Narrativas Mediáticas
Narrativas Mediáticas
Narrativas Mediáticas
Resea
Elena Lpez Rodrguez
El autor analiza las caractersticas de la sociedad generada por los medios de comunicacin, partiendo del homo zapping: habitante de unas estticas mediticas cuyo sentido existencial es el entretenimiento. La narracin y el entretenimiento es nuestra tradicin y nuestra actualidad. Por tanto, si la narrativa y la esttica marcan todas las acciones de nuestro tiempo, debemos actuar desde y en estas condiciones. Afirma el autor que comprendemos los textos de las culturas y los mundos de la vida desde los modos narrativos mediticos que habitamos. Por ello partimos de que la comunicabilidad de los medios est mucho ms en los modos de narrar que en los contenidos propiamente dichos. La comunicacin meditica produce una cultura que se caracteriza por ser ms de narraciones y afectividades que de contenidos y argumentos. Segn Lipovetsky, la cultura de masas ha exaltado la vida de ocio, la felicidad y el bienestar individuales, ha promovido una tica ldica y consumista de la vida. Reflejan el gusto ms comn a todos, quedndose al margen de folclore y tradiciones, lo culto y sublime de las grandes artes, razn y argumentacin. A lo largo del primer captulo, el autor repasa las corrientes folosficas que han tratado lo bello desde que la esttica surge como una rama de la filosofa. Me parece especialmente interesante el resumen de las teoras de Calabrese (1987) acerca de la tendencia actual al neobarroco, el fenmeno cultural ms importante que nuestra sociedad est viviendo desde la esttica del Modernismo de principios del siglo XX. El exceso, lo monstruoso, la velocidad, la repeticin, son constantes en las expresiones artsticas y culturales que nos rodean. Segn Zeyda Rodrguez, el estilo con que est escrito el texto de Rincn transita entre la ms densa abstraccin y la ligereza de la ilustracin jocosa, irreverente, abstractos. La estructura del libro es la siguiente: comienza con un captulo sobre las culturas mediticas, prosigue con otro llamado las estticas del entretenimiento (espectculo, levedad, new age, reality), contina con un apartado sobre la narracin meditica y da cuenta por separado de las narrativas periodsticas, que ejemplifica y muestra la potencialidad de los conceptos
publicitarias, radiofnicas, televisivas y del video, finalizando con unas sugerentes y breves conclusiones. Rincn se pregunta qu caracteriza las estticas que marcan las culturas mediticas. Esta esttica acta dentro de la lgica del entretenimiento: se nos propone vivir la vida como una pelcula, en la cual cada uno puede o debe ser la estrella porque supuestamente el entretenimiento es el propsito de la vida, la felicidad del sujeto. Este imperio del entretenimiento, afirma Rincn, ha producido un individuo bien extrao: ignorante, poco reflexivo, inculto, arrastrado por los remolinos del entretenimiento y distrado de la urgencia de los problemas sociales. Pasivo pero tambin frvolo, obtuso, atrado por los asuntos mundanos, por la apariencia, por el esplendor fcil. Es el homo ludens (citando a Abruzzese y Miconi, 2002). De este modo, si el entretenimiento es el objetivo de nuestras vidas, el espectculo es el medio de ponernos en pblico. Este es definido como el modo privilegiado de la interpelacin contempornea, un modo preferido por las industrias del entretenimiento, y su productividad es tal que se ha convertido en un modo privilegiado de comprender el mundo de la vida, pues produce nuevas formas culturales, nuevas relaciones sociales y nuevos modos de experiencia. Acorde con este empobrecimiento, impera la filosofa light, el pensamiento leve: un modo de pensar que promueve que hay que evitar la densidad y el argumento para habitar los afectos y aplicar soluciones tcnicas a los problemas, es una filosofa de bsquedas veloces y estticas sin referencia. Todo es cuestin de estilo, no de ideologas (pg. 65). Este estilo se manifiesta en los cuidados del cuerpo, haciendo ejercicio (a ser posible de una forma fcil y sin esfuerzo), comiendo sano, teniendo una actitud positiva, y sin angustiarse por los problemas del mundo. Esta actitud positiva es denominada por Rincn como new age, se expresa en la frase Dios siempre est conmigo y est patrocinada por libros de autoayuda. Ambas cosas desconectan a las personas de su ser poltico, y al mismo tiempo fomentan los poderes de adivinacin y potencian los conocimientos sobrenaturales. A esta serie de conceptos el autor aade el de una poltica reality, el cual actualiza la idea de una sociedad de vigilancia y control que nos hace sentir capaces
de verlo todo y decidirlo todo somos los jueces que decidimos quin es expulsado del gobierno o de la casa de Gran Hermano. Los realities expresan el modo predominante de la narracin de la sociedad del entretenimiento, tienen el atractivo de convertirnos en hroes siempre y cuando sigamos las instrucciones televisivas. El texto propone una forma de mirar la sociedad contempornea en forma mucho ms amplia que slo observando a los medios; sin embargo, tambin ofrece para cada uno de ellos una propuesta de anlisis de sus respectivas narrativas, su modo propio de comunicar las historias que cuentan. Partiendo justamente de Clifford Geertz, Rincn aborda las caractersticas de lo narrativo como la forma de otorgar sentido y orden al mundo, as como a nuestra experiencia en l. La narracin es saber, oficio y prctica que comparten los productores y las audiencias; saber que posibilita la inteligibilidad de lo comunicado, experiencia que permite generar comunidad de sentido sobre la comunicacin (pgs. 94-95). A continuacin leemos un captulo dedicado a la narrativa periodstica, con el que pretende analizar las narrativas periodsticas y describe cmo el periodismo narra una realidad actualizada. El siguiente captulo aborda las narrativas publicitarias, trazado con la misma estructura, respondiendo al sentido de la publicidad al comienzo para luego estructurar cules son sus formas para narrar. Prosigue con las narrativas de la radio, se extiende un poco ms con las narrativas de la televisin, y finaliza reflexionando sobre la narrativa del video. El autor no deja ningn medio sin su anlisis narratolgico correspondiente. Nos muestra lo que hay no detrs de los medios, sino dentro, desvelando el proceso de produccin de esos lenguajes y esas mquinas narrativas que, narrando cada uno la realidad a su manera, lo produce. En conclusin, hace un anlisis detallado de la realidad de los medios de comunicacin audiovisuales y de las tcnicas narrativas empleadas para captar la atencin de los espectadores, en mi opinin demasiado pormenorizada y detallada. La abundancia de citas y datos por un lado asienta sus argumentos dndoles credibilidad, pero las ideas son redundantes captulo tras captulo. Evidentemente genera en el lector una actitud crtica ante los medios de comunicacin. Es un texto concebido como anlisis de los medios de comunicacin
que remueva las conciencias del homo zapping, pero no lo considero til como gua de guiones para emplear en la realizacin de cualquier producto audiovisual.