1 2.t;!2g5 ! ?
parece buena pero conduce a fuertes
compl icaciones) 1 2 ... t;!2b7 ( 1 2 ... fxe4
1 3.t;!2e3 ! ) 1 3.t;!2g5 d5 1 4.xd5 xd5
1 5 .t;!2xd5.
7...e7 Con ideas similares a la
lnea principal pero la dama parece
estar ms activa en f6. 8.\Wd l f6
(8 ... f5? ! 9.3 fxe4 1 0.5 d6 I J .t;!2e3
ff6 1 2 .b6 xd 1 + 1 3 .fud 1 l:Th8 1 4.t;!2c4
Van Der Wiei-Theotokatos, Katerini
op 1 992) 8 ... d6 9.3 t;!2e6 1 0.5 d8
l l .t;!2e3 t;!2xd5 1 2.exd5 a5+ 1 3 .c3 e7
1 4.b3 ! xd5 1 5 .t;!2c4; Moller-Luther,
cr. 1 984) 9.3 h6 (9 ...0-0 1 O.t;!2g5;
9 . . . d6 1 O.t;!2g5 t;!2e6 l l .d5 t;!2xd5
8...g6
Otra jugada casi impresc indible
para "dar guerra". La presin sobre los
puntos e4 y g2 y los rayos x sobre c2
condicionan mucho el desarrollo
blanco. 8...d6 9.3 t;!2e6 1 0.5 d8
l l .t;!2e3, traspone a una variante del
comentario anterior; 8...e7 9.3 o
o 1 O.t;!2e3 d6 l l .d2 b5 1 2.0-0-0 d8
1 3 .Wbl g6 14.f3 t;!2e6 1 5.5 ac8
1 6.t;!2d3 f6 1 7 .e 1 f7 1 8 .c4 b8
1 9.hd 1 bxc4 20.t;!2xc4; Gligoric
Rossetto, Santa Fe 1 960.
9.3 d5?! (D)
Esta jugada lleva a unas terribles
complicaciones y logr en su momento
rehabilitar la variante Lowenthal. Una
vez bien analizada resulta ser peor que
63
1 7.f4 exf4
I O.xd5!
La captura I O.Illlxd5, aparentemente
limpia, permite compensacin tras
I O ... t;!2e6 1 1 .\ll/d l !Id8 1 2.t;!2d2 f. Si
1 O.exd5 4 l l .t;!2d3 \ll/xg2oo.
64
1 0.h4!
La primera de una serie de jugadas
precisas. Este pen se dispone a des
plazar a la dama negra de su activa
posicin lo cual minimiza los efectos
de la ruptura d5. Por otro lado el pen
provee un importante punto de apoyo
para el alfil en g5.
1 0 hS
.
..
l t .gS dS
I I ...f6 1 2 .e3 d5 ( 1 2 ... f5 1 3 .exf5
f5 1 4 .g5) 1 3 .d5 g4 ( 13 ...d5
1 4.xd5 y no es posible e6) 1 4.7+
wf8 1 5 .f3 !!d8 1 6.d3 c8 1 7.d2
Correas-Fenollar, Valencia 2002.
1 2.exd5 ( O)
65
13.e7
Lo ms simple, llevando la partida a
un final donde slo las blancas aspiran
a ganar
1 2...b4?!
Mantenemos esta jugada como
variante principal puesto que el caudal
de teora es mucho mayor, pero a la
vista de la experiencia actual parece la
alternativa floja. 12 4! ? Esta juga
da puede intentar revitalizar ligera
mente la variante en vista de algunas
nuevas ideas. 1 3 .d3 f5 1 4.xf5
xf5 1 5 .d3 y ahora:
A) 1 5 ... f6 Condenada por la teora
desde la partida Vasiukov-Malich,
puede jugarse: 1 6.e3 g4 ( 16 ... xg2
1 7.0-Q-0 ) 1 7.xd4 d4! ( 1 7 ... exd4
..
66
16 Jah6! ?
18.b3 llg6
1 8 ... t;!;f5 1 9.llhe l ( 1 9.e4 lld8)
19 . . .wd6 20.llac l lld8 ( 2 0...llb4
2 1 .4+ wxd5 22.llc5+ we6 23.g5+-)
2 l .f4 ! (2 l .e4+ wxd5 22.llc5+ we6
23 .f4 f6 24.fxe5 fxe5 25 .g5+ M6
26.llexe5 llxd3ao) 2 l ... exf4 22.2 lle8
(22 . . . llb4 23 .llc4) 23.xf4 laxe 1
24.llxe l .
1 1.wdU
19.g3 bS
Esta jugada que libera las dos
columnas para el juego de las torres
blancas es la ms prometedora. 1 7.0o-o jugada en muchas partidas, ofrece
perspectivas parecidas a la del texto.
1 7 ... llg6 1 8 .llhe 1 wd6 1 9.d4 exd4
20.llxd4 llxg2 2 1 .4+ wd7 22.d6
Domanski-Halwick, Postal-eh 1 980.
1 7 llb6
67
Estadstica:
Sobre una base de 3000 partidas las negras obtienen en la variante Lowenthal un
mediocre 4 1 % de los puntos. En las dos variantes seleccionadas contra cada una
de las lneas principales las blancas obtienen ms de un 60%, 62% en el caso de
1 3 Jk l y 63% en el caso de h5 y t;!2g5.
Esquema Resumen: t .e4 eS 2.f3 6 3.d4 cd4 4.4 eS s.bS a6 6.d6
t;!2d6 7.d6
- 8... f5 Claramente antiposicional aunque peligrosa
- 8 ... e7 Ms slida que la anterior pero pasiva y torpe
CAPITULO 8
1 .e4 eS 2 .ttlf3 ttlc6 3.d4 cd4 4.ttld4 eS S.ttlbS d6
Variante Khalasn ikov
Valoracin ****
Historia
La popularidad de la jugada 5 ...d6
es realmente reciente. A pesar de algu
nos experimentos de Minev y Larsen en
los 50, y ms tarde del MI austriaco
Frank Hoelz, la jugada 5 ... d6 (mucho
ms sana que 5 ... a6) no fue tomada en
serio hasta que Svesnikov comenz a
jugarla masivamente en 1 987. Las par
tidas de un terico muy respetado como
Svesnikov unidas a algunos artculos
dispararon su popularidad y durante
algn tiempo fue llamada Variante
Svesnikov 2.
69
Pa rtida 8 . 0 1
Anand, V - Shirov,A
Unares 2002
6.tc3 (D)
6... a6
Si las negras quieren trasponer a la
Pelikan deben hacerlo aqu con 6 ...f6.
7.a3 b5
Algunos jugadores intentan traspo-
70
9.c4 b4 (O)
71
1 o.xf6+ xf6 1 1 .2 g6
Dificultar un poco el desarrollo
blanco parece la nica compensacin
posible por el feo hueco dejado en d5.
12.d5!?
72
1 2 7
13.xb4 flc8?!
13 ...8 parece la alternativa ms
crtica. Las negras recuperan el pen,
pero las blancas controlan la casilla
crtica d5 y el caballo negro tiene que
perder algunos tiempos para regresar al
juego. 1 4.\!!Jd l ( 14.a5 ! ? tambin a un
paso de a4 es igualmente atractiva)
1 4 ... xe4+ ( 1 4 ... xe4'?!
1 5.a4+)
1 5 .e3 {j;_e7 ( 1 5 . . .e6? ! 1 6.a4+)
1 6.5 xd5 1 7.xd5.
9.c4
U na vez ms proponemos este
avance dando un apoyo extra al caballo
de d5. y un camino para volver al juego
al de a3.
9 flxd5
IO.cxd5 4
Las otras retiradas del caba llo
tienen un aspecto muy feo. 1 0...7?!
l l .h4! (anticipndose a las dos formas
lgicas de terminar el desarrollo del
flanco de rey: g6 o g6) l l ... i;fid7
( l l .. .g6?! 1 2.h5t; l l ...f5 1 2 .i;fid3 fxe4
1 3 .i;fixe4 l;fif5 1 4.d3; l l ...g6?!
1 2 .h5) 1 2 .2 h5 ( 1 2 ...g6 1 3 .h5 i;fig7
1 4.i;fig5 ! 0-0 1 5 .hxg6 hxg6 1 6.d2;
1 2 .. .f5 1 3 .i;fid3) 1 3 .g3 g6 1 4.i;fig2 i;fig7
1 5 .0-0 o-o 1 6.b4 con ligera ventaja
Bologan-Stripunsky, Wijk Aan Zee B
1 996.
73
l l .i;fieJ
Un error tpico es precipitarse con
1 1 .2?! que se encuentra la respuesta
l l ...i;fig4! 1 2.f3? h4!+.
l l ...i;fie7
l l ... f5!? Se trata de una interesante
alternativa defendida por Grigore, pero
parece demasiado optimista. 1 2 .i;fid3
(despus de 1 2 .i;fixd4 exd4 1 3 .xd4 i;fie7
las negras tienen una compensacin
muy interesante por su dominio de las
casillas negras) 1 2 ...fxe4 1 3 .i;fixe4 f5
(Bluvshtein-Miton, Bled 2002) y ahora
74
14 ... f5
La lgica secuela de b7. Otra
alternativas es: 1 4 ... b6 (no parece
lgico meterse en la clavada) I S .2
f6 1 6.f4! (con idea de t2 o de feS y
t2) 1 6 ... exf4? 1 7.B:xf4 eS 1 8.t2+-.
14.d2
14 .xd4 exd4 I S.2 podra ser un
orden mucho ms preciso pero nos fal-
1 5.xd4
Con la dama en d2, lejos del control
de las casillas blancas, esta jugada no
es tan contundente como contra 1 3 ... f5
y la batalla terica est abierta en las
prximas jugadas.
1 5 exd4 16.flc2 b6
1 7.f4
Bologan sugiere un tratamiento
senc illo basado en 1 7.exf5 t;!2xd5
18 .l:i:ae 1 t;!2f6 1 9.t;!2e4 pero 1 8 ... l:i:ae8
puede ser un problema porque entonces
1 9 .t;!2e4 ?! se puede contestar con
1 9 ...t;!2c4.
1 7...l:i:ae8 18.!!ael eS
1 8 ... t;!2d8!?, intentando fxe4, puede
ser una de las ltimas ocasiones de las
negras para plantar batalla: 1 9.exf5
t;!2xd5 20.d4 t;!2f6 (o bien 20...t;!2xa2
2 l .b3) 2 1 .6 y las blancas pueden
mantenerse al mando.
75
20...a5
No es fcil tampoco probar una
ventaja contra 20 ... c;!;>h8 !?. Por ejemplo:
2 l .exf5 6 22 .l:i:xe8 e8 23 .h5 !!f8
24.l:i:e l t;!2xd5 25 .l:i:e8 !!g8 26.g8+
t;!2xg8 con juego complicado.
2 l .l:i:cl !?
Ahora con la amenaza 3 seguido
de f5. Las negras creen pararla, pero
caen en una trampa.
20.h3
Las blancas siguen con sus jugadas
presionantes, pero el equilibrio est
76
dxe3
d4
Es la jugada ms frecuente o al
menos la que est de moda. Las negras
quieren cambiar en d5 y desarrollar
libremente su otro caballo a una casilla
ms adecuada.
9.c4
Una vez ms recomendamos c4,
aunque en este caso se trata de capturar
con el otro pen en d5. La continuacin
9.g5 dificultando el desarrollo negro
tiene tambin sus partidarios pero tras
9. . . h6 obliga a un sacri ficio de pieza
que tiene buena prensa pero muy malos
resultados 1 O.xb5+ axb5 l l .flxb5 l:!a6
con posicin complicada.
9 flxdS I O.exdS!? ( D )
..
Partida 8 . 03
Shirov,A - Fedorov,A
I O... bxc4
La eleccin que se produce en el
90% de las partidas. Todas las otras
jugadas implican una momentnea
entrega de pen y con la falta de des
arrollo esas inversiones suelen ser difi
ci les de justifi car. Veamos varios
ejemplos:
1 O...e7?! l l .cxb5 f6 1 Htk4,
traspone a 1 O...f6.
IO ..f6?! l l .cxb5 {j;_ e7 ( l l ...a5+
1 2 .d2 b6 1 3 .(jtc4) 1 2 .(jtc4 0-0
1 3 .0-o {j;_g4 1 4.b3 b8 1 5.(jte3 (las
blancas han mantenido el pen sin
problemas) 1 5 ... r;;. d7 1 6.ad 1 g4
1 7.a7 axb5 1 8.(jtxb8 bxc4 1 9.b7 c8
20.a7 f5 2 1 .xc4 f6 22.b6 e8
23 .xd7 h5 24.h3 t2 25.1ht2 1 -0
Shirov-Annageldyev, Estambul 2000.
1 O ..fS? ! l l .cxb5 f6 1 2. bxa6 xa6
( 1 2 ... a5+ 1 3 .d2 xd5 1 4.b5 ! +-)
1 3.a4+ 'i9f7 1 4.a6 b6 1 5.0-0 xa6
1 6.c2 g6 1 7 .d l c8 1 8 .b3 f4
1 9.b5. Las blancas tienen todava
.
77
l l .xc4 6
Lo natural es acelerar el desarrollo
del flanco de rey para poder oponerse a
las piezas blancas en el flanco de dama
y preparar el contrajuego. Pero se han
experimentado algunas otras jugadas
que tienen su idea propia:
l l ...e7!? Puede trasponer. pero se
reserva la opcin de jugar f5 antes de
f6. Los inconvenientes parecen
mayores, pero hay muchos recursos
tcticos.
A) Lo ms sencillo puede ser
trasponer con 1 2.e3 b8 ( 1 2 ...ff6
1 3.b6) 1 3 .e2 f6 1 4.a4.
B) 1 2 .d2 La amenaza a5 parece
tremenda pero a la hora de comer los
peones siempre surgen inconvenientes.
B 1 ) 1 2 ...d7 !? (tal vez merezca ms
pruebas) 1 3 .a5 b8 14.d2 (no veo la
necesidad de esta jugada de dama;
14.e2 !?) 14 ...a7 1 5 .g3 ff6 1 6.{jtg2
o-o 1 7.0-0;t; Mohrlok-Schlachetka,
cr. 1 992. Las blancas pueden estar algo
mejor pero la posicin es demasiado
compleja para que la valoracin sea
firme.
B2) 1 2 ... a5 1 3 .e3 (no es tan fcil
como parece: 1 3 .a4+ d7 1 4.a3 ff6
1 5 .xa5 b8 1 6.c7 xa3! 1 7.b8
a6"") 1 3 ...b8 14.a4+ d7 (Dudas
Kasparov. Tatry op 200 1 ) y ahora una
jugada an indita a pesar de ser la ms
natural 1 5. a3 ! ( 1 5. xa5 xa5 1 6.xa5
xb2"") 1 5 ...ff6 ( 1 5 ...f5 1 6.a5)
1 6.xd6+ 19f8 1 7 .c5 d5 1 8.(jtc4.
78
13...e7
Nadie se ha molestado en probar la
jugada 1 3 ...ID>5 y slo Bologan se ha
14.a4
Ms jugadores juegan 1 4.0-0 ! ?
pero ahora tal vez si merezca 1 a pena
ser ms cuidadoso e impedir la opcin
1 4 .. J:'!b5 1 5 .a4 !:rxd5 1 6. c2;t.
14...d7
Enrocar ahora supone a menudo
una trasposicin, aunque no a esta
partida, pero tambin permite algunas
alternativas diferentes: 14 ... 0-0 1 5 .0-0
A) 1 5 ...d7 Ver el comentario a la
jugada 1 5 .
B) 1 5 ... a5 1 6.d2 l1a8 1 7.e l a6
( 1 7 ...xd5 ! ? 1 8.f3 e6 1 9.xa5 b8
20.d5 xd5 2 1 .b6;t) 1 8.fua5 xd5
1 9.xa6 lha6 20.b4 Palac-Brumen,
Pula op 2000. Los peones del flanco de
dama resultan ms moviles que los
centrales, y pronto habr un punto de
apoyo en c6.
C) 1 5 . . .b7 La alternativa ms
lgica que presiona en el punto dbil
d5. 1 6.b6 7 1 7 .a5 f5 (comienza el
contrajuego) 1 8 .f3 xb6 1 9.b6 d7
20.b4 d8 2 1 .e3 f6 22 .l1b l l1bc8
23 .b5 ! y las blancas consiguen un
molesto pen pasado en el extremo del
tablero. Karjakin-Shirov, Benidorm
2002.
t s.o-0!
79
80
Estadstica:
Sobre una base de 5000 partidas, la mayora de los ltimos 1 5 aos, las negras
obtienen en la variante Khalasnikov un prometedor 48% de los puntos, que
justifica totalmente su adopcin. La lnea con 6. l c3 consigue un resultado an
peor (el 48% para las blancas), pero profundizando ms se comprueba que eso es
debido sobre todo a las lneas superdirectas, con entregas de pieza o bien captu
ras arriesgadas en b5. El tratamiento con c4 alcanza siempre porcentajes satis
factorios para las blancas, que presentamos por separado:
En 8 ...6 9.c4 el 83% (pocas partidas); en 8 ... e7 9.c4 el 53%; en 8 ...ge7
9.c4 el 64%. Y en la variante crtica 8 ... e7 9.c4 el 53%, que sigue siendo razo
nable para las negras.
Esquema Resumen: t .e4 eS 2.f3 fr6 3.d4 cd4 4.4 eS s.bS d6 6.lc3
a6 7.W bS S.dS
- 8 ...f6 Actualmente parece en un momento delicado
- 8 ...e7 Es cmoda para las blancas aunque no incorrecta ;!;
- 8 ...ge7 Las negras han luchado mucho en esta lnea pero no consiguen neutralizar la ventaja posicional de las blancas ;!;
CAPTULO
82
Pa rtida 9 . 0 1
Hector,J - Andersson,U
Elsinore 1 999
t .e4 eS 2.f3 6 3.d4 cxd4 4.d4
f6 S. eS 6.bS (D)
Ideas
La idea bsica, como ya hemos
citado de pasada, consiste en la
actividad de las piezas gracias a la
influencia lograda en el centro por el
avance e5, que debe compensar la
debilidad de la casilla d5. Sin embargo
en la variante principal algunas ideas
tpicas son ms concretas: el caballo de
a3 est descolocado durante mucho
tiempo y muchas partidas se deciden
porque no logra entrar en juego, o por
6 ... h6!?
Una lnea infravalorada y que tiene
sus virtudes. Un jugador tan serio como
Andersson la ha empleado en varias
partidas de torneo y sobre todo en miles
de partidas rpidas por internet, y la
mayora de sus rivales hemos podido
comprobar lo dificil que es refutarla.
Claro que las posiciones sin damas que
producen no son del agrado de todos,
pero para aquellos jugadores a los que
les gusta el "finalito", puede ser una
interesante anna complementaria. Las
otras alternativas no tienen demasiada
consistencia:
6 ... a6?! Se ha jugado en muchas
partidas pero ninguna de alto nivel.
Comparada con la lnea de la partida
principal, la falta de vigilancia de la
casilla g5 se demuestra como un serio
inconveniente. 7.6+ t;!2xd6 8.xd6
e7
9.xe7+
xe7
(9 ... wxe7?
1 O.t;!2g5+-) 1 O.t;!2g5 b5 lo relativamente
mejor ( 1 0 ...6? ! l l .t;!2xf6 gxf6 1 2.5
wd8 1 3 .0-0-0+-; Gag Poh Teo
Phillips, cr. 1 999) 1 1 .0-0-0 t;!2b7 1 2.f3
0-0-0 1 3 .!i:d6 fg8 1 4.t;!2e2 wc7
1 5 .!!hd 1 f6 1 6.t;!2e3 8 1 7 .!!6d2 ge7
1 8 .a4 con una ventaja considerable en
varios factores, aunque no decisiva.
Espineira-Vidal del Rio, Santiago de
Compostela 2002.
6 ...t;!2b4 Una alternativa algo ms
83
84
2.fVJ fr6 3.d4 cd4 4.0d4 fty6 5.3 e5 6.0dh5 Variante Pelikan
9...xd6?!
Esta jugada. aunque est llena de
complicaciones, parece llevar a una
85
en varias diagonales.
12.flxg7 es la propuesta de los pro
gramas 1 2 ...flb4 ! 1 3 .t;!2d3 d5 1 4.f3 !:th7
1 5 .flf5 t;!2xf5 1 6.exf5 !:tc8 las negras
tienen un juego muy interesante por el
pen.
1 2.t;!2d3 d5 ! 1 3.exd5 flb4 1 4.fle3
( 1 4.flxg7? flxd3+ 1 5 .cxd3 !:th7-+)
14 ...flfxd5 1 5 .flxd5 flxd5 a pesar de la
pareja de alfiles est muy cerca de la
igualdad.
1 2 ... d5
1 2 ...fue4 es demasiado optimista,
por ejemplo: 1 3 .o-o--o d5 !? ( 1 3 ... g6
1 4 .flg3 flf6 1 5 .t;!2c4 con todas las
piezas blancas jugando) 14.fud5+ wc7
y ahora una jugada inesperada pero
muy eficaz: 1 5 .fld4! ! flf6 ( 1 5 ...exd4?
1 6.t;!2f4+ wb6 1 1 .!:tbs+-) 1 6.flbs+ wbs
1 7 .!:td 1 ;t.
86
La posicin se ha estabilizado. El
fuerte alfil blanco y las torres ms acti
vas le conceden una persistente inicia
tiva. En el resto de la partida Andersson
se ve obl igado a desplegar toda su
habil idad tcnica para arrancar el
medio punto.
Partida 9 . 02
Enders,P - Sermek,D
7...a6
Conviene desplazar este caballo
ahora mismo porque si no acabar
creando problemas. Las alternativas no
son demasiado importantes pero vamos
a considerar una de ellas: 7... e6 8.'fJd5
l::tc8 (8 ... xd5 9.exd5 0Je7 1 0.c3 ! con la
amenaza a4 pone a las negras ante
8.W t;!2e6
Se considera que el defecto de esta
jugada es permitir el reagrupamiento
rpido del caballo despistado de a3. Sin
embargo, debido a las prdidas de
tiempo de ese mismo caballo, las
negras pueden conseguir un juego muy
activo que aspira a compensar la debi
lidad crnica de d5. Las blancas estn
obligadas a tomar esta variante muy en
serio.
8... b5 Ver partidas 9.04 a 9. 1 2 .
8-dS?! E s u n intento radical de
resolver los problemas negros que fue
experimentado por Velimirovic, pero
abandonado finalmente. 9.xd5 ! t;!2xa3
1 0.bxa3 a5+ l l .d2 ! (tras el cambio
de las damas la casi lla c7 queda
amenazada) l l ...xd2 1 2.t;!2xd2 d5?!
( 1 2 ...!!b8 1 4.f3) 1 3.exd5 4 1 4.o-o
O t;!2f5 1 5 .c3 !!c8 1 6.wb2+-; Sax
Velimirovic, Rio de Janeiro 1 979. No
hay compensacin por el pen.
87
9...!!c8
La torre se activa rpidamente y
crea algunas amenazas en la columna c.
Las otras alternativas son netamente
inferiores:
9...4 Un puesto activo para el
caballo pero ha saltado prematuramen
te. Ahora los planes blancos para tomar
el control de los puntos claves se
desarrollan de modo casi forzado.
I O.t;!2xf6 y ahora:
A) 1 0 .. xf6 l l .b6 !!b8 1 2 .d5
l/lld8 1 3 .c3 t;!2xd5 ( 1 3 ...6 14.a4!)
1 4 .xd5 6 1 5 .g3 t;!2e7 1 6 .a4 0-0
1 7.t;!2h3. El dominio de las blancas en
las casillas de su color no tiene res
puesta. Tal-Wade, Reikjavik 1 965.
B) IO ... gxf6 Aparece otro punto
dbil en la casilla f5, caracterstico de
la variante Pelikan, pero ms serio en
este momento por la cercana del
caballo dscolo. 1 1 .3 t;!2g7 1 2 .t;!2d3
!!c8 1 3 .0-0 h5 14.cd5 h4 1 5 .c3 6
1 6.f3. Las blancas tienen la posicin
soada contra la Pelikan: control
absoluto de los puntos fuertes d5 y f5 ,
todas sus piezas trabajando de forma
coordinada sobre las casillas blancas.
Las negras estn muy lejos de poder
conseguir el contraj uego temtico
basado en las rupturas f5 y b4.
Hernndez-Ramos, Cuba cr. 1 990.
9 ... t;!2e7?! Deja las piezas negras mal
coordinadas despus de 1 O.t;!2xf6 gxf6
1 1 .3, cuando el al fil de negras hara
mejor papel en h6.
9... b5?! Tampoco parece muy lgi-
88
10.5!'? (D)
t t ... gxf6
l l .. .xf6 Parece ms sana pero
tiene como resultado el control total de
la posicin por parte de las blancas. La
dama es necesaria en d8 para poder
iniciar el juego tctico de las prximas
jugadas. 1 2 .xd5 (j;,e7 ( 1 2 . . .b4?
1 3 .xb7 c2+ 1 4.19d l J;!xc4 1 5 .(j;,xc4
xa l 1 6.xa6) 1 3 .c3 0-0 1 4.b6
J;!c7 1 5 .(j;,c4.
12.xd5 4
13.CH)-O
Se ha probado tambin 1 3 .(j;,d3 que
en algn momento fue la principal,
pero la continuacin de la partida que
13...e7
Defiende el pen de b7, para proce
der a la captura de la dama blanca con
l::l:c S. En las prximas jugadas veremos
lo que resulta de esto, pero de momen
to nos enfrentaremos a las alternativas:
13 ...d7!? Una jugada sorprenden
te porque se pone a tiro de un doblete
en b6, sin embargo son las blancas las
que se ven casi forzadas a sacrificar
calidad, ante la amenaza l::l:c S. 1 4.l::l:xd4
( 1 4.b6?? l::l:x c2+ l S .wb l c7-+)
14 ...exd4 con las opciones:
A) 1 S .xd4 e6 1 6.b6 ( 1 6.wbl dS
1 7 .b6 eS 1 8 .a4+ c6 no parece
suficiente) 1 6 .. .l::l:c S 1 7.S;l;. Lleva a
una posicin muy similar a la de la otra
variante.
8) 1 S .b6 La estructura de peones
negros es un verdadero chiste, y eso da
a las blancas toda una serie de conti
nuaciones para reclamar compensacin
por la calidad. Pero una cosa es tener
una compensacin interesante y otra
aspirar a la ventaja y para eso es nece
sario recuperar al menos un pen y
controlar las rupturas en los puntos
clave (dS y f5). Por eso este salto del
caballo que busca la casilla dS parece
necesario, aunque tambin puede
hacerse en la jugada siguiente. l S ... g4
(el detalle tctico que salva la torre
debido a la amenaza en d 1 ) 1 6.xd4
gs+ ( 1 6 ... l::l:c6 1 HxiS g7 1 8 .f3 d7
1 9.d3 l::l:g8 20.l::l: e 1 M8 2 1 . f2 e6
89
t4.wb t ! <D>
90
14...f!:c5
No se ha probado otra jugada, a
pesar de que esta solamente induce a
las blancas a llegar al final que desean.
14 b5?! 1 5 .c3 con una posicin
mucho ms favorable que la de la
variante 1 3 ... b5 que comentamos unas
jugadas antes. 14 f!:c6 (la defensa
natural de la amenaza blanca) 1 5 .c3
6 1 6.g3 y las blancas tienen el con
trol absoluto de la posicin.
19...f!:hc8 20.g3
Las blancas empiezan su labor de
restriccin del alfil negro aprovechan
do su mejor estructura de peones.
91
92
2.$[3 fr6 3.d4 cd4 4fi)d4 ${6 5.fr3 e5 6.f'Jdb5 Variante Pelikan
I S.xd6+ wd7
1 5 ...we7 1 6.xf7+ wxd6 1 7.d 1 +
wc6 ( 1 7 ...wc5 1 8.xd8 hxd8 1 9.e7+
Xb4) 1 8 .xd8 hxd8 ( 1 8 ... xc2+
1 9.wd 1 hxd8+ 20.wxc2 wb6+ 2 1 .wb3)
1 9.t;!2d3 ( 1 9.xf6+ d6 20.xe5 c2+
con ataque) con ventaja decisiva.
1 5 ... wf8 1 6.xf7#;
16.xt7+ wc6
1 6 ...wxd6 1 7.d l . Traspone a lo
anterior; 1 6 . . . e7
1 8 .c8++-.
1 7 .xe7+
wxe7
Dortmund 1 996
93
l l .d3 7
La continuacin ms lgica de la
estrategia negra. La oferta del cambio
de caballos minimiza la debilidad del
punto d5 . A partir de ah, los avances
94
14.exf5 (0)
13 f5
2.fi3 )c6 3.d4 cd4 4.4 iJf6 5.fr3 e5 6.f:Jdb5 Variante Pelikan
14...b7
14 ... 0-0 A pesar de su aspecto
lgico es floja en este momento por
1 5 .e4 1Th8 1 6.c3 y las blancas contro
lan la casilla d5.
14.. .d5 Movilizando de inmediato
los peones pero sobre todo impidiendo
el bloqueo es la alternativa ms seria en
este momento, y tal vez la jugada que
pone dudas sobre el orden 1 3 .0-0.
1 5 .c3 y en este momento las negras
disponen de varias alternativas:
A) 1 5 ... 0-0 1 6.2 e4 ( Pernutz
Skripchenko, Biel 1 997) y ahora
1 7 .e2, seguido de 3. con una ligera
ventaja.
8) 1 5 ...b7 1 6.f!:e l e4 1 7.2 e5
1 8.fl f!:d8 1 9.h5 (en este momento
las blancas tienen una posible mejora
con 1 9.a4 y tras 1 9 ... bxa4 2 1 .4)
1 9 ... f!:g8 20.f!:ad 1 f!:d6 Suleidis-
95
I S.!!el! gS?!
Anand califica esta jugada de
dudosa, pero a estas alturas las alterna
tivas no aportan igualdad a las negras,
aunque las experiencias prcticas son
escasas y eso deja abierto espacio para
la investigacin. Las otras posibilida
des son las siguientes:
I S ... dS 1 6.c3, que traspone al
comentario de la jugada 1 4.
I S...o-o No se ha empleado en la
96
16.g3
Se cortan de raiz las amenazas en la
diagonal y ahora la posicin de las pie
zas negras permite el bloqueo de sus
peones centrales. Esta situacin es casi
16...o--o
1 6 ... d5? falla por la pOSICIOn del
rey: 1 7.f4 ! e7 1 8 .fxe5 t;!2xe5 1 9.f6!+-.
1 7.c4 ae8
1 7 ... bxc4 1 8 .flxc4 y aqu se puede
comprobar que la falta de la dama en e7
tiene efectos desastrosos sobre las
casillas d6 y e5.
1 8.t;!2e4! ( D)
2.fi3 fr6 3.d4 cd4 4.f:Jd4 fi6 5.fr3 e5 6.f:Jdb5 Variallle Pelikan
97
26...fS!
Las negras toman su nica oportu
nidad, puesto que si una pieza blanca se
situa en f5, sern aplastadas sin remi
sin.
1 4.0
Esta es la jugada que recomiendo, a
pesar de que las experiencias prcticas
son muy pocas. La dama blanca toma
98
Enschede 1 993.
14 d5?! Una reaccin temtica
que falla por poco 1 5.exd5 e4 ( 1 5 ... f5? !
1 6.f5 e 4 1 7 .e4 xb2? 1 8.d6+-)
1 6.d6! (sin esta importante intermedia
la reaccin tctica negra tendra xito)
16 . . . exf3 1 7.dxe7 i!e8 1 8.e4 fxg2
1 9.i!fd l !+-.
14 b7 1 5.c4 fd8 1 6.2 y con
la inmediata llegada del caballo a e3 la
posicin negra quedar sofocada.
14 b8!? Una til jugada prepara
toria 1 5.c3 f5 1 6.exf5 b4 1 7.4 bxc3
1 8.bxc3 b7 1 9.e4 d5 20.d5 e4
(Gastanares-Rahal, San Sebastin
1 994) y ahora con 2 1 . f6 ! las blancas se
aseguran una clara ventaja.
I S.exfS dS
14 f5
.
16.xd5 b7 1 7.b3
La dama blanca ha quedado
momentneamente fuera de juego y el
caballo necesita varios tiempos para
activarse. Pero las negras han entrega
do dos peones y han perdido la posibi
lidad de arrollar con su centro mvil al
no tener pen d. Si las negras no con
cretan nada en las prximas jugadas la
dama y el caballo volvern al juego y
mantendrn un sano pen de ventaja.
1 7... e4
1 7 ...\\Yg5?! Amenaza antes, pero no
con ms peligro y permite a las blancas
mantener vivo su pen de f5. 1 8.0
ad8 1 9 .ad 1 \\Yh4 20.c3 h6 2 1 .g3
(adelantndose a 4) 2 1 ... e3+ 22.1f;lg2
\\Yh5 23.\\Yc2 d6 24.e4+- y la posible
compensacin se ha terminado
Gutirrez-Reinoso, Lima 2002.
18.fe1 !
U na mejora a la partida bsica
Anand-Kramnik. La idea es ceder la
casilla fl al alfil para organizar mejor la
defensa, y dar tiempo a las dos piezas
despistadas en a3 y b3 de llegar al
juego.
Tras 1 8.e2 \\Yg5 (la idea es atacar el
punto g2 para desorganizar la defensa
de las casillas negras) 1 9.ad l e3 y
ahora:
A) M erece la pena considerar seria
mente 20.g3!?, defendiendo mejor las
casillas negras. Kramnik propone aqu
la siguiente variante: 20 . . .ae 8 !
(20...ext2+ 2 1 .xt2 ad8 22.c3 y no
parece haber suficiente compensacin)
A l ) 2 I .flc4?! ext2+ 22.xt2 xe2 !
23.xe2 \\Yg4+.
A2) Pero nadie dice nada de la
natural jugada 2 1 .c3! \\Yxf5 (2 1 ...ext2+
22.xf2) 22.fxe3 \\Ye4 23.0 .
8 ) 20.0 Permitiendo a las negras
realizar la segunda fase de su plan.
20 . . .e5 ! 2 1 .c4 f4 22.d4 d5
23.xf4 \\Yx f4 24.\\Yxe3 \\Yxf5 25.d3 \\Yf6
26.b6 ad8 27.fud5 xd5 28.\\Ye4
\\Yd4+ 29.\\Yxd4 xd4 30.e l Y-Y
Anand-Kramnik, Wijk aan Zee 1 998.
99
100
2 1 .2 gS 22.!radl (D)
Partida 9 . 06
Spassky,B - Sveshnikov, E
Mosc 1 973
f4?!
Si 29 ...xh3? 30.xe5+; 29... !rf6, lo
relativamente mej or, 30.!re7 ! !rxe7
3 I .xe7 f7 32.xf7 !rxf7 33.!rd l +-.
l t .d3
Por parte de las blancas tambin es
ditlcil encontrar una j ugada ms lgica
y til que esta. Desarrollan una pieza,
amenazan exf5 y evitan que las negras
cambien el pen porque despus de
1 1 . .. fe4 1 2.e4 el alfil de casillas
blancas pasara a ocupar una posicin
101
102
1 2.0-0 (D)
...
103
14.c3
13.h5
14 o-o 1 5.2 [El caballo blanco
est a punto de completar su reciclaje]
.
13 h6
.
1 5 fxe4?!
.
104
variante 1 2 ...xd5.
Partida 9.07
De la Vi lla,J - Garca Luque
14.c4 b4
2./3 fr6 3.d4 cd4 4.fxi4 f'/6 5.tt3 e5 6.fxib5 Variallle Pelikan
( Makarichev-Sveshnikov, U RS 1 978)
y ahora las negras pudieron igualar con
27 ...xg2 ! .
82) De acuerdo con Svesnikov, lo
ms preciso es 1 7.flcb4!? fld4 1 8J:rac l
a5 1 9.c6 xc6 20J:l:xc6 Cobo
Ochoa, Cienfuegos 1 989.
105
106
jugada 1 5 .
1 8...0-o
1 8 ... g5 es un poco fea debido al
jaque en c7, pero en realidad es jugable.
1 9.7+ ( 1 9.g3 !?) 19 ... we7 20.5+
we8 2 1 .g3.
2 l.xg4 gS 22.e2
1 7.b3
Siguiendo el plan ya conocido, pero
este es un punto donde se puede aplicar
otra idea temtica: 1 7 .e 1 !? para
realizar la maniobra f3-h4-5.
1 7... h6 18.e2
Con la idea de adelantarse a g5.
1 8.g3 !? traspone al comentario de la
22 ..J!a8 23.wh t
Recuerdo muy claramente que hice
esta jugada para provocar b4, antes que
23 a4 24.d2
107
37...xf2!! 38.gl !
El sorprendente punto de la ltima
jugada negra es que 38.xg7+? lleva a
tablas tras 38 . . .Wf8 ! (38. . . wxg7 39.g l +
g5 40.xt2 d3 4 1 .d4++-) 39.g8+
we7 40.f4 fuf3 4 1 .d2 fl + 42.g l
f3+ 43.g2 xg l + 44.wxg l di +
45.fl g4+ 46.wf2 f4= 47.we2??
d3+ 48.we t d2+-+.
46.e3 dl +
4 6. . . xc4 47.e7+ wc6 48.b5+ ! !
(48.d7 d2 ! ; 48.c7+ wb5 49.b7+ wa4)
48 . . . wxb5 (Si 48 . . . wb6 49.d7 !+-:
48...xb5 49.c7+ wd5 50.xf7++-)
49.b7+ wc5 50.c8+ wb5 (50_ .wb4
5 1 .g4+-) 5 1 .d7+-.
108
Partida 9 . 8
Short,N - Sax,G
El enroque es lo ms natural y lo
ms frecuente, pero hay que tener en
cuenta una interesante alternativa:
1S ...4 La idea de esta jugada
puede ser evitar el cambio del caballo
adelantndose a 2. o bien especular
con algn eventual O. Recibe escasa
atencin de los manuales tericos, pero
su refutacin est lejos de ser clara. Yo
voy a proponer dos ideas, porque una
aunque sencilla y clara lleva a una
posicin c on calidad de ms pero
cierta compensacin a largo plazo,
mientras que la otra resulta muy
compl icada y slo se ha jugado en una
ocasin:
A) 1 6.ac 1 c8 (la alternativa
1 6 ... 0 . recomendada en algn anlisis
no parece buena despus de la simple
1 7.gx0 !) 1 7.b6 ! xc4 casi forzada,
pero la compensacin es d ificil de
evaluar en esta posicin. 1 8.bxc4
( 1 8.xc4 o-o 1 9.Wh l f5oo) 1 8 ... 0-0
( 1 8 ... 0 ! ? es una alternativa molesta
puesto que 1 9.gx0?? falla por
1 9...2+ 20.wh l f4!-+) 1 9.2 f5
20.2 xc2 2 1 lhc2 fxe4 22.fue4 f5
2.j3 fr6 3.d4 cd4 4.4 "6 5.fr3 e5 6.f1dh5 Variante Pelikan
1 6.acl (O)
Las blancas se disponen a pasar la
torre por la tercera fila, a especular con
la posicin indefensa del 6 y pueden
responder a 4 con 2. La directa
2 pennitira la inmediata reaccin 5.
109
110
1 7J!fdl
1 7 i!c8
..
t 9 whs
111
en ambos casos.
24.e2
20.b3 fS
La jugada ms deseada, pero justo
ahora permite molestas amenazas en
h7. Veamos otras alternativas:
20 ...d7!? Una sugerencia de Short
que no ha sido puesta a prueba hasta
ahora. La idea, poco disimulada, es
jugar d5, pero los anlisis del propio
Short ponen en duda su correccin.
2 1 .fJb 1 ! (evitando los trucos y dando
un paso hacia d5) 2 1 ... f5 22.xa6 .
20 ...fl:g8 2 1 Jkd3 f8 (2 1 .. Jicd8
22.e6 xe6 23.fJc4) 22.xe6 xe6
(22 ... fxe6 23 .fJc4) 23.fJc4 !:rc6 24.f5
g6 25.xg6 fl:xg6. Y el blanco ha
alcanzado la posicin-control deseada.
Mukherjee-Kruse, c r. 1 995.
20 ... d5? 2 1 .exd5 xd5 22.!:rxd5
xa3 23.d3+-.
23...fl:cd8
23 ... fxe4 podra ser la nica jugada
capaz de complicar los asuntos, pero
sigue 24.!:rxd6 e7 25.fJc4 !:rcd8 26.g6
26.ft4!
26.fl:xf3?! permite 26 ...d5 con algn
l io, ya que tras 27.h4 (27.!:rxf8+?!
xf8 28.a4 c5ii5; 27.e2 !:rxtJ
28.xf3 e4ii5) 27 . . . !:rfe8 e4 (27 . . . e4
28.!:rxf8+ fl:xf8 29.fJc2;!;) 28.fJc2 y es
d i ficil evaluar la actividad de las
negras, pero est claro que la posicin
no es fcil de jugar para las blancas.
un
final tran-
112
2.fy3 flc6 3.d4 cd4 4.4 fy'6 5.fr3 e 5 6.0b5 Variante Pelikan
Partida 9 . 09
Short,N Kuijf,R
Wijk aan Zee 1 990
-
1 7.b3
Casi la nica jugada empleada por
las blancas. Plantea una inmediata
amenaza tctica (flf4 seguido de las
capturas en e6 y c6) pero lo ms
importante es su contenido estratgico:
neutraliza la torre de b8 y forti fica el
punto de apoyo en c4.
1 7 1/YaS
113
1 9.l:!fdl l:!g8
Despus de renunciar de forma
definitiva a tomar el pen de a2, las
negras sufren el castigo por su impro
ductiva excursin. 1 9. . . xa2 es la
alternativa lgica pero despus de
20.e2 la dama negra tiene problemas
y el pen de a6 est condenado.
20 . . . xd5 (20 . . .a5 2 1 .Ha 1 d8
22.fua6+-) 2 1 .l:!xd5 b2 22.l:!cd 1 .
20.b4! d8 2 1 .xa6
Las negras pueden crear algo de
contrajuego en el ala de rey pero la
superioridad blanca en el otro flanco es
demasiado grande.
1 8.fJc2 wh8
2 1 ...f8 22.b5 fJe7
El complemento lgico de la jugada
anterior sera 1 8 . . .xa2?! pero se
encuentra con una fuerte respuesta tc
tica 1 9.fJcb4 ! ! fJxb4 ( 1 9 . . . l:!xb4
20.fub4 fJxb4 2 1 .xe6 fxe6 22.l:!c7
traspone a la partida) 20.fJe7+ Wh8
2 1 .xe6 fxe6 (2 1 . . . l:!b7 22.f5 h6
23.fJg6+ fxg6 24.xg6 wg8 25.l:!c3 a5
26.l:!fc 1 fJa2 27 .l:!c8 fJxc 1 28.e6+
Khruschiov-Yagupov, Rusia 200 1 )
22.fJg6+ wg8 23.fJxf8 l:!xf8 24.l:!c7 wh8
(24...xb3 25JUc 1 y la amenaza l:!g7 es
imparable) Lutz-Babula, Alemania
1 999. Y ahora segn el anlisis de Lutz
1 14
Partida 9 . 1 0
Domnguez,L - Almeida
Cuba 1 999
1 8.rlfdl
La jugada ms popular, poniendo
en juego la penltima pieza a la vez que
previene la amenaza estratgica (jxd5
seguido de flb4, que puede seguir
contra otras jugadas, como por ejemplo
h4.
18...'i!?h8
La ltima condicin para jugar f5
que de momento era imposible. As la
partida revierte por el orden ms
frecuente a una variante que pudo
empezar con 15 ... 'i!?h8. Pero existe una
alternativa bastante popular y que
muchas fuentes dan como una buena
opcin de igualdad:
1 8 ...fld4! ? ( 1 8 ... f5?? 1 9.exf5 rlxf5
20.xf5+-) 19.flc2 flxc2 20.rlxc2 'i!?h8
Es dificil hacer algo activo sin esta
jugada que prepara como siempre
2 1 ...f5 y 2 I ...(jg4. Ahora las blancas
han probado varias continuaciones:
A) 2 I .h4! Una vez aparecida esta
flexible jugada, puesta a prueba casi de
forma exclusiva en partidas por
correspondencia, la popularidad del
esquema negro cay en picado. La
dama apoya los incordiantes saltos del
caballo a e7 y f6. 2 1 ...f5? ! (se reparte
las preferencias con 2 I ...(jxd5 que es
una fuerte concesin posicional en
busca del empate 22.(jxd5 rlfc8
23.rldc 1 fuc2 24.fuc2 a5 25.h5 rlf8
26.g4 Luther-Nikolaidis, Aegina
1 993) 22.fle7 ! (el detalle tctico)
2.3 fr6 3.d4 cd4 4.f':x14 "6 5.fr3 e5 6.f':xlb5 Variallle Pelikan
1 9.t'h4 (D)
1 15
19 .'xdS
..
21 .l':Ic3!
1 16
2 t . f5
22.h3 6
Pa rtida 9. 1 1
Rittner,H - Privara,I
0/m-cr 1 982
117
26 17
1 18
alguna ms:
28 a7
29.xf8+ f8
29 ... xf8 30.e l e8 (30 . . .d4
3 J .e6) 3 l .t2! d4 32.e6! lleva a la
partida.
30.f6+ g7 3 t .f2 d4
28.fl !
Esta brillantemente calculada juga-
la tarea blanca.
33 ...d8 34.f4.
33 . . . h 6 34.f4;
119
13.exdS 7 1 4.e3
Las blancas preparan el regreso del
caballo y luego cuentan con jugadas
como h5, ae 1 y fJ para destruir la
cadena negra. 14.hS es menos elsti
ca por culpa de 14 ... e4 y el alfil debe
retirarse a e2, pero tambin es intere
sante. 14.xbS gana un pen y fue la
variante principal mucho tiempo, pero
actualmente se considera que las negras
obtienen buen contrajuego.
1 20
1 5.\WhS
Poniendo presin en el punto f5 y
haciendo compaa al futuro enroque
negro. Si las negras se deciden por
avanzar el pen e, entonces las blancas
preparan la ruptura f3 y vienen al flan
co de rey con el caballo y la torre leja
nos. Todo un desafio para el bando
defensor que hasta ahora ha podido
demostrar tener muchos recursos.
1 5... d7
Intentando mantener la formacin
de peones. La jugada ms frecuente es
1 5 ... e4 que estudiaremos en las partidas
siguientes.
16Jadl
La torre se prepara con tiempo a
defender el pen d5. Las blancas con
fian en obligar a los peones negros a
moverse con el reciclaj e del caballo
hasta e3. La alternativa 1 6.!!ae 1 ! ?, que
implica la entrega del pen de d5, es
tambin atractiva.
16...!!c8
La torre negra se dirige a c5 sin
permitir a las blancas completar su
reorganizacin de forma cmoda.
2.f:f3 4)c6 3.d4 cd4 4.4 f:(6 5.flc3 e5 6.rub5 Variante Pelikan
121
1 9.f4!
La sutileza preparada por Lutz es
muy profunda. En la subsiguiente
posicin con alfiles de diferente color
el pen esta mucho peor en h6 que en
h7 y eso permite a las blancas una cier
ta iniciativa. 1 9.Wh 1 f4 20.g3oo.
1 8.13
Preparando el ataque al pen f5 con
4Je3. En contraste con la variante ante
rior, el ataque directo no funciona:
1 8.M?! e4 19.b l f4 20.4:lg4 f5 y las
negras tienen una posicin excelente.
Se puede intentar prepararlo con
18.g3!? e4 1 9.e2 f4 20. 0 ! con una
posicin realmente interesante, pero el
alfil blanco no est en su mejor diago
nal. Palac-Verdier, Montpellier 1 998.
Similar a la partida es 18.f4 e4 1 9.e2
c5 20.4:le3 a7 pero la diferencia en la
posicin del pen h tiene cierta impor
tancia.
1 8 h6
122
2S...e7?!
Es peligrosa 2S...xb2, aunque no
resulta fcil demostrar el xito del ata
que blanco. 26.f5 (26.g4!?) 26 ...wg7
27.g4+ (27.f6+ !? se sugiere por si
misma, pero como seguir despus?)
27 ... wh7 28.f6 l::rg8 29.f5+ wh8 Aqu
Rogozenko ofrece una variante que
slo lleva a tablas. 30.l::rf4 l::rxe2 3 1 .h5
l::rgxg2 32.xh6+ wg8 33.l::rh4 l::rxh2+
34.l::rxh2 l::rxh2+ 35.xh2 xf6 36.l::rg 1 +
g7 37.xd6 t2=; 2S fS! ? me parece
la jugada ms lgica y las blancas
deben preparar g4 defendiendo el alfil.
26.l::rd2oo.
.
2.f:Jj3 fJc6 3.d4 cd4 4.fJd4 fJJ6 5.fJc3 e5 6.f:Jdb5 Variallle Pelikan
1 6.c2 o-o
El orden correcto es como casi
siempre la jugada ms flexible. Las
negras esperan a ver la colocacin de la
torre de dama blanca antes de elegir
entre las maniobras c8-cS o bien
!lc8-c5. Alternativas:
16 \WaS Es una simple excursin a
la caza de peones (amenaza xc3), que
puede comprometer seriamente la
posicin negra si las blancas siguen su
plan con determinacin: 1 7.!lae l ! !la7
( 1 7 ... xc3 1 8.bxc3 xa3 1 9.xe4 ! fxe4
20.!lxe4 !la7 2 J .!fe 1 xc3 22.\WgS c7
23.h4, de acuerdo a Jos comentarios
del propio Kramnik en lnformator)
1 8.\!;>h l (las inmediatas: 1 8. 0 ! ? y
1 8.b3 ! ? xc3 1 9.bxc3 xa3 20.0
parecen ms claras an) 18 ... xc3
1 9.bxc3 xa3 20.b3 b2 2 1 . 0
(2 l .h6 !?) 2 J .. .!g8 Kramnik se las
...
123
124
1 7 ... c8 (D)
2.3 fr6 3.d4 cd4 4.4 fY6 5.fr3 e5 6.b5 Variallle Pelikan
125
18 ... a5
19.g5
U na vez ms poniendo piedrecitas
en la buena circulacin de las piezas
blancas. Se han intentado otras alterna
tivas:
18 ...g6 La ms frecuente, el caba
llo ya no tiene inters en presionar d5 y
busca nuevos horizontes. 1 9 .fr2
A) 1 9 .. J(e8 20.f4 exf3 2 J .Etxe8+
xe8 22.xf3 f4 23.Ete l d7 24.b4 !
19... b7!
Despus de esta excelente jugada,
recomendada por Rogozenko anterior-
126
20.0 h6
Es mejor desplazar la dama ahora,
para que no sepa donde ir, antes de
definirse con los avances de peones en
el ala de dama, pero no parece haber un
motivo concreto 20 ... a4 !? 2 1 .c2 b4
22.cxb4 h6 ! .
2 1 .g3
Es muy conocido que unas rondas
despus, a pesar de su victoria en esta
partida, Shirov cambi de jugada
contra Grischuk y perdi. Un signo ms
de que consideraba no haber sacado
mucho de la apertura en esta partida, lo
cual declar tambin en una rueda de
prensa. 2 1 .f4 a4 22.c2 b4 23.cxb4
xb4 ! 24.fxe4 g6 !oo 25.xf5 xb2
26.e5 xe5 27.b l :ae8 28.e4?? f4 !
-+ 29.g3 :e5 30.g4 :xe4 3 I .:xe4
xe4 32.gxf4 :b8 0- 1 ; Shirov
Grischuk, Wijk aan Zee 2003.
2t ...a4 22.c2 b4
El contrajuego negro sigue, de
manera caracterstica, lo bastante
rpido para no permitir a las blancas
iniciar un ataque despus de haber
eliminado los peones centrales.
127
cr-NL 1 999
1 28
2 t . .. f4
19 ... a4
La nica jugada que puede justi ficar
la entrega del pen. l 9. . . c5?! 20.a4!
deja un caballo muy fuerte en b5 y las
negras no pueden tomar todava en d5.
20.dl es 2 t .e2! ?
David Lafarga fue quien m e hizo
reparar en esta jugada, de una "oscura"
partida por correspondencia y que pone
los mximos problemas a las negras.
Anteriormente se haba jugado:
2 1 .f:Jd4 xd5 22.!!e3 !!tb8 23.!!h3?! (es
preferible b3 para eliminar la siguiente
posibilidad negra) 23 ...h6? ! (23 . . . !!xb2!
24.xh7+ Wf8GC>) 24.b3 a3 25 .c2
(25.b4!? f4 ! 26.xd5 fud5GC>) 25 ... !!c8
26.!!d l ( ahora s 26.b4!, con idea de
22.g5
Se ha jugado tambin la inmediata
1 29
26 es 27.g4 rs 28.gs
.
Estadstica:
En el conjunto de la variante las blancas consiguen tan solo el 52% de los pun
tos sobre casi 40.000 partidas, lo que puede considerarse satisfactorio para las
negras. En la denominada variante Svesnikov, la que comienza con la jugada b5,
las negras con 25.000 partidas mantienen el 48% de los puntos. En las variantes
recomendadas en este libro las blancas mejoran ligeramente el porcentaje, en el
caso de d3 contra f5 hasta el 53% y en el caso de c3 contra g7 hasta el 54%.
En todos los casos se puede considerar que el porcentaje de las negras es
satisfactorio.
130
1 3 .hS
1 3.hS
1 3.hS
1 3 .hS
0-0? Perdedora aunque bastante frecuente +h6? ! Las blancas logran controlar la posicin
f4 1 4.c4 b4? ! Pasiva. Deja las manos libres a las blancas ;!;
f4 1 4.c4 bc4 J S.c4 4 Complicada. Puede haber mejoras
131
CAPITULO
10
Valoracin **
2... e6 3.d4 cd4 4.4 jugadas 4... fic5; 4... h6 y 5... fic5
133
Pa rtida 1 0 . 0 1
Georgiev,K - Nadanian,A
S.fie3!?
Recomendamos esta continuacin
puesto que los anlisis a da de hoy
134
2 ... e6 3.d4 cd4 4.4 jugadas 4... r;;.c5; 4... h6 y 5 ... c.fk5
s b6
...
La jugada ms lgica y ms
frecuente, aunque las negras han inten
tado un amplio abanico de opciones,
casi todas las que se defienden de la
amenaza blanca de tomar en e6:
S d6?! (parece muy extraa) 6.3
7?! 7.b5+-.
S b6?! ( no es mucho mejor que la
anterior) 6.c3 7?! 7.b5 {jxe3
s.6+ wf8 9. n+-.
S (jb6!? Es algo ms lgica pero
...
..
6.c3!
La jugada clave que prepara el
viraje del caballo hacia la molesta casi
lla c4. El nico pero a esta jugada, es
que est avalada por una escasa expe
riencia prctica. 6.fle3 6 lleva a la
famosa posicin comn en las tres
variantes que cuenta con amplia expe
riencia a nivel magistral. En este
momento las blancas pueden saltar a b5
con cualquiera de los dos caballos y las
dos jugadas son peligrosas para las
negras. Tambin pueden atacar a las
dos piezas negras saltando a a4, que
resulta ms inofensivo. En cualquier
caso no vamos a profundizar en esta
lnea, a pesar de su evidente inters.
porque despus de haberla analizado,
creo que las negras tienen opciones
muy razonabes de resistir.
6 fk6
...
7.d2! (O)
135
7 d5?!
.
8.fllb3! xd4
Una concesin muy seria pero
inevitable. Si 8 dxe4? 9.xc5 xc5
I O.b5 ( I O.xe6 e5)
IO . . . e5
( 1 O . . .e7? l l .d6+ wf8 1 2 .c5+- )
l l .d4 ! fud4 1 2.cxd4 b8 ( 1 2 ...f4
1 3 .g3 ) 1 3 .llc l . 8 ... xd4? 9.xc5
xc5 1 O.xd4 f8 l l .b5.
..
9.xd4 d8 I O.g4
I O.exd5 exd5 ( I O...xd5?! l l .b5
) l l .d3 ff6 1 2.0-0 0-0;!;.
136
t -o
Pa rtida 1 0 . 02
Asauskas - Stan iszewski
Varsovia 1 999
S ...xb2
Es necesario tomar el desafio, pero
ahora todo depende de los anlisis
tcticos y hasta el momento parecen
favorecer a las blancas. S ...r;;.c s es una
trasposicin a la partida anterior.
6.2 a6
L a jugada 4... b6 h a sido empleada
repetidamente por Kvcinis con gran
xito. Las negras tratan de desplazar el
caballo blanco a la casilla b3 mante
niendo una flexibilidad envidiable en
su posicin. Si las blancas quieren
sacar alguna ventaja estn obligadas a
internarse en variantes ms o menos
agudas.
137
9.1hd2+-.
7 ...e3
La dama impide el salto a c4 que es
muy peligroso, como demuestran los
anlisis, y a la vez prepara su retirada a
c7. Veamos otras posibilidades:
7 e6 8.0-0! xd4? ! (8 ... b5
9.4ilf3 ff6 I O .a4; 8 ...d5 9.exd5 exd5
I OJ':te l ) 9.c4 c3 I O.d2 f3+
I I .xf3 d4 1 2.e3. 7 b4?! 8.0-0,
con una enorme ventaja de desarrollo.
Partida 1 0 . 03
Steinitz, W Green, V
-
Londres 1 866
8.0-0
Las blancas terminan el desarrollo y
la defensa negra parece muy dificil.
Incluso en este momento las blancas
tienen otra posibilidad atractiva,
8.2 ! ? c7 9.4. cayendo sobre b6.
2 ... e6 3.d4 cd4 4.14 jugadas 4... r;;.c5; 4 ... b6 y 5... r;;.c5
138
6 b6
Estadstica:
Es dificil establecer una estadstica fiable, porque las muchas traspos1c1ones
hacen dudar de donde incluir algunos grupos de partidas. Finalmente he optado
por hacer una estadstica de las 3 variantes incluyendo en todas la variante
comn, que por cierto arroja unos nmeros muy desfavorables para las negras.
De este modo los resultados son:
- Variante 4 ...b6 50% realmente envidiable sobre ms de 800 partidas.
- Variante 4 ...r;;.cs 49% que sigue siendo muy bueno para las negras.
- Variante S ...r;;.cs 4 1 % muy malo y verdadero reflejo de que esta lnea sufre problemas contra un amplio ramo de continuaciones.
139
l .e4 eS 2.f3 e6 3.d4 cd4 4.4 b6 La ms sana de las tres jugadas. Las blan
cas deben emplearse con seriedad para conseguir algo
- 5.e3 Compleja tcticamente
- 5.3 eS 6.4 Ms modesta pero suficiente t;
CAPTU LO
11
Valoracin **
Historia
La variante 5 . . . b6 aparece en
algunas partidas del jugador Sueco
Bengt Svensson a comienzos de los 90.
Casi inmediatamente despus empez a
jugarla el GM espaol Juan Manuel
Belln, que se ha convertido en su
principal defensor en estos escasos
doce aos de historia. En las primeras
partidas, esta idea provocativa no fue
tomada muy en serio y varios jugado
res intentaron una refutacin directa,
pero sin demasiado xito. La variante
sobrevive pero no ha conquistado el
Pa rtida 1 1 . 0 1
Alderete,J Hjorth,G
-
6.b5!? ( D)
141
6 a6
142
Estadstica:
Las negras obtienen un razonable 46% aunque el nmero de partidas jugadas
sigue siendo bajo.
Esquema Resumen : l.e4 eS 2.f3 e6 3.d4 cd4 4.4 f6 s.c3 b6
- 6.eS A pesar de todos Jos esfuerzos analticos las negras se mantienen oo
- 6.b3 t;;.b4 6.t;;.d2 Es una opcin sana y cmoda para las blancas ;!;
- 6.bS De momento parece una refutacin, pero hay muy poco material para
afinnarlo categricamente
CAPTULO
12
L a variante d e la clavada es
bastante popular entre los aficionados y
en el tipo de torneos actuales puede
resultar una interesante arma sorpresa.
El jugador de blancas a veces no est
bien preparado para dar la batalla en las
complicadsimas variantes principales
y en ese caso las negras pueden igualar
o asumir la iniciativa con facilidad.
Las blancas pueden intentar esqui
varla jugando 3.flc3, pero esto limita
sus opciones si las negras eligen la
Paulsen, por ejemplo. En mi opinin,
no queda otro remedio que estudiar la
refutacin y a pi icaria, lo dems es
144
I deas
La lnea se basa en un ajedrez muy
directo de desarrollo y amenazas y no
contiene grandes ideas estratgicas,
pero se puede citar la entrega de cali
dad, a cambio de una posicin slida y
la destruccin de la estructura de peo
nes blancos, y por supuesto la necesi
dad por parte de Jos dos bandos de
atender a la iniciativa, ms que a facto
res materiales o estticos.
Partida 1 2. 0 1
Krog ius,N - Korelov,A
7.g4!
Ahora no es posible 7.d2. como en
la variante 6 ... 5, pero esta jugada
ataca a la vez el punto g7 y el caballo y
lleva a las negras a un callejn sin sali
da, aunque lleno de rincones peligro
sos.
145
ms modesta.
1 2.flc7+ wd8
14.xe5 flxeS (D)
13.flxa8
xeS
1 5.a3!
El alfil apunta a la casilla d6 para
liberar el caballo. 1 5.re3?! es la jugada
automtica pero despus de 1 5 ... b6! las
blancas tendrn que dar el caballo por
los dos peones y las negras tienen una
estructura ms compacta que compen
sa la pareja de alfiles y el pen pasado
de la columna a. 1 6.'9d2 rb7 1 7 .flxb6
axb6 1 8 .rxb6+ we7+.
I S dS
146
1 5 . . . b6? ! 1 6.d6
1 8.g3+-.
f6
1 7.fJc7
fJf7
16.d6 fJg4
Las maniobras son similares en
otras variantes, por ejemplo: 16 fJc6
1 7.fJc7 wd7 1 8.g3 a6 1 9.fJa8! seguido
del inevitable fJb6; 16 f6 1 7.i>d2 !
( 1 7.b8 fJcco; 1 7. f4 fJg4 1 8 .i>e 1 b6ao;
1 7.fJc 7 ! ? wd7
1 8.fJb5)
1 7 . . . b6
( 1 7 . . . i>d7 1 8.b8 fJc6 1 9.b5+-;
1 7...d7 1 s.fJc1+-> 1 s.fJc1 wd7 1 9.fJbs
y el caballo est libre.
Partida 1 2 . 02
Schmidt,W - Boidman,Y
..
23 fJd 7 24.l:c 1
8.xg7 f8 9.a3 aS
Adems de la jugada de la partida
las negras tienen una serie de
alternativas pero todas ellas llevan a un
desastre absoluto sin demasiadas
complicaciones:
9 6?! IO.axb4! flxd4 l l .bxc3 !
(es lo ms contundente; l l .g5? es un
grave error l l ...xg5 ! ! 1 2.xg5 flxc2+
1 3 .wd2 fle4-+; l l .h6 no ofrece
demasiado por l l ...e7 1 2.bxc3 flxc2+
1 3 .wd2 flxa 1 14.xf8+ xf8 1 5 .xf8
wxf8 1 6 .d3 flb3+ 1 7 .wc2 b6 1 8.wxb3
i ) l l .. .flxc2+ 1 2 .wd 1 flxa 1 1 3 .g5 con
ventaja decisiva; Cabrera-Rodrguez,
Camaguey 2000.
9 ...flbS+?! 1 O.axb4 flxd4 l l .g5
b6 1 2 .d3 !? (l leva a un final muy bri
llante, pero ms limpio es 1 2 .h6!
xb4 1 3 .c3 flf5 1 4.cxb4 flxg7 1 5.xg7
g8 1 6.f6) 1 2 ...flf5 ( 1 2 ... d6!?)
1 3 .xf5 exf5 1 4.0--o-o g6 1 5 .e6! ! d6
1 6 .xd6 f6 1 7.d8+! 1 -0; Jevtic
Prokopisin, Hungra 1 995. 9... aS?
1 O.h6 e7 1 l .flb3+-.
..
147
Tastrup 1 998
148
7 fuc3
..
8.bxc3 {je7
La retirada natural. 8,.,{jaS parece
ms activa pero deja indefenso el
flanco de rey y las blancas se lanzarn
all. 9.g4 0-0 J O.(jid3 d6
A) l l .(jig5 ! ? Recomendada por
Byrne y Mednis y aparentemente ms
149
9.g4
Las negras ms1sten en su oferta
temtica de la calidad, que las blancas
harn bien en no tomar en cuenta. Las
alternativas para defender el pen de g7
tampoco son atractivas.
9 g6 1 O.fJbS ! ( 1 O.h4 hS no puede
pennitirse hS del blanco; 1 l .g3 d6
1 2.f4 a6 es menos claro. Hunt-Levitt,
8CF-chT 1 998) 1 0...0-0 1 J .tjJ_h6 i!e8
1 2.tjJ_d3 fJc6 1 3.f4 ( 1 3.g3 ! ?) 1 3 ...a6
( 1 3 ...d6!? 14.exd6 eS) 14.fJd6 tjJ_xd6
I S .exd6 eS 1 6.d2 aS J 7.tjJ_e4 bS
1 8.-O Sidenko-Gozis, I ECG 1 999.
9 g5!? Es una continuacin casi
indita:
A) 1 O.fJbS ! ( parece lo mejor)
IO ... hS ( I O ... d6 l l .exd6+-) l l .g3 h4
1 2.g4 fJc6 1 3.fJd6+ tjJ_xd6 1 4.exd6 i!g8
I S.f4 con clara ventaja.
8) I O .h4 hS l l .hxgS?! (demasiado
valiente) l l . ..hxg4 1 2.i!xh8 tjJ_f8 1 3 .fJbS
( tampoco la recomendacin 1 3 .g6
parece justificar el sacrificio blanco en
vista de 13 ...c7!+) 1 3 ...dS 1 4.exd6
fJa6 I S.tjJ_d3 tjJ_d7 1 6.we2 as 1 7.c4 b6
1 8.tjJ_e3 as 1 9.tjJ_d2 b6 20.tjJ_e3 as
2 1 .tjJ_d2 Y2-Y2 Grosar-De Waal, Sas van
Gent 1 986.
150
1 1 1/YaS
...
12.g3 d6
Las negras siguen con las jugadas
ms lgicas. Aqu tambin hay otras
jugadas aunque la oferta se reduce.
12 .. l::i:d 8 1 3 .h5 (todo parece cuadrar
en esta lnea pero las blancas tienen
tambin un tratamiento ms posicional
con 1 3 .(jg5 !? l::i:e8 1 4.b5) 13 ... d6
1 4.hxg6 fxg6 1 5.{j),f4 dxe5 1 6.(j;,xe5 l::i:d5
1 7 .f4 7 ( 1 7 . . . (j;,d6 1 8 .(j;,xd6 l::i:xd6
1 9.h3 ! h5 20.g3+-) 1 8.(j;,c4 xe5
( 1 8 ...l::i:xe5+! ? 1 9.fxe5 xe5+ 20.xe5
e5 2 1 .(j;,b3) 1 9.(j;,xd5 xd5 20.fxe5
e4+ 2 1 .wd2 (j;,d7 22.a:ae 1 d5 23.h3
(2 3.l::i:x h7 ! ! wxh7 24.l::i:h 1 + \Yg7 25.h2
.
151
1 7.h3+-) 1 7.h3+-.
13.b5!
La conocida cortina para neutralizar
la dama pero aqu las negras han logra
do que las blancas hicieran una jugada,
g3, ms pasiva que hS.
14.h5!
1 4.exd6 f6 proporciona a las
negras contrajuego. Es necesario ser
enrgicos porque en esta variante las
piezas negras estn cobrando vida.
14 fue5
..
1 9.exd6 g5 20.Hdl
Est claro que la posicin blanca
est desordenada pero el pen de d6
dificulta mucho el contrajuego negro.
152
Estadstica:
Las blancas consiguen un muy favorable 58% de los puntos en la variante global
sobre un total de 2500 partidas. La variante 6 ...fiJe4 da a las negras un catastrfi
co 3 1 %, mientras que la ms "respetable" y moderna 6 ... fiJd5 slo asciende al
35%. La variante 7.{j;_d2 que recomendamos da a las blancas el 67% de los pun
tos.
Esquema Resumen: l .e4 eS 2.fiJf3 e6 3.d4 cd4 4.fiJd4 fiJf6 s.fiJc3 b4 6.e5
- 6 ...fiJe4 7.g4 ftJc3 Realmente incorrecta aunque muy complicada +- 6 ...fiJe4 7.g4 aS Tambin dudosa, aunque menos clara que la anterior
- 6 ...fiJd5 7.{j;_d2 {j_c3 Muy delicada para las negras
- 6 ...fiJd5 7.{j;_d2 fiJc3 8.bc3 {j;_as Muy complicada, pero da a las blancas un ataque
tremendo
- 6 ...fiJd5 7.d2 fiJc3 8.bc3 e7 La lnea ms slida pero las blancas continuan
teniendo un fuerte ataque
CAPTULO
13
Valoracin ***
154
Partida 1 3 . 0 1
Sh irov,A - Grischuk,A
Unares 2001
155
d5
9.d3! ? (0)
sta es mi recomendacin. La
alternativa 9.exdS es ms popular y
tambin ofrece buenas perspectivas a
las blancas. Sin embargo pienso que
jugar 9.exdS es ir al encuentro de las
posiciones que buscan las negras y
estas posiciones tienen la caracterstica
156
9... d4
Objetivamente esta jugada no debe
ser la ms fuerte. pero s es la nica que
permite a las negras provocar una par
tida compleja. Las dos alternativas son:
9 ... dxe4 Las diversas fuentes no se
ponen de acuerdo en si esta jugada
lleva a igualdad muerta o es ligera ven
taja. La ltima versin de la ECO ni la
cita, con lo cual se ahorra el problema.
Tal vez lo que sucede es que nuestro
sistema de valoraciones no es lo bas
tante flexible. Podramos decir que esta
jugada ofrece algunas esperanzas prc
ticas a las blancas de ganar la partida y
muchas ms a las negras de entablar
(no hace falta ms que mirar los resul
tados). Creo que eso lo dice todo al
respecto. 1 O.flxe4 flxe4 l l .xe4 xd 1 +
1 2 .wxd l ya tenemos el final deseado.
Las blancas tienen la pareja de alfiles.
Las negras tienen algo de compensa-
1 2 ...!'e8
Impidiendo f4. Si 1 2 ...e6 1 3.f4
exf4 1 4.xf4 fld7 (Rigo-Hasangatin.
Presov 200 1 ) y ahora 1 5.flg3 dejando
abiertas las opciones h5 y flf5.
13.flg3
13 ...e6
157
16.h5!
Desarrolla y defiende f7 (la colum
na fse va a abrir), as que no parece una
jugada criticable. Pero de todos modos
la alternativa es tambin muy lgica.
1 3 . . .fJd7
( Ponomariov-Kortschnoi,
Donetsk 200 1 ) 14.f4 No estoy seguro
que sea lgico abrir de inmediato el
punto e5 para el caballo negro que
ahora est taponando el alfil. Las blan
cas pueden retrasar la ruptura e intentar
castigar la ltima jugada negra. (Son
interesantes 1 4.b4!?, controlando c5 o
bien 1 4.h5 !? g6 1 5.h6) 14 ...exf4
1 5.xf4 fJde5 1 6.h5 f6 1 7.b4 (esta
jugada tampoco parece necesaria)
1 7 ...e6 1 8.b5 fl 1 9.e2 fJa5=.
16 g6
1 7.h6
14.f4
Las blancas comienzan un ataque
basado en la columna "r'. Pero las
negras tienen una buena base en e5 para
sus caballos y es dificil romper su
defensa. Creo que veremos ms parti
das con esta posicin, antes de llegar a
una conclusin firme, pero las expecta
tivas blancas son ms atrayentes.
1 7 f6?!
158
doblaje de torres.
27.l:!n!
29.l:!ffi+-
fJcS
28J:rg7+
<;!}h8
Partida 13 . 02
De Firm ian - Khmelnitsky
22.exfS d3 23.cxd3 es
La dama sale, pero ahora el peligro
viene a travs de la columna f. Es peor
23 ...fJc5? por 24.b4! fud3 25.f6+-,
seguido de g7.
159
IO.t;tlbS+
Casi todos los jugadores de blancas
han optado por esta continuacin que
permite ms cambios. Veamos otras
opciones:
1 O.exdS xd3+ l l .xd3 xd5
1 2.xd5 xd5 1 3.xd5 exd5 Moldovan
-Chemov, Bucarest 1 992. Aunque las
blancas acabaron ganando, la ventaja es
microscpica.
I O.t;tle2! sta es mi propuesta. Las
blancas entregan un pen pero logran
una fuerte presin y lo recuperan cuan
do quieren. Me parece claramente
superior a las jugadas empleadas hasta
ahora, pero todava la posicin negra es
resistente. Veamos:
A) 1 O ... fue4?! (es peor) I I .fue4
dxe4 1 2.xd8+ wxd8 1 3.t;tlf4 g6 14.o-
O-O+ we7 1 5.t;tld6+ we8 ( 1 5 ... Wf6
1 6. 0 !) 1 6.!:i:d4 f5 1 7 .!:i:hd l . Aqu la
compensacin es enorme.
B) I O...d4?! l l .b5 y las blancas
han pasado la crisis y mantienen su
pareja de alfiles.
C) 1 O ...dxe4 1 l .xd8 wxd8 1 2.t;tlf4!
( 1 2.t;tlg5 !?) 12 . . .g6 1 3 .0-0-0+ t;tld7
1 4.t;tlg5. Las negras se enfrentan a una
presin persistente y dificilmente sal
drn de ella sin hacer concesiones ms
importantes que el pen que llevan de
ventaja.
1 o...t;tld7 l l.t;tlxd7+
18 f5 19.t;tlg3 d4 [ 1 9 ... !:i:ad8 es
..
160
CAPTULO
14
162
Partida 14. 01
Waitzkin,J - Maiwald,J
Bermuda 1 997
Ideas
5... a6 ( D)
163
6.e3 e7
7.b3
Es natural impedir el cambio y el
posterior despliegue del otro caballo en
c6. Ahora las negras tienen que perder
un tiempo tarde o temprano con el
caballo de e7, y seguramente para lle
varlo a una casilla peor que f6.
164
Mosc 1 999.
1 962.
9.g3;;!;
Con idea de avanzar el pen h para
desplazar otra vez al caballo y crear
debilidades en el flanco de rey.
9 e7
8.f4 (D)
IO.h4 O-o
Una decisin extraa, impulsada
por el deseo de dar una casilla de
retirada al caballo. En cualquier caso
las blancas, que tienen un refugio
seguro en el enroque largo y una
iniciativa prometedora en el flanco de
rey, estn algo mejor. I O ... h5? l l .e2;
1 0 ...6 l l .d2;!;.
l l.hS h8 1 2.a4!?
8 d6
...
1 7.g2
1 7.xb6? ! permite una cierta reac
cin despus de 1 7 ...d5 ! y si 1 8.e5?
( 1 8.e3 d4 1 9.xd4 xd4 20.xd4 e5 !
; 1 8.g2 !? !Iab8 1 9.a5 e5 ) 1 8 ... d4! y
de pronto las negras ganan.
165
30.fla7 g4
La partida ha entrado en una fase
puramente tctica y no est claro que
las blancas mantengan el control.
30 ...b8 ! ? 3 1 .4 5 32.fuf6+ fuf6
33.6 xc6 34.xc6;!;.
Partida 14.02
Rytshagov, M- Agopov,M
1 ra Liga 2001
1 mprecisa, no parece haber motivo
para abandonar la columna del extre-
166
5.M c7
La jugada ms caracterstica del
moderno sistema de Taimanov, aunque
su inventor prefera a6 y el desarrollo
rpido del caballo rey por la casilla e7.
6.e3 (D)
6...a6
La continuacin casi universal. No
obstante se han hecho algunos intentos
para ahorrarse esta jugada y comenzar
de forma inmediata la presin al punto
e4 a travs de las jugadas f6 y b4.
6 ...f6!? 7.f4 En este caso las
blancas tienen que cambiar su idea
7.d2 b5
Una jugada muy frecuente en el
esquema negro. La continuacin ms
frecuente, 7 ...ff6 se analizar en las
prximas partidas.
Una tercera jugada interesante es
7 ...xd4 que adems ha obtenido
resultados excelentes, y contra la cual
las blancas no han mostrado hasta
ahora una lnea convincente, a pesar de
lo cual es casi completamente ignorada
por todos. 8.xd4 e7 9.g5 Una
jugada que lleva el signo de admiracin
desde su partida de origen pero que no
responde a los interrogantes ms
inmediatos (tal vez haya que buscar las
mejoras desde aqu mismo y hay dos
167
8.0-0-0 b7
Es una de las continuaciones ms
lgicas. La ms frecuente tal vez sea
8 flf6, pero traspone a las prximas
partidas. Sin embargo, en vista de la
mejora 8 ...ff6 9.f4! jugada en la par
tida Topalov-Movsesian, ste es el
momento correcto para considerar la
opcin 8...ff6 9.f3 b4 I O.fla4, que slo
puede obtenerse jugando 8 ... b4 en esta
posicin:
8-b4!? 9.fla4 flf6 I O. f3 Los pro
gramas son bastante felices con esta
posicin (algn da los programadores
nos explicarn que le encuentran), y
168
I O.fJdS b7
Es natural que en una partida viva,
un jugador humano no se decida por la
captura de la pieza, pero en los tiempos
que corren, no es descartable que
alguien chequee la defensa con un pro
grama y se sienta listo para jugarlo. Sin
nimo de ser exhaustivos proponemos
algunos caminos posibles. La sensacin
que queda es que la captura es muy
peligrosa:
IO exd5 l l .exd5 b7 1 2 .d6 c6
1 3 .e2 ( intentando O) 13 ...xg2 (si
1 3 ... 0-0-0? ! 1 4.0 con clara ventaja;
1 3 . . .fJf6? es mala por 1 4.0 fJe4
1 5 .xe4 xe4 1 6.b6+-) 1 4.e l f6
( 1 4... fJf6 1 5 .b6! fJe4 1 6. 0 !; 1 4 ...00-0? 1 5 .a5 c6 1 6.0+-) 1 5.c3
(para impedir que el rey negro se
esconda por t7) 15 ... g6 1 6.fl O
1 7.h3.
..
Sarajevo 2001
169
170
..
1 0.0 fg4?!
Renunciando a la mejor posibilidad
de deshacerse de la clavada, lo cual en
las prximas jugadas ser cada vez ms
difcil. El juego negro, con el desarro
llo muy retrasado y molestas amenazas
a las que atender, est ya muy compro
metido. IO xf3! es la mejor opcin:
( I O . . . d6? l l .xe5 dxe5 1 2.xe5+-)
l l .gxf3 c6 ( 1 1 ... a5 1 2.Wb 1 i) 1 2.l"l:g 1
con dos posibilidades:
A) 1 2 ... b4 (enva el caballo a la
casilla deseada) 1 3.2 d5 1 4.4 a4
1 5 .c4! b7 ( 1 5 . . . dxc4 1 6.b5+-)
1 6.b3.
B) 1 2 ...b7 1 3.2 Ahora el movi
miento del caballo anima a las negras a
realizar su ruptura temtica. ( El trata
miento ms tranquilo comenzando con
1 3.Wb l parece ms sano) 1 3 ...d5 ! ?oo
...
l l.g3
l l .h3 flxf3 1 2.xc7 fud2 1 3 .xd2
flf6 1 4.e5 b4 1 5.fla4 5 1 6 .xd5
( 1 6.d6 !?) 1 6 . . . exd5 1 7.flb6 a7
1 8.fud5.
171
Partida 14.04
Vallejo,F - Miladinovic,I
9.13 (D)
1 6.eS!?
El tratamiento violento, muy
caracterstico de Topalov y justificado
por la posicin del rey negro. Tambin
es posible un plan ms tranquilo.
1 6.d6 b4 1 7.e2 xe2 1 8.fue2 ;!;.
9 bS
172
9 d5 Es la ruptura lgica de la
siciliana y se hace poniendo presin
sobre la casilla e4 que "defiende" slo
nominalmente el caballo clavado. Sin
embargo las blancas tienen una conti
nuacin muy prometedora. 1 O.a3 y
ahora:
A) I O...xc3 l l .xc3 dxe4.
A l ) 1 2.fuc6 !? Una compensacin
muy clara se obtiene tras 1 2...xc6
( 1 2 ...bxc6? ! 1 3.fxe4) 1 3.xc6+ bxc6
14.fxe4 xe4 1 5.d3 f6 ( 1 5 . . . f5
1 6.xe4 fxe4 1 7.!id6) 1 6.c5.
A2) 1 2.fxe4 fue4 1 3.d3 ( 1 3 .c4)
1 3 ...f5 1 4.c4 e5 1 5.fuc6 xc6 1 6.!id5
e6 1 7.!la5 6?! (tal vez sea ms
tenaz jugar 1 7... e7 pero la compensa
cin de las blancas es muy clara)
1 8.c3 ( 1 8.xe6+ xe6 1 9.!lxe5;!;; )
1 8 ... 0-0 1 9.!ixe5 "a2 20.b3 "xa3+
2 1 .\tlb l b5 22."e l !id8 23.c4+ Wh8
24.d2 1 -0 Polgar-Horvath, Halkidiki
2002.
B) 1 O...e7 l l .exd5 fud5 1 2.fud5
exd5 1 3 .d3, con una ligera ventaja.
C) IO .. a5 l l .b3 ! Esta es la clave
de la falta de pegada de la ruptura
temtica d5. Las negras no pueden
mantener su alfil de casillas negras en
el tablero, y las casillas de este color de
su campo van a sufrir.
C l ) l l . . .b6?! 1 2.xb6 xb6
1 3.exd5.
C2) 1 l . . .xc3 1 2 ."xc3 dxe4
1 3 .fxe4 ( 1 3.c5!?) 1 3 ... 0-0 1 4.d3;!;;.
C3) l l . ..dxe4 1 2 .xa5 "xa5
1 3.fxe4 ( 1 3.fue4 es probablemente lo
ms simple, pero no se puede criticar a
las blancas por tratar de mantener las
damas y atacar. 1 3 . . .xe4 1 4."xa5
fua5 1 5.fxe4 e5 1 6.b6 6 1 Hric4)
...
seguido de !'!:g7.
B) 18 ...xf6 1 9.<!Jxf6+ !'!:xf6 20.d5
!'!:f7 2 l .xa8+-; Arizmendi-Arbakov,
Linares op 2003.
9".<!Je7!? Es tal vez la alternativa
ms seria a 9...<!Je5. En un principio
pareca que las blancas tenan que
aceptar el doblaje de peones, pero por
lo visto se pueden permitir el lujo de
descolocar su caballo de d4. Claro que
si las piezas bien colocadas no pudieran
moverse el bando con ventaja posicio
nal pronto quedara en zugzwang!
1 0.e2! (prepara el acoso y cambio
del alfil de negras, una estrategia muy
repetida en esta variante) 1 O . . .d5 (con
otras jugadas la retirada del caballo a e7
quedara fuera de lugar) l l .a3
( l l .g5 !? dxe4 1 2 .xf6 gxf6 1 3.d4
exf3 1 4.xf6 <!Jg6 1 5 .xf3 f5oo)
l l ...c5 ( l l ...a5 1 2.b4!? b6 1 3 .xb6
xb6 1 4.exd5 exd5 1 5 .d4 c7 1 6.f4
c6 1 7.<;!;lb2 e6 1 8.4 las blancas
disponen de la casilla d4 y piezas acti
vas, pero las negras no estn sin
contrajuego. Magem-Reefat. Dhaka
2003) 1 2.exd5 <!Jfxd5 1 3 .<!Jxd5 exd5
( 1 3 . . .<!Jxd5?! 1 4.c5 xc5 1 5 .<!Jf4)
1 4.xc5 xc5 1 5 .<!Jf4 ( 1 5. d4 fuerza
un final muy favorable, pero las
blancas quieren ganar un pen) 1 5 ... 5
1 6.g4 d7 1 7.<!Jxd5 <!Jxd5 1 8 .xd5
xd5 1 9.!'!:xd5; Fressinet-Tregubov,
Halkidiki 2002.
10.f4! (D)
Con esta idea, similar a la de la
partida de Topalov, las blancas logra
ron una ventaja apreciable en una lnea
que haba dado buenas posiciones a las
173
1 74
1 2 .e5;l;; ) 1 2 .b3 b4 1 3 .4 ! d8
1 4.xa5 xa5 1 5 .b3; I O ... xc3
l l .xc7 xd2+ 1 2.f!xd2; 1 o... a 5
l l .b3 xc3 ( l l ...d8 1 2 .a3) 1 2 .fua5
xd2+ 1 3.xd2.
1 1.6!
Una jugada realmente com1ca y
brillante a la vez. Las blancas parecen
tener aqu una ventaja garantizada.
Pero al menos una alternativa es inte
resante: l l .xe5 xe5 1 2.6 c5?
( 1 2 ...xc3 1 3.fue5 xd2 1 4.f!xd2 b7
=) 1 3.fub4 xb4 1 4.e5.
I I .Wb l ! ? ( para intentar b5 )
l l . . .a5 !? ( l l ...e7? 1 2.xb5 axb5
1 3.xb5 b8 1 4.c3+-; l l . ..xc3
1 2.xe5 xe5 1 3.xc3, de nuevo b5
es la amenaza, 1 3 ...f!b8oo) 1 2.xb5
axb5 1 3.xb5 b8 1 4.b4 ( 1 4.6 wf8
1 5 .c3 g6oo) 14 ... 0-0oo.
1 6 b4 [ 1 6 . . . d5 1 7.e5;l;;] 1 7.d l
.
175
Dortmund 2001
I O.b3 bS
La jugada casi universal. La captu
ra en c3 dejara las casillas negras muy
dbiles. Otras opciones:
IO ...xc3?! l l .xc3 (menos claro,
aunque interesante, es 1 l .bxc3 4
1 2 .xc4 xc4 1 3 .c5;l;; Rada-San
Emeterio, Mondariz 2002; pero es muy
dudoso que la mejor estrategia de las
negras sea cambiar su caballo por el
alfil blanco) l l . ..xc3 1 2.bxc3 d5
( 1 2 ... b5 puede ser un intento de mejora
1 3.5. para c4; 1 3 ...6 1 4.fuc6 dxc6
l 5 .e2 e5 1 6.d6;l;;) 1 3.d4 d7 1 4.e5
( 1 4.exd5 ! ? es una eleccin menos
ambiciosa pero que garantiza una
pequea ventaja) 14 ...g8 Wiegelman
Suetin, Berln 1 993, y ahora con 1 5.c4 !
las blancas estaran bastante mejor.
176
l l . e7
..
La
vieja jugada
de
Portisch,
177
1 2.\!;>bl
Junto a 1 2.t2, que a veces traspo
ne al texto, monopolizan las experien
cias en esta posicin. Como pasa a
menudo, la jugada wb 1 no impresiona,
pero es til en la mayora de las varian
tes, y cede a las negras la ocasin de
mostrar sus planes a corto plazo. An
as, deja demasiadas opciones a las
negras, y es posible que el orden ms
exacto sea primero t2. Veamos:
1 2 .f2! d6 ( 1 2 . . . 0-0 1 3.xe5 ! ?
xe5 14.f4 b8 1 5.e5 8 1 6.d3;!;)
1 3.g4 ( 1 3.\!;>b 1 ! traspone a la partida
principal) 1 3 ... 0-0 y ahora:
A) 1 4.g5 (es un primer intento de
mejora) 1 4...fd7 1 5.f4 4 ( 1 5 ...b4!?)
1 6.xc4 bxc4 1 7.2 b7co.
B) Si 1 4.!'g l fd7 1 5. f4 c4
( 1 5 ... b4 !?) 1 6.g5?! ( 1 6.xc4) 1 6...b4
1 7.xc4 ( 1 7.2 e5!=t) 1 7 ...xc4 y las
negras han tomado la in iciativa;
Motylev-Alekseev, Tomsk 200 l .
1 2.g5 Parece inofensiva por
1 2 ...g6 y la dama debe moverse de
nuevo, pero Leko se las ingeni para
obtener una posicin ms agradable,
aunque muy seca, que no ser del gusto
de todos: 1 3 . g3 d6 ( 1 3 . . .xg3
14.hxg3;!;) 1 4.t2 !!b8 (la captura del
pen tras 14 ... xh2 !? llevara a una
posicin mucho ms compleja y de
evaluacin totalmente oscura) 1 5.\!;>b l
0-0? ! 1 6.c5 ! xc5 1 7.xc5 xc5
1 8.fuc5 !'b6 1 9.a4 ! . No es mucho pero
la posicin blanca es preferible; Leko
Vallejo, Linares 2003.
1 2.f4?! c4 1 3.xc4 bxc4 y el
caballo no tiene buena retirada, 14.e5
d6 1 5.xf6 xf6 1 6.4 b7+.
178
1 2 .. d6
.
1 4.g4 b6
Con esta jugada las negras toman
un fuerte compromiso. Pero veamos las
alternativas: 14 b4 1 5 .2 ( 1 5 .4 ?!
deja el caballo e n una posicin apurada
1 5 . . .fd7!
1 6 .f4 xg4 1 7.\Wg l oo)
1 5 ...a5?! (esto no parece llegar a tiem
179
I S.h4 c4 (D)
16.1hc4
En comparacin con las variantes
de los comentarios a la jugada 1 3, las
negras estn mucho mejor preparadas
para crear amenazas a lo largo de la
columna "b". En mi opinin es el
momento para buscar mejoras.
16.e2! ? (comunica las torres y prepa
ra g5 ) 1 6 . . . b4 1 7.a4 e5 ( 1 7 . . .d7
1 8.c4 xa4 1 9.xa6 fla8 20.e2 !;
1 7 ...d5? 1 8.g5 5 1 9.exd5 exd5 20.f4
+-) 1 8.a7 flb5 1 9.xc4 xc4 20.b6
c7 2 1 .fuc8 xc8 22.g5.
16 bxc4 1 7.fld2
180
Estadstica:
Una vez ms, dada su relacin con la Paulsen, hay problemas para hacer una
estadstica porque muchas variantes pueden incluirse en una u otra.
Seleccionando las partidas que comienzan cori la posicin del diagrama inicial
del captulo, sobre 3 1 .000 partidas las negras consiguen un muy satisfactorio
49% de los puntos, el ms alto de todas las variantes importantes de la Siciliana.
Este resultado no es raro si tenemos en cuenta que el tipo de posiciones desagra
dan ms al jugador de ataque, muy frecuente entre los partidarios del pen rey.
La variante propuesta, similar al ataque ingls (con e3 y l!!/d2 ) slo consigue un
50% de los puntos, pero si precisamos ms el orden e incluimos la jugada o-o
o antes de tJ, como se recomienda en el libro, el porcentaje sube a un envidiable
60%, aunque sobre un grupo bastante reducido de 220 partidas.
Esquema Resumen : l .e4 eS 2.flo e6 3.d4 cd4 4.fld4 flc6 s.flc3
- 5 ...a6 6.e3 flge7 Compleja. Las blancas pueden mantener la iniciativa, pero
las negras tienen mucho juego y campo para mejorar ;!;
- 5 ... c7 6.e3 flf6 Ambiciosa nueva idea, pero las negras tienen problemas des
pus de 7.f4 ;!;
- 7...b5 8.o-o-o b4 Ambiciosa y compleja con mucho campo para investigar ti=
181
CAPTULO
15
Historia
Luis Paulsen ( 1 833- 1 89 1 ) fue uno
de los grandes jugadores y tericos del
siglo XIX. De origen alemn, pas gran
parte de su vida en los Estados Unidos
donde comenz su carrera ajedrecista.
Un poco eclipsado, primero por
Morphy y luego por Steinitz, particip
activamente en el debate de las ideas y
desarroll su propio estilo, con una
importante tcnica defensiva y sobre
todo una inagotable capacidad de pro
poner nuevas ideas tericas principal
mente en la Defensa Siciliana. Muchas
variantes de esta apertura podran l le
var su nombre, pero finalmente la
variante que lo lleva fue seguramente
introducida por Anderssen en la dcada
de los 50.
Paulsen la analiz y comenz a
jugarla unas dcadas despus, curiosa
mente como un refi namiento para
evitar la variante Szen, ( l .e4 eS 2.0
e6 3.d4 cd4 4.d4 6 5.b5 ! ), que
haba puesto en dificultades el orden
que ms adelante resucitara Taimanov.
Maestros de la primera parte del
siglo XX como Tartakower, la tuvieron
en su repertorio, pero es tal vez su
poca ms oscura. Alrededor del ao
1 940 comenz a estudiarla y jugarla
con xito uno de los pioneros de la
escuela sovitica I lia Kan, motivo por
el cual los rusos le dan ese nombre.
Pronto se le unieron otros tericos y
entrenadores famosos como Koblenz,
Furman o Suetin, pero mucho ms
importante, comenz a ser utilizada por
un amplio grupo de maestros de prime
ra fila de la escuela sovitica como
183
Partida 1 5 . 0 1
Nunn,J Szmetan,R
-
Bie/ 1 982
184
s . r6
.
6.4:lc3 d6
Las negras eligen una continuacin
algo pasiva. Puede parecer que van a
trasponer la partida a un erizo ortodo
xo, que se produce ms a menudo en la
185
9...c7
Las negras siempre se oponen a e5,
aunque no est claro que sea una ame-
naza inmediata. Veamos las otras
formas de hacerlo:
9...6?! El caballo no est bien e n
esta casilla en los esquemas erizo.
1 o.e3 d7 l l .wh 1 c7 1 2J:k 1 I'fd8
1 3.e 1 ;!;; Mainka-Schneider, Nort
West Cup 200 l .
9...bd7!? Esta jugada anima a las
blancas a lanzar g4, pero esa no es una
estrategia sin riesgos. 1 O.f3 c7
l l .e2 !'e8 1 2.g4 b6 1 3.b3?! ( 1 3.g5 ! )
1 3 . . .d 5 1 4.e5 fd7 1 5 .cxd5 xc3
1 6.b2 con mucha compensacin pero
muy poca claridad. Mainka-Graf, Bad
Lauteberg 1 98 1 .
9...b6?! I O .e5 dxe5 l l .fxe5 fd7
1 2.t3 !!a7 1 3.f4.
l l.el bd7
Nunn ha jugado muchas veces esta
posicin con blancas y siempre con
resultados favorables. Precisamente es
otra partida suya la que sigue con:
l l ...f8 1 2.h4 b6 1 3.!!ae l (el plan
blanco es cristalino, acumulacin de
fuerzas y ataque al rey) 1 3 . . .bd7
14.d3 b7 1 5 .c2 ( 1 5 .e5 no sirve an,
pero despus de la ltima preparacin
es una amenaza inmediata; 1 5 ... dxe5
1 6. fxe5 xe5 1 7.c2 g6) 1 5 . . . g6
( 1 5 ...xc4? 1 6.e5 dxe5 1 7.fxe5 xe5
186
1 2.g3
Nunn eligi dos veces esta jugada
en 1 982 y logr dos victorias rpidas.
La estrategia es la misma sealada en el
comentario anterior: acumulacin de
fuerzas para hacer factibles las rupturas
e5 y/o f5 contra el enroque negro.
Pa rtida 1 5 .02
Hracek,Z - Oral,T
12
La
otra
partida
continu
con
7 6
187
188
9.6--0 (D)
8.c2!?
Una jugada ambiciosa que ha sido
empleada solo ocasionalmente por
algunos fuertes grandes maestros. La
jugada principal es: 8.xc6 pero aqu
despues de 8 ... dxc6 9.e5 d4 I O .exf6
xc3+ l l .bxc3 xc3+ las blancas
tienen que elegir entre 1 2.d2, una
continuacin anodina por 1 2 . . .xd3
1 3 . fxg7 flg8 14.h6 c3+ 1 5 .wfl f6
mos comentarios.
9 xc4
...
1 0.e2 S
Casi la nica jugada probada hasta
ahora. Opciones tan plausibles como
lO ... bS tendrn que esperar. La que s
ha tenido una oportunidad es:
IO...c7 l l .wh l 0-0 muy atrevido
( l l ...d5 1 2.exd5 c3 1 3.bxc3 fud5
1 4.a4 ; l l . . .d6 !?) 1 2.g5 (se prepa
ra !!e 1 ; hay muchas piezas negras en la
columna e) 1 2 ...fub2 1 3.e5 ! ( 1 3 .xf6
posiblemente slo d para tablas
1 3 . . .gxf6 1 4.g4+) Quemando las
naves o con un clculo completo de las
complicaciones?
A) 1 3 . . .xc3? 1 4.xf6! gxf6
1 5 .g4+ wh8 1 6.exf6 !'g8 1 7.h3+-.
B)
1 3 . . . xc3
1 4.xf6 gxf6?
( 14 ... g6) 1 5.exf6!+-.
C ) 13 ...e8 1 4. xe6 xc3 (tras
14 ... dxe6 1 5 .e4 f5 1 6.xb4 el pen
est ampliamente compensado; si
14 ... fxe6 1 5 .e4 I'f5 1 6.xb4 !!xg5
1 7.e7 ! +-) 1 5 .xf8 xf8 1 6.!!ac l .
189
t t .wh t
La ltima jugada preparatoria. Las
blancas sencillamente se olvidan de
que tuveron un pen e y lanzan un
asalto con los peones f y e aprovechan
do los tiempos ganados para desplegar
adecuadamente sus piezas. Seguro que
hay jugadores que prefieren las negras,
y los programas informticos entre
ellos, pero a m el ataque blanco me
parece peligroso.
l t ... d6 12.f4
Lanzar ya el asalto es lo ms
natural, pero puede haber otras jugadas
tiles como 1 2.d2 seguido de la
centralizacin d e la torre y f4-e5.
1 2 ...6 13.f5
190
24.eS?!
Esta jugada desenroca al rey negro,
pero el punto firme en e5 siempre es
una garanta de mucha defensa en la
siciliana.
1 4 we7
I S.fxe6
Las blancas se entregan a la orga
de los sacrificios, pero de nuevo haba
opciones de aumentar la presin por
ejemplo mediante 1 5 .g5 ! ?, cmo se
defenderan las negras entonces?
26.xh7+
7.a3 ( D)
191
7 ...d6
192
9.!!cl
Si se deseaba llevar a cabo el plan
con f4 es el momento de jugar 9.d3
(ver tambin el comentario a la jugada
siguiente), pero ahora las cosas no son
perfectas: 9...b7 1 O. f4 ( 1 O.o-0 fJbd7)
1 O ...fJbd7 1 l .b4 ( I I .o- fJc5oo; 1 I .!!c 1
fJc5oo) I J ...b5 ! ?oo.
9 fJbd7 1 o.e2
.
193
13 ...!!ac8 14.b4
t3.wh t
Estrictamente esta jugada es una
novedad. Hasta el momento casi todas
las partidas haban seguido con 1 3.b4
(el mismo plan de la partida) o bien con
1 3 .d2 o 1 3.e l , que lleva a situacio
nes similares. Slo una partida se apar
ta de forma clara de estos esquemas:
1 3 .b3 IIac8 1 4.IIfd l b8 1 5.wh l IIfe8
1 6.f2 d8 1 7 .fl c7 1 8.g l a8
1 9.flc2 h5 20.h4 flc5 2 1 .a2 d5 y pare
ce que las negras se han liberado sin
14. b8 I S.d2
..
16.IIc2 l::re8
194
20.\!llc l h6 2 1 .flb2!?
E s un momento clave. Las blancas
reconocen que todava no hay mucho
con la ruptura c5 y vuelven a reagrupar
sus piezas. M ientras tanto las rupturas
b5 y d5 de las negras siguen siendo
imposibles, y el plan con g5 ha queda
do casi olvidado con el pen en h6.
2 1 .c5?! b5 ! 22.c6 fle5oo.
1 7 7 1 8.1
1 8...l:icd8 19.l:!b 1 !
La torre se coloca frente a la dama
negra y a partir de ahora todos los
posibles avances de los peones blancos
del flanco de dama comienzan a estar
pendientes sobre la posicin negra. Es
interesante observar que la dama negra
no tiene n i nguna columna donde
esconderse de las torres blancas.
23 \!llcS 24.b5?!
195
33 f4 34. [34.xa5? ! c7 !
35.b5 3 !+] 34...e6 3S.xaS c7!
36.bS 4 37.c4 [37.cb2 !? fub5
( 3 7 . . . c8=)
38.axb5]
37 ...xbS
38.axbS b8 [38... f5 ! ? 39.b6 c6oo]
..
24...aS 2S.6
Esta era la idea de Kasparov que
despus de haber cedido la casilla c5 a
los caballos negros est obligado a
hacer algo enrgico. 25.e5 xe5
26.xe5 dxe5 27.c6 ( 27.c 5 ! ?oo)
27 ...xc6 28.bxc6 e4.
..
Partida 1 5 .04
Kasparov,G - Vallejo,F
Unares 2002
196
8 ...b7 8.0
9 flc6
I O...ftb8
Demasiado elaborada. La idea debe
ser defender el pen de b6 en un grupo
amplio de variantes importantes como
aquellas en las que se cambia en d4.
La jugada crtica debe ser aqu:
197
14.f4!
Ahora las blancas van a conseguir
el paso a un esquema agresivo que ya
vimos en una partida de Ehlvest,
ganando tiempos.
198
1 9.fldbS?!
Wiesbaden 1 981
32.f!:e l !
e8
33.e2
flxdJ?
..
8 :f)e5
199
200
1 2.0-0-0!? hS
Estadstica:
Hacer una estadstica de este tipo de variantes que pueden trasponer a muchas
otras ms adelante resulta complicado. Para esquivar en lo posible este problema
he decidido hacer dos estadsticas, una de las variantes que se agrupan bajo este
epgrafe que son las que la Enciclopedia de Aperturas denomina como 84 1 , 842,
843 y 844 y otra de todas las partidas que empiezan con la posicin bsica, aun
que muchas de ellas luego deriven a la Taimanov o a la Scheveningen. El prime
ro sobre 1 0.000 partidas da un resultado del 47% para las blancas, un verdadero
xito para esta variante y que justifica por completo su catalogacin como 5
estrellas. El segundo, sobre 34.000 partidas, da un resultado del 5 1 % para las
blancas que es ms normal pero sigue siendo excelente para las negras.
El resultado de la variante 5.c4 recomendada como la lnea de nuestro
repertorio, no mejora el porcentaje global; sobre 4.300 partidas da un 5 1 % para
las blancas, no muy bueno, pero sensiblemente superior al de las variantes agru
padas de 84 1 a 844. Dentro de esa variante, la lnea considerada la mejor por la
teora 6 ... b4 da un 52% para las blancas, mientras que la ms frecuente 6 ... c7
vuelve a obtener un magnfico, desde el punto de vista de las negras, 46% para
las blancas. Pero este 46% sube hasta un 53%, ya dentro de los nmeros norma
les, cuando nos limitamos a la respuesta blanca recomendada, 7.a3.
201
Esquema Resumen: t .e4 eS 2.flt3 e6 3.d4 cd4 4.fld4 a6 S.c4 ff6 6.flc3
ahora:
CAPTULO
16
Historia
La variante aparece en los aos
1 940 empleada ocasionalmente por
Tartakower, a partir de ah, en ningn
momento ha logrado respetabilidad
entre la elite.
Ideas
Generalmente conseguir la pareja
de alfiles o disputar el control de la
casilla d5 con piezas.
Partida 16.01
De Firmian,N - Bator,R
La idea de un temprano e5 en la
Siciliana se ha hecho popular cada vez
en ms posiciones, pero en la variante
que nos ocupa, se considera incorrecta
debido al jaque en b5. En mi opinin
las variantes ms tericas no son tan
claras, y las negras pueden lograr un
juego activo aunque sea a costa de un
pen. En la variante recomendada las
blancas se conforman con una ligera
ventaja pero las posibil idades de
contrajuego de las negras son muy
limitadas y eso hace la variante con e5
poco atractiva.
Sverige 1 996
S.bS+! (D)
203
6.ers
Naturalmente es la jugada ms
204
6 a6 7.a4
205
l l ... e4
La nica jugada practicada hasta la
fecha y slo en dos partidas de Bator,
que si decidi repetirla, debe ser por
escasa confianza en las alternativas :
l l . ..ff6 l 2.g2 ! d5 l 3.g5 ffe4 l4.f3
fJd6 l 5.xd5; l l ...fJe7 l 2.g2;!;.
1 2.b4!?
Obliga a las negras a jugar sobre el
filo de la navaja, pero parece imposible
que las blancas no tengan una forma
tranquila de consolidar su ventaja, por
ej emplo: 1 2 .fJc3 fJf6 1 3 .g5 fJxd5
l 4.xd5 e7 l 5.e3 seguido de o-o-0.
1 2 ...f6
E n una partida posterior Bator
cambi de jugada y tambin, como en
esta, salv la partida al final pero pas
por momentos difi ciles: l 2 . . .fJa4
l 3.e3 ( l 3.g5 !? e7 l 4.h5) l 3 ...e7
1 4.g5 d7 ( l 4 ...xg5 !? l 5.h5 f6
l 6.xg5 xf5 no es tan claro) l 5 .d4
xf5 l 6.xe4 e6 ( Winsnes-Bator,
Sverige 1 997) y ahora con l 7.fJd2 ! (en
lugar de la aventurera b7) la ventaja
blanca est fuera de toda duda.
1 4... dxc5
I S.b7 l"ac7?!
Parece normal l 5 ...fJe7, intentando
aplacar el ataque; l 6.xa6 xa2
l 7.xb5 fr6 y aunque hay una fuerte
presin, no se ve un camino fcil: l 8.o
O ( l 8.fr3 b2) l 8 ... e7 l 9.fr3 b2
20.a l !? xa l 2 l .llxal o-o 22.fJd5
f6 23.fJxf6+ gxf6 24.c5..,.
1 6.xa6 d6?!
Permite a las blancas lucirse, pero
ya no haba buenas soluciones:
1 6... b2?! l 7.c4! bxc4 ( l 7 ...b4+
l 8.d2 xc4 l 9.fJa3 d5 20.xb5+-)
1 8.0-0 (con un ataque arrollador)
l 8 ... d7 1 9.a4 b4 20.b5.
16 ...fJf6!? 1 7 .xb5+ fJd7 1 8.0-0
e5 ! (con idea d6) 1 9.f4 ! exf3 20.e l
e7 2 l .d2. con idea de c4.
206
crear problemas:
7.f5 a6 ( O)
Nos encontramos en un momento
clave. Mi recomendacin es la jugada
de la partida, que lleva a una lucha
compleja en la cual las blancas parecen
tener buenas chances de aprovechar la
debilidad de la casilla d5. La continua
cin ms terica, lleva a la postre a
207
1 0.5!
Siempre en lucha por la casilla d5.
Esta variante que podemos considerar
la principal, ya no puede trasponer a lo
anal izado en la partida anterior corres
pondiente a la jugada 4 ... e5.
208
IJ o-o 14.<;Je4!
14 a5+
.
I S.we2 !
El rey no corre mucho peligro aqu
y de momento es necesario evitar c3
para no dar un fci l contrajuego a las
negras. 1 5 .c3 b4 1 6.l:ld 1 bxc3 1 7 .bxc3
l:lab8 1 8.c4 d8 ! oo; Zagrebelny
Vasilevich, Alushta 1 994.
I S l:lac8?!
.
1 6.lThdl
Suficiente para una ligera ventaja,
pero analicemos la propuesta de Har
Zvi: 1 6.<rJxd6! ?
A ) 1 6 ... Hc7 1 7 .<rJxf7 <rJxb3 ( 1 7. . .
Hfxf7?? 1 8.a8+-; 1 7 . . .Hcxf7? 1 8.c5
+-) 1 8.<rJd6+ wh8 1 9.xb3 b6
20.<rJe4.
8) 1 6...<rJxb3 1 7.xb3 l:lc6 ( 1 7...
l:lcd8 1 8.l:lhd l ) 1 8.<rJe4 (fJe7 1 9.l:lhd l
l:lc4 20.t3 Hfc8 2 l .c3 y la posicin
blanca es inatacable, por lo tanto el
pen de ventaja es casi decisivo. Esta
lnea es fundamental para considerar
que la variante 5 ... e5 est en sus horas
bajas.
1 8 c7 1 9.c3 c6?
.
22.e2!
Evitando las posibles amenazas y
209
preparando b3.
Estadstica:
Las blancas logran un 58% de los puntos, bastante favorable, sobre un total de
1 000 partidas. En las lneas recomendadas con {j;_a4 el porcentaje sube al 66%
pero el nmero de partidas es escaso, unas 70.
Esquema Resumen: t .e4 eS 2.flf3 d6 3.d4 ed4 4.fld4 eS
- 5.{j;_b5 {j;_d7 Antiposicional, y sin embargo bastante slida ;!;;
- 5 .{j;_b5 fld7 6.flf5 a6 7.{j;_a4! Acaba siendo pasiva para las negras tambin, aunque de momento quedan ms piezas ;!;;
CAPITULO
17
Historia
En los aos 60, Lein la puso en
prctica algunas veces, pero luego
qued en el olvido hasta que fue
rescatada en la dcada de los 90 por
Viktor Kupreichik, un jugador de gran
ingenio tctico deseoso de evitar largos
duelos tericos. Los buenos resultados
de Kupreichik atrajeron la atencin de
algunos otros jugadores como Efimov,
Kengis (curiosamente a partir de una
derrota contra Kupreichik en el lado
blanco), H eberla y Pavel Blehm. Su
teora est en paales, pero si conside
ramos la necesidad de amplios y varia
dos repertorios de los jugadores de hoy,
debera desarrol larse cada vez ms
deprisa en un futuro cercano.
Ideas
Es dificil pensar que una jugada tan
poco flexible como 5 ...d7 tenga algu
na virtud, o por lo menos ventajas
tangibles sobre 5 ...c6, pero cuando se
profundiza se ve que tiene algunas. Por
ejemplo la maniobra e5 seguida de c6
en algunas variantes e incluso el apoyo
al asalto de peones con b5, b4, a5, etc;
contra el flanco de dama blanco. Con
todo, me sigue pareciendo que su idea
211
6...e6 (D)
Partida 1 7. 01
Zude,A - Kupreichik,V
Bundesliga 1 993
7.d2 a6
Es casi imposible pasar sin esta
212
..
8.0!
sta es una jugada clave y la nica
para alcanzar los esquemas de ataque
ingls recomendados. Merece la pena
observar que los partidarios de f4 no
pueden asegurarse la trasposicin.
8.0-6-0?! h6 ! 9.(jJe3 fJg4+. En esta
variante la jugada (jJd7 resulta ms ade
cuada que fJc6 que permitira el cambio
en c6 seguido de (jJc5 como veremos en
el captulo 1 9. 8.f4 h6 ! y las blancas
deben ceder el alfil lo que permite un
juego razonable a las negras; 9.(jJh4?
fJxe4+.
9.6--0-0 bS
Una vez ms tratamos de seguir un
camino independiente (o mejor dicho
Kupreichik lo hace), pero es muy
dificil jugar esta posicin sin fJc6 que
siempre acabara trasponiendo al
Ataque Richter.
l l.fJbl
Finalmente hemos ll egado al
momento crtico. La jugada empleada
por Zude no es claramente mala y la
partida seguir compl icada durante
muchas jugadas ms, pero la considero
el primer paso de un camino errneo.
Mi recomendacin es la normal
l l .fJce2! ?, que no se ha empleado
nunca, por ejemplo: l l ... a5 ( l l ... e5
1 2.fJf5;t; l l . . .a5?! 1 2 .a3; l l . . .b6
1 2.(jJe3 b7 1 3 .g4;t; l l ...d5?! 1 2.e5)
1 2.<;!;lb l 0-0 ( 1 2 ... fJa6 1 3.g4 a4 1 4.fJg3
con ataque; 1 2 ...fJc6?! 1 3.fJb5 ) 1 3.g4
fJa6 1 4.fJg3 a4 1 5.(jJe3 y el ataque de las
blancas se desarrolla de acuerdo a
esquemas bien conocidos.
l l. b6
I O.h4 b4 (D)
1 2.h5
1 2 .{je3 , es la continuacin ms
temtica y despus de 12 ...b7 1 3.g4oo;
pero la posicin del caballo en b 1 es
poco armnica.
1 4...e5 1 S.flb3?!
De nuevo animando el asalto de los
peones negros, las blancas no estn
peor despus de 1 5.flf5 {jxf5 1 6.exf5
fld5 1 7.fld2oo.
1 7.fl3d2 (D)
213
25.e1?!
25.{jxd6 !? {jxd6 26.xd6 0-0
27.xe5 (27.xf6? a2) 27 ...fc8-+.
25...6---0 26.c3 bS
Todas las columnas abiertas contra
el rey blanco es demasiado.
214
Estadstica :
La estadstica es extraordinaria: sobre una base de 250 partidas las blancas slo
consiguen un 46% de los puntos. Es un motivo para ponerla en prctica, pero hay
que observar que hasta ahora ha sido empleada sobre todo por grandes
maestros buscando el efecto sorpresa. Sin duda las estadsticas de las blancas
mejorarn en el futuro. No merece la pena establecer estadsticas de la lnea
propuesta pues hay muy pocas partidas que no traspongan al Richter.
Esquema Resumen: l .e4 eS 2.f:Jf3 d6 3.d4 cd4 4.f:Jd4 f:Jf6 s.f:JcJ d7 6.g5
Ligera ventaja con posiciones similares a las estudiadas en el Ataque Richter.
- 6 ...f:Jc6 Traspone totalmente al Richter :;!;
- 6 ...c6 Extraa variante que no da problemas a las blancas ;t
- 6 ... e6 7.d2 a6 8.13 e7 Si las negras no trasponen al Richter tienen
problemas similares o tal vez mayores ;t
CAPTU LO
18
216
Ideas
Partida 1 8 . 0 1
Ivkov,B - Maskazi
Olimpiada 1 964
217
7.0 a6
Un esquema muy poco empleado,
que es una especie de hbrido entre la
Najdorf y el Dragn. Siempre se ha
considerado esta jugada lenta y torpe
contra el Rauzer y seguramente sigue
siendo as si se juega ms adelante.
Jugando a6 ahora, las negras se
preparan para desarrollar las piezas de
una forma completamente diferente a la
clsica: bd7, b5 y b7, retrasando el
o-o. Es un sistema muy activo y sin
teora, ideal para jugadores originales y
tcticamente poderosos como Romero.
Tal vez algn da este sistema tenga su
propio lugar entre las variantes "respe
tables" de la Siciliana, pero por ahora
no ha recibido la atencin que merece y
en la prctica eso lo hace ms peligro
so. Nosotros vamos a dar un pequeo
paso para sistematizar la teora de esta
variante, que recogiendo bien todas las
trasposiciones, llega a sumar unas 1 000
partidas en las bases de datos. La
estadstica es realmente psima (68%
para las blancas), pero casi toda ella se
debe a la multitud de partidas de juga
dores que juegan a6 en un momento u
otro del Dragn, sin una idea concreta.
En mi opinin las blancas deben andar
con cuidado si no quieren sorpresas.
8.d2 bd7
9.{iJc4
Una de las preguntas inmediatas en
esta variante de teora incipiente, es si
dejar el alfil en f1 o situarlo en la dia
gonal a2-g8, operacin que cuesta dos
tiempos. La variante con 9.0-0-0, que
renuncia a situar activamente el alfil,
est plenamente justificada, pero me
parece que el esquema negro es bas
tante lento, y merece la pena gastar los
dos tiempos para que el alfil tenga
influencia en casillas claves como d5.
Por otro lado, jugar el mismo esquema
contra todos los planes negros, evita
trasposiciones sorpresa.
218
1 2.xh6 b6
Natural para preparar el enroque,
pero se han empleado un par de alter
nativas: 12 ...c5 normalmente ha aca
bado trasponiendo a la partida pero
concede a las blancas la opcin extra de
1 3 . g7 !?. 1 2 ... b4?! No me parece lgi
ca pues el salto a d5 es un objetivo para
las blancas. 1 3.5 d5 14.exd5 a5
1 5.g7 frf8 1 6.o-o-o d5 1 7.frhe 1 .
con una fuerte presin a cambio del
pen.
13. 5 14.Wb 1 b3
Necesaria para poder sacar al rey
del centro, pero ahora la apertura de la
columna e juega en favor de la activi
dad de las piezas blancas.
Ribli,Z - Tabor,J
Kecskemet 1 972
l .e4 eS 2.f3 d6 3.d4 cxd4 4.xd4 6
5.3 g6 6.e3 g7 7.f3 a6
219
1 0.h4!
U n a vez ms elijo esta jugada como
lnea principal porque me parece buena
pero, tambin porque es la nica fonna
de responder de modo unifonne a todas
las trasposiciones.
I O fleS
...
9 ....
220
1 l .b3 bS 1 2.hS 4
1 2 . . .h5 1 3 .h6 e6 intentando
controlar d5 para evitar el cambio del
caballo defensor de h7. 1 4.xg7 Wxg7
1 5.g4 ff6 1 6.h6+ wg8 1 7.0-0-0 a5
(las blancas tienen muchas formas de
obtener ventaja pero eligen una ele
gante y temtica) 1 8.g5 flh5 1 9.ff5 !+
Rivera-Trujil lo, Uruguay 1 982.
Siegen 1 970
..
221
9 ...:c8 I O.bJ aS
Esta es una versin de la variante
a5 sin o-o, que resulta favorable a las
blancas. Una de las ideas bsicas de la
variante a5 es colocar la torre de rey
en c8, dando una casilla de escape al
rey pero tambin reservando la otra
torre para un posible b5. Lo mximo
que van a lograr las negras es trasponer,
y eso jugando la variante con un rpido
222
Be/grado 1 997
223
224
...
...
225
226
1 0.0---o--{) (D)
...
...
..
..
227
J J .{jJe2!?
Tratando d e quitar sentido a la
maniobra del caballo, 1 o que natural
mente puede volver al redil terico
cambiandose en c4. No hay motivo
para rechazar de plano la retirada a b3,
pero comparada con la recientemente
estudiada variante 1 O.. .l:!b8, las negras
pueden cambiar en b3 y hacer una
jugada ms til. Si l l .(jJb3 flxb3+
1 2.cxb3 a5 1 3.Wbl l:!fc8 ( 1 3 . . .b5 ! ?
Dietrich-Mueller, DLM 1 996 ) 1 4.g4
b5 1 5.h4 b4 1 6.flce2 h5oo.
13.g4 b5 14.h4
228
1 4 e6
1 7.h5! gxhS
Las negras controlan la casilla d5
para continuar con b4. Parece amena
zador, pero las blancas tienen una res
puesta adecuada y la operacin acaba
en la creacin de nuevas debilidades.
14 4 1 5.xc4 lhc4 1 6.h5, las
jugadas a6 y b5 no parecen muy tiles
para el ataque negro. 14 b4 1 5.d5
d5 1 6.exd5.
.
15.a3!
1 8Jlxh5 1lc5
No hay buenas j ugadas: 1 8 g3
1 9.1lh3 ! +-; 1 8 gxf3 1 9.xf3 ( 1 9.f3
llxc3 20.xf6 xf6 2 1 .xc3 xc3
22.bxc3;!;) 1 9 . . .4 20.g2 xa3+
2 1 .bxa3 llxc3 22.1lh6 ! +-; 1 8 e5?!
1 9.xf6! xf6 20.5 1le8 2 1 .h6+-.
1 S h5
1 9.fxg4!
Una vez parada su amenaza, las
negras deciden que no pueden permitir
h5, veamos porque: 15 4 1 6.c4
lhc4 1 7.b3 ! (atacando d6) 1 7...8
1 8.h6 con clara ventaja. 1 S e5
1 6.b3 ( 1 6.f5 ! ?) 1 6...xb3 1 7.cxb3
e6 1 8.wa2 ( 1 8.xd6 !?).
19 1lxc3!?
1 6 hxg4
20.xf6!
Permitiendo la ruptura en cadena
229
l l.h4
El primer paso, i niciar rpidamente
el asalto clsico al enroque negro.
l l ... bS
La idea inmediata de la jugada de
dama. Las otras jugadas resultan ser
demasiado lentas: l t. I!e8 1 2 .b3
fJxd4 ( 1 2 . . . b5 traspone a l l ...b5 )
1 3.xd4 a5 1 4.a4! ( 1 4.h5 a4 e s poco
claro) 14 ... b5 1 5.5 ! (es la refutacin
propuesta por ECO y que nadie ha
puesto en cuestin hasta ahora)
1 5 . . .fJxd5 ( 1 5 . . . e5? ! 1 6 .xe5 ! dxe5
1 7.fJxf6+ xf6 1 8.xd7+-- ) 1 6 .xg7!
fJb4 ( 1 6 ... Wxg7 1 7.xd5 c6 1 8.h5 !+-- )
1 7.h5 Wxg7 1 8.hxg6 h5 1 9.I!xh5 I!h8
20.I!dh l +--. l l . hS 1 2.h6 I!c8
1 3.xg7 Wxg7 1 4.fJd5 fJe5 1 5.fJxf6
exf6 1 6 .e2 b5 1 7.g4 con clara ventaja
Swartz-Inarkiev, Artek 1 999.
230
1 2 Jk8
.
13.h5 f:Ja5
La misma maniobra que hemos
comentado en varias posiciones, pero
ahora llega un poco tarde. 13 ...f:Jxd4
1 4.xd4 e5 1 5.hxg6 exd4 1 6.gxf7+ wffl
1 7.xd4. 13 ... b4 1 4.f:Jd5 f:Jd5 1 5.xd5
a5 1 6.hxg6 hxg6 1 7.g4, con la amena
za imparable h2. 13 ... f:Jxh5 1 4.g4 ff6
1 5.f:Jd5. 13... a5 1 4.hxg6 hxg6 1 5 .h6
h8 1 6.ffl !+-; una maniobra frecuen
te.
16.. l!e8
Un reconocimi ento penoso del
fracaso de toda la estrategia iniciada
con b8. 1 6 . . .f:Jxd5 1 7 .xd5+ e6
1 8.xd6+-.
Ca/cuta 1 999
1 1 .b3 S
231
232
...
1 4 b5?!
...
...
233
...
234
1 5.b3!
Esta novedad, debida a Topalov,
cambi por completo la evaluacin de
la variante 1 2 .Wb l !, de inofensiva a
demoledora.
1 5...llc8
1 5 ...llc5? es un error en el que han
caido muchos 1 6.6!+-.
1 6.xb5! as
La jugada ms frecuente, que afloja
un poco el enroque blanco, pero queda
a tiro de algunos temas tcticos. Otros
intentos: 16 ... a6 1 7.4 c7 1 8.e2!
e6 1 9.d4 con esta reagrupacin la
presin de las negras sobre el enroque
blanco queda neutralizada. 1 9 . . . 7
20.xg7 Wxg7 2 1 .h3 b6 22.f4
Goloshchapov-Korobov, Novgorod
1 999. 1 6... xb5?! 1 7.fub5 a6 1 8.7
lla8 1 9.e5 !+-. 16 ...xe4? 1 7.fxe4 xg4
1 8.2+-, es insuficiente.
1 7.a4 a6
17 ...a6 Mantiene las damas, pero
es simplemente truquera.
1 8.h4
( 1 8.xa7?! llxc3 1 9.xc3 xe4ii5)
1 8 . . .llb8 1 9 .h5 xb5 20.axb5 l;[xb5
2 1 . hxg6 fxg6 22.h6 (22.xb5 ! +-
235
2 1 .xg6+!
Esta jugada parece garantizar cierta
ventaja y 2 1.fS es interesante pero
menos clara. Sin embargo me parece
ms convincente: 2 1 .xd6! xe7
22 .c5 e5 23 .a3 e6 (23 ...c6
24.4 e6 25.xf8 xf8 26.d8 Wg7
27.a5+-; Bakre-Singh, Goodricke
2002) 24.b7 y aqu:
A) 24 ... b8 (parece lo mejor,
esperando 25.d6?! e4 !co) pero des
pus de 25.d8+ xd8 26.xd8 y no
hay manera de evitar d6.
8) 24 ...c8?! 25.b2 (25.d8+-)
25 . . .d7 26.hd l c7 27.d8 f8
28.xe5 xe5 29.e6 e6 30.d7+
Kolev-Hemndez, Catalua 2000.
Partida 18.07
Sandipan,C - Motylev,A
Ca/cuta 2002
236
lJ ... hS 1 4.h6!
Tambin una vez i ntercaladas las
jugadas h4 y h5 recomiendo el rpido
cambio del alfil.
1 3.h4
Aunque tomamos esta como lnea
principal, merece la pena llamar la
atencin sobre la inmediata: 13.h6
contra ella las negras han dividido su
decisin en retirarse, cambiar o la
"normal" 13 ...c4, pero cada una de
ellas tiene pegas:
A) 13 ...4 14.xc4 l:!xc4 1 5.xg7
Wxg7 1 6. h4 h5 1 7 .d5; R icardi
Cabrera, Cali 200 1 que traspone a la
lnea principal.
8) 1 3 ...xh6 1 4.xh6 l:!xc3? ! (para
justificar el cambio en h6, pero la
compensacin es insuficiente) 1 5.bxc3
c7 1 6.h4 xc3 ( Kariakin-Zeliakov,
Dubai 2002) y ahora segn el anlisis
de Markovic en el lnfonnator: 1 7.2 !
b4 1 8.h5 a5 1 9.hxg6 xg6 20.g4 a4
2 1 .g5 axb3 22.axb3 l:!a8 23 .gxf6 exf6
24.xh7 Q;>f8 25.h6+ we7 26.d2 a3
27.c3+-.
la amenaza 27J'Je7.
IS.xc4
1 7.g4!?
l::tx c4
237
26.e8+ Yl-Yl
1 6.xg7 rbxg7
Partida 18.08
Golubev,M - Cebalo,M
13.\!;lbl
238
1 3 ...flc4
M iles de partidas han seguido esta
vieja receta de ataque, oscureciendo a
todas las dems alternativas, pero
actualmente no parece lo mejor.
Adems del estudio especial de la
alternativa de moda, vamos a dedicar
unas lneas a las otras:
lJ ... bS!? Se ha convertido en la
tabla de salvacin de esta variante y por
tanto le dedicamos una partida inde
pendiente, la 1 8.09.
13 .. J:l:c4?! Un viejo tema que
funciona bastante bien en otras lneas
(por ejemplo en h4 y g4), pero que aqu
se encuentra con una refutacin casi
forzada. 1 4. f4 ! ( 1 4.xc4 flxc4 1 5.c l
flxe3 1 6.xe3) 1 4 . . . xc3 1 5 . fxe5
flxe4 1 6.e l c5 1 7. e6 ! fxe6? !
( 1 7... xe l ? ! 1 8.exf7+ wf8 1 9.hxe l +
y si 1 7 ...e8 1 8.exf7+ xf7 1 9.xf7+
wxf7 20.fl + wg8 2 1 .d3 e5 22.flb3
) 1 8.flxe6 xe6 1 9.e6+ wh8
20.xc5 xel 2 1 .hxe 1 flxc5 22.g4+
Trefny-Taborsky, Komercni Banka
1 996.
lJ... hS Esta jugada, tan popular en
la variante de c8 tiene poco xito
aqu. El motivo es la situacin expues
ta de la dama negra y la indefensin del
punto e7. 1 4.g5 ! (se amenaza f6,
seguido de fld5) 1 4 . . . c5 ( 1 4 . . .flc4
1 5.xc4 xc4 1 6.flb3 ! y segn cual sea
la retirada de dama puede seguir 6,
seguido de fld5 o bien e5. 1 6 ... e5. La
nica que evita las dos amenazas, pero
1 S ...a6
Una de las retiradas ms populares,
dejando la dama en funciones de
ataque, pero algo alejada de Jos
acontecimientos centrales. Veamos las
otras:
lS ...eS?! Aqu la dama se
convierte en un objetivo, y las partidas
por correspondencia la han condenado:
1 6.d4 e6 1 7.l::rhe l ac8 1 8.e5 ! Muy
directo y bastante convincente, aunque
no nico. 1 8...fld5 ( 1 8... dxe5 1 9.xe5
d6 20.e2) 1 9.exd6 flxc3+ 20.xc3
jugada obvia pero que mejora una
anterior partida del propio Fletwood
con negras. 20 . . . xc3 2 l .xe6 xd2
22.xe7 f5 23.xd2+-; Edelstein
Fietwood, cr. 1 993.
1S...d8?! Las negras no se han
239
18 ... b5
1 9.h6
b8
20.g5!
22.e5
En sus comentarios a una partida
anterior lstratescu-Golubev, lstratescu
recomend 22.f{d2 ! ?, pero es intere
sante que el propio Golubev elija la
continuacin de la propia partida.
22 ...b4 23.5 d5 24.exd5.
25...c6?!
1 6.h5 f{ac8
16...xh5 1 7.g4 ff6 1 8.h6 h6
( 1 8 . . . h8 1 9.e5! e8 20.5+-)
1 9.xh6 (con la serie de amenazas tpi-
240
Dresde op 1 999
14.fJcxbS! xd2
Es un cierto descanso comprobar
que las negras prefieren cambiar damas
para demostar la compensacin des
pus. Hay que tener en cuenta que no se
ha avanzado el pen g y la estructura de
peones blancos es slida. Aunque no se
debe despreciar la actividad de las pie
zas negras. con un buen juego se puede
neutral izar.
14 ...a6 1 5.fJc3 fr4 1 6.d3 ftab8
1 7.cl Las blancas oponen un verda
dero muro de piezas delante de su rey y
no renuncian al ataque. 1 7 ... r:tM 1 8.h5
b7 1 9.hxg6 hxg6 20.h6; Karpov
Garca, Ljubljana-Portoroz 1 975.
14 d8 Es un tratamiento ms
reciente y algo ms peligroso de la
entrega de pen: 1 5 .h6 ! xh6
( 1 5 ...h8 1 6.h5 fJxh5 1 7.ftxh5 a6? !
1 8.fJxd6 exd6 1 9.g5 b6 20.ftxh7
wxh7 2 I .l:!h 1 + wg8 22.l:!xh8+ wxh8
23.6+ wh7 24.g5 fuf3 25.gxf3 ftc5
26.d5 l:!xd5 27 .exd5 1 -0, Zelcic
Forster, Portoroz 1 998) 1 6.xh6 l:!ab8
1 7 .a4 ( 1 7.fJc3 a5) 1 7 . . . a6 1 8.fJa3
( 1 8.fJc3 l:!xc3oo) 1 8...r:tb4 1 9.h5 fuh5
20.fJf5 ! xf5 2 l .exf5 f8 22.g5 fJf6
23.fxg6 fJxg6 24.a5; Wang Lei
Ward. Beij ing op 1 993.
..
I S fr4
241
20.fxg4
xd4
2 1 .dS
xg4
1 7 ...es 1 8.e4 a6
La jugada ms frecuente. Otras
Estadstica :
Sobre 44.000 partidas el Dragn da un resultado global del 55% para las blancas,
que no es malo del todo desde el punto de vista de las negras, pero si nos centra
mos en el Ataque Rauzer, vemos que se juegan 33.000 partidas (un
porcentaje muy alto del total) y que alcanza un 58% para las blancas, un
porcentaje muy alto en un nmero d e partidas tan considerable. El porcentaje es
espectacular en la variante 1 2.wb 1 ! que recomendamos contra la principal c8,
llegando al 65% sobre 600 partidas. Tambin es magnfico en el tratamiento
sugerido contra el plan de a5 al lograr el 6 1 % sobre 1 3 00 partidas.
Esquema Resumen: l .e4 eS 2.0 d6 3.d4 ed4 4.d4 ff6 5.3 g6 6.e3
242
g7 7.f3 y ahora:
- 7 ...a6 Un tratamiento moderno, razonablemente sano, que abre un campo de
investigacin ;!;
- 7 ... o-o 8.d2 a6 Con el enroque corto, el esquema negro es mucho ms peli
groso
- 7...fJc6 8.d2 d7 Retrasar el enroque puede dar resultado pero no funciona
ante una correcta preparacin
9...d7 1 o.o-o-o
- 1 O... c7 Uno de Jos muchos intentos de contrajuego. I nteresante pero insufi
ciente ;!;
- 1 0...b8 Ha dado algn resultado pero es muy peligrosa ;!;
- 1 O .. J'rb8 Tiene la virtud de la novedad y de momento resiste mejor que otras
;!;
- J O ...fJa5 Como la anterior, poco empleada y no tan mala ;!;
I O.. Jc8 l l.bJ fle5 Hace aos la variante principal pero ante 12.Wbl , en serias
dificultades:
- 1 2 ...fJc4 El ataque blanco se lleva solo
- J 2 _ .l;te8 Lo relativamente mejor con campo para investigar ;!;
10 ... a5 l l.bJ iifc8 Tambin fue la variante principal en otros tiempos pero
tambin est en dificultades. 1 2.wbl fle5 13.h4 y ahora:
- 1 3 ...fJc4 El ataque blanco se desarrolla muy fcil
- 1 3 ... b5 Da algn contrajuego pero no basta para igualar ;!;
CAPTU LO
19
Valoracin ****
2 44
Pa rtida 1 9 . 0 1
Gallego,F - Franco,Z
Elche 1 985
245
246
...
A ) 1 O. . . a6 Es la continuacin
natural, pero el alfi l blanco no tiene
problemas en retirarse una vez efectua
da su misin en b5. l l .e2 g8 1 2.o-0
e6 1 3.a4 ( 1 3.xh7 siempre es posible,
pero no hay prisa) 1 3 ... g6 1 4. f4 6
1 5 .f3 c7 1 6.a5 0-0-0 1 7.f2 <i>b8
1 8.fd l ; Cmpora-Mendoza, Bogot
1 980.
B) I O ...g8 l l .g3 g5 Es impor
tante desplazar a la dama blanca pero
esto pennitir jugar la deseable f4
ganando tiempos. 1 2.e2 a6 ( 1 2 ... f5?!
1 3 .f4 g6 1 4.exf5 xf5 1 5.d4 )
1 3 .d3 e6 ( las negras renuncian
definitivamente a f5 ) 1 4.f4 g7 1 5.h5
b6 1 6.0-0-0 0-0-0 1 7.<i>b l ( las
blancas han estabilizado una posicin
muy favorable en esta estructura)
1 7 . . .<i>b8? ! (permite una maniobra
forzada que gana un pen) 1 8.h4! e8
( 1 8...e7 1 9.h6) 1 9.xf6 g4 20.h8
g7 2 1 .xh7 xc3 22.bxc3 a5 23.e2
g6 24.f5 g5 25.h6+-; Topalov
Corral, Espaa Equipos 2000.
7.d2 c8
247
8.f4! (D)
Esta es mi recomendacin. La ms
ortodoxa 8.0-0-0 permite al negro una
eleccin ms amplia y un contrajuego
ms peligroso.
8...xd4
8.. h6 Es una buena oportunidad de
evitar las complicaciones de la lnea
principal que parecen favorables a las
blancas. 9.{j),xf6 gxf6 I O.f5 ! Este es el
principal inconveniente. Las negras
tienen ahora problemas para desarrollar
su alfil de negras si no ceden el de
blancas. I O. . .a5 ( J O...{j),x f5 l l .exf5
con dominio abrumador a travs de las
casillas blancas) I I .(j),d3 e6 1 2 .e3 a6
1 3.0-0 h5 1 4.Wh 1 (j),e7 l 5.a3 ! (una vez
.
248
importante:
A) 1 4...c6? ! 1 5.h4 g6 ( 1 5 ... xa2?
no es posible 1 6.fxg7 a l + 1 7.wd2
a5+ 1 8.1!;le2+-; 1 5 ...fg8 renuncia a
esconder el rey definitivamente. 1 6.c4
gxf6 1 7.fhel fxg5 1 8.e6! y estas son
las consecuencias 1 8... fxe6 Kupreichik
-Yudasin, Frunze 1 98 1 y ahora 1 9.f6 !
con un ataque decisivo) 1 6.c4 c5
1 7. g4 h5 1 8. e2 o-o 1 9.fhfl !, con
la amenaza g4; Varga-Robatsch,
M itropa Cup 1 995.
B) 14 ... a4 Parece la ms lgica,
porque ataca c2 1 5.h4 ! , pero esta fra
jugada pone en duda que el ataque en
c2 sirva para algo. (La ms antigua
1 5.d2 !? gana calidad, pero no parece
suficiente para reclamar una ventaja
sensible. 1 5 ...fxc2+ 1 6.wbl fxd2 !=)
1 5 ...g6 ( 15 ...fxc2+? 1 6.wb l +- y no
hay defensa contra todas las amenazas)
1 6.d3 ( 1 6.d2 es algo mejor que antes
porque preserva el pen de f6, an as
1 6 ...fxc2 1 7.wbl fxd2!;!; ofrece bas
tante juego a las negras) 1 6. . . c5
1 7.g4 b4 ( 1 7 ... h5 1 8.e2 y no hay
demasiada diferencia con la variante
c6. Las negras tienen que convivir
con la inseguridad eterna de su rey)
1 8.xb4 xb4 1 9.h5 ! Justo a tiempo,
esta ruptura, unida a la amenaza ID-14,
crea un problema muy serio a las
negras. Almasi-Nogradi, Budapest
Spring op 1 996.
l l.bxcJ!
l l .xc3 !? evitara las principales
complicaciones, pero las negras tienen
buena compensacin despus de
l l ...xc3+ 1 2.bxc3 4oo.
1 1 ...
Forzando la entrada en c3, pero las
negras estn pel igrosamente retrasadas
en desarrollo y las blancas lo van a
aprovechar brillantemente. Existe una
alternativa algo ms slida: 1 1 ...5!?
1 2 .exd6 ! ( las blancas no temen la
descubierta despus de la captura en c3
y por lo tanto tienen tiempo de destruir
la estructura negra antes de dedicarse a
enrocar. 1 2Jc4!? xc3 1 3.0-0 d5cc)
1 2 . . . e6
( 1 2 . . .xc3? !
1 3.dxe7 !+-)
1 3Jc4 y ahora se disponen a enrocar
1 3 . . . xc3+ ( 1 3 . . .xc3
1 4.0-0+-)
1 4.xc3 c3 1 5.f5 ! jugada clave para
consolidar la ventaja blanca. 1 5 ... xd6
( 1 5 . . . exf5 1 6.f4 defendiendo el
molesto pen de d6) 1 6.fxe6.
249
Lo ms resistente es 1 4 . . . c3
1 5 .xd7+ i>xd7
1 6.xb7+
c7
( 1 6 ...i>e6 1 7.e 1 +-) 1 7. 1 ! con un
final ganador; 1 4 ...xh l ? 1 5.xb7 con
mate imparable.
Poikovsky 2002
250
7.d2 {jle7
Preparando el inmediato 0-0.
Veamos las alternativas:
7...a6 Se estudiar en las ltimas
partidas de este captulo.
7...h6 Una jugada con intenciones
muy concretas. Se desea llevar la par
tida a las estructuras con peones dobla
dos y se considera que la posicin de la
dama en d2 no es idnea puesto que ya
no puede ir a h5. De todos modos la
posicin blanca es muy flexible y dis
pone de buenos planes. 8.(jxf6 gxf6
9.tje2 ! Personalmente prefiero el plan
con o-o. Considero que el rey est ms
seguro en h 1 , y ayuda a defender el
flanco de rey. Naturalmente el plan con
0-0-{) tambin se ha jugado y es ms o
menos del mismo valor. 9... h5 1 0.0-0
a6 l l .wh 1 ! (cuanto antes se aparte el
rey de la diagonal mejor) l l ... tjd7 1 2.f4
c7 ( 1 2 ... b6 1 3.flb3 o-o-o es otro
plan, pero las blancas pueden molestar
con el paso de las torres por la tercera
fila y el control de la casilla b6. 1 4.a4
t;Le7 1 5.a5 a7 1 6.fla4) 1 3 Ji:f3 ! flxd4
( 1 3 ... Q-Q-O?! ahora tiene que contar
adems con la maniobra temtica:
1 4.flxc6 tjxc6 1 5.fld5 !) 1 4.xd4 tje7
8.0-0 (D)
251
252
9.xd4 0-0
En los ltimos aos ha gozado de
popularidad 9...a6 que analizaremos en
la partida siguiente.
1 0.0!
La jugada recomendada. Las blan
cas preparan el clsico asalto de peones
10...a6
En este orden d e jugadas la ms
popular, y casi necesaria tarde o tem
prano. Es muy frecuente tambin la
alternativa 1 0 a5 pero en mi opinin
es prematura. l l .d2 ( l l .d2, seguida
de wb 1 ' tambin es prometedora)
l l .. .c7 ( l l .. .d8 1 2.e3 a6 traspone a
una conocida posicin del ataque
ingls.; l l . ..e5 1 2.d3 e6 1 3.5 d8
1 4.fue7+ xe7 1 5.b4; l l ...c5 es
tal vez lo ms slido, 1 2.xc5 dxc5
1 3.f4;!;) 1 2.b5 ! d8 ( 1 2 ...b8 1 3.b4
e5 1 4.xd6 !) 1 3 .b4 d5 ( 1 3 . . . e5
1 4.c3) 1 4.xe7 xe7 1 5.e5 7 ( De
la Villa-Vera, Len 1 996) y ahora en
lugar de capturar en a7 las blancas se
deben conformar con una pequea
ventaja similar a las variantes de la
francesa con 1 6.d3;!;.
l l .h4 b5
Lo ms natural, lo ms flexible y
seguramente lo mejor. Se ha probado a
movilizar la dama a diferentes casillas:
t l . ..aS?! 1 2 .wb l fb8 1 3.d2 !
(buscando el defecto en la prematura
salida de la dama) 1 3 ...wh8?! ( 1 3 ...c7
1 2.\Ybl (O)
12 ...b7
12 .. .l:!b8 Es una interesante y
reciente idea de Aseev, uno de los
grandes especialistas de la variante. Las
negras sencil lamente preparan b4,
seguido del ms salvaje avance de sus
peones, y lo cierto es que llegan bas
tante pronto. Veamos algunas alterna
tivas:
A) 1 3 .g4 b4 1 4.e2 a5 1 5.e3
253
254
Montpellier 2000
De nuevo la reagrupacin de la
dama y el caballo, que desactiva las
ideas de d5 y ms adelante prosigue su
ataque.
1 4..Ji:fd8
I O.f4
La jugada
ms
enrgica.
Por
I O... bS
I O...o-o Una jugada poco popular,
pero de aspecto sano, y empleada a
veces por un especialista como Aseev.
l l .Wb l ! Esperando b5, pero la inme
diata f6 tambin es posible. l l ... b5
1 2.f6 xf6 ( 1 2 ... gxf6 parece muy
peligrosa) y ahora:
A) 1 3.e5! Es una alternativa tctica
que apenas se ha estrenado 1 3 ...dxe5
1 4.e4 b6 ( 1 4 ...d7? ! 1 5 .b7)
1 5.xa8 b7 J 6J:M6! xd6 ( 1 6 ... c7
1 7.a7 xd6 1 8.xb7 traspone)
1 7.xb7 b4 ( 1 7 ... exf4 1 8.d3 y a pesar
de Jos tres peones, las blancas parecen
tener mejores perspectivas) 1 8.2
exf4 y ahora 1 9. 1 ! parece claramen
te mejor ( 1 9.e4? ! fue la partida Well
Kiss, Hungra 1 996) 19 ... a5 ( 1 9 ..Jld8
20.3 a5 2 l .e2; 1 9...d4 20.3 a5
2 l .e2 e5 22.f3; 1 9 ... dl 20.xb4)
20.3.
8) 1 3.xd6 1 3 ... b7 1 4.xd8 xd8
1 5.d3 a5 1 6Jlhfl xc3?! (en busca
de las tablas) 1 7.bxc3 ac8 1 8.Wb2 c5
1 9.a 1 c6 casi igualdad, pero las
blancas tienen posibilidades de valori
zar su pen de ms, debido a sus posi
bles rupturas en a4 y c4.
l l.xf6 gxf6
255
12.e5!
La novedad de Kasparov que di el
primer golpe de aviso a la variante.
Como de costumbe Gari complet una
partida espectacular y dej preocupada
a la concurrencia. Luego los partidarios
de las negras arreglaron un poco la
situacin, pero...
12 ...d5
1 2 ... fxe5 1 3.fxe5 d5 (deja lneas
ms abiertas para el ataque) 1 4.d3 b4
1 5.2 a5 1 6.hfl d7 1 7 .f3 a4
1 8.dfl , con un fuerte ataque.
Gobvinder-Kaschev, cr. 1 989.
I J.wbl b7
Durante algn tiempo la lnea
principal. 13 ...g8 es la otra jugada
importante de resistencia. 1 4.f5 fxe5
1 5.xe5 f6 1 6.e3 ! (una fuerte
novedad que deja la dama en una
posicin muy activa) 1 6...e7 1 7.fxe6
fxe6 1 8.e2 con dos opciones:
A) 1 8 .. Jlxg2 1 9.h5+ wf8 ( 1 9 ... wd8
20.fud5+-) 20.hfl parece demasiado
256
peligroso.
B) 1 8 .. J!g5 1 9.f!:hfl b7? ! 20.4!
el mismo golpe que en la part ida
principal, y justo un minuto antes de
que las negras enrocaran ( porque no se
lo hubieran pensado ms de un
minuto ! ). 20 . . .d4 (si 20 . . .dxe4?
2 I .xg5 ! ! es una buena sorpresa)
2 1 .fuf6+ xf6 22.fi:xd4+-; Komeev
Lpez, Elgoibar 2000.
13 d7 1 4.e3 ! (con idea de 5)
14 ... 5 1 5.g4! fxg4 1 6.h3 gxh3 1 7.xh3
con una iniciativa muy fuerte. Xie Jun
-Galiamova, Kazan 1 999;
13 b4?! Slo fue empleada por el
desafortunado "probador" de la nove
dad e5 ! y tiene la mala suerte de enviar
el caballo all donde Kasparov quera
llevarlo. 1 4.2 a5 1 5.g3 5 1 6.5 !
fi:b8 1 7.g4 ! fxg4 1 8.5; con su habitual
energa Kasparov irrumpe en las habi
taciones de su adversario. 1 8 .. .f!:g8
1 9.f6+ xf6 20.exf6 d6 2 1 .g2; con
un ataque demoledor que no ha vuelto a
ser puesto a prueba. Kasparov-Hracek,
Erevan ( ol) 1 996.
1 9.a4! (0)
..
1 9...b4
1 4.fS! fxeS l S.xeS 6 1 6.g3
e7
Todo el mundo haba jugado esto, y
es normal porque prepara el O-(}-() y
defiende e6.
257
Partida 19.04
Fressinet,L - Bacrot,E
20.f:Je4!
Esta es la sutileza que lleva a las
negras por fuerza a un final agon izante.
258
9.c6!?
Esta jugada, combinada con la
siguiente, es un tratamiento bastante
original de esta posicin, pero parece
totalmente justificado por cuestiones de
desarrollo y ha cosechado hasta el
momento muy buenos resultados.
Recomiendo esta variante, pero mi
opinin es que despus de 9.e3 las
blancas tienen tambin buenas posibi
lidades de conseguir ventaja.
1 0... d5 l l. e3 ( 0)
1 1 7
259
260
13.h4
Esta jugada no solo prepara un
posible paso de la torre por la tercera
fila y una posible ruptura con g4-g5,
sino que especula con un sacrificio en
h6. Las negras han intentado varias
defensas, pero hasta el momento estn
sufriendo. 1 3.g3, se jug en una
partida famosa, N isipeanu-lvanchuk,
Las Vegas 1 999, pero las negras
despues de una dificil defensa lograron
un final igualado.
13 Je8
1 5 d7 1 6.e5
.
17.exd5
Seguramente es mejor no abrir
lneas hasta no ver cual es la respuesta
de las negras a la fuerte jugada 1 7.f4!
amenazando en f6, pero sobre todo
preparando el avance temtico g4-g5,
y si 1 7...g8 ( 1 7... e7 1 8.g4) 1 8.h5 !
a7 1 9.g4.
1 9...7!
261
27.c3?
Pennitiendo de nuevo e5 y esta vez
con efectos nefastos. Era necesario
27.e l ! y si 27 ... e5? ! 28.fxe5 fxe5
29.de3 e4 30.fl .
xd4
38.xd4
xh4+]
0-1
Partida 19.05
Anand,V - Kramnik,V
Amsterdam 1 993
l .e4 eS 2.0 c6 3.d4 cxd4 4.xd4
ff6 5.3 d6 6.g5 e6 7.d2 a6 8.00-0 d7 9.0! ( D)
Esta es la jugada que recomiendo.
No slo porque guarda una coherencia
con el resto de variantes recomendadas
en este libro, si no tambin porque los
resultados son extraordinarios y toda
va actualmente el volumen de teora es
muy inferior al de las variantes con
9.f4.
En el excelente l ibro sobre el
Richter de W e lis y Osnos. los autores
262
9... h6
Las negras tienen todo un entrama
do de posibilidades que vamos a estu
diar en la partida siguiente. Muchas de
ellas acaban trasponiendo con un h6
posterior, pero por una cuestin de
claridad, la mayora de las continua
ciones con h6 las vamos a estudiar aqu
y solo haremos referencia a las excep
ciones en el orden de jugadas, cuando
haya algn motivo importante que lo
justifique.
1 0.e3 (O)
En realidad el orden de esta partida
todava es el ms frecuente en las bases
de datos fue 8 .. h6 9.e3 d7 I O.f3,
pero actualmente, e n vista d e la varian
te 8 . . h6 9.flxc6 (estudiada en la parti
da anterior), creo que las negras van a
.
I O bS
...
263
...
264
favorable
1 2 .xb5 ! .
del
sacrificio
tpico
12.d3 (O)
l l .wb 1 !
La jugada que recomiendo. Deja a
las negras definirse, y los caminos a
seguir son muy diferentes en un caso o
en otro. l l .c6 es igualmente correcta.
t l fles
...
1 2...c7
La principal alternativa es la inme
diata 1 2 ... b4! ? 1 3.e2 d5 1 4.exd5
xd5 1 5.f4 y las piezas blancas
ocupan una posicin amenazadora,
pero hasta el momento los ejemplos
prcticos son mnimos y la evaluacin
no est definida. Por ejemplo:
1 5 ...xe3 1 6.xe3 d6 (Shabalov
Ashley, Nueva York 1 997) y ahora
Shabalov comenz una tormenta tcti
ca con 1 7.fxe6? ! pero en su lugar
pudo intentar explotar la posicin del
alfil en d6 por medio de 1 7.e4 b8
1 8.e2 b6 1 9.6!;!;.
12 ...xd3 El cambio es ilgico por
que re fuerza el centro blanco y abre la
columna e para iniciar planes en el
265
13.g4 b4!?
Las negras desplazan el caballo
antes de irrumpir en el centro como
respuesta a la "debilitadora" g4. Es
dificil idear una estrategia ms natural.
14.flce2 d5 1 5.f4
A lguien recomend 1 7 0-0-0?
pero no da muy buen resultado en vista
de 1 8.t;J,xe5 xe5 1 9.6!+-. Tampoco
funciona del todo 1 7 t;Jd6 1 8.xe6
t;J,xe6 1 9.Wxd6 xd6 20Jhd6;!;, aunque
el pen de ms no sea del todo slido.
Por su parte, la recomendacin de
Kramnik, 1 7 f6! ? es bastante fea,
aunque sigue siendo la continuacin
crtica ahora mismo: 1 8.t;J,xe5 ( 1 8.h4 00-0 ! oo Varga-Cao Sang, Budapest
1 998) 1 8 . . . fxe5 ( 1 8 ... xe5 ? ! 1 9.f3
c7 20.f4 y la llegada del caballo
blanco a g6 es bastante desagradable)
1 9.f3 o-0-0 20. 1 ! y con el salto del
caballo a d3 las negras tienen proble
mas con el pen de e5, el de b4 y con la
posible apertura de la columna e
mediante c3. Claro que la presencia de
la pareja de alfiles hace la evaluacin
incierta.
..
1 5 dxe4
1 7.. Jc8
..
..
1 8.b3 f6?!
Sin la opcin d e enrocar largo, las
blancas pueden presionar ms en la
clavada. Se han analizado otras
266
Zamora 1 996
9 (;).e7
...
267
...
...
268
J O.h4 (D)
J O s::lc8
269
270
1 1 .\!;>b 1
No es necesaria todava y por lo
tanto se pueden probar otras como
l l .g4, pero es dificil que las blancas
pasen mucho tiempo sin esta jugada.
1 l . .. b5!?
De nuevo la jugada ms elstica,
pero tambin aqu las negras han
probado todas las alternativas y algunas
de ellas, como las que conducen el
caballo hacia c4, parecen muy bien
relacionadas con Hc8.
1 1...5 Es lgica, pero las blancas
no estn obligadas todava a jugar d3
y por lo tanto despus de 1 2.g4 b5
se traspone a la lnea de la partida prin
cipal.
1 1. ..5 Se ha jugado en unas pocas
partidas pero las blancas no han aplica
do el mismo plan que si el caballo fuera
a e5. 1 2.g4 b5 1 3.d3;1;.
l l ... h5 Lleva a un juego similar a
1 O.. h5 y es algo inferior respecto a la
jugada del siguiente prrafo.
l l ... h6 1 2.e3 h5 Es un refina
miento de la idea de h5 que ya hemos
comentado. De nuevo recomiendo
1 3.c6 ( 1 3.g5 directa es perfecta
mente jugable, puesto que el plan con
5 ya hemos visto que no es nada
especial) 1 3 ...c6 1 4.g5 c7 (i nt\!n.
12.g4 5
Completando el plan lgico inicia
do con d7. Las negras amenazan b4
seguido de 4. Se ha probado otra
idea menos ortodoxa, 1 2 ... h5!? que
destruye el avance ordenado de los
peones blancos, pero a partir de ahora
el rey negro no tendr lugar seguro.
1 3.gxh5 xh5 1 4.g l g6 1 5.c6 Hxc6
( 1 5 . . . xc6 1 6 .xe7 i>xe7 1 7.d3;1;)
1 6.d3 b4 1 7.2 b6 1 8.e7 i>xe7
1 9.e5 ! con una clara ventaja; lbarra
D'Costa, Pescola 2002.
1 6...6-0
1 6 ... d5? !, intentando aprovechar la
posicin indefensa del caballo de g3
fal la: 1 7.g5 flxe4 ( 1 7...flxd3 1 8.cxd3
xg3 1 9.f4; 1 7 ...dxe4 1 8.gxf6 exd3
1 9.fxe7) 1 8.fxe4 flxd3 1 9.cxd3 xg3
20.f4 g4 2 1 .l'!dg 1 h5 22.exd5 exd5
23.l'!e l .
271
2 1 ...gxf6
Ahora el enroque negro queda
destruido. Un intento de abrir menos
lneas es 21 ...d8 y ahora:
A) 22.fxg7 flxg7 23.h5 a3 24.h6
fle8, y las piezas blancas estn torpe
mente situadas para explotar las debili
dades creadas en el enroque de las
negras.
8) 22.e5 ! Esta jugada cuya idea
bsica es liberar la casilla e4 para saltar
all con el caballo es el mejor intento
para refutar d8. 22 ...dxe5 23.flf3 b3
24.cxb3 axb3 25.I!c 1 ! ba2 26.wa 1 b3
(26 ... b5 27.l'!xc8 xc8 28.xd8 flxf6
29.d6;!;; 26 . . . g4 27 .flxe5 I!xc l +
28.I!xc 1 xg3 29.flxd7) 27 .I!xc8
xc8 28.c5 b6 29.fxg7 flxg7
30.xf8 xf3 3 1 .a3t.
22.gxf6?!
1 8.f4! [Este pen corre ganando
272
ejemplo:
A) 22 ... a3 23.gxf6 f6 24.fJxf6+
fJxf6 25.h6.
8) 22 . . . e5 23.gxf6 fJxf6 24.fJf6!
xf6 25.f{g 1 wh8 26.h6 exd4 27 .fl!
+-.
q 22 ...wh8 !? 23.f{dfl ';
D) 22 ... f5 23.f{hg l fxe4 (23 ...wh8
24.fJxf5 exf5 25.d4+ f6 26.gxf6 fJxf6
27.h6+-) 24.fJf6+ xf6 25.gxf6+ wh8
26.h6.
30.el
30... a3?!
Mejor es 30 ... c6 3 1 .g 1 xe4
32.g7+ wg8 33.xe5+ g6 (33 ...g2
34.fJf4; 33 . . . g2 34.xg2+ xg2
35.f{gl wf8 36.c3) 34.fJf4 f6+.
Estadstica:
La variante clsica de la Siciliana, los dos caballos con d6, es tan dada a las tras
posiciones, que hacer una estadstica de ella no sabemos muy bien que
refleja. Tomando como base la posicin con los dos caballos fuera y el pen en
d6 y sin preocuparse de a que pueda trasponer el resul tado es el 52% para las
blancas sobre 50.000 partidas. Al centramos en el Ataque Richter, lo que escapa
273
8."d7 9.0 h6 IO.e3 Suele ser un reflejo de las variantes sin h6, y ahora:
-
CAPITU LO
20
Partida 20.01
Morozevich,A - Svidler,P
275
7.d2!
Este es el orden exacto. 7 .f3 puede
llevar a las mismas posiciones, pero
hay que tener en cuenta dos jugadas
molestas 7 ... d5 y 7... b6.
La postcton a partir de la cual
comienza nuestro estudio en este cap
tulo. En esta primera partida nos vamos
a ocupar de aquellas variantes en las
cuales las negras retrasan por mucho
tiempo la jugada a6 y en las siguientes
nos ocuparemos del caudal terico
principal, que incluye siempre la
jugada a6.
7...e7
El ataque con el caballo es prema
turo pero despus de esta jugada de alfil
si se convierte en una amenaza.
Veamoslo: 7 . . .g4?! 8.g5 e7
(8 . . . b6? ! 9.db5 ! a6? I O.a4+-)
9.xe7 xe7 I O.db5 ( 1 0.0-0-0!?)
IO ...d5?! ( 1 0...0-0 l l .e2 ! ge5 1 2.Q
o-o fi:d8 1 3.f4 g6 1 4.xd6) l l .e2 !
f6 1 2.exd5+-.
8.13 o-o
Sin duda la jugada ms natural
aparte, de 8 ... a6, pero se han experi
mentado varias alternativas:
8 ...a6 Ver partidas 20.02 a 20.05.
8 ... d5 Lleva a una posicin con la
276
..
9.0-0-0
Conviene observar que 9.g4 tam
poco impide 9. . . d5! .
9 dS!?
..
...
10 b4
.
l O.el ( D)
dido, pero no
1 2 ...c7 1 3 .g4;!;.
parece
277
suficiente.
..
1 l .a3!
22 ...7 23.fi:d3 b6 24.f!:c3 b7
Con esta maniobra las blancas
logran forzar el cambio del alfil de
casil las negras.
278
Partida 20.02
Littlewood - Shamkovich
7.13
7 ...c7
7... hS Es una idea relativamente
inexplorada, que tiene la virtud de
cortar de raiz el plan de las blancas que
incluye g4. Por otro lado, debilita el
flanco de rey y la casilla g5, lo cual
permite a las blancas modificar su plan
sobre la marcha. 8.d2 (despus de h5,
los planes con o-o por parte de las
blancas tienen mucho sentido, pero de
momento el plan de la partida
Khalifman-Van Wely, parece muy
convincente y lo tomamos como lnea
principal. 8.a4!?, con idea e2 y -0)
8 ...bd7 9.c4 !? (creando problemas
inmediatos en e6 y con el rpido
avance f4-f5) 9 ... 5 (9 ... b5? I O.xe6
fxe6 l l .fue6 a5 1 2.b4 ! +-; 9... c7
1 O.xe6 fxe6 l l .xe6 c4 1 2.fuf8
l1xf8 1 3.xd6;!;) 1 O.b3 b5 l l .-0-0
( 1 1 .0-0 es igualmente posible)
l l ...b7 1 2 .g5 !. Con esta reubicacin
del alfil, el avance f4 y luego e5 o f5 se
convierte en una seria amenaza.
1 2 . . . a5
( 1 2 . . . e7
1 3 . f4
ed7
1 4.xe6 ! ) 1 3.wb l 4? ! ( 1 3 . . . e7
1 4.l1he l ;!;) 1 4.xc4 bxc4 1 5 .l1he l
l1b8?! ( 1 5 ...e7 16.f4) 1 6.f5 ! exf5
1 7.e5+-; Khalifman-Van Wely, Wij k
aan Zee, 2002.
7 ...bd7 Es una jugada que ha
tenido cierta discusin terica inde
pendiente, pero que las blancas pueden
manejar como una simple trasposicin.
8.g4 h6 9.d2 Es cierto que hay algu
nas bonitas partidas de Kasparov con
l!g 1 , que es tambin interesante y ms
agresiva, pero la jugada propuesta lleva
a posiciones que estudiamos ms
adelante, casi de forma ineludible.
279
8.d2 e 7
El orden ms conveniente de cara a
recoger las trasposiciones, pero las
negras tambin pueden intentar seguir
adelante sin e7. Veamos:
8... b5 Activa el juego en el flanco
de dama, pero provoca la pregunta de
para que se necesita entonces jugar
primero c7. 9.0-o-O b7 I O.g4 6
l l .wb l . Llegando a una posicin que se
puede producir por varios ordenes de
jugadas y en la cual las negras se han
enfrentado a un importante cruce de
caminos:
1 1 ...5 y las alternativas son:
A) l l ... b4 (empuja el caballo a
donde quiere ir) 1 2 .e2 e7 1 3.fuc6
xc6 1 4.4 b7 1 5.xb4!; Lutz
Dao Thien Hai, EUR-ASJ 200 1 .
8 ) l l ...xd4 1 2.xd4 h6 1 3.h4 e5
14.e3 d5 1 5.xd5 xd5 1 6.exd5 l1d8
1 7.f2 l1xd5 1 8.e2. El rey negro no
tiene un lugar seguro. Fedorov
Gadjilu, Nikolaev 1 993.
C) l l . . .l1c8 1 2.h4 ( 1 2. g5 d7
1 3 .xc6 xc6 14.2. para seguir con
4. es un tratamiento estndar en esta
posicin) 1 2 ...5 1 3.l1g l 4 1 4.xc4
xc4 (traspone a la partida que comen
tamos con 1 1 . ..5) 1 2 .l1g l ( 1 2 .g5 es la
jugada natural y despus de 1 2 ...fd7
las blancas tendrn que elegir entre dos
continuaciones muy diferentes: 1 3.d3
y la ms violenta 1 3.f4 b4 1 4.5)
280
9.0 (D)
9 bd7
...
I O.g4
A hora los caballos negros se estor
ban ante la amenaza g5.
281
1 7.!!hfl g7
Es un poco ms slida 1 7 ...e7,
pero despus de 1 8.g5 3+ 1 9.wb l
xg5 20.xg5 xd4 2 1 .h5 ( 2 1 .!!xd3 !
e5 22 .h4; segn el anlisis de
Littlewood,J & Littlewood,P) 2 1 ...!!ffl
22.!!xd3 e5 23.h4; Garbisu-Leko,
Pamplona 1 993.
..
18 exf5 1 9.xd6 e6 [ 1 9 . . . f6
..
20.5+-] 20.d5?
282
prometedoras:
20.c5!?, que d como ganadora en
mi libro del Ataque I ngls pero tiene
una respuesta ingeniosa: 20 . . .flg6 !
(20. . .flc6? 2 1 .fld5 xd5 22.exd5 e5 !
23.l:!fe l f4+ 24.<;i;lb l I:d8 25.dxc6 ! !
I!xd6 26.xd6 f6 27.c7! c4 28.b3 ! c6
29.xe5 o-o 30.d6 l:!c8 3 1 .l:!e7+-)
2 1 .exf5 f8 22.d2 xc5 23.fxg6 hxg6
24.l:!f4 l:!h3 ! 2 5.l:!xc4 e3 26.xe3
I!xe3 27.l:!c7;!;. 20.exf5! Es lo ms con
tundente: 20 . . .flc6 2 1 .fxe6 xe6
22.xe6 fxe6 23.fle4+-. A pesar de la
simplificacin las negras no pueden
evitar perder un pen, como mnimo.
Lausanne op 2001
l .e4 eS 2.flf3 d6 3.d4 cxd4 4.flxd4 flf6
S.flc3 e6 6.e3 a6 7.13 flc6 (D)
8.d2
Esta es la jugada que recomiendo a
pesar de que muchos jugadores tratan
de esquivar el inmediato d5 de la
negras jugando la dama a e2.
9.o-o-o o-o
Completando la fase inicial del plan
negro. Una vez resguardado el propio
rey todas las energas se concentrarn
en crear contrajuego contra el blanco.
Los recursos principales son: el avance
del pen b, la ruptura d5 y las manio
bras de los cabal los a travs de las
casillas e5 y c4. El resto de las jugadas
a disposicin de las negras son traspo-
283
I O.g4 (D)
Una de las posiciones bsicas de la
variante. Las negras tienen ahora una
eleccin entre varias opciones ms o
menos importantes.
284
I O xd4
...
...
1 1 .xd4 ( D )
285
l l ...bS
Es la alternativa ms flexible y la
principal, pero tambin es muy lgico
acelerar la llegada del caballo a la
casilla e5, para aprovechar la posicin
incmoda de la dama blanca.
1 1 ...7 1 2.h4 ( 1 2.g5 es una inte
resante entrega de pen, que analic en
mi libro del Ataque Ingls, pero objeti
vamente 1 2.h4 me parece la jugada ms
fuerte) 1 2. . .4k:5 (la continuacin lgica.
1 2 . . .b5 1 3 .g5 traspone a la partida
principal) 1 3 .e2 b5 1 4 .wb l (una
286
1 2.g5 7
1 2 ...h5 No suele funcionar en este
tipo de posicin, pero en este caso la
refutacin es muy concreta. 1 3.e5 ! d5
(Arizmendi-Guliev, Linares op 200 1 )
1 4.h4 ! g6 1 5.e4 a5 ( 1 5 . . . c7
1 6.f6+ xf6 1 7.exf6) 1 6.g3 ! g7
( 1 6. . .xa2 1 7.xh5 gxh5 1 8.d3 con
un ataque demoledor) 1 7 .wb 1 ; para
las blancas parece muy fcil retirar la
dama y continuar con h4-h5.
t3.h4 as
La jugada ms activa y ms
compleja. Amenaza b4 pero mantiene
un ojo en el pen g5. Algunas de las
alternativas son interesantes:
13 ...!b8 (la ms lgica alternativa a
1 3 . . . a5, preparando tambin b4)
1 4.wb l (paralelamente a la variante
1 3 ...b7, las blancas preparan el avan
ce h5 sacrificando pen, pero tambin
aqu la alternativa d2 es posible)
14 ... b4 1 5 .2 b7? ! . Puesto que esta
jugada no hace gran cosa en la diagonal
y deja indefenso el caballo de d7
(importante en las variantes de la
entrega del pen g5) no debe ser la
mejor. ( 1 5 ... 5 1 6.f4 flc6 1 7.d2 a5
1 8.h5;;!;; Pinol- Weindl, Suiza 2002;
1 5 ...a5 1 6 .d2 b7 1 7.h5 d5 1 8.g6 6
1 9.f4 20.gxf7+ !xf7 2 l .xe6
Brodsky-Levin, Hamburgo 200 1 ;
1 5 ... a5 traspone a 1 3 ... a5; 1 5 ...flc5
1 6.h5 e5 1 7.d2 e6 1 8.c l a4
1 9.b3 a5 20.g6; Rodrguez-Ricardi,
Villa Ballester 1 996) 1 6.h5! El sacrifi
cio funciona perfectamente aqu y eso
pennite a las blancas acelerar el ataque.
1 6 . . . a5 ( 1 6 . . .xg5 1 7.xg5 xg5
1 8.h6 e5? ! 1 9.xd6 g6 20.h3 ! +-)
1 7.g6 f6 1 8.gxf7+ !xf7 1 9.xd6 e8
20.h3; De la Yilla-Morozevich,
Pamplona 1 994.
13 ... b7 1 4.wb l (preparando el
sacrificio del pen de g5) 1 4 ...!c8
1 5.h5 ( 1 5. d2, para jugar g5 sin
entregar el pen, tambin es buena)
1 5 ... xg5 1 6 .xg5 xg5 1 7.h6 !fd8
1 8.h3 ( 1 8.hxg7 es ms sencilla y
suficiente para una clara ventaja)
1 8 ...5 1 9.!dg l xh6 20.5 f3
2 l .b6 f6 22.xh7+ wf8oc; Fraile
Verdu, cr. 1 994. Las blancas tienen un
287
lS.hS! (D)
t 4.wbt
Respetando la amenaza b4, aunque
como analiz en el libro del "Ataque
Ingls", las blancas pueden provocar un
vendaval tctico gigantesco con la
inmediata 14.h5 ! ? b4 1 5. h6oo.
14 !ib7
...
1S...b4
No parece haber una alternativa
razonable a la aceptacin. 1 5 . . .e5
1 6. h6 !; 1 5 . . . e5 1 6.d2 b4 1 7.5.
288
1 6 . . . e5 1 7. d2 c5 1 8.g6 fxg6
1 9.hxg6 hxg6 20.f4!+- .
1 8 J:fd8 [ 1 8 . . . e5 1 9.xd6 g6
20.h3 ! b8 2 1 .xb4+-; 1 8 . . . e5
1 9.hxg7] 19.hxg7 f6
.
Mosc 2002
8.g4
Este es el orden que recomiendo. El
objetivo es limitar la eficacia de la
maniobra de los caballos negros que
comienza con bd7. A cambio tiene
algunos otros inconvenientes que
iremos comentando en el momento
correspondiente.
...
289
290
I O.O (D)
t t.xbS!
Esta sorprendente jugada se pre
sent en sociedad en esta partida, y
desde entonces se ha convertido en una
verdadera refutacin de este orden de
jugadas de las negras. Los primeros
intentos de mejora han fracasado y
aunque no se puede afirmar que se haya
dicho la ltima palabra, la causa de las
negras est en este momento en
dificultades.
1 t. .. axbS 1 2.b5
El concepto es osado, las blancas no
tienen ms que dos peones y dejan su
pen de a2 en el aire, justo en este
momento se abre ante las negras un
mplio abanico de posibilidades.
1 2 Hxa2?!
.
29 1
tJ.wbt Has
13 ... l::ra4 Es la retirada de torre ms
sana. 1 4.c3 b7 ( 14 ... f6 1 5 .xb6 !;
14 ... 8 l 5 .xd6) 1 5 .b3 ( 1 5.d6!?)
1 5 ... i:ra8 1 6.7+ We7 1 7.xa8 a8
1 8.b5;!;.
13 ...i:rxb2+ Es la nica alternativa
llevada a la prctica. 1 4.Wxb2 d5
(Fantin-Fedorchuk, Sautron 2002), y
ahora con 1 5.Wb 1 que prepara c3, las
blancas deben mantener la calidad y la
iniciativa. 13 ... i:ra8?! 1 4.c3 !.
14.flxd6+
292
9.d2 fiJbd7
Partida 20.05
Bologan,V - Novikov,I
Filadelfia 1 999
l .e4 eS 2.fiJO d6 3.d4 cxd4 4.fiJxd4 ff6
S.fiJcJ a6 6.e3 e6 7.0 bS 8.g4 h6 ( D)
1 0.0
Ahora no hay tiempo para lanzar el
pen h por 1 O.h4 b4 1 l .fte2 d5 ! y las
negras se liberan por completo.
293
l l.h4!? (D)
En mi libro sobre el Ataque Ingls
di preferencia a la variante l l .d3
puesto que en aquel momento no esta
ban claras las virtudes de l l . h4, pero en
estos ltimos aos la continuacin ms
agresiva ha sobrepasado ampliamente a
la ms tranquila y ms antigua, tanto en
frecuencia como en resultados. Segn
294
l l ... b4
La nica forma de poner en
cuestin la veloz ofensiva blanca. Las
otras alternativas han dado muy malos
resultados a las negras.
l l ... fleS 1 2.e2 ! (me parece la
mejor jugada, porque prepara de
inmediato g5 seguido de f4, pero una
alternativa similar es gl ) 1 2 . . . a5
( 12 ...b4 1 3.fla4 a5 1 4.b3 y viene g5)
1 3.g5 hxg5 14.hxg5 xh l 1 5.xh l
flfd7 1 6 .a3 o-o-o 1 7.f4 flc5!? 1 8.flb3 !
flxb3+ 1 9.cxb3 y las blancas tienen un
fuerte ataque contra el debilitado rey de
1 2 aS
295
13.b3 S
296
1 4.a3
Slo esta jugada, que gana un pen,
puede justificar el juego anterior de las
blancas.
14...fJxa4
14 ...fc8 Una jugada cuyo primer
ejemplo data del ao 2000, se ha
convertido en una alternativa impor
tante, y ha crecido en popularidad muy
deprisa. 1 5.xb4 c7 ( 1 5 . . . xb4
1 6.axb4 fJxa4 1 7.bxa4 d5 1 8.b5 a3+
1 9.Wbl dxe4 20.bxa6 a8 2 1 .g5 fJd5
22.d2 e3 23 .a5 wf8 24.b5
Zivkovic-Jardelholm, cr. ( ol) 2000. La
posicin es muy compleja pero se
siente que los desordenados peones
blancos del flanco de dama son ms
peligrosos) 1 6 .fJxc5 dxc5 1 7.a4+ fJd7
1 8.fJe2 con varias posibilidades:
A) 1 8 ...c6 1 9.xa6 fa8 20.c4
fxa3 (Gu Xiaobing-Sergeeva Mundial
Sub20 200 1 ). La posicin es complica
da pero parece que las negras no tienen
suficientes fuerzas para crear proble
mas al rey blanco; 2 1 .wb2 ! a5
(2 1 ... a7 22.fJc3 fJb6? ! 23.d3 e7
1 6... d5
El golpe en el centro es lo lgico.
En su lugar slo se han probado:
1 6 fJd7!? No slo lleva el caballo
al flanco de dama, sino que prepara d5,
sin tener que permitir el cierre del
centro con e5. Hasta ahora no hay una
clara refutacin, pero los jugadores ms
fuertes la han evitado. 1 7.fJb3 Hasta
ahora parece la mejor jugada. Las
piezas blancas se van agrupando cerca
del rey para minimizar las debilidades.
( 1 7 .a5 d5<e>; 1 7 .h3 apuntando directa y
salvajemente al punto e6, pero parece
fal lar por 1 7 ... d5 1 8.g5 c4 1 9.g6 xb4
20.gxf7+ i>e7 ! 2 1 .g5+ hxg5 22.xg5+
fJf6! y las negras pueden defenderse)
1 7...d5 1 8.i>b2 l:!c8 ( 1 8...dxe4 1 9.f4 con
una posicion muy compleja, pero las
blancas pueden tener mejor final, c3
est en el programa, ataque con g5 y
ms desarrollo) 1 9.c3 ( la inmediata
1 9.exd5 ! ? parece ms lgica pero se
encuentra con 1 9 . . . xb4! 20.xb4
xc2+ 2 1 .i>a3 xd 1 <e> y es necesario un
profundo anlisis) 1 9. . . e7 20.exd5
xd5 2 l .xa6; Cioara-Vorobiov,
Pardubice 200 1 . Las blancas tendrn
que superar muchas complicaciones
pero sus ventajas materiales parecen
decisivas.
16 e5?! Tiene cierta lgica, porque
es deseable jugar d5 sin permitir e5,
pero de momento esa forma de abrir el
centro expone ms al rey de las negras.
1 7 .fJb3 ! (aqu el caballo defiende y
puede saltar a importantes casillas
como a5 y c5, puesto que las negras
van a jugar d5) 1 7...d5 1 8.exd5 l:!d8
( 1 8 ...xd5 1 9.fJc5 xc5 20.xc5 xf3
297
298
1 7.e5
Lgicamente las blancas cierran el
centro y refuerzan el punto fuerte de su
caballo en d4.
1 9...flxa4
Es dificil elegir entre esta jugada
que recupera el pen pero escora
demasiado el caballo o la muy natural
1 9...flc4!?, teniendo esta ultima como
"desventaja" que ya ha sido empleada
frente a Kasparov. 20.c3 c8 2 1 .d2
e7 ( 2 l ...d2 22.xd2 b6?! 23.a5 y
las negras no pueden tomar en b4, por
"culpa" de la torre de h3) 22.e l Las
blancas han consolidado, dentro de lo
posible, su flanco de dama y si las
negras enrocan, estn en condiciones
de abrir brecha. 22 ...b8 (lgico para
apuntar a b4, pero afloja el control de
c4; 22 ... d7!? 23.b3 0-0) 23.f5 c8
24.xc4 dxc4 25.f3 ! d7 (nica para
renovar la amenaza en b4) 26.fxe6 fxe6
27.g5 hxg5 28.hxg5 xh3 29.xh3
xe5 30.h5+ wf8 3 1 .flf3 e3+
( Kasparov-Topalov, Wijk aan Zee
200 1 ). Y ahora los anlisis de Kasparov
en el lnformator 82 indican que debi
jugar 32.d2 ! con ventaja en las dos
variantes crticas 32 . . . a3+ 3 3 .Wb l
xb4! (33 ... d6? 34.h8+ wf7 35.g6+
Wf6 36.g5+ Wxg6 37.flh4+-) 34.xb4
xb4+ 35.wc 1 a3+ 36.wd2 b2
37.h8+ wf7 38.we3 c6?! 39.h5+
\f;>g8 40.g6+-.
1 9.h3!
20.f2 c8 21 .e 1
Esta es la jugada que recomiendo,
aunque el mayor caudal terico se ha
desgastado en el anlisis hasta la
saciedad de 1 9. f5 que parece conducir a
tablas. Desde h3 la torre puede pasar al
flanco de dama, colaborando en la
defensa y en el ataque.
2 1 . b6 ( 0)
22.fa3
Las blancas siguen con la idea
temtica de activar la torre contra el
pen dbil de a6, aunque en este
momento tenan una alternativa ms
activa que tanto Bologan como otros
comentaristas han valorado como la
mejor jugada, pero que est muy
escasa de experiencias prcticas.
22.f5!? Esta es la propuesta, la
presin sobre el pen e6 crea
problemas a las negras, que en la nica
partida conocida, optaron por el
299
22 flc4
...
23.xc4 dxc4
No me gusta la captura de pen.
23 ...xc4 24.h5 e7 25.Wb2. Se ha
valorado como ligera ventaja blanca,
pero no estoy seguro.
300
Estadstica:
La variante Scheveningen, considerando como tales las variantes incluidas como
880 en la ECO, sobre 36.000 partidas logra un porcentaje del 46% para las
negras, uno de los peores entre las variantes ms "serias" de la Siciliana.
Reducindonos a las variantes del Ataque I ngls con e6 de las negras las blancas
consiguen sobre 7600 partidas un porcentaje del 55%, no tan avasallador como
se podra esperar por su popularidad creciente. La variante actualmente de moda
como principal l l .h4 b4 1 2.fJa4 si logra un avasallador 68% que debe ser con
tenido, si las negras quieren seguir jugando esa lnea.
Esquema Resumen: l .e4 eS 2.fJ13 d6 3.d4 cd4 4.fJd4 fJf6 S.fJcJ e6 6.e3
- 6 ...fX6 (Sin a6) Muy slida, aunque algo pasiva t./=
- 6 ... a6 7.f3 c7 (con sus trasposiciones) El contrajuego es lento. Cmodo para
las blancas ;t
- 6 ...a6 7.f3 e7 (con sus trasposiciones) Lo mismo que la anterior ;t
301
CAPTU LO
21
303
304
Partida 2 1 . 0 1
Leko,P - Kasparov,G
Linares 2000
305
1 988.
306
I O f:JeS
1 1 .0
Esta jugada que prepara el reciclaje
del alfil y el reforzamiento de la casilla
l l bc6 1 2. e6
...
13.d2 aS!?
Tratando de impedir el -0-0 de las
blancas, veamos las alternativas:
13 l:Ic8 1 4.--O a5 tiene menos
sentido 1 5.b3 c7 (Topalov-Gelfand,
Bugojno 1 999; Tras 1 5 ...b3 1 6.cxb3
se traspone a la variante del comentario
de la jugada 1 5) y ahora: 1 6.wb 1 debe
dar alguna ventaja a las blancas, por
ejemplo: 1 6 ...5 ( 1 6... 0-0 1 7.h4 g4
1 8.f4 fr4 1 9.c4 c4 20.5 xd5
2 1 .exd5 b8 22.4) 1 7.fua5 xa5
1 8.d4;!;, seguido de h4 o 5 excepto
que las negras se embarquen en
1 8 ...l:Ixc3 1 9.xc3 xa2+ 20.wc 1 o-o
2 1 .a3 con ligera ventaja.
13 xd4 1 4 .xd4 a5 (es otra
forma de dificultar el o-o-o, evitando
b3) 1 5.a3 ( 1 5 .h4 !?):
A ) 15 ...l:Ic8?! 1 6.h4 ! .
307
14.b3!
En caso de 1 4.a3, i ntentando tras
poner a la partida, las negras podran
jugar 14 ...fr4 1 5.c4 c4 mante
niendo algunas otras posibilidades
abiertas.
1 4 hb3
1 S.cxbJ b4!
Esforzndose por evitar el Q-0-{),
por ejemplo: 1 5 ...l:Ic8 1 6.-O-O! b4
1 7.wb l g6 ( 1 7 ...0-0 1 8.a3 bc6 1 9.b4
d8 20.h4) 1 8.d4 xd4 1 9.xd4;!;,
con idea de 1 9 ...l:Ixc3?! 20.xc3 xa2+
2 l .wc l .
308
1 6.a3
16 flg6!
jugar
flce5
2 1 .b4
b5?!
2 t .fle7
23.!id5?!
Iab8
22.flxa6
!ib7
Rusia 2002
7 c;!2e6
.
309
310
9... b5
..
9.g4
I O.gS b4
Esto parece necesario si observa-
311
1 1.2!? (D)
312
1 2... a5!
Esta es la nica jugada que ha plan
teado problemas a las blancas. El pen
avanza, destruye el posible o-0-0 y
obliga al rey de las blancas a una vida
i
dif cil.
12 f2e7 Es la jugada natural y la
que se experiment en las primeras
partidas que llegaron a esta posicin:
1 3 .flg3 flf4 ( 1 3 . . .flxg3 1 4.hxg3 a5
1 5.b5;!;; ) 1 4.h4 con dos variantes:
A) 14 ... o-o 1 5.xf4 exf4 1 6.flh5
fle5 1 7.fld4 (tal vez es ms sencillo
1 7.e2) 1 7 ... flxf3+!? 1 8.flxf3 g4
1 9.flxf4 xf3 20.g2;!;;.
8) 14 ... h6 !? En busca de contrajue
go inmediato. El juego lento no resuel
ve aqu los problemas de las neh>ras.
1 5 .xf4 exf4 1 6.flh5 b3 (poco dese
able pero casi necesaria; 1 6 . . . hxg5
1 7.flxg7+ wf8 1 8.flxe6+ fxe6 1 9.fld4 !
flc5 20.c4) 1 7 .axb3 g6 1 8.flxf4 hxg5
1 9.fld5 g4 ( 1 9 ... lhh4 20.lhh4 gxh4
2 1 .0-0-0; Adams-Svidler, Dos
Hermanas 1 990; 1 9 ...fle5 20.e2 g4
2 1 .f4 h4+ 22.wfl flf3 23 .xb4 f6
24.f3 gxf3 25.wf2 a5 26.b7 o-o
F edorov-Topalov, Batumi 1 999 y
ahora 27J;[h2 ! , con clara ventaja)
20.b5 ! gxf3 2 1 .d7+ xd7 22.0--0
!xh4 23 .lhh4 xh4 24.f4. Con un
absoluto
dominio
posicional.
Arizmendi-Ni Hua, Bled 2002.
1 2".h6 Es todava una continuacin
casi indita, pero su uso por parte del
campen mundial Ponomariov, da que
pensar. 1 3 .gxh6 g6 1 4.flg3 flf4 1 5 .fld4!
(basndose en este detalle. las blancas
mantienen su pen vivo en h6)
15 ... exd4 1 6.xf4 fle5 1 7 .e2 b6
.
t s.flct as t 6.f4
Aqu las opiniones se dividen entre
esta jugada directamente y activar
primero el caballo mediante: 1 6.fld3 d5
( nadie ha querido probar la natural
1 6 ... a3, tal vez porque despus de
313
1 6...exf4
Es la jugada ms directa, y abre la
casilla e5 al caballo cuando el pen
avance a f5, pero tal vez sea un error.
1 6 ... g6 Es la alternativa slida.
17 .g2 a3 ( 1 7 ...g7?! entra en compli
caciones dudosas 1 8.f5 ! gxf5 1 9.exf5
xf5 20.o-0 e4 2 1 .xd6 e5 22.c6
fa6 23.c8+ we7 24.c4 con fuerte
ataque. Zatkuerdieva-Batsiasvili, Baku
2002) 1 8.b3 g7 ( l 8 ...fc8 1 9.o-Ot)
1 9 .f5 (ahora la diagonal h8-a 1 lleva a
la torre blanca) 1 9...gxf5 20.exf5 xf5
2 1 .xa8 (2 1 .0-0? ! e4) 2 1 ...xa8 22.o
O h3 Prez-Aieksieva, Capelle 2000.
La posicin es decididamente muy
complicada, por ejemplo: 23.ff2 e4
24.fh2 g4 25.2 e4 26.fd l e5
27.f4 o-Qoo.
16 ... a3!? Es una alternativa muy
lgica que se ha sugerido pero no se ha
probado an. 1 7.b3ao.
16 ...5!? 1 7.g2 fd8 1 8.a3 fb8
(Grosso-Lafuente, Torneo Federal
2003 ) no parece muy inspirado: l 9.f5
d7 20.g6.
1 7.gxf4 dS?!
Ha sido la nica alternativa emple
ada, pero ya se levantan voces en su
contra y es lgico si observamos los
magros resultados. Se ha sugerido
1 7 ... a3 pero como en otros casos tras
1 8.b3 las negras han perdido flexibili
dad.
1 8.f5!
Esta fue la novedad en esta partida
3 14
Partida 2 1 .03
Hracek,Z - Babula,V
Lahucovice 2003
1 0.d2 bS
Preparando el salto del caballo a b6,
para controlar d5 y la posible expulsin
del caballo blanco. El defecto de esta
jugada es que en ocasiones las blancas
pueden aprovechar la debilidad de c6.
Por eso las negras han intentado tam
bin llevar adelante el contrajuego de
forma ms cautelosa.
10 ...e7 Ver la partida 2 1 .05.
10 .. Jlc8 1 1 .0-0-0 c7 ( l l . . . b5
traspone al comentario a la prxima
jugada) 1 2.Wbl 5 1 3 .h4 b5 14.xrh2 !
sobredefensa de c2 14 ...4 1 5.5
Mortensen-Wilhelmi, Reikjavik 1 997.
10 ...c7 Normalmente traspondr
al comentario a la prxima jugada o al
comentario anterior.
J J .o--o-o b6
La continuacin ms coherente. Se
han probado muchas alternativas:
l l. ..b4?! 1 2.5 (ahora las negras
se ven forzadas a ceder el alfil)
1 2 ...1.hd5 1 3.exd5 b6 Esta es la idea,
con el ataque al pen d5, se intenta
obligar a las blancas a hacer alguna
concesin (como el cambio en b6),
pero las negras tienen poco desarrollo y
por las casillas blancas silba el viento.
1 4.5 ! ( 1 4.xb4 tambin debe ser
buena, pero las negras tendrn cierta
actividad tras 1 4...fxd5 1 5.xb6 b6
1 6.xa6 !) 1 4 . . .bxd5 1 5.c6 c7
1 6.b4 e3 1 7.xe3 e7 1 8. h4, con
clara ventaja. Sokolov-Kalinichev,
Mosc 1 982.
1 1 ..Jlc8 Una variante similar a la de
la partida principal, pero con la idea
aadida de dificultar f2 debido al
sacrificio temtico de calidad en c3.
1 2. h4 ( 1 2.f2 !i:xc3 ! ) 1 2 ...b6 1 3 .'i9b l
e7 ( 1 3 ... d5? 1 4.xb6! ; 1 3 ...b4!? no
gana la batalla por la casilla d5, gracias
a 1 4.f2 ! ) 1 4.d3 (comunica las torres
para jugar g5) 1 4 . . .fd7 ( 1 4 . . .b4
1 5.f2; 1 4 ... d5, es dudosa por 1 5.b6
xb6 1 6.xd5 xd5 1 7 .exd5 xd5
1 8.xb5) 1 5 .g5 h5 1 6.f4 con ventaja,
Tseshkovsky-Sunye, Erevan 1 980.
l l...c7 La dama se aparta de la
columna d, para seguir con la maniobra
b6, evitando los temas de flc5. Es una
idea posicionalmente sana, defendida
repetidamente por Bologan, que tiene
la nica desventaja de perder algunos
tiempos. 1 2 .'i9b l (no se si es mejor el
orden 1 2.5 xd5 1 3.exd5 que evita
5, pero permite 1 3 ... !i:c8) 1 2 ...b6
315
1 2.f2
La jugada casi imprescindible en el
esquema blanco, adelantndose a b4.
3 16
13 ...!:tc8
"Amenazando el sacri ficio en c3" y
forzando las acciones. 13 g6 Es una
jugada extraa, que merece atencin
por haber sido empleada por lvanchuk.
14.h4 h5 1 5.5 xd5 1 6.exd5 c7
1 7. f4 Kasparov-Ivanchuk, Chess
Clasic 1 998. 13 e7!? 1 4.h4 ver la
partida 2 1 .05.
..
1 9 b6 [ 1 9...c7 ! ? mantendra la
tensin] 20.aS Wf8 [20. . .xa5
2 1 .xa5 !:ta8 22.g5 b8 23.e4]
2 1 .6 d7 22.e4
Provoca a las negras a entrar en las
siguientes complicaciones, porque si
no, las blancas mejoraran su posicin y
romperan en el flanco de rey.
1 7.f4 ! ? Se ha jugado ms y es
interesante, pero tengo la sensacin de
que justifica el desarrollo del alfil por
g7. 1 7 ...g7 1 8.h4 exf4 1 9.xf4 f6"".
1 7 g7 1 8.h4
22 xdS?!
23.xdS
b6
Shanghai 2001
jugadas ms populares.
9 c 7 Casi siempre lleva a traspo
siciones y es menos flexible que otras
continuaciones. 1 O.g4 b5?! (la nica
jugada independiente; 1 O ... h6 I I .Q-00 y las negras difici lmente evitarn
l l ...flbd7 trasponiendo; 1 0... 0-0 l l .o
o-o tambin traspondr) l l .g5 flfd7
( l l .. .b4 1 2 .fld5 flxd5 1 3.exd5 f5
1 4.xb4 y las negras ni pueden recu
perar el pen) 1 2 .fld5 !.
9 b5?! Permite una pe ligrosa
debilitacin del flanco de dama I O.a4!
b4 l l .fld5 flxd5 1 2.exd5 5 1 3.xb4
xc2 ( Escandeii-Bonaveri, lntercorp
200 1 ) 1 4Jk 1 ! y las negras tienen que
ceder el importante alfil de casillas
blancas.
9 d5?! Sigue siendo prematura
1 O.exd5
flxd5
l l .flxd5
xd5
( l l ...d5 1 2.Q-O-O) 1 2.xd5 d5
1 3.0-0-0 (y las blancas ganan casi
siempre la pareja de alfiles) 1 3 ... e6
( 1 3 ...xb3 1 4.axb3; 1 3 ...c6 1 4.fla5
) 1 4.fla5 (lo ms directo, aunque
tambin logra el mismo objetivo
1 4.flc5 c8 1 5 .c4 flc6 16.d2 0-0
1 7.fld7 d8 1 8.flb6;l;) 14 ...b5 ( 14 . . .c8
1 5 .flc4) 1 5 .d3 f5 1 6 .he l fld7
1 7.flc6;l;; Shirov-Ljubojevic, Linares
1 995.
9 flc6?! El caballo no est bien en
c6 en esta estructura, sobre todo porque
cuando el caballo blanco salta a d5, es
ms incmoda su captura. I O.o-0-0 O
O l l .g4 c8 1 2 .Wb l b5 1 3 .fld5 xd5
1 4.exd5 flb8 1 5.h4 con ventaja,
McShane-Bjomsson, Internet 2000.
9 0-0 Ver partidas 2 1 .06 a 2 1 .08.
9 flbd7 Ver la partida 2 1 .05.
9 d2
.
9 h5
317
...
...
318
IO.a4
Despus de h5, mi recomendacin
para las blancas es jugar con el o-o y
esta jugada me parece la ms til en ese
plan. 1 o. tambin es posible.
I O.e2!? Es otro plan que ha logrado
cierto xito, basado en 1 O . . .bd7
1 1 .5 xd5 1 2.exd5 5 1 3.Q-O YNc7
1 4.c4 b6 1 5.f4 y lo cierto es que tener
el pen en h5 no es una ventaja.
Topalov-Zhang Zhong, Mosc 200 l .
1 5...h4
I O...bd7 l l.a5
No slo evita una posible maniobra
b6-c4, sino que restringe definitiva
mente la estructura negra en el flanco
de dama preparndose para el futuro
5, seguido de la captura con pen.
l l Hc8
...
1 22 YNc7
12 ...6--0 1 3.0-0 c5 Es un buen
intento, pero no estoy seguro de que las
negras consigan igualar en la variante.
1 4.xc5 dxc5 1 5 .!:ifd l .
1 2...g6 Para sustituir el enroque por
la maniobra "manual" 1Yf8-g7; es sli
do, pero no crea problemas a las
blancas: 1 3 .0-0 \Yf8 1 4.!:fd 1 \Yg7
16ll:d 1 flcS
Permitiendo el salto que las blancas
estan preparando y el consiguiente
cambio de estructura. Veamos algunas
alternativas: 1 6 ... g6 1 7. 1 a2 YNxa5?!
1 8.5 YNxd2 1 9.xe7+ cbf8 20.g6+
. 16 ... h3 1 7 .g4 y el pen de h3 es
dbil.
1 7.5! xd5?!
Ceder el alfil parece un error, como
demostrar la continuacin de la parti
da. 1 7 ...xd5 1 8.exd5 f5 1 9.b4 7
20.c4;!;.
319
Kavala op 2002
I O.g4 b6
Lo ms frecuente y ms coherente
con el retraso del enroque. Pero las
otras jugadas naturales tambin se han
experimentado:
I O ...I;lc8 1 1 .0-Q-0 b6 1 2. h4, ver
la partida 2 1 .03.
IO ...c7 Una jugada que puede
trasponer a muchas otras, pero poco
flexible en este momento. I I .Q-Q-0 (o
tambin h4, e incluso l l .g5 h5
1 2.0-Q-0 O-O 1 3.\!;>b 1 , ver la partida
2 1 .07) 1 1 ...0-0 ( 1 1 .. .I;lc8 1 2. h4;
l l ...b6 1 2.h4) 1 2.g5; traspone a la
partida 2 1 .07.
IO...b6?! La menos lgica de las
320
1 1.0-0-0 bS
La lgica continuacin de h6. Pero
tambin aqu se han probado las otras
jugadas:
l l ...llc8 1 2.h4 y ahora o bien
1 2.wb l !
Recomiendo este orden, aunque no
veo diferencias importantes con 12.h4
que despus de la jugada 14 blanca
llevar a la misma posicin. 1 2.h4 b6
( 1 2 ...b4 podra ser el inconveniente de
1 2 . h4) 1 3.f2 fd7 1 4.wb l .
1 2...b6
1 2 ...b4 Slo tiene sentido si las
negras intentan capturar el pen que
queda en d5. 1 3 .5 xd5 1 4.exd5 b6
1 5 .c4 !? ( 1 5.xb4 tambin parece
buena) 1 5 ...bxc3 1 6.xc3 0-0 1 7.a5
Tsevskovsky-Doroskievi tz, Krasnodar
1 996.
13.f2
Esta jugada que prcticamente
obliga a las negras a "soltar" el control
sobre d5, es la clave del juego blanco.
14.h4 l1c8
321
322
1 6.exd5 4 1 7.cl b6
La dama negra captura una buena
diagonal, puesto que el cambio les
aliviara del problema del rey. 1 7 ...a5
1 8. (el caballo blanco va a e4)
1 8 ... d2+ 1 9.xd2 b4 20.d3 o-o
2 l .f5 (2 l .f4!?) 2 1 ..JTh8 ( Konguvei
Gallagher, Calcuta 200 1 ), y ahora aun
que el g5 de la partida tampoco est
mal, parece ms fuerte jugar: 22.f4!
exf4 23.g5 h5 24.f4.
1 8.el c7
Algo fallidas las jugadas lgicas b4
y a5, esta retirada de dama, que apunta
a c2, se ha convertido en la jugada ms
frecuente. Veamos porque:
18 a5?! 1 9.xc4 ! bxc4 20.a5 c3
2 l .c6 cxb2 22.e3 a6 23.b4
(Kasparov-Huzman, Tel Aviv 1 998).
El poderoso caballo en c6 evita el ata
que negro, y los finales son muy favo
rables: 23 .. .l::ra 8 24.a4! xa4 25.xa4
fua4 26.wxb2 seguido de a l .
1 8 b4 1 9.d3 b5 20.2 d2+
2 l .xd2 b7 22.e4 5 23 .g2;
Garca-cuartas, Colombia 200 1 .
.
1 9.d3 g6
Adelantndose a la amenaza g5-g6.
1 9 ... a5 empleada en una partida por
correspondencia, es lo ms lgico.
20.f4!
Es lo ms incisivo, aunque el trata
miento posicional, 20.h5 tambin da
ligera ventaja.
Partida 21 .06
Motylev,A - Odeev,H
Linares 2001
323
l l.g4 bS
Una vez enrocadas, las negras no
deberan entretenerse en florituras
posicionales, y sin embargo una de las
alternativas ha alcanzado una gran
popularidad.
l l . l!c8 1 2.h4 (pero no 1 2 .g5 5)
12 ... b5 ( 12 ...b6 traspone a los comen
tarios de la partida Motylev-Makarov)
1 3.h5 b6 ( Ponomariov-Schneider,
Donezk 1 998) y ahora 1 4.g5 b4
1 5 .4 ! fue4 ( 1 5 ...fua4 1 6.gxf6 f6
1 7.xb4;l;) 1 6.fxe4 fua4 1 7.a6 l!a8
1 8.b7 l!b8 1 9.d5;l;.
l l ...b6 1 2.h4 y ahora las negras
.
324
12.g5 hS
Permitiendo la entrada de su
opuesto en d5. Se puede evitar con
1 2 ...b4 1 3.2! (el caballo no va a d5
pero se dispone a molestar a su colega
si va a h5) con dos alternativas:
A) 1 3 ... 8 Evita los inconvenien
tes de g3, pero permite: 1 4.f4 ! a5
( l 4 . . . exf4 1 5.xf4) 1 5.f5 xb3
( 1 5 ... a4 1 6.fxe6 axb3 1 7 .cxb3 fxe6
1 8.wb l con c lara ventaja Gelman
Krasilnikov, Leningrado 1 990) 1 6.cxb3
a4 1 7.bxa4 fl:xa4 1 8.b3 fl:a3 1 9.wb l ;
una vez consolidado el enroque vendr
f6 o g6.
8) 1 3 ...5 14.g3 f4 1 5 .h4 a5
1 6.wb l a4 1 7.d4 !; Topalov-De
Firmian, Polanica Zdroj 1 995.
I S.!>bl aS 1 6.b5!
El inconveniente del ataque negro,
y particularmente del desarrollo del
caballo a d7 (en b8 vigilara c6). Las
blancas dominan el flanco de dama y
acaban sacando ventaja del ataque
negro.
1 6... a4
1 7.cl aJ 1 8.xb4
1 8.b3 ! ? 5 1 9.xb4 xg5 20.xc5
dxc5 2 1 .xc5, con pen de ms pero
cierta debilidad en las casillas negras.
325
326
1 2.. lrfc8!?
Y las negras insisten con su estrate
gia de no debilitarse con b5. Esta
jugada est causando a las blancas los
mayores problemas. En una primera
etapa se jug 1 2 ... b5 1 3 .g5 h5
1 4.5 ! ljxd5 1 5.exd5 (las blancas se
disponen a jugar 5-c6 y su dominio
sera aplastante) 1 5 ...b6 1 6.5 ! (a
pesar de todo. Esta entrega de pen
temtica es la que ha inclinado a las
negras por 1 2 . . .fc8) 1 6 . . .xd5
1 7.xd5 xa5 1 8.c4! (jugando en el
flanco de dama. El dominio de las
casillas blancas parece compensar
ampliamente el pen) 1 8 . . .ab8
( 1 8 ... b4?! 1 9.gl ab8 20.cxb5 axb5
2 1 .a3 a4 22.g4 Bologan-Fressinet,
Pamplona 200 1 , y ahora es interesante
la recomendacin de Ftacnick: 22 ...b4
23 .c 1 d7 24.axb4 fc8 pero las
blancas siguen pareciendo un poco
mejor debido a su pen pasado en la
columna b) 1 9.g l g6 20.g4 g7
2 1 .cxb5 axb5 22.1jd2 b6 23 .b4
Ahora las blancas estn recuperando el
pen y conservan importantes ventajas,
sobre todo en las casillas blancas.
Lhano-Palac, Estambul 2003.
IJ.gS
I J hS 14-l'gl
14... a5
Las negras insisten en no jugar b5,
pero esta jugada crea otra debilidad y
me parece dudosa. Sin embargo hay
dos alternativas muy serias:
14 ...b6 Posiblemente la jugada
crtica. Las blancas tienen varios
intentos:
A) 1 5.5 Es indita aqu y aunque
no es muy ambiciosa, la posicin blan
ca es ms sana. 1 5 ...d5 ( 1 5 ...d5
1 6.exd5 a5 1 7.a3 a4 1 8.5 !;!; traspone
a una brillante partida Shirov-Gelfand)
1 6.exd5 5 1 7.d3 xd3 1 8.xd3 c4
1 9.e4;!;.
8) 1 5.f2 d8 (Topalov-Kasparov,
Len 1 998; si 1 5 ...4 1 6.xc4 xc4
1 7.5;!;) y ahora mi propuesta es:
1 6.f4 xf4 ( 1 6 ... exf4? ! 1 7.d4)
1 7.xf4 exf4 1 8.xf4.
327
I S.aJ b6 1 6.f4
El juego que se produce en la
partida es muy interesante para las
blancas, pero creo que tienen una
jugada incluso mejor: 1 6 .f2! c4
( 1 6 ...d8? 1 7.b5+-) 1 7.xc4 xc4
1 8.5 xd5 1 9.fud5 b5? ! (la conti
nuacin lgica del contrajuego)
20.5! Esta jugada atrapa la dama, si
bien es cierto que las negras consiguen
un material interesante para compen
sarla. 20...dxc5 (20 ...fuc5 2 l .b3 c3
22.fd3) 2 1 .b3 c3 22.fd3 (22.d2 !?
d4 23.fud4 cxd4;!;) 2 2... xd3 23.cxd3
con ligera ventaja.
3 28
rializarlo
Partida 2 1 . 08
Alonso,S - Roeder,M
ONCE op 2000
l.e4 eS 2.13 d6 3.d4 cxd4 4.xd4 ff6
S.J a6 6.e3 eS 7.b3 e7 8.13 e6
9.d2 0-0 1 0.0- bS (D)
12 ...xdS
13.exdS aS 1 4.i>b1
1S.gS fd7
1 5 ...5?! No es aqu tan bonita
como en variantes anteriores porque
1 6.h4 flb6
La punta del plan negro es combi
nar el avance b4 con el salto flc4, que
impedir el atasco de su ataque.
1 6 ... f5 ! ? (puede ayudar a parar el ata
que blanco en el otro lado, pero el
dominio de las casillas blancas, por
parte del primer jugador, ser incontes
table) 1 7.gxf6 f6 1 8.h5 flb6 1 9.!!gl
fl8d7 20.!!g4 a4 2 1 .flc 1 b3?! 22.cxb3
!!fc8 23 .b5 !; lvanov-Carroll, cr.
2000.
1 7.h5
Mientras la carrera de peones
funcione, no veo motivo para buscar
sutilezas.
329
20...fld7
El caballo deja paso a la torre y
viene a defender. Es dificil imaginar
algo ms eficaz. 20 . . . fxg6 2 1 .hxg6
hxg6 (2 1 ... h6? 22.xh6+-) 22.g2;
20...b3 2 1 .cxb3 axb3 22.gxh7+ debe
trasponer.
1 7 a4
.
1 8.flc1 flc4
(23 . . .f6
24.g5+-)
24.h6 !+-]
330
Estadstica:
La variante Najdorf, considerando las partidas que comienzan a partir de la posi
cin que se produce despus de 5 ... a6 se produce, en mi base, en 97.000
partidas y las blancas consiguen un razonable 53%, superior a otras variantes de
la Siciliana mucho menos populares. Si nos centramos slo en las variantes que
estudiamos en este captulo, el porcentaje sube al 55%, que podemos considerar
bueno sobre 6.400 partidas.
Esquema Resumen: l .e4 eS 2.0 d6 3.d4 cd4 4.4 ff6 5.3 a6 6.e3
-
8...bd7 9.g4
- 9...b6 Interesante, pero poco investigada ;l;;
- 9 .. Jk8 Un plan nuevo, que bien interpretado ofrece perspectivas, pero parece
que su formulacin exacta es con c7 y la torre de rey a c8 ;l;;
- 9...b5 l O.g5 5?! Hace concesiones sin conseguir mucho
331
8...e7 9.d2
- 9 ...b5?! Sigue siendo prematura y debilitadora
- 9. . .d5?! Sigue siendo prematura y pasiva
- 9...6? ! Peor que en la j ugada anterior
- 9... h5 Posicional y muy sana. Las blancas tienen que cambiar de plan
9...bd7 1 0.g4
lndice de Variantes
Seccin
Seccin
Seccin
Seccin
1:
2:
3:
4:
4 ... lbxd4 28
4 ... d5 28
4 ..."ikc7 28
4 .. . "ikb6 32
4 ... e6 - traspone 162
A) 4... g6 5.lbc3 i.. g7 (5 . . . lbf6 40)
2 ... h6 1 1
2 ... g6 1 1
2 . . :ii'c7 12
2 ... lbf6 12
2 . . . b6 16
2 ... a6 21
a1)
a2)
a3)
a4)
(O)
7 ... lba5 43
7 ... d6 43
7 ... "ika5 46
7 ... 0-0 8.i.. b 3
a4 1 )
a42)
a43)
a44)
8 ... a5 49
8 . . . e6 52
8 . . ."ika5 52
8 ... lba5 52
ndice de Variantes
a45) 8 ... a6 53
a46) 8 . . . lt::lg4 53
a47) 8 . . . d6 54
B)
333
a) 14 .. J:tg8 120
b) 14 ... 'ii'd7 120
e) 14 ... .ig7 1 5.'ii' h 5
4... e5 S.lt::l bS
b1 ) 5. . . a6 61
b2) 5 ... d6 69
124
C) 4...lt::lf6
5.lt::l c3
Seccin 3: 2 . . . e6 3.d4 ed4 4.lt::ld4
e1 ) 5 ... 'ii'b6 35
e2) 5. . . e6 - traspone 153
e3) 5 . . .d6 traspone 243
(O)
d221 )
d222)
d223)
d224)
1 O . . . .ie6 93
1 0 ... .ig7 93
1 0 . . .f5 1 1 . .id3 'ii'g 5 101
10 . . .f5 1 1 . .id3 .ie6 101
4 . . . .ie5 133
4 ... 'ii'b6 136
102;
14.c4
a 1 ) 5. . . 'ii'b6 140
a2) 5 . . . .ib4 143
a3) 5...lt::lc6 6.lt::ld b5
334
ndice de Variantes
b1 ) 5 . . . c5 137
b2) 5 ... a6 162
b3) 5 . . . d6 163
b) 5. . . d7 21 1
A) 5...g6 6. .ie3 g7 7.f3 0-0
(7 . . .a6 2 1 7; 7 . . . ltJc6 220) 8.'ii'd 2
ltJc6 9.c4 d7
b41 )
b42)
b43)
b43)
C)
6 . . .ltJf6 166
6 . . .a6 7.'ii'd2 b5 166
6 . . .a6 7.'ii'd2 ltJd4 166
6 . . .a6 7.'ii'd2 ltJf6 1 69
c 1 ) 6 . . . d6 184
c2) 6 . . . .ib4 186
c3) 6 ... 'i!fc7 7.a3
c31 )
c32)
c33)
c34)
7 . . .ltJe4 191
7 ... d6 191
7 . . .b 6 196
7 . . . ltJc6 198
(O)
B)
b1 )
b2)
b3)
b4)
b5)
b6)
4 . . . e 5 202
6 ... d7 244
6 . . . h6 244
6 . . . a6 244
6 . . . 'ii'b6 245
6 . . . 'ii'a 5 246
6... e6 7.'ii'd 2
a) 5 ... e5 206
a6 8.0-0-0
ndice de Variantes
a)
b)
e)
d)
D) 5....a6 6.e3
d1)
d2)
d3)
d4)
dS)
8 ... d7 9.f3
d1 ) 9 .. h6 1 0. e3 262
d2) 9. . . e7 266
d3) 9. . . :tea 267
d4) 9. . . bS 267
335
6 . . .lLlg4 304
6 . . . 'fie7 304
6 . . . bS 305
6 . . .lLle6 305
6 . . . lLlbd7 305
275)
9 . . . hS 3 1 7
9 . . .dS 3 1 7
9 . . .lLle6 3 1 7
9 . . .b S 317
9...lLlbd7 1 0 .g4
c5 1 )
eS2)
eS3)
eS4)
1 o . . .lLlb6 319
10 ... :ea 319
10 ... h6 319
10 ... bS 320
1 1 .h4
336