La Piñata Más Grande Del Mundo
La Piñata Más Grande Del Mundo
La Piñata Más Grande Del Mundo
Mario Lamo Jimnez Mencin de Honor, Concurso de Dramaturgia Infantil, Colcultura, Colombia
Personajes
Cipriano Cedillo: Fabricante de piatas. Tiene unos sesenta aos, es moreno de baja estatura, manos duras curtidas por su trabajo. Su cabeza es ligeramente calva, viste un delantal rojo y una camisa de manga corta.
La Mujer Maravilla: Es la piata del personaje de las caricaturas, tiene un vestido azul con flecos dorados, la cara es una mscara de papel rosado.
La Piata del Presidente: Es la piata de un charro, tiene un traje azul con botones dorados, un sombrern con cinta, grandes cejas de cabuya y una estrella dorada de alguacil en el pecho. El padre: Tiene unos 40 aos y viste deportivamente.
El nio: Va a cumplir siete aos y viste un pantaln corto y una gorrita azul.
Las piatas sern representadas por actores que tendrn mscaras o partes de su cuerpo en forma de piata. La piata del presidente ser reemplazada en la escena VIII por una piata de verdad cuando cuelgue del techo y en la ltima escena, durante la fiesta. Escena I
Estamos en el taller de Cipriano, es temprano de maana y Cipriano no ha llegado a su trabajo. En primer plano vemos una mesa de trabajo donde reposan diversos implementos de la piatera, tales como papel de colores, bamb seco, una olla con engrudo, etc. Al fondo, recostadas en la pared estn las piatas que Cipriano ha venido trabajando, entre ellas vemos a nuestros personajes: la burrita, la mujer maravilla y el barquito de papel. Junto a la mesa de trabajo vemos la armazn de la piata del presidente. La escena est a media luz y con las luces se simular la salida del sol. Por el lado derecho del escenario aparece Cipriano. Viste su delantal rojo y trae una escoba en la mano. Suavemente entra la msica de "Cascanueces", al ritmo de la misma, Cipriano baila al tiempo que barre. Deja la escoba de lado y recoge un plumero, continuando con su baile limpia una por una a sus piatas. Cierra los ojos y soador se queda quieto por un momento. Vemos como la piata de la mujer maravilla cobra vida y deviene en una bailarina joven y hermosa, con la que Cipriano baila emocionado. Cuando la msica termina, Cipriano vuelve a la posicin que tena al principio de su fantasa, abre los ojos y se dirige a sus piatas: Cipriano:
haramos una fiesta con una orquesta de burritas y una mujer maravilla que bailara en mis brazos las ms bellas melodas. Ay mis locas fantasas! Piatero a tus piatas, que el da es corto y la vida larga.
Dicho esto, Cipriano se dirige a su mesa de trabajo, echa un vistazo a la armazn que tiene al lado y dice: Cipriano: Bueno, es hora de trabajar. Cmo est hoy nuestro futuro presidente? sta va a ser la piata ms grande del mundo y va a ser nada ms ni nada menos que nuestro mismo presidente, Perico de los Palotes, una piata hermosa que adornar la mejor fiesta de cumpleaos de este lugar. (Mirando a sus otras piatas) No se hagan las ofendidas, yo s que Uds. tambin son piatas muy hermosas, pero la piata ms grande del mundo ha sido el sueo de toda mi vida y hoy, por fin, la voy a terminar. (Mirando a la burrita) Djate de esos rebuznos melanclicos! Ni ms faltaba, una burrita celosa de un charro!, esos lagrimones de confeti nadie te los va a creer. Suena de nuevo la msica y vemos Embadurna con engrudo el papel azul con que recubre las piernas y el torso de la piata, con paciencia infinita recubre la cara con papel rosado, de cabuya negra hace las cejas y dos valos de color negro se convierten en los ojos. Con papel dorado adorna el sombrero de charro que viste el presidente y para terminar, con el mismo papel hace una estrella de cinco puntas que le cuelga en el pecho. Extasiado, Cipriano contempla su obra maestra, le da los ltimos toques, la acomoda y con una cabuya la cuelga a secar. La piata del presidente gira en su cuerda. (sta es una piata real que ser reemplazada despus por un actor.)
Cipriano: Slo le falta hablar! Si las piatas hablaran, Qu diran? Algn da estas piatas se tienen que volver personas o yo me tengo que volver piata, para tener una fiesta y divertirnos de lo lindo. (Mirando por la ventana) Caramba, cmo pasa el tiempo!, ya se est oscureciendo. (Cantndole a la piata del presidente) Huesos de palo cejas de cabuya piel de papel picado y corazn de luna, sonrisa de caramelo ojos de aceituna, por qu es el cielo azul y blanca la espuma? El escenario se oscurece lentamente y vemos a Cipriano recoger sus implementos, los cuales coloca con cuidado sobre la mesa, tras lo cual sale por una puerta lateral. Escena II Se escucha una msica suave de carnaval, voces y algaraba, las luces suben poco a poco, lo mismo que la msica. Vemos que todas las piatas (menos la del presidente) se han humanizado y estn teniendo una fiesta, bailan entre s, ren y cantan. La msica baja un poco y escuchamos las palabras del barquito de papel.
Barquito de Papel:
Burrita:
que me ro hasta por la camisa! Mujer Maravilla: Yo peleo contra villanos de todos los colores y sabores, ojirrubios en aeroplanos, marcianos venidos de la India, marineros de piscina en traje de fatiga y fatigados en traje de oficina. Me duelen la injusticia y las rodillas, sobre todo cuando bailo con prisa...
Repentinamente, la msica se suspende, las piatas se quedan estticas y se escucha una voz ronca que nadie parece saber de dnde viene.
Voz: Ya basta de tonteras, tanto baile y tanta risa me enferman del sombrero, me causan hepatitis de alegra, me ponen amarillo de contento, hacen que me d envidia de 40 grados y que me salgan viruelas en los dedos.
Las luces bajan y un foco ilumina a la piata del presidente, quien sonre siniestramente.
Presidente:
decreto:
Artculo ventinico:
de ahora en adelante, todo ser trabajo e impuestos, quedan abolidos los domingos... el sol saldr una hora antes... antes ser despus y se suspende la hora del almuerzo.
A trabajar todo el mundo en lo que yo diga, vamos a barrer el aire y a desplumar hormigas, mi reino ser ordenado patasarriba. Favor presentarse siervos y esclavos de 9 a 8 en mi oficina.
La piata del presidente improvisa un escritorio en la mesa de trabajo de Cipriano. Las piatas se miran sorprendidas y de mala gana hacen fila para recibir las rdenes del presidente. El presidente lee el peridico y las ignora. Barquito de papel:
Mujer Maravilla: (A las otras piatas) Qu es esta falta de abuso? Yo no me recuerdo haber elegido a este intruso presidente de nada, todas las piatas fuimos hechas del mismo material, qu tiene sta de especial? Presidente:
(A travs de un hueco que ha hecho en el peridico) Basta de murmurar y escuchen lo que digo. Lo primero que hay que hacer para trabajar conmigo es esperar sin nada que hacer, rascarse el ombligo, a ver, todo el mundo, a hacer lo que yo digo. (Las piatas se rascan el ombligo y siguen haciendo lo que el presidente les ordena. Esto lo harn al ritmo de una msica de fondo e imitando malamente lo que hace el presidente. Los cuatro formarn un ballet.) Escena IV: Ballet del aburrimiento Presidente: Mirar para el techo como si se fueran a caer, recostarse en la pared, hacer aviones de papel, bostezar una y otra vez, morirse de tedio y de hasto, quedarse dormidos, tomar grandes tazas de caf, leer papeles muy aburridos, cogerse los dedos de los pies, saltar al derecho y al revs, hacer cara de fastidio, gruir, refunfuar, tener una rabieta y patalear, ensayar miradas de furor, or sin escuchar, hacer ruido, mirar para el techo otra vez,
hacer lo que ya hicimos al principio, ir y volver, sin llegar a ningn sitio. Cansarse sin hacer nada... y ahora a trabajar porque mi reino patas arriba no puede funcionar sin que ustedes hagan lo que yo les diga.
Para la msica, las piatas parecen muy cansadas, el presidente sonre con una mueca malvada. La mujer maravilla da un paso adelante y exclama:
Mujer Maravilla: Ya vas a ver, villano de pacotilla, la mujer maravilla te va a detener, porque en este reino de papel, no hay esclavos ni esclavistas ni presidente...
Presidente: Tampoco hay clavos ni repelente ni tomates con dos cabezas ni jirafas con dientes verdes. Alto ah, yo soy la piata del presidente
y por consiguiente, el presidente de las piatas. (Amenazante se acerca a la mujer maravilla) Piata insubordinada, queda usted arrestada por ordenar la conmocin pblica, por violar el desorden establecido y por pronunciar discursos aburridos. (Con sus manos gigantescas, el presidente atrapa a la mujer maravilla y la amarra con una serpentina.) (A las otras piatas): Y que sirva esto de mal ejemplo, porque como dice el dicho, ojos que no ven, corazn contento. (Mira hacia la ventana y hace un gesto de fastidio): Pero cmo pasa el tiempo, se nos est haciendo temprano y ustedes todava no han trabajado, a trabajar todo el mundo, porque en este mundo, mando yo, yo soy la piata del presidente y por consiguiente, el presidente de las piatas. Barquito de papel, a cargar viento, burrita de cartn, a subir y a bajar montaas de algodn... y sin un lamento.
(El presidente observa al par de piatas trabajando, al ritmo de sus movimientos, cantarn:)
Piatas: Trabajo de arriba a abajo cargando nubes y encendiendo soles trabajo de abajo a arriba sembrando flores y cosechando ortigas, trabajo y no me pagan slo me apagan la luz del da...
Presidente: Ms trabajo y menos canto, no gasten la voz que ustedes tienen dueo y tanta cancin (restregndose los ojos) me causa sueo...
Piatas: (Cantando) La piata del presidente tiene dos dientes el cielo tiene una estrella y el pjaro tiene un nido el presidente
El presidente se duerme parado. La burrita y el barquito de papel se miran entre s, caminan en puntillas y liberan a la mujer maravilla. Bajan las luces y vuelven a su posicin de piatas.. Escena V
Es de maana y Cipriano llega a su taller. Entra alegre y sonriendo, empieza a ordenar sus enseres. De espaldas a las piatas, se dirige al pblico:
Cipriano: Si ustedes supieran que adems de piatero yo soy el mejor cocinero de Laredo, cocino chivo relleno queda tan rico que uno se chupa hasta los dedos... (Girando la cabeza) A ver cmo amanecieron mis piatas. (Con cara de asombro)
Pero si estn cansadas y ojerosas como si no hubieran dormido (Mira al presidente quien sonre) Slo el presidente sonre con sus blancos dientes, la burrita est pancicada y el barquito de papel tiene plidas las velas y el timonel y la mujer maravilla tiene sin color las mejillas. Tranquilas mis piatas yo las dejar como nuevas. Se dirige a sus piatas y empieza a trabajar en ellas, quita ojeras, arregla sonrisas, repara velas. Las piatas vuelven a animarse y de nuevo quedan felices y contentas. Cipriano: No hay problema que no tenga respuesta ni respuesta sin problema. Por qu tienen colores las flores y la gente dos orejas? Para qu fabrican miel las abejas? Cuando est llena la Luna, de qu est llena? A qu hora duermen las ballenas?
Por qu durmieron mal mis piatas y amanecieron con ojeras? (Mirando al presidente) Ser que estn tristes porque tienen celos de la piata ms grande del mundo? Cipriano hala una cuerda y del techo descienden lentamente pequeas piatas que cuelgan de sus respectivos hilos. Vemos piatas en forma de planeta, estrellas, flores, cometas y abejas. Como un titiritero de piatas, Cipriano hace que stas suban, bajen y den vueltas. Cipriano canta la cancin de los celos.
Cipriano: rase un planeta que quera ser estrella y sinti celos, rase un cometa que quera ser planeta y sinti celos, rase una abeja que quera ser cometa y sinti celos, rase una flor que quera ser abeja y sinti celos, rase una estrella que soaba con ser flor y sinti celos...
(Deja de cantar y mira a la piata del presidente) En este paraso de piatas no hay manzanas ni serpientes, otra vez es un mundo feliz, con sonrisas llenas de dientes. (Cipriano sale de escena y las luces bajan.) Escena VI La piata del presidente est muy quieta y duerme. Las otras piatas se van despertando, vemos cmo se desperezan lentamente. Omos al barquito de papel murmurar mientras se estira:
Barquito de Papel: Tuve una horrible pesadilla, so que el presidente, Dios me asista! era un odioso fascista...
Burrita: (Bostezando)
Presidente: (Despertndose) Prohibido hablar sin permiso o se les quita la voz, porque en este reino patas arriba yo soy el dueo de los medios de comunicacin, no se puede cantar ni una cancin a menos que as yo lo decida, yo soy la piata del presidente y por consiguiente, el presidente de las piatas...
Mujer Maravilla: Nos han quitado hasta el derecho a tener derecho en este reino torcido, a este fascista nadie lo ha elegido...
Presidente: No me obliguen a volverlos una pulpa de papel, Y qu insecto ha picado a esta mujer, que protesta como si llevara por dentro toda una orquesta? A trabajar todo el mundo porque en este reino mo, lo que no est alquilado, est vendido.
(Las piatas pretenden trabajar en cmara lenta, el presidente las supervisa y contina:) Venderemos papel a Israel, y chocolate a la China, calzoncillos a Argentina, y jabn al Japn, importaremos nieve de los Alpes y alpiste de los Andes, astronautas de Alemania y alemanes de Espaa, arroyos de Guatemala
y tamales de Ucrania, entonces vendr el desarrollo y en cada olla, habr un pollo, porque yo soy la piata del presidente y por consiguiente, el presidente de las piatas...
Barquito de Papel: Ser entonces dueo de una compaa pesquera? Ministro de guerra? Pescador de ministros? Yate presidencial? Residencia real? Presidente: Sers todo lo que tu imaginacin quiera, menos lo que eres en realidad, para empezar, te nombro asesor del secretario del dignatario encargado del arte de improvisar, y como si esto fuera poco te coloco este escudo de metal y esta bandera de tela
El presidente cuelga una bandera pirata llena de estrellas y un escudo con un guila del mstil del barquito de papel. ste se pasea orgulloso por el escenario, mira con altivez a sus compaeras piatas. Se detiene frente al presidente. Implorante:
Barquito de Papel: Ahora yo tambin puedo dar rdenes desordenadas, suspender los derechos y promover los torcidos, decir mentiras verdaderas y verdades mentirosas, trabajar sin moverme y moverme sin trabajar, hablar sin decir nada y nadar sin agua? La mujer maravilla y la burrita miran con asombro a su traidora compaera, el presidente sonre con una amplia sonrisa de cartn.
Presidente: Peores palabras yo no pudiera haber dicho, podrs hacer todo lo descrito y adems de lo anterior, te nombro preso y carcelero,
embajador en la Ciudad Perdida cocinero mayor ministro de minas y esferos y guardia encargado de vigilar que estas ingratas piatas se pongan ahora mismo a trabajar. (Bostezando) Tanto trabajo me tiene agotado, me voy a trabajar acostado.
El presidente se acuesta en un rincn. El barquito de papel se pavonea y encara a sus compaeras piatas:
Barquito de Papel: (En voz alta) Ya oyeron al seor presidente, yo, el barquito de papel he sido ascendido a coronel y por este escudo de metal ahora soy general, encargado de vigilar el desorden establecido. (Mira al presidente que cabecea y da
grandes bostezos, mientras los ojos se le abren y se le cierran) Mujer Maravilla: Eres un traidor que se ha vendido por una medalla de hojalata y una bandera pirata no eres barco sino veleta, te soplan como si fueras una trompeta...
Burrita: (Lanzando un rebuzno) A este presidente falso yo lo despierto de un mordisco y hasta lo dejo bizco, lo levanto de una coz que hasta le quito la voz, Dios me asista, no hay mal que dure cien aos ni burro que lo resista!
Barquito de Papel: (En voz baja) Hablen pasito que despiertan al presidente y adems
Burrita: (En voz baja y asombrada) Quiere decir que no te has vendido al presidente de lo torcido?
Barquito de Papel: Ser barquito de papel pero nunca ser infiel, no ser general del mal ni yate presidencial... escuchen, ste es mi plan...
Las piatas hacen un corrillo y el barquito de papel les explica en voz baja su plan, la mujer maravilla sonre y la burrita tira coces de alegra. Escena VII
Vemos a las piatas recorriendo con prisa el escenario, recogen pintura, bamb y papel, trabajan laboriosamente, sin que veamos lo que estn haciendo. Cuando terminan lucen agotadas y contentas, contemplan su trabajo orgullosas. El barquito de papel se dirige entonces al rincn donde duerme el presidente.
Barquito de Papel: Despierte seor presidente, perdone que le interrumpa el sueo, (El presidente abre los ojos y grue) quiero decir, el trabajo le tenemos un regalo para que usted se siente, un presidente no debe dormir en el piso (Quitndole el sombrero de charro) Por medio de este acto lo corono y le hago entrega de este trono... (La burrita y la mujer maravilla le muestran al presidente el fruto de su trabajo y ste sonre entre sorprendido y satisfecho. Es un trono recubierto de papel dorado y estrellas plateadas.)
Burrita: Nosotras las piatas hemos humildemente pensado que un presidente de su talla, si es que hay ley, debe ser adems rey.
Mujer Maravilla: Y usted, su majestad desearamos que fuera, no slo la piata ms grande del mundo, pues eso sera poca cosa, sino adems, la ms hermosa...
El presidente orgulloso se dirige a su trono, lo examina para asegurarse que en verdad se trata de un trono. Una vez que est seguro de ello, se sienta en l con cuidado. Las piatas aplauden, el presidente les hace seas para que dejen de aplaudir.
Presidente: Es para mi una falta de deshonor sentarme en este trono que tena tan merecido, ya s que fui por ustedes elegido porque soy el mejor, el ms grande y el ms bello, y adems de ello puedo confundirlos con mis palabras y refundirlos con mi habla,
porque tengo una maestra en discursos y he hecho cursos de economa, magia y anatoma, Ven esta mano? Nada por un lado, nada por el otro, (Cierra la mano, la abre y aparece una flor de papel) Puedo hacer que sientan calor cuando haga fro, o que llueva y no se mojen porque en este reino mo lo ms derecho es lo que est torcido. (Se mete la flor en la boca y sta desaparece)
Barquito de Papel: (Al pblico) Y arriba est abajo y el orden es el relajo. (Al presidente) De charro a emperador todo es asunto de traje con un poco de maquillajey ayudado por un guin el idiota es presidente y el ignorante doctor.
Mujer Maravilla:
No hay vejez que el maquillaje no convierta en juventud aqu los defectos son virtud todo es asunto de ropaje por eso le hicimos este traje...
La mujer maravilla desenvuelve una tnica blanca y se la presenta al presidente, el cual la mira complacido.
Burrita: (Ayudndole al presidente a vestirse la tnica) Permtame que le rebuzne mi ms indigna admiracin porque este traje de la ms falsa seda, no slo no lo trajimos de la China, sino que es de ordinaria tela y aunque el burro se vista de seda, burro se queda, por eso lucir su majestad como siempre ha lucido, es decir, feo, petulante y engredo...
me quedo con el traje, con la corona y el trono mas no traten de engaarme que no soy bobo, s que ustedes no quieren trabajar y por eso me regalan tanto adorno, (Como si mirara su imagen en un espejo, el presidente se pasea prepotente) Ahora a trabajar todo el mundo, porque yo soy la piata del presidente y por consiguiente, ...el emperador.
Las piatas simulan hacer un mecnico trabajo, mientras el presidente se compone su nuevo traje. Bajan las luces y las piatas se quedan quietas. La escena se oscurece.
Escena VIII
Suben las luces, las piatas estn quietas y parecen muy cansadas, tan slo la piata del presidente parece fresca y contenta. Omos un silbido y es Cipriano que llega a trabajar.
Cipriano: (Entrando al escenario, canta y alista sus enseres) Sonre Luna, cara de arepa rellena de queso y frita en manteca, la mira el sapo en la laguna, la luna baila en el agua pura, la mira el nio desde su cuna, le guia un ojo la vieja Luna, le grue el cerdo, el bho ulula, el seor burro su amor rebuzna, sonre Luna que el sol se acerca, Luna cansada, duerme y se acuesta. (Hablando) No hay nada como levantarse bajo el calor de las estrellas y la luz mgica que regala la Luna. Veamos ahora cmo estn mis piatas, (Contando) Una, dos, tres... parecen muy cansadas y me falta una... Qu se hizo el presidente? (Mira por todas partes y no lo encuentra, finalmente, mira hacia el techo y ve la piata del presidente, como si fuera un dios, colgando en su trono. Exclama admirado) Cmo pas esto? No slo tengo la piata ms grande del mundo,
sino la ms hermosa del universo, ahora s por qu mis piatas amanecan cansadas trabajaban de noche para darme la mayor sorpresa de mi vida, mis piatas estn vivas! el presidente es emperador y gobierna desde arriba. (Mirando a sus piatas) Ahora para premiarlas, har una recua de burritas, una flota de barquitos de papel y un ejrcito de mujeres maravilla, Y que el dios de las piatas las bendiga! Cipriano parece muy contento, suena la msica del principio y baila con la mujer maravilla. Apenas acaban el baile, aparecen en escena el padre y el hijo, saludando:
El padre: Buenos das don Cipriano, como le haba prometido, vengo a comprarle una piata pero no queremos una piata cualquiera,
y necesitamos una piata tan grande como una nevera. El padre: (Mirando las piatas) No tiene slo que ser grande sino hermosa queremos una piata con flecos y adornos...
El nio: Una piata que adorne la fiesta con alma de elefante y cara de orquesta...
El nio: Ya tuvimos burrita en la fiesta pasada y me dio una coz tan dura que todava tengo la pierna morada...
Cipriano:
El padre: La ltima nos sali llena de hormigas, qu descaro, todava me rasca donde me picaron...
Cipriano: (Un poco desconsolado) ste es el mejor barquito de papel que haya navegado por una fiesta de cumpleaos... El nio: Un barquito como ese nos hizo una vez muchos daos, naveg por la tina, e inund el bao...
Cipriano: Est bien, est bien, entonces les ofrezco mi mejor piata, la ms grande, la ms hermosa y la ms barata...
El nio: Y dnde est esa piata que no la veo? Acaso nos va a caer del cielo?
Cipriano: (Sealando hacia arriba) He aqu mi ltima y mejor creacin la piata del presidente sonrisa falsa y dientes de cartn por dentro charro y por fuera emperador, le encantan el engrudo y la adulacin...
El nio: (Mirando al pap) sa es la piata que quiero, la ms grande que Cipriano ha hecho, podemos bajarla del cielo? quiero decir, del techo...
Cipriano hala la cuerda, suena una msica celeste y en medio de una nube, el presidente desciende. Una vez en el piso, las luces se prendern y apagarn rpidamente y la piata ser sustituida por el actor que la interpreta. Vemos su cara de orgullo por haber sido elegida entre todas las piatas. Bajan las luces y una luz enfoca por unos segundos la cara feliz del nio quien contempla su piata, entonces las luces se apagan. Escena IX
Estamos en el taller de Cipriano, hay un teln blanco al fondo, las piatas que aparecieron en la escena V, cuelgan de nuevo a la vista del pblico, la escena est a media luz. Escuchamos una msica infantil. En una esquina aparece Cipriano, quien soador contempla el teln, en el cual empieza a proyectarse ya sea una pelcula de 8 milmetros o transparencias de la fiesta de cumpleaos del nio de la escena anterior. Entre otras cosas, vemos al nio soplando siete velas, a los nios comiendo la torta de cumpleaos, etc. La msica baja y la burrita, la mujer maravilla y el barquito de papel entran en el escenario bailando cogidas de la mano a la vez que cantan. Las escenas de la fiesta se dejarn de proyectar en este punto, hasta que se indique lo contrario. La piatas harn un juego, cada cual estar cogida de la cintura de la otra y bailarn haciendo un semicrculo. Cambiarn repentinamente de direccin, de manera que la ltima sea la primera y viceversa. Coro de Piatas: Arriba est el sol abajo hay una orquesta y la piata del presidente est en su fiesta...
Burrita: Piatas y piatero como cabeza y sombrero (Invitando a Cipriano) bailamos juntos...
Barquito de Papel: Juntos bailamos, la rueda, rueda el ltimo pase al frente y el que se queda es el presidente...
Mujer Maravilla: Yo no me quedo atrs ni al frente la rueda, rueda, est caliente, porque Cipriano es el presidente... (Dan la vuelta, Cipriano queda de ltimo) Cipriano: Demos la vuelta en la rueda, rueda, nadie se queda atrs ni al frente... (Hacen un crculo. Se empiezan a proyectar de nuevo las escenas de la fiesta, la piata del presidente cuelga del techo y muchos nios con gorritos de papel la miran con ansia de recibir los regalos.)
Todos: Arriba est el sol abajo hay una orquesta y el presidente est en su fiesta... Al decir esto, en la pantalla aparecer el nio que cumple aos con los ojos vendados y un palo en la mano, a punto de propinarle un garrotazo al presidente. Las piatas salen bailando cogidas de la mano con Cipriano. Se apagan las luces. FIN