Tactica Del Voley

Artculos tcnicos de Voleibol
TCTICA
Autores: Jos Antonio Santos del Campo Juan Jos Molina Martn
INDICE DE CONTENIDOS
TEMA 1. LA TCTICA COLECTIVA 1 INTRODUCCION 1.1. LOS COMPLEJOS TCTICOS 1.2. ZONAS DEL CAMPO 1.3. COMPOSICION DEL EQUIPO Y DISTRIBUCIN DE LOS JUGADORES TEMA 2. SISTEMAS DE ATAQUE 2.1. Sistemas de ataque apropiados para la iniciacin. 2.2. 4R-2U (cuatro rematadores y dos universales) 2.3. 5R-1C (cinco rematadores y un colocador) TEMA 3. ELEMENTOS CONSTITUTIVOS DEL K-1 3.1. RECEPCION DEL SAQUE 3.1.a. SISTEMAS DE RECEPCIN PARA LA INICIACIN 3.1.b. RECEPCIN DE CINCO JUGADORES 3.1.b.l. Sistema 1-3-2 3.1.b.II. Sistema W 3.1.b.III. Sistema en semicrculo 3.1.c. SISTEMA DE RECEPCIN DE CUATRO JUGADORES 3.1.c.I. Recepcin de cuatro en semicrculo 3.1.c.II. Recepcin de cuatro en rombo 3.1.d. SISTEMA DE RECEPCIN DE TRES JUGADORES 3.1.d.l. Sistema de 3 en V 3.1.d.II. Recepcin de 3 en V. 3.1.e. SISTEMA DE RECEPCIN DE DOS JUGADORES 3.2. CONSTRUCCION DEL ATAQUE 3.2.a. DEFINICIN DE TRMINOS UTILIZADOS PARA EL ATAQUE 3.3. NOMENCLATURAS 3.3.a. SISTEMA ZONAL ASITICO (SZA) 3.3.b. SISTEMA DIGITAL NORTEAMERICANO (SDN) 3.3.c. COMBINACIONES DE ATAQUE 3.4. UTILIZACIN DE LOS ZAGUEROS 3.5. CONSIDERACIONES FINALES SOBRE EL ATAQUE TEMA 4. SISTEMAS DE APOYO AL ATAQUE TEMA 5. SISTEMAS DEFENSIVOS (K-2) 5.1. POSICIONES INICIALES 5.2. POSICION FINAL 2-1-3 5.3. POSICIN FINAL 2-2-2 5.4. POSICIN FINAL 2-0-4 5.5. POSICIONES FINALES CON UN SOLO BLOQUEO 5.6. SITUACIONES DE TRIPLE BLOQUEO 5.7. CONSIDERACIONES FINALES SOBRE LA DEFENSA 2 2 2 4 4 5 5 5 6 8 8 8 10 10 11 12 12 12 15 16 16 17 18 20 21 22 23 23 24 27 27 28 30 36 37 39 400 42 43 43
TCTICA. Jos A. Santos del Campo y Juan Jos Molina Martn
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TEMA 1. LA TCTICA COLECTIVA

1. INTRODUCCION
Todo deporte colectivo es algo ms que la suma de las realizaciones individuales de sus componentes. Por ello, se hace necesario determinar previamente cmo vamos a organizar nuestras acciones individuales dentro del juego. Bsicamente, esto sera la tctica colectiva. En ella, el verdadero protagonista es el equipo, y todas las acciones de los jugadores, tienen sentido solamente integrndose con las de los dems jugadores. Es importante que distribuyamos a los componentes del equipo de forma que podamos utilizar convenientemente sus condiciones fsicas y tcnicas, y as conseguir un conjunto eficaz. El orden de esta distribucin es todava ms importante en nuestro deporte, pues, al comienzo de cada set, el entrenador tiene que decidir el orden de saque de los jugadores componentes de un equipo, y esta rotacin no podr ser modificada durante ese juego. Habr que esperar al siguiente para ordenarlos de nuevo. La relacin entre los jugadores, su cohesin como grupo, permitir que los sistemas tcticos se lleven a cabo. No olvidemos nunca, que los seis mejores jugadores no siempre conforman el mejor equipo posible. Nosotros, en el estudio de los sistemas tcticos, no vamos a tener en cuenta este factor, pero es fundamental hacerlo cuando cualquier entrenador elija entre las diferentes opciones posibles, muchas de las cuales reflejaremos en este captulo. Por otro lado, conviene tener en cuenta que cada equipo debe tener su propio estilo de juego, su propia personalidad, fruto de la unin de las personalidades de todos sus componentes. Este estilo, de juego es producto de la maduracin del equipo, y en l se incluyen, adems de los elementos individuales, morfolgicos, orgnicos y tcnico-tcticos, la comprensin tctica colectiva que aporta cada uno de los componentes del colectivo, y por supuesto sus caractersticas psicolgicas y volitivas. El equilibrio de todos estos factores har factible que la madurad6n del equipo se transforme progresivamente en un nivel de juego ms alto. Cada individuo se interrelaciona con sus compaeros y con los oponentes de acuerdo a unos marcos fijados por los patrones tcticos establecidos para el equipo. Por eso, los patrones de juego, los patrones tcticos, tienen que surgir de las necesidades y caractersticas de nuestros jugadores y no buscar partituras que, aunque son adecuadas interpretadas por otros, pueden ser desesperantes para los nuestros.
1.1. LOS COMPLEJOS TCTICOS

El voleibol es un deporte que est delimitado por un reglamento. Este reglamento, condiciona de una forma muy importante todos sus aspectos tcnico-tcticos, as como la estructuracin del juego, lo que hace casi imposible la diferenciacin por separado de las fases de ataque y defensa, y por lo tanto de sus principios. Esto ha llevado a muchos autores a hacer referencia al concepto de complejo estratgico: haciendo la diferenciacin entre complejo uno (K-I) y complejo dos (K-2). Un complejo estratgico est compuesto por la unin de dos fases una defensiva y otra ofensiva. Si tenemos en cuenta que la naturaleza de la defensa puede clasificarse en cuatro grandes momentos: defensa del saque, defensa del remate, defensa del baln fcil o free-ball y defensa del bloqueo rival; podramos afirmar que existen 4 complejos estratgicos, adems del saque reconocido por Monge (2001) como el complejo 0. El K-1 se inicia con la defensa del saque, es decir con la recepcin, y acaba con el ataque de KI, tambin llamado salida de recepcin. El K-2 se inicia con la defensa del remate, lo realiza en primer lugar el equipo que ha realizado previamente un saque.
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La importancia del KI queda de manifiesto en que detrs del saque es el complejo ms realizado, adems no debemos olvidar que las estadsticas nos dicen que alrededor del 70 por 100 de los ataques del equipo en K-1 son exitosos, y por tanto, es ms fcil hacer punto. Desde los Juegos Olmpicos de Sel, y entonces, slo para el 5 set, se ha impuesto el denominado sistema de puntuacin de tie-break (accin-punto), donde siempre se punta independientemente de quien haya sacado. Curiosamente, se ha comprobado que, por ejemplo, el quinto set entre Italia y Cuba de la final del campeonato del Mundo 1989 de Brasil hubiese finalizado 4-4 con el sistema antiguo. En principio, el objetivo de los dos es el mismo: transitar de una accin dominada a una dominante y conseguir un punto, es decir, evitar que el rival ponga el baln en nuestro suelo y ponerlo el baln en el suelo del contrario. Pero el procedimiento es claramente diferente, hasta el punto que en muchas ocasiones se entrenan por separado y de distinta forma, normalmente en das distintos, cuando el volumen de trabajo lo permite. Dependiendo de la filosofa de cada equipo, se dar mayor importancia a uno u otro complejo, aunque seria ideal mantener un equilibrio entre los dos o los 5 si incluimos el saque y los otros dos tanto el free (KIII) como el apoyo (KIV)?. Perseguimos lo mismo, pero los medios utilizados y las posibilidades de xito son muy diferentes. No se tarda lo mismo en conseguir perfeccionar un sistema tctico para conseguir los puntos con el K-1 que con el K-2. Es ms, se podra diferenciar el nivel tcnico-tctico de un equipo en funcin de su desarrollo en los dos complejos. Cuanto ms elevado es su nivel, mayor equilibrio suele haber entre ellos. Habitualmente, los equipos se preocupan primero de hacer el K-1. Adems, es ms fcil y de alguna forma es la manera de dificultar que el oponente consiga distanciarse en el marcador. Deberamos saber diferenciar dnde se encuentra nuestro equipo y hacia dnde queremos ir, para saber dnde tenemos que gastar nuestros esfuerzos y nuestro tiempo para poder, mediante una planificacin especfica o inversa (3), determinar qu elementos tcnicos y fsicos debemos mejorar para lograr nuestros objetivos tcticos. Consideramos la planificacin inversa la que se hace cuando hemos llegado al juego 6x6 y en funcin de lo que no sale bien, se vuelve a disear (planificar), lo que sea necesario para corregir eso, que habitualmente, el equipo o el jugador, no hace bien dentro de nuestro sistema tctico. Sabemos que las posibilidades de alcanzar el cambio de saque o el punto dependen del nivel de nuestra competicin, as como, que existen diferencias claras entre el voleibol femenino y el masculino. Hay datos estadsticos muy claros sobre este apartado que confirman lo que todos pensamos y vemos en los partidos. Por supuesto que las dos fases del juego son importantes, y las dos tienen que ser objeto de trabajo y de preocupacin. Pero cul de las dos prevalece en mis objetivos? Para cul de las dos estoy preparado? A partir de la realidad de la competicin y de su problemtica, disear las necesidades tcnicas y fsicas necesarias para resolver esa situacin de juego, planificando la resolucin de ese aspecto del juego no satisfactorio. Muchas veces hay que dotar a algunos jugadores especficos de una mejora tcnica o fsica que les permita resolver esa situacin, necesitando por ello una planificacin inversa, del juego a lo fsico, pasando por lo tcnico, y no al revs, como en la Planificacin General, que es la que hacemos normalmente al principio del ciclo. Este tipo de situaciones no se han podido planificar con anterioridad, puesto que no son previsibles hasta que llega la situacin real de la competicin. Simplemente, analizamos una de las realidades del voleibol espaol y sus consecuencias: la mayora de los equipos, sobre todo en chicas, utilizan jugadores bajos y rpidos para jugar en zona 4, y esta simple y hasta cierto punto lgica decisin (los altos al centro) provoca que, cuando conseguimos defender y nos vemos obligados a contraatacar con un baln alto en zona -4 (actualmente tambin zagueros), no estemos capacitados para ser lo suficientemente contundentes, y de esta forma, estamos limitando la consecucin de los puntos. La razn es que hemos pensado primeramente en el complejo 1 y, posteriormente y por separado nos encontramos con la importancia que tiene pensar en el complejo 2.
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Artculos tcnicos de Voleibol 1.2. ZONAS DEL CAMPO

En voleibol, utilizamos la nomenclatura numrica para denominar las zonas del campo, que habitualmente son seis, al igual que el nmero de jugadores de la rotacin inicial, aunque cada vez es ms frecuente la divisin del campo en nueve zonas. Esto ltimo se utiliza preferentemente para defensa en segunda lnea, pues realmente las zonas zagueras (6. 5 y 1) son demasiado grandes para ser cubiertas por un solo jugador
1.3. COMPOSICION DEL EQUIPO Y DISTRIBUCIN DE LOS JUGADORES

Cuando revisamos la bibliografa, prcticamente todos los autores nos hablaban de equipos compuestos por jugadores que son colocadores, universales o rematadores. Estos son elementos de ataque y dan a entender que la distribucin y composicin del equipo tienen en cuenta solamente este apartado. Ahora, adems de incluir el libero (lo que yo recomiendo para ser aplicado durante el entrenamiento, puesto que cada uno lo llama de una forma diferente) Es cierto que en ataque es ms fcil organizar lo que vamos a hacer, pues nosotros podemos decidirlo de antemano y el baln depender de nosotros. Por otro lado, todos los jugadores tienen que estar preparados para defender en primera lnea (bloquear) o en segunda lnea (defender), y cada da los bloqueadores de los extremos (2 y 4) tienen unas funciones ms similares a los bloqueadores centrales (3). Asimismo, en segunda lnea, las variaciones en los sistemas defensivos provocan que se unifiquen los criterios defensivos para cada uno de los jugadores, sea cual sea la zona de origen (1-5-6), y lo mismo ocurre con los requisitos tcnico-tcticos que estos jugadores deben cumplir. De acuerdo con el nfasis que queremos dar a los primeros niveles de tctica, vamos a utilizar la nomenclatura de Colocadores, Rematadores y Universales al principio, para, con ellos, explicar los SISTEMAS MS SENCILLOS. Posteriormente, introduciremos otras posibilidades y otras denominaciones en base a su especializacin como opuesto, falso opuesto, atacante de punta, etc.. Definamos previamente lo que entendemos por cada uno de estos conceptos de la forma ms sencilla posible: COLOCADOR (C): jugador encargado del segundo pase, o pase de construccin de ataque. REMATADOR (R): jugador encargado del tercer contacto, es posible que indirectamente, tambin del primero. UNIVERSAL (U): jugador que realiza indistintamente funciones de colocador o de rematador. LIBERO: jugador que slo juega en las zonas zagueras, que no puede rematar, ni sacar, ni colocar de dedos desde la zona delantera. Existen otros tipos de jugadores utilizados en la composicin de los equipos de mayor nivel: OPUESTOS, DOBLE OPUESTO o FALSO 4. Es posible incluso encontrarse con nomenclaturas difciles de entender pero utilizadas en otros pases
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TEMA 2. SISTEMAS DE ATAQUE

En funcin de los tres tipos de jugadores anteriormente propuestos podemos afirmar que funcionalmente existen unos sistemas de ataque bsicos que son:
2.1. Sistemas de ataque apropiados para la iniciacin.

6R-0C 6R-6U En este sistema todos hacen de todo, es el sistema ms bsico, el colocador alcanza dicha funcionalidad en relacin al turno con el que se alcanza alguna de las 6 zonas del campo; normalmente zona 3. 3R-3C 6R-3U. En este sistema son 3 los jugadores encargados de posibilitar el ataque del resto. Al igual que en el sistema anterior existe la posibilidad de decidir quien o quienes son los colocadores en funcin de la zona del campo desde la que se decida que se va a colocar. 4R-2C (cuatro rematadores y dos colocadores) En ellos, podemos apreciar que los dos colocadores se distribuyen en oposicin, lo que provoca que, cuando uno de ellos abandona la zona delantera y pasa a ser zaguero, su opuesto entra de delantero, por lo que siempre tenemos a uno de los dos para realizar la funcin de colocador. En el primer nivel, el colocador se ubicar normalmente en zona 3, para posteriormente irse a zona 2, buscando que los jugadores altos ocupen el centro de la red. Este es el sistema ms sencillo y, por tanto, el ms recomendado para la iniciacin. A partir de ahora, nos referiremos a l como: 4-2.
2.2. 4R-2U (cuatro rematadores y dos universales)

Este sistema es apropiado para niveles de juego ms avanzados. Vemos que en este sistema ocurre lo mismo que en el anterior caso, con la particularidad de que en este supuesto, ser el universal zaguero el que se encargue de colocar mediante algn tipo de penetracin, concepto ste que explicaremos posteriormente.
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Habitualmente, los dos colocadores se ubican para defender en zona 2 y 1, aunque tambin pueden hacerla en 3 y 6 o en 2 y 6. En este caso, se Intentar aprovechar al universal delantero para realizar funciones de rematador y. de esta forma, contar siempre con tres atacantes delanteros. A nivel internacional, algunos autores, sobre todo norteamericanos, denominan a este sistema 6-2, pues de alguna forma disponemos de seis rematadores y dos colocadores, aunque obviamente slo jueguen seis jugadores. Nosotros vamos a adoptar esta denominacin a partir de ahora. Por ello, denominaremos como 6-2 este sistema con dos universales.
2.3. 5R-1C (cinco rematadores y un colocador)

El tercer sistema, el 5-1 como popularmente se denomina en todos los mbitos, es actualmente el ms difundido, pues lo juegan casi todos los equipos de un cierto nivel. Por cierto, ha provocado una imitacin desproporcionada de los equipos todava en formacin, condicionando el desarrollo de los jugadores mucho antes de lo deseado por esa excesiva tendencia a la especializacin. Slo representamos una de las posiciones en el grfico, pues el resto se obtiene simplemente rotando al colocador. Es muy importante entender que este sistema implica un mayor desequilibrio entre las seis rotaciones, pues en tres de ellas habr tres atacantes delanteros, mientras que en las otras slo habr 2 atacantes delanteros, con opcin siempre de utilizar el ataque, sobre todo el opuesto, si jugamos con este sistema de 5-1. Una de las razones fundamentales para aconsejar este sistema para los equipos de un nivel intermedio es que necesita menos tiempo para entrenarse. En el caso del 6-2 habra que duplicar el trabajo con los colocadores y el de coordinacin de cada colocador (universal) con los rematadores. Nunca debemos olvidar que el factor tiempo de entrenamiento es uno de los mayores condicionantes del desarrollo tctico de cualquier equipo, y a cada da ms, porque se juegan ms partidos y por lo tanto se entrena menos. Otra de las razones de esta proliferacin del sistema 5-1, es que en muchos casos se imitan sistemas y filosofas de equipos que no se corresponden a las realidades, necesidades y, por supuesto, a las posibilidades de esos equipos. Se ven demasiados equipos jugando 5-1, cuando deberan jugar con colocador a turno o como mximo 2C + 4R.
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Pero la composicin del equipo no slo se hace desde el punto de vista del ataque, por lo tanto es necesario realizar muchos ms matices sobre la sistematizacin de los equipos. De hecho realmente, se empieza a utilizar otra nomenclatura donde, bsicamente, desde el punto de vista atacante, los equipos estn constituidos por un colocador, dos receptores principales, que a su vez son rematadores auxiliares de tiempos largos, dos atacantes principales, que suelen responsabilizarse de los ataques del primer tiempo, y un opuesto al colocador, con funciones varias, entre las que se suele encontrar, sobre todo en los equipos masculinos, el ataque desde zaguero. Lo mismo que parece obligatorio, sobre todo en los equipos masculinos, el cambiar al libero por los jugadores ms altos, habitualmente, los que bloquean en el centro, se les llama 3, central, rematador principal, bloqueador central o principal... De todas formas, parece que la fiebre de la especializacin total est desapareciendo, y existe una tendencia a que, tanto en el ataque como en la defensa en primera lnea, todos, al menos el mayor nmero de jugadores, sean capaces de atacar todo tipo de balones. Si atendisemos a las necesidades defensivas, nos encontraramos con unos planteamientos mucho ms complicados, donde la distribucin de los bloqueadores principales y auxiliares (que no siempre se corresponden con los atacantes principales y auxiliares), al ser combinados con los receptores y con los atacantes, as como con el/Ios colocador/es, nos ofreceran mltiples opciones. Esta distribucin debe ir de acuerdo a las caractersticas y objetivos de cada equipo. Me gustara insistir en la mala utilizacin del libero en las etapas de formacin, quitando a los jugadores con mayores posibilidades.
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TEMA 3. ELEMENTOS CONSTITUTIVOS DEL K-1

3.1. RECEPCION DEL SAQUE
Tanto a nivel masculino como femenino, las formaciones para la recepcin del saque han evolucionado considerablemente en los ltimos aos. Sobre todo en el voleibol de elite mundial masculino, se han unificado los criterios, y prcticamente todos los equipos reciben mediante un sistema parecido. Existen variaciones individuales en cuanto a las zonas de responsabilidad de acuerdo a sus capacidades tcnicotcticas, teniendo en cuenta tambin sus funciones en el ataque y sobre todo, su participacin en los diferentes tiempos de ataque, as como si el jugador es utilizado o no para los remates zagueros. Ante cualquier tipo de saque en apoyo, las formaciones bsicas utilizadas son con dos nicos receptores, siendo casi siempre uno el libero, aunque a veces no es conveniente pues nuestros receptores son mejores, y de tres con el libero y los dos receptores principales, cuando el saque se ejecuta en salto. En cambio, en el apartado femenino, los equipos de elite nos muestran una mayor variacin. En las ltimas competiciones de mximo nivel, se aprecian formaciones de 5, 4, 3 y 2 jugadoras. Por supuesto que un equipo, recibe siempre con el mismo nmero de jugadores; muchos reciben con tres sistemas diferentes en cuanto al nmero de receptores. Adems, es normal disponer de variaciones dentro de los sistemas entrenados, aadiendo o disminuyendo las responsabilidades de los receptores y aadiendo o disminuyendo el nmero y dispositivo receptor, en funcin del saque del oponente. La altura de la red, 19 centmetros de diferencia entre el masculino y el femenino, provoca grandes variaciones, y sin llegar a una especializacin tan grande como en el masculino, si se aprecian una serie de receptoras principales, aunque en la distribucin anterior al saque no lo aparenten.
3.1.a. SISTEMAS DE RECEPCIN PARA LA INICIACIN

En los primeros niveles de juego, existe un gran acuerdo entre prcticamente todas las escuelas de los diferentes pases del mundo, considerando recomendable la utilizacin de los sistemas con cinco receptores en sus diferentes variantes, que lo son de acuerdo a la zona del campo que deseemos reforzar ms. Si nos fijamos en los grficos correspondientes, veremos que en todos estos sistemas de cinco receptores lo nico que hacemos es adelantar o retrasar al jugador que se encuentra ms en el centro de los cinco. Dentro de la etapa de iniciacin a la competicin, que de alguna forma se puede corresponder a la etapa de perfeccionamiento, se pueden usar sistemas con cuatro receptores, y en algunos casos sistemas de cinco o cuatro receptores con penetracin, tanto adelantada como retrasada, aunque en estos primeros pasos no debera haber penetraciones. Cuando pasamos a los sistemas con penetracin (5-1 6-2), se reducen en algunas ocasiones el nmero de receptores y se empiezan a producir colocaciones por jugadores no delanteros, por lo que nos vemos en la necesidad de clarificar algunos de los trminos que en nuestro deporte son de uso comn. Esto nos permitir utilizar una misma terminologa a partir de ahora, pues en algunas ocasiones los mismos trminos son utilizados de muy diversas maneras y a veces, para expresar aspectos muy diferentes. Penetracin adelantada: El colocador zaguero se lleva con l a la red al delantero correspondiente, por lo que su recorrido es similar a cuando no hay penetracin por ser delantero. Penetracin retrasada: El colocador zaguero inicia su recorrido desde la zona zaguera, al verse obligado a estar por detrs del delantero correspondiente en el momento del saque.
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Penetracin media: El colocador zaguero inicia su recorrido desde el pasillo ms adelantado de la zona zaguera, Esta posicin es muy utilizada cuando el saque es desde zona 1 y el receptor se ve obligado a bascular su posicin hacia delante, par evitar que le sorprenda el saque corto delante de l. Falsa penetracin: El colocador delantero aparenta ser zaguero. Puede estar inicialmente en falta de posicin, por lo que en unas ocasiones tendr que salir antes del contacto del sacador, como en el segundo ejemplo, y en otras no. Su representacin, por eso, es diferente. En todas las falsas, se representar con una doble lnea que cruza el recorrido del colocador. En los casos en que el colocador deba adelantar su desplazamiento en el momento del saque, de forma que en, el instante del contacto del sacador con el baln est por delante de su zaguero correspondiente, se representa con un segundo crculo, en este caso sin nmero, que corresponder a la posicin real en el momento del saque. De todas formas, estas falsas penetraciones se usan muy poco, debido al nivel de lo estudio que realizan los equipos contrarios. Pueden ser interesantes puntualmente, cuando se juega contra equipos que no tienen informacin nuestra. Tambin es conveniente diferenciar entre penetracin interior y penetracin exterior, sobre todo por zona 5 y por zona 1.
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3.1.b. RECEPCIN DE CINCO JUGADORES

Bsicamente, son tres los sistemas de cinco jugadores que nos podemos encontrar: 1. 2. 3. Sistema 1-3-2. Sistema W Sistema en semicrculo,
3.1.b.l. Sistema 1-3-2 En los grficos 17, 18, 19 y 20. podemos observar las posiciones de los diferentes jugadores en el sistema de recepcin 1-3-2. El colocador se encuentra en las tres posiciones delanteras, y por ello puede estar jugando tanto un 2-4 como un 5-1 (las tres rotaciones donde el colocador es delantero).
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En este sistema, la primera lnea de tres jugadores puede estar ms o menos adelantada, en funcin de acortar el recorrido de los rematadores o se prefiera proteger ms el centro del campo. En ambos casos, los receptores principales son los dos jugadores de la segunda lnea de recepcin, los ms atrasados, pues se ha calculado que un 75 por 100 de los saques son enviados al fondo del campo. Si hubiese penetracin retrasada, los 3 delanteros seran el 3, los dos zagueros que reciben el 2, siendo un 3-2. Por otra parte, las dos lneas no tienen que ser necesariamente paralelas a la red.
3.1.b.II. Sistema W
Los grficos 22, 23 y 24 corresponden al sistema de recepcin en W, y son prcticamente iguales a los anteriores. Solamente existe una pequea diferencia en el jugador de zona 6. Est algo ms retrasado y, por tanto, se encuentra prcticamente en el centro del campo. Es un sistema ideal en la iniciacin, al cubrir la zona preferencial de saque de los jugadores que en sus inicios tienden a asegurarlo.
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3.1.b.III. Sistema en semicrculo
Los grficos 25, 26 y 27 se corresponden con el sistema de recepcin en semicrculo, donde realmente lo nico que hacemos es fortalecer la parte central del fondo del campo, retrasando an ms al jugador ubicado en la zona 6.
3.1.c. SISTEMA DE RECEPCIN DE CUATRO JUGADORES

Los sistemas fundamentales de recepcin de cuatro jugadores son: . 1) Semicrculo. 2) Rombo. 3) Lnea. 3.1.c.I. Recepcin de cuatro en semicrculo Como podemos apreciar en los grficos, las posibilidades son mltiples para cada una de las seis rotaciones. De hecho, podemos dejar la recepcin al jugador que deseemos, bien para su posterior utilizacin en un ataque de primer tiempo, en un ataque zaguero, en un cambio o permuta de zona, o por ser un receptor menos experimentado. Podramos denominar este sistema como 2+2, dado que los dos jugadores ms adelantados ayudan en los saques cortos a los dos ms retrasados e interiores, que son los responsables de la mayora de los balones. Podemos apreciar en los grficos 28 al 42 algunas de las muchas posibilidades que este dispositivo nos ofrece. Tambin podemos encontrarnos con delanteros o zagueros que no reciben, combinado con penetraciones adelantadas, retrasadas o falsas.
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3.1.c.II. Recepcin de cuatro en rombo Seguimos teniendo un jugador liberado de las tareas de recepcin, y el motivo, como en el caso anterior, puede ser muy diverso, aunque, sobre todo, lo hacemos bsicamente para facilitar el juego rpido en la salida de ataque de recepcin. Este sistema, podramos denominarlo 3+1, ya que los tres retrasados conformaran un semicrculo y seran los responsables de la mayora de los balones, mientras que en el vrtice superior del rombo, el jugador ms adelantado solamente se responsabiliza de los saques cortos. Habitualmente, este jugador adelantado suele ser un delantero que pretendemos que tenga poca responsabilidad de recepcin, y que adems puede ir indistintamente a atacar a cualquiera de las zonas de la red. Es un dispositivo ideal para conseguir que este jugador ataque por el lado ms dbil del bloqueo cuando se intenta esconder el colocador bajo. Vemos algunos ejemplos de los posibles, en los grficos 43 a 47.
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Artculos tcnicos de Voleibol 3.1.d. SISTEMA DE RECEPCIN DE TRES JUGADORES

Al eliminar dos jugadores de la recepcin ms el colocador, las opciones se multiplican y, desde luego, nos va a permitir atacar mucho ms rpido y realizar la recepcin mediante jugadores especialistas. Cuando tomamos esta opcin, los receptores son siempre los mismos, o por lo menos suelen ser dos de ellos, los receptores principales del equipo, ayudndose normalmente por el libero, para que el receptor auxiliar delantero pueda jugar un primer tiempo en la salida de recepcin. Tambin se puede utilizar para liberar a nuestro especialista en ataque desde zaguero, de forma que lo realice por la zona opuesta a la que hacemos la combinacin. 3.1.d.l. Sistema de 3 en V Esta formacin puede ser ms o menos cerrada o abierta, de forma que, a veces, casi estn en lnea y reciben por pasillos, como en el caso de los saques en salto. Si los dos jugadores laterales estn ms adelantados, podramos considerarlo como un 1+2, aunque bsicamente es un sistema donde los tres receptores son considerados como igualmente responsables. Cuando el saque es en salto, los 3 receptores estn habitualmente en lnea, decidiendo previamente como se cruzan para las zonas de interferencia en recepcin, es decir, las zonas entre los 2 receptores. Veamos algunos ejemplos, con penetraciones adelantadas, retrasadas, sin penetracin y liberando diferentes jugadores zagueros y delanteros, en los grficos 48 al 55. El libero, si se utiliza, puede sustituir a cualquiera de los zagueros.
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3.1.d.II. Recepcin de 3 en V. Bsicamente, es un sistema de 2+ 1, con dos responsables de recepcin, que son ayudados por otro ms adelantado, que principalmente recepciona saques cortos. Este jugador adelantado puede bascular a derecha o izquierda en funcin de las necesidades tcticas del equipo y de las caractersticas del sacador contrario. Quisiramos llamar la atencin sobre lo avanzado del sistema. Muy pocos jugadores poseen las condiciones fsicas, tcnicas y psicolgicas como para mantener a lo largo del partido un rendimiento adecuado. Por supuesto, se corresponde con un sistema de recepcin avanzado, que no est al alcance de todos los equipos, siendo, al mismo tiempo, un paso intermedio para llegar al de dos receptores. Veamos algunos ejemplos en los grficos 56 al 59.
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3.1.e. SISTEMA DE RECEPCIN DE DOS JUGADORES

Habitualmente, estos dos receptores son distribuidos en la rotacin inicial en oposicin, por lo que uno de ellos es delantero y el otro zaguero. Desde el punto de vista de la tctica individual del saque, es un aspecto muy importante, y puesto que no tenemos ms datos que nos indiquen a cul de los dos sacar es aconsejable sacar largo o muy corto al delantero, para as dificultar su participacin en el ataque combinado. Si, como normalmente ocurre, este equipo juega un 5-1, cuando el colocador est en una de las tres rotaciones delanteras, esta estrategia se convierte en un arma defensiva muy poderosa, aunque por eso, al estar el libero, este delantero no participa frecuentemente pensando en jugar ms rpido con el. Para este sistema, vamos a poner un ejemplo con un equipo en el que vemos sus seis rotaciones, que se corresponden con los grficos 60 al 65.
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En este caso, los jugadores siempre van a recibir en el mismo lado, derecho o izquierdo. Esto complica la posicin de los no receptores, pero tiene la gran ventaja de facilitar el entrenamiento. Slo tendramos que entrenar una relacin dentro del sistema de recepcin!.
Por supuesto, se puede hacer ms sencillo, recibiendo indistintamente en cualquiera de los lados, sin tener que mandar al nm. 10 a recibir a la izquierda cuando est en zona 2, ni al nm. 9 a la derecha cuando se encuentra en zona 5 (grfico 64).
Igualmente, se puede simplificar el grfico 65. Lo importante es que siempre pueden recibir en el lado que nosotros deseemos, tanto por motivos de preferencia de saque del oponente como de facilidad para la combinacin de ataque de los delanteros o de los zagueros.
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En todos los sistemas de recepcin, es fundamental clarificar cmo deben cubrir los jugadores las zonas de interferencia que se producen entre ellos. El caso de la recepcin con dos jugadores va a servimos para explicar cmo resolver esta problemtica en prcticamente todas las ocasiones. Si observamos el grfico 60, veremos cmo se cruzan uno por delante del otro de forma que no colisionen ni se molesten. Esta forma de desplazamiento es, asimismo, vlida, en general, para la defensa en segunda lnea.
3.2. CONSTRUCCION DEL ATAQUE

En la actualidad, la mayora de los equipos de todos los niveles juegan mediante un sistema 51. Slo Cuba femenino ha mantenido en los ltimos campeonatos importantes un sistema 6-2. An as, no es desdeable pensar que en un futuro prximo se vuelvan a utilizar otras frmulas que en su momento tuvieron vigencia; sobre todo, si se producen cambios en el reglamento que puedan limitar la utilizacin del remate de zaguero y/o el nmero de bloqueadores. De todas formas, aunque existe una gran diferencia en la utilizacin de un sistema de ataque 5-1, 4-2 6-2, y no slo en los aspectos tcticos, a efectos de nuestro estudio terico, es suficiente analizarlo como cuando un equipo juega con un 5-1, al darse las dos circunstancias bsicas: 1. Construccin del ataque con dos rematadores delanteros (3 rotaciones). 2. Construccin del ataque con tres rematadores delanteros (las otras 3 rotaciones). Aqu tambin nos vemos en la necesidad de definir una serie de trminos, que en muchos casos son utilizados de manera muy confusa, y que en el futuro nos permitirn un idioma comn. Debemos considerar estas definiciones, como un punto de partida para una posterior unificacin terminolgica, muy necesaria por otra parte, pues de no hacerlo as, nos encontramos con que cada uno llama a cada combinacin, con un nombre o apellido diferente y, por tanto, siempre habr que explicar lo que queremos decir. Seria muy importante que en todo el pas entendisemos lo mismo por tndem, amago, etctera. De esta forma, podramos llegar a denominar con un solo nombre cada combinacin, y. por ejemplo, estar de acuerdo en lo que es doble de 2, doble de 3, doble de 4, amago de 2; interior de 4, tndem de 2, exterior de 4. y as sucesivamente, sin tener que hablar de doble rumana, checa, rusa, china, yugoslava, blgara, que en muchos casos es lo mismo. Lo importante no es el nombre que pongamos, sino que ste sea el mismo para todos. Por otro lado, es fundamental que sea lgico y que esta sistematizacin nos lleve a un proceso racional en el que desde el primer momento, podamos identificar los trminos y entendernos utilizando el mismo nmero de apellidos. Cuando se tratase de tres rematadores, seria ms arduo, pero igualmente posible.
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3.2.a. DEFINICIN DE TRMINOS UTILIZADOS PARA EL ATAQUE Primer tiempo: Ataque que se corresponde a una colocacin que se realiza despus o durante el
salto del rematador. A nivel ideal, el rematador se encontrara en el aire cuando el baln sale de las manos del colocador. En ciertos casos, se pueden diferenciar primeros tiempos ms o menos rpidos. Estas colocaciones pueden ser cercanas al colocador (corta por delante y por detrs) o ms alejadas (semitensas, tensa a 3, tambin llamada alma), en el SDN los primeros tiempos van marcados por el segundo dgito el cual es siempre el 1.
Segundo tiempo: Ataque correspondiente a una colocacin que se realiza antes de que el rematador haya efectuado su salto, y que generalmente permite dar el ltimo paso de la carrera (y, por tanto, corregir la colocacin variando la temporizacin y el lugar de batida del salto). El baln sale de las manos del colocador una vez que el rematador ha iniciado su carrera y durante el penltimo paso de sta. Obviamente, existe una posibilidad de variacin en funcin de la parbola, trayectoria, velocidad y altura, estando por ello ms o menos cerca del colocador. Tambin podemos hacer segundos tiempos ms o menos rpidos y ms o menos alejados de la red, realizados en tndem o para los zagueros (la famosa pipe) Bsicamente, seran todo tipo de semis. En el SDN los segundo tiempos van marcados por el segundo dgito el cual es siempre un 2. Tercer tiempo: Ataque correspondiente a una colocacin que se realiza antes de que el rematador
haya iniciado su carrera. Serian los balones que habitualmente se denominan como altos y normales. El segundo dgito de este tipo de colocaciones segn el SDN es siempre un 3.
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3.3. NOMENCLATURAS
Tradicionalmente, en nuestro pas hemos definido las colocaciones con los nombres de corta, semi, alta y tensa. Esta forma de comunicacin suele ser suficiente para poder explicar a los jugadores lo que tienen que hacer, pero en muchos casos se hacen necesarios apellidos para esos nombres iniciales, pues se plantean varias posibilidades. Desde hace diez aos, en otros pases, sobre todo Estados Unidos y Holanda, se han estado utilizando nmeros para definir el tipo de colocacin, y en otros casos como son los asiticos, letras. Estos procedimientos estn claramente explicados en el vdeo MASTERS VOLLEYBALL de la FIVB, que la Federacin Espaola de Voleibol ha traducido, doblado y adaptado al castellano. Asimismo, se utiliza esta terminologa en las ltimas ediciones de Coaches Manual de la FIVB.
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3.3.a. SISTEMA ZONAL ASITICO (SZA)

Bsicamente, se refiere solamente a los ataques rpidos, por lo que nosotros vamos a darle a cada una de las zonas la posibilidad de ser baja (rpida) o media, no utilizando los terceros tiempos, aunque, obviamente, se podra hacer.
Zona A: 1 m. por delante del colocador. Zona B: 3 m. por delante de la zona A Zona C: 1 m. por detrs del colocador. Zona D: 3 m. por detrs de la zona C.
Si atendemos a los primeros tiempos, en zona A, sera en el sistema tradicional una corta adelante; en la zona B, una semitensa adelante o alma; en la zona C sera una corta atrs, y en la zona D, una semitensa atrs. Personalmente, me resulta un sistema confuso, por no diferenciar entre 1 y 2 tiempo.
3.3.b. SISTEMA DIGITAL NORTEAMERICANO (SDN)

Se basa en definir cada colocacin con un doble dgito, donde el primero expresa la zona de la red donde se enva el baln y el segundo dgito se corresponde a la altura y, por tanto, al tiempo de remate. Existen dentro de este mtodo diferentes sistemas en funcin de las zonas de la red que diferencian (7 en el sistema holands y 9 en el americano, por ejemplo) o de la cantidad de posibilidades en el segundo dgito (0-1.2.3, el ms sencillo, o hasta seis posibilidades). Por motivos prcticos y de iniciacin al sistema, nosotros propugnamos para el segundo dgito solamente utilizar: 1 si es primer tiempo, 2 si es segundo, 3 si es tndem (no se nos ocurre una forma ms sencilla de explicarle al rematador que va a estar separado de la red) y O si es un tercer tiempo, ya que el O es utilizado por todos, o casi todos los sistemas digitales para denominar los balones altos.
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En cuanto al nmero de zonas (primer dgito), nos inclinamos por el que est extendido internacionalmente y de alguna forma aceptado por la Comisin Internacional de Entrenadores: las nueve zonas, ubicando al colocador (aqu tambin existen discrepancias) en la zona 6, y en la zona 1 a la izquierda de nuestro campo cuando miramos hacia la red. Poniendo unos ejemplos, nos encontraramos con que: A y 51 seran lo mismo, es decir, una corta adelante. B y 31 seran una semitensa delante, o alma C y 71 seran una corta detrs. D y 91 seran una semitensa detrs.
Este sistema diferencia cuatro pasillos de zaguero, de acuerdo con la siguiente distribucin (grfico 76 bis), aunque normalmente son tres pasillos: 1, 6 y 5 (Z 1, Z 6, Z 5)
3.3.c. COMBINACIONES DE ATAQUE

A partir de estos conceptos, podemos disear cuantas combinaciones deseemos; vemos en los siguientes grficos algunas de las combinaciones ms usuales. As, nos encontramos con un doble tiempo por delante con el primer tiempo cercano al colocador (51corta delante) y un segundo tiempo ms alejado (32-semi delante). Esta combinacin, que podramos considerar casi la ms sencilla de las de un solo primer tiempo, se puede realizar de muchas formas, concretamente las representadas en los grficos 77 al 82. Vemos que alternamos al jugador que va al primer tiempo y la zona de origen, por lo que nos encontramos con seis posibilidades, en las que tenemos tres escalones, dos cruces y un amago de cruce. En el caso de que dispusiramos de un tercer delantero, podramos utilizarlo en diferentes recorridos. En el caso del grfico 77, para cruzar al 2 hacia zona 3, o al 4 hacia zona 2. En el caso del grfico 78, podramos mandar al 2, tanto en primer como en segundo trmino, por detrs del colocador. En el 79, sera lgico mantener al jugador libre en su zona, envindole a zona 1. En los siguientes grficos (80-82), estaramos en el mismo caso que en los anteriores, aunque, a un nivel alto, podramos hacer con el 2 y el 4 un cambio de zona alejada en espera de encontrar una gran debilidad de bloqueo en ese lado o, por lo menos, un bloqueo con problemas de orientacin en un gran desplazamiento y por tanto, en dificultades.
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Todas las combinaciones pueden ser en salida de recepcin o bien en contraataque. En general, las salidas de recepcin pueden ser ms rpidas, o al menos tener ms primeros tiempos, aunque, ante combinaciones de contraataque realizadas con balones fciles enviados por el contrario (FREE BALL), estamos en iguales o mejores condiciones de realizarlas. Las combinaciones de ataque deben atenerse a las caractersticas de los rematadores propios y a los defensores contrarios, sobre todo los de primera Inea, por lo que en principio, no hay unas mejores que otras. De todas formas, es bueno que las combinaciones se trabajen por familias, es decir, aquellas que son variaciones, sobre todo, de los segundos tiempos. As, vemos que las combinaciones de los grficos 83, 84 y 85 contienen una variacin del segundo tiempo, donde hasta el mismo momento en que el bloqueo empieza a tener unas referencias claras de a dnde ir el baln, los recorridos de los dos rematadores son exactamente iguales y. por tanto, difciles de predecir. En el 85, el recorrido inicial se corresponde a un primer tiempo, para luego, con la doble batida, acabar en un segundo tiempo.
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Las combinaciones de ataque deben ser secuenciales, es decir, una debe conducir a la otra. No se deben realizar las combinaciones sin una intencionalidad tctica de conjunto que nos permita estructurar una estrategia, un plan. Si realizamos una doble cruzada del 2, es para luego utilizar el amago de cruce y as generar mayores dificultades al bloqueo. De alguna manera, podramos diferenciar las combinaciones de ataque en: 1. SIN PRIMER TIEMPO: donde lgicamente, intentaramos hacer una zona ampliada para dificultar las posibilidades de que se formase el bloqueo doble. Un ejemplo sera (12-92). Sera lgico que, si tuvisemos un tercer atacante, al menos fuese a un primer tiempo. En principio, se podran considerar las colocaciones tensas a 4 como un segundo tiempo en funcin del momento de salto del rematador respecto al ba1n salido del colocador, aunque, por otro lado, en fundn de la altura del baln, podra ser una 11; nosotros vamos a denominar este tipo de colocacin como 12. 2. CON UN PRIMER TIEMPO: ya hemos puesto anteriormente suficientes ejemplos; son las ms utilizadas. 3. CON DOS PRIMEROS TIEMPOS: utilizadas habitualmente con tres atacantes delanteros o bien con dos delanteros y un zaguero; es decir, tenemos al menos un segundo o tercer tiempo. Pueden ser los dos por delante (31-51) o uno por delante y otro por detrs (51-71), (31-71) En ciertos niveles, se realiza tambin 91, con batida de 1 o 2 piernas, pero no es muy aconsejable salvo excepciones. 4. CON TRES PRIMEROS TIEMPOS: de muy difcil realizacin y no muy habituales. La ms normal sera 3151-71.
Las combinaciones ms conocidas dentro de los sistemas de ataque son: Tndem: El segundo jugador de la combinacin remata un baln ms separado de lo normal detrs
del primer tiempo y cuando ste est descendiendo (puede ser delantero o zaguero). Tambin llamado OLAS, por algunos autores.
Cruce: Las trayectorias de los rematadores se cruzan entre s. Lgicamente, no se pueden utilizar dos primeros tiempos con cruce, ni con amagos de cruce. Escalones: El segundo tiempo remata cerca del primer tiempo, sin que se produzca cruce en sus
carreras. Otros autores tambin los denominan OLAS.
Zona reducida: Todos los atacantes acaban sus trayectorias en un espacio mnimo, agrupando, por tanto, todo el ataque en una misma lona. Puede ser prxima al colocador o no, aunque es ms frecuente lo primero. Amago: Se produce un cambio de direccin en la trayectoria del rematador de forma que se remata en el segundo o el tercer tiempo ms o menos alto (nunca en el primero) en una zona diferente a la que inicialmente se diriga.
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Artculos tcnicos de Voleibol Doble batida: Tambin conocido internacionalmente como TIEMPO DIFERENCIAL. El mismo jugador
marca un primer tiempo para luego rematar en segundo tiempo. Puede hacerla con desplazamiento entre el primer tiempo y el segundo o en el mismo lugar. En caso de desplazamiento, la batida final puede hacerse con una o dos piernas.
Cambio de zona: El rematador acaba su carrera en una zona diferente a la que inicialmente estaba. Puede ser PROXIMA o LEJANA, y son cada da ms importantes por el cambio de oponente en bloqueo que suelen implicar. Desde zona 2, sera prxima si va a 3, y ser alejada cuando vaya a zona 4. Recorridos interiores: Del exterior del campo hacia el interior. Tienden a agrupar el bloqueo y obligan a un desplazamiento interior de ste, con las implicaciones que ello supone. Recorridos exteriores: Del Interior del campo hacia el exterior. Al contrario que en el caso anterior, el bloqueo se mueve de dentro a fuera, facilitando, entre otras cosas, el block-out por la orientacin final de la zona de contacto del bloqueo.
3.4. UTILIZACIN DE LOS ZAGUEROS

Cada da es ms habitual la participacin de al menos un zaguero para los sistemas de ataque en los equipos de cierto nivel, sobre todo en masculinos, aunque se impone cada vez ms, tambin en los femeninos. De hecho; es frecuente ver combinaciones donde se producen dos primeros tiempos y otras con dos tiempos ms largos, de los cuales al menos uno corresponde a un zaguero. Como decamos anteriormente sobre la composicin de los equipos, el jugador especialista en el ataque zaguero, es uno de los elementos fundamentales. La tendencia actual es tener al menos dos de ellos. Este uso de zagueros, como ya hemos dicho anteriormente, resulta todava ms importante para la salida de contraataque, donde, de las tres posibilidades bsicas (free-ball), control del bloqueo y defensa propiamente dicha), es sobre todo en la ltima donde mayor aplicacin tiene, pues en los otros casos podremos atacar lo rpido que deseemos, o mejor dicho, que estemos preparados y entrenados.
3.5. CONSIDERACIONES FINALES SOBRE EL ATAQUE

Todos nuestros sistemas de ataque deben desarrollarse de acuerdo con nuestro nivel de colocacin. Podemos hacerlos ms complicados de lo que nuestro colocador puede desarrollar, y de hecho se hace con demasiada frecuencia, pero no saldrn bien. No solamente desde los puntos de vista fsico, tcnico o tctico, sino, mucho ms importante, del mental. No queremos un sistema de ataque que valga para los momentos dulces y fciles. Debemos tener en cuenta, sobre todo, los momentos difciles, los finales de set y de partido, los equipos fuertes, no los dbiles, pues es en estos casos cuando la presin limitar nuestro ataque. Esto tambin implica que nuestros diseos y planificaciones de los entrenamientos deben hacerse en su apartado tctico atacante, con el colocador/es como centro de la actividad. De nada nos sirve tener grandes rematadores de primeros tiempos si cuando llegue el partido, el colocador no est preparado para ello. Si nuestro colocador no est preparado para jugar siempre rpido, debemos entrenar necesariamente mucho el ataque ante sistemas defensivos sin dficit de tiempo. La integracin de los sistemas de recepcin y de ataque debe ser lo ms completa posible. Es fcil hacer ciertas salidas de ataque con unos sistemas y mucho ms difcil con otros. No son dos elementos independientes; si no totalmente dependientes. Es posible jugar lento y rpido con el mismo sistema, y debemos estar preparados para imprimir el ritmo que ms nos convenga en cada momento, atendiendo siempre al nivel de nuestro oponente. Lo ideal sera desarrollar solamente las herramientas de ataque necesarias y efectivas contra nuestros contrarios. Las combinaciones no deben prepararse pensando en un solo jugador, ya que al final esto se volvera totalmente en nuestra contra, pues el adversario sabra qu hacer. Debemos potenciar los puntos fuertes de cada uno de los componentes de las mismas, procurando que cada jugador ataque preferentemente aquellos tipos de colocaciones con las que obtiene mejores resultados.
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TEMA 4. SISTEMAS DE APOYO AL ATAQUE

Cuatro son los factores que, segn TOYODA . Coaches Manual 1 (FIVB; Lausanne, 1989); pg. 293, se deben tener en cuenta para decidir la posicin de la cobertura del ataque: a) b) c) d) ORIENTACIN DEL BLOQUEO. NGULO DEL BLOQUEO. DIRECCIN DEL REMATE. VELOCIDAD DEL MISMO.
Nosotros podramos ampliar estos 4 puntos argumentando que uno de los principales aspectos sera nuestro sistema de ataque el cual me va a permitir llegar a ciertas partes del campo en el momento en el que el compaero est realizando el remate, y por lo tanto, llegar o no a esa formacin terica que queremos alcanzar. En general, son dos los sistemas que se utilizan, el 2-3 y el 3-2, y se corresponden, respectivamente, con los grficos 86, 87 y 88 para el primero de ellos, y los grficos 89, 90 y 91 para el segundo.
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El recorrido de los jugadores no est plasmado en los grficos, pues depende de los sistemas defensivos, de recepcin y de ataque que utilicemos. El colocador es el primer jugador que sabe dnde va a dirigir el pase, y por ello debe cubrir la zona a la que sus otros compaeros tengan un acceso ms difcil. Por otro lado, la participacin de los colocadores en este apoyo al remate se ve dificultada por la necesidad de colocar en salto, sobre todo en las combinaciones rpidas. El que si suele estar prximo es el libero, principal jugador en todos los sistemas de apoyo al remate o cobertura, que es como se le llama tambin actualmente, fruto de una mala traduccin. De todas formas, hemos de ser conscientes de que ello slo es posible ante ataques muy sencillos y en condiciones ideales. Es muy frecuente que, cuando un rematador efecta su ataque, otro, que haya subido a un primer tiempo, est cayendo en ese momento, por lo que difcilmente podemos esperar de l que gane una posicin defensiva que le permita recuperar un rechace en el bloqueo. Por otro lado, tambin es frecuente que cuando un jugador ataca, sobre todo en los primeros tiempos o en los segundos que estn muy distanciados entre s, algn rematador est todava realizando su carrera de remate para as dificultar la operatividad del bloqueo en general, y para rematar en el caso de que el colocador decida jugar el tercer pase con l. Difcilmente podemos esperar de ellos la posid6n te6rica que se expresa en los grficos. Aun as, debemos insistir en la necesidad de acercarse lo ms posible, y, sobre todo, separarse de la red si es que estamos muy cerca de ella, as como orientamos adecuadamente e iniciar ese acercamiento aunque sea algo ms tarde. En cambio, hay que exigir a todos los jugadores que si pueden ayudar a sus compaeros, realicen sistemticamente este apoyo, sin olvidarnos de que en los partidos slo se puede realizar bien aquello que se entrena adecuadamente. El lbero como defensor especialista puede ser el encargado de llegar el primero al apoyo vaya donde vaya el remate, esta sera una forma funcional de estructurar el apoyo.
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TEMA 5. SISTEMAS DEFENSIVOS (K-2)

Antes de entrar en los sistemas defensivos propiamente dichos, queremos plantear una serie de consideraciones que son fundamentales para entender la actual evolucin de la defensa en voleibol. Tener una filosofa de ataque es fcil, entre otras cosas porque lo es tener xito atacando. Es fcil conseguir un equipo con mentalidad atacante. Casi podramos decir que si no hacemos nada en contra, el equipo tendr una mentalidad atacante. El ataque es el aspecto dominante del voleibol, por mucho que se luche contra este desequilibrio mediante algunas modificaciones puntuales de las reglas. Defender un baln implica la posibilidad de conseguir puntos, de contraatacar, de seguir sacando. Pero al existir ese desequilibrio entre la defensa y el ataque, debemos tomar riesgos, es decir, hemos de hacer una defensa dinmica, variada, crear incertidumbre en los atacantes. La segunda lnea defensiva no puede estar siempre en la misma posicin, como habitualmente plantean los sistemas defensivos tradicionales. El oponente no debe saber de antemano dnde estaremos ubicados. Es muy frecuente que sepamos, antes de subir o rematar, dnde tenemos que hacerlo o donde fintar en funcin del sistema de defensa empleado. El atacante tiene todas las de ganar as. El defensor de segunda lnea, al igual que el de la primera, tiene que ser agresivo. Por otro lado, es imposible cubrir todo el campo con garantas; esos 91 metros cuadrados, divididos en nueve zonas de 3x3 (grfico nm. 2), son una realidad difcilmente discutible. La defensa empieza en la red, en la primera lnea. Solamente disponemos de tres bloqueadores, mientras que el oponente puede atacar con un nmero mayor al utilizar los zagueros. Por tanto, debemos dosificar con qu jugadores saltamos. Debemos evitar saltar con los jugadores que no van a atacar. Se debe disponer un bloqueo agresivo, mvil, activo, intimidador, capaz de enviar el baln al suelo del contrario o de amortiguar el baln mediante un BLOQUEO CONTROL y as montar un contraataque mltiple. La mayora de los primeros tiempos se golpean a una altura inferior a la del alcance del jugador. No es necesario saltar al mximo. Con un medio salto de bloqueo, impulsando slo con los gemelos, sin utilizar una gran flexin de piernas y. por tanto, sin apenas utilizar los cuadriceps, conseguimos suficiente altura la mayora de las veces. Claro que es necesario que el bloqueador o jugadores responsables de estos primeros tiempos tengan unas condiciones antropomtricas adecuadas y una preparacin fsico-tcnica en consonancia con la tcnica que se quiere aplicar. Para ello, han de adoptar una posicin alta y partir de una posicin de brazos casi extendidos, ofreciendo la zona de contacto en bloqueo lo antes posible, y en muchos casos desde antes de saltar. Este concepto es el ms revolucionario cambio en la defensa moderna: EL BLOQUEO DE LECTURA. Solamente se salta con el baln. Si por la efectividad de ese jugador que sube en primer tiempo, o porque golpea muy alto, el hacer bloqueo de lectura implica llegar tarde. El jugador responsable de ese atacante utiliza el sistema tradicional y salta antes de saber si ese jugador atacar o no (BLOQUEO DE ASIGNACIN) el segundo y tercer bloqueadores debern efectuar el bloqueo de lectura, y si es necesario el bloqueo escalonado, para as garantizar ms de un bloqueo a los tiempos ms largos y, si es posible, una accin intermedia entre un bloqueo individual y uno doble en el primer tiempo. Esto nos lleva a jugar con conceptos de 1/2 bloqueo, bloqueo y medio. De alguna manera, cuando un bloqueador llega tarde y slo ocupa una parte de la zona que en teora podra ocupar, o bien utiliza un solo brazo para cerrar ese bloqueo colectivo, la zona cubierta por el bloqueo vara, e inmediatamente nos encontraramos con infinitas posibilidades en la distribud6n del resto de los jugadores. Nosotros, no vamos a tener en cuenta estas circunstancias en los grficos; vamos a representar las posiciones ideales en el momento del contacto del atacante con el baln. Sinceramente, consideramos que es suficiente para entender los conceptos bsicos de la Tctica Colectiva Defensiva que deseamos formular. Eso si, es fundamental que el entrenador analice cada una de las variantes que se producirn para cada uno de los casos en el supuesto de que alguno de los integrantes del bloqueo no pudiese llegar a tiempo a la altura necesaria. Los grficos representan un planteamiento absolutamente terico y nunca el bloqueo est abierto o rematan por encima de el.
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Por otro lado, ocurre tambin lo que decamos en los sistemas de apoyo al ataque, ya que no siempre los defensores tienen el tiempo de estar donde nos gustara que estuviesen. Previamente, tienen otras misiones tcticas que les condicionan, y fundamentalmente debemos par1ir del concepto de que la defensa se realiza EN DEFICIT DE T1EMPO. Nos gustara adoptar una disposicin final, que muchas veces no ser posible. Hay que ser consciente de las posibilidades de desplazamiento. No es lo mismo si es un 2 tiempo rpido, lento o un 3 tiempo. Ni lo mismo entre un 1 tiempo rpido y otro lento. Cuando se produce un ataque combinado, y todava ms si ste es rpido, algunos jugadores estn todava en el aire o se encuentran desplazados atendiendo su zona de responsabilidad de bloqueo, en el supuesto de que el colocador decida enviar el baln a ese jugador del que ellos son responsables directos. En todos los grficos vamos a representar a seis jugadores defendiendo, pero es posible que, algunas veces, uno o ms no puedan participar en las tareas defensivas de los remates del contrario. (Esos mismos jugadores siempre pueden ayudar atendiendo cierto tipo de fintas.) Esto no induce a pensar que no es lgico, cuando estamos en un nivel avanzado, utilizar a ninguno de nuestros jugadores zagueros para defender las fintas. Primero hay que intentar defender lo ms difcil, los remates potentes, ya que necesariamente tenemos que estar en el sitio a donde van a ir dirigidos. No vamos a disponer de tiempo para desplazarnos. Cuando las fintas son ms peligrosas que los remates duros, algo falla. Por otro lado, cuanto ms dbil sea el bloqueo, cuantos menos jugadores dispongamos en la primera lnea, ms posibilidades hay de que el remate sea fuerte, y nuestro dispositivo defensivo debe contar con el mayor nmero posible de jugadores encargados de estos menesteres. Otro concepto muy difundido entre nuestros entrenadores, y por tanto entre nuestros jugadores, y que al llegar a unos ciertos niveles tcticos es un facilitador del ataque contrario, es el de la especializacin en zonas defensivas. Los jugadores no tienen por qu ser defensores de 3 y 5, 3 y 6 etctera. Los jugadores deben saber, defender en todas las zonas. Nuestro sistema debe ubicar a nuestros mejores bloqueadores en las zonas donde el oponente, presumiblemente, mediante un estudio sistematizado, tiene ms posibilidades de atacar. Por otro lado, en cada rotacin, nuestro mejor defensor debe cubrir la parcela donde ms posibilidades existan de que enven el baln, y nuestros jugadores menos eficaces deben cubrir las zonas acordes con esta jerarquizacin. Para hacerlo en los partidos hay que entrenarlo antes. Lamentablemente, a corto plazo, se consiguen mejores resultados con la especializacin, aunque esto limite nuestro desarrollo futuro. Antes, el ataque rpido vena siempre por el centro; ahora viene a todo lo largo de la red, y todo el mundo tiene que saber bloquear los balones rpidos. Por ello, antes de hacer una especializacin defensiva, se deben tener sentadas las bases de universalidad defensiva. NO A LA INICIACIN MEDIANTE ESPECIALISTAS! Es habitual que en nuestro pas, y en otros muchos, se denomine a los sistemas defensivos en funcin de la posicin inicial que un equipo adopte. Estos sistemas tradicionales, en cuanto a sus posiciones iniciales, vienen representados en los grficos 92al 94.
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Pero esta posicin inicial no nos dice casi nada si pretendemos realizar un concepto defensivo actualizado. Tradicionalmente, se entiende que, si un equipo juega un sistema 3-1-2, realizar una posicin con dos bloqueadores ante balones altos, con el jugador zaguero ms adelantado, el 6 apoyando detrs del bloqueo para encargarse de las fintas y los restantes tres jugadores formando la segunda lnea defensiva en un semicrculo ms o menos retrasado y ms o menos abierto (grficos 95-97).
Por otro lado, nos encontramos con el sistema 3-2-1-, que, por cierto, tiene una posicin inicial prcticamente idntica al 2-1-3 (tambin conocido como apoyo del delantero que no bloquea), en el que, como norma, se dan las mismas posiciones finales del 3-1-2, variando slo que el jugador va al apoyo, en este caso, el zaguero correspondiente a la zona del bloqueo, mientras que el jugador retrasado (6) siempre defiende la llena, en el fondo del campo. Nosotros vamos a utilizar una nomenclatura un poco diferente, donde vamos a escribir, adems de la posicin inicial, el tipo de bloqueo que se produce y la posicin final que deseamos adoptar cuando se vaya a producir el ataque.
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En cuanto al tipo de bloqueo, resumiremos las diferentes opciones diferenciando entre bloqueo lnea (bl) y diagonal (bd). En el caso de ataque por zona 3. distinguiremos entre la posibilidad de que el bloqueo diagonal cubra la zona 1 (bd1) o la zona 5 (bd5), manteniendo como bloqueo lnea el que cubre el centro del campo (grficos 98-104);
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Obviamente, podemos dejar ms o menos lnea, cubrir la diagonal ms o menos larga. Combinando estos dos conceptos, lnea y bloqueo, cada uno podr decidir dnde poner el bloqueo y, por tanto, ser fcil decidir el resto. Desde luego, dejar ms o menos lnea, depende de la separacin del baln y de la capacidad y tendencias del atacante, as como la capacidad del defensor. Finalmente, describiremos cul es la posicin final que adoptamos, y como nos encontramos distribuidos, en el momento del contacto del rematador. ESTO ES LO REALMENTE IMPORTANTE! Estas posiciones finales vienen representadas en los grficos 105 al 122.
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Nunca he entendido el porqu si el ataque tiene ventaja, y resulta que al minuto de juego ya saben como defendemos, no se hace algo por cambiar, pues siempre la posicin final es la misma y la responsabilidad del bloqueo tambin.
5.1. POSICIONES INICIALES

En los primeros niveles de juego, cuando habitualmente se ataca mediante balones altos en las alas, el dficit de tiempo defensivo no existe apenas, y, por tanto, estemos donde estemos inicialmente, podremos desplazamos a las posiciones ideales finales, aunque a veces no se hace, por diferentes aspectos. Cuando el nivel de juego lleva implcito el ataque con primeros tiempos rpidos; la posicin inicial tiene que ser necesariamente la que pretendamos que sea posicin final de defensa de esos ataques. No existe la posibilidad de desplazamiento; hay que estar ya all. Para defender los segundos y terceros tiempos, s podremos desplazarnos.
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Dado que en los primeros tiempos se atacan preferentemente las zonas 7 y 9 (las dos diagonales por fuera del bloqueo), lo ms normal es que la posicin nidal ante un equipo que juega rpido sea la 3-2.1 (grfico 93). Esto no quiere decir que el resto de los balones los tengamos que defender- bajo el criterio del sistema tradicional 3-2.1. De hecho, prcticamente, todos los equipos de elite parten de esta posicin en sus diferentes variaciones, lo que s queda totalmente claro es que para lo primero que hay que estar preparado es para defender los primeros tiempos, incluidos los ataques del colocador al segundo pase, para posteriormente defender los segundos y finalmente los terceros. Esto parece algo muy sencillo, tan bsico como fundamental, pero increblemente, a veces no se cumple. Por tanto, nuestros sistemas defensivos deben estar diseados para atender la secuencia lgica de los ataques del oponente, y como consecuencia de ello, se impone el criterio de que nuestra defensa se va a desplazar hacia atrs, no HACIA DELANTE como tradicionalmente se planteaba. Queda claro, por lo anteriormente expuesto, que no hay posiciones iniciales en s, sino que nuestra posicin inicial, en el fondo, es la posicin final que deseamos para los ataques rpidos, siendo conscientes de que normalmente estos primeros tiempos los vamos a defender slo mediante uno de los delanteros (bloqueo individual), utilizando a los zagueros para los remates fuertes y. por tanto, los otros dos delanteros, que estn cerca de la red para bloquear, solamente podrn ayudar en las fintas cortas, o ayudar al bloqueador enfrentado al 1 tiempo (normalmente el 3), con un bloqueo de lectura. Es habitual, que nuestro 2 ayude en la 31 y el jugador de zona 4 (2 del contrario) ayude en 51 y 71. OBVIAMENTE DEPENDE DE LA FRECUENCIA Y CALIDAD DEL ATAQUE OPONENTE. En esta posicin inicial, podemos bascular al jugador que est ms retrasado, habitualmente el de zona 6. hada el lado que consideremos necesario potenciar en funcin de las caractersticas del oponente.
5.2. POSICION FINAL 2-1-3

Es la posicin ms habitual, tanto en la iniciacin como en la elite. Se forma una primera lnea defensiva de dos bloqueadores; se adelanta a uno de los zagueros o se retrasa al delantero que no bloquea (2-1-3) para que se encargue de las fintas cortas, manteniendo a los restantes tres jugadores para defender los remates fuer1es. La posicin de la primera lnea defensiva puede adoptarse cubriendo ms o menos la lnea o se puede proteger una diagonal larga o corta. Son mltiples las posibilidades, dependiendo tanto de las caractersticas del atacante como de nuestros defensores. Por otro lado, la zona que este bloqueo cubre depende en gran medida de la separacin respecto a la red de la colocacin y, por supuesto, de la envergadura de nuestro bloqueo. El jugador encargado de las fintas cortas, dependiendo de su punto de origen y, por tanto, de la tendencia de su trayectoria, estar ms o menos detrs del bloqueo, procurando cubrir ambos lados. Donde se producen mayores variaciones es en la disposicin de los tres ltimos jugadores. No podemos ocupar todas las posibilidades, por lo que debemos elegir. Inicialmente, se suele mantener un jugador detrs del bloqueo para que cubra los balones rematados por encima del mismo, con una fuerza no mxima y relativamente parablicos (remates indirectos), al mismo tiempo que cubre los posibles balones que pegan por arriba del bloqueo y /o las fintas al fondo del campo. Tambin lo podemos ubicar all para los posibles balones que pasen entre los dos bloqueadores o podemos dejar esta zona protegida por el bloqueo libre y utilizar ese jugador para defender los remates directos, por fuera del bloqueo. Los otros dos estn prcticamente siempre por fuera del bloqueo, uno en la lnea y otro en la diagonal, o en algunos casos, los dos en la lnea o en la diagonal. En todos los casos se encargan de los remates directos, los ms difciles y potentes. Podemos apreciar algunas de estas posibilidades con bloqueo en nuestra zona 4 en los grficos 123 al 131.
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Observamos que el jugador que se adelanta a por las fintas depende del sistema de posicin inicial que hayamos descrito, y podemos variar la posicin de los jugadores encargados de los remates directos de acuerdo con la fiabilidad de la primera lnea. Estas diferentes alternativas, como la expuesta en el grfico 124, dependen primeramente del nivel de nuestro bloqueo y de la capacidad de desplazamiento y de observacin del jugador que indirectamente se ocupa de los balones largos detrs "del bloqueo.
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Si se tratase de remates por nuestra zona 2, seria prcticamente simtrico, mientras que en zona 3 se multiplican las opciones al poder elegir al segundo bloqueador entre los dos laterales. Es muy importante que no se consideren los grficos como posiciones fijas. Cada jugador puede y debe estar ms o menos adelantado, a su derecha o izquierda, en fund6n de sus caractersticas individuales. Se puede defender con 3 en la diagonal y ya en un extremo terico con 3 en la lnea. Simplemente, hay que pensar, decidir, tomar una decisin y luego entrenarla.
5.3. POSICIN FINAL 2-2-2

En la realidad, sobre todo en el voleibol femenino de no muy alto nivel, en muchos casos, una sola jugadora no es suficiente para coger todas las fintas, y algunos equipos se encuentran con que el mayor dao se lo hacen con las mismas. En este caso, es conveniente enviar una segunda jugadora, que siempre suele ser la delantera que no bloquea, junto con el zaguero que nuestra posicin inicial aconseje. Vemos en los grficos 132 al 139 diferentes posibilidades.
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Hemos debilitado la defensa de los remates directos para potenciar la defensa de las fintas. Esto, realizado sistemticamente a lo largo de todo el partido o parcialmente en ciertas situaciones, slo parece coherente en los niveles ms bajos del juego, pero realizado en un sistema de posiciones finales alternativas, da buenos resultados prcticamente a todos los niveles. Entra dentro del concepto de la defensa moderna, donde se toman riesgos y se genera en el ataque contrario una mxima incertidumbre. Por supuesto, tambin es adecuado en todos los balones ante algunos tipos de atacantes y en ciertas situaciones donde nuestro bloqueo est ganando la partida al ataque contrario.
5.4. POSICIN FINAL 2-0-4

Se corresponde con el concepto tradicional del sistema 3-3. En l, nadie directamente se ocupa de las fintas cortas, utilizando todos nuestros jugadores de segunda lnea para los remates directos o indirectos. Es el ms coherente cuando el mximo dao nos lo hacen con los remates fuertes y con los jugadores que estn rematando por encima del bloqueo. Para este ltimo caso, la primera lnea utilizar el auto-apoyo siempre que sea posible. De todas formas, los defensores de campo exteriores, a veces defienden a medio camino, se encargan de las fintas con defensa en
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cada o plancha, con una mano en contacto con el suelo y defensa del remate potente por encima de la cintura, es decir de dedos o manos. Prcticamente, slo se puede utilizar ante balones de tiempos largos, pues el desplazamiento hada atrs del delantero que no bloquea, requiere un tiempo que en otras circunstancias no se da. Tambin es lgico, siempre que el bloqueo doble est teniendo problemas para formarse adecuadamente. Podemos apreciar algunas de las mltiples situaciones que se pueden dar en los grficos 140 al 148.
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5.5. POSICIONES FINALES CON UN SOLO BLOQUEO

Aunque algunos manuales para entrenadores plantean el bloqueo de un solo jugador como un sistema defensivo, y aunque hay que reconocer que se da con una gran frecuencia r, que por tanto, es de gran importancia, no lo consideramos como un sistema en s mismo, salvo casos excepcionales en niveles muy bajos. Se da el bloqueo individual en los primeros estadios de juego al no ir el jugador de 3 a realizar el bloqueo doble en los laterales o el lateral al centro, entre otras cosas, porque a estos niveles el bloqueo suele tener muy poca eficacia. Dado que en esta etapa debe prevalecer la formacin de los jugadores sobre los resultados, recomendamos que siempre se trate de formar el doble bloqueo y que los sis1emas defensivos se basen en ello. Por otro lado, y a todos los niveles, no siempre se consigue formar un bloqueo colectivo debido al dficit de tiempo con el que se desarrolla la defensa. En estos casos, como ya hemos comentado anteriormente, no se podran utilizar los seis defensores, y, por tanto, deberamos hacer el uso ms racional posible de los jugadores que pudiesen intervenir. Por ello, recomendamos no enviar a los zagueros a por las fintas detrs del bloqueo y mentalizar a los delanteros que no pueden formar parte del bloqueo, para que se responsabilicen de las fintas cortas. Son tantsimas las variaciones que nos podramos encontrar, que no se pueden sistematizar sin un tratamiento concreto y fuera de lo que seria la intencionalidad de este libro: En los grficos 149, 150 y 151, planteamos algunas posibilidades, aunque algunos desplazamientos serian ms que discutibles si existiese un dficit de tiempo defensivo. Insistimos de nuevo en la defensa de los primeros tiempos, donde se da con gran frecuencia un bloqueo individual y que se corresponde con la posicin inicial que adoptemos, por lo que lo normal sera bascular al jugador de 6 desde el principio para potenciar aquella zona que consideremos ms oportuna, en funcin de nuestro bloqueo o de las preferencias del ataque contrario
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5.6. SITUACIONES DE TRIPLE BLOQUEO

Salvo excepciones, ante rematadores potentes, y cuando nuestros tres delanteros renan las condiciones adecuadas, siempre que se pueda, se debera formar un triple bloqueo y. por tanto, debe estar integrado en los sistemas que estemos desarrollando. Las posibles posiciones finales de los diferentes jugadores, ante este tipo de situaciones, deberan estar claras para todo aquel lector que haya seguido todo el proceso. Segn que el bloqueo tenga una disposicin u otra, sobre todo en funcin de la separacin de la colocacin respecto a la red, nos preocuparemos de cubrir los ngulos directos (remates directos por fuera del bloqueo), en primer lugar, enviando o no a algn jugador detrs del bloqueo, para las fintas cortas. Sobre la base de los grficos 111 al 120, podremos elegir la posicin que deseemos, contando con que si tenemos tiempo para formar el triple bloqueo, los zagueros se podrn desplazar igualmente con facilidad.
5.7. CONSIDERACIONES FINALES SOBRE LA DEFENSA

Nuestro trabajo defensivo debe ir integrado en una filosofa defensiva. Esta se tiene que ver reflejada en nuestro sistema y en la forma de entrenar ese sistema y sus variaciones correspondientes. Este sistema defensivo tendr en cuenta las diferentes posibilidades defensivas, desde las situaciones donde no se utiliza el bloqueo, defendiendo slo en campo, hasta todas las posibles combinaciones que nos esperamos encontrar a lo largo de la competicin que estamos preparando. Para cada situacin, debemos entrenar la situacin donde nosotros podemos dar una respuesta ideal, encontrando la situacin de cada jugador que tericamente desearamos y tambin cuando no se dan esas circunstancias. Nuestro sistema defensivo, debe contar con varias posiciones finales para cada situacin habitual, para as poder adaptarlas al ataque contrario, lo mismo que debe contar con varias situaciones de bloqueo. Lo ms importante de un sistema defensivo es la primera lnea. En funcin de la capacidad y funcionamiento de esta primera lnea, reaccionar la segunda. La coordinacin de estas dos lneas es fundamental, y slo se consigue con un trabajo continuo de conjunto. Los zagueros deben saber en todo momento cmo reaccionarn los bloqueadores y que tipo de opcin elegirn. Sus movimientos de brazos, sobre todo en las opciones de 1 contra 1, pueden y deben llegar a ser algo esperado para la segunda lnea, de acuerdo con una filosofa de conjunto y a las caractersticas individuales. Con el nuevo sistema de puntuacin, el K-2 (defensa del remate) es la clave para conseguir la diferencia de puntos necesaria para ganar. El saque (K-0) con la mejor estructuracin terica de las diferentes posibilidades que en realidad ocurren en el juego, debido al gran trabajo del estudioso Miguel Angel Monge, pasa a ser fundamental. El riesgo en el saque, segn lo denominan los espectadores del Voleibol antiguo; pero los que estamos dirigiendo los equipos y los propios jugadores, debemos tener en cuenta cuando las estadsticas nos permiten arriesgar y tener ms fallos de lo normal. Debe arriesgar el saque Rafa Pascual?. Eso es algo para lo que nuestra opinin no importa, puesto que l SABE LO QUE TIENE QUE HACER. Aunque la mayora de los jugadores de vez en cuando deben recibir ayuda.
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TEMA 1. LA TCTICA COLECTIVA

1.1. LOS COMPLEJOS TCTICOS

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Artculos tcnicos de Voleibol 1.2. ZONAS DEL CAMPO

1.3. COMPOSICION DEL EQUIPO Y DISTRIBUCIN DE LOS JUGADORES

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TEMA 2. SISTEMAS DE ATAQUE

2.1. Sistemas de ataque apropiados para la iniciacin.

2.2. 4R-2U (cuatro rematadores y dos universales)

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2.3. 5R-1C (cinco rematadores y un colocador)

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TEMA 3. ELEMENTOS CONSTITUTIVOS DEL K-1

3.1.a. SISTEMAS DE RECEPCIN PARA LA INICIACIN

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3.1.b. RECEPCIN DE CINCO JUGADORES

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3.1.c. SISTEMA DE RECEPCIN DE CUATRO JUGADORES

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Artculos tcnicos de Voleibol 3.1.d. SISTEMA DE RECEPCIN DE TRES JUGADORES

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3.1.e. SISTEMA DE RECEPCIN DE DOS JUGADORES

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3.2. CONSTRUCCION DEL ATAQUE

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3.3.a. SISTEMA ZONAL ASITICO (SZA)

3.3.b. SISTEMA DIGITAL NORTEAMERICANO (SDN)